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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTONOMA DE MEXICO FACULTAD DE MEDICINA DIVISION DE ESTUDIOS DE POSGRADO E INVESTIGACION SECRETARIA DE SALUD DEL DISTRITO FEDERAL DIRECCION DE EDUCACION E INVESTIGACION SUBDIRECCION DE POSGRADO E INVESTIGACION CURSO UNIVERSITARIO DE ESPECIALIZACION EN MEDICINA INTERNA “UTILIDAD DEL INDICE TOBILLO BRAZO COMO MARCADOR DE ISQUEMIA EN PACIENTES CON SINDROME ISQUEMICO CORONARIO AGUDO SICA” TRABAJO DE INVESTIGACION CLINICA DR. CANDIDO FLORES LORENZO PARA OBTENER EL DIPLOMA DE ESPECIALISTA EN MEDICINA INTERNA DIRECTOR DE TESIS: DR. ANTONIO CHAVEZ DIAZ 2010 UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. “Utilidad del índice tobillo brazo como marcador de isquemia en pacientes con síndrome isquémico coronario agudo SICA” Dr. Cándido Flores Lorenzo Vo. Bo Dr. Arturo Robles Páramo _______________________________ Profesor titular del curso de especialización en Medicina Interna Vo. Bo. Dr. Antonio Fraga Mouret ________________________________ Director de Educación e Investigación “Utilidad del índice tobillo brazo como marcador de isquemia en pacientes con síndrome isquémico coronario agudo SICA” Dr. Cándido Flores Lorenzo Vo. Bo Dr. Antonio Chávez Díaz _______________________________ Director de tesis Medico adscrito al servicio de Medicina Interna del Hospital de Especialidades de la Ciudad de México “Dr. Belisario Domínguez”. A mí familia, por su constante apoyo a lo largo de mi carrera. A todos aquellos que han contribuido en mí desarrollo profesional, sin olvidar a los propios pacientes. A todos ellos gracias. Índice Resumen 1.-Introducción 1 2.-Objetivo 21 3.-Material y métodos 22 4.-Resultados 26 5.-Discusión 32 6.-Conclusiones 36 7.-Referencias bibliográficas 39 Resumen Introducción: La enfermedad arterial periférica (EAP) afecta a un 15-20% de los sujetos mayores de 70 años. La prueba diagnóstica realizada en mayor medida para analizar a la población asintomática es el índice tobillo-brazo (ITB). En sujetos sintomáticos, el ITB < 0,9 tiene una sensibilidad > 95% y una especificidad próxima al 100% en comparación con la arteriografía. Además, en los pacientes con enfermedad coronaria conocida, la presencia de EAP eleva el riesgo de muerte un 25% con respecto a los controles. Por todo esto es importante la búsqueda de la EAP incluso en pacientes asintomáticos, para controlar precozmente los factores de riesgo y reducir la mortalidad. Objetivos: Analizar la medición del índice tobillo brazo (ITB) como factor predictor de isquemia en pacientes con enfermedad arterial coronaria (EAC) así como demostrar el nivel de correlación de acuerdo al tipo de SICA. Material y métodos: Se evaluaron en total 40 pacientes, 26 del sexo masculino, 14 del sexo femenino 65% y 35% respectivamente. Se seleccionó edad comprendida >30 años y <70 años. Se tomaron pacientes con factores de riesgo cardiovascular clásicos para cardiopatía isquémica, se excluyeron aquellos pacientes que no cumplían los criterios de inclusión antes descritos. Se midió la presión arterial sistólica braquial y pedia de manera bilateral para determinar el ITB. Resultados: Se determino la sensibilidad, especificidad, valor predictivo positivo (VPP), valor predictivo negativo (VPN) entre mediciones del ITB y el marcador de SICA por laboratorio como es la CK fracción MB realizado a todos los pacientes estudiados. De acuerdo a fórmulas para sensibilidad (a/a + c) X 100, y especificidad (d/b + d) X 100, VPP (a/a + b) X 100, VPN (c/c + d) X100. Se encontró una sensibilidad de 21% y una especificidad de 23.2%, con un VPP de 19 y un VPN de 23. De acuerdo a los valores alterados del ITB y el SICA, se encontró un coeficiente de correlación positiva de 0.86. Discusión: La medición del ITB para enfermedad arterial periférica es la única manera de detectar a los pacientes asintomáticos ya que es uno de los métodos no invasivos, por lo tanto es el más usado. Por lo tanto en el presente estudio el ITB cobra relevancia como factor de riesgo para enfermedad arterial periférica así como para enfermedad arterial coronaria debido a las alteraciones de los valores de ITB que se encontraron en los pacientes estudiados. Conclusión: El análisis final debido a la correlación positiva que se encontró entre ITB y SICA da motivo a la realización de nuevos estudios con características diferentes de pacientes, con un mayor número de pacientes. 1 Introducción La enfermedad arterial periférica (EAP) afecta a un 15-20% de los sujetos mayores de 70 años, si bien es probable que su prevalencia sea aún mayor si se analiza a los sujetos asintomáticos. La prueba diagnóstica realizada en mayor medida para analizar a la población asintomática es el índice tobillo-brazo (ITB). En sujetos sintomáticos, el ITB < 0,9 tiene una sensibilidad > 95% y una especificidad próxima al 100% en comparación con la arteriografía. Cuando se compara a enfermos con EAP con controles de igual edad, la incidencia de mortalidad cardiovascular es del 0,5% en controles y del 2,5% en los pacientes con EAP. Además, en los pacientes con enfermedad coronaria conocida, la presencia de EAP eleva el riesgo de muerte un 25% con respecto a los controles. Por todo esto es importante la búsqueda de la EAP incluso en pacientes asintomáticos, para controlar precozmente los factores de riesgo y reducir la mortalidad. (1). La enfermedad arterial coronaria afecta a los seres humanos de nuestro tiempo a través de los continentes, pasando de los países más desarrolladas a los países subdesarrollados, en los que va en incremento. Es responsable de una fracción muy grande de ingresos hospitalarios, sobre todo en personas de mediana edad y ancianos, contribuyendo mucho a discapacidad y muerte. Durante la segunda mitad del siglo pasado a la actualidad se han multiplicado, la 2 tecnología cada vez más sofisticada y cara de diagnóstico cardiaco y procedimientos terapéuticos, pero los recursosson limitados, mucho más en países en vías de desarrollo como el nuestro, por lo que los médicos tenemos que aprender a usar de modo racional la tecnología y prescribir tratamientos con una relación costo efectiva satisfactoria para el paciente y para el país (2). La prueba diagnóstica realizada en mayor medida para analizar a la población asintomática para EAP es el índice tobillo-brazo (ITB) descrita previamente. En