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UNIVERSIDAD NACIONAL 
AUTONÓMA DE MÉXICO 
 
Facultad de Ciencias Políticas y Sociales 
 
 
 
 
LA NOTA ROJA, 
EL APASIONANTE Y COMPLEJO TRABAJO DE UN “11”. 
UN REPORTE DE EXPERIENCIA LABORAL. 
 
T E S I N A 
QUE PARA OBTENER EL TITULO DE LICENCIADO EN 
CIENCIAS DE LA COMUNICACIÓN 
PRESENTA: 
 
 JOSÉ MANUEL SEBREROS MARTÍN DEL CAMPO 
 
 ASESORA: DRA. FRANCISCA ROBLES 
 
 
CIUDAD UNIVERSITARIA, JUNIO 2012 
 
 
 
 
 
 
 
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
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respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
 
 
ÍNDICE 
 
Introducción 1 
Capítulo 1. La labor periodística y los géneros 6 
1.1. La noticia 8 
1.1.2 Nota informativa 9 
1.2. La crónica 11 
1.3. La entrevista 12 
1.4. El reportero 13 
1.4.1 Cualidades del reportero 14 
1.5. La ética periodística 15 
 
 
 
 
 
Capítulo 2. La nota roja 19 
2.1. Definición e historia 21 
2.2. Fuentes 25 
2.3. Marco legal para la cobertura de casos 
de seguridad 26 
2.4. Entre el deber ser y la realidad 29 
2.5. Función social de la nota roja 34 
 
 
 
 
 
 
 
 
Capítulo 3. Caso Metro Toluca. 
Experiencia personal 39 
3.1. El proceso de auxiliar a reportero 41 
3.2. Estructura de Grupo Reforma 43 
3.3. Origen y el Metro Toluca 44 
3.4. Los casos más relevantes 46 
3.4.1. Desastres naturales 50 
3.4.2. Atenco, Kalimba y los presuntos 54 
3.4.3. El primer y el último muerto 58 
 
Conclusiones 61 
 
 
Fuentes 67 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Dedicado a mis ángeles que me apoyan desde otro plano: 
 
 
 
A mi madre María Magdalena, porque en tan solo 13 años forjó lo que hoy soy. 
 
 
A mi abuelita Susana, por su apoyo para que no claudicara en la misión. 
 
 
A mi abuelita María, porque me enseñó que hay que luchar hasta el final. 
 
 
A mi abuelito Manuel, porque de él aprendí que un sinaloense no se raja. 
 
 
A mi tío Armando, por las ganas de vivir a pesar de las turbulencias. 
 
 
 
 
 
 
 
 
Agradecimientos 
 
A mi querida UNAM por construir el profesional que hoy soy. 
 
A todos los que creyeron en mí, porque me dieron ánimos para seguir adelante. 
 
A quienes no creyeron en mí, porque su falta de fe me motivó a ser mejor. 
 
A mi padre Manuel, mis tíos Ricardo, Carlos, Carmen. 
 
A Griselda, Julio Arellano, Víctor, Viridiana, Belén, Julio Ortiz, Israel, Genaro, Saúl, 
Victoria, Aline, Lizbeth Hernández, Lizbeth Padilla, Pilar, Chino, Hugo, por los 
buenos tiempos. 
 
A Grupo Reforma, especialmente a Ricardo Elizondo, Arturo Sánchez, Raúl 
Narváez, Inti Vargas, Arturo Espinosa, Héctor López y Alejandro Pastrana por la 
oportunidad y la experiencia. 
 
A todos los paramédicos de Cruz Roja Toluca por su apoyo y amistad 
incondicional. 
 
A la Dra. Francisca Robles por la confianza, así como a las cuatro sinodales por la 
amabilidad de su tiempo.
 
1 
 
 
2 
 
Cuando comencé a estudiar la carrera de Ciencias de la Comunicación en esta 
Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, algunos profesores nos decían que la 
mejor escuela para ser periodista era ser reportero de nota roja. Pocos lo 
creíamos. 
 
Pero llegó la posibilidad, al menos seis años después, de involucrarme en esta 
fuente que para muchos es polémica, para otros es deleznable y hay para quienes 
simplemente es una de las mejores experiencias de vida y como profesional. 
 
En esta tesina compartiré mis experiencias como reportero de Seguridad y Justicia 
(nota roja) para el periódico Metro Toluca, de Grupo Reforma, durante casi tres 
años de mi vida laboral. 
 
Aunque es muy cierto ese dicho que referí en el primer párrafo, también lo es que 
pocos reporteros tienen la preparación necesaria, así como la formación y 
respaldo de sus medios para trabajar en esta fuente de manera digna y 
respetuosa. 
 
En las notas rojas se trabaja con lo más bajo del ser humano, homicidios, 
accidentes, violaciones, robos y cualquier delito que valga la pena ser mostrado en 
público. 
 
Precisamente esa parte del trabajo, nos obliga a tener relaciones muy de cerca 
con cuerpos de seguridad y emergencias, a los que se debe agradecer muchas 
facilidades para la realización del trabajo diario. 
 
Pero eso también implica mantener una relación distante de ellos, principalmente 
de los cuerpos policiacos, que en ocasiones acostumbran pedir al reportero que se 
infle una nota sobre una detención o que se omita algún caso que ponga en riesgo 
la reputación de alguna autoridad política. 
 
3 
 
Ese mismo desconocimiento o complicidad de algunos colegas conlleva a tener 
resultados de notas llenas de calificativos, prejuzgando a involucrados en algún 
incidente y que aún sin ser juzgados por la autoridad en la materia, desde un 
medio de comunicación se le señala, se le culpa y se le condena… aunque 
después resulte ser inocente de todo cargo. 
 
Este es un tema apasionante, porque se trabaja con sentimientos, con tristezas, 
duelos, enojos, odios, penas, satisfacciones, las cuales, uno como reportero – ser 
humano, debe procesar, tal vez compartir, pero inmediatamente dejarlas de lado 
para no afectarnos a la hora de escribir. 
 
La tesina se llama la historia de un 11, ese número que la mayoría de los equipos 
de emergencia selecciona para referirse a lo que otros, los afectados por nuestra 
labor, llaman “Los Buitres”, que somos los reporteros de nota roja. 
 
En el primer capítulo abordaré el tema del personaje no principal, pero sí central, 
para que esas historias lleguen a los lectores: el reportero. 
 
Ese reportero que se convierte en los ojos de la gente interesada en saber qué 
acontece día a día en calles, avenidas, carreteras, en todos esos temas peligrosos 
que en cualquier momento hemos encontrado en nuestro paso y que, 
desafortunadamente, es parte de la vida diaria. 
 
El reportero, quien se vuelve portavoz de la muerte, quien da fe de ese suceso con 
el que todos convivimos a diario y en riego, pero que algunos no logran eludirla y 
una parte de este trabajo es decirle al lector cómo se pudo evitar o por qué se 
presentó un deceso. 
 
La segunda parte de la labor del reportero es traducir esos hechos en un texto, 
vestido con fotografías, infografías, tablas, números, frases o mapas, que ayuden 
al lector a comprender mejor de lo que se le habla. 
 
4 
 
Como bien sabemos, esa traducción debe ser mediante los géneros periodísticos, 
para fines prácticos del diarismo y del espacio en un periódico, la seguridad 
pública y justicia se plasman en notas informativas, y crónicas, y mayoritariamente 
se emplea la entrevista, en cualquiera de sus modalidades, para obtener los datos 
de lo que se no ve o no se puede deducir. 
 
También en el primer capítulo recordaré los elementos básicos sobre estos 
géneros, pero más allá de volver a hablar de la pirámide invertida, el fin es hilar la 
teoría con lo hecho en la especialidad de este campo. 
 
En el segundo apartado tocaré el tema vertebral de este reporte, la nota roja, 
desde sus inicios, conocer un poco de la historia de esta fuente en México y el 
mundo, pasar por la línea del tiempo hasta llegar a nuestros días. 
 
Asimismo, compartir un poco sobre el marco teórico jurídicoque algunos 
estudiosos de la materia han propuesto para la dignificación de este trabajo y para 
el respeto de los involucrados en nuestros temas de exposición mediático. 
 
En nuestro país, el periodismo en general, pero especialmente el de nota roja, 
tiene una normativa legal, la cual, por diversas circunstancias, es sumamente 
complicado cumplir con ésta cuando, como reportero, se trabaja en campo aun 
cuando se quiera uno apegar lo más posible a la legalidad. 
En el tercer y último capítulo abordaré mi experiencia como reportero, contaré 
anécdotas y casos específicos de mi trabajo de “levantar muertos”, y buscar 
responder algunas preguntas que alumnos de la carrera siempre me hacen 
cuando acudo a un aula a platicar con ellos sobre esto. 
 
Desde la curiosidad que genera en la gente, en general, de saber cómo un 
reportero de nota roja se entera de los hechos y en ocasiones llega, inclusive, 
antes que ambulancias y policías, guardando lo más posible el acuerdo de 
discreción que se maneja con las fuentes y los contactos. 
 
5 
 
 
Utilizaré casos específicos que me tocaron reportear para ejemplificar los temas 
de los capítulos anteriores, ya que tuve la posibilidad de estar frente a cualquier 
desgracia imaginable, desde accidentes hasta homicidios llenos de odio y dolor, 
sin olvidar, para bien, algunos hechos positivos de justicia. 
 
Para entender, acercándome a una frase de Alex Grijelmo, mi apasionada defensa 
de la nota roja, incluiré en este tramo, la estructura de Grupo Reforma y Metro 
Toluca, para entender por qué, a pesar de muchas críticas, se trata del periódico 
de más prestigio en esta materia. 
 
La nota roja fue mi escuela, fue el comenzar en un camino sinuoso, difícil y 
arriesgado, que me dejó muchas satisfacciones, alegrías, enojos, y cualquier 
pasión posible, pero que me sirvió para poder desenvolverme con menos 
dificultades en coberturas de otro tipo como políticas o deportivas, ya que ninguna 
se asemeja con la complejidad de escribir sobre temas tan delicados. 
 
