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semana 2 sociología criminal_1b8caa2006c68f6e2836c0a7ed1b7912 - Elizabeth Hernández

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Sociología Criminal
Modulo 2
Diferencias individuales y de 
aprendizaje
Diferencias individuales y aprendizaje
La crianza familiar y la conducta delictiva
En distintas investigaciones se ha constatado que un
ambiente familiar positivo, caracterizado por la comunicación
abierta y por la presencia de afecto y apoyo entre padres e
hijos es uno de lo más importantes garantes de bienestar
psicosocial en la adolescencia (Musitu y García, 2004),
mientras que un ambiente familiar negativo con frecuentes
conflictos y tensiones, dificulta el buen desarrollo de los hijos
y aumenta la probabilidad de que surjan problemas de
disciplina y conducta (Dekovic, Wissink y Mejier, 2004).
Diferencias individuales y aprendizaje
La crianza familiar y la conducta delictiva
La familia en la adolescencia.
La importancia de la familia es indiscutible, puesto que se trata del grupo social en
el que la mayoría de las personas inician su desarrollo, permanecen durante largo
tiempo y conforman un entramado de relaciones y significados que les
acompañarán a lo largo de toda la vida.
Así, el grado de apoyo, de afecto y de comunicación que el adolescente percibe
en este contexto es un elemento que contribuye de modo significativo a su
bienestar psicosocial, así como al del resto de sus integrantes.
Diferencias individuales y aprendizaje
La crianza familiar y la conducta delictiva
En este sentido, la familia tiene todavía el rol primordial de transmitir a
sus hijos una serie de creencias, valores y normas que les ayudarán a
convivir en la sociedad de la que forman parte, lo que se conoce como
socialización.
Diferencias individuales y aprendizaje
La crianza familiar y la conducta delictiva
Qué se entiende por familia.
La familia es, como dijimos al comienzo del capítulo, un grupo social.
la familia puede definirse como un espacio de interacciones fundamentalmente afectivas que tiene
los siguientes rasgos diferenciales:
(1) las relaciones implican a la persona en su conjunto;
(2) sus objetivos son la intimidad, la cercanía, el desarrollo, el cuidado mutuo y el sentido de
pertenencia;
(3) dentro de la familia se estimula el cariño, el altruismo, la implicación mutua y la educación
(Beutler, Burr, Bahr y Herrin, 1989).
Diferencias individuales y aprendizaje
Qué se entiende por familia.
Además, la familia proporciona afecto y apoyo y contribuye al
bienestar psicológico y emocional de todos sus integrantes a través
del desarrollo de la autoestima, de la autoconfianza y de un
sentimiento de pertenencia.
Finalmente, la familia con hijos establece mecanismos de socialización
y control del comportamiento de éstos a través de las prácticas
educativas utilizadas por los padres.
Diferencias individuales y aprendizaje
Qué son los estilos parentales de socialización.
Podemos definir el estilo parental como una constelación de actitudes
hacia el hijo que, consideradas conjuntamente, crean un clima emocional
en el que se expresan las conductas de los padres (Darling y Steinberg,
1993).
Diferencias individuales y aprendizaje
Tipología de estilos parentales.
Esta figura representa el modelo
bidimensional del que surgen
cuatro estilos parentales:
autoritario, negligente, autorizativo
e indulgente.
Modelo bidimensional de
socialización (Musitu y García,
2001)
Comunicación y conflictos familiares.
A medida que los hijos entran en la adolescencia, las relaciones familiares
se transforman y es necesario pasar de la autoridad unilateral paterna a la
comunicación cooperativa con el hijo.
Debe haber entonces, mayor reciprocidad, menos diferencias de poder, y
más comunicación, como elementos clave para facilitar la formación y el
desarrollo del hijo adolescente.
Diferencias individuales y aprendizaje
En este proceso de formación y desarrollo, el adolescente
hace una demanda creciente de autonomía que deviene en
ocasiones en conflictos familiares.
La familia como un contexto de riesgo y protección ante la violencia y la 
delincuencia.
Desde el punto de vista psicosocial las conductas violentas y delictivas
constituyen dos importantes índices de conducta antisocial en adolescentes.
De hecho, en distintos estudios se ha señalado que la conducta violenta en
edades tempranas constituye el predictor más importante de la delincuencia
en chicos y chicas adolescentes (Deptula y Cohen, 2004).
Diferencias individuales y aprendizaje
La familia como un contexto de 
riesgo y protección ante la 
violencia y la delincuencia.
En el siguiente cuadro se presenta
un resumen de los factores
familiares de riesgo que se han
asociado tradicionalmente con el
desarrollo de conductas delictivas
y violentas en adolescentes.