sujetos sintomáticos, comparado con la angiografía, el ITB < 0,9 tiene una sensibilidad cerca del 95% y una especificidad >95% para detectar una estenosis de al menos el 50% de la luz arterial, Además, es un procedimiento barato, preciso y reproducible que no requiere personal especializado. Esta gran precisión diagnóstica, junto con su fácil disponibilidad, lo convierte en el método diagnóstico de elección de EAP, que en la mayoría de los casos no tiene expresión sintomática y justifica su uso sistemático en la evaluación de pacientes con riesgo de enfermedad aterotrombótica. (2), (9). Partiendo de que el ITB es un marcador clínico útil para el diagnóstico de enfermedad arterial periférica, el presente trabajo surge de la necesidad de transpolar dichas mediciones alteradas y ver su utilidad práctica en el diagnóstico de enfermedad arterial coronaria en pacientes con SICA. En México, las enfermedades cardiovasculares constituyen desde hace más de una década la principal causa de muerte y dentro de este grupo de 3 padecimientos, la cardiopatía isquémica causa alrededor de 60% de las defunciones(3). El infarto agudo del miocardio (IAM) constituye una de las enfermedades más frecuentes y de elevada mortalidad en los servicios de urgencias, así como de discapacidad que afecta a la población en edad productiva, con relación 3:1 hombre-mujer. Después de los 60 años, la enfermedad arterial coronaria es la primera causa de morbi-mortalidad entre las mujeres. En México tiene una tasa de mortalidad que ha ido en ascenso en los últimos 30 años, actualmente la cardiopatía isquémica (CI) constituye la principal causa de defunción en las mujeres, aún por arriba de la cifra que ocupan todos los tipos de cáncer juntos; representa, en consecuencia, un gran problema de salud pública. En 1995 la CI produjo 21% de todas las muertes en México y 65% de las muertes atribuidas en Estados Unidos. (4) De ahí que resulta de gran interés el estudio de estos pacientes para determinar factores predictores de enfermedad arterial coronaria tempranos que sean aplicables en nuestro medio, que sean de fácil acceso, de fácil realización y de gran utilidad para nuestra población. Definición: Se entiende por Síndrome Isquémico Coronario Agudo (SICA) a la falta de oxígeno por perfusión insuficiente, secundaria a un desequilibrio entre el aporte y demanda de oxígeno. La causa más frecuente de isquemia miocárdica es la ateroesclerosis de las arterias coronarias epicárdicas. 4 Fisiopatología: Las grandes arterias coronarias epicárdicas pueden contraerse y relajarse; en las personas sanas sirven como conductos y se les denominan vasos de conducción, mientras que las arteriolas intramiocárdicas normalmente exhiben cambios en el tono y por lo tanto se les llama vasos de resistencia.(6) La circulación coronaria normal es dominada y controlada por las necesidades de oxígeno del miocardio. Éstas se satisfacen por la capacidad del lecho vascular coronario para variar considerablemente su resistencia vascular coronaria (y por consiguiente el flujo sanguíneo), mientras el miocardio extrae un porcentaje alto y relativamente fijo del oxígeno. Al reducir la luz de las coronarias, la ateroesclerosis limita el incremento correspondiente de la perfusión cuando aumenta la demanda, como sucede durante el ejercicio o la excitación. Cuando esta obstrucción luminal es pronunciada, disminuye la perfusión del miocardio en estado basal. El flujo coronario también puede verse limitado por trombos, espasmos y, raras veces, por émbolos coronarios. También puede producirse isquemia miocárdica cuando aumenta en exceso la demanda de oxígeno, como ocurre en la hipertrofia ventricular izquierda grave por hipertensión o estenosis aórtica. A menudo coexisten dos o más causas de isquemia, como una mayor demanda de oxígeno por hipertrofia ventricular izquierda secundaria a hipertensión y reducción en el aporte de oxígeno secundaria a ateroesclerosis coronaria y anemia. 5 Las coronarias epicárdicas constituyen el sitio principal de la ateroesclerosis. Los principales factores de riesgo de ateroesclerosis lipoproteína de baja densidad (low-density lipoprotein, LDL) plasmática elevada, lipoproteína de alta densidad (high-density lipoprotein, HDL) plasmática reducida, tabaquismo, hipertensión y diabetes mellitus alteran las funciones normales del endotelio vascular. Cuando la estenosis reduce el área transversal casi 75% no es posible incrementar la circulación para cubrir una mayor demanda miocárdica. Cuando el área luminal se reduce casi 80%, o más, en ocasiones disminuye la circulación en reposo y una reducción mayor del orificio estenosado puede reducir el flujo coronario de manera notable, originando isquemia miocárdica. La estenosis ateroesclerótica segmentaria de las arterias coronarias epicárdicas se debe con frecuencia a la formación de una placa que puede fisurarse o sufrir hemorragias o trombosis. Cualquiera de estos hechos puede agravar transitoriamente la obstrucción, reducir el flujo coronario y producir manifestaciones clínicas de isquemia miocárdica. Durante los episodios de hipoperfusión causados por ateroesclerosis coronaria, la tensión miocárdica de oxígeno desciende y en ocasiones origina alteraciones transitorias de las funciones mecánica, bioquímica y eléctrica del miocardio. El desarrollo brusco de la isquemia grave, como ocurre en la oclusión completa o 6 parcial, provoca el fracaso casi instantáneo de la contracción y la relajación normales del músculo cardiaco. Cuando los episodios isquémicos son transitorios, pueden asociarse a angina, mientras que si son prolongados pueden producir necrosis y cicatrización del miocardio, con o sin el cuadro clínico de infarto agudo del miocardio El miocardio sano metaboliza ácidos grasos y glucosa para formar bióxido de carbono y agua. Durante la privación de oxígeno, no es posible oxidar ácidos grasos y la glucosa es degradada hasta producir lactato. El pH intracelular disminuye, al igual que los depósitos miocárdicos de fosfato de alta energía, por ejemplo, trifosfato de adenosina (adenosine triphosphate, ATP) y fosfato de creatina. La función anormal de la membrana celular provoca salida de potasio y entrada de sodio en los miocitos. La gravedad y duración del desequilibrio entre el aporte y demanda miocárdica de oxígeno define si el daño es reversible (casi 20 min, o menos, de oclusión