Espero que estas palabras aquí escritas inciten a los interesados o que tengan 
curiosidad sobre trabajar con lo rojo a acercarse y a no prejuzgar, ya que esto, una 
vez dentro, se vuelve una adicción, una (in) sana adicción a la adrenalina. 
 
6 
 
 
 
7 
 
Para elaborar un periódico de manera tradicional se necesitan profesionales de la 
comunicación, esto es, de los reporteros, a pesar de la moda de las redes 
sociales, donde cualquier persona puede emitir información, muchas veces falsa, 
 
En el caso de la nota roja, los periodistas necesitan echar mano de todos los 
géneros periodísticos para relatar esas historias difíciles, de temas sumamente 
complicados y delicados. 
 
Particularmente, en Grupo Reforma la labor del periodista es de suma importancia 
para el correcto desempeño en cualquiera de las áreas y fuentes que sean 
cubiertas. 
 
Por ello, cada año realizan al menos un taller de redacción, mediante el cual se 
perfecciona la calidad de la redacción, reporteo, investigación y documentación del 
aspirante a reportero, editor, auxiliar o colaborador. 
 
Desde un inicio se pregunta a los alumnos qué fuente les agrada, durante el taller, 
el cual yo cursé en enero y febrero de 2008, son enviados a cubrir las diferentes 
fuentes y acompañados de reporteros en activo para tener un primer acercamiento 
a la realidad. 
 
El taller también sirve para conocer la línea editorial del medio, y que los alumnos 
deben seguir durante las prácticas con los reporteros; enseñanza que se queda 
para quienes ingresan a trabajar con ellos. 
 
Si bien, durante años se ha mencionado que Grupo Reforma es un medio 
inclinado hacia la derecha y los empresarios, en mi experiencia personal debo 
compartir que en ningún momento se me pidió apoyar o atacar algún sector de la 
población o partido político, por lo que me quedo con la impresión que es un 
medio plural. 
 
 
8 
 
 
1.1 LA NOTICIA 
 
La definición más certera sobre esta palabra sería que se trata de la materia prima 
del trabajo periodístico, sin ella, simplemente no existiría con que elaborar un 
medio como un periódico. 
 
Técnicamente, se puede decir que una noticia “es todo aquel hecho novedoso que 
resulta de interés para los lectores a quienes se dirige el diario”.1 
 
Cabe resaltar, que la misma noticia se nutre de su propia materia prima, que es 
cada uno de los hechos novedosos, entre otras características mencionadas más 
adelante, que deben cumplir con ciertas cualidades para ser tomadas en 
consideración para armar una noticia y plasmarla en una nota informativa. 
 
Una noticia debe trascender al simple hecho, la mera acumulación de sucesos en 
sí no son una noticia, ésta debe ser preparada de forma veraz, oportuna, concisa y 
exacta por el reportero. 
 
La noticia se escribe para informar a las personas, por eso debe existir un receptor 
que la conozca, la asimile, sea de interés, la comente y, si es posible, genere una 
acción o reacción en la sociedad, para que la información haya cumplido con una 
función provechosa. 
 
Cada día, las redacciones exigen a sus empleados la obtención de las mejores 
noticias, las exclusivas, las que nadie más tenga, por ello, se dan algunas 
especificaciones sobre qué buscar. 
 
 
1 Grijelmo, Alex. El estilo del periodista. Ed. Taurus. México 2009. P.31 
 
9 
 
La actualidad es una de las características de la noticia, así como proximidad, 
consecuencia, conflicto, rareza, relevancia personal, suspenso, progreso, utilidad, 
entretenimiento y seguir patrones.2 
 
Dentro de este listado de cualidades de la noticia, según Grupo Reforma, existe 
una con la que la nota roja se identifica plenamente y debe estar presente en la 
mayor cantidad de textos noticiosos de este tipo. 
 
Se trata de generar emociones. Como se dijo previamente, los hechos de 
seguridad y justicia están sumamente ligados a las emociones humanas, desde 
las más bajas, hasta las más pasionales. 
 
De acuerdo al taller, esa información debe generar en el lector sentimientos de 
simpatía, coraje, tristeza, felicidad o compasión, lo cual en nota roja debe 
manejarse con extremo cuidado, a fin de no ofender la memoria de los muertos, la 
presunción de inocencia de los imputados o la sensibilidad de los familiares de 
cualquiera de los dos casos anteriores. 
 
1.1.2 NOTA INFORMATIVA 
 
Hablar de nota informativa nos remite, a quienes nos dedicamos a los medios de 
comunicación, a la pirámide invertida, el modelo a seguir para la redacción de una 
noticia. Con base en ella, lo más importante debe ir en la entrada, o lead, y debe 
responder a las preguntas qué, quién, cómo, cuándo, dónde, principalmente. 
 
Aunque hay quienes consideramos esta manera de elaborar notas como 
desfasada y aburrida, el reto del reportero se encuentra en atrapar al lector desde 
ese primer párrafo y que no deje de leer la nota hasta el último punto. 
 
 
2 Montesinos Débora y Álvarez Diana. Apuntes del Taller de Redacción de Grupo Reforma. 2008 
 
10 
 
En la mayoría de los medios impresos es la nota informativa la que más presencia 
tiene en las páginas, así, se convierte en un deber del reportero especializarse y 
dominar este género para, en algunas ocasiones, trabajar con otros géneros como 
la crónica y la entrevista. 
 
Una discusión eterna acerca de la escritura de noticias es la objetividad. En las 
aulas se sigue discutiendo sobre si el reportero, editor, redactor o cualquier otra 
persona involucrada en el proceso informativo, puede ser totalmente objetivo. 
 
En la nota roja, al trabajar con hechos llenos de sentimientos, como ya se refirió 
antes, es difícil para el reportero ser objetivo, lo cual no debe impedirle en ningún 
caso ser imparcial y mostrar las diferentes versiones de los involucrados.Sin embargo, más importante que la objetividad es la veracidad que gane un 
reportero con su trabajo y su nombre. De nada sirve cumplir con otros preceptos, 
si una nota no cumple con esa relación precisa de los hechos y la forma en que 
ocurrieron. 
 
Si un reportero no transmite fidedignamente todos los detalles en grado de 
importancia, ni confirma o verifica los datos, una nota jamás podrá ser imparcial y 
muchos menos objetiva. 
 
La objetividad es la máxima regla que debería alcanzar todo periodista; sin 
embargo, ésta se pierde desde el momento en que se selecciona qué reportear, 
cómo hacerlo y, principalmente, a la hora de jerarquizar los hechos. Empero, otra 
rama de la objetividad que siempre debe estar presente en todo trabajo es el no 
protagonismo del reportero. 
 
 
11 
 
“La objetividad es la relación neutra que hace un periodista de un hecho o de una 
opinión, sin que introduzca su comentario personal. Es en suma, relatar con 
exactitud el objeto que se observa”.3 
 
Para Grupo Reforma, especialmente en el caso de Metro, las cabezas, balazos y 
sumarios deben ser atractivos, de hecho en el producto popular se permite el 
jugueteo del lenguaje, con la finalidad de llamar el interés de los lectores a través 
del morbo. En el caso de la entrada, la misión de los reporteros está en resumir las 
cinco preguntas en 45 palabras, de acuerdo con su Manual de Estilo. 
 
1.2 LA CRÓNICA 
 
Con el resurgir del periodismo narrativo, aquél llamado por Tom Wolfe el ‘Nuevo 
Periodismo’, hay quienes aspiramos a ejercer esta modalidad, lo cual es 
sumamente complicado en el diarismo, aún cuando los editores den la oportunidad 
de trabajar con este género periodístico. 
 
La crónica “se trata de una relación de hechos, detalles, ambientes, organizados 
en orden cronológico. Es la narración de un acontecimiento de interés colectivo en 
la que el cronista se puede permitir comentarios y acotaciones y ejercer su estilo 
personal”.4 
 
El género se distingue porque además de contestar las cinco preguntas básicas 
de la nota informativa, de donde se deriva la crónica, pone un mayor resalte en 
detallar cómo ocurrieron los hechos y aderezar la información con otros aspectos 
como entorno, clima, gestos; cuestiones que más allá de aportar un dato noticioso 
visten un suceso. 
 
 
3 Del Río Reynaga, Julio. Teoría y práctica de los géneros periodísticos. Ed. Diana, México 1991. P.46 - 47 
4 Campbell, Federico. Periodismo escrito. Ed. Alfaguara. México, 2002. P. 65. 
 
12 
 
La crónica tiene el calificativo de ser el género más cercano a la literatura, pero no 
se debe abusar de querer hacer parecer la realidad en ficción, cualquier hecho 
cronicado debe tener el mismo rigor que la nota informativo, sólo debe 
diferenciarse por su narración. 
 
 
“Los relatos periodísticos son entonces productos que mezclan los recursos 
expresivos de la literatura y los formatos genéricos del periodismo, estas dos 
características lo definen y lo limitan. Por lo tanto, no todos los géneros 
periodísticos pueden presentarse como relatos, únicamente aquellos cuyo 
discurso dominante es la narración”.5 
 
En sucesos de seguridad pública, es complicado que el reportero esté en el lugar 
al momento del accidente; sin embargo, mediante la observación y el reporteo con 
testigos, con los involucrados en el hecho, o con las autoridades puede elaborar 
interesantes crónicas. Se emplea, principalmente, cuando ocurre un accidente de 
grandes magnitudes o algún rescate de los cuerpos de emergencia. 
 
1.3 LA ENTREVISTA 
 
Se trata de un género periodístico que tiene vida propia, pero a la vez sirve 
también para la obtención de datos y posteriormente transcribirlo en otro género. 
 
Para los fines de esta tesina, las entrevistas de semblanza y opinión difícilmente 
serán tomadas en cuenta, ya que en pocas ocasiones son utilizadas dentro de los 
medios de nota roja, a menos que sea un trabajo especial con algún funcionario 
de seguridad pública. 
 
