ada (c2 de Pearson) reveló que en el dominio psicomotor la relación entre ambas variables no fue significativa (p = .131), mientras que sí lo fue en los dominios sociomotores: cooperación (p < .001), oposición (p = .002), y cooperación-oposición (p < .001). En estos casos, se aplicó la prueba de residuos corregidos, cuyos resultados indicaron que: a) cuando el dominio era de cooperación, en las conductas verbales asociadas al pacto se produjeron más agresiones verbales (75.5%; p < .05), en las conductas motrices desajustadas se generaron más agresiones verbales (61.7%; p < .05), y en las conductas motrices perversas se originaron más agresiones mixtas (41.4%; p < .05); b) cuando el dominio era de oposición, en las conductas motrices desajustadas se generaron más agresiones físicas (50.0%; p < .05), y en las conductas motrices perversas se originaron más agresiones verbales (51.3 %; p < .05); y, c) cuando el dominio era de cooperación oposición, en las conductas verbales asociadas al pacto se produjeron más agresiones mixtas (70.9%; p < .05), en las conductas motrices desajustadas se generaron más agresiones verbales (43.0%; p< .05), y en las conductas motrices perversas se originaron más agresiones físicas (34.2%; p< .05).