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MÓDULO 2104. PSICOLOGÍA EN EL CAMPO DE LA SALUD 1 Para profundizar en este tipo de contenidos consulte la obra: Becoña, E., Vázquez, L.F. y Oblitas, A.L. (1995) Antecedentes y Desarrollo de la Psicología de la Salud. Revista de Psicología Contemporánea, Vol. 2. No. 1, pp. 4-15. México. El Manual Moderno. Lectura 1 Becoña, E., Vázquez, L.F. y Oblitas, A.L. (1995) Antecedentes y Desarrollo de la Psicología de la Salud. Revista de Psicología Contemporánea, Vol. 2. No. 1, pp. 4-15. México. El Manual Moderno. AANNTTEECCEEDDEENNTTEESS YY DDEESSAARRRROOLLLLOO DDEE LLAA PPSSIICCOOLLOOGGÍÍAA DDEE LLAA SSAALLUUDD La preocupación por la salud y la enfermedad ha sido una constante para el hombre, pues son cualidades inherentes a la naturaleza del ser humano y a su supervivencia. UU NN II DD AA DD II .. C O N C E P T O S B Á S I C O S D E L A P S I C O L O G Í A D E L A S A L U D En las primeras sociedades la enfermedad se debía a que los demonios u otras fuerzas espirituales tomaban posesión y controlaban a la persona. La recuperación requería que los espíritus malignos fueran exorcizados del cuerpo afligido. Los griegos estuvieron entre los primeros en comprender la enfermedad como fenómeno natural. El ejemplo paradigmático de esta medicina es la teoría hipocrática de los humores: la enfermedad surgía como consecuencia de un desequilibrio entre los humores que circulaban por el cuerpo. La recuperación conllevaba el buscar el equilibrio de los mismos. Durante la Edad Media la comprensión de la enfermedad se sustentó en términos espirituales. La violación de las leyes divinas desembocaba en enfermedad. En el Renacimiento, se retoman las explicaciones naturales de la enfermedad. El estudio de las matemáticas, química y física, la invención del microscopio, los trabajas de Morgagni en autopsia, los de Virchow en patología y los de Pasteur en bacteriología, preparan el camino para los avances médicos, siendo los cimientos de la medicina moderna (Laín, 1978). La salud de los individuos mejorará cuantitativa y cualitativamente con el desarrollo de la teoría del germen en el siglo XIX, así como con los avances en la inmunología, salud pública, patología y técnicas quirúrgicas. Las tasas de mortalidad declinaron sensiblemente en enfermedades tan conocidas como el cólera, fiebre tifoidea, escarlatina, etcétera. A lo largo del presente siglo, los avances en la medicina han sido, si cabe, todavía más decisivas con el desarrollo de fármacos (por ejemplo, la penicilina), vacunas y los avances espectaculares en las técnicas quirúrgicas y la tecnología médica. La importancia dada a la salud física ha ido en aumento, sobre todo a partir del decenio de 1950. Tradicionalmente los médicos han tenido la exclusiva en este campo, entendiendo la salud como algo que hay que conservar o curar frente a agresiones puntuales (accidentes, infecciones...) (Labrador, Muñoz y Cruzado, UNIDAD I CONCEPTOS BÁSICOS DE LA PSICOLOGÍA DE LA SALUD MÓDULO 2104. PSICOLOGÍA EN EL CAMPO DE LA SALUD 2 Para profundizar en este tipo de contenidos consulte la obra: Becoña, E., Vázquez, L.F. y Oblitas, A.L. (1995) Antecedentes y Desarrollo de la Psicología de la Salud. Revista de Psicología Contemporánea, Vol. 2. No. 1, pp. 4-15. México. El Manual Moderno. UNIDAD I CONCEPTOS BÁSICOS DE LA PSICOLOGÍA DE LA SALUD 1990), utilizando la cirugía y la farmacología como armas para cumplir dicho objetivo. Sin embargo, en las últimas décadas ha habido un giro en el modelo de salud: se Ie considera como algo que hay que desarrollar y no como algo a conservar. Tanto la cirugía como la farmacología son métodos ineficaces para encarar el reto (labores de tipo preventivo) que conlleva la nueva concepción de salud. Cuando las personas se refieren a la salud, generalmente piensan sólo en los aspectos físicos, raramente en los aspectos psicológicos y conductuales asociados también a la misma. Hoy también debemos considerar sus aspectos económicos. Por ejemplo, en 1991 los americanos gastaron más de 738 billones de dólares en cuidados de salud y en España, en 1990, 2,3 billones de pesetas. Definir la salud es difícil, Callaham (1977) decía que "como la mayor parte de los conceptos generales como paz, justicia y libertad, el de la salud presenta enormes dificultades en cuanto a su definición" (p. 25-26). Una de las definiciones de salud más extendida en nuestra sociedad es que "la salud es la ausencia de enfermedad". En 1974, la Organización Mundial de la Salud (O.M.S.) propuso una definición de salud en la que se contemplaban tres dimensiones: "la salud es el completo bienestar físico, mental y social y no simplemente la ausencia de dolencias o enfer- medades" (O.M.S., 1974). El problema de dicha definición radica en explicar qué es el bienestar de un individuo (Breslow, 1972; Fernández- Ballesteros y Carrobles, 1988; Santacreu, 1991; Seeman, 1989). Pronto, los psicólogos, una vez que comenzaron a realizar intervenciones clínicas, a partir de la Segunda Guerra Mundial, y conforme se iba consolidando el campo de la psicología clínica y de la salud mental, se percataron de que en ocasiones los problemas "mentales" tenían concomitantes de tipo físico. Así mismo, la medicina iba paulatinamente asumiendo esta idea, favoreciéndose con el tiempo el que se superase en parte la dicotomía físico-mental o mente-cuerpo planteada por Descartes (Gatchel, Baum y Krantz, 