 
5 Robles, Francisca. El relato periodístico testimonial. Perspectivas para su análisis. Tesis de Doctorado en 
Ciencias Políticas y Sociales, orientación en Ciencias de la Comunicación. FCPyS-UNAM, 2006. P 4. 
 
13 
 
La entrevista que más se utiliza es la noticiosa o de información, ésta en la “que se 
busca con el fin de obtener información noticiosa. Los datos que un entrevistado 
da al reportero pueden ser de diferente índole”.6 
 
Julio del Río la clasifica como una técnica para recabar datos, un vehículo auxiliar 
que puede complementar las otras formas de expresión periodística. 
 
1.4 EL REPORTERO 
 
Es como el soldado de infantería del periodismo, el que va hasta delante del grupo 
para obtener los datos informativos, redactarlos y dar la cara de la empresa ante 
las fuentes, en muchos casos. 
 
Desafortunadamente, a pesar de ser “el talachero”, el trabajo del reportero está 
poco valorado, y además de ser peligroso en México los sueldos son bajos y 
siempre es quien paga los platos cuando hay algún error. 
 
Un reporte de la organización Article 19, son 72 periodistas asesinados, 13 
desaparecidos y 41 medios han sufrido algún ataque armado o con explosivos en 
sus instalaciones, de acuerdo a sus estadísticas al 30 de julio de este año, lo que 
demuestra la peligrosidad para quienes nos dedicamos a esta maravillosa 
actividad.7 
 
Los párrafos anteriores sonarán llenos de subjetividad, pero esa idea de la 
importancia del reportero la reafirman algunos autores como Carlos Marín, quien 
señala: “Es el sujeto clave del mejor periodismo. Busca noticias, hace entrevistas, 
realiza reportajes. Vive con interés constante y sonante en lo que sea que entrañe 
atención pública; está enterado de los principales acontecimientos y tiene 
 
6 Marín Carlos, Manual de Periodismo. Ed. Grijalbo. México 2003. P.129 
7 Consulta en línea. www.article19.org Fecha: 3 de octubre de 2012. 
 
14 
 
frecuente contacto con los protagonistas y proveedores de información. El 
reportero es un cazador en permanente estado de alerta”. 
 
Para Grupo Reforma, el reportero es de vital importancia, ya que es representante 
de toda la editorial, por lo que se cuida desde la presentación hasta el 
comportamiento que éste tenga no solo en su vida profesional, sino también en su 
cotidianidad. 
 
“Las fuentes y los lectores que están familiarizados con la empresa esperan ya 
esa conducta profesional. Tenga presente que su imagen es la del Grupo y que 
muchas personas tendrán contacto con nuestros medios sólo a través de usted”.8 
Nosotros como reporteros debemos corresponder hacia las empresas que se 
preocupan por la profesionalización de la actividad, esto significa llevar un 
comportamiento ético y aportar también para la mejor realización del trabajo. 
 
1.4.1 CUALIDADES DEL REPORTERO 
 
Si bien es importante que un reportero se prepare en aulas universitarias para 
aprender la teoría de la comunicación, es de mayor importancia que conozca en la 
escuela otras cualidades como profesionalismo, ética, respeto y otros valores que, 
sin lugar a dudas, en la UNAM son enseñadas. 
 
En el caso de los reporteros de Grupo Reforma, deben seguir un código de ética y 
comportamiento determinado, como parte de su desempeño dentro de la empresa, 
tales como: 
 No involucrarse con las fuentes ni entrar en polémica. 
 Dejar de lado ideologías, prejuicios y estereotipos. 
 
 
 
8 Grupo Reforma, Manual de estilo. México. 2006. 
 
15 
 
 Son profesionales y se ven como profesionales (es requisito vestir de 
manera formal tanto dentro como fuera de la redacción). 
 No aceptan sobornos. 
 Guarda respeto a los lectores.9 
1.5 LA ÉTICA PERIODÍSTICA 
 
Todo periodista, independientemente delmedio en que labore, debe comportarse 
como un profesional, y aunque su empresa no tenga un código de ética, él mismo 
debería tener un marco de referencia para saber cómo actuar. 
 
Desafortunadamente, en los medios hay muchos colegas que no tienen este 
concepto en mente, por lo que mienten, se venden al mejor postor, en pocas 
palabras, tienen conductas que además de mancharlos a ellos, dañan su propia 
imagen y hacen quedar mal a la profesión. 
 
La ética y la moral se aprenden de manera cotidiana, con base en el trabajo diario 
y en la mejor preparación del periodista, éste sabrá afrontar su misión de la mejor 
manera posible, como señala la filosofía. 
 
“La virtud moral es el resultado del hábito, palabra que viene de (etike), que es una 
ligera variación de la palabra (ethos), que significa hábito. A partir de esto ni la 
virtud moral ni la intelectual se desarrollan en nosotros por naturaleza”.10 
 
El periodista trabaja con información, y como dice un dicho popular, la información 
es poder, por ello, quienes trabajamos en esta actividades debemos ser 
mesurados ante esto, un dato puede cambiar una vida, destruir una carrera o 
generar un malestar general. 
 
 
9 Montesinos Débora y Álvarez Diana. Op.Cit. 
10 Aristóteles, Ética Nicomaquea. Ed. Editores Mexicanos Unidos, México, 1999. P.32 
 
16 
 
Ya lo dice Alex Grijelmo en el Estilo del Periodista, “La ética condiciona también el 
estilo del periodista. Cuando se dominan el lenguaje y las estructuras 
periodísticas, y se conocen los efectos demoledores que alcanzan, ha de entrar en 
juego la ética como contrapeso”. 
 
Ello implica también no callar por no contravenir algún interés, el compromiso de 
los periodistas está exclusivamente con sus lectores, como lo afirmara el 
periodista italiano Indro Montanelli. 
 
En el caso de la nota roja, se trabaja con una fuente en la que se vive al filo del 
bien y el mal. Dado la magnitud de la mayoría de las coberturas siempre existirá 
una parte afectada por lo que se informa, ya sea una autoridad, una víctima o los 
familiares de ésta. 
En este sentido, la ética y la moral deben regir a los “11´s”, saber que se pueden 
trastocar fibras muy sensibles y dañar la memoria de alguna persona o su buen 
nombre, por eso el profesionalismo debe estar ante todo. 
 
Pero también para protección de uno mismo, un reportero y un medio no pueden 
acusar a nadie de ser culpable de algún delito, pero si por el motivo que sea algún 
reportero infla o miente en una información para quedar bien con alguna fuente se 
estará cometiendo una falta grave, que puede desembocar en líos legales, no sólo 
para el medio sino para el propio periodista. 
 
Los medios de comunicación se crearon como un contrapeso del poder; sin 
embargo, con el paso del tiempo y la acumulación de información, los propios 
medios y sus periodistas se han involucrado hasta conformar un nuevo poder, el 
cual muchas veces abusa al no tener qué lo regule. 
 
En un país como México en el que cada vez es más complicado ejercer la función 
periodística, mientras uno se comporte de la manera más profesional y ética se 
evitará problemas legales o de riesgo sobre la propia persona. 
 
17 
 
 
En conclusión, la nota roja aun cuando es denostada por muchos críticos del 
periodismo puro, debe seguir la misma metodología de las demás fuentes de 
información para contar con un producto periodístico de calidad y que responda a 
las necesidades informativas de los lectores. 
 
Las noticias surgen de hechos diversos que pueden tener una o varias conexiones 
con otros temas, en el caso de seguridad pública y justica, cualquier accidente o 
hecho trágico o violento tiene un fondo de origen, por lo que se recomienda al 
reportero investigar más allá del suceso aislado. 
 
Como ya se ha referido, la fuente policiaca es sumamente delicada por los temas 
que se manejan dentro de ella, es por ello que todo periodista debe estar 
consciente de los alcances legales que una nota puede alcanzar, tanto a nivel 
social, como en lo personal. 
 
En el siguiente capítulo veremos la esencia de la nota roja, desde su surgimiento 
hasta los diferentes avances que ha tenido con el paso del tiempo. Así como los 
componentes que la hacen tan polémica y los motivos por los que muchos lectores 
prefieren no tomarla en serio, al considerarla como amarillista. 
 
Del mismo modo, presentaré el marco teórico legal por el cual todo reportero, 
especialmente el de fuente policiaca, deber seguir para estar dentro del respeto a 
los derechos humanos de las víctimas y victimarios, como lo marca la ley en 
México. 
 
 
 
18 
 
 
 
 
 
 
 
HALLAN A 5 HALLAN A 5 
 
19 
 
, 
 
20 
 
Quien alguna vez haya acudido a un puesto de periódicos habrá visto abiertas de 
par en par las portadas y contraportadas donde resaltan los muertos y la sangre. 
Las notas rojas. 
 
Detrás de esta cobertura hay todo un proceso complejo y una historia interesante 
sobre el surgimiento de esta fuente, para algunas personas útil, para otros 
simplemente morbosa. 
 
En este capítulo abordaré la definición y de dónde surgen las coberturas de esa 
clase de eventos, así como el marco legal que, en teoría, rige a los medios y 
reporteros que nos dedicamos a esto. 
 
Derivado del concepto teórico legal de la nota roja veremos con ejemplos cómo 
hay una gran diferencia entre el deber ser y lo que en realidad sucede al presentar 
estas noticias. 
 
Finalmente, tocaré algunos conceptos que ayuden a determinar si es que la nota 
roja tiene una función social, una discusión polémica, ya que para muchos ni 
siquiera debe considerarse como periodístico, cuando en realidad estas 
coberturas, en el deber ser, son de las más completa en cuanto a técnicas y 
procedimientos de periodismo que pueden dejar en el lector una enseñanza o, al 
menos, una advertencia. 
 
 
 
 
 
 
 
 
21 
 
2.1 DEFINICIÓN E HISTORIA 
 
Escuchar el término nota roja de inmediato refiere a los hechos noticiosos 
relacionados con la seguridad pública, justicia y asuntos de índole policiaco y de 
emergencias, de donde el reportero toma la materia prima para reconstruir las 
historias que al día siguiente serán presentadas en los medios, algunas veces de 
manera escandalosa. 
 
