No sorprende descubrir que el cuerpo de la diosa acuática Atlatonan, así como lo de dos posibles diosas de las montañas sufrían el mismo tratamient...
No sorprende descubrir que el cuerpo de la diosa acuática Atlatonan, así como lo de dos posibles diosas de las montañas sufrían el mismo tratamiento ya que también se trataba de tlaloquetépictoton. Esta misma función se atestigua en época contemporánea respecto a los santuarios ubicados en las montañas. En los pueblos nahuas y totonacos de la sierra de Puebla aún se puede ver que al final de cada gran ceremonia, los objetos rituales y aún cargados de poder peligroso que se utilizan se depositan en la cumbre de una montaña llamada “Cerro Tláloc”. En cambio, los totonacos de San Agustín Atlihuacan depositan los restos de las ofrendas, la comida y los accesorios rituales en una cueva llena de agua, llamada Tláloc (Stresser-Péan, 2005: 112-113).
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