1989). La aparición de las técnicas de modificación de conducta y todo un movimiento psicológico a partir de la misma (Kazdin, 1978) permitieron en unos años este cambio y esta asunción que de- sembocaría en la aparición de la medicina comportamental y de la psicología de la salud. Hay factores que contribuyeron al interés por una aproximación teórica y dinámica más comprensiva que el tradicional modelo médico de enfermedad. Bishop (1994), en concreto, cita tres importantes hechos: 1) el cambio en la prevalencia de enfermedades infecciosas a enfermedades crónicas; 2) el costo elevado de los cuidados de salud; y, 3) un mayor énfasis en la calidad de vida. Cierto tipo de problemas, en concreto las enfermedades crónicas, debidas a causas múltiples (factores psicológicos, sociales, culturales y ambientales), requieren un manejo diferente al de los estados mórbidos agudos, cuya principal característica es la de ser producidas por agentes patógenos específicos. El modelo biomédico presenta numerosas lagunas en cuanto a la conceptuación de los estados crónicos. Este modelo asume que la enfermedad puede ser explicada en términos de variables biológicas mensurables; la conducta social no tiene cabida en el mismo o, en su extremo, que las anormalidades conductuales se reduzcan a procesos somáticos, biomédicos o neurofisiológicos. La filosofía inherente al modelo médico implica un reduccionismo (todos los fenómenos biológicos son reducibles a procesos bioquímicos básicos) y el mantenimiento del dualismo mente-cuerpo: los procesos somáticos y psicológicos se excluyen mutuamente y cuerpo y mente son dos entidades separadas (Friedman y DiMateo, 1989). Muchos teóricos han apoyado la idea de que es necesario un nuevo modelo si se quiere progresar en la comprensión y control de la enfermedad (Brody, 1973; Engel, 1977; Jasnoski y Schwartz, 1985). Así, Engel (1977) planteó un modelo alternativo al biomédico, el modelo biopsicosocial, y apoyó su alternativa en argumentos sólidos, aunque no describió con detalle el mismo. Hipotetizó la importancia de considerar los factores psicológicos, sociales y culturales junto a los biológicos como determinantes de la enfermedad y su tratamiento: "El modelo médico debe tener en cuenta al paciente, el contexto social en el que vive, y el sistema complementarioutilizado por la sociedad para tratar con los efectos perjudiciales de la enfermedad, esto es, el papel del médico y el sistema de cuidados de la salud" (p. 132) Salud y Comportamiento: en búsqueda de las causas de la salud y la enfermedad En la actualidad, existe mucha evidencia de que nuestra salud está profundamente influenciada por nuestra conducta, pensamientos y MÓDULO 2104. PSICOLOGÍA EN EL CAMPO DE LA SALUD 3 relaciones sociales. Nuestra conducta (hábitos saludables, buscar cuidados médicos, obedecer las recomendaciones de los médicos, etcétera) tiene un efecto inmenso en nuestra salud (Matarazzo, Weiss, Herd, Miller y Weiss, 1984). Por ejemplo, un hábito como el de fumar es el responsable de 12 a 15% de las muertes de los países avanzados, 30% de todos los cánceres, junto con una importante morbilidad (Center for Disease Control, 1991; Peto y López, 1994; U.S.D.H.H.S., 1989). Esto significa cifras de muertes tan elevadas como más de 400.000 muertos anuales por el tabaco en Estados Unidos o 44.000 en España y 14.000 en México (Becoña, 1994a). Los estados psicológicos influyen en nuestra salud. Nuestros sentimientos y emociones pueden tener efectos positivos o negativos en nuestro bienestar físico. Sentimientos de ser amados y apoyado por otros pueden ayudarnos a tratar con situaciones estresantes (Wallston, Alagna, DeVellis y DeVellis, 1983). Diversas intervenciones pueden reducir el dolor y sufrimiento experimentado tras una operación y acelerar el proceso de curación (Jonhson, 1984). El estado psicológico con más claros efectos negativos en nuestra salud es el estrés, habiéndose asociado a una gran variedad de efectos negativos sobre la salud, extendiéndose desde la enfermedad cardiaca coronaria hasta el cáncer y supresión del sistema inmunitario (Jemmott y Locke, 1984; Field, McCabe y Schneiderman, 1985; Labrador, 1992). La esperanza de vida ha aumentado de modo dramático. Mientras que en Estados Unidos era de 46 años para los hombres y 48 para las mujeres en 1900, en la actualidad es de 71 años para los hombres y 78 para las mujeres (National Center for Health Statistics, 1989); esto es, casi el doble. Este incremento de la expectativa de vida ha sido posible gracias a las mejoras en la salud pública y a los cuidados médicos, básicamente gracias a la reducción de la mortalidad infantil y de las enfermedades infecciosas (gripe, rubéola, polio...) a través de programas inmunitarios (Lancaster, 1990; Matare 770, 1984a). Todo esto ha producido, en contrapartida, un cambio en los patrones de mortalidad en este siglo en las sociedades avanzadas: las enfer- medades crónicas (por ejemplo, cáncer, enfermedad coronaria) han sustituido a las enfermedades infecciosas como principales causas de muerte, junto con accidentes debidos a comportamientos inadecuados (por ejemplo, muertes en accidentes de tráfico). Por ello, hoy podemos hablar de patógenos conductuales y de inmunógenos conductuales. Los patógenos conductuales son aquellas conductas que hacen a uno más susceptible a la enfermedad (Matarazzo, 1984a, 1984b). Por ejemplo, fumar, beber alcohol, etcétera, principales