III.2. TRASTORNOS DE LOS DISTINTOS CAMPOS DEL EXAMEN CLÍNICO

III.2.1. La presentación

La semiología de la presentación, llamada igualmente de “inspección”, es muy enriquecedora para el psiquiatra experimentado y puede ser establecida desde la entrada del paciente en el consultorio o desde la introducción, en su casa, en visita a domicilio (Faure, 1966). Habrá de tomarse en cuenta el peinado, la forma de vestir, así como el aspecto del lugar en que vive. El paciente maniaco se muestra desaliñado, en un universo totalmente desordenado; el paciente esquizofrénico se viste de manera extraña, excéntrica, o incluso de manera muy descuidada en el plano de la higiene corporal y de indumentaria; su interior se encuentra en ocasiones impregnado de un desorden, de una dispersión y de un aspecto caótico que son la ilustración misma de la incoherencia que reina en su espíritu. La comparación entre un interior de paciente maniaco y un interior de paciente esquizofrénico es elocuente: bajo el aspecto de un mismo desorden aparente, en el primero de ellos es perceptible un desbordamiento vital incontrolable, en tanto que en el segundo se percibe un aspecto yerto y mortífero.

¿Qué es la semiología de la presentación?

La semiología de la presentación es muy enriquecedora para el psiquiatra experimentado y puede ser establecida desde la entrada del paciente en el consultorio o desde la introducción, en su casa, en visita a domicilio.
La semiología de la presentación se refiere a la forma en que el paciente se presenta en el consultorio, incluyendo su peinado, forma de vestir y aspecto del lugar en que vive.
La semiología de la presentación solo es relevante para pacientes con trastornos maníacos o esquizofrénicos.
a) Apenas a afirmativa I é verdadeira.
b) Apenas a afirmativa II é verdadeira.
c) Apenas a afirmativa III é verdadeira.
d) Apenas as afirmativas I e II são verdadeiras.
e) As afirmativas I, II e III são verdadeiras.