Paradigmáticamente, la nota roja es considerada una gama periodística enfilada a 
los sectores populares, o de más baja clase social, de la ciudadanía, por lo que en 
cierto punto no se le ha dado, con el paso de los años, la profesionalización y el 
respeto que merece. 
 
Autores señalan que así ha sido desde las primeras apariciones de información 
sobre sucesos de este tipo. 
 
“El coloquialismo decimonónico nota roja califica el tratamiento popular de una 
temática periodística –la policiaca y judicial- que apareció de manera formal con la 
prensa industrial en México a lo largo del último cuarto del siglo XIX”.11 
 
Ante la falta de modernidad de las leyes que rigen la labor periodística, tal como la 
Ley de Imprenta que data de 1917, la nota roja, sus editores, reporteros y hasta 
los consumidores, han tomado licencias que no deberían ser, esto ha convertido a 
la nota roja en un medio de infoentretenimiento, que más allá de aportar datos 
útiles para la asimilación de la realidad que en ella se plasma, ha sido un foco de 
juicio público hacia la otra parte que está involucrada en las noticias. 
 
“Hay un trecho tortuoso de más de un siglo y cuarto, a través del cual la 
anacrónica nota roja ha prevalecido como reproductor de juicios y etiquetamientos 
 
11 Lara Klahr, Marco y Barata, Francesc. Nota(N) Roja. Ed. Debate. México 2009. P. 23. 
 
22 
 
sociales. En su función habitual de apéndice de la política criminal, aparte de 
legitimarla, ha sido canal masivo de exposición, juicio y condena de ciudadanos”.12De acuerdo con los autores mencionados arriba, en México se puede retroceder 
en el tiempo hasta la época de la Colonia cuando surgieron los primeros relatos de 
decisiones del Tribunal de la Santa Fe (Inquisición), difundidos para infundir miedo 
entre aquellos que aún se rehusaban a las nuevas creencias católicas por 
encimas de las paganas. 
Sociológicamente, lo que llamaba Octavio Paz como el culto a la muerte que 
tenemos en México permitió el auge de los relatos sobre muertos, homicidios, y 
demás, algunos reales y otros meras leyendas, posterior a la Independencia de 
México. 
 
Irma Lombardo, en su libro ‘De la opinión a la noticia. El surgimiento de los 
géneros informativos en México’13, señala que la primera relación entre la 
información policiaca y el término nota roja surgió en 1889 en el diario El Mercurio 
Occidental de Guadalajara, cuando Manuel Caballero imprimió los ejemplares en 
los que se contaba la historia de un asesino, Primitivo Ron, con una mano roja la 
cual fue marcada en el papel por un trabajador con tinta, para hacer creer que el 
propio homicida había firmado la nota, con sangre, de esa manera. 
 
En Estados Unidos, las primeras muestras de nota roja datan de años anteriores 
al caso del Mercurio, Lara y Barata explican que en 1833 fue The New York Sun el 
primer rotativo en darle más espacio a la noticia policial y sucesos criminales que 
se convirtieron en un éxito popular, ya que además los ejemplares valían un 
centavo (en México Metro cuesta 7 pesos y El Gráfico 3). 
 
 
 
12 Lara Klahr y Barata. Op. Cit. P. 23 
13 Lombardo, Irma. De la opinión a la noticia. El surgimiento de los géneros informativos en México. 
Ed.Kiosco. México, 1992. 
 
23 
 
Curiosamente, a finales del siglo XIX, el hombre al que hoy día se debe el premio 
a lo mejor del periodismo, Joseph Pulitzer, quien a través de su medio The New 
York World publicó una tira cómica llamada The Yellow Kid (El chico amarillo), 
pero a la vez, al enfrascarse en una lucha con otros medios por tener mayores 
ventas, Pulitzer y otros dueños adoptaron la técnica sensacionalista, en el inicio de 
los abusos en la noticia criminal. 
 
Esa época es recordada porque la prensa sensacionalista fue asociada a la tira 
cómica y de ahí nace el amarillismo, con lo que popularmente se define a quienes 
tomaron lo más bajo de la vida cotidiana para hacer melodramas baratos, 
falseando lo hechos o aumentando la gravedad de situaciones insignificantes. 
 
La Real Academia de la Lengua Española (RAE) remite el amarillismo al término 
sensacionalismo, el cual de acuerdo a su definición: “Tendencia a producir 
sensación, emoción o impresión, con noticias, etc”. 
 
Hasta cierto punto el concepto sensacionalismo no está lejos de la finalidad con la 
que surgió la nota roja; sin embargo, el problema se centra en la tergiversación 
que los periódicos y la televisión, principalmente, han hecho de dicho fin. 
 
Periodistas sin ética que han trasgredido la esencia referida anteriormente 
contribuyen a que el sensacionalismo sea malinterpretado y confundido con otro 
término que es el alarmismo, incluso uno de los referente de la nota policiaca es la 
revista Alarma, el cual es la muestra de lo más bajo dentro del periodismo. 
 
El alarmismo, indica la RAE es la “tendencia a propagar rumores sobre peligros 
imaginarios o exagerar los peligros reales”, lo cual también puede ser aplicado a 
otras fuentes periodísticas como la política, especialmente en tiempos de 
campañas electorales. 
 
 
 
24 
 
Fue precisamente ese alarmismo el que impulsó la prensa policiaca después del 
primer tercio del siglo XX, principalmente con los diarios Novedades, La Prensa y 
El Gráfico. 
 
“La crónica policiaca, por otra parte, no tardó en alcanzar gran importancia cuando 
los periódicos de mayor circulación procuraron atraer lectores a través de la 
información sobre asuntos de comisaría, muchas veces presentada en espacios 
amplios y con lujo de detalles”.14 
 
El referente mexicano es Eduardo Téllez Vargas, “El Güero”, reportero de policía, 
quien es el vivo ejemplo de lo poco profesionales que eran los medios en ese 
tiempo, que con la finalidad de obtener la nota trasgredían la ley a toda costa. 
 
Ejemplo de esto es la crónica del propio Téllez en el libro citado al pie, en el que 
narra cómo invadió la escena del crimen del ruso León Trotsky, inclusive se metió 
al quirófano disfrazado de médico para tener de primera mano los datos sobre el 
hecho. 
 
Desde 2006, con la llegada de Felipe Calderón a la presidencia de México, y su 
declaración de lucha frontal contra el crimen organizado, la prensa policiaca ha 
tenido un mayor auge por la cantidad de hechos criminales que todos los días se 
viven. 
 
Y aunque todos los días aparecen asesinados y hay actos que podrían ser 
considerados terroristas, la capacidad de asombro del reportero no se debe perder 
y parece que la del lector sigue y crece, porque hasta medios que no se 
involucraban en estas coberturas ahora lo hacen. 
 
 
 
14 Garmabella, José Ramón. El Güero Téllez, ¡Reportero de policía!. Ed. Debolsillo. México 2007. P. 10-11. 
 
25 
 
Nota roja, sensacionalista, amarillista o alarmista; lo cierto es que los crímenes ahí 
están y con no presentarlos no se ganaría nada, sólo sería un paliativo de engaño 
hacia la sociedad. Pero, el reto para los “11s” es presentar esa información sin 
convertirse en juez y parte. 
 
2.2 FUENTES 
 
Dentro de la cobertura policiaca, el reportero obtiene datos principalmente desde 
el lugar de los hechos, en ocasiones con los propios protagonistas o afectados por 
algún incidente. 
 
Sin embargo, es necesario, que no exclusivo, tomar en cuenta a las autoridades e 
instituciones oficiales, como las procuradurías estatales y los cuerpos de policía 
municipales y de las entidades, quienes tienen las versiones oficiales de los 
hechos. 
 
Cabe destacar que el periodista no debe quedarse únicamente con lo referido por 
los entes oficiales, ya que se entra en una dinámica de lucha de intereses, y en el 
caso de hechos violentos o delictivos, los gobiernos siempre buscarán maquillar 
las estadísticas con la finalidad de proteger la opinión pública. 
 
Los cuerpos de emergencia, como paramédicos y bomberos, se convierten en una 
gran fuente de información, ya que suelen ser organismos neutrales y que tienen 
cierto grado de protagonismo, por lo que la información que aportan es de primera 
mano. 
 
Aun así, cabe recordar que la máxima del periodismo es dudar de todo y se deben 
corroborar todos los datos, sin importar de donde hayan provenido, a fin de evitar 
imprecisiones o servir como emisores de información sesgada. 
 
 
26 
 
En el siguiente apartado explicaré cómo algunos estudiosos del tema de la 
seguridad pública y justicia y su cobertura periodística, plantean un marco legal 
mínimo para el buen trabajo de los medios sin caer en ninguno de los conceptos 
referidos, sino neutralmente. 
 
 
2.3 MARCO LEGAL PARA LA COBERTURA DE CASOS DE 
SEGURIDAD. 
 
Como todo lo que se mueve en este país el periodismo se rige por el marco legal 
que regula todo el actuar del Estado; por lo tanto, el periodismo no está exento de 
ello. 
 
En el caso de la nota roja es aún mayor, por la delicadeza de los temas que toca, 
principalmente en dos vertientes, en la presentación de los detenidos cuya 
información siempre debe ser cuidadosa de no prejuzgar a los presentados, 
acción que además es ilegal por parte de las autoridades. 
 
Y en el caso del ingrediente principal de lo que se muestra hoy día, los incidentes 
relacionados con muertes y pérdidas, casos en los que nunca se respeta el 
derecho a la privacidad de las personas y al respeto de la memoria de los difuntos. 
 
Todas estas fallas mencionadas tienen un común denominador,los vacios legales 
que existen en México, y que han pretendido remendar con nulos logros, ya que 
vemos a los medios continuar con su accionar, algunos de forma muy denigrante y 
otros buscando apegarse poco más a la ética. 
 
Los medios y los periodistas nos escudamos en el derecho a la libertad de 
expresión e información para hacer nuestro trabajo, lo cual es correcto si 
recordamos que todo derecho tiene un límite y es no afectar a terceras personas. 
 
