Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
See discussions, stats, and author profiles for this publication at: https://www.researchgate.net/publication/349463114 MECANISMOS DE ACCIÓN DE LA NEUROESTIMULACIÓN Chapter · February 2021 CITATION 1 READS 2,155 1 author: J. Cid Complejo Hospitalario Universitario de Toledo 51 PUBLICATIONS 118 CITATIONS SEE PROFILE All content following this page was uploaded by J. Cid on 20 February 2021. The user has requested enhancement of the downloaded file. https://www.researchgate.net/publication/349463114_MECANISMOS_DE_ACCION_DE_LA_NEUROESTIMULACION?enrichId=rgreq-78d53df86a873f718cab04a8932f2867-XXX&enrichSource=Y292ZXJQYWdlOzM0OTQ2MzExNDtBUzo5OTMyOTE5NDAxMzQ5MTJAMTYxMzgzMDY2MTI3NQ%3D%3D&el=1_x_2&_esc=publicationCoverPdf https://www.researchgate.net/publication/349463114_MECANISMOS_DE_ACCION_DE_LA_NEUROESTIMULACION?enrichId=rgreq-78d53df86a873f718cab04a8932f2867-XXX&enrichSource=Y292ZXJQYWdlOzM0OTQ2MzExNDtBUzo5OTMyOTE5NDAxMzQ5MTJAMTYxMzgzMDY2MTI3NQ%3D%3D&el=1_x_3&_esc=publicationCoverPdf https://www.researchgate.net/?enrichId=rgreq-78d53df86a873f718cab04a8932f2867-XXX&enrichSource=Y292ZXJQYWdlOzM0OTQ2MzExNDtBUzo5OTMyOTE5NDAxMzQ5MTJAMTYxMzgzMDY2MTI3NQ%3D%3D&el=1_x_1&_esc=publicationCoverPdf https://www.researchgate.net/profile/J-Cid?enrichId=rgreq-78d53df86a873f718cab04a8932f2867-XXX&enrichSource=Y292ZXJQYWdlOzM0OTQ2MzExNDtBUzo5OTMyOTE5NDAxMzQ5MTJAMTYxMzgzMDY2MTI3NQ%3D%3D&el=1_x_4&_esc=publicationCoverPdf https://www.researchgate.net/profile/J-Cid?enrichId=rgreq-78d53df86a873f718cab04a8932f2867-XXX&enrichSource=Y292ZXJQYWdlOzM0OTQ2MzExNDtBUzo5OTMyOTE5NDAxMzQ5MTJAMTYxMzgzMDY2MTI3NQ%3D%3D&el=1_x_5&_esc=publicationCoverPdf https://www.researchgate.net/profile/J-Cid?enrichId=rgreq-78d53df86a873f718cab04a8932f2867-XXX&enrichSource=Y292ZXJQYWdlOzM0OTQ2MzExNDtBUzo5OTMyOTE5NDAxMzQ5MTJAMTYxMzgzMDY2MTI3NQ%3D%3D&el=1_x_7&_esc=publicationCoverPdf https://www.researchgate.net/profile/J-Cid?enrichId=rgreq-78d53df86a873f718cab04a8932f2867-XXX&enrichSource=Y292ZXJQYWdlOzM0OTQ2MzExNDtBUzo5OTMyOTE5NDAxMzQ5MTJAMTYxMzgzMDY2MTI3NQ%3D%3D&el=1_x_10&_esc=publicationCoverPdf 75 Dr. José Cid Calzada Responsable Unidad del Dolor. FEA Servicio de Anestesia, Reanimación y Unidad del Dolor. Complejo Hospitalario Universitario de Toledo Mecanismos de acción de la neuroestimulación 1. Introducción El campo de la neuromodulación en el tratamiento del dolor se ha desarrollado rápidamente desde los trabajos de Shealy en 1967 sobre la inhibición del dolor mediante la estimulación eléctrica de la columna dorsal (SCS) (1). La nueva teoría de la “Puerta de entrada” de Melzack y Wall de 1965 fue la base teórica sobre la que se impulsaron las investigaciones (2). Desde entonces se han desarrollado sistemas para estimular el sistema nervioso a varios niveles: terminaciones nerviosas en la piel mediante la neuroestimulación eléctrica transcutánea (TENS), fibras del tejido celular subcutáneo en la neuroestimulación subcutánea del campo de nervio periférico (PNFS) o estimulación subcutánea (SubQ), nervio periférico y ganglio de la raíz dorsal (DRG) con electrodos diseñados a tal efecto. La estimulación del sistema nervio- so central (SNC) más utilizada para el tratamiento del dolor es la de los cordones posteriores de la médula, pero también se ha desarrollado en los años 90 la estimulación epidural de la corteza motora para el tratamiento del dolor neuropático tanto periférico como central, y más recientemente, de forma no invasiva, con la estimulación magnética transcraneal repeti- tiva (rTMS) o la estimulación transcraneal con corriente directa (tDCS). La otra forma de es- timulación central es la estimulación cerebral profunda (DBS) con electrodos implantados, utilizada desde los años 70. Los recientes avances técnicos en los sistemas de estimulación han permitido mejorar la efica- cia y ampliar las indicaciones, de forma que actualmente se implantan unos 50.000 sistemas al año en todo el mundo. En la SCS convencional se liberan pulsos de corriente de una determinada amplitud y dura- ción, con el objetivo de reemplazar la sensación dolorosa por una parestesia que se perciba CAPÍTULO 2 NEUROESTIMULACIÓN EN EL TRATAMIENTO DEL DOLOR CRÓNICO 76 en todo el área anatómica del dolor. La corriente eléctrica altera el procesamiento del dolor, enmascarándolo con una sensación agradable de hormigueo. La estimulación se proporciona a través de electrodos implantados percutáneamente en el espacio epidural o con electrodos quirúrgicos más anchos colocados con una pequeña laminotomía. Estos sistemas son capa- ces de liberar frecuencias de pulso en el rango de 2-1.200 Hz, pero se utilizan regularmente a 40-60 Hz. En los últimos años se han desarrollado nuevos sistemas de estimulación que permiten utilizar altas frecuencias (10.000 Hz), estimulación en ráfagas (burst) y estimulación del ganglio de la raíz dorsal. Estos recientes avances han mejorado la eficacia y aumentado la aplicabilidad de la SCS (3). Siguiendo la teoría de la puerta de entrada, el mecanismo de acción se focalizó en la activación axonal. Sin embargo, la investigación subsiguiente ha mostrado que los mecanismos de acción de la SCS son mucho más complejos, ya que produce alteración local de la excitabilidad de las neuronas de amplio rango dinámico (WDR), facilitación de los mecanismos inhibitorios fisio- lógicos y cambios en la actividad de gran variedad de neurotransmisores. Además, la activa- ción ortodrómica puede activar las vías descendentes serotoninérgicas desde centros del tallo cerebral, así como desencadenar mecanismos supraespinales. Es más, diferentes síndromes dolorosos con patrones individuales de hiperexcitabilidad neuronal patológica pueden res- ponder de manera diferente a la SCS (4). Repasaremos primero los mecanismos neurofisiológicos, neurobioquímicos y supraespinales, y después la influencia de los parámetros de estimulación. 2. Mecanismos neurofisiológicos espinales y la teoría de la puerta de entrada La teoría de la puerta de entrada propuesta por Melzack y Wall (2) presentaba una posible red neuronal en el asta posterior de la médula que podría explicar el fenómeno de la percepción del dolor, además de proporcionar una base sobre los mecanismos por los que el dolor podría aliviarse. De acuerdo con ella, el principal objetivo de la SCS es activar la columna dorsal, que contiene axones que se originan en las neuronas sensoriales aferentes de gran diámetro (por ejemplo, fibras aferentes Aβ). Según la teoría, algunas de estas neuronas sensoriales envían ramas colaterales a los segmentos espinales afectados, donde se inhiben los inputs nocicep- tivos procedentes del área dolorosa que viajan por las fibras C, y la actividad de las neuronas de proyección nociceptivas. La teoría de la puerta de entrada postula que la actividad en las fibras aferentes Aβ de diámetro grande atenúa la transmisión nociceptiva ascendente me- diante la activación de las interneuronas inhibitorias en el asta dorsal (AD) de la médula es- pinal (2, 5). Sin embargo, la identidad y la localización precisas de estos “guardianes de la puerta” no han estado muy claras hasta hace poco (6). Se ha visto que un grupo significativo de interneuronas que expresan ácido gamma-aminobutírico (GABA) en la lámina II del AD pueden activarse por inputs convergentes de fibras Aß. Estas neuronas GABA-érgicas son im- portantes “puertas inhibitorias” en el AD. Pueden suprimir no solo los inputs nociceptivos me- diados por las fibras Aδ finamente mielinizadas o fibras C no mielínicas, sino que también MECANISMOS DE ACCIÓN DE LA NEUROESTIMULACIÓN 77 pueden atenuar la activación de bajo umbral de las neuronas de proyección nociceptivas que puede producirse por pérdida de inhibición tónica tras una lesión nerviosa. En consecuencia, la SCS debería atenuar el dolor patológico (por ejemplo, alodinia e hiperalgesia) a la vez que el dolor nociceptivo (6). Esta predicción estaba apoyada por la observación clínica de que la SCS inhibe el reflejode flexión de retirada al dolor y atenúa la respuesta al calor mediada por fibras C en humanos. También inhibe la respuesta mediada por fibras C de las neuronas WDR del AD, tanto en ratas con lesión nerviosa como en el grupo operado sin lesión nerviosa (sham-operated) (7). La estimulación con corriente directa transcutánea de la médula espinal a una intensidad por debajo del umbral sensorial también se ha visto que inhibe la transmisión espinal del dolor y el reflejo de flexión de la pierna al dolor en humanos sanos (8). A pesar de todo, la SCS atenúa preferentemente la sensibilidad exagerada al dolor en estados patológicos y no inhibe el com- ponente mediado por fibras C del reflejo flexor en ratas. Según la teoría de la puerta de entrada, la activación de más fibras Aß aplicando intensidades altas puede producir una supresión del dolor más intensa que la estimulación a intensidades más bajas. La SCS se ha probado a menudo a una intensidad ligeramente por debajo del um- bral motor, que se considera el umbral de tolerancia en los estudios de comportamiento ani- mal. El umbral motor representa una respuesta refleja a la estimulación de las fibras de la co- lumna dorsal, pero antes no estaba claro cómo el umbral motor se correlaciona con la activación de las fibras A α/ß. Examinando los potenciales de acción compuestos antidrómi- cos que se producen por la estimulación graduada aplicada a través del electrodo de SCS, Guan et al. encontraron en un estudio experimental que la SCS a umbral motor puede activar solo una pequeña fracción de la población aferente de fibras Aß en ratas con lesión nerviosa. Además, la onda del potencial de acción compuesto era más grande en animales que respon- dían a SCS con analgesia que en los que no, lo que indica una activación de la estructura de la columna dorsal