Diferencias individuales y aprendizaje
Asimismo, la perspectiva de género ha contribuido a desmontar muchos
prejuicios sobre las conductas criminales femeninas y ha llamado la
atención sobre la necesidad de tener en cuenta sus especificidades. En
esta presentación revisaré, en primer lugar y a grandes rasgos, las
tendencias más importantes que han prevalecido en los estudios sobre
criminalidad y género.
Diferencias individuales y aprendizaje
Todos los estudios conocidos muestran que, aunque existe una gran variedad
de formas de criminalidad femenina y masculina, se puede decir que, en
general, las mujeres cometen menos crímenes, sus crímenes son menos
serios, menos profesionalizados y tienden menos a la reincidencia.
Diferencias individuales y aprendizaje
Por otro lado, la teoría feminista criticó tempranamente el concepto de
patriarcado y la idea de que existe una subordinación que vincula a toda la
población femenina porque supone que todas las mujeres son iguales y
tienen los mismos intereses. (Fraser y Nicholson, 1988). Por ello muchas
militantes que pertenecen a etnias o razas dominadas denunciaron que esta
propuesta tendía a borrar la diversidad cultural a favor de un modelo que
universaliza la versión de las mujeres occidentales blancas de clase media
(Grewal y Kaplan, 1999).
Diferencias individuales y aprendizaje
El factor sexo/genero
Sociología criminal 
Semana dos
El factor sexo / género en la 
delincuencia
Los estudios hoy llamados de Género constituyen una de las innovaciones
teóricas y políticas más importantes de la segunda mitad del Siglo XX. Uno
de sus aportes más significativos, en mi concepto, ha sido demostrar que
los factores económicos, políticos y culturales afectan de manera diferente
a varones y mujeres y, sobre todo, que el sesgo androcéntrico había
conducido a ignorar a la población femenina asumiendo que sus
necesidades eran las mismas que las de los varones.
El factor sexo / género en la 
delincuencia
La perspectiva de género cuestiona los puntos de partida de las ciencias
sociales y jurídicas al demostrar el androcentrismo que las aqueja
(Irigaray, 1974.) Según se argumenta, lo masculino ha sido identificado
con lo universal, la razón y el saber mientras que lo femenino ocupa el
lugar de la falta.
El factor sexo / género en la 
delincuencia
La propuesta de la crítica de género sería entonces desmontar el
andamiaje de los saberes para reconstruirlos de manera que se visibilice
a la mujer y se cuestione la posición de poder de los hombres. Este
movimiento de revisión crítica de los saberes y del orden social ha
producido una profunda transformación en la criminología porque ha
hecho evidente que la asociación entre género y crimen es profunda,
persistente y paradójica (Heidensohn, 1985.)
El factor sexo / género en la 
delincuencia
Los Desvíos de las Mujeres
Hasta la década de los setenta del siglo XX los estudios sobre criminalidad se
caracterizaban por su androcentrismo, es decir, generalizaban a partir del modelo
masculino. En sentido contrario, las particularidades de las mujeres recibían muy poca
atención.
Las escasas investigaciones realizadas durante el siglo XIX y la primera mitad del XX
tendían a aplicar teorías biológicas y psicológicas para explicarla criminalidad
femenina y resaltaban el hecho de que, en todos los lugares en los que se había
estudiado el tema, la participación de los hombres era ampliamente mayoritaria
(Andruccioli, 2002:29).
El factor sexo / género en la 
delincuencia
De hecho, casi todos los estudios sobre delincuencia femenina asumían
que las conductas atípicas de las mujeres se debían a su fisiología o a sus
instintos. Por otro lado, se suponía que su pureza congénita las hacía más
vulnerables a los peligros del mundo y que su debilidad moral y social las
hacía proclives a conductas erradas (Zedner, 1991), por lo tanto debían
ser tuteladas.
El factor sexo / género en la 
delincuencia
Crimen y Patriarcado
Los primeros ensayos señalando que no se tenían en cuenta las
particularidades de las mujeres y denunciando los estereotipos que
distorsionaban el análisis de la criminalidad femenina aparecieron en la
década de los 60 ś del siglo XX, cuando el movimiento feminista impulsó la
revisión de los sistemas jurídicos y penales porque, según denunciaba,
estaban fundados en la exclusión de las mujeres y en la universalidad del
modelo masculino.
El factor sexo / género en la 
delincuencia
En un primer momento, el concepto de patriarcado fue útil para explicar la
experiencia femenina en el sistema judicial y penal y para entender la
división de sexo dentro de la ley, los procesos criminales y la vigilancia
policial (Edwards, 1984.)
El factor sexo / género en la 
delincuencia
Género y Crimen
El concepto de género buscó superar el riesgo de caer en el esencialismo y
en el reduccionismo implícitos en la suposición de que todas las mujeres
tienen una problemática similar por el hecho de compartir una subordinación.