causas de muerte y factores de riesgo asociados. Los Inmunógenos conductuales son aquellas conductas que reducen el riesgo del sujeto a la enfermedad (Matarazzo, 1984b). Uno de los mejores ejemplos de inmunógenos conductuales nos lo proporciona un amplio estudio realizado en Estados Unidos (E.U.), con una muestra de 7000 personas seguidas a lo largo de nueve años y medio donde se encontró una asociación muy estrecha entre la longevidad y siete conductas de salud a los cinco años y medio (Belloc y Breslow, 1972; Belice, 1973) y a los nueve años y medio (Breslow y Enstrom, 1980) éstas eran: 1) dormir de 7 a 8 horas; 2) desayunar casi todos los días; 3) tres comidas al día, sin picar entre ellas; 4) mantener el peso corporal dentro de los límites normales; 5) practicar ejercicio físico regularmente; 6) uso moderado del alcohol o no beberlo; y, 7) no fumar. Las acciones de toda una colectividad, la sociedad, también influyen sobre nuestra salud. En nuestro entorno podemos encontrarnos con riesgos ambientales como son la contaminación del aire, agua y suelo, o sustancias tóxicas (insecticidas y productos químicos peligrosos) y radiaciones ' naturales o provocadas (Doll y Peto, 1989). Estos elementos encierran un potencial para matar, hacer daño y enfermar a los individuos. Por tanto, ejercen influencias significativas sobre la salud en comunidades enteras. Todo lo anterior ha desembocado en una idea hoy bien asumida de la necesidad de hacer prevención (prevención primaria) (Caplan, 1964), la cual consiste en adoptar medidas para prevenir la enfermedad en aquellas personas que actualmente gozan de buena salud. La prevención primaria implica dos estrategias (Fielding, 1978): 1) cambiar los hábitos negativos de salud de los sujetos (por ejemplo, fumar, beber, dieta) (Becoña, 1994a, 1994b; Oblitas, 1989), y 2) prevenir los hábitos inadecuados desarrollando en primer lugar hábitos positivos y animando a la gente adoptar los mismos (por ejemplo, programas de prevención de fumar entre los adolescentes) (Becoña, Palomares y García, 1994). Las conductas de salud son aquellas en las que toma parte un individuo, cuando goza de buena salud, con el propósito de prevenir la enfermedad (Kasl y Cobb, 1966). Éstas incluyen un amplio abanico de conductas, desde dejar de fumar, perder peso, hacer ejercicio, hasta comer Para profundizar en este tipo de contenidos consulte la obra: Becoña, E., Vázquez, L.F. y Oblitas, A.L. (1995) Antecedentes y Desarrollo de la Psicología de la Salud. Revista de Psicología Contemporánea, Vol. 2. No. 1, pp. 4-15. México. El Manual Moderno. UNIDAD I CONCEPTOS BÁSICOS DE LA PSICOLOGÍA DE LA SALUD MÓDULO 2104. PSICOLOGÍA EN EL CAMPO DE LA SALUD 4 adecuadamente. El concepto de conducta de salud contempla esfuerzos por reducir los patógenos conductuales y practicar las conductas que actúan como inmunógenos conductuales. Las conductas de salud no ocurren en un vacío. Para comprenderlas uno debe comprender los contextos en que ocurren. Este contexto comprende una constelación de factores personales, interpersonales, ambientales, institucionales, que incluyen aspectos como política pública, ambiente físico y social, prácticas institucionales e influencias interpersonales (Winett, King y Atman, 1989). El surgimiento de la Psicología de la Salud Los psicólogos se han interesado en cuestiones de salud desde los primeros años de nuestro siglo (Rodin y Stone, 1987; Stone, 1977). Algunos psicólogos (Stanley Hall en 1904 o William James en 1922) abordaron cuestiones de salud en sus escritos. No obstante, el interés profesional e investigador en esta área creció relativamente poco hasta el decenio de 1970, aunque. en la década de 1960 se comenzó a plantear la necesidad de intervenir en los servicios de salud (Schofield, 1969). Hasta finales de la década de 1970, no hubo un movimiento dentro de la psicología al que se le pudiese denominar psicología de la salud (Matarazzo, 1980; Stone, 1979). Un número de disciplinas de la psicología (clínica, social, experimental, fisiológica, etcétera), con un interés común en cuestiones relacionadas con la salud, se reunió en 1978 para formar la división de la psicología de la salud de la American Psychological Associaton (APA), naciendo así formal, institucional y profesionalmente la psicología de la salud. Desde su aparición formal hasta la actualidad, el crecimiento de la psicología de la salud ha sido asombroso (Adler y Matthews, 1994; Taylor, 1987). Hay varios hitos en este campo que van a marcar el futuro de la disciplina recién creada. En 1979 sale a la luz el primer libro sobre esta temática (Stone, Cohen y Adler,1979) titulado Health Psychology. En 1982 se publica la primera revista dedicada solamente a este tema, la Health Psychology. En 1983 se lleva a cabo una conferencia nacional sobre educación y entrenamiento de los psicólogos de la salud (Stone, 1983). ¿Por qué emerge la psicología de la salud como tal y en ese momento? Diversos factores de orden científico y relativos al cuidado de la salud han contribuido al nacimiento de la psicología de la salud (Matarazzo, 1980, 1982; Miller, 1983). En primer lugar, por el cambio en la concepción de los términos de salud y tener buena salud. Recuérdese que tradicionalmente la salud ha sido conceptuada como la ausencia de enfermedad. Sin embargo, más recientemente el concepto de salud ha sido redefinido en términos más positivos como un