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Cuentos infantiles y modelos de pensamiento

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Cuentos infantiles y modelos de pensamiento
Los cuentos son importantes en la formación ya que son los primeros modelos que se les ofrecen, transmitiendo valores y contenidos que se adecuan con el pensamiento y la organización social dominante. A través de ellos, se inculcan unos modelos de comportamiento y un pensamiento que se ajusta a los principios del patriarcado. 
Considera que los cuentos son un instrumento para modelar el pensamiento y comportamiento de los niños y, sobre todo, de las niñas que luego serán mujeres. Además, los cuentos pueden ser una forma de educar a los niños sobre los peligros y comportamientos rechazables, mostrando modelos ideales que deben seguir y comportamientos que deben evitar.
En la investigación sobre los cuentos infantiles, se analiza tanto los modelos favorables como desautorizadores de la mujer en los cuentos. Se plantean hipótesis sobre los contenidos de dichos cuentos y se considera que son un referente importante para conocer la historia de las personas que no tienen historia, pues en los valores y principios que en ellos se defienden se ha educado a generaciones de niños desde siglo.
La autora analiza cuatro cuentos principales que muestran las características que se difundían. El primero de ellos, Caperucita Roja, la muestra como una niña ingenua, procedente de un pueblo que no sabe que es peligroso hablar con desconocidos. En el cuento se quiere transmitir un mensaje de obediencia de las niñas, señalando que deben prestar atención a la madre y hacer lo que ella les indica para evitar desgracias para toda la familia. Hace referencia a una escena inolvidable en la que el lobo engaña a Caperucita para que se acueste con él y se sorprende cuando encuentra a la abuela en camisón, este cuento tiene una fuerte carga sexual en la redacción de los hermanos Grimm, ya que contiene varios símbolos sexuales que señalan la seducción que realiza el lobo a Caperucita. 
En este sentido, se menciona que el lobo pretende seducirla para llevarla a la cama, lo que se puede interpretar como un acto en el que se sugiere la pérdida de la virginidad, se indica que la propia cama puede ser uno de los símbolos sexuales que se insinúan en el cuento, por ejemplo, cuando el lobo corre las cortinas para que no lo reconozca Caperucita. En conjunto, se reconocen elementos que transmiten una moral sobre el comportamiento de las mujeres y su relación con los hombres y cómo debe ser guiada por las figuras masculinas protectoras, como el cazador.
El segundo cuento es La Cenicienta, es presentada como un modelo femenino de perfección, ya que es una mujer trabajadora, alegre, solidaria, buena hija y bella, se adecua al modelo patriarcal de la época, lo que le permite tener el premio de conquistar al príncipe. Aunque su vida es difícil, ya que duerme en la cocina y trabaja todo el día, ella es el ejemplo de cómo una mujer debe ser. 
El cuento de La Cenicienta es un ejemplo de modelo femenino de perfección que se adecua al pensamiento patriarcal de la época en que se desarrolló. La protagonista del cuento es presentada como una mujer trabajadora, alegre y bonita y, aunque su vida es difícil, ya que duerme en la cocina y trabaja todo el día, ella es el ejemplo de cómo una mujer debe ser para poder obtener "el premio" de conquistar al príncipe. 
Se puede observar la presencia de estereotipos de género que imponen roles específicos a las mujeres, como el de ser buenas esposas y amas de casa, y como se espera que se adecuen a los ideales masculinos. Además, se muestra la importancia de la belleza física para que un hombre se enamore de una mujer, en este caso el príncipe, lo cual puede ser interpretado como un mensaje que refuerza los estándares de apariencia y belleza impuestos a las mujeres. 
También es posible encontrar elementos del cuento que pueden ser interpretados en clave de lucha feminista, se presenta a una mujer que es capaz de superar su situación de opresión gracias a su propia determinación y a la ayuda de aliados inesperados, como las palomas y el avellano. A pesar de las dificultades, la protagonista no se rinde y consigue su objetivo final, que es la conquista del príncipe y su felicidad personal.
En el contexto se señala que Blancanieves es un cuento de ascendencia germánica que fue recopilado por los hermanos Grimm, aunque su fama actual se debe a la adaptación cinematográfica de Walt Disney. En este cuento, se presenta a una mujer joven y hermosa que es perseguida por su envidiosa madrastra y que encuentra refugio en la casa de los siete enanitos. La madrastra, que utiliza su belleza para manipular y controlar a los hombres, intenta matar a Blancanieves varias veces antes de que esta caiga en un sueño profundo. A diferencia de La Bella Durmiente, en este caso no es un príncipe el encargado de rescatar a la protagonista, sino que lo hacen los siete enanitos que la cuidan y protegen. 
El tercer cuento es Blancanieves, se pueden percibir rasgos patriarcales que refuerzan los roles de género en la sociedad dado que se muestra a la mujer como objeto de deseo y como instrumento de manipulación para las mujeres que están en puestos de poder, aunado a ello, está la figura del hombre protector, representada por los siete enanitos, es fundamental para que ella logre sobrevivir y encontrar la felicidad al final del cuento. 
También es posible encontrar algunas connotaciones sexuales en el cuento, como por ejemplo en la escena del envenenamiento de Blancanieves, quien se come una manzana que tiene un trozo cortado en forma de cruz, que puede simbolizar la virginidad. También se puede interpretar el beso que la despierta como una metáfora del matrimonio y la consumación sexual.
La historia de La Bella Durmiente se centra en una joven hermosa y curiosa que sufre un castigo por su desobediencia, doce hadas son invitadas a su bautizo, pero una de ellas no es invitada y, como venganza, pronuncia una maldición sobre la princesa, dormirá en un profundo sueño durante cien años, hasta que es despertada por el primer beso del príncipe que ha llegado al castillo. 
En el cuento se puede percibir una clara tendencia hacia la sumisión femenina, ya que se espera que La Bella Durmiente se conforme con lo que le ha sido otorgado por su condición social, es decir, la belleza, y que espera pacientemente a que un Príncipe; también se observa una presencia importante del simbolismo sexual, ya que se utilizan elementos como la cama, el bosque y el príncipe para transmitir un mensaje sobre la sexualidad, el amor y las relaciones de poder entre hombres y mujeres. 
ReferenciasSegura Graíño, C. (2014). Modelos desautorizados de las mujeres en los cuentos tradicionales. pp. 221-241. Recuperado de https://doi.org/10.30827/arenal.v21i2.2628

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