total en ausencia de colaterales) o permanente, con necrosis miocárdica subsecuente (>20 min). La isquemia también produce alteraciones electrocardiográficas (ECG) características, como anomalías de la repolarización, que se manifiestan por inversión de la onda T y cuando es más grave, desplazamiento del segmento ST. Las depresiones transitorias del segmento ST con frecuencia reflejan una isquemia subendocárdica, en tanto que las elevaciones transitorias aparentemente se deben a isquemia transmural más intensa. Otra consecuencia 7 importante de la isquemia miocárdica es la inestabilidad eléctrica, que puede causar taquicardia o fibrilación ventriculares. La mayoría de los pacientes que mueren súbitamente por cardiopatía isquémica fallece a consecuencia de arritmias ventriculares malignas inducidas por la isquemia. La angina inestable (AI) e Infarto agudo al miocardio sin elevación del segmento ST (IAM SEST), se refiere a una banda temporal amplia que incluye 3 fases;más que un episodio isquémico o aislado. El episodio agudo, que generalmente consiste en la formación de un trombo sobre una placa de aterosclerosis con rotura o erosión, es la manifestación clínica de una enfermedad generalizada y progresiva que en la actualidad se denomina aterotrombosis. Se define a la angina por las siguientes 3 características clínicas; 1) surge durante el reposo (o con ejercicio mínimo) y suele durar más de 10 min; 2) es intensa y su comienzo es reciente (es decir, durante las cuatro a seis semanas anteriores), y 3) su perfil es de intensificación constante (es claramente más intensa, duradera o frecuente que antes). Se confirma el diagnóstico de AI si el individuo con el cuadro clínico de AI termina por mostrar signos de necrosis del miocardio, que se refleja por un mayor nivel de los indicadores biológicos cardíacos. Se han identificado cuatro fenómenos fisiopatológicos que contribuyen a veces a la aparición y evolución de Angina Inestable AI: 1) rotura o erosión de una placa ateroesclerótica, a la que se sobreañade un trombo no ocluyente; en opinión de muchos expertos, es la causa más frecuente; 2) obstrucción dinámica (como 8 espasmo coronario), como se observa en la angina variante de Prinzmetal, 3) obstrucción mecánica progresiva ( ejemplo ateroesclerosis coronaria de evolución rápida o una nueva estenosis después de intervención coronaria percutánea y 4) angina inestable secundaria, que depende de la mayor demanda de oxígeno por el miocardio, del menor aporte de dicho gas (como en el caso de anemia), o de ambos factores. En la AI en 30 a 50% de los pacientes se observa depresión del segmento ST, elevación transitoria del mismo segmento, inversión de la onda T o las dos alteraciones simultáneamente, según la gravedad del cuadro inicial. Los marcadores de necrosis miocárdica en IA/IAM SEST se presentan en los pacientes que presentan sintomatología compatible, se utilizan para identificar pacientes con el diagnóstico de IAM SEST en comparación con los que presentan AI. Los pacientes con AI/IAM SEST que participaron en el grupo de tratamiento invasor del estudio TACTICS-TIMI 18 fueron evaluados sistemáticamente mediante coronariografía. EL 34% presentaba obstrucción crítica (estenosis de más del 50%) de 3 vasos, 28% mostraba afección de 2 vasos, el 26% mostraba afección de 1 vaso y el 13% no mostraba imagen de afección de ningún vaso. 9 La mortalidad a corto plazo en los pacientes con AI es menor (1.7% a los 30 días) que la de los pacientes con IAM CEST o SEST mientras que el riesgo de mortalidad en ambos tipos de infarto es similar (5.1% en cada uno de ellos). Los pacientes con AI/IAMSEST constituyen un grupo heterogéneo cuyo pronóstico puede ser excelente con la realización de ajustes ligeros en el régimen terapéutico, o bien puede ser malo con un riesgo de fallecimiento o de IAM elevado y con la necesidad de tratamiento intensivo. Por ello, la estratificación del riesgo desempeña actualmente una función clave en la evaluación y tratamiento de esta enfermedad. Los objetivos del tratamiento en los pacientes con AI/IAMSEST son los de estabilizar y pasivizar la lesión coronaria aguda, tratar la isquemia residual y aplicar las medidas de prevención secundaria a largo plazo. El tratamiento antitrombótico se utiliza para prevenir una nueva trombosis y para facilitar la fibrinólisis endógena de manera que disuelva el trombo y disminuya el grado de estenosis coronaria. El tratamiento antitrombótico se continúa a largo plazo para reducir el riesgo de aparición de complicaciones futuras y para prevenir la progresión del cuadro hacia una oclusión completa de la arteria coronaria. Los tratamiento antiisquémicos (Beta bloqueadores BB, nitratos, Antagonistas de los canales de calcio ACC) se utilizan principalmente para reducir la demanda miocárdica de oxigeno aunque también parecen prevenir la rotura de la placa. La revascularización coronaria se utiliza con frecuencia en el tratamiento de la 10 estenosis importante de la arteria responsable. Tras la estabilización del episodio agudo es necesaria la reversión de los numerosos factores que dieron lugar al mismo, es decir, el tratamiento de los factores de riesgo ateroscleróticos como la hipercolesterolemia, hipertensión, el tabaquismo etc. El Infarto Agudo del Miocardio Con Elevación del Segmento ST (IAM CEST) surge cuando disminuye repentinamente el flujo de sangre por las coronarias después que un trombo ocluyó una de estas arterias afectada de ateroesclerosis. La lesión es producida o facilitada por factores como tabaquismo, hipertensión y acumulación de lípidos. En casi todos los casos el infarto es desencadenado cuando la placa ateroesclerótica se agrieta, se rompe o ulcera, o cuando algunas situaciones locales o sistémicas facilitan la trombogénesis, de modo que se forma un trombo mural en el sitio de ruptura, y ello culmina en oclusión de la arteria coronaria. Después de que en el comienzo se deposita una sola capa de plaquetas en el sitio de la placa rota, algunos agonistas estimulan la activación de los trombocitos (colágena, ADP, adrenalina, serotonina). Una vez que los agonistas estimularon las plaquetas, se produce y libera tromboxano A2 (potente vasoconstrictor local), que activa todavía más las plaquetas y hay resistencia posible a la trombólisis. La cascada de la coagulación es activada al quedar "expuesto" el factor hístico en las células endoteliales lesionadas, en el sitio de la placa rota. Hay activación de los factores VII y X, lo que culmina en la conversión de protrombina en trombina y 11 como paso siguiente, la conversión de fibrinógeno en fibrina. En la reacción de amplificación que activa todavía más la cascada de coagulación, intervienen la trombina de fase líquida y la ligada a coágulos. Al final, la arteria coronaria afectada queda ocluida por un trombo que contiene agregados plaquetarios y cordones de fibrina. El grado de daño del miocardio originado por la oclusión coronaria depende de: 1) el territorio que riega el vaso afectado; 2) el hecho de que haya o no oclusión total de dicho vaso; 3) la duración de la oclusión coronaria; 4) la cantidad de sangre que aportan los vasos colaterales al tejido afectado; 5) la demanda de oxígeno por parte del miocardio, cuyo aporte de sangre sufrió menoscabo repentino; 6) factores "nativos" que pueden producir lisis temprana y espontánea del trombo ocluyente, y 7) la adecuación del riego al miocardio en la zona infartada cuando se restaura el flujo de sangre en la arteria coronaria epicárdica ocluida. En 50% de los casos parece haber un factor desencadenante antes de que se manifieste el IAM CEST, como sería el ejercicio vigoroso, el estrés emocional o algún trastorno médico o quirúrgico. El IAM CEST puede comenzar en cualquier momento del día o de la noche, pero se han señalado variaciones circadianas, de tal forma que algunos grupos de enfermos muestran el infarto por la mañana, unas cuantas horas después de despertar. 12 La sintomatología inicial más frecuente en personas con IAM CEST es el dolor, profundo y visceral; los pacientes usan algunos adjetivos para describirlo como pesado, constrictivo y opresivo, aunque a veces se usan los calificativos de punzante o quemante. Sus características son semejantes a las de la angina de pecho, aunque suele ser más intenso y duradero. En forma típica, el dolor aparece en la zona central del tórax, en el epigastrio o en ambas regiones, y a veces irradia a los brazos. Sitios menos comunes de radiación incluyen el abdomen, la espalda, el maxilar inferior y el cuello. La localización frecuente del dolor detrás del apéndice xifoides y la negativa del paciente de que puede tener un “ataque al corazón”, crea la impresión falsa de que lo que tiene es indigestión. El dolor de IAMpuede irradiar incluso a la nuca pero no por debajo del ombligo; suele acompañarse de debilidad, sudoración, náusea, vómito, ansiedad y sensación de muerte inminente. Puede comenzar cuando la persona está en reposo, pero si lo hace durante un período de ejercicio, no desaparecerá al interrumpir la actividad, a diferencia de lo que ocurre con la angina de pecho. En el anciano, la aparición de IAM puede comprender disnea repentina que evolucione hasta la aparición de edema pulmonar. Otras manifestaciones iniciales menos frecuentes, con dolor o sin él, incluyen la pérdida del estado de despierto repentina, un estado confusional, sensación de debilidad profunda, la aparición de arritmias, manifestaciones de embolia periférica o simplemente hipotensión arterial inexplicada. 13 El IAM evoluciona a través de las fases cronológicas siguientes: 1) aguda (primeras horas a 7 días); 2) recuperación o curación (8 a 28 días), y 3) cicatrización (29 días o más). Al evaluar los resultados de los métodos diagnósticos en caso de STEMI, hay que tomar en consideración la fase cronológica del propio infarto. Los métodos de laboratorio útiles para confirmar el diagnóstico se dividen en cuatro grupos: 1) ECG; 2) marcadores cardíacos en suero; 3) estudios imagenológicos del corazón, e 4) índices inespecíficos de necrosis e inflamación hística. En la fase inicial de la etapa aguda, la oclusión total de una arteria epicárdica produce elevación del segmento ST. En el comienzo, casi todos los individuos que muestran una elevación del segmento mencionado evolucionan hasta mostrar ondas Q en el ECG y al final el diagnóstico es de infarto del miocardio con onda Q. Una fracción pequeña de los enfermos presenta sólo infarto sin la onda mencionada. Si el trombo no ocluye totalmente el vaso, la obstrucción es transitoria, o si existe una abundante red colateral, no se advertirá elevación del segmento ST. El tejido miocárdico ya necrótico después de IAM CEST libera a la sangre grandes cantidades de proteínas llamadas marcadores cardíacos. En un plazo de 4 a 8 h, aumentan los niveles de fosfocinasa de creatinina (CK), que se normalizarán entre las 48 y 72 h. Un inconveniente importante de medir la CK total es que no señala de manera específica la presencia de IAM CEST, dado 14 que el nivel de la enzima puede aumentar con el traumatismo de músculos de fibra estriada. La isoenzima MB de la fosfocinasa de creatinina tiene la ventaja, respecto a la CK total, de que no aparece en concentraciones relevantes en tejido extracardíaco y es muchísimo más específica. Las troponinas T (cTnT) e (cTnI) cardioespecíficas poseen secuencias de aminoácidos diferentes de las que tienen las formas de tales proteínas en músculo estriado. Las diferencias en cuestión permitieron la creación de métodos cuantitativos para valorar cTnT y cTnI por medio de anticuerpos monoclonales altamente específicos. Los niveles de las dos troponinas pueden permanecer elevados durante siete a 10 días después del IAM con elevación del segmento ST. La mioglobina es liberada en la sangre unas horas después de haber comenzado el IAM CEST. Dicho pigmento es uno de los primeros marcadores cardíacos que aumentan por encima de los límites normales después de IAM CEST, pero no tiene especificidad cardíaca y se excreta rápidamente en la orina, de modo que los niveles en sangre retornan a sus intervalos normales en las primeras 24 h de haber comenzado el infarto. Por estudios de imagen casi indefectiblemente surgen anormalidades del movimiento parietal en la ecocardiografía bidimensional. Por medios ecocardiográficos resulta imposible diferenciar el IAM de una vieja cicatriz en el 15 miocardio o de isquemia aguda intensa, pero la facilidad y seguridad de tal procedimiento motivan que sea un atractivo instrumento de cribado. En el servicio de urgencias, la detección temprana de la presencia o ausencia de anormalidades cinéticas parietales, por medio de ecocardiografía será útil en las decisiones terapéuticas, es decir, decidir