El factor sexo / género en la 
delincuencia
Por tal razón se pone en duda que existan conductas delictivas innatamente
femeninas o masculinas y se busca entender en qué medida tanto los
patrones de socialización como las demandas y las oportunidades abiertas
a varones y mujeres producen estilos de criminalidad diferentes para cada
género. Asimismo, la perspectiva de género hace evidente que en toda
sociedad existen patrones específicos de relaciones entre hombres y
mujeres.
El factor sexo / género en la 
delincuencia
Las conductas delictivas de las mujeres
La mayoría de las investigaciones que aparecen desde la década de los
setenta buscaron romper con el estereotipo que presuponía que las
conductas criminales de las mujeres eran respuestas emocionales o
correspondían a su naturaleza (por ejemplo a disturbios debidos a la
menstruación, el puerperio o la menopausia).
El factor sexo / género en la 
delincuencia
Según señalan, los delitos femeninos están directamente relacionados con
los papeles atribuidos a la mujer en la vida social.
Con el fin de corregir estos sesgos, los estudios de género intentan romper
con la tendencia a situar a las mujeres como víctimas pasivas para entender
cuáles son sus estrategias particulares y sus formas de agencia.
Su objetivo es demostrar que las conductas delictivas de las mujeres son
racionales y siguen objetivos, y por tanto, es necesario interrogar a las
actoras y analizar su posición social.
El factor sexo / género en la 
delincuencia
Género y Cultura Policial
La cultura policial ha sido a menudo el blanco de las críticas de las
investigaciones con enfoque de género. Según denuncian, esta última está
basada en valores machistas que privilegian la agresividad, el sexismo y el
racismo.
Teoría de la personalidad 
delictiva de Eysenck
Sociología criminal 
Semana dos
Teoría de la personalidad delictiva 
de Eysenck
Uno de los teóricos más importantes del estudio de la personalidad es Hans
Eysenck. Un psicólogo nacido en Alemania, pero que a los 18 años se
instaló en el Reino Unido, llevó a cabo muchas investigaciones aunque se
hizo famoso por su teoría de la personalidad.
Su enfoque se enmarca dentro de la teoría de los rasgos, que asume la
conducta está determinada por unos atributos relativamente estables que
son las unidades fundamentales de la propia personalidad.
Teoría de la personalidad delictiva 
de Eysenck
Para Eysenck, los individuos difieren en sus rasgos debido a diferencias
genéticas, aunque no descartó las diferencias ambientales y situacionales
en la personalidad, como las interacciones familiares en la infancia.
Por lo que se basa en un enfoque biopsicosocial.
Teoría de la personalidad delictiva 
de Eysenck
Lo que propone el autor es que cada quien nace con una estructura específica a
nivel cerebral que causa discrepancias en la actividad psicofisiologica y, por tanto
provoca que el individuo desarrolle diferencias en el mecanismo psicológico ,
determinando un tipo específico de personalidad.
Hans Eysenck desarrollo una teoría basada en los resultados del análisis factorial.
Teoría de la personalidad delictiva 
de Eysenck
El análisis factorial es una técnica que reduce el comportamiento a una
serie de factores que pueden agruparse juntos bajo un encabezado
llamado dimensión, ya que comparten atributos comunes.
Como conclusión identificó tres dimensiones independientes de la
personalidad: Neuroticismo, Extraversión y Psicotisismo, lo que recibe
el nombre de modelo PEN.
Teoría de la personalidad delictiva 
de Eysenck
Neuroticismo: personas con inestabilidad emocional, muestran
ansiedad, histeria y obsesión.
Extraversión: se caracterizan por la sociabilidad, impulsividad, vitalidad,
optimismo y agudeza de ingenio.
Psicotisismo: se caracterizan por ser insensibles, inhumanas,
antisociales, violentas agresivas y extravagantes.
Teoría de la personalidad delictiva 
de Eysenck
Cuestionarios de la personalidad de Eysenck.
A raíz de la teoría de Eysenck han surgido varios cuestionarios que son
el resultado de más de 40 años de desarrollo y gran cantidad de estudios
psicometricos y experimentales llevados a cabo en muchos países.
La teoría del aprendizaje de 
Akers
Sociología criminal 
Semana dos
La teoría del aprendizaje de Akers
Los fundamentos psicológicos a los que nos hemos referido sirven de base a la
teoría del aprendizaje social de la conducta delictiva, que fue formulada por
Robert L. Burguess y Ronald L., Akers en 1966 y después La Teoría del
aprendizaje social de Akers Los fundamentos psicológicos a los que nos hemos
referido sirven de base a la teoría del aprendizaje social de la conducta delictiva,
que fue formulada por Robert L. Burguess y Ronald L., Akers en 1966 y después
desarrollada por Akers (Burguess y Akers, 1966; Akers, 1973, 1977, 1985).
