¿Fueron los submarinos alemanes los más avanzados tecnológicamente durante la Segunda Guerra Mundial?

Investigadores del Museo Jutland, especializado en guerra naval, ubicado en Thyboron, Dinamarca, descubrieron restos del muy particular submarino alemán U-3523.

El tipo XXI era un barco revolucionario en su tiempo y ha impulsado el desarrollo de las unidades submarinas en las principales Armadas desde la Segunda guerra mundial Un submarino del tipo XXI navega en superficie. Las formas del casco no sólo mejoraban sus prestaciones, sino que también hacían que la superficie reflejante del buque a las emisiones de los sonares fuera menor respecto a la de los tipos precedentes.

Un ejemplar del tipo XXI, acabado de botar en los astilleros AG Weser de Hamburgo.

Durante la segunda guerra mundial, Hitler se dio cuenta de que los U-Boote eran los medios bélicos más potentes de que disponía, a pesar de que las medidas anti-submarinas puestas a punto por los Aliados en 1943 habían ganado en eficacia y pusieron en dificultades al almirante Dönitz. Los U-Boote convencionales, como los del tipo VII, habían sido superados, y los del tipo XVII, con un sistema de propulsión a base de peróxido de hidrógeno, aún se hallaban en la fase inicial de perfeccionamiento; por tanto, Dönitz propuso la realización del tipo XXI que, con el casco y la superestructura muy logrados hidrodinámicamente, el sistema hidráulico de recarga de los tubos lanzatorpedos y el gran aumento de la capacidad eléctrica de las baterías, fue el precursor de los submarinos modernos. Si la producción de este nuevo buque se hubiera iniciado antes, quizá la guerra hubiera sido más larga; pero solo dos unidades se hicieron a la mar para misiones operativas durante los últimos días del conflicto y ninguna de ellas quiso atacar al enemigo por haber entrado en vigor el armisticio.

En julio de 1943, durante una entrevista con el Führer respecto al fracaso del programa de los U-Boot tipo XVII, el almirante Karl Dönitz reveló la existencia del proyecto de un submarino en que se estaba buscando mejorar los sistemas de propulsion existentes más que descubrir otros nuevos. Se trataba del Electro-Boot tipo XXI (y de la version costera más pequeña, el tipo XXIII), concebido como una solución provisional intermedia de los barcos dotados de motores diésel-eléctricos y snorkel, que solo habian logrado un éxito parcial, y los nuevos impulsores de turbina de vapor a ciclo cerrado tipo Walther.

Hitler se dio cuenta inmediatamente de las nuevas perspectivas que ofrecía esta unidad, y aunque Dönitz prometió que los primeros ejemplares estarían a punto en noviembre del año siguiente, prefirió que las oficinas Konstruktion-Amt de Albert Speer acelerasen el programa.

A pesar de contar con una mano de obra bastante modesta (un mínimo de operarios capacitados, unidos a una mano de obra inadecuada, cornpuesta por viejos, mujeres y niños), Speer consiguió superar un poco los tiempos previstos, recurriendo a métodos de producción modular: en efecto, las diferentes partes eran construidas en diversas acerias de Alemania, y luego se montaban en un astillero tan cualificado como el Blohm und Voss de Hamburgo.

Secciones prefabricadas de submarinos tipo XXI en los muelles de Hamburgo el año 1945

Como los barcos accionados por turbinas Waither, también los Electro-Boote de propulsion diésel-eléctrica fueron mejorados en lo que respecta a las prestaciones en inmersión, hasta el punto de que resultaron más veloces bajo el agua que en superficie (la velocidad de proyecto del tipo XXI era de 17,2 nudos en inmersión, es decir, el doble del tipo VII que iba a sustituir, y de 15,5 nudos en superficie), y esto se logró instalando una batería de triple capacidad.

La mayor disponibilidad de energía aumentaba el radio de acción del tipo XXI, que, con los motores eléctricos principales, podía navegar desde 60 horas a 5 nudos, hasta 1 a 17, mientras que con los motores diesel podía operar en cualquier lugar del Atlántico sin necesidad de aprovisionarse de combustible, tanto más por estar dotados de un frigorífico para mantener frescos los viveres. Además, los barcos llevaban dos motores eléctricos más pequeños (motores de acecho), que les permitian una marcha casi totalmente silenciosa a la velocidad máxima de 5 nudos.

Un U-Boot tipo XXI en la fase de contrucción en las instalaciones de Deschimag, de Bremen al terminar la segunda guerra mundial . Pueden verse claramente las partes prefabricadas.

Al inicio del conflicto, la Marina alemana habia encontrado dificultades con las espoletas de los torpedos y, a pesar de haberse resuelto, persitia el problema del tiempo excesivo (unos 10 minutos) para recargar los tubos después de un lanzamiento. El tipo XXI disponía de seis tubos lanzatorpedos a proa en lugar de los cuatro del tipo VII, y utilizaba un mecanismo hidráulico que permitia la total recarga en la mitad del tiempo requerido para la carga de un solo tubo en los modelos anteriores. Cada barco podia Ilevar un total de 24 torpedos: 6 en los tubos de lanzamiento y 18 preparados para la recarga.

Dado que la experiencia adquirida por las tripulaciones en el uso del tipo XXI era relativamente modesta, la potencial operatividad de los buques jamás fue alcanzada en su totalidad. En lo que respecta a la máxima profundidad, las pruebas de aceptación fueron realizadas hasta los 250 m, pero era evidente que podia alcanzar el doble, lo que le daría una considerable ventaja respecto a las medidas antisubmarinas de los aliados. Además, el tipo XXI podia ernerger muy rápidamente, en solo 18 segundos, poco rnás de la mitad del tiempo empleado por los tipos VII y IX. En definitiva, los Electro-Boote representaban un perfeccionamiento sustancial respecto a los anteriores proyectos y, con mucha probabilidad, si la Marina alernana hubiera podido disponer de un número suficiente en 1944, podria haber conseguido en la guerra submarina los mismos éxitos que durante los prirneros años del conflicto.

Esta maravilla de la ingeniería naval ~los denominados submarinos Tipo XXI~ en su época sofisticados aparatos que, dicen los expertos, de haber llegado a participar más de la Segunda Guerra Mundial, podrían haber tenido un gran peso en el devenir de las batallas navales.

Submarino alemán del Tipo XXI

Construidos para la Armada del Tercer Reich durante el último período de la Segunda Guerra, los submarinos Tipo XXI eran sumamente avanzados para la época, y su diseño marcó pautas para las embarcaciones sumergibles de generaciones ulteriores.

Tras una abultada pérdida de submarinos en 1943, la construcción de una nueva embarcación sumergible era urgente para el ejército alemán. Sin embargo, los Tipo XXI aún estaban en sus etapas iniciales y los ingenieros estimaban que los primeros podían entrar en servicio recién a fines de 1944.

Plano de un submarino Tipo XXI de la Armada nazi

La mejora fundamental en los submarinos Tipo XXI fue el aumento considerable de la capacidad de sus baterías, aproximadamente el triple que en el Tipo VII-C ("el caballo de batalla" de la Armada nazi). Esto les permitió una gran autonomía bajo el agua y redujo drásticamente el tiempo de navegación en la superficie o cerca de ella. Los Tipo XXI podían navegar sumergidos a unos 9,3 km/h durante dos o tres días antes de necesitar recargar las baterías. Un submarino convencional de la época apenas podía mantener un máximo de 24 horas en inmersión.

Submarino alemán Wilhelm Bauer, del Tipo XXI, similar al hallado hundido por investigadores del Museo Jutland.

A la vez, los Tipo XXI eran muy silenciosos, por lo que eran más difíciles de detectar cuando estaban sumergidos.

El diseño del casco ágil y "limpio" desde el punto de vista hidrodinámico permitía a los Tipo XXI una alta velocidad bajo el agua; de hecho, sumergido era más rápido que muchos buques de superficie.

Otro punto fuerte de los Tipo XXI era lo rápido que podían sumergirse (a lo que también contribuía la forma de su casco). Por eso habrían sido difíciles de perseguir y destruir.

Submarino alemán Wilhelm Bauer, del Tipo XXI, similar al hallado hundido por investigadores del Museo Jutland.

El nuevo diseño de sus cascos también redujo la posibilidad de detectarlos con radares marinos o aéreos. Si eso fue un objetivo deliberado o un beneficio que apareció sin haber sido buscado todavía se discute, señala Wikipedia.

Otro adelanto que tuvieron los Tipo XXI fue un sistema hidráulico de recarga de torpedos que permitía recargar los seis tubos lanzatorpedos de proa muy ágilmente. El Tipo XXI podía disparar 18 torpedos en menos de 20 minutos. Además contaba con un sonar pasivo muy sensible para su época.

El nuevo diseño de los Tipo XXI tenía una eslora total de 76,70 metros (9 metros más largo que el antiguo tipo VII-C), 5,60 metros de manga, 7,70 metros desde la cubierta hasta la quilla y un calado de 6,86 metros. La altura total desde la parte superior de la vela a la quilla era de 11,34 metros.

Sobre la cubierta se alzaba una torreta de forma hidrodinámica de 3,64 metros de altura, 2,40 metros de anchura y 14,7 metros de longitud, que servía de soporte a la torreta antiaérea de proa, al radar aéreo extensible, a un faro localizador aéreo o FPR (de 1,3 metro de altura y 80 cm de diámetro), al periscopio de navegación, al periscopio de ataque, a un radar aéreo y al snorkel (este último recubierto de un material absorbente de ondas de radar y con el detector aéreo).

FUENTES:

1. Hallan los restos de un rarísimo submarino nazi
2. http://u-historia.com
3. U-Boot - Wikipedia, la enciclopedia libre
4. http://worldwartwo.filminspector.com/2014/08/u-boats-scourge-of-seas.html
5. Submarinos alemanes (U-boote)
6. Submarinos Tipo XXI