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SISTEMA ENDOCRINO - INMUNO

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SISTEMA ENDOCRINO
1. INTRODUCCIÓN
El sistema endocrino es un conjunto de órganos, tejidos y células cuya función es
la de producir y secretar en el torrente sanguíneo diversas sustancias químicas
denominadas hormonas.Con la finalidad de actuar como mensajeros, de forma
que se regulen las actividades de diferentes partes del organismo. En este trabajo
le estaremos hablando de las pruebas de laboratorio y técnicas del sistema
endocrino.
1.1. Que es el Sistema Endocrino
El sistema endocrino, también llamado sistema de glándulas de secreción interna,
es el conjunto de órganos y tejidos del organismo, que segregan un tipo de
sustancias llamadas hormonas, que son liberadas al torrente sanguíneo y regulan
algunas de las funciones del cuerpo. Es un sistema de señales que guarda algunas
similitudes con el sistema nervioso, pero en lugar de utilizar impulsos eléctricos a
distancia, funciona exclusivamente por medio de sustancias (señales químicas)
que se liberan a la sangre. Las hormonas regulan muchas funciones en el
organismo, incluyendo entre otras la velocidad de crecimiento, la función de los
tejidos, el metabolismo, el desarrollo y funcionamiento de los órganos sexuales y
algunos aspectos de la conducta. El sistema endocrino actúa como una red de
comunicación celular que responde a los estímulos liberando hormonas.
1.2. ANATOMÍA
a) El hipotálamo: se encuentra en la parte central inferior del cerebro. Une
el sistema endocrino con el sistema nervioso.
b) La hipófisis: la hipófisis se encuentra en la base del cráneo, y no es más
grande que un guisante. A pesar de su pequeño tamaño, la hipófisis se
suele llamar la "glándula maestra". Las hormonas que fabrica la hipófisis
controlan muchas otras glándulas endocrinas.
c) La glándula tiroidea: se encuentra en la parte baja y anterior del cuello.
Tiene forma de moño o de mariposa.
d) Las glándulas paratiroides: son cuatro glándulas diminutas unidas a la
glándula tiroidea, que funcionan conjuntamente: segregan la hormona
paratiroidea, que regula la concentración de calcio en sangre con la ayuda
de la calcitonina, fabricada por la glándula tiroidea.
e) Las glándulas suprarrenales: estas dos glándulas de forma triangular se
encuentran encima de cada riñón.
f) La glándula pineal: está ubicada en el centro del cerebro. Segrega
melatonina, una hormona que puede influir en que tengas sueño por la
noche y te despiertes por la mañana.
https://kidshealth.org/es/teens/brain-nervous-system-esp.html
g) Las glándulas reproductoras, o gónadas, son las principales fuentes de
las hormonas sexuales. La mayoría de la gente no piensa en ello, pero
tanto los hombres como las mujeres tienen gónadas. En los chicos, las
gónadas masculinas, o testículos, se encuentran dentro del escroto. Las
gónadas femeninas, los ovarios, se encuentran dentro de la pelvis.
1.3. FUNCIONES
Las hormonas que segregamos a través del sistema endocrino tienen una
consecuencia directa en todas y cada una de las células de nuestro cuerpo,
manteniendo el equilibrio químico y haciendo que los órganos funcionen
correctamente.
Estos son algunos ejemplos de las funciones del sistema endocrino:
- Se encarga de la comunicación interna del organismo, se comunica
enviando hormonas por el torrente sanguíneo pudiendo llegar a zonas del
cuerpo humano que no alcanza el Sistema Nervioso.
- Participa en la regulación y el desarrollo durante el crecimiento del cuerpo
humano.
- Las hormonas regulan muchas funciones en el organismo, incluyendo
entre otras la velocidad de crecimiento, la función de los tejidos, el
metabolismo, el desarrollo y funcionamiento de los órganos sexuales y
algunos aspectos de la conducta.
- Las hormonas del sistema endocrino ayudan a controlar el estado de
ánimo, la forma en que funcionan los órganos, el metabolismo y la
reproducción.
- Los componentes del sistema endocrino son los encargados de la síntesis y
secreción de mensajeros químicos denominados hormonas que se
distribuyen por el organismo a través de la corriente sanguínea para actuar
a nivel de órganos diana (blanco) específicos.
MARCO TEÓRICO
2. Principales Patologías del Sistema Endocrino (hormonas)
Disfunción del hipotálamo-hipofisis
Glándula hipófisis
La glándula pituitaria es la glándula reina de nuestro cuerpo porque produce o
secreta una variedad de hormonas, algunas de las cuales son hormonas
reguladoras que regulan la mayoría de las funciones del sistema endocrino. El
tamaño medio de la glándula pituitaria es de 12 x 8 mm. El hipotálamo envía
señales a la glándula pituitaria, que produce hormonas para controlar otras
glándulas y muchas funciones corporales, como el crecimiento y la fertilidad.
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https://kidshealth.org/es/teens/male-repro-esp.html
https://kidshealth.org/es/teens/female-repro-esp.html
Ambos lóbulos están conectados al hipotálamo por tallos que contienen vasos
sanguíneos y procesos de células nerviosas (fibras nerviosas o axones). El
hipotálamo controla el lóbulo anterior al conectar los vasos sanguíneos para
liberar hormonas; a su vez, controla el lóbulo posterior a través de impulsos
nerviosos.
No todas las hormonas de la glándula pituitaria se producen de forma continua.
La mayoría se libera en un período de 1 a 3 horas, alternando entre actividad e
inactividad. Algunas hormonas, como la hormona adrenocorticotrópica (ACTH),
la hormona del crecimiento (hormona del crecimiento) y la prolactina siguen un
ritmo circadiano: su concentración aumenta y disminuye de manera predecible
durante el día, generalmente alcanza el nivel más alto antes de despertarse y luego
disminuye Al valor más bajo antes de acostarse. La concentración de otras
hormonas varía con otros factores. Por ejemplo, en las mujeres, la concentración
de la hormona luteinizante y la hormona estimulante del folículo que controlan la
función reproductiva cambia durante el ciclo menstrual.
Adenohipófisis (Anterior)
Hormona adrenocorticotropa (ACTH).
La ACTH es una hormona que es sintetizada mediante la hipófisis anterior como
una precursora a la proopiomelanocortina. Su principal función es la estimulación
en la corteