Está claro que los fármacos de primera elección para el tratamiento del TDAH en la infancia y la adolescencia son los estimulantes. Estos fármacos son muy seguros cuando se controlan adecuadamente así que conviene tener una referencia del peso, la talla, la presión arterial y la frecuencia cardíaca antes de iniciar el tratamiento, por las repercusiones que estos fármacos pudieran tener sobre el crecimiento y desarrollo (en algunos casos reducen el apetito y la ingesta) y sobre las funciones ca