más eficiente en respondedores (6, 9). Aunque la teoría de la puerta de entrada explica parte de los fenómenos relacionados con la analgesia producida por la SCS, la red que propone es insuficiente para describirlos todos, y la observación clínica subraya algunas de sus limitaciones, según Zhang et al. (10) (figura 1): • La teoría de la puerta de entrada no puede explicar por qué la SCS puede producir alivio del dolor en un campo receptivo en el que también hay alodinia (dolor producido por un estí- mulo no nociceptivo de un campo receptivo local). • La SCS no afecta la percepción del dolor agudo producido en la zona de parestesia, mientras que la teoría de la puerta de entrada predice que la activación sostenida de las fibras mielí- nicas gruesas, como es el caso en la SCS clínica, debería enmascarar todo el dolor. • La teoría de la puerta de entrada señala que la supresión de las neuronas de proyección es- pinales es suficiente para producir analgesia completa, pero el alivio producido por la SCS depende en gran medida de la etiología del dolor. En EE.UU. solo está aprobada por la Food and Drug Administration (FDA) para el síndrome de cirugía fallida de espalda (failed back surgery syndrome, FBSS) y para el síndrome de dolor regional complejo (SDRC). Otros ensa- yos para etiologías distintas han dado peores resultados (dolor de miembro fantasma y le- sión espinal). En Europa también se utiliza para el dolor isquémico vascular periférico y mio- cárdico no revascularizable. NEUROESTIMULACIÓN EN EL TRATAMIENTO DEL DOLOR CRÓNICO 78 • El alivio producido por SCS puede persistir hasta 30 min después de cesar el estímulo, mien- tras que la teoría de la puerta de entrada solo predice alivio del dolor mientras se estimulen preferentemente las fibras mielínicas gruesas (como los cordones posteriores) sobre las fi- bras no mielínicas más finas. Referencia 10. (Tomado de: Zhang, T. C., Janik, J. J., & Grill, W. M. (2014). Mechanisms and models of spinal cord stimulation for the treatment of neuropathic pain. Brain Research, 1569(C), 19–31. http://doi.org/10.1016/j.brainres.2014.04.039) Figura 1. Representación esquemática que muestra los cambios que sufren los circuitos y la neuroquímica de la red de procesamiento del dolor en el asta dorsal durante la inducción y mantenimiento de dolor neuropático durante SCS Dolor crónico Ver detalle Ver detalle STT STT I(-) E STT Actividad + + + (+) /+/- + + + SP+ ENK+ Glu+ GABA+ µ-Opioid+ Desde la periferia Desde la periferia Conexión excitadora Conexión inhibidora Cambio patológico a los NCP* a los NCP* a Tálamo a Tálamo a Tálamo a Tálamo a IV/V I II/III Aβ Aβ Aδ Aδ C C IV/V V SCS STT STT I(-) E STT Actividad - Actividad + Actividad + Actividad - Actividad + Actividad - + + (+) /+/- +/- + + + SP+ ENK+ Glu+ GABA+ µ-Opioid+ GABA+ Adenosina+ 5-HT+ Conexión excitadora Conexión inhibidora Cambio patológico Cambio inducido por SCS SCS+ a IV/V I II/III Aβ Aβ Aδ Aδ C C IV/V V NCP: núcleos de los cordones posteriores STT: neuronas del tracto espinotalámico E: Interneuronas excitatorias I(-): Interneuronas inhibitorias Actividad + Actividad - Dolor crónico Ver detalle Ver detalle STT STT I(-) E STT Actividad + + + (+) /+/- + + + SP+ ENK+ Glu+ GABA+ µ-Opioid+ Desde la periferia Desde la periferia Conexión excitadora Conexión inhibidora Cambio patológico a los NCP* a los NCP* a Tálamo a Tálamo a Tálamo a Tálamo a IV/V I II/III Aβ Aβ Aδ Aδ C C IV/V V SCS STT STT I(-) E STT Actividad - Actividad + Actividad + Actividad - Actividad + Actividad - + + (+) /+/- +/- + + + SP+ ENK+ Glu+ GABA+ µ-Opioid+ GABA+ Adenosina+ 5-HT+ Conexión excitadora Conexión inhibidora Cambio patológico Cambio inducido por SCS SCS+ a IV/V I II/III Aβ Aβ Aδ Aδ C C IV/V V NCP: núcleos de los cordones posteriores STT: neuronas del tracto espinotalámico E: Interneuronas excitatorias I(-): Interneuronas inhibitorias Actividad + Actividad - Dolor crónico Ver detalle Ver detalle STT STT I(-) E STT Actividad + + + (+) /+/- + + + SP+ ENK+ Glu+ GABA+ µ-Opioid+ Desde la periferia Desde la periferia Conexión excitadora Conexión inhibidora Cambio patológico a los NCP* a los NCP* a Tálamo a Tálamo a Tálamo a Tálamo a IV/V I II/III Aβ Aβ Aδ Aδ C C IV/V V SCS STT STT I(-) E STT Actividad - Actividad + Actividad + Actividad - Actividad + Actividad - + + (+) /+/- +/- + + + SP+ ENK+ Glu+ GABA+ µ-Opioid+ GABA+ Adenosina+ 5-HT+ Conexión excitadora Conexión inhibidora Cambio patológico Cambio inducido por SCS SCS+ a IV/V I II/III Aβ Aβ Aδ Aδ C C IV/V V NCP: núcleos de los cordones posteriores STT: neuronas del tracto espinotalámico E: Interneuronas excitatorias I(-): Interneuronas inhibitorias Actividad + Actividad - En la progresión de dolor neuropático puede estar implicado el aumento en los niveles de neurotransmisores excitatorios y la disminución de los inhibitorios, el crecimiento aberrante de fibras aferentes primarias dentro de la lámina (cuando normalmente no entran en ella), y la pérdida de los controles inhibitorios por vía tanto de la muerte de interneuronas como por cambios en la función de los receptores GABA. MECANISMOS DE ACCIÓN DE LA NEUROESTIMULACIÓN 79 Los principales problemas de la teoría de Wall y Melzack son la negación de la especificidad de los nociceptores periféricos y el presentar un modelo único de dolor para el dolor normal y el patoló- gico. Hoy sabemos que los distintos tipos de dolor (nociceptivo, inflamatorio, neuropático) compar- ten algunos mecanismos, pero no todos. Además, su modelo neuronal espinal es erróneo (11). En contra de las predicciones de la teoría de la puerta de entrada, la SCS se ha mostrado eficaz en las entidades de dolor neuropático de origen periférico, pero no en el dolor nociceptivo agudo. Sin embargo, durante los años 80, algunos estudios demostraron que la SCS podía aliviar también cier- tos tipos de dolor nociceptivo, tales como el dolor isquémico producido por enfermedad arterial oclusiva, estadosvasoespásticos y la angina de pecho resistente al tratamiento farmacológico. Aunque se ha avanzado mucho, se desconocen los mecanismos exactos por los que actúa la SCS. La evidencia obtenida de los experimentos de laboratorio, junto con la observación clínica, de- muestran claramente que la SCS aplicada a lugares diferentes del neuroeje ejerce efectos muy diferentes en varios órganos diana o partes del cuerpo (12) (figura 2). De esto se deduce que los Figura 2. Diferentes efectos en los órganos diana y otras partes del cuerpo obtenidas cuando el electrodo epidural se desplaza estimulando a lo largo del neuroeje, lo que demuestra la importancia de una posición exacta del electrodo sobre su diana Referencia 12. (Tomado de: Linderoth B. Spinal cord stimulation: A brief updte on mechanisms of action. European Jornal of Pain. 2009; Supplements(3): p.89-93) Órgano diana Respuesta del órgano 1. Broncodilatación 2. Vasodilatación periférica 3. Estabilización de SNCI (Sistema Nervioso Cardíaco Intrínseco) Reducción de la isquemia y el dolor Disminución del tamaño del infarto 4. Disminución de espasmos del cólon Reducción del dolor 5. Vasodilatación periférica 6. Disminución de la espasticidad vesical Aumento de tolerancia al volumen C2 1 2 3 4 5 6 T1 L1 S1 SCS Cervical Torácico alto Torácico medio Torácico bajo Sacras Algunos efectos se han demostrado solo experimentalmente pero la mayoría de ellos se usan en la terapia clínica con SCS. NEUROESTIMULACIÓN EN EL TRATAMIENTO DEL DOLOR CRÓNICO 80 mecanismos mediante los que actúa la SCS en el dolor neuropático y en el dolor isquémico/vas- culopático son diferentes. Además, en el SDRC la SCS puede también inhibir el tono simpático actuando sobre los receptores adrenérgicos creados de novo en las neuronas sensoriales dañadas y/o reduciendo la isquemia periférica por acción tanto antisimpática como por liberación perifé- rica de sustancias vasoactivas (péptido relacionado con el gen de la calcitonina –CGRP– y sus- tancia P) antidrómicamente, aunque esto último está cuestionado (12). 3. Mecanismo de acción de la estimulación de cordones posteriores 3.1 El efecto de la estimulación eléctrica La estimulación eléctrica produce despolarización y excitación de las fibras aferentes prima- rias mielínicas de la columna dorsal en algún lugar de su trayectoria en la médula espinal, en un nodo de Ranvier (no en el receptor periférico), cerca del electrodo, produciendo un poten- cial de acción que se propaga en ambas direcciones (3, 13): • Ortodrómicamente en sentido rostral hacia los centros supraespinales: fibras Aβ que pro- yectan directamente a los núcleos de la columna dorsal y después conectan con la sustan- cia gris periacueductal y el tálamo. • Antidrómicamente a través de las colaterales Aβ en la región diana de la médula espinal, donde existen conexiones interneuronales con fibras C y neuronas WDR en el AD. • Antidrómicamente hacia la parte periférica de las fibras Aβ de las raíces dorsales. Se piensa que la activación de los axones de la columna dorsal durante la SCS es la res- ponsable de la parestesia percibida por los pacientes. Experimentalmente se ha visto en ratas que también existe una vía analgésica supraespinal con la SCS. La estimulación de la columna dorsal, rostral al nivel de lesión en los niveles cervicales altos, produjo alivio sig- nificativo del dolor en un estudio (14), lo que significa que la inhibición del dolor neuropá- tico producida por la SCS puede atribuirse a la activación de centros moduladores centra- les a través de proyecciones rostrales de los núcleos de la columna dorsal. Sin embargo, a nivel lumbar, que es donde se realizan la mayoría de los estudios, las investigaciones apun- tan a que la estimulación tiene un efecto más segmentario. Así se ha demostrado en un estudio que la estimulación directamente sobre el nivel donde entran en la médula espi- nal las aferencias