completo estado de bienestar físico, mental y social (Stone, 1979). Este cambio conceptual conlleva una visión holística de la salud que incorpora los aspectos psicológicos. En segundo lugar, paralelo al cambio de esta definición ha sido el cuestionamiento del modelo biomédico, modelo dominante en medicina. Téngase presente que en dicho modelo, basado en el reduccionismo y en el dualismo mente-cuerpo, se ha asentado la medicina moderna (Engel, 1977). Este modelo se focaliza en los aspectos físicos de la salud y la enfermedad e ignora los factores psicológicos y sociales. No cabe duda de que el modelo médico ha generado investigación, práctica médica y desarrollo de nuevas tecnologías, que han sido muy eficaces en la erradicación de las enfermedades mortales en el pasado. No obstante, y si cabe todavía más en la actualidad, el modelo médico por sí mismo ha desempeñado un pobre papel a la hora de justificar muchos fenómenos de la salud y la enfermedad. Además, distintos estudiosos han comenzado a abogar por un modelo nuevo, que no adopte una postura reduccionista y dualista de salud, que incorpore factores psicológicos y sociales a la comprensión y tratamiento de la enfermedad (Engel, 1977; Knowles, 1977; Lipowski, 1977). En tercer lugar, el cambio en los patrones de enfermedad. Antes de los avances espectaculares de la medicina en el siglo XX, la mayoría de las enfermedades mortales eran de tipo agudo o infeccioso (neumonía, gripe, tuberculosis, difteria...) (U.S. Department of Health, Education and Welfare, 1979). El descubrimiento de fármacos efectivos como antibióticos y vacunas, y la mejora de la tecnología médica contribuyó a erradicar el número de víctimas inherentes a estas enfermedades. La reducción en la incidencia de dichas enfermedades y el incremento en la longevidad ha dejado paso a las enfermedades crónicas. Quiere ello decir que la mayoría de estas enfermedades están relacionadas con nuestra conducta y son prevenibles. Nacemos con buena salud y enfermamos como resultado de una conducta y unas condiciones ambientales inadecuadas, corno Para profundizar en este tipo de contenidos consulte la obra: Becoña, E., Vázquez, L.F. y Oblitas, A.L. (1995) Antecedentes y Desarrollo de la Psicología de la Salud. Revista de Psicología Contemporánea, Vol. 2. No. 1, pp. 4-15. México. El Manual Moderno. UNIDAD I CONCEPTOS BÁSICOS DE LA PSICOLOGÍA DE LA SALUD MÓDULO 2104. PSICOLOGÍA EN EL CAMPO DE LA SALUD 5 afirma Knowles (1977). Fruto de ello, los factores psicológicos han pasado a un primer plano, ya que los principales problemas de salud de nuestro tiempo están estrechamente relacionados con nuestra conducta. En cuarto lugar, cuestiones de índole económica han jugado un papel determinante en la consideración de los factores psicológicos y conductuales en la salud. Los costos por cuidados de salud se han disparado. Por ejemplo, en E.U., en la actualidad, se destina para dichos cuidados 12% del PIB (Producto Nacional Bruto) y en España 7% en 1990. Para el año 2000 los estadounidenses calculan invertir 14% (Carmody y Matarazzo, 1991). Sin embargo, aunque los costos se han incrementado exageradamente, los estadounidenses no han experimentado una mejora de salud proporcional a los mismos (Knowles, 1977; Weiss, 1982). Además, una cantidad importante de los costos del cuidado de salud van destinados a reparar daños causados por hábitos y estilos de vida no saludables (Knowles, 1977; U.S. Department of Health, Education and Welfare, 1979). Por tanto, factores económicos junto con el cambio en los patrones de enfermedad han provocado un giro hacia medidas preventivas y, especialmente, en cambiar las conductas no saludables (Agras, 1982; Weiss, 1982). En quinto lugar, la madurez de la tecnología conductual ha contribuido de modo claro a la emergencia de la psicología de la salud en ese momento histórico (Agras, 1982), como un hecho casi natural al tener éxito en la salud mental y quedar a un paso la salud física que tiene clara rela- ción con los factores psicológicos y conductuales. Matarazzo (1980) definió la psicología de la, salud como: "El agregado de las contribuciones educativa, científica y profesional de la disciplina de la psicología para la promoción y mantenimiento de la salud, la prevención y tratamiento de la enfermedad, y la identificación de los correlatos etiológicos y diagnósticos de la salud, la enfermedad y disfunciones relacionadas" (p. 815). Esta definición ha sido ampliamente aceptada y apoyada por la división 38 de la APA denominada psicología de la salud. Aunque la psicología de la salud, tal y como la ha definido Matarazzo es una disciplina relativamente reciente, ya se han propuesto modelos para conceptuar el campo de la misma. Por ejemplo, Stone (1982) en su modelo enfatiza el concepto de sistema de salud y los problemas de interacción dentro de ese sistema. La psicología de la salud incluye un rango amplio de conductas humanas y estados psicológicos, los cuales influencian la salud física y son influenciados por la misma. En general, el campo de la psicología de la salud comprende varias áreas extensas (Matarazzo, 1980; Krantz, Grunberg y Baum, 1985; Rodin y Salovey, 1989), ocupándose de: 1) la promoción y mantenimiento de la salud; 2) prevención y tratamiento de la enfermedad; y, 3) factores asociados con el desarrollo de la enfermedad. Durante muchos años se ha discutido acerca del papel de los factores psicológicos