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J.A.M. SISTEMA DE SUSPENSIÓN DEL VEHÍCULO La suspensión es el sistema que conecta el chasis del vehículo con las ruedas. Este sistema es el responsable de brindarle viajes en el vehículo suaves y estables, pues se encarga de absorber (lo más posible) las irregularidades del camino. Las características más importantes del sistema de suspensión de un vehículo son la elasticidad y la amortiguación. Estas dos cualidades evitan que la inestabilidad del terreno se traduzca en vibraciones en la carrocería del vehículo y además permite que los neumáticos mantengan su adherencia al suelo, el sistema permite en todo momento que el conductor tenga en control el vehículo y mas al utilizar la dirección y los frenos. ¿Qué pasa si falla el sistema de suspensión? Cuando experimente problemas con los amortiguadores de su vehículo, notará más rebote después de los golpes y sacudidas mientras conduce en carreteras difíciles. Los resortes de su vehículo soportan todo su peso, por lo que no es de extrañar que puedan caerse o romperse con el tiempo. ¿Qué partes conforman el sistema de suspensión? El sistema de suspensión está compuesto principalmente de tres componentes: amortiguadores, resortes y puntales. No solo proporcionan un viaje suave y confortable, ayudan a controlar ciertas cualidades de conducción (al usar sistemas de dirección y frenos). ¿Cómo dar mantenimiento al sistema de suspensión? Un programa de mantenimiento debe incluir la inspección de los amortiguadores cada 50 mil kilómetros para detectar cualquier tipo de avería o desgaste, que pueda originarse en las llantas, dirección, diferencial o en los resortes. Estos últimos pueden comprimirse o alongarse a causa de una deformación por la naturaleza de su uso. La inspección visual permite identificar todas las averías, pero también pueden sentirse en el comportamiento del automóvil; por ejemplo: la vibración en el volante al frenar o pasar por un tope, sonidos fuertes al frenar, inclinación excesiva de la carrocería hacia el lado del amortiguador con el resorte afectado, llantas comprimidas o metidas. El ruido metálico que se produce al frenar es característico de un amortiguador deteriorado, situación que en ocasiones los dueños de automóviles buscan remediar poniendo una manguera a J.A.M. los resortes, lo cual no es recomendable. Es importante conocer la razón por la que se produce el ruido, y si los resortes son responsables, hay que reemplazarlos. ¿Cuándo reemplazar los resortes? Ya que absorben los impactos y conservan la distancia de la suspensión con el suelo, deben cambiarse si: La pintura se desprende Hay presencia de óxido o corrosión El resorte tiene fisuras o está roto Si la carrocería está baja, ya sea en la parte delantera, trasera o de un lado, como consecuencia de una deformación del resorte, ya que al perder su forma, las espirales chocan y la resistencia se debilita Cuando los amortiguadores y los resortes que los componen no reciben mantenimiento ni se reemplazan, existen altas probabilidades de perder el control del vehículo y que se presente un accidente. Por ello, inspeccionar el sistema con frecuencia es indispensable para detectar posibles averías a tiempo y prevenir que ocasionen un daño grave, tanto para el vehículo como para los pasajeros.
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