si el paciente será sometido a terapéutica de reperfusión (como fibrinólisis o una intervención coronaria percutánea (intervención coronaria percutánea ICP). En el pronóstico es útil estimar por ecocardiografía la función del ventrículo izquierdo VI; la disminución de la función tan sólo constituye una indicación para utilizar un inhibidor de la enzima convertidora de angiotensina. Por medio de ecocardiografía se pueden también identificar un infarto en ventrículo derecho VD, aneurisma ventricular, derrame pericárdico y un trombo en el ventrículo izquierdo. Además, la ecocardiografía Doppler es útil para detectar y cuantificar una comunicación interventricular e insuficiencia de la mitral, que son dos complicaciones graves de IAM. Por medio de gammagrafía de perfusión del miocardio con 201Tl o 99mTc- sestamibi, radionúclidos que se distribuyen en proporción al flujo sanguíneo en el miocardio y que se concentran en el tejido viable, se advierte un defecto ("zona fría") en casi todos los enfermos en las primeras horas de haber sufrido un infarto transmural. Sin embargo, a pesar de que es muy sensible el rastreo gamagráfico de perfusión, no permite diferenciar entre los infartos agudos y las 16 cicatrices crónicas, por lo cual no tiene especificidad en el diagnóstico de infarto agudo del miocardio. Por medio de ventriculografía con radionúclidos realizada con eritrocitos marcados con 99mTc, se identifican a menudo trastornos en la cinética parietal y disminución de la fracción de expulsión ventricular en pacientes con IAM. Aunque inespecífica, esta técnica es útil para evaluar las consecuencias hemodinámicas del infarto y facilitar el diagnóstico de infarto del ventrículo derecho cuando la fracción de expulsión de dicha cavidad disminuye, lo cual se debe a que muchas anormalidades cardíacas diferentes del infarto alteran los resultados de la ventriculografía con radionúclidos. Tratamiento inicial: El pronóstico en casos de IAM CEST depende en gran medida de que surjan dos tipos generales de complicaciones: 1) en la conducción eléctrica del corazón (arritmias) y 2) las de tipo mecánico "falla de la bomba". Muchos de los fallecimientos por IAM que ocurren fuera del hospital se deben a la aparición repentina de fibrilación ventricular. La mayor parte de las muertes por tal complicación se produce durante las primeras 24 h de haber comenzado los síntomas, y de esa cifra más de la mitad se producen en la primera hora, los principales elementos de la atención prehospitalaria de personas en quienes se sospecha IAM deben incluir: 1) identificación de los síntomas por parte del paciente y solicitud inmediata de atención médica; 2) contar rápidamente con un grupo médico especializado en urgencias, capaz de 17 emprender maniobras de reanimación, incluida la desfibrilación; 3) transporte expedito de la víctima a un hospital que tenga servicio continuo de médicos y enfermeras expertos en el tratamiento de arritmias y que brinde apoyo vital avanzado de tipo cardíaco, y 4) emprender inmediatamente la reperfusión. El instrumento básico para la identificación primaria de enfermos y para tomar decisiones en cuanto a la selección es el electrocardiograma inicial de 12 derivaciones. Si se identifica elevación del segmento ST de 2 mm, como mínimo, en dos derivaciones precordiales contiguas y de 1 mm en dos extremidades habrá que pensar que el paciente es candidato para terapéutica por reperfusión, de no haber elevación del segmento ST, no es útil la fibrinólisis e incluso hay datos que sugieren que puede ser dañina. Se ha corroborado que incluso 33% de sujetos con IAM pueden obtener reperfusión espontánea de la arteria coronaria que regaba la zona de infarto en un plazo de 24 horas, y con ello mejorar la curación del tejido infartado.La reanudación de la circulación (reperfusión) por medios farmacológicos (fibrinolíticos) o por intervencionismo coronario percutáneo ICP, se acelera en la arteria ocluida que lleva sangre a la zona del infarto en personas en quienes al final la trombólisis espontánea se produjo, y también incrementa en grado el número de enfermos en quienes se logra restaurar el flujo de una arteria que llevaba sangre a la zona de infarto. La restauración temprana y oportuna del flujo en la arteria epicárdica que riega la zona del infarto, en combinación con una 18 mejor circulación de la zona "corriente abajo" del miocardio infartado, limita el tamaño y el volumen del infarto. Angioplastia coronaria primaria: La intervención coronaria primaria, por lo común angioplastia, colocación de endoprótesis o ambos métodos, sin fibrinólisis previa, técnica denominada ICP primaria, es un procedimiento eficaz para restaurar la corriente sanguínea en IAM si se efectúa en forma inmediata (emergencia) en las primeras horas del infarto. Tiene la ventaja de que se puede aplicar a individuos que muestran contraindicaciones para el uso de fibrinolíticos, pero por lo demás se consideran candidatos apropiados para la reperfusión. Fibrinólisis: Si no se detectan contraindicaciones en circunstancias óptimas la administración de fibrinolíticos debe emprenderse en un plazo de 30 min de aparición del cuadro clínico (el lapso que medie desde la llegada del enfermo hasta la canulación de la vena, de 30 min o menos). Con la fibrinólisis el objetivo principal es restaurar inmediatamente el libre tránsito por la arteria coronaria. En EUA, la FDA ha aprobado fibrinolíticos como el activador de plasminógeno hístico (tissue plasminogen activator, tPA), la estreptocinasa, la tenecteplasa (TNK) y la reteplasa (rPA) para empleo intravenoso en casos de IAM. Los fármacos en cuestión estimulan la conversión de plasminógeno en plasmina, que ejercerá una acción lítica en los trombos de fibrina. El tratamiento apropiado con fibrinolíticos al parecer disminuye el tamaño del infarto, limita la disfunción del LV y aminora la incidencia de complicaciones 19 graves como ruptura de tabiques interauricular o interventricular, choque cardiógeno y arritmias ventriculares malignas. El tejido miocárdico puede ser "salvado" sólo antes de que haya sufrido daño irreversible, razón por la cual asume extrema importancia, para lograr beneficio máximo, el momento en que se emprende la reperfusión, por fibrinolíticos o con una técnica a base de catéter. El límite cronológico superior depende de factores específicos en sujetos individuales, pero