del nervio ciático lesionadas, producía un alivio muy superior a la esti- mulación de segmentos más rostrales (15). El efecto segmentario también estaría apoyado por las observaciones anatómicas y bioquímicas, que sugieren que los impulsos eléctricos propagados de forma antidrómica inducirían modificaciones en el balance entre neuro- transmisores inhibidores y excitadores en el AD (16), y también por el hecho comprobado de que la SCS induce la expresión de c-Fos en el AD en ratas con dolor neuropático des- pués de una lesión parcial del nervio ciático (17). Varios estudios experimentales demuestran que hay una alteración de la transmisión química en el AD de la médula con la SCS (3, 18-21) (figura 3). MECANISMOS DE ACCIÓN DE LA NEUROESTIMULACIÓN 81 Referencia 21. (Tomado de: Smits, H., Van Kleef, M., Holsheimer, J., & Joosten, E. A. J. (2012). Experimental Spinal Cord Stimulation and Neuropathic Pain: Mechanism of Action, Technical Aspects, and Effectiveness. Pain Practice, 13(2), 154–168. http://doi.org/10.1111/j.1533- 2500.2012.00579.x) CP: Cordones Posteriores Figura 3. La red nociceptiva y los mecanismos de SCS Depolarización Fibra A aferente Inhibición descendente Neurona de proyección específicas de la nocicepción Neurona de proyección de amplio rango dinámico (WDR) Aferente Nociceptor/fibra C Interneurona PKC-r Interneurona inhibitoria Interneurona excitatoria Célula glial I II III IV V T1 L1 Electrodo SCS S1 D ep ol ar iz ac ió n de lo s C P en am ba s d ire cc io ne s Depolarización Fibra A aferente Inhibición descendente Neurona de proyección específicas de la nocicepción Neurona de proyección de amplio rango dinámico (WDR) Aferente Nociceptor/fibra C Interneurona PKC-r Interneurona inhibitoria Interneurona excitatoria Célula glial I II III IV V T1 L1 Electrodo SCS S1 D ep ol ar iz ac ió n de lo s C P en am ba s d ire cc io ne s Depolarización Fibra A aferente Inhibición descendente Neurona de proyección específicas de la nocicepción Neurona de proyección de amplio rango dinámico (WDR) Aferente Nociceptor/fibra C Interneurona PKC-r Interneurona inhibitoria Interneurona excitatoria Célula glial I II III IV V T1 L1 Electrodo SCS S1 D ep ol ar iz ac ió n de lo s C P en am ba s d ire cc io ne s El Asta Dorsal contiene dos tipos principales de neuronas de proyección: Las NS situadas en la lámina I que es superficial, y las neuronas WDR situadas en las láminas IV, V y VI dorsal que son más profundas. Estas neuronas de proyección reciben input de las aferentes primarias, de vías descendentes (aminérgicas) y de interneuronas espinales. Entre las aferentes primarias están las de bajo umbral como las fibras Aβ muy mielinizadas que se originan de las grandes neuronas del ganglio de la raíz dorsal (GRD) y que después se proyectan a los núcleos de las columnas dorsales. Además las neuronas de proyección reciben input de fibras C no mielinizadas de bajo umbral mecanoceptivas. La red espinal nociceptiva también contiene numerosas interneuronas, de naturaleza tanto excitadora como inhibidora (GABAergicas), que modulan el procesamiento de las señales de dolor en la “puerta” hacia el cerebro (Teoría de la Puerta de Entrada). La red también contiene un circuito silente entre las aferentes primarias de bajo umbral y las neuronas de proyección NS. Este circuito, que contiene interneuronas que expresan la isoforma Gamma de la Proteín quinasa C (PKC-γ) está inactivo normalmente, pero se piensa que se activa en los estados de dolor neuropático y, por tanto, transforman el “tacto en dolor”. La estimulación eléctrica de las columna dorsales provocan un potencial de acción que se propaga en ambas direcciones: ortodrómicamente en dirección rostral hacia los centros supraespinales y antidrómicamente a través las colaterales Aβ hacia la red nociceptiva espinal. La estimulación antidrómica de las fibras Aβ produce una disminución de la liberación del glutamato por las aferentes primarias (y presumiblemente lasaferentes C de umbral alto) y, al mismo tiempo, un incremento de la liberación del neurotransmisor inhibitorio GABA (“Teoría de la Puerta de Entrada”). Se desconoce aún si la estimulación antidrómica de las colaterales Abeta grandes produce modulación y/o sensibilización del circuito silente que contiene interneuronas PKC-γ. NEUROESTIMULACIÓN EN EL TRATAMIENTO DEL DOLOR CRÓNICO 82 El síndrome de dolor neuropático, en el que se produce hipersensibilidad periférica con alodi- nia e hiperalgesia, es el resultado de la sensibilización central. La sensibilización central es la consecuencia de los cambios neuroquímicos que se producen en la transmisión en el AD, prin- cipalmente debidos a una liberación aumentada de los neurotransmisores excitatorios gluta- mato y aspartato, así como a una pérdida de la inhibición tónica mediada por GABA. Todo ello provoca la hiperexcitabilidad de las neuronas WDR del AD. En modelos experimentales anima- les de neuropatía, la SCS inhibe la hiperexcitabilidad de las neuronas WDR del AD e induce una liberación de GABA, con una concomitante disminución de la concentración intersticial de glutamato. La liberación de GABA solo se observa en los animales que responden favorable- mente a la SCS. Parece que la supresión de la liberación de glutamato se produce mediante la activación del receptor GABAB. Esto se ha corroborado en animales no respondedores a SCS en los que la inyección intratecal de baclofeno, que es un agonista de los receptores GABAB, puede transformarlos en respondedores. Las neuronas WDR juegan un papel clave como moduladoras de la analgesia en la teoría de la puerta de entrada. Se localizan en las láminas I, II, IV, VI y X del AD, y su principal función es codificar la intensidad del input aferente recibido. Como se ha dicho, la estimulación de la co- lumna dorsal con parámetros clínicos de SCS suprime la excitabilidad aumentada de las célu- las WDR en ratas con dolor neuropático. Un estudio electrofisiológico realizado in vivo ha re- velado algunos puntos importantes sobre la inhibición neuronal inducida por la estimulación de la columna dorsal, que mimetizan hechos observados en la analgesia por SCS (7). Por ejem- plo, el dolor continuo y la alodinia táctil son dos síntomas característicos del dolor neuropático que a menudo se atenúan por la SCS. De forma similar, en ratas con lesión nerviosa (ligadura de L5) la estimulación bipolar de la columna dorsal, y también de la raíz dorsal lumbar, inhibía las descargas espontáneas que pueden contribuir a que el dolor sea continuo, y atenuaba las respuestas mecánicas evocadas de las neuronas WDR. Durante la SCS en pacientes también se puede registrar un potencial de acción compuesto antidrómico ciático en miembros inferio- res. La inhibición neuronal inducida por SCS es reversible y repetible, y, por tanto, puede pro- porcionar una base biológica para diseñar sistemas de biofeedback cerrados que comuniquen y registren respuestas neurales tras la estimulación con SCS (7). Se desconocen muchos detalles de los circuitos neuronales espinales implicados en el control de la puerta y de otros mecanismos segmentarios involucrados en la analgesia por SCS. Las neuronas del AD pueden inhibirse a través de mecanismos tanto GABA-érgicos como glicinérgicos. Sin embargo, no está claro el papel que juegan las interneuronas gli- cinérgicas. También es desconcertante que la mayoría de las interneuronas inhibitorias superficiales no solo reciben inputs excitatorios por fibras Aβ, sino que también reciben inputs excitatorios de fibras Aδ de alto umbral y fibras C, lo que contradice las prediccio- nes de la teoría del control de la puerta (por ejemplo, que los inputs de alto umbral inhiben la actividad de las interneuronas inhibitorias). Por ello, deberá estudiarse si los efectos de la SCS en diferentes modalidades de disfunción sensorial (calor, frío, hipersensibilidad me- cánica) y bajo diferentes situaciones patológicas de dolor (dolor inflamatorio, dolor neu- ropático) nacen de mecanismos patogénicos diferentes o no. Además de activar los meca- nismos de la puerta, las descargas antidrómicas sincronizadas de la columna dorsal pueden inducir directamente potenciales postsinápticos inhibitorios en las neuronas del MECANISMOS DE ACCIÓN DE LA NEUROESTIMULACIÓN 83 asta posterior y facilitar la despolarización de las aferentes primarias, que produce inhibi- ción presináptica de los inputs aferentes entrantes. La vasodilatación que produce la SCS requiere integración espinal multisegmentaria, pero no está claro si también es necesaria esta integración para que la SCS produzca analgesia. Se ha descrito un circuito “silente” entre las fibras aferentes de bajo umbral y las neuronas de proyección nociceptivo-específicas (NS) situadas en la lámina I. Hasta ahora, la composición de este circuito se ha descrito solo parcialmente. Aquí parecen tener importancia las interneu- ronas excitatorias en la parte más interna de la lámina II, que expresa la isoforma gamma de la proteinquinasa C (PKC-γ). Estas interneuronas excitatorias reciben inervación de fibras Aβ, lo que implica que estímulos inocuos son capaces por tanto de activarlas (22). Esta información no se conduce a las neuronas de proyección NS en la parte más superficial del AD porque las interneuronas PKC-γ están inhibidas por las neuronas glicinérgicas y GABA-érgicas. La activa- ción de este circuito silente permitiría que estímulos inocuos llegaran a las neuronas NS y con- virtiese el “tacto en dolor”. Por tanto, el tacto puede convertirse en dolor mediante la activa- ción y/o sensibilización de un circuito silente en el asta posterior que contiene interneuronas PKC-γ, permitiendo así que los input de fibras Aβ lleguen a las neuronas de proyección NS. Las futuras investigaciones deberían focalizarse en el estudio de cómo la SCS interactúa y modula el circuito de dolor en el AD de la médula (3) (figura 3). Hay otros neurotransmisores involucrados en el efecto analgésico de la SCS: serotonina, sustan- cia P, adenosina, noradrenalina (que participa en la inhibición descendente) y el receptor musca- rínico (en particular el M4), lo que implica al sistema colinérgico. Los efectos de la SCS pueden mejorar añadiendo baclofeno (agonista del receptor GABAB) o clonidina intratecal (20, 23, 24). En todo caso, los mecanismos de acción en el dolor neuropático no se han dilucidado completa- mente (3, 12). 