y sociales en el desarrollo de la enfermedad (Carmody y Matarazzo, 1991; McMahon, 1976; McMahon y Hastrup, 1980). Gran parte de este trabajo se ha centrado en el concepto de estrés como un determinante de la salud física. Y, 4) la psicología de la salud está interesada, en general, en el sistema de cuidados de la salud y en la formulación de la política correspondiente. También, la psicología de la salud, cuando fue formulada, tenía como principales metas (Matarazzo, 1979): aplicar las contribuciones de la psicología como disciplina, al conocimiento de la salud y la enfermedad a través de la investigación básica y clínica y alentando la integración de la información biomédica sobre la salud y la enfermedad con el conocimiento psicológico; promover la educación y servicios de la psicología de la salud y la enfermedad; e, informar a la comunidad psicológica y biomédica, como al público en general, de los resultados de las actuales investigaciones y servicios que presta en esta área. Áreas relacionadas con la Psicología de la Salud Existen otras disciplinas, dentro y fuera de la psicología, que tratan cuestiones similares a las de la psicología de la salud. Esas áreas difieren de la psicología de la salud, pero también se solapan con ella. Son la medicina comportamental, salud comportamental, psicología clínica, medicina psicosomática, psicología médica, psicofisiología experimental, sociología médica y antropología médica. Medicina comportamental En 1973, Birk acuñaba el concepto de medicina comportamental. En un primer momento, este término se restringió a las técnicas de biofeedbackEn 1974, se crean los dos primeros centros de medicina comportamental: Para profundizar en este tipo de contenidos consulte la obra: Becoña, E., Vázquez, L.F. y Oblitas, A.L. (1995) Antecedentes y Desarrollo de la Psicología de la Salud. Revista de Psicología Contemporánea, Vol. 2. No. 1, pp. 4-15. México. El Manual Moderno. UNIDAD I CONCEPTOS BÁSICOS DE LA PSICOLOGÍA DE LA SALUD MÓDULO 2104. PSICOLOGÍA EN EL CAMPO DE LA SALUD 6 el Center for Behavioral Medicine de la Universidad de Pensilvania y el Laboratory for the Study of Behavioral Medicine de la Universidad de Stanford. La conferencia de Yale sobre medicina comportamental, celebrada en 1977, y la reunión del Instituto de Medicina de la Academia Nacional de Ciencias en 1978 (Schwartz y Weiss, 1978), sirvieron para concretar lo que se entendía por medicina comportamental: "La medicina comportamental es el campo interdisciplinario que se ocupa del desarrollo e integración del conocimiento y las técnicas, propios de las ciencias comportamental y biomédica, relacionados con la salud y la enfermedad, y de la aplicación de este conocimiento y estas técnicas a la prevención, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación" (Schwartz y Weiss, 1978, p. 250). En 1978 se fundan las dos primeras sociedades científicas de medicina comportamental: la Academy of Behavioral Medicine Research, en Washington, presidida por N.E. Millar y la Society of Behavioral Medicine, en Chicago, cuya presidencia recayó en S. Agras. Este mismo año hace acto de presencia la primera revista especializada en el campo, la Journal of Behavioral Medicine. Al año siguiente, en 1979, se publicaron los primeros libros sobre medicina comportamental (ej. Pomerleau y Brady, 1979; McNamara, 1979). Posteriormente, hay una eclosión en lo concerniente a las publicaciones. Los factores que han colaborado al desarrollo de la medicina comportamental han sido, según .Labrador, Muñoz y Cruzado (1990) los siguientes: 1) cambio en los patrones de mortalidad y morbilidad, pasándose de enfermedades infecciosas a enfermedades funcionales, trastornos asociados al tipo de vida y degenerativos; 2) la mayor parte de los retos actuales en el área de la salud tienen que ver con el diagnóstico y tratamiento de enfermedades crónicas, muy influenciadas por el estilo de vida de las personas (no ya de enfermedades agudas); 3) el hecho de que al trabajar de forma independiente los investigadores biomédicos y conductuales no han sido capaces de explicar satisfactoriamente por qué en igualdad de condiciones, según sus criterios, algunas personas enferman y otras no, o presentan distinto grado de enfermar; 4) la madurez alcanzada en la investigación de las ciencias sociales y conductuales, tanto en sus desarrollos como .en sus logros, así como los avances en epidemiología conductual; 5) el interés que progresivamente se ha despertado por los temas de prevención de enfermedades, salud pública o "salud comportamental", en parte provocado por el drástico incremento en los costos de los cuidados médicos; 6) el resurgir y rápido desarrollo de la psicología médica, que ha añadido una dimensión de aplicación clínica de la que carecía la medicina psicosomática; y, 7) la evidencia de la importancia de los factores conductuales en la salud y en la enfermedad a partir tanto de estudios clínicos como epidemiológicos y experimentales. La medicina comportamental contempla como objetivos básicos (Collins, Rici y Burkett, 1981; Gentry 1984): 1) intervención directa; 2) entrenar a los profesionales de la salud para que mejoren sus intervenciones; 3) entrenar a los pacientes para que sigan adecuadamente lo prescrito por el médico; 4) modificación de patrones de conducta para la prevención de enfermedades; y, 5) diseñar nuevas estrategias de intervención. Aunque inicialmente