27 
 
“Es inviolable la libertad de escribir y publicar escritos sobre cualquier materia. 
Ninguna ley ni autoridad puede establecer la previa censura, ni exigir fianza a los 
autores o impresores, ni coartar la liberta de imprenta, que no tiene más límites 
que el respeto a la vida privada, a la moral y a la paz pública”.15 
 
Aquí surge el primer tópico generador de dudas porque entre quienes trabajamos 
en la seguridad pública no logramos ponernos de acuerdo de hasta dónde llega la 
privacidad de un suceso ocurrido en un lugar público, una discusión que filósofos 
como Jürgen Habermas han manejado en sus escritos. 
 
Precisamente la Ley de Imprenta, promulgada en 1917, tan desfasada y 
anacrónica, refiere sobre los límites para la protección de la vida privada. 
 
“Toda manifestación o expresión maliciosa hecha (…) contra la memoria de un 
difunto con el propósito o intención de lastimar el honor o la pública estimación de 
los herederos o descendientes de aquél”.16 
 
El artículo 31 de la misma ley indica que los ataques a la vida privada serán 
castigados con ocho días a seis meses de prisión o con multas irrisorias de cinco 
a 50 pesos, por lo que es demasiado sencillo violar este reglamento y saldar una 
multa así. 
 
En cuanto a la exhibición de personas detenidas e inculpadas de haber cometido 
un delito, la Carta Magna nos señala en su Artículo 20, párrafo I del apartado B, 
sobre los imputados “a que se presuma su inocencia mientras no se declare su 
responsabilidad mediante sentencia emitida por el juez de la causa”. 
 
 
 
 
15 Artículo 7 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos 
16 Artículo 1, Fracción II de la Ley de Imprenta 
 
28 
 
Por lo tanto, ninguna persona puede ser presentada por los cuerpos de seguridad 
ante las cámaras de televisión y los reporteros, ya que esa acción está 
prejuzgando un acto que no ha sido calificado por la máxima autoridad de la 
materia. 
 
Sin embargo, es práctica común entre los medios de nota roja y las policías, 
principalmente municipales y estatales, el trabajo en común para informar sobre 
detenciones, violando una de las garantías individuales de los ciudadanos. 
 
Hay quienes validan este tipo de prácticas bajo el argumento que los delincuentes 
no pueden tener derechos, lo que es poco conocido es que cualquier ciudadano 
tiene protección de sus garantías individuales hasta que un juez determine lo 
contrario. 
 
Aun los asesinos o criminales confesos son inocentes en tanto no se lleve un 
juicio, se tenga un veredicto y se le dicte una sentencia. 
 
“La presunción de inocencia se ve reforzada por los derechos al honor y a la 
propia imagen que tienen los ciudadanos, y los detenidos, por el mero hecho de 
serlo, no los pierden; mientras un juez no considere lo contrario, su conflicto con la 
ley penal no devalúa sus garantías”.17 
 
Ahora bien, si los elementos de seguridad pública, por desconocimiento u omisión, 
no respetan los derechos de los detenidos, los periodistas tendríamos la 
obligación de detenernos a pensar sobre cómo abordar estos temas, toda vez que 
tampoco se trata de no dar a conocer algo si cumple con alguna de las 
características de noticias que se expresaron en el primer capítulo. 
 
 
 
17 Lara Klahr y Barata. Op. Cit. P. 99 
 
29 
 
Desafortunadamente, los medios de comunicación, cuya esencia debe ser de 
contrapoder, se han embriago de ese mismo poder que da la información y se 
convierten en juzgadores de los ciudadanos, sin importar si se conocen o no las 
causas de los acontecimientos. 
 
Federico Campbell afirma que tanto los jueces como los reporteros partimos de los 
hechos que nos presenta la parte acusadora, la diferencia es que el primero tiene 
la potestad para dar su opinión y los segundos deben ampliar cu campo de acción 
y confrontar todas las versiones posibles. 
 
A final de cuentas, como periodistas ejerciendo en un país peligroso y con bajas 
pagas, lo más preciado que tenemos es nuestro nombre, por lo que juzgar 
erróneamente a un imputado que sea inocente, terminará con nuestro honor y 
credibilidad que, dice Alma Guillermoprieto, ante los ataques de los demás lo 
único que tenemos es nuestro buen nombre. 
 
2.4 ENTRE EL DEBER SER Y LA REALIDAD 
 
Las reglas del juego son claras, el problema es que como muchas situaciones en 
México, las leyes sólo quedan en el papel y a la hora de la práctica se nos olvidan 
o las omitimos por conveniencia de conseguir un beneficio informativo para 
nuestro trabajo. 
 
Comenzaré este apartado, en el que pretendo ejemplificar las diferencias entre lo 
que se señala como el correcto desempeño de las coberturas de seguridad 
pública y lo que en realidad sucede, con la delincuencia organizada. 
 
Al ser un fenómeno nuevo, la prensa mexicana ha sido rebasada por la lucha 
contra el crimen, encabezada por Felipe Calderón. La cantidad de muertos que 
esto ha dejado, así como la violencia y su aumento para cada vez parecerse más 
al terrorismo sorprendió a los periodistas. 
 
30 
 
Los típicos asesinados a tiros pasó, con el avance de la lucha y las bajas de los 
diferentes cárteles, a desmembrados, descuartizados, carbonizados, en fin, una 
violencia tal que nunca nadie se imaginó podría llegar. 
 
Por tanto, más allá de las reglas referidas arriba para la cobertura de muertos, no 
existía un marco legal, o al menos ético, para abordar los hechos tan violentos de 
una forma objetiva y respetuosa de las víctimas, sin importar si eran “daños 
colaterales” o parte de las bandas. 
 
Uno de los principales debates entre los medios ha sido si al presentar los casos 
de forma descriptiva, detallando las muertes, difundiendo los mensajes que dejan 
sobre los cadáveres y mostrando las características de la pelea por las plazas, los 
periodistas nos convertimos en voceros del crimen organizado. 
 
El uso incorrecto del lenguaje ocasionó este pensamiento sobre ser voceros del 
crimen, la moda de los medios de adjetivar varias acciones y sustantivos con el 
prefijo narco (mantas, mensajes, guerra, lucha, corridos), así como el empleo de 
otros términos mal usados también, como encajuelados, encobijados, 
ensabanados, ejecutados, colgados, levantados y levantones, contribuyeron a 
exacerbar de más las actividades de los delincuentes. 
 
Fue hasta el 24 de marzo de 2011 que 715 medios del país firmaron un Acuerdo 
para la Cobertura Informativa de la Violencia, caracterizado por nueve acciones a 
tomar.18 
 
Entre los puntos destaca dejar de usar el lenguaje y terminología de los 
delincuentes para no ser sus voceros; dimensionar y contextualizar los 
acontecimientos; no prejuzgar y respetar la presunción de inocencia; proteger a 
los periodistas y solidarizarse ante cualquier agresión al gremio. 
 
 
18 Consultado en www.eluniversal.com.mx Sección Cómo cubrimos la violencia. Fecha: 12 de junio de 2012. 
 
31 
 
Si bien la mayoría de los puntos se han cumplido, persisten medios que siguen 
utilizando la terminología de la “narcocultura”, por lo que este esfuerzo, que ni 
siquiera es oficial, queda en buenas intenciones. 
 
No obstante, se debe considerar como un buen inicio para el futuro, ya que esta 
lucha contra el crimen no se ve con un cercano final, para establecer oficialmente 
un manual para estas coberturastan delicadas para todos los actores implicados. 
 
En el tema de la presentación de muertos en accidentes y acciones criminales de 
menor magnitud a la lucha entre cárteles y contra el Estado mexicano, ya 
analizamos lo que la ley señala sobre la dignidad de los difuntos y el derecho a la 
privacidad. 
 
Si revisamos las portadas de los diarios Metro, El Gráfico y La Prensa, en ninguno 
se cumple el respeto referido, aunque en Metro y Gráfico buscan que la foto de 
portada sea impactante pero menos cruda, que en el caso de La Prensa. 
 
En cuanto al caso de Metro Toluca, en el siguiente capítulo ejemplificaré estos 
casos con notas que hice y analizaré, desde el antes, durante y después del 
proceso de creación del producto periodístico, así como sus fallas y aciertos 
respecto al marco legal. 
 
La prensa sensacionalista tiene su apuesta en el infoentretenimiento, es por ello 
que el dolor humano ha sido manejado como un espectáculo, entre más 
sangrienta y dramática sea una imagen, más auditorio o lectores tendrá el medio. 
 
“Se hace espectáculo cuando la información recurre más al lenguaje emocional 
que a la explicación racional; cuando los primeros planos encuadran los rostros de 
dolor y los detalles del sufrimiento, mientras quedan fuera del campo las visión de 
las causas y los contextos”.19 
 
19 Lara Klahr y Barata. Op. Cit. P.88 
 
32 
 
 
El 23 de noviembre de 2004 se vivió el punto más álgido de la falta de respeto de 
los medios hacia sus lectores y televidentes y, peor aún, la degradación total de la 
información policiaca para convertirla en un espectáculo digno del Coliseo 
Romano del Medioevo. 
 
Ese día, tres agentes federales fueron “confundidos” por roba niños, por lo que 
pobladores de Ixtayopan, Tláhuac, los retuvieron y ante los medios, principalmente 
las televisoras que transmitían en vivo, los golpearon y les prendieron fuego 
causándoles la muerte a dos de ellos. 
 
Sin pudor alguno, las imágenes de este linchamiento, que todavía se pueden 
conseguir en la red, fueron transmitidas en vivo, claro que los presentadores de 
noticias tuvieron a bien advertir que eran escenas fuertes, pero aún así la muerte 
violenta de dos seres humanos fue grabada en vivo y transmitida a nivel nacional, 
faltando a todo código deontológico. 
 
Cualquier tragedia o siniestro afecta no sólo a las víctimas, sino a las personas 
allegadas, quienes merecen cierta consideración de parte de los reporteros y los 
medios. 
 
