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UNIVERSIDAD DE CUENCA Autor: Segundo José Sarango Guayllas. 59 metros de altura, informó un portavoz del parque. El salto BASE, es una modalidad de paracaidismo desde un punto fijo. El salto BASE, acrónimo de las palabras en inglés building, antenna, span y earth (que se refiere a diferentes puntos fijos desde los que la persona se puede lanzar como un edificio, una antena, una cuerda colgante entre dos puntos y un acantilado), es una modalidad que posee un alto grado de riesgo, mucho mayor que un salto en paracaídas tradicional desde una aeronave. En uno de sus trabajos, el estadístico británico David Spiegelhalter buscó establecer qué tan riesgosos eran los deportes extremos que habían impulsado una industria de millones de dólares en el mundo. Basado en un mundo en el que el riesgo forma parte de la vida, Spiegelhalter estudió diferentes disciplinas para establecer su nivel de riesgo en cuanto a una medida de micromuerte. Esta unidad, introducida por investigadores de la Universidad de Stanford en los años 70, define el riesgo de muerte al que está expuesto cada persona dependiendo de la actividad que realiza, o lo que es lo mismo la probabilidad de muerte de uno entre un millón. Tomando como referencia una estadística de la Asociación de Paracaidismo de Estados Unidos, Spiegelhalter pudo comprobar que de los 2,6 millones de saltos anuales entre 2000 y 2010 hubo 279 muertos, unos 25 al año, lo que equivale a un riesgo de 10 micromuertes por salto. Estas cifras siguen siendo mucho menor al riesgo al que una persona se expone al ascender a las cumbres de más de 8.000 metros sobre el nivel del mar del Himalaya, por ejemplo. Teniendo en cuenta que de los 20.000 montañistas que las escalaron entre 1990 y 2006 hubo un estimado de 238 muertos, el nivel de riesgo presenta una media de 12.000 micromuertes por escalada. Otro estudio, algo más antiguo, sobre expediciones de montañistas británicos, mostró que de 533 personas 23 perdieron la vida, lo que es igual a 43.000 micromuertes por escalada, lo que supera al promedio de un misión de bombardeo de la Segunda Guerra Mundial. Según un estudio liderado por la doctora Vani J. Sabesan, presentado en 2014 ante la Academia de Cirujanos Ortopédicos de Estados Unidos, más de cuatro millones de lesiones en un período de 11 años se han atribuido a la práctica de deportes