las técnicas utilizadas se limitaron a los procedimientos de biofeedback, pronto se aplicaron todos los métodos de la modificación de conducta, aunque con un predominio de aquellas intervenciones (relajación, técnicas de biofeedback) cuya finalidad estriba en modificar las respuestas fisiológicas. En los últimos años se aprecia por parte de varios autores la utilización indistinta de medicina comportamental y psicología de la salud (ej. Blanchard, 1994; Phares, 1992) para referirse a lo mismo. Realmente, diferenciar en la actualidad una de la otra es difícil y poco útil desde la perspectiva del psicólogo que trabaja en el campo de la salud. Unos y otros, aunque tengan denominaciones distintas, hacen lo mismo. Salud comportamental Según Matarazzo (1980), la definición de medicina comportamental acordada en 1978 no hacía hincapié en el mantenimiento de la salud y la prevención de la enfermedad. Para subsanar esta deficiencia, él propone una subespecialidad, salud comportamental, cuyo objetivo debe ser la promoción de la salud y la prevención. La definición que propuso fue la siguiente: "La salud comportamental es un campo interdisciplinario dedicado a promocionar una filosofía de la salud que acentúe la responsabilidad del individuo en la aplicación del conocimiento y las técnicas de las ciencias comportamental y biomédica, para el mantenimiento de la salud y la prevención de la enfermedad y la disfunción, mediante una variedad de actividades autoiniciadas, individuales o compartidas" (Matarazzo, 1980, p. 813). Por tanto, la disciplina de salud comportamental se focaliza en el uso Para profundizar en este tipo de contenidos consulte la obra: Becoña, E., Vázquez, L.F. y Oblitas, A.L. (1995) Antecedentes y Desarrollo de la Psicología de la Salud. Revista de Psicología Contemporánea, Vol. 2. No. 1, pp. 4-15. México. El Manual Moderno. UNIDAD I CONCEPTOS BÁSICOS DE LA PSICOLOGÍA DE LA SALUD MÓDULO 2104. PSICOLOGÍA EN EL CAMPO DE LA SALUD 7 de técnicas conductuales para el mantenimiento de la salud y la prevención de la enfermedad entre individuos que actualmente gozan de buena salud (Matarazzo, 1980; Matarazzo y cols., 1984). Medicina psicosomática Cuando se habla de antecedentes de la psicología de la salud y la medicina comportamental suele citarse, entre otros, a la medicina psicosomática. Esta precede a la psicología de la salud, pero sus raíces se localizan en las ciencias biomédicas, no en la psicología. La medicina psicosomática resultó de los intentos, a principios de los años 1920, para identificar los factores psicológicos específicos que se creía que jugaban un papel fundamental en el desarrollo de enfermedades somáticas específicas. Esta disciplina fue definida por Weiner (1985) como "una aproximación a la enfermedad que se basa en la hipótesis y observación de que los factores sociales y psicológicos juegan un papel en la predisposición, desencadenamiento y mantenimiento de muchas enfermedades". Aunque se pueda considerar que la medicina psicosomática se solapa con la psicología de la salud, su historia y orientación son distintas. Inicialmente su desarrollo se fundamentó en el psicoanálisis y en los estudios de la psicofisiología (Lipowski, 1977; Schwartz y Weiss, 1977). De 1930 a 1950 se hicieron numerosos trabajos que versaban sobre el papel de la ansiedad y el estado emocional en el desarrollo y exacerbación de diversas enfermedades físicas. Los trabajos más representativos de dicho periodo fueron los de Franz Alexander y Harold Wolff. Sus investigaciones se basaron en su mayor parte en estudios de caso, lo cual dificultaba la generalización de las mismas (Feuerstein, Labbé y Kuczmierczyk, 1986). Además, la aproximación psicoanalítica, llevada a cabo por los profesionales desde un paradigma de la medicina psicosomática, hizo poco por desarrollar intervenciones específicas. Tradicionalmente el centro de interés de esta disciplina ha sido el papel de los factores psicológicosen el desarrollo de la enfermedad física, especialmente el de los estados emocionales y el estrés. Sin embargo, hasta hace relativamente poco, sólo se le prestó atención a un grupo reducido de enfermedades (úlceras, asma, colitis y artritis reumatoide), que se pensaba que estaban influidas por factores emocionales específicos y por el estrés (Lipowski, 1977). En la actualidad, se ha ampliado el abanico de trastornos, incluyendo los factores psicológicos en la etiología y el curso de casi todas las enfermedades (Adler, Cohen y Stone, 1979; Fuentenebro, Santos, Agud y Dios, 1990; Lipowski, 1977; Schwartz y Weiss, 1977). Psicología médica El significado de este término varía según donde se utilice. En Inglaterra, la psicología médica es sinónimo de psiquiatría, como ocurre de modo semejante en España. Sin embargo, en E.U. es una subespecialidad de la psicología clínica, que se caracteriza por la aplicación de métodos psicológicos clínicos a los problemas de enfermedad física (Bishop, 1994). Una definición de un manual castellano sobre psicología médica es "abarca todos los conocimientos de psicología útiles para el ejercicio de la medicina integral, particularmente los conocimientos sobre la personalidad del enfermo, la relación médico-enfermo, la personalidad del médico, el diagnóstico personal y comprensivo y los procedimientos de curación psicológica o psicoterapia" (Alonso-Fernández, 1978, p. 15). Hoy se puede afirmar que cuando quienes dicen que hacen