Aunque se recomienda no difundir los nombres de víctimas hasta que las 
autoridades hayan dado e informado a los familiares sobre la identidad del 
fallecido, en realidad esto no es así. 
 
En parte porque son datos básicos que editores solicitan a los reporteros para 
complementar las notas, además la ineficiencia de los servicios periciales para 
completar su labor, provoca que muchas veces sea a través de una fotografía en 
el periódico que la gente se entera de algún percance de un ser querido o un 
conocido. 
 
 
33 
 
Finalmente, la presentación de los detenidos también registró un auge a partir del 
2006 y la lucha del Gobierno Federal contra los cárteles de la droga. 
 
Sin embargo, y a raíz del documental Presunto Culpable20, se desató una serie de 
casos documentados en los que los acusados, muchos de ellos exhibidos en 
medios de comunicación, resultaron ser inocentes, por lo que además de dejar de 
manifiesto la ineptitud y fabricación de culpables por parte de los cuerpos 
policiacos, evidenció también la falta de rigidez en la corroboración de datos y 
respeto legal de los periodistas. 
 
En cierto modo, los medios se protegen exigiendo a sus reporteros la utilización 
del término presunto, pero esa presunción de inocencia, mancillada por el modelo 
inquisitorial de justicia de México, queda en buena intención, porque de nada sirve 
que en el cuerpo de la nota se use dicho término, si el sujeto será presentado en 
fotografía y los encabezados lo prejuzgarán. 
 
Lo mismo sucede con los menores de edad, ya que constantemente son exhibidos 
públicamente, lo que está penado hasta por instancias internacionales. 
 
El término correcto, más allá de presunto o supuesto responsable de un delito, es 
imputado, lo cual nos dice la RAE significa “Dicho de una persona: Contra quien 
se dirige un proceso penal”. 
 
O en su defecto también se pueden emplear las palabras acusado o detenido. 
El problema es que el proceso del imputado está viciado de origen, el simple 
hecho que la policía lo exhiba ante las cámaras es un cierto modo de inculpar a 
alguien de forma arbitraria e ilegal, incluido el hecho de adjetivar a la persona a 
través del etiquetamiento de apodos. 
 
 
20 Presunto Culpable. México, 2011. Dir. Roberto Hernández, 87 minutos. Español. 
 
34 
 
Hay que sumar que los periodistas conseguimos la información sobre los 
detenidos de las dependencias oficiales, los propios uniformados y fuentes 
informales, sin dar derecho a la otra parte a dar su versión, por lo que siempre se 
da por sentado la culpabilidad de las personas, sin reflexionar que muchas veces 
se emplea la tortura para conseguir declaraciones autoincriminatorias o si fueron 
respetados los derechos de esa persona. 
 
“Las ‘presentaciones’ de detenidos que hacen en conferencias de prensa las 
instituciones policiales y de procuración de justicia constituyen el más grosero y 
flagrante escenario de violación del principio de presunción de inocencia, y en 
muchos casos podrían significar la comisión de un delito en flagrancia por 
servidores públicos”.21 
 
Así como difundir los mensajes de los criminales se considera como ser voceros, 
cuando los reporteros difundimos una acusación sin indagar si el imputado es 
culpable o no, terminamos legitimando un sistema penal podrido como el 
mexicano, en el que cada año se encarcelan a miles de personas inocentes de 
manera injusta. 
 
 
2.5 FUNCIÓN SOCIAL DE LA NOTA ROJA 
 
Aunque es difícil de creer, la nota roja, como todo el periodismo (en teoría), debe 
tener una labor social. En nuestro caso, más allá de satisfacer el morbo de la 
gente, la fuente policiaca cumple con algunos fines de servir a la ciudadanía. 
 
Recordemos que la nota roja es sensacionalista por naturaleza, porque trabaja 
con hechos pasionales, cuya difusión buscan generar un sentimiento, pero para 
conseguirlo, además de tener preparación académica, ética y profesional, el 
 
21 Lara Klahr, Marco. No más pagadores. Instituto de Justicia Procesal Penal AC. México 2011. P. 39 
 
35 
 
reportero debe tener ciertas características como persona, como lo señala uno de 
los más grandes periodistas del siglo pasado. 
 
“Creo que para ejercer el periodismo, ante todo, hay que ser un buen hombre, o 
una buena mujer; buenos seres humanos. Las malas personas no pueden ser 
buenos periodistas. Si se es buena persona se puede comprender a los demás. 
Es una cualidad que en sicología se denomina ‘empatía’”.22 
 
El reto está en ser buena persona, lograr la empatía o la compasión por el otro, 
pero mantenerse ajeno a la situación para informar lo más imparcial posible. 
Si bien no hay una guía oficial que recopile las buenas acciones de la nota roja, y 
aunque algunos medios optan por no difundir los nombres de las víctimas de 
delitos o accidentes, en ocasiones el periódico se vuelve en la única posibilidad de 
saber sobre el paradero de las personas. 
 
En mi experiencia, la cobertura de accidentes mortales y su difusión periodística 
tendría que dejar en la consciencia de los lectores lo que no se debe hacer. La 
mayoría de los percances ocurren por imprudencias, peatones que cruzan 
carreteras o avenidas debajo de puentes peatonales, en zonas oscuras, en vías 
rápidas, en partes nebulosas; conductores ebrios,amantes de la velocidad, 
motociclistas y ciclistas temerarios que luchan contra las máquinas motorizadas. 
 
Una clara explicación contextualizada de un accidente, con sus causas y efectos, 
puede ayudar a los demás a comprender que estas acciones expresadas en el 
párrafo anterior no se deben cometer. 
 
22 Kapuscinski, Ryszard. Los cínicos no sirven para este oficio. Edit. Anagrama. Barcelona 2002. P. 38 
 
36 
 
 
Asimismo, principalmente la fuente policiaca debe destapar las injusticias y 
corruptelas del sistema penal, a fin que los ciudadanos exijan a sus autoridades 
conducirse con pulcritud y apegados a derecho. 
 
En conclusión de este capítulo, la nota roja no cuenta con una regulación como tal, 
si bien se rige por las mismas leyes 
generales para todo individuo de esta 
sociedad, no hay una uniformidad de 
criterios para su desempeño. 
 
Ideas como el pacto de medios para las 
coberturas violentas quedan en buenas 
intenciones porque no todos los entes de 
comunicación masiva se suscribieron a 
este primer intento de homogeneizar un 
tema tan delicado y cotidiano como la 
violencia y el crimen. 
 
Mientras el Estado no legisle o regule, sin 
caer en la censura, a la fuente policiaca en 
específico, cada quien hará su trabajo 
como mejor le parezca, sin importar el 
desconocimiento del marco legal. 
 
La implementación de códigos de ética y normas precisas, exigir periodistas 
profesionales, dignos, que ejerzan con referencia a derechos y legalidad ayudarán 
al mejoramientos de la fuente, en cuya formación tendrá que participar una parte 
elemental, que también con su indiferencia ha sido cómplice del abuso de poder 
de la prensa, que son los lectores. 
 
TIRAJE DE DIARIOS DEL DF 
 
METRO 196, 480 
EL GRÁFICO 67,672 
LA PRENSA 315,000 
 
TIRAJE DE DIARIOS DEL 
ESTADO DE MÉXICO 
 
METRO TOLUCA 25,000 
LA EXTRA 17,000 
EL SOL 42,000 
 
Información tomada del 
Directorio de Medios 
Publicitarios, de agosto de 
2012. 
 
37 
 
“Pero nada de lo anterior sucederá si los ciudadanos no constituyen un contrapeso 
democrático de los medios noticiosos, adquiriendo una mirada crítica, cambiando 
sus hábitos de consumo de información periodística y exigiendo agendas y 
contenidos útiles, respetuosos de los derechos de las personas y la legalidad”.23 
 
En conclusión, aun estamos lejos en México que las leyes más básicas sean 
respetadas por las autoridades, medios y ciudadanos; sin embargo, los periodistas 
podemos marcar la pauta para iniciar un cambio en los paradigmas de 
manipulación de información que las fuentes tienen en la mayoría de los casos. 
 
Para quienes cubren la fuente policiaca es fundamental tratar de respetar los 
derechos que hemos analizado en este capítulo para contribuir al cambio referido, 
pero también para cuidar de lo más valioso que tiene un reportero y su medio, la 
credibilidad y el respeto de los lectores. 
 
En el siguiente capítulo ejemplificaré con casos de mi experiencia como reportero 
sobre cómo en la práctica es demasiado complicado dejar en manifiesto el respeto 
a las leyes en su totalidad. Presiones, falta de tiempo, exceso de trabajo y un 
sinfín de motivos que ocasionan que en el trabajo de campo sea casi imposible ser 
políticamente correcto. 
 
23 Lara Klahr. Op.Cit. p. 68 - 69 
 
38 
 
 
A 110M. EN IIETEPEC" 
MOLESTA A VECINOS CAMBIO DE SENTIDO EN CALLES DE llNA 8 Y 9 
A HOII-EN IIETEPEC fZ 
-_ . 
..... • .... 1 ..... -... ,.. .... 
MOLESTA A VECINOS CAMBIO DE SENTIDO EN CALLES DE ZINA 8 Y9 
 
39 
 
 
 
40 
 
El periódico Metro, de Grupo Reforma, fue donde tuve mi primera oportunidad 
como reportero. Un medio especializado en el tratamiento de la nota roja. 
 
En este capítulo compartiré las mejores experiencias que me dejó trabajar en esta 
empresa durante más de tres años, tiempo en el que aprendí sobre una fuente 
que si bien no era del todo desconocida para mí, no tenía el suficiente 
conocimiento sobre su manera de ser trabajada. 
 
Mi propósito es que a través de este relato periodístico los alumnos de periodismo, 
y cualquier otra persona, interesada en el tema, tenga un breve acercamiento al 
mundo de la nota roja, visto de la experiencia de quien estuvo inmerso en ella. 
 
Marco Lara Klahr y Frances Barata afirman que este género es fascinante pero 
atroz, lo cual es bastante cierto; sin embargo, considero que el trabajo de los 
“11s”, si se realiza de la manera más digna posible, deja mayores satisfacciones 
que penurias o problemas. 
 
El número 11 se utiliza por la mayoría de los cuerpos de emergencia para hacer 
referencia de la prensa en general, aunque se aplica más a menudo para los 
reporteros que están en las escenas de los accidentes y delitos. 
 
A pesar de lo peligroso que es hoy en día la labor periodística, principalmente en 
esta fuente, vale la pena correr el riesgo y vivir al máximo la adrenalina que 
genera andar en ese mundillo de las desgracias y los crímenes. 
 
 
 
 
 
 
 
41 
 
3.1 EL PROCESO DE AUXILIAR A REPORTERO 
 
Mi relación con Grupo Reforma comenzó en enero de 2008, cuando inicié el Taller 
de Redacción de Invierno, que anualmente la empresa organiza, al menos una 
vez, para formar a posibles talentos. 
 
Como si se tratara de una premonición, la primera tarea del taller fue elaborar una 
nota después de ver una entrevista en video con el entonces encargado de la 
Policía de Baja California, Alberto 
Capella. 
 
Ese y el trabajo principal del curso, por 
el que se distingue entre las 
generaciones, que es realizar una nota 
sobre ‘Rolando Pedrozo’, un hombre 
que queda lesionado por un accidente 
de tránsito, fueron los primeros 
acercamientos a la nota roja. 
 
Pedrozo es el dolor de cabeza de los 
alumnos de Reforma, porque son sólo 
datos sueltos y el reto es forjar la nota 
sin un solo error, irónico pero cierto, la 
fuente policiaca es una buena escuela 
para los reporteros. 
 
Después de seis semanas de ejercicios, lecturas y prácticas en campo, los 
participantes egresamos del taller, algunos con la oportunidad de quedarse a 
trabajar dentro de la empresa de inmediato y otros, como fue mi caso, tardan un 
poco más en llegar. 
 
El ejercicio de Rolando 
Pedrozo es el examen final 
del Taller de Redacción de 
Grupo Reforma, en el que el 
reportero tiene datos sueltos y 
se tiene que armar una nota 
al respecto. 
Entre los datos se encuentra 
el nombre de Rolando 
Pedrozo, quien sufre un 
accidente vial, al cruzar una 
calle sin fijarse en la 
circulación de los automóviles. 
Aunque luce un ejercicio muy 
sencillo, los datos tienen 
ciertas trampas para que el 
reportero se vaya con la 
primera apariencia y se tenga 
que repetir varias veces. 
 
42 
 
Con la finalidad de ser reportero de deportes, me aventuré a estudiar Ciencias de 
la Comunicación, y mi primera solicitud en Reforma fue integrarme a la sección 
Cancha, pero la oportunidad se abrió en otro lado. 
 
La apertura de Metro Puebla me posibilitó ingresar a Reforma como auxiliar de 
redacción de las plazas de provincia de Metro, en Toluca y Puebla. Desde la 
oficina me encargaba de apoyar a los reporteros de ambos lados con enlaces 
telefónicos, búsqueda de información y ser el medio de interacción entre ellos y los 
editores. 
 
Esto comenzó en agosto de 2008 y hasta marzo del 2009. En ese tiempo tuve la 
posibilidad de publicar tres notas, todas relacionadas a deportes que seguía como 
mi objetivo. Una cobertura de futbol llanero, un campamento de taekwondo y la 
visita del beisbolista Alex Rodríguez a México fueron mi debut en los medios 
impresos. 
 
El 6 de marzo de 2009 fue el inicio oficial de mi carrera como reportero en Metro 
Toluca, la meta se mantenía en ser el reportero titular de deportes y sólo apoyar 
las otras fuentes en los días de descanso de los compañeros.Pero la vida dio un vuelco y con el paso del tiempo, muy poco, quedé envuelto en 
la dinámica de estar la mayor parte de la semana laboral enfocado en la fuente 
policiaca. 
 
Y el primer problema fue en cómo hacer la cobertura, si bien tuve dos días de 
práctica previa con uno de los reporteros ya establecidos (Alejandro Baltazar), la 
primera cobertura en solitario fue bastante interesante, de la cual platicaré más 
adelante. 
 
 
 
 
43 
 
 
3.2 ESTRUCTURA DE GRUPO REFORMA 
 
El periódico Reforma surge en la Ciudad de México en 1993, como una incursión 
de la familia Junco de la Vega más allá de los diarios que habían formado en 
Monterrey, principalmente El Sol y El Norte. 
 
La filosofía de Reforma siempre ha sido la independencia de los periodistas que 
trabajan ahí, por ello implementó la separación del área comercial de la editorial, a 
fin de garantizar al reportero poder publicar con total libertad y sin presiones de 
anunciantes. 
 
Sin embargo, esa independencia y lucha contra la clásica prensa que elogiaba a 
los gobernantes para no perder publicidad o papel, como antes lo controlaba por 
completo el Estado, se enfrentó a varios problemas, como la negativa de los 
voceadores para venderlo. 
 
“No pasó mucho tiempo para que el sistema político, acostumbrado a una prensa 
aduladora y acomodaticia, lanzara un ataque. En 1994 el periódico enfrentó un 
boicot de la Unión de Voceadores del Distrito Federal. Pero si la Unión no quería 
circular Reforma, lo harían sus empleados”.24 
 
Reporteros, editores y columnistas destacados salieron a las calles a vender el 
periódico, de donde surgió la costumbre que permanece hasta nuestros días, 
implementado por otros medios en la actualidad, de ser las esquinas y cruceros 
donde los voceadores lo ofrecen a los lectores. 
 
 
24 Apartado Quiénes Somos en www.reforma.com Fecha: 20 de junio de 2012. 
 
44 
 
Alejandro Junco de la Vega es el presidente y director general de la empresa, y la 
estructura la completan los subdirectores tanto de las áreas editoriales, 
comerciales, de circulación, de internet. 
 
Más abajo en la organización están los responsables de cada sección, divididos 
en editorial y gráfica, donde se involucra el trabajo de editores, diseñadores, 
fotógrafos y, claro está, los reporteros. 
 
3.3 ORIGEN Y EL METRO TOLUCA 
 
Metro nace en Monterrey en 1988, de acuerdo con la explicación de la propia 
empresa, surge por la necesidad de tener un periódico en formato tabloide 
enfocado a la información más local de una entidad. 
 
Entre su fuerte, además de la información comunitaria, fue la nota policiaca la que 
marcó la personalidad de Metro, presentando en la portada los casos más 
impactantes. 
 
Para diciembre de 1997 llega Metro a la Ciudad de México, convirtiéndose en 
poco tiempo en referente para los sectores a los que va dirigido este producto 
popular, tales como taxistas, choferes de camiones, paramédicos, bomberos, 
policías y amas de casa. 
 
En 2007 comienza a circular la versión del Estado de México, con sede en la 
capital Toluca, en la primera apertura de este medio en una ciudad ajena a las 
grandes metrópolis. 
 
El más reciente, llegado en 2008, fue Metro Puebla, el cual aborda información de 
todo el estado, además de llegar hacia Tlaxcala y parte de Veracruz en las 
coberturas. 
 
 
45 
 
Aunque la edición se presenta como Metro Estado de México, ante la magnitud de 
territorio que abarca esta entidad, el periódico se enfoca a la parte provincial de 
ésta, tomando como punto de partida la capital Toluca, por lo que su alcance de 
cobertura llega hacia el sur y los límites con Guerrero y Michoacán, la zona de 
Tierra Caliente, hacia el norte en Atlacomulco, y los límites del Distrito Federal con 
La Marquesa y El Ajusco. 
 
Para la zona metropolitana existe una subsección llamada Valle, el cual abarca 
todos los municipios del Oriente y el Valle de México, pero que es coordinada 
directamente por la estructura de Metro DF. 
 
Muchas veces los lectores se quedan con la idea que la nota publicada es 
responsabilidad únicamente del reportero, porque es al que ven en la calle, y es al 
que felicitan, reclaman, critican o comentan, según sea el caso, sin saber que son 
varias las personas involucradas en la manufacturación de la información. 
 
En el caso de Metro Toluca, son cinco reporteros y dos fotógrafos quienes hacen 
el trabajo de campo, y aunque cada uno se dividen su trabajo, en ocasiones los 
fotógrafos deben redactar notas y los reporteros tomar las respectivas imágenes 
de las coberturas. 
 
En redacción son tres coeditores y el editor titular quienes acomodan, editan, 
corrigen y complementan las notas de los reporteros. 
 
En la parte gráfica son los diseñadores quienes crean la parte artística del 
acomodo de los textos, la selección y mejoramiento de fotos, así como el anexo de 
complementos como frases, números o infografías. 
 
Cabe señalar que Metro no es únicamente un tabloide de nota roja, ya que ofrece 
información general, deportes y espectáculos, con un público meta, el cual gusta 
del juego en el lenguaje, lo que lo convierte en un medio popular y de calidad, 
 
46 
 
como relata Arturo Sánchez, editor general de las plazas de Metro, en entrevista 
para este trabajo académico. 
 
“Yo no encasillaría a Metro como un diario de nota roja, en realidad es mucho más 
que eso, es más completo, es un periódico metropolitano para adultos con muchas 
secciones y productos que informan y entretienen, deportes, política, 
espectáculos, chicas, chistes, cómics, columnas, aunque efectivamente la 
información de seguridad se destaca, entre otros temas, en nuestra portada, ya 
que somos especialistas en periodismo policiaco, pero no es lo único que 
hacemos. Nos distinguimos del resto de tabloides porque nosotros cubrimos la 
información con amplitud, profundidad y calidad. 
 
“Podemos presumir nuestra credibilidad y verosimilitud. Hicimos escuela en el 
fotoperiodismo policiaco, buscamos que la foto impacte e informe a la vez, tarea 
difícil. Nadie como nosotros juega con los encabezados, con el lenguaje coloquial, 
ningún otro diario, o no al menos en esa medida usa la irreverencia, el doble 
sentido, el albur y la mordacidad como estilo para informar”. 
 
