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Biologia la Vida en La Tierra-comprimido-351

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¿CÓMO SE CONSERVA EL AISLAMIENTO REPRODUCTIVO ENTRE LAS ESPECIES? 319
b) c)
a)
FIGURA 16-7 Aislamiento mecánico
a) Las conchas de diferentes especies de caracoles se enrollan en
diferentes direcciones. Entre las tres especies estrechamente rela-
cionadas que se observan aquí, dos tienen conchas que se enro-
llan hacia la izquierda y una tiene una concha que se enrolla hacia
la derecha. b) Dos caracoles con enroscados compatibles pueden
aparearse, pero c) caracoles de diferentes especies con enrosca-
dos incompatibles no lo logran porque esta diferencia impide que
sus genitales (señalados con flechas) se unan.
distintas temporadas. Por ejemplo, los pinos obispo y los pinos
de Monterey coexisten cerca de la ciudad de Monterey, en la
costa de California (FIGURA 16-5); sin embargo, estas especies
liberan su polen (y tienen los óvulos listos para recibir el po-
len) en épocas diferentes: el pino de Monterey libera polen 
al comenzar la primavera y el pino obispo lo hace en verano.
Por consiguiente, las dos especies nunca se cruzan en condi-
ciones naturales.
Los rituales de cortejo difieren entre las especies 
Entre los animales, los complejos colores y comportamientos de
cortejo que tanto fascinan a los observadores humanos han
evolucionado no sólo como señales de reconocimiento y eva-
luación entre machos y hembras, sino que también evitan el
apareamiento con miembros de otras especies. Estas señales
y comportamientos distintivos crean un aislamiento de com-
portamiento. Los vistosos colores del plumaje y los llamados
de las aves canoras machos, por ejemplo, atraen a las hembras
de su propia especie; en cambio, a las hembras de otras espe-
cies les son totalmente indiferentes. Por ejemplo, las extrava-
gantes plumas y la pose llamativa de un ave del paraíso
macho en cortejo son señales notorias de su especie, y hay es-
casas probabilidades de que las hembras de otra especie se
sientan atraídas por equivocación (FIGURA 16-6). Entre las
ranas, los machos suelen mostrar una ausencia de discrimina-
ción impresionante, pues saltan sobre toda hembra que esté a
la vista, cualquiera que sea su especie, cuando sienten el im-
pulso de hacerlo. Las hembras, por el contrario, se acercan só-
lo a las ranas machos que croan el llamado propio de su
especie. Si se encuentran en un abrazo no deseado, las hem-
bras emiten la “llamada de liberación”, que induce al macho
a soltarlas. En consecuencia, se producen pocos híbridos.
Las diferencias en la estructura de los órganos 
sexuales frustran los intentos de apareamiento 
entre especies distintas 
En pocos casos, machos y hembras de especies diferentes in-
tentan aparearse, aunque es muy probable que esos intentos
fracasen. Entre las especies animales con fecundación interna
(en las que el esperma se deposita en el interior del tracto re-
productor de la hembra), es posible que los órganos sexuales
del macho y de la hembra simplemente no se ajusten entre sí.
Estructuras corporales incompatibles también imposibilitan
la copulación entre especies. Por ejemplo, los caracoles de es-
pecies cuyas conchas tienen espirales que se forman hacia el
lado izquierdo no podrán copular con caracoles cuyas con-
chas poseen espirales hacia el lado derecho (FIGURA 16-7).
Entre las plantas, las diferencias de tamaño o estructura de la
flor impiden la transferencia de polen entre especies, puesto
que cada flor atraerá a distintos polinizadores. Los mecanis-
mos de aislamiento de este tipo se agrupan en la categoría de
incompatibilidad mecánica.
Los mecanismos de aislamiento posteriores 
al apareamiento limitan la descendencia híbrida
En ciertos casos, el aislamiento anterior al apareamiento fra-
casa. Cuando esto sucede, miembros de especies diferentes se
aparean, y el espermatozoide de una especie puede llegar al
óvulo de otra especie. Sin embargo, tales apareamientos por
lo general no consiguen engendrar descendientes híbridos vi-
gorosos y fértiles a causa de los mecanismos de aislamiento
posteriores al apareamiento.
Los espermatozoides de una especie son incapaces de
fecundar los óvulos de otra
Incluso cuando un macho consigue inseminar una hembra de
una especie diferente, es posible que sus espermatozoides no
fecunden los óvulos de la hembra, un mecanismo que se co-
noce como incompatibilidad gamética. Por ejemplo, en los ani-
males con fecundación interna, los fluidos del tracto
FIGURA 16-6 Aislamiento de comportamiento
El despliegue de las señales de cortejo de un ave del paraíso in-
cluye una postura, movimientos, plumaje y sonidos distintivos que
no se parecen a los de otras especies de aves del paraíso.

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