psicología médica son médicos caen en la confusión entre terminología científica y modelo teórico subyacente. Dado que es un término desafortunado, y por tanto confuso, está abocado a su total desaparición. Psicofisiología experimental La psicofisiología experimental tiene como objeto de estudio las bases fisiológicas de los procesos psicológicos. Es una disciplina que intenta explicar una variedad de procesos conductuales por la interacción de sus componentes psicológicos y biológicos. Las investigaciones hechas en este campo contribuyeron a mejorar la instrumentación y a la utilización de nuevas metodologías, que permitieron la exploración de las relaciones entre emoción, cognición y fisiología. Así mismo, estos trabajos aportaron descubrimientos empíricos sobre las bases psicofisiológicas de la emoción, motivación y cognición. El conocimiento de estas interacciones facilitó la comprensión y manejo de numerosos problemas de salud. A nivel clínico, todas las aportaciones mencionadas se tradujeron en el desarrollo de las técnicas de biofeedback las cuales han jugado un papel significativo en la estimulación del desarrollo de la psicología de la salud (Feuerstein y col., 1986). Para profundizar en este tipo de contenidos consulte la obra: Becoña, E., Vázquez, L.F. y Oblitas, A.L. (1995) Antecedentes y Desarrollo de la Psicología de la Salud. Revista de Psicología Contemporánea, Vol. 2. No. 1, pp. 4-15. México. El Manual Moderno. UNIDAD I CONCEPTOS BÁSICOS DE LA PSICOLOGÍA DE LA SALUD MÓDULO 2104. PSICOLOGÍA EN EL CAMPO DE LA SALUD 8 Psicología clínica La psicología clínica es claramente el tronco central de donde ha surgido posteriormente, dependiendo de la consideración o país en que nos encontremos, la subespecialidad o campo independiente de la psicología de la salud. Por ello, hoy más que dar una definición concreta de psicología clínica, la mayoría de los autores (ej. Hall y Marzillier, 1987; M. Phares, 1992) prefieren hablar de qué hacen los psicólogos clínicos para aprehender la realidad de los mismos, o hablan de la intervención de los psicólogos clínicos en el campo de la salud ( e j . Wallace, 1987), cuando no hay reconocimiento formal del psicólogo de la salud y sí del psicólogo clínico. Así para Hall y Marzillier (1987), "los psicólogos clínicos son los profesionales del cuidado de la salud que trabajan de manera predominante, aunque no exclusivamente, en el campo de la salud mental. Entre sus actividades principales están: a) evaluación psicológica, b) tratamiento psicológico, e c) investigación psicológica" (p. 1). Phares (1992) define la psicología clínica como "un campo que tiene como objetivo el estudio, diagnóstico y tratamiento de los problemas psicológicos, trastornos psicológicos o la conducta anormal" (p. 3). A continuación describe qué trata, qué técnicas utiliza, dónde trabaja; cómo se forma, etc., para circunscribir su campo. Lo que sí es cierto, es que cuando se hace una distinción explícitamente entre psicología clínica y psicología de la salud, o entre modificación de conducta y psicología de la salud, se aprecia que el campo de la salud mental queda para la psicología clínica (ej. trastornos de ansiedad, depresión, esquizofrenia, etc.), y los trastornos relacionados con la salud física (ej., asma, cáncer, artritis reumatoide, diabetes, etc.) para la psicología de la salud (cfr. Blanchard, 1994; Donker, 1991; Emmelkamp, 1994). Sociología médica Esta especialidad se desarrolló en los decenios de 1940 y 1950 (Oleson, 1975). Implica una variedad amplia de cuestiones relacionadas con los aspectos sociales de la salud y su cuidado. Para Bishop (1994) la sociología médica es: "La especialidad dentro de la sociología que estudia los aspectos sociales de la salud y la enfermedad" (p. 9). Comprende temas como: patrones sociales en la distribución de la enfermedad y la mortalidad, efectos del estrés social en la salud, respuestas sociales y culturales a la salud y la enfermedad, organización institucional del cuidado de la salud, etc. (Mechanic, 1978). La sociología médica, a veces también denominada sociología de la salud, se focal iza en los factores sociales que influencian la salud, mientras que la psicología de la salud se centra en los procesos psicológicos. Antropología médica La conceptuación del término antropología médica viene a ser similar para los distintos autores. Estudia los aspectos culturales de la salud y la enfermedad (Foster y Anderson, 1978; Miguel, 1980). En el pasado, los profesionales de este campo se interesaron por el estudio de cuestiones de salud en las sociedades tradicionales. En los últimos años, se ha dado un giro hacia el estudio y discusión de los aspectos culturales de la salud de la sociedad occidental (Foster y Anderson, 1978). La antropología médica y la psicología de la salud difieren en la orientación y centro de interés. La antropología médica hace hincapié en los aspectos culturales de la salud y cómo la gente dentro de una cultura comprende las cuestiones de salud como un reflejo de su cultura en su totalidad. La antropología médica hace hincapié en la comparación transcultural de los sistemas de curación y creencias acerca de la salud. Los psicólogos de la salud reconocen la importancia de la cultura en cómo los sujetos manejan los asuntos de salud, pero se interesan más por las creencias individuales de salud y los patrones de salud relacionados con la conducta. En la