Por ello, las exigencias para formar parte de Grupo Reforma son altas, además de 
las capacidades técnicas y de conocimiento general sobre el manejo de géneros 
periodísticos, es primordial, añade Arturo Sánchez, que los reporteros tengan 
“ética y honestidad”, con la finalidad de lograr las metas informativas del medio. 
 
3.4 LOS CASOS MÁS RELEVANTES 
 
Cuando acudo como invitado a las aulas para platicar con los estudiantes sobre 
esta interesante labor, siempre surgen las dudas sobre cómo los “11s” nos 
enteramos de los sucesos y cómo se lleva a cabo todo el proceso informativo de la 
nota roja. 
 
 
47 
 
Siendo Toluca una ciudad en crecimiento, con alta actividad industrial, con 
carreteras que conectan a otras ciudades, a otros estados, y como punto 
estratégico para los grupos criminales, en mi experiencia tuve oportunidad de 
cubrir todo tipo de accidentes, tragedias y crímenes, a excepción de suicidios, ya 
que la línea editorial de Metro prohíbe estos casos. 
 
El primer paso del proceso informativo es enterarse de acontecimientos que estén 
sucediendo al momento. Para nadie es secreto que desde los tiempos de “El 
Güero” Téllez, los reporteros crean redes de contacto con los involucrados 
directamente en las emergencias. 
 
Policías, paramédicos y bomberos se convierten en las fuentes primarias de 
obtención de datos, para ubicar algún accidente o evento. También hay quienes 
utilizan los radios de frecuencia para escuchar las novedades. 
 
Una vez que se tiene el registro de algún suceso, el reportero tiene el segundo 
reto, llegaral sitio en el menor tiempo posible, en el caso de accidentes graves 
con lesionados se cuenta con el periodo que tarden en arribar y atender los 
servicios de emergencia a los 
involucrados. 
Esto no tendría mayor relevancia si no 
fuera por la importancia que tiene para 
Metro, y también ya para otros medios, 
la imagen por encima de las palabras en 
las notas. 
 
Así, los reporteros y los fotógrafos 
deben trasladarse a toda velocidad a 
distancias a veces muy lejanas, 
esquivando el tránsito vehicular, pero 
Eduardo Téllez Vargas, “El 
Güero”, fue el reportero de 
nota roja más reconocido de 
la primera mitad del siglo 
pasado. 
Dueño de un estilo aguerrido, 
Téllez fue un periodista 
notable al llevarse primicias 
de los mejores casos de su 
tiempo, como el homicido de 
Leon Trostky. 
Con tal de conseguir la nota, 
muchas veces violó la ley, 
contradiciendo lo que se ha 
abordado en este trabajo. 
 
48 
 
con la precaución de no ser ellos los protagonistas de un nuevo incidente. 
En ocasiones, se puede pedir apoyo para traslado de los mismos equipos de 
auxilio, viajar en patrullas o ambulancias para no perder un solo detalle de los 
acontecimientos. 
 
En los casos de coberturas donde hay víctimas fatales el tiempo de reacción se 
extiende más por lo tardado que llega a ser el trabajo de los peritos, aunque nunca 
es bueno confiarse porque en ocasiones no tardan tanto y pasa que se pierde la 
noticia. 
 
Ya en el lugar, vienen nuevas vallas que brincar. Si bien se hace cierta 
complicidad con policías, en ocasiones son los primeros en prohibir a la prensa 
acercarse a los sitios, bajo la responsabilidad de preservar las escenas. 
 
Otras veces son los mismos familiares o conocidos de las víctimas quienes, en 
todo su derecho, exigen el respeto a la privacidad que ya estudiamos en el 
segundo capítulo. 
 
Por eso, el reportero de nota roja de ningún modo debe buscar el protagonismo de 
exhibirse como tal, una táctica que funciona a la perfección para nuestros fines es 
confundirse con la multitud, hacerse pasar como un curioso más si es que se debe 
tomar la imagen correspondiente, sino, siempre que se conduzca con total respeto 
y rectitud puede hacer su trabajo normalmente recopilando los datos sin disturbar 
a los deudos. 
 
Si ya fuimos al lugar y completamos los datos necesarios para escribir la 
información y adicionarle elementos que ayuden al lector a la comprensión total 
del suceso, sigue otra actividad difícil: jerarquizar la información y escribirla. 
En mi opinión, quienes escriben para medios como La Prensa, que permite el 
empleo de calificativos, adjetivos y prejuicios en las notas policiacas es más 
 
49 
 
sencillo que tener que hacerlo, como exige Grupo Reforma, sin uno solo de estos 
recursos y la mera descripción de los hechos. 
 
Lo anterior lo manifiesto porque la mera aportación de datos puede hacer de una 
nota un edicto bastante aburrido, el reto es contar la historia de la mejor manera y 
respetuosa posible. 
 
“Todos los días muere alguien. Eso ya no es novedad. La idea es que ese fiambre 
parezca el primero. Pica la cebolla, pero pícala fina”. 
 
Esa afirmación se lee en la novela Tinta Roja, del escritor peruano Alberto Fuguet, 
que es la historia de un novel reportero de nota roja, guiado por un editor con 
mucha experiencia y mañas en la materia. 
 
Esa frase es muy cierta, todos los días muere alguien de manera trágica, más en 
nuestros días, pero qué hay de novedoso, de llamativo en eso. El trabajo de 
observación detenida y a consciencia en el lugar de los hechos ayuda en mucho 
para tener elementos alternos a la mera mención del hecho como tal. 
 
Ya entregado el texto y las fotografías la tarea se traslada a los editores para 
corregirla y solicitar al reportero la información que ellos consideren pertinente 
para dejar totalmente clara la noticia. 
 
Aunque pareciera fácil para el reportero conseguir la información por la 
“complicidad” que se forma con las fuentes que tienen conocimiento de primera 
mano de los accidentes y delitos, lo cierto es que se debe manejar con mucha 
proximidad y mucha distancia para ser imparcial y no formar parte de ningún tipo 
de intercambio de favores. 
 
Bajo el reglamento de Reforma es preferible perder la información si a cambio se 
solicita dinero o cualquier tipo de pedido a cambio de datos para una nota. Esto no 
 
50 
 
significa que el medio y el reportero pierdan la nota, sino que éste deberá buscarla 
por otros lados, una labor complicada pero siempre mejor a estar amarrado a 
intereses particulares. 
 
A continuación recordaré los sucesos que me dejaron satisfacciones 
profesionales, relacionando todo lo visto anteriormente con la práctica. 
 
3.4.1 DESASTRES NATURALES. 
 
Toluca tiene una altura mayor a la Ciudad de México (2680 metros sobre el nivel 
del mar), orográficamente se encuentra en la zona montañosa del apagado volcán 
Xinantécatl, esto la convierte en una zona sumamente fría en invierno, con 
nevadas en las comunidades ubicadas a los pies del coloso. 
 
En época de lluvia, se llegan a presentar precipitaciones que inundan valles y 
colonias en municipios más urbanizados. Los desbordamientos del Río Lerma en 
San Mateo Atenco es de las coberturas de calendario cada año. 
 
Ese exceso de lluvias provocó dos tragedias de grandes dimensiones. La primera 
fue en febrero de 2010. 
 
La madrugada del 5 de febrero se acumuló más de 12 horas de constante lluvia 
con fuerza moderada, esto provocó reblandecimiento de la zona montañosa del 
Municipio de Temascaltepec. A la altura del kilómetro 30 un alud cayó sobre la 
carretera que va de Toluca a Zihuatanejo, Guerrero, arrasando con los vehículos 
que circulaban por esa zona. 
 
Nueve personas murieron y dos fueron reportadas como desaparecidas. Las 
toneladas de piedra y lodo rompieron el paso de la carretera y cayeron sobre el 
poblado de Mesón Viejo, donde sólo reportaron daños materiales y afectaciones a 
los campos de cultivo de papa. 
 
51 
 
Esta cobertura me requirió viajar durante cuatro días seguidos de Toluca hacia la 
zona, el trabajo comenzó la mañana del 5 cuando me encontraba en un evento 
social de la alcaldía de Zinacantepec, ya que el Presidente Municipal, Gustavo 
Vargas, iría a visitar la zona afectada por ser limítrofe de su comunidad con 
Temascaltepec. 
 
Tras ponerme de acuerdo con el fotógrafo me dirigí al kilómetro 30, pero tuve que 
detenerme en el 28 porque las autoridades ya habían cerrado el paso, en ese 
punto nos encontramos el fotógrafo, Alejandro Pastrana, y yo, y junto con otros 
compañeros de diferentes medios nos enfilamos hacia Mesón Viejo. 
 
Para llegar al poblado lo más recomendable era hacerlo en medio del bosque, por 
lo que bajamos por caminos de terracería, recorrimos tres kilómetros a pie y al 
llegar lo que presenciamos era apocalíptico. 
Desde la entrada al poblado el lodo tenía cubierto los caminos, en la parte más 
profunda las máquinas removían el alud, los rescatistas y los cuerpos policiacos 
fueron encontrando restos de automóviles y de humanos. 
 
En la nota nunca consigné la aventura que fue llegar a ese punto para obtener la 
información, porque ahí se encontraban reunidos el alcalde, los comandantes de 
la Agencia de Seguridad Estatal y de Protección Civil (ASE), hoy Secretaría de 
Seguridad Ciudadana,, pero esa cobertura nos costó hundimientos en el lodo, 
caídas, golpes y vacunas. 
 
La fuente de primera mano fueron los habitantes de Mesón Viejo, sorprendidos 
porque nunca habían visto un evento similar, la gente sin mayor reparo relató 
detalladamente cómo había sido el desgajamiento del cerro. 
 
Las autoridades las tomamos como la fuente secundaria, ellos nos proporcionaron 
los datos técnicos, como causas del desprendimiento de tierra, consecuencias 
sanitarias, medidas preventivas, cifras de víctimas y de daños económicos. 
 
52 
 
 
Asimismo,

Otros materiales