se advierte con claridad que "cada minuto cuenta" y que se obtienen los mayores beneficios en los pacientes tratados en un plazo de 1 a 3 h de haber comenzado los síntomas. La disminución de la cifra de mortalidad es más discreta pero el tratamiento sigue siendo beneficioso en muchas personas atendidas 3 a 6 h después del comienzo del infarto, e incluso es posible obtener todavía algún beneficio a las 12 h, en particular si persiste el dolor retroesternal y los segmentos ST permanecen elevados en las derivaciones ECG, que no demuestran aún nuevas ondas Q. Dentro de la terapia integral, incluye, reposo, dieta con abundante residuo, evitar esfuerzos, evitar estreñimiento, es recomendable evitar cuadro de ansiedad lográndose esto con benzodiacepinas de acción corta, el uso y utilidad de fármacos antitrombóticos se basa en pruebas demostradas, que intervienen de forma importante en la patogenia, el uso de bloqueadores beta se ha demostrado tanto en la fase agudo del IAM como a largo plazo, mejoran aporte y 20 demanda de oxigeno así como evitan arritmias letales. Los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (IECA) mejoran la mortalidad después de un IAM el mecanismo primordial evitar la remodelación ventricular. 21 Objetivo 1.-Analizar la medición del índice tobillo brazo (ITB) como factor predictor de isquemia en pacientes con enfermedad arterial coronaria (EAC) así como demostrar el nivel de correlación de acuerdo al tipo de SICA. 22 Material y métodos: Comprende una muestra no aleatorizada de casos consecutivos constituida por 40 enfermos con diagnóstico confirmado de SICA (Angina Inestable (AI), Infarto Agudo del Miocardio con elevación del segmento ST (IAM CEST), Infarto Agudo del Miocardio sin elevación del segmento ST (IAM SEST). Es un estudio observacional, comparativo, prolectivo, con medición transversal de las variables y sin seguimiento prospectivo. Es una investigación sin riesgo (De acuerdo al reglamento de la Ley General de Salud, titulo 2, capítulo 1, artículo 17). Por lo que no fue necesario de hoja de consentimiento informado ni aprobación por el comité de ética de la institución. Se detectaron pacientes con un primer episodio o episodios subsecuentes de SICA (AI, IAM CEST, IAM SEST). Se revisaron a dichos enfermos con SICA hospitalizados en el servicio de urgencias, en Medicina Interna, en terapia intermedia (TI) o terapia intensiva, dentro de las primeras 72 horas de su ingreso. Se confirmó SICA a través de por lo menos 2 de los siguientes criterios; 1).-cuadro clínico típico de isquemia, 2).-resultados de laboratorio (enzimas cardiacas en éste caso determinación de CKMB), 3).-gabinete (cateterismo cardiaco (CC), electrocardiograma (ECG), consignados en el expediente clínico. A dichos pacientes se les realizó la medición del ITB en el lado derecho e izquierdo del cuerpo en posición decúbito 23 dorsal, se midió presión arterial sistólica en arterias braquiales de ambos brazos, así como presión arterial sistólica de arteria pedia de ambas piernas. Las mediciones se realizaron utilizando Baumanometro de columna de mercurio calibrado marca ALPK2 y corroborando presión arterial sistólica con ultrasonido doppler vascular portátil marca Hadeco. Se realizó división de presiones sistólicas tomadas en brazo tercio medio (arteria braquial) y pierna tercio proximal (arteria pedia) de manera bilateral. Se utilizaron los siguientes criterios de inclusión y exclusión; Criterios de inclusión, a).-Hombres y mujeres mayores de 30 años y menores de 70 años al momento de la presentación del SICA. b).-Pacientes con un primer evento o eventos subsecuentes de SICA confirmados con estudios de laboratorio o gabinete asentados en el expediente clínico. c).-La AI se definió en aquellos pacientes que presentaron dolor precordial característico de isquemia miocárdica, con duración mayor de 20 minutos y cambios en ECG con infradesnivel del ST y/o inversión de la onda T, en algún segmento del corazón, sin elevación de enzimas cardiacas, definidas por una CKMB menor de 25mg/dl valor de referencia del laboratorio del hospital. d).-El IAM SEST se definió en aquellos pacientes que tengan dolor precordial característico de isquemia miocárdica, con duración mayor de 30 minutos, que se acompañe de alteraciones en ECG en reposo como infradesnivel del ST, y/o inversión de la onda T, en cualquier segmento del corazón y que presenten elevación de 24 enzimas cardiacas; CKMB mayor de 25mg/dl. e).-El IAM CEST se definirá en aquellos pacientes que tengan dolor precordial característico de isquemia miocárdica, con duración mayor a 30 minutos, con cambios en el ECG, representados por elevación del ST en cualquier segmento del corazón mayor a 1mm, además elevación de CKMB mayor de 25mg/dl. f).-Se incluyen todos los pacientes con SICA que presenten uno o más factores de riesgo cardiovascular (hipertensión arterial sistémica, diabetes mellitus de cualquier tipo, dislipidemia de cualquier tipo, tabaquismo, sedentarismo, dieta aterogénica), g).-El tiempode la revisión de los enfermos, del expediente clínico y la medición del ITB, se realizó dentro de las primeras 72 horas de ingreso al hospital. Criterios de exclusión, a).- Hombres y mujeres menores de 30 años de edad y mayores de 70 años de edad. b).- Pacientes que no completaron criterios clínicos ni de gabinete para SICA. c).- Pacientes que no aceptaron la medición de índice tobillo brazo ITB. d).-Pacientes con más de 72 horas de ingreso al hospital con SICA. e).-Pacientes con diagnóstico previo y/o signos de insuficiencia arterial periférica aguda o crónica. f).-Pacientes con cardiopatía estructural y/o enfermedad arterial de la aorta torácica y/o abdominal que puedan alterar las mediciones del ITB por ejemplo coartación aorta, arteritis de Takayasu, disección aórtica etc. g).-Pacientes con SICA que presentaron durante la fase aguda choque cardiogénico, apoyo de aminas vasoactivas y/o complicaciones agudas como disección de aorta torácica y/o abdominal, debido 25 a que en estos enfermos las lecturas no reflejarán de manera fiel las alteraciones del ITB. h).-Comorbilidades que generan aterosclerosis prematura y que no son consideradas factores de riesgo cardiovascular clásicos como son: Insuficiencia renal crónica, enfermedades del tejido conectivo y calcinosis con calcificación vascular y metastásica. i).