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1 DE LA REPUBLICA DEMOCRÁTICA SOCIALISTA ARGELINA (1964) A LA REPUBLICA ARGELINA DEMOCRATICA Y POPULAR (1996). ARGELIA: CONSOLIDACIÓN Y CRISIS DE UN MODELO ECONÓMICO, SOCIAL Y POLÍTICO Proyecto nacional Cambio de rumbo Programa de Trípoli (1962) Constitución de 1988 y 1996 Carta de Argel y Congreso FLN(1964) Nuevas leyes económicas 98 Carta Nacional y Constitución (1963-1976) Económicamente Objetivo: satisfacer las necesidades Desarrollo económico del pueblo Autogestión, colectivización de los medios Lógica economía mercado de producción, planificación socialista La industrialización como medio de llegar al Necesidad de inserción al desarrollo y la independencia nacional internacional Sistema político Poder y democracia popular Sistema democrático Legitimidad del FLN y papel de la Multipartidismo vanguardia. Centralismo democrático Presidencialismo “revolucionario” Presidencia democrática Identidad árabe-islámica Objetivos sociales El pueblo como centro del proyecto Sociedad y ciudadanos Compromiso explícito con el bienestar de Neutralidad las mayorías Papel internacional Liderazgo en el Tercer Mundo Inserción en el N.O.I. Compromiso anti-imperialista Pragmatismo. Acercamiento USA Panarabismo y Gran Magreb Buena vecindad en Magreb ¿CÓMO EXPLICAR UN CAMBIO TAN RADICAL? Como consecuencia de ciertos acontecimientos (bruscos): crisis, islamismo, etc., siendo un proceso de largo alcance que exige: - Una mínima referencia histórica: la Argelia de los años sesenta-setenta. - Los factores que explican el inicio del cambio (1978-86). - La etapa donde se aceleran las transformaciones (1986-2000). 2 EL PROYECTO NACIONAL ARGELINO La independencia de Argelia (1962) consolida una sistema político de partido único (FLN) y un modelo económico (estatista, planificación económica del desarrollo, industrialización). Evidenciamos diversas etapas dentro del proceso histórico independiente: 1962-1972: etapa de inestabilidad política y grandes dificultades para reorganizar la economía (colonial). A nivel político se trata de un período de fuertes enfrentamientos entre los diferentes grupos – proyectos – dentro del FLN que llevará a un golpe de fuerza del “sector militar” con Boumedian como líder del proyecto más elaborado y con mayor apoyo popular. A nivel económico se trata de reorganizar la economía colonial (bajo el “optimismo revolucionario”) y las relaciones externas del país. Se pasa a ocupar las tierras abandonadas por los colonos (autogestión y colectivización), la progresiva nacionalización de los recursos naturales y los sectores estratégicos (hacia una economía de Estado), asentar la planificación como garante de los objetivos económicos y sociales del proyecto revolucionario y la industrialización acelerada como objetivo prioritario. A nivel social hay que garantizar las enormes expectativas de una población pauperizada en una coyuntura de escasos recursos, avanzándose en importantes mejoras de las condiciones de vida y en los servicios esenciales. A nivel internacional, posicionamiento del régimen dentro del bloque de Países No Alineados (garantizar la independencia, posición antiimperialista), donde representa un “liderazgo” dentro del Tercer Mundo gracias a sus importantes líderes (Ben Bella, Boumedian). 1972-1978: consolidación del proyecto de país Bajo la hegemonía absoluta del liderazgo indiscutible de Boumedian, con fuerte apoyo popular y legitimidad, el FLN implanta un sistema político de partido único y una democracia popular (elección libre 3 desde las wilayas a la Asamblea Nacional Popular y la Presidencia), con una nueva Constitución de 1976, que define y asienta el sistema. Se producen avances significativos en las condiciones sociales (educación, salud, vivienda), así como en el mercado de trabajo, pese a las grandes dificultades evidentes. Internacionalmente el “modelo argelino” se convierte en una referencia para los países del Tercer Mundo, radicalizando su discurso y posicionándose frente al orden internacional de la Guerra Fría. Económicamente, la riqueza petrolera permite mantener un ritmo acelerado de inversión, diversificación productiva e industrialización del país, aunque con fuertes tensiones internas: desarticulación sectorial-ramal, desabastecimientos, ineficacias productivas, etc. así como la aparición de un fuerte desequilibrio externo y diversas dependencias (comerciales, tecnológicas, financieras). 1978/82-1986: “Reflexión” y cambio de rumbo: el final del “milagro” argelino. La muerte prematura de Boumedian (diciembre de 1978), y la caída sostenida de los precios del petróleo desde los primeros años ochenta, generarán las condiciones para una crisis de grandes proporciones. Desde el punto de vista político - la desaparición de líder, y su sustitución con el coronel Benydid, junto a las críticas internas al “modelo argelino” (dadas las carencias económicas y sociales), por parte de la clase dirigente hace que comience un proceso de cambio de rumbo (la llamada “apertura económica”), que se verá forzado por la contestación social (revuelta bereber en Cabilia, aparición de un movimiento islamista violento, huelgas y protestas de los trabajadores), que va deslegitimando al poder político y al FLN. Económicamente se paraliza la estrategia económica (planes de desarrollo), siguiendo una ruta continuista pero con cambios importantes de rumbo económico hacia la liberalización. El fuerte endeudamiento de la década anterior, comienza a pasar factura y reducirá drásticamente las posibilidades de crecimiento económico. 4 Socialmente, gracias a los altos precios del petróleo (hasta 1981), se puede sostener el papel “paternalista” del Estado (subvenciones, alimentos, ayudas), pero siendo cada vez más difícil su mantenimiento, agudizándose las diferencias sociales, elevándose la corrupción y la evasión de capitales. 1986-1992: Crisis generalizada. En 1986 se aprueba una nueva Constitución que abandona buena parte de las señas de identidad de la revolución argelina de 1964. Las movilizaciones sociales (esencialmente la población de los barrios marginales de Argel y las luchas obreras), junto a la creciente presencia del islamismo radical estalla en 1988, forzando al gobierno a elaborar una nueva Constitución (1989) que introduce el pluralismo político, y a celebrar elecciones que ganará clara y democráticamente el FIS (Frente Islámico de Salvación): las municipales en 1990, y las legislativas en 1991 (primera vuelta), pero ante la evidencia de una mayoría islamista en la Asamblea Nacional y un gobierno del FIS los militares dan un golpe de estado 1992-2013: La “nueva” Argelia. A partir del golpe de estado militar la realidad argelina entra en una nueva etapa caracterizada en muchos años por la violencia indiscriminada (de los grupos islamistas, y del Estado) que genera una guerra civil “no declarada” que produjo más de cien mil muertos. A pesar de que el FIS renuncia muy pronto a la violencia política, 1995, (aunque otros grupos no lo hará, esencialmente el GIA), el poder militar y el FLN justificarán su ilegalización como garantía “democrática”, introduciendo en el país una “dictadura blanda” durante prácticamente toda la década. En este contexto de inestabilidad y violencia se llevarán a cabo profundas transformaciones económicas, y sociales, que consolidarán el abandono definitivo del proyecto nacional argelino, introduciendo al país en la economía de mercado (neoliberal) y en el escenario convencional internacional (nuevas alianzas, EEUU y Europa, y nuevos discursos).
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