3.2 Mecanismos neuroquímicos espinales 3.2.1 GABA Los inputs sincrónicos de las fibras A pueden inducir cambios neuroquímicos dinámicos seg- mentarios. En particular, las interneuronas inhibitorias GABA-érgicas de la lámina superficial del AD pueden activarse por inputs de fibras Aβ y liberar GABA, un importante neurotrans- misor inhibitorio en el mecanismo de control de la puerta. En los modelos de dolor neuro- pático, SCS aumentaba la liberación de GABA espinal en animales que respondían bien a la analgesia por SCS y producían una disminución asociada en la liberación de glutamato y as- partato. La inhibición del comportamiento de dolor en los animales y la hiperexcitabilidad de las neuronas WDR estaban íntimamente asociadas en el tiempo con la elevación de los niveles de GABA en el AD tras SCS. El receptor GABAB parece jugar un papel más importan- te que el GABAA en la mediación del efecto inhibitorio. La administración intratecal de pe- queñas dosis de baclofeno mejoraba la analgesia por SCS tanto en modelos animales como en pacientes. Hay que resaltar que los niveles de GABA extracelular permanecían elevados después de la SCS, lo que puede indicar una disfuncionalidad del mecanismo recaptador de NEUROESTIMULACIÓN EN EL TRATAMIENTO DEL DOLOR CRÓNICO 84 GABA tras la lesión nerviosa. El contenido de GABA intracelular de las neuronas del AD de- creció durante la fase inicial del dolor neuropático, pero aumentó en una fase más tardía. Así, la implicación de los mecanismos GABA-érgicos en la analgesia por SCS puede cambiar durantela progresión del dolor neuropático. Además de las neuronas intrínsecas del AD, de- ben existir otras fuentes y mecanismos implicados en la liberación de GABA por la SCS en situaciones de dolor neuropático, pero actualmente se desconocen (6). 3.2.2 Serotonina (5-HT) La SCS induce liberación de serotonina en el AD de gatos. El aumento de la serotonina endógena tras la SCS puede estar mediado por circuitos GABA-érgicos locales (19). La lesión nerviosa cam- bia la expresión y función de varios subtipos de receptores a la serotonina (5-HT 1-7) que ejercen efectos diversos en el procesamiento del dolor a nivel espinal. Los subtipos relacionados son el 5-HT2A, 5-HT3 y 5-HT4, cuya activación por SCS puede contribuir a la disminución de la excitabi- lidad neuronal y a la transmisión de dolor. El receptor 5-HT3 es conocido como un canal catiónico no selectivo que media las respuestas excitatorias rápidas y que juega un papel en la facilitación del dolor. Es sorprendente que su activación también contribuya a la analgesia por SCS, por lo que es posible que la lesión nerviosa cambie la actividad 5-HT3, o que la analgesia por SCS esté mediada parcialmente a través de la activación de interneuronas GABA-érgicas espinales que ex- presen receptores 5-HT3 (25). Además de activar los receptores 5-HT, el aumento de la liberación de serotonina también puede incrementar la expresión y síntesis de dinorfina, encefalina y GA- BA dentro de la médula espinal, lo que explicaría la analgesia retardada y prolongada que puede producir SCS (6). 3.2.3 Mecanismos muscarínicos y adrenérgicos Las neurotransmisiones colinérgicas y adrenérgicas son otros dos importantes mecanismos de la analgesia mediada por SCS (6). Los estudios con microdiálisis in vivo sugieren que la SCS in- duce liberación tanto de acetilcolina como de noradrenalina en la médula espinal. Igual que el GABA, el contenido de acetilcolina en el AD se eleva significativamente solo en las ratas con dolor neuropático que responden con analgesia al SCS, y no en los animales no respondedores (20, 26). Este efecto analgésico se bloqueaba completamente con la administración de atropi- na y un antagonista del receptor M4 muscarínico, y se atenuaba parcialmente con antagonis- tas de M1 y M2. Así, la inhibición de la hipersensibilidad mecánica neuropática por SCS se aso- cia, al menos parcialmente, con un aumento de la liberación de acetilcolina que activa a los receptores muscarínicos espinales. La TENS también activa los mecanismos colinérgicos para conseguir inhibición del dolor. La activación de las interneuronas colinérgicas, que liberan ace- tilcolina en el AD de la médula, puede también contribuir de forma parcial a la potenciación de la analgesia por SCS que se produce con la inyección intratecal de clonidina en ratas con lesión nerviosa (23). Puesto que los receptores muscarínicos y los adrenoceptores α1 también se lo- calizan en interneuronas GABA-érgicas en el AD, la acetilcolina y la noradrenalina pueden ex- citar a las interneuronas GABA-érgicas espinales al unirse a sus respectivos receptores para producir analgesia tras SCS. De esta manera, la SCS puede iniciar una activación de varios me- canismos inhibitorios segmentarios espinales, aunque algunos pueden estar alterados por la lesión nerviosa (6). MECANISMOS DE ACCIÓN DE LA NEUROESTIMULACIÓN 85 3.2.4 Receptores canabinoides Los receptores canabinoides tipo I (CB1) son importantes en la plasticidad neuronal y en la mo- dulación del dolor. Se expresan en las interneuronas excitatorias e inhibitorias de la sustancia gelatinosa (SG). Se ha visto que la estimulación SCS puede disminuir la transmisión de dolor mediante activación de estos receptores en la SG, lo que los convierte en un objetivo potencial para desarrollar nuevas estrategias de tratamiento, ya que los agonistas CB1 o los inhibidores de la degradación de endocanabinoides podrían aumentar la eficacia de SCS (27). 3.3 Mecanismos supraespinales Además de los mecanismos segmentarios, las proyecciones supraespinales juegan un papel importante en el desarrollo de dolor neuropático al desequilibrarse el balance entre la facilita- ción descendente y la inhibición. Los estudios electrofisiológicos y de comportamiento han demostrado que los mecanismos descendentes juegan un papel en la SCS, pueden ser inde- pendientes de los mecanismos segmentarios y su carácter temporal se correlaciona bien con el periodo de alivio que sigue al cese de la estimulación. Se piensa que los sistemas serotoninérgico y de opioides endógenos son importantes en la modu- lación del dolor, y ambos pueden contribuir a la analgesia por SCS. El grado de implicación del sis- tema opioide es un punto de controversia, porque la administración de dosis clínicas de naloxona (hasta 0,2 mg/kg) no evita el alivio del dolor producido por SCS en humanos, pero altas dosis (10 mg/kg/h) sí eliminan algunas características de este efecto en animales, lo que sugiere que los re- ceptores opioides κ y δ están más implicados en el efecto de SCS que los μ (28). Los mecanismos opioidérgicos pueden estar implicados también en otras indicaciones de SCS, como la angina. El papel de la serotonina está más claro, ya que hay una relación directa entre la eficacia de SCS y los niveles de 5-HT en la médula espinal de ratas neuropáticas; además, las conexiones serotoninérgicas descendentes afectadas por SCS modulan sinapsis tanto GABAA como GABAB, independientemente de los mecanismos segmentarios (29). Las conexiones y circuitos que median la modulación descendente se conocen solamente en parte. La médula rostroventromedial, considerada la mayor fuente de facilitación e inhibición descendente, recibe inputs ascendentes desde las neuronas del AD, envía proyecciones axona- les directamente al AD y afecta la actividad tanto de interneuronas como de neuronas de pro- yección en el AD. Las investigaciones recientes también han mostrado algunos efectos de SCS en neuronas supraespinales: las neuronas del locus ceruleus muestran mayor actividad durante SCS en ratas neuropáticas con el umbral de retirada de la pata aumentado que en las ratas no respondedoras, lo que apoya la idea de que SCS actúa modulando la actividad del circuito es- pinal-supraespinal (30). Sin embargo, se desconocen las conexiones específicas entre el AD y los centros supraespinales que conducen esta actividad. 