-Que los pacientes se encuentren apoyados con dispositivos de asistencia ventricular cuyo ejemplo clásico es el balón de contrapulsación intra-aórtico, éstos pacientes fueron excluidos 26 Resultados: Se evaluaron en total 40 pacientes, 26 del sexo masculino, 14 del sexo femenino 65% y 35% respectivamente. Figura 1. Se seleccionó edad comprendida >30 años y <70 años. Se tomaron pacientes con factores de riesgo cardiovascular clásicos para cardiopatía isquémica, se excluyeron aquellos pacientes que no cumplían los criterios de inclusión antes descritos. De estos, 26 pacientes fueron hombres con edad comprendida entre 33 a 69 años con una edad promedio de 45 años +-5 años, 14 pacientes fueron mujeres con edad comprendida entre los 37 a los 66 años, con edad promedio de 55 años +- 5 años. Figura 1 Distribución de pacientes por sexo 14 26 Distribución por sexo Mujeres 35% Hombres 65% n=40 27 De los 40 pacientes se encontró que las cifras de ITB se encontraban alteradas de acuerdo a los valores estándar para EAP siendo inferior a 0.9 en 18 hombres ya sea derecho o izquierdo y en 6 hombres se encontraba por debajo de esta cifra de los 2 lados. De las 14 mujeres analizadas en 10 se encontraron valores por debajo de 0.9 ya sea derecho o izquierdo y en 4 de las pacientes se encontró valores por debajo de 0.9 en los 2 lados. Comparando y determinando la sensibilidad, especificidad, valor predictivo positivo (VPP), valor predictivo negativo (VPN) entre mediciones del ITB y el marcador de SICA por laboratorio como es la CK fracción MB realizado a todos los pacientes estudiados. De acuerdo a fórmulas para sensibilidad (a/a + c) X 100, y especificidad (d/b + d) X 100, VPP (a/a + b) X 100, VPN (c/c + d) X100. Se encontró una sensibilidad de 21% y una especificidad de 23.2%, con un VPP de 19 y un VPN de 23. De acuerdo a los valores alterados del ITB y el SICA, se encontró un coeficiente de correlación positiva de 0.86. Figura 2 28 Figura 2. Correlación ITB SICA De los SICA que más frecuentemente se encontró fue IAM CEST y AI con 22 y 18 respectivamente, IAM SEST no se documento en los pacientes analizados. Figura 3. 0 0.5 1 1.5 2 2.5 3 3.5 4 4.5 1 3 5 7 9 11 13 15 17 19 21 23 25 27 29 31 33 35 37 39 Correlación ITB SICA SICA ITB 29 Figura 3. Distribución de pacientes de acuerdo a SICA De los pacientes que se analizaron a 14 pacientes se les realizó coronariografía diagnóstica con colocación de 1 a 4 stent, a 13 de los 14 pacientes, 10 hombres y 4 mujeres, al hombre que no se colocó stent fue por enfermedad de múltiples vasos que contraindico la angioplastia, 2 mujeres recibieron fibrinólisis con estreptoquinasa (SK) así como 5 pacientes hombres, el resto de los pacientes solo requirió tratamiento antiisquémico máximo principalmente por 2 razones a).- Por llegar fuera de ventana para ofrecer alguna terapia de fibrinólisis, b).- Por mejoría de cuadro clínico con tratamiento isquémico máximo y no se sometieron a coronariografía diagnóstica en ese momento. Figura 4 22 18 0 Distribución de pacientes de acuerdo a SICA IAM CEST 22 AI 18 IAM SEST 0 n= 40 30 Figura 4. Distribución de pacientes de acuerdo a tratamiento del SICA Los valores de colesterol total, triglicéridos totales, así como niveles de enzimas cardiacas CK total como CKMB se mantuvieron en rangos variables, en algunos pacientes por causas no precisadas no se determinaron niveles de colesterol total (CT) y triglicéridos totales (TGT). Los valores de C-HDL que se determinaron en mujeres y hombres se mantuvieron dentro de valores inferiores de acuerdo al valor normal establecido >40. De los pacientes que se sometieron a coronariografía con colocación de stent solo 1 falleció en el post intervencionismo inmediato, debido a disrítmia cardiaca letal. El tabaquismo fue un factor de riesgo cardiovascular importante en 22 de los 26 hombres y en 5 de las 14 mujeres, así como la Diabetes Mellitus tipo 2 (DM) 0 1 2 3 4 5 6 7 8 IAM CEST AI IAM SEST Angioplastia Fibrinolisis n= 20 31 debido a que no se analizó ningún paciente con Diabetes Mellitus tipo 1, la Hipertensión arterial sistémica (HAS) se mostraron con una prevalencia importante, 9 de 14 mujeres con Hipertensión arterial sistémica y 7 de 14 mujeres con Diabetes mellitus, 17 de 26 hombres con Hipertensión arterial sistémica, 11 de 26 hombres con Diabetes mellitus tipo 2. Figura 5. Figura 5. Factores de riesgo cardiovascular 26 18 12 19 27 40 40 Factores de riesgo cardiovascular HAS 26 DM 18 CT 12 TGT 19 Tabaquismo 27 Sedentarismo 40 Dieta aterogénica 40 n= 40 32 Discusión: Hay estudios recientes que han demostrado que las alteraciones del ITB son un factor independiente de enfermedades cardiovasculares mortales y no mortales, pero el impacto clínico que traduce ésta medida en enfermedades cardiovasculares no se ha analizado en gran medida. (12) En el estudio de Agnelli et al, se encontraron niveles <0.9 de ITB, se asociaron independientemente con una mayor mortalidad por eventos cardiovasculares. (12) En un estudio en España se determinó el ITB como blanco de daño vascular por enfermedades como la hipertensión arterial sistémica, lo que motivo a determinar que el ITB es un factor de riesgo independiente de cardiopatía coronaria y mortalidad cardiovascular. (12) En dicho estudio se determinó la importancia que tienen los valores de ITB en pacientes con hipertensión arterial, así como se determinó que los pacientes con ITB <0.9 tienen generalmente hipertensión arterial severa, además demuestra la afección de órganos “diana” causados por la hipertensión, en éste caso del endotelio vascular, hipertrofia del ventrículo izquierdo, infarto agudo al miocardio, microalbuminuria y enfermedad vascular cerebral. 33 La EAP en individuos mayores de 65 años se encuentra asociada con riesgo elevado de padecimientos cardio y cerebrovasculares, así como con isquemia de los miembros inferiores de diferentes grados de severidad, que puede provocar dificultad para la cicatrización e incluso la amputación. En un estudio prospectivo con seguimiento a 10 años para evaluar la mortalidad asociada con EAP, mediante ultrasonido Doppler se determinó un riesgo tres veces mayor de muerte por todas las causas, 5.9por enfermedad cardiovascular y 6.6 veces más para enfermedad coronaria.