En estos testimonios la idealización de la escuela moderna se hace evidente apelando a una pretendida coherencia lineal entre el proyecto político ...

En estos testimonios la idealización de la escuela moderna se hace evidente apelando a una pretendida coherencia lineal entre el proyecto político y su real efectivización en la cotidianeidad escolar. Esta asignación de sentido a lo escolar por parte de los entrevistados remite a mandato fundacional de la escuela que se añora y que es idealizado en los relatos analizados. Aquí, al igual que en algunos testimonios de los supervisores trabajados en el capítulo anterior, se podrían enmarcar en el conocimiento de los actores escolares acerca de los diferentes discursos que impregnan el ámbito educativo, cuyos fragmentos afloran en distintas situaciones, pero en especial en aquellas que se vinculan con el sentido que cada individuo otorga a la escuela y su función. En estos testimonios se alude a aquella lógica cívica (lógica política) encargada de formar al ciudadano y transmitir los valores republicanos y de construir un arco de solidaridades en una población heterogénea mediante la internalización de los símbolos patrios, como condición indispensable de la construcción de la nación. También se visualizan las expectativas que antaño fueran depositadas por la sociedad en la escuela en cuanto a una redistribución de los lugares sociales que remite a una lógica doméstica por la cuál la institución escolar debía promover el ascenso social (Frigerio, 1992, 1993, 1997; Filmus, 1996).