La teoría del aprendizaje de Akers
De acuerdo con sus autores, esta teoría podría explicar distintos
comportamientos delictivos tales como el consumo de drogas y alcohol, la
desviación sexual, la delincuencia de cuello blanco, la delincuencia
profesional, la delincuencia organizada, la delincuencia violenta y la
delincuencia internacional. Conceptos teóricos fundamentales La teoría del
aprendizaje social incluye cuatro constructos principales (Akers, 1997)
La teoría del aprendizaje de Akers
Asociación diferencial: es aquel proceso mediante el cual uno es expuesto a definiciones
normativas favorables o desfavorables a la conducta ilegal. Este proceso de asociación
diferencial puede tener dos dimensiones o modos de plasmarse en la vida de la gente.
Una dimensión es la de interaccionar, que se traduce en la directa asociación o
identificación con otras personas que actúan ilícitamente, ya sean próximas al individuo o
distantes de él (por ejemplo, la identificación, a través de los medios de comunicación,
con deportistas, actores, políticos y otras personas famosas).
Existe una segunda dimensión normativa según la cual una persona es
expuesta, como producto de su asociación diferencial, a patrones normativos
distintos de los habituales. Podría ser el caso de aquel adolescente que en su
grupo de amigos recibe mensajes favorables al consumo de drogas o al robo.Las asociaciones diferenciales favorables o contrarias a la conducta delictiva-
pueden producirse tanto en los grupos primarios (familia o amigos) como en el
marco de aquellos grupos secundarios y de referencia, como los vecinos, las
iglesias, los profesores, las figuras de autoridad o los medios de
comunicación.
La teoría del aprendizaje de Akers
Definiciones: son los propios significados o actitudes que una persona vincula
a determinada conducta.
Según Akers, estas definiciones pueden ser de dos tipos: generales o 
específicas. Las generales suelen consistir en creencias morales o religiosas, 
valores y normas, que acostumbran a ser favorables a la conducta pro-social 
y contrarias a la conducta delictiva. Entre ellas podrían encontrarse 
valoraciones que se identifican con aquellas expresiones que dicen: es 
importante ir al colegio o al trabajo, o aquella que dice: No se debe de robar.
La teoría del aprendizaje de Akers
El comportamiento humano guardaría, según Akers, una mayor relación con
las definiciones específicas que con las generales. Las definiciones
específicas orientan conductas concretas. Por ejemplo, puede haber
personas que tengan firmes convicciones generales contrarias al tráfico y al
consumo de drogas, pero que en cambio consideren que el consumo
esporádico de cocaína o de marihuana es un comportamiento aceptable
socialmente.
La teoría del aprendizaje de Akers
En otro orden de cosas, alguien que posea fundados valores religiosos y
morales podría admitir, sin embargo, tener contactos sexuales esporádicos
con menores de edad si se le presentara la ocasión propicia y no causara
daño a nadie con ello. La visita a los prostíbulos, los fines de mes, lo hace
acompañado de algún amigo íntimo y lo considera tolerable y aceptable.
Así pues, según Akers, la conducta delictiva operaría, sobre todo, a partir
de creencias específicas.
La teoría del aprendizaje de Akers
Pero las creencias pueden ser también neutralizadoras, cuando justifican
o excusan la conducta. Este mecanismo entraría en acción cuando una
persona se dice a sí misma: Todo el mundo defrauda al Estado. Yo
también puedo hacerlo. Yo no pago impuestos a la SAT. Este puede
constituir un buen ejemplo de la diferencia existente entre definiciones
generales y específicas en lo que se refiere a su influencia sobre la
conducta.
La teoría del aprendizaje de Akers
Desde una perspectiva conductual las creencias o definiciones pueden
precipitar el comportamiento delictivo, operando como estímulos
discriminativos facilitadores. Si alguien tiene la firme creencia de que le están
pagando una miseria en su trabajo y de que él debería ganar mucho más.
Esta convicción podría precipitar que, si se le presenta la oportunidad de
sustraer impunemente algún dinero, lo hará.
La teoría del aprendizaje de Akers
Las creencias o definiciones se adquieren a través de la imitación (es decir,
a partir de lo que uno ve y oye a su alrededor, de las actitudes generales de
la sociedad, de los amigos, de los padres, etc., o bien mediante el
reforzamiento diferencial de ciertas conductas, ya que en muchas
ocasiones las creencias acaban acomodándose al comportamiento fáctico.
Por último, las creencias pueden ser intensas o no, esto es que ellas están
asentadas firmemente, o simplemente se tolera que haya algo de impropio
en la persona.
La teoría del aprendizaje de Akers

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