(18) La medición del ITB para enfermedad arterial periférica es la única manera de detectar a los pacientes asintomáticos ya que es uno de los métodos no invasivos, por lo tanto es el más usado. Un resultado en reposo < 0.90 traduce una estenosis arterial hemodinámicamente significativa. Dentro de los factores de riesgo descritos clásicamente se encuentra la Diabetes mellitus, dislipidemia (hipercolesterolemia, hipertrigliceridemia), tabaquismo, estado de hipercoagulabilidad, hipertensión arterial sistémica y cuyo manejo incluye el control de estos factores de riesgo principales los cuales son modificables. (20) Es por ello que este estudio trata de visualizar el papel que juega las alteraciones en la medición del ITB y su correlación con enfermedad arterial coronaria. La DM es una de las principales enfermedades metabólicas por excelencia, con lleva una serie de alteraciones en la macro y microcirculación por ello es 34 catalogada como uno de los factores de riesgo clásicos de enfermedad cardiovascular, por lo que muchos estudios están encaminados a determinar prevalencia y tratamiento de las alteraciones vasculares periféricas, debido a las complicaciones que trae consigo desde daño per se al endotelio vascular, como lo que se deriva de ese daño, por ej. Aterosclerosis, eventos trombóticos en la microcirculación, que con todos esos cambios incrementa riesgo de daño irreversible para los tejidos incluyendo la muerte misma del individuo. (19) Por lo tanto lo que se recomienda en pacientes con DM la medición de ITB en aquellos pacientes mayores de 50 años, en aquellos que presentan factores de riesgo como lo son tabaquismo, hipertensión, dislipidemia, así como en caso de resultar normal se sugiere la medición cada 5 años de acuerdo de la sintomatología de los pacientes. (21) En un estudio en ancianos entre 70 a 80 años de edad, su buscó las alteraciones del ITB y el riesgo de mortalidad cardiovascular, de acuerdo a los valores reportados <0.9 o >1.3 los valores que se encontraron por abajo y por arriba de estos rangos se encontró que tenían mayor riesgo de complicaciones cardiovasculares (coronarias, ictus o insuficiencia cardiaca) así como mayor aumento de la mortalidad. (22) Por lo tanto en el presente estudio el ITB cobra relevancia como factor de riesgo para enfermedad arterial periférica así como para enfermedad arterial coronaria 35 debido a las alteraciones de los valores de ITB que se encontraron en los pacientes estudiados. Una de las limitantes del presente estudio podría ser el número de pacientes, la comparación de ITB con pacientes sanos sin factores de riesgo cardiovascular clásicos, así como realización de coronariografía a todos los pacientes incluidos en el estudio, para documentar el daño coronario mediante dicho procedimiento invasivo. No por ello se debe subestimar los resultados que se encontraron en los pacientes analizados. Todo esto debe dar pie a realización de nuevos estudios, con un mayor número de pacientes y con otro tipo de características de pacientes, sobre todo haciendo énfasis en los casos y controles con pacientes sanos. 36 Conclusiones Hasta el momento ésta bien documentado que la medición y los parámetros alterados del ITB son un factor independiente de riesgo de enfermedades cardiovasculares. Por lo que conlleva relevancia importante para la realización de más estudios para correlacionar las alteraciones del ITB con los factores de riesgo cardiovascular clásicos en enfermedad arterial periférica asintomática, por lo tanto uno de los objetivos del presente trabajo fue demostrar la correlación que existe entre las alteraciones del ITB y los pacientes con SICA. Debido al número importante de pacientes que se encontró alterado el ITB, se correlacionó de una manera positiva con el grado de arteriopatía coronaria con 0.86 de correlación positiva. Las alteraciones del ITB reflejan el grado de estenosis, por lo que se ha clasificado de acuerdo a valores por debajo de 0.9 como leve, moderado y severo. Por lo que se puede concluir que dichas alteraciones son determinantes para inferir el grado de estenosis a nivel periférico y transpolandolo a la enfermedad arterial coronaria por lo que ante un estado de daño endotelial generalizado ocasionado por los factores de riesgo cardiovascular clásicos y que clínicamente se reflejan en alteraciones en los valores del ITB. Los valores alterados del ITB en los pacientes analizados se mantuvieron de una manera fluctuante. 37 El análisis final debido a la correlación positiva que se encontró entre ITB y SICA da motivo a la realización de nuevos estudios con características diferentes de pacientes, con un mayor número de pacientes, buscando siempre la correlación de las alteraciones ITB de enfermedad arterial periférica para enfermedad arterial coronaria. Debido a que los estudios que existen que tratan de correlacionar el grado de estenosis en EAP por los valores de ITB se han encontrado mayores complicaciones cardiovasculares, cardiopatía isquémica, insuficiencia cardiaca, enfermedad vascular, así como un aumento de mortalidad. El objetivo principal de éste trabajo fue precisamente buscar la correlación de las medidas de ITB por debajo de 0.9 se correlacionaban con enfermedad arterial coronaria de diferente grado y número de vasos coronarios afectados. En los pacientes que fueron sometidos a coronariografía e intervencionismo coronario en todos los casos se encontró oclusión de una o más arterias coronarias que amerito colocación de uno o más stent. Desde el punto de vista de la enfermedad arterial coronaria crónica sin manifestación de SICA, lo que se pretende establecer con estas medidas de ITB, buscar un método sencillo práctico, clínicamente útil, al alcance de la población, sin necesitar capacitación sofisticada, que nos permita primeramente identificar alteraciones de dicho índice, además de identificar de los factores de riesgo cardiovasculares clásicos en aquellos pacientes que aún no han sufrido un cuadro de SICA y de ahí nos permita intervenir de una manera más agresiva en 38 cuanto a las medidas de prevención primaria, modificando estilos de vida, sobre todo modificando factores de riesgo modificables. Hasta el momento en nuestro país no se han hecho estudios que busquen estos objetivos aquí planteados. 39 Referencias bibliográficas 1.-Debs et al. ¿Aumentan los factores de riesgo coronario el riesgo de muerte después de 5 años? 2001. Rev Cubana Cardiol Cardiovasc; 15(1):6-13. 2.-F. J. Serrano Hernando, A. 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