Sobrepasar en exceso los límites territoriales establecidos para cada género, siempre y cuando no sea que la mujer trabaje o que el hombre sea mayo...
Sobrepasar en exceso los límites territoriales establecidos para cada género, siempre y cuando no sea que la mujer trabaje o que el hombre sea mayor o esté enfermo, supone una transgresión de los patrones de conducta establecidos para cada género. No obstante, la severidad con la que se reprueba a la mujer callejera es mucho más rigurosa que la que se dirige al hombre casero que, fuera de las horas de trabajo, gusta quedarse en casa. Pero en tal caso el asunto está, al igual que hemos visto que ocurre con la mujer, en saber mantener un cierto equilibrio, ya que, si es hogareño pero sale de vez en cuando, evitará que sea considerado como: raro, huraño, poco sociable, etc., y por el contrario será calificado como ordenado, poco amigo de los bares, que no tiene vicios, tranquilo, etc. Hombre: Pues verás, qué te diría yo, a un hombre de su casa siem
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