tabla 1 presentamos un cuadro resumen de las definiciones de los campos o especialidades relacionadas con la psicología de la salud analizados, en donde también hemos incluido los de medicina preventiva (Piédrola, 1988) y educación para la salud (Green, 1973). Conclusión En conclusión, hoy podemos afirmar que las diferencias son difusas entre medicina comportamental y psicología de la salud. Aunque hace unos años podía afirmarse claramente que la psicología de la salud representaba la contribución específica de la psicología a la medicina comportamental, hoy esto ya no es así (Blanchard, 1994). La distinción fundamental entre ambas es la aproximación interdisciplinaria a la salud y la enfermedad adoptada por Para profundizar en este tipo de contenidos consulte la obra: Becoña, E., Vázquez, L.F. y Oblitas, A.L. (1995) Antecedentes y Desarrollo de la Psicología de la Salud. Revista de Psicología Contemporánea,Vol. 2. No. 1, pp. 4-15. México. El Manual Moderno. UNIDAD I CONCEPTOS BÁSICOS DE LA PSICOLOGÍA DE LA SALUD MÓDULO 2104. PSICOLOGÍA EN EL CAMPO DE LA SALUD 9 la medicina comportamental comparada con la aproximación de disciplina específica de la psicología de la salud (Feuerstein y col., 1986). La medicina comportamental se preocupa fundamentalmente por el tratamiento y rehabilitación (tiene más interés en los aspectos de enfermedad que en los de salud), es decir, la intervención es de tipo curativo. La psicología de la salud tiene como objetivo prioritario la prevención, dirigiendo sus intervenciones a la modificación de los hábitos y estilos de vida inadecuados de los individuos. La psicología de la salud resultó del movimiento de la medicina comportamental y se distingue de la misma y de la salud comportamental por el énfasis en una perspectiva psicológica, además de la ya comentada no interdisciplinariedad. Sin embargo, a pesar de que en la literatura existen innumerables distinciones conceptuales sobre ambos términos (Matarazzo, 1980; Taylor, 1986; Santacreu,1991; Serafino, 1990), la práctica de los psicólogos de la salud en contextos clínicos pronto solapó la medicina comportamental y la psicología de la salud y, hoy, como ya hemos apuntado, en aquellos países en donde existe claramente delimitado el papel del psicólogo de la salud se ha ido imponiendo este término, coincidiendo las mismas aplicaciones para la persona que trabaja en medicina comportamental y en psicología de la salud. Para profundizar en este tipo de contenidos consulte la obra: Becoña, E., Vázquez, L.F. y Oblitas, A.L. (1995) Antecedentes y Desarrollo de la Psicología de la Salud. Revista de Psicología Contemporánea, Vol. 2. No. 1, pp. 4-15. México. El Manual Moderno. T A B L A N o . 1 DEFINICIÓN DE DISTINTAS RAMAS QUE ESTUDIAN LA SALUD Psicología de la salud. Es el agregado de las contribuciones educativa, científica y profesional de la disciplina de la psicología para la promoción y el mantenimiento de la salud, la prevención y tratamiento de la enfermedad, y la identificación de los correlatos etiológicos y diagnósticos de la salud, la enfermedad y disfunciones relacionadas. Medicina comportamental. Un campo interdisciplinario que aplica las teorías y técnicas de las ciencias conductuales para el tratamiento y prevención de la enfermedad. Salud comportamental. Un campo interdisciplinario que se focaliza conductualmente promoviendo buenos hábitos de salud y previniendo la enfermedad entre los que actualmente gozan de buena salud. Medicina psicosomática. Es una aproximación a la enfermedad que se basa en la hipótesis y observación de que los factores sociales y psicológicos juegan un papel en la predisposición, desencadenamiento y mantenimiento de muchas enfermedades. Psicología médica. Abarca todos los conocimientos de psicología útiles para el ejercicio de la medicina integral, particularmente los conocimientos sobre la personalidad del enfermo, la relación médico-enfermo, la personalidad del médico, el diagnóstico personal y comprensivo y los procedimientos de curación psicológica o psicoterapia. Psicofisiología experimental. Su objeto de estudio son las bases fisiológicas de los procesos psicológicos. Psicología clínica. Un campo que tiene como objetivo el estudio, diagnóstico y tratamiento de los problemas psicológicas, trastornos psicológicos o la conducta anormal. Sociología médica. La especialidad dentro de la sociología que estudia los aspectos sociales de la salud y la enfermedad. Antropología médica. La especialidad dentro de la antropología que estudia los aspectos culturales de la salud y la enfermedad. Medicina preventiva. Se ocupa de impedir, en el individuo, familia o grupos de población, la aparición, desarrollo y prolongación de las enfermedades transmisibles y no transmisibles, manteniendo y promoviendo la salud, por el diagnóstico, tratamiento precoz y rehabilitación, así como evitando y limitando la invalidez que aquellos pueden ocasionar. Educación para la salud. Un proceso cuyas dimensiones Intelectual, psicológica y social se relacionan con actividades que incrementan las capacidades de las personas para tomar decisiones bien informadas que afectan a su bienestar personal, familiar y comunitario. Fuente: Alonso-Fernández (1978); Bishop (1994); Green (1973); Matarazzo (1980); Phares (1992); Piédrola (1988); Weiner (1985). UNIDAD I CONCEPTOS BÁSICOS DE LA PSICOLOGÍA DE LA SALUD
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