3.4 Matriz del dolor Se entiende como matriz del dolor la red de estructuras cerebrales que participan en el procesamiento del dolor. Esta red juega un papel crítico en la percepción y evaluación del dolor y los efectos que la SCS provoca en ella pueden ser responsables de su acción NEUROESTIMULACIÓN EN EL TRATAMIENTO DEL DOLOR CRÓNICO 86 analgésica (10, 31) (figura 4). La estimulación de los cordones posteriores altera la acti- vidad eléctrica de neuronas en el tálamo y en los córtex somatosensoriales SI/SII. Por resonancia magnética nuclear (RMN) funcional se ha visto que la SCS efectiva se acom- pañaba de una activación de SI/SII, si bien no se distinguía si dicha activación se produ- cía por dolor o por parestesias. Tampoco se estudiaron otras regiones cerebrales. Me- diante tomografía por emisión de positrones (PET) en pacientes con SCS efectiva para angina se ha visto que aumenta la actividad en: sustancia gris periacueductal (PAG) ven- trolateral, tálamo, circunvolución temporal medial izquierda, córtex prefrontal medial bi- lateral, núcleo caudado y córtex cingulado posterior (PCC). También producía disminu- ción de la actividad en la ínsula posterior, circunvolución temporal inferior derecha, circunvolución frontal inferior derecha y córtex cingulado anterior derecho (32). Además, la RMN funcional durante la SCS efectiva para angina demostró que el aumento de la ac- tivación de las regiones corticales por un estímulo nocivo agudo, aunque extenso, no se afectaba por SCS, lo que sugiere que la SCS afecta específicamente la actividad de regio- nes cerebrales asociadas conel procesamiento del dolor patológico (33). Una revisión sis- temática reciente concluye que la evidencia disponible no permite elaborar teorías con- cluyentes sobre los mecanismos de acción supraespinales de SCS. De los estudios incluidos se desprende que SCS parece inhibir los potenciales de acción evocados soma- tosensoriales e identifica al tálamo y al córtex cingulado anterior como mediadores po- tenciales de la experiencia dolorosa (34). Referencia 13. (Tomado de: Zhang, T. C., Janik, J. J., & Grill, W. M. (2014). Mechanisms and models of spinal cord stimulation for the treatment of neuropathic pain. Brain Research, 1569(C), 19–31. http://doi.org/10.1016/j.brainres.2014.04.039) Figura 4. Representación esquemática de los cambios que ocurren en el cerebro y en la matriz del dolor durante la progresión del dolor neuropático y durante la estimulación SCS S1 (+) S2 (+) (+) /+/- +/- (-) (+) (-) (+) (-) (-) (+) (+) ThIC HPA ACC PFC(+) NAc/VTA Desde el Asta Dorsal Conexión excitadora Conexión inhibidora Cambio patológico Cambio inducido por SCS X X X X X S1 (+) S2 (+) (+) /+/- +/- (-) (+) (-) (+) (-) (-) (+) (+) ThIC HPA ACC PFC(+) NAc/VTA Desde el Asta Dorsal Conexión excitadora Conexión inhibidora Cambio patológico Cambio inducido por SCS X X X X X Los efectos de SCS sobre la neuroquímica del cerebro no se conocen bien, pero se ha visto que afecta a regiones asociadas con dolor patológico. STT: tracto espinotalámico VPL: núcleo ventral posterolateral del tálamo S1: Córtex Somatosensorial primario S2: Córtex Somatosensorial secundario ACC: Córtex Cingulado Anterior PFC: Córtex Prefrontal NAc/VTA: Núcleo Accumbens/Área tegmental ventral IC: Córtex Insular Posterior Th: Tálamo HPA: Eje hipotálamo-hipofisario-Adrenal MECANISMOS DE ACCIÓN DE LA NEUROESTIMULACIÓN 87 4. Neurofisiología de la SCS En la SCS, un electrodo aporta corriente al espacio extracelular a un nivel multicelular. Esta corriente iónica atraviesa membranas neuronales y provoca polarización o despolarización de las mismas. La fibra nerviosa mielínica consiste en un axón cilíndrico cubierto y aislado por una vaina de mielina que se interrumpe a intervalos regulares en los nodos de Ranvier, donde las corrientes iónicas pueden pasar la membrana de la fibra nerviosa (3). Los axones con mielina tienen la característica eléctrica de una red de cables, incluyendo resistores y condensadores. Esta red puede usarse para calcular la influencia del campo eléctrico indu- cido por la estimulación en los voltajes transmembrana nodales. La fuerza conductora del cambio de voltaje transmembrana hacia la despolarización o hiperpolarización del axón se llama función de activación (FA). La FA se determina fundamentalmente por la diferencia de segundo orden en los potenciales de campo nodales. Un valor positivo de FA resulta en despolarización de la membrana, mientras que un valor negativo significa hiperpolariza- ción. En la SCS, los axones se despolarizan por estimulación catódica (electrodo con carga negativa). Cuando a una fibra nerviosa se le aproxima un cátodo, el valor FA aumentará y el umbral de estímulo necesario para estimular se reducirá. Primero se excitará el nodo de Ranvier más cercano al cátodo. Durante la SCS el reclutamiento de fibras nerviosas se de- termina por la distancia del electrodo a la fibra nerviosa, así como por el diámetro de la fi- bra. En el medio conductor alrededor del electrodo la densidad de corriente es inversamen- te proporcional a la distancia al cuadrado o al cubo, incrementando rápidamente el umbral de estimulación mientras nos alejamos del electrodo. El diámetro de la fibra nerviosa tiene un efecto en el valor de su FA, ya que las diferencias de potencial entre los nodos de Ran- vier adyacentes en fibras gruesas son mayores, resultando en un mayor valor pico de FA, disminuyendo así el umbral de estimulación. Por tanto, durante la SCS las primeras fibras en reclutarse son las fibras gruesas situadas más cerca del electrodo (a unos pocos milíme- tros). Al aumentar la amplitud de estimulación se reclutan fibras gruesas a mayor distancia, y fibras finas cercanas al electrodo. Sin embargo, con la SCS se limita la amplitud de esti- mulación a aproximadamente el 40-70 % del umbral de percepción de la parestesia (PT), limitando así el reclutamiento de más fibras gruesas y finas. En la SCS bipolar, las fibras de las columnas dorsales con diámetro < 9 μm no se reclutan nunca. Como las fibras más gruesas de las columnas dorsales tienen solo 12 μm de diámetro, la cantidad estimada de fibras que se reclutan en SCS es solo el 1 % de la población total (3, 35). 4.1 Influencia de los parámetros de estimulación Los efectos de la SCS en las neuronas del AD no se conocen bien, y tampoco la configuración de parámetros de estimulación óptima (configuración de electrodos, anchura, amplitud y frecuencia de pulso) para conseguirlo. La combinación de experimentos en modelos animales y modelos infor- máticos ha permitido avanzar en el conocimiento de los mecanismos de la SCS y en el diseño de nuevas geometrías de electrodos para producir una estimulación más selectiva espacialmente. Los parámetros de estimulación se han investigado y manipulado durante años para opti- mizar el tratamiento. El amplio rango de frecuencias disponibles en los sistemas de SCS comercializados (de 5 a 1.400 Hz) se ha utilizado para varias indicaciones, y también se NEUROESTIMULACIÓN EN EL TRATAMIENTO DEL DOLOR CRÓNICO 88 han investigado los efectos clínicos de varias anchuras de pulso. Las estrategias de progra- mación han considerado a los parámetros como variables separadas, sin prestar mucha atención a cómo estas variables interactúan para modular las vías del dolor dentro del sis- tema nervioso. Con el advenimiento en los últimos años de las nuevas formas de onda y frecuencias, par- ticularmente la estimulación con alta frecuencia (HF) (10 kHz) y la estimulación en ráfagas (burst), también se está concediendo cada vez mayor importancia al impacto de la energía liberada al sistema nervioso. El concepto que se está desarrollando se centra en la combi- nación de parámetros de estimulación y “carga liberada” resultante. Cuando se consideran todos los parámetros juntos, la estimulación puede caracterizarse por la “carga a través del tiempo”, que puede ser liberada mediante varias estrategias de dosificación. La terapia con SCS convencional con dosis sería con una alta “carga por pulso”. Por el contrario, una estrategia de dosificación usando altas frecuencias y/o anchuras de pulso mayores produ- ce una dosis de energía más consistente, proporcionando una mayor “carga por segundo”. Así, los parámetros de estimulación pueden caracterizarse por tener una “concentración de corriente” alta o baja y la liberación de energía podría caracterizarse por tener una alta o baja “dosis” (4, 6). 4.2 Parámetros de SCS 4.2.1 Amplitud y anchura de pulso La unidad básica de la estimulación eléctrica en neuromodulación es el “pulso” (figura 5). Es una liberación sostenida de una cantidad específica de amplitud de corriente (medida en miliamperios, mA) en un tiempo determinado (anchura de pulso, medida en microse- gundos, μs). A cada pulso le sigue un flujo de corriente igual en la dirección opuesta para balancear la carga y salvaguardar contra el daño de la interfase electrodo-tejido debido a reacciones químicas que podrían resultar de la acumulación de carga. El pulso de “recar- ga” puede ser activo (produciendo una apariencia bifásica) o pasivo (balanceada, pero asimétrica). En la mayoría de los sistemas SCS, el balance de cargas se produce después de cada pulso individual y de forma pasiva. En los sistemas controlados por voltaje, la amplitud se prescribe como una diferencia de potencial (medida en voltios, V) aplicada a la superficie del electrodo, en cuyo caso el flujo real de corriente dependerá de la impe- dancia en la interfase tejido-electrodo, mientras que lossistemas controlados por co- rriente liberan una corriente prescrita, permitiendo así variar el voltaje con la impedan- cia. Si la impedancia es estable a lo largo del tiempo, no hay diferencias clínicas apreciables entre los sistemas de voltaje constante y sistemas de corriente constante. Además, los efectos del movimiento de la médula espinal y el grosor del líquido cefalo- rraquídeo (LCR) tienen un impacto mayor en la amplitud de estimulación requerida que la impedancia. La corriente se define como un flujo de carga, de tal forma que 1 mA es igual al flujo de 1 mili- culombio (mC) de carga eléctrica en 1 segundo. La carga por cada pulso (en nanoculombios) es el producto de la amplitud por la anchura de pulso. MECANISMOS DE ACCIÓN DE LA NEUROESTIMULACIÓN 89 A las frecuencias normalmente utilizadas durante SCS (40-100 Hz), el umbral para la activa- ción neural será aproximadamente proporcional a la carga por pulso. Así, el umbral para la ge- neración de un potencial de acción seguirá típicamente una curva hiperbólica llamada curva fuerza-duración (curva I/T), en la que el valor de amplitud multiplicada por la anchura de pulso (es decir, la carga por pulso) es la misma en cualquier punto a lo largo de la curva (figura 6). La curva muestra cómo las anchuras de pulso estrechas necesitan alta amplitud de estímulo para activar una neurona o un axón, mientras que las anchuras de pulso mayores necesitan baja amplitud. Cada axón individual necesitará una carga por pulso diferente en función de su cali- bre, mielinización y distancia del electrodo. La curva de fuerza-duración de las fibras de los cordones posteriores puede establecerse en los pa- cientes con SCS determinando la amplitud que se necesita para la PT y umbral de disconfort con los aumentos de la anchura de pulso. La “ventana terapéutica” resultante puede guiar la programa- ción SCS para la amplitud y la anchura de pulso y así optimizar el alivio del dolor mientras se mini- mizan las molestias. La amplitud influye en el número de fibras reclutadas y se manifiesta con un aumento o disminución en la intensidad y/o área de la sensación parestésica. La anchura de pulso se considera un factor secundario en el control de la energía aplicada, pero un aumento de este pa- rámetro puede también reclutar un número mayor de fibras. La curva fuerza-duración también de- Figura 5. Características de los pulsos eléctricos Referencia 4. Tomado de : Miller JP et al. Parameters of Spinal cord Stimulation and Their Role in Electrical Charge Delivery: A Review. Neuromodulation: Technology at the Neural Interface, 2016; 19(4) 373-384 Carga bifásica balanceada Carga balanceada controlada por corriente Carga balanceada controlada por voltaje Anchura de pulso Am pl itu d Carga Frecuencia A) El pulso se define por la amplitud y la anchura. La carga por pulso (en nanoculombs) es el producto de la amplitud (mA) y la anchura de pulso (mc seg). La frecuencia define el número de pulsos por Hercios. B) La forma del pulso puede diferir dependiendo de si son bifásicos, controlados por corriente o controlados por voltaje. NEUROESTIMULACIÓN EN EL TRATAMIENTO DEL DOLOR CRÓNICO 90 muestra cómo se puede aplicar una corriente significativa a un axón sin producir necesariamente un potencial de acción. Cuando la estimulación está por debajo del umbral de activación de una neurona, esta puede despolarizarse localmente, pero no se genera potencial de acción. Incluso pue- den aplicarse cargas altas en los extremos de la curva (con anchuras de pulso altas o bajas) sin con- seguir una parestesia intensa, por hacerlo por debajo del umbral de estimulación (4). 4.2.2 Frecuencia La frecuencia de pulso (número de pulsos por segundo) utilizada en SCS ha sido históricamente de 40-100 Hz. Esta frecuencia produce parestesia (en combinación con una relevante carga por pulso) y se asocia a un bajo consumo de energía. Hay evidencias en varias terapias eléctricas, incluida la SCS, de que la frecuencia puede ser un importante factor determinante para la activación de meca- nismos específicos de alivio del dolor. En la estimulación eléctrica transcutánea y la electroacupun- tura de baja frecuencia (LF) (2-10 Hz) se activan las vías de receptores opioides μ, mientras que las terapias de HF (100 Hz) activan probablemente los sistemas opioides δ endógenos. Los efectos neu- roquímicos de SCS son muy diferentes a distintas frecuencias. La estimulación a LF (4-60 Hz) podría liberar transmisores que se unen a los receptores μ, mientras que las frecuencias de 60 Hz podrían activar el sistema opioide δ. Las frecuencias alrededor de 50 Hz activan las neuronas GABA-érgicas del AD, aunque también interneuronas que usan otros neurotransmisores, como acetilcolina y ade- nosina, células serotoninérgicas en la médula rostroventromedial y núcleos en el locus ceruleus que contienen norepinefrina. A frecuencias más altas, tales como 500 Hz, se producen mayores cambios en el flujo sanguíneo periférico que a frecuencias más bajas, y 1.000 Hz producen cambios en las pro- piedades conductivas de las neuronas sensoriales aferentes a intensidades más bajas que con esti- mulación a 50 Hz (36). La frecuencia influye en el número de veces que una neurona descarga en Figura 6. Curva de fuerza-duración para la activación neuronal Referencia 4. Anchura de pulso Am pl itu d Las líneas grises representan hipotéticas curvas de diferentes tipos de axones o poblaciones. En condiciones ideales el umbral para la generación de un potencial de acción seguirá una curva hiperbólica. MECANISMOS DE ACCIÓN DE LA NEUROESTIMULACIÓN 91 respuesta a un estímulo. La duración típica del potencial de acción para las fibras somatosensoriales es de unos 5 milisegundos (ms). Esto significa que las neuronas podrán producir mejor una descarga con cada estímulo cuando se usan bajas frecuencias. Cada pulso por encima del umbral de activación es capaz de inducir un potencial de acción distinto y las neuronas descargarán juntas de una forma sincronizada (figura 7). Diferentes tipos de neuronas tendrán diferentes propiedades de activación. En general, muchas neuronas descargan a frecuencias menores de 200 Hz y podrían, por tanto, des- cargar con estímulos alrededor de los 200 Hz o menos. Sin embargo, hay evidencia de que las neu- ronas sensoriales pueden descargar en respuesta a trenes de pulso de frecuencias mayores (4). Al hablar de los mecanismos neurales, todos los parámetros de estimulación están relaciona- dos y no se pueden considerar independientes unos de otros. Por ejemplo, como la frecuencia está inversamente relacionada con la longitud del ciclo, determinará la posible anchura del pulso. A medida que aumenta la frecuencia, el tiempo disponible para completar un ciclo de Figura 7. Esquema de la respuesta neuronal a estímulos hipotéticos Referencia 4. Tomado de : Miller JP et al. Parameters of Spinal cord Stimulation and Their Role in Electrical Charge Delivery: A Review. Neuromodulation: Technology at the Neural Interface, 2016; 19(4) 373-384 1 2 3 4 5 6 7 8 9 1 2 3 4 A) La frecuencia del estímulo eléctrico aplicado influirá en la frecuencia con la que la neurona producirá un potencial de acción. A bajas frecuencias, asumiendo que el estímulo es mayor que el umbral de activación, la neurona puede responder a cada estímulo eléctrico con un potencial de acción. El esquema muestra cuatro pulsos de estimulación eléctrica y cuatro potenciales de acción resultantes. B) A medida que aumenta la frecuencia del estímulo, la neurona es menos probable que responda con un potencial de acción a cada estímulo. El esquema muestra dos hipotéticas neuronas, una que responde a cada segundo estímulo y otra que responde a cada tercer estímulo. En una población de neuronas, el resultado de una frecuencia de estimulación mayor, por encima del umbral de activación, es estocástico o pseudo-aleatorio. NEUROESTIMULACIÓN EN EL TRATAMIENTO DEL DOLOR CRÓNICO 92 pulso disminuye:un estímulo de 100 Hz completa un ciclo en 10 ms, a 1.000 Hz en 1 ms y a 10.000 Hz en 0,1 ms. La amplitud debe considerarse también, y en el rango de altas frecuencias (kilohercios), por ejemplo a 10.000 Hz, el mecanismo de actuación variará dependiendo de ella. Por ejemplo, la estimulación a alta intensidad con estas frecuencias produce un bloqueo completo de los im- pulsos neurales, aunque reversible (4). La carga por cada pulso determina si las neuronas y axones se activarán o no, y la frecuencia in- fluye en cada cuánto tiempo un axón podrá descargar y qué mecanismos están involucrados (4). 5. Estimulación a 10 kilohercios Recientemente se ha introducido esta forma de estimulación en la que el paciente no percibe parestesia. Las hipótesis sobre los mecanismos de neuromodulación inducidos por este tipo de ondas incluyen: • Sumación temporal: múltiples pulsos se suman uno a otro para conseguir la activación neuronal. Los impulsos que alcanzan a una neurona dentro de un cierto periodo de tiempo pueden despolarizarla, aunque cada impulso individual no es suficiente para conseguirlo. • Bloqueo de la despolarización: la estimulación de HF bloquea la propagación de los po- tenciales de acción de forma reversible. • Desincronización: la estimulación de HF produciría una actividad neuronal estocástica o pseudoespontánea, con unidades descargando individualmente, cada una con su propio rit- mo y patrón (37, 38). Todas estas hipótesis se basan en la activación neuronal. En un trabajo reciente usando un mo- delo por ordenador (39), los autores apoyan su hipótesis de que el mecanismo de acción de la HF es triple (39): 1. La HF bloquea las fibras gruesas (que son las que producen parestesias en la estimulación tónica convencional) a través de dinámica de canales iónicos y efectos de la estimulación en el axón, como se describe por la función activadora, que deriva de la distribución de co- rriente sobre la superficie del axón. 2. La HF activa las fibras de diámetro medio y pequeño dentro de los cordones posteriores que no producen parestesia. 3. Las fibras de diámetro medio y pequeño se activan en número suficiente para provocar una reducción de las señales de las células WDR en la lámina V en el dolor neuropático. Esta teoría deberá comprobarse con más estudios bien diseñados. Hasta ahora no hay comunicaciones de alteraciones sensoriales o sensación de hormigueo durante o después de la estimulación con SCS HF10. Sin embargo, no se ha publicado ningún estudio hasta ahora en el que esto se compruebe con un Quantitative Sensory Test (QST). Solo un estudio (40), donde la HF se definió como 200-1.200 Hz, demostró con QST un aumento de los umbrales para la detección de presión, comparado con el basal y con la SCS convencional (40, 41). Otras nuevas hipótesis sobre las que se trabaja se basan en que frecuencias por encima de los 5 kHz podrían inhibir a las neuronas espinales espontáneamente activas. También que una amplitud MECANISMOS DE ACCIÓN DE LA NEUROESTIMULACIÓN 93 mínima y frecuencias por encima de los 2 kHz podrían hiperpolarizar neuronas quiescentes en un número dependiente de la amplitud y de la frecuencia (máxima a 10 kHz). Los resultados clí- nicos de la estimulación con kilohercios podrían ser el resultado de una inhibición directa de la membrana, generada durante la aplicación de un campo eléctrico a frecuencias de kiloher- cios, en lugar de la activación de las fibras de los cordones posteriores (40). Los trabajos publicados en pacientes tratados con SCS de 10 kHz sugieren que el alivio del do- lor puede llegar a los 2 años (42, 43). Como no se han publicado manifestaciones de bloqueo neuronal ni de estimulación acompañantes de alivio de dolor, los modelos informáticos indi- can que las dos primeras hipótesis son menos probables (4, 38). En resumen, los mecanismos de actuación de la HF son todavía oscuros, aunque en la actuali- dad se están realizando estudios que presumiblemente arrojarán luz. Las hipótesis han cam- biado desde la desincronización (2015) a la inhibición/activación diferencial en el asta posterior (2016). Varios estudios demuestran resultados superiores a la SCS convencional en FBSS y uno de ellos con resultados de 24 meses de seguimiento (44). Sin embargo, hasta ahora no hay ba- se científicamente sólida para el uso de la HF, aunque varios grupos reportan muy buenos re- sultados, especialmente para el componente de dolor lumbar. 6. Estimulación en ráfagas (burst) Se trata de una estimulación que, al igual que la HF, no produce parestesia. Escogida arbitra- riamente, consiste en series de cinco pulsos de 1.000 μs a una frecuencia de pulso de 500 Hz, seguidas de un único pulso de repolarización, repitiéndose cada tren a 40 Hz. (45) (figura 8). Figura 8. Opciones actuales de estimulación. Burst: ráfagas. Referencia 46. Pope JE, Falowski S, Deer TR. Advanced waveforms and frequency with spinal cord stimulation: burst and high-frequency energy delivery. Expert Rev Med Devices. 2015 Jul; 12(4): 431-7 HF10: alta frecuencia a 10 kHz A B C Tónica Ráfagas Alta Frecuencia a 10 KHz NEUROESTIMULACIÓN EN EL TRATAMIENTO DEL DOLOR CRÓNICO 94 La carga acumulada de las cinco descargas monofásicas de 1 ms se equilibra durante los 5 ms que siguen a la descarga, y el balance de cargas no se realiza completamente después de cada descarga individual. Para evitar la disolución del electrodo o la destrucción del tejido, el siste- ma de estimulación tiene que asegurarse de que no queda carga residual en la interfase elec- trodo-electrolito. De esta manera, la carga transmitida al tejido y la carga eliminada del mismo deberían ser iguales o, en otras palabras, balanceada (4). Se ha propuesto que la estimulación en ráfagas proporciona una señal que es más parecida a los patrones de activación endógenos en el sistema nervioso. Incluso se ha publicado que neuronas responsables de la codificación de algunos aspectos de las señales dolorosas desde las neuronas periféricas y el tálamo descargan en patrones de ráfagas (4, 46-48). Sin embargo, no está claro cómo afecta el modo de estimulación a la actividad eléctrica de ráfagas de las vías del dolor. Se reconocen tres vías que procesan el dolor: dos vías ascendentes que evocan dolor y una descendente que lo inhibe (figura 9). Figura 9. Vías ascendentes y descendentes del dolor Referencia 50. (Tomado de De Ridder, D; Vanneste, Sven. Burst and tonic spinal cord stimulation: Different and common brain mechanisms. Neuromodulation 2016; 19: 47-59) (modificada y extendida de Squire CL VPL S2 Tálamo Núcleo lenticular Mesencéfalo Puente Médula Láminas IV-V STT Anterior Cápsula interna Córtex somatosensorial Vía Lateral VPI Tálamo Núcleo lenticular Mesencéfalo Puente Médula Cápsula interna CL S2 Lámina I STT Lateral Ínsula anterior PgACC PAG RVM dACC Vía Medial Vía descendente CL VPL S2 Tálamo Núcleo lenticular Mesencéfalo Puente Médula Láminas IV-V STT Anterior Cápsula interna Córtex somatosensorial Vía Lateral VPI Tálamo Núcleo lenticular Mesencéfalo Puente Médula Cápsula interna CL S2 Lámina I STT Lateral Ínsula anterior PgACC PAG RVM dACC Vía Medial Vía descendente Se han descrito dos vías ascendentes y una descendente inhibitoria. La vía ascendentes lateral procesa los componentes discriminatorios del dolor, mientras que la vía medial procesa los componentes motivacionales, afectivos y atencionales del dolor. La vía inhibitoria descendente suprime el dolor en curso. STT: tracto espinotalámico | VPL: núcleo ventral posterolateral del tálamo | VPI: núcleo ventral posteroinferior | PAG: sustancia gris periacueductal | VMpo: Núcleo ventromedial posterior | MDvc: núcleo mediodorsal | dACC: córtex cingulado anterior dorsal | pgACC: córtex cingulado anterior pregenual | RVM: médula ventromedial rostral CL VPL S2 Tálamo Núcleo lenticular Mesencéfalo Puente Médula Láminas IV-V STT Anterior Cápsula internaCórtex somatosensorial Vía Lateral VPI Tálamo Núcleo lenticular Mesencéfalo Puente Médula Cápsula interna CL S2 Lámina I STT Lateral Ínsula anterior PgACC PAG RVM dACC Vía Medial Vía descendente MECANISMOS DE ACCIÓN DE LA NEUROESTIMULACIÓN 95 • La vía ascendente medial codifica el componente motivacional/afectivo del dolor (la sensa- ción desagradable). Se activa por fibras C y conecta con el núcleo mediodorsal (MDvc) y ventral posterolateral (VPL) del tálamo. Desde ahí, cada una alcanza, respectivamente, el córtex cingulado anterior dorsal (dACC) y la ínsula anterior. • La vía ascendente lateral codifica el componente sensorial discriminatorio. Se activa por fi- bras C, Aδ y Aβ, y conecta con el núcleo VPL del tálamo, desde donde alcanza el córtex so- matosensorial y el área parietal (49). • La vía descendente inhibitoria suprime el dolor en curso. Implica al córtex cingulado ante- rior pregenual (pgACC) y rostral y conecta con la PAG. De ahí, la información se transmite a la periferia somatosensorial (49, 50). En la experiencia de dolor influye el contexto en el que se produce, como lo demuestra la analgesia por placebo, y por el hecho de que el dolor pue- de ser agradable o desagradable según la situación. El dolor agradable está mediado por la activación del sistema antinociceptivo, mientras que el desagradable se procesa a través del sistema medial del dolor (51, 52). En un estudio preliminar de neuroimagen funcional utilizando la localización del origen de la señal electroencefalográfica (EEG) en cinco pacientes, De Ridder demostró que la estimula- ción en ráfagas cambiaba de forma directa o indirecta la actividad en el córtex cingulado ante- rior (49), que está involucrado en el procesamiento de la atención prestada al dolor, así como de la sensación desagradable al mismo. El alivio del dolor producido por la SCS se debe a una combinación de mecanismos espi- nales y supraespinales. El efecto directo local de la estimulación en ráfagas sobre la mé- dula espinal solo se ha investigado en animales. Usando en estos los mismos parámetros de estimulación que se utilizan en humanos, tanto para la estimulación tónica como para la de ráfagas, se ha visto que la SCS en ráfagas es más eficaz que la SCS tónica para ate- nuar la nocicepción visceral (53). Tanto la SCS en ráfagas como la tónica suprimen las res- puestas de las neuronas lumbosacras a estímulos nocivos somáticos y viscerales. Sin em- bargo, la SCS en ráfagas tiene un efecto inhibitorio mayor en los estímulos nociceptivos somáticos en comparación con los estímulos viscerales. Como se ha repasado más arriba, múltiples parámetros de estimulación influyen en la intensidad de inhibición de la activi- dad neuronal, incluyendo el número de pulsos (frecuencia), anchura y amplitud de pulso. La carga por ráfaga se correlaciona tanto con una reducción de la tasa de descarga en las neuronas WDR como con la cantidad de neuronas que responden a la SCS en ráfagas (54). La SCS en ráfagas no aumenta la actividad espontánea de las neuronas en el núcleo graci- lis, al contrario que la SCS tónica. Es decir, no parece ejercer sus efectos a través de las vías funículo-lemniscales. En este sentido se ha visto que, en contraste con la estimula- ción tónica, la estimulación en ráfagas no ejerce sus efectos a través de la liberación de GABA (55). Esto sugiere que la estimulación en ráfagas podría ejercer sus efectos a través de un sistema de neurotransmisores diferente, lo que abre teóricamente la perspectiva de combinar la estimulación tónica y en ráfagas para verificar si los dos sistemas de estimu- lación podrían complementarse (49). Por tanto, dada la ausencia de diferencias en la vía lateral del dolor, se ha estudiado si la estimu- lación en ráfagas y la tónica comparten de hecho un mecanismo supraespinal antinociceptivo. NEUROESTIMULACIÓN EN EL TRATAMIENTO DEL DOLOR CRÓNICO 96 De Ridder, en una publicación posterior sobre los mismos pacientes del primer trabajo (45), ha propuesto que tanto la SCS en ráfagas como la tónica modulan la vía ascendente lateral (sistema de memoria aversiva contextual autorreferencial, vía PCC) y la vía descendente in- hibitoria (vía pgACC) (49). La SCS en ráfagas modula adicionalmente la vía medial, posible- mente mediante acción directa sobre las vías espino-talámicas, según se infiere indirecta- mente de la investigación animal (45, 49). Esto normalizaría el desbalance entre los impulsos dolorosos ascendentes que utilizan el sistema medial y la actividad inhibitoria descendente, lo que podría explicar, según los autores, los superiores resultados descritos para la SCS en ráfagas respecto de la estimulación tónica. Esta hipótesis debe ser comprobada con estu- dios funcionales de imagen con mayor número de pacientes. Según este estudio, la estimu- lación en ráfagas puede generar una supresión mayor del dolor que la estimulación tónica. La diferencia sugiere que la estimulación en ráfagas podría diferir de la tónica en sus meca- nismos supraespinales, pero ambos tipos de estimulación tienen efecto supresor del dolor, lo que podría deberse a una vía final común (45). En la figura 10 se representan las hipótesis de funcionamiento de la SCS tónica, HF y burst y sus diferencias (40). 7. Estimulación del ganglio de la raíz dorsal El ganglio de la raíz dorsal (GRD) juega un papel clave en el desarrollo y mantenimiento del dolor neuropático. Localizado entre cada nervio espinal y la médula espinal en la raíz dorsal, aloja los cuerpos celulares de todos los subtipos de neuronas sensoriales primarias, inclu- yendo las subpoblaciones de nociceptores (unidades Aδ y C) que no se exponen directa- mente a la terapia con SCS. Estos somas procesan y transmiten información sensorial desde la periferia hacia el SNC (56). Puesto que todas las señales dolorosas ascendentes desde la periferia deben transitar por el GRD, este es un objetivo óptimo para tratar el aumento del tráfico nociceptivo (57). 7.1 Estructura y función del ganglio de la raíz dorsal Hay varios tipos de neuronas en el GRD clasificadas según su tamaño y función. Las neuro- nas tipo A son grandes y responsables del tacto, vibración y propiocepción. Las tipo B son pequeñas y son responsables de la nocicepción. Su proporción es favorable a las tipo B en una relación de 71:29 (58). Se sabe ahora que, además de actuar como soporte metabólico de procesos periféricos, los cuerpos neuronales participan en el proceso de modulación sensorial al responder a ciertas moléculas y fabricar otras que regulan estos procesos. De- bido a este papel y a la accesibilidad anatómica, es una conocida diana en el tratamiento del dolor (59). 7.1.1 Neuronas y axones pseudounipolares Las neuronas del GRD son pseudounipolares porque tienen un axón que se divide en dos ra- mas separadas: una hacia la periferia, que forma el ramo espinal anterior, y otra que se dirige a la médula espinal, formando las raíces aferentes sensoriales dorsales y que se convierten MECANISMOS DE ACCIÓN DE LA NEUROESTIMULACIÓN 97 Linderoth B. Lecture: Spinal Cord Stimulation: Mechanisms of Action of Traditional and Novel Stimulation Algorithms: How much is known and what is merely hypothetic at present?. Adaptado de figura cortesía de Dr. Yun Guan (John Hopkins Univ). En Reunión del Grupo de Trabajo de Neuromodulación de la SED; 2016; Madrid. GRD: Ganglio de la Raíz dorsal Figura 10a. Hipótesis sobre los diferentes mecanismos de acción de la modalidad de estimulación Tónica W IEN Activación antidrómica de mecanismos espinales Fibra Aβ Fibra Aδ /C Activación ortodrómica de mecanismos supraespinales Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral MODULACIÓN DESCENDENTE: ACTIVADA (EJ. SEROTONINA) ACTIVIDAD NEURONAL DEL ASTA DORSAL: SUPRIMIDA Transmisión ascendente del dolor: Disminuida INHIBICIÓN DE LA RED SEGMENTARIA: ACTIVADA (GABA, ACH, CB, ETC.) Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Estímulos aferentesnociceptivos de alto umbral Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral GRD médula espinal A. SCS Tónica convencional - Intensidad de parestesia (activación de columna dorsal) B. SCS ALTA FRECUENCIA - Sin parestesia/intensidad subliminal (inhibición subumbral de las neuronas espinales) C. SCS en Ráfagas - Sin parestesia/intensidad subliminal (inhibición de las vías ascendentes del dolor) ? ? Neuromodulación con campo eléctrico débil Fibra Aβ Fibra Aδ /C Activación ortodrómica de mecanismos supraespinales Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Actividad neuronal del asta dorsal: SUPRIMIDA Transmisión ascendente del dolor: Disminuida Vía Lateral ? Vía Medial ? Vía Lateral GRD médula espinal Vía Lateral Neuromodulación con campo eléctrico débil Fibra Aβ Fibra Aδ /C Activación ortodrómica de mecanismos supraespinales Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Modulación Descendente: ? Actividad neuronal del asta dorsal: SUPRIMIDA Transmisión ascendente del dolor: Disminuida Vía Medial GRD médula espinal Vía Medial ? Modulación descendente: ? W IEN W IEN W IEN Activación antidrómica de mecanismos espinales Fibra Aβ Fibra Aδ /C Activación ortodrómica de mecanismos supraespinales Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral MODULACIÓN DESCENDENTE: ACTIVADA (EJ. SEROTONINA) ACTIVIDAD NEURONAL DEL ASTA DORSAL: SUPRIMIDA Transmisión ascendente del dolor: Disminuida INHIBICIÓN DE LA RED SEGMENTARIA: ACTIVADA (GABA, ACH, CB, ETC.) Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral GRD médula espinal A. SCS Tónica convencional - Intensidad de parestesia (activación de columna dorsal) B. SCS ALTA FRECUENCIA - Sin parestesia/intensidad subliminal (inhibición subumbral de las neuronas espinales) C. SCS en Ráfagas - Sin parestesia/intensidad subliminal (inhibición de las vías ascendentes del dolor) ? ? Neuromodulación con campo eléctrico débil Fibra Aβ Fibra Aδ /C Activación ortodrómica de mecanismos supraespinales Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Actividad neuronal del asta dorsal: SUPRIMIDA Transmisión ascendente del dolor: Disminuida Vía Lateral ? Vía Medial ? Vía Lateral GRD médula espinal Vía Lateral Neuromodulación con campo eléctrico débil Fibra Aβ Fibra Aδ /C Activación ortodrómica de mecanismos supraespinales Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Modulación Descendente: ? Actividad neuronal del asta dorsal: SUPRIMIDA Transmisión ascendente del dolor: Disminuida Vía Medial GRD médula espinal Vía Medial ? Modulación descendente: ? W IEN W IEN NEUROESTIMULACIÓN EN EL TRATAMIENTO DEL DOLOR CRÓNICO 98 Linderoth B. Lecture: Spinal Cord Stimulation: Mechanisms of Action of Traditional and Novel Stimulation Algorithms: How much is known and what is merely hypothetic at present?. Adaptado de figura cortesía de Dr. Yun Guan (John Hopkins Univ). En Reunión del Grupo de Trabajo de Neuromodulación de la SED; 2016; Madrid. Figura 10b. Hipótesis sobre los diferentes mecanismos de acción de la modalidad de Alta frecuencia (HF10) W IEN Activación antidrómica de mecanismos espinales Fibra Aβ Fibra Aδ /C Activación ortodrómica de mecanismos supraespinales Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral MODULACIÓN DESCENDENTE: ACTIVADA (EJ. SEROTONINA) ACTIVIDAD NEURONAL DEL ASTA DORSAL: SUPRIMIDA Transmisión ascendente del dolor: Disminuida INHIBICIÓN DE LA RED SEGMENTARIA: ACTIVADA (GABA, ACH, CB, ETC.) Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral GRD médula espinal A. SCS Tónica convencional - Intensidad de parestesia (activación de columna dorsal) B. SCS ALTA FRECUENCIA - Sin parestesia/intensidad subliminal (inhibición subumbral de las neuronas espinales) C. SCS en Ráfagas - Sin parestesia/intensidad subliminal (inhibición de las vías ascendentes del dolor) ? ? Neuromodulación con campo eléctrico débil Fibra Aβ Fibra Aδ /C Activación ortodrómica de mecanismos supraespinales Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Actividad neuronal del asta dorsal: SUPRIMIDA Transmisión ascendente del dolor: Disminuida Vía Lateral ? Vía Medial ? Vía Lateral GRD médula espinal Vía Lateral Neuromodulación con campo eléctrico débil Fibra Aβ Fibra Aδ /C Activación ortodrómica de mecanismos supraespinales Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Modulación Descendente: ? Actividad neuronal del asta dorsal: SUPRIMIDA Transmisión ascendente del dolor: Disminuida Vía Medial GRD médula espinal Vía Medial ? Modulación descendente: ? W IEN W IEN W IEN Activación antidrómica de mecanismos espinales Fibra Aβ Fibra Aδ /C Activación ortodrómica de mecanismos supraespinales Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral MODULACIÓN DESCENDENTE: ACTIVADA (EJ. SEROTONINA) ACTIVIDAD NEURONAL DEL ASTA DORSAL: SUPRIMIDA Transmisión ascendente del dolor: Disminuida INHIBICIÓN DE LA RED SEGMENTARIA: ACTIVADA (GABA, ACH, CB, ETC.) Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral GRD médula espinal A. SCS Tónica convencional - Intensidad de parestesia (activación de columna dorsal) B. SCS ALTA FRECUENCIA - Sin parestesia/intensidad subliminal (inhibición subumbral de las neuronas espinales) C. SCS en Ráfagas - Sin parestesia/intensidad subliminal (inhibición de las vías ascendentes del dolor) ? ? Neuromodulación con campo eléctrico débil Fibra Aβ Fibra Aδ /C Activación ortodrómica de mecanismos supraespinales Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Actividad neuronal del asta dorsal: SUPRIMIDA Transmisión ascendente del dolor: Disminuida Vía Lateral ? Vía Medial ? Vía Lateral GRD médula espinal Vía Lateral Neuromodulación con campo eléctrico débil Fibra Aβ Fibra Aδ /C Activación ortodrómica de mecanismos supraespinales Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Modulación Descendente: ? Actividad neuronal del asta dorsal: SUPRIMIDA Transmisión ascendente del dolor: Disminuida Vía Medial GRD médula espinal Vía Medial ? Modulación descendente: ? W IEN W IEN MECANISMOS DE ACCIÓN DE LA NEUROESTIMULACIÓN 99 Linderoth B. Lecture: Spinal Cord Stimulation: Mechanisms of Action of Traditional and Novel Stimulation Algorithms: How much is known and what is merely hypothetic at present?. Adaptado de figura cortesía de Dr. Yun Guan (John Hopkins Univ). En Reunión del Grupo de Trabajo de Neuromodulación de la SED; 2016; Madrid. Figura 10c. Hipótesis sobre los diferentes mecanismos de acción de la modalidad de Ráfagas (Burst) W IEN Activación antidrómica de mecanismos espinales Fibra Aβ Fibra Aδ /C Activación ortodrómica de mecanismos supraespinales Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral MODULACIÓN DESCENDENTE: ACTIVADA (EJ. SEROTONINA) ACTIVIDAD NEURONAL DEL ASTA DORSAL: SUPRIMIDA Transmisión ascendente del dolor: Disminuida INHIBICIÓN DE LA RED SEGMENTARIA: ACTIVADA (GABA, ACH, CB, ETC.) Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral GRD médula espinal A. SCS Tónica convencional - Intensidad de parestesia (activación de columna dorsal) B. SCS ALTA FRECUENCIA - Sin parestesia/intensidad subliminal (inhibición subumbral de las neuronas espinales) C. SCS en Ráfagas - Sin parestesia/intensidad subliminal (inhibición de las vías ascendentes del dolor) ? ? Neuromodulación con campo eléctrico débil Fibra Aβ Fibra Aδ /C Activación ortodrómica de mecanismos supraespinales Estímulos aferentes nociceptivos de alto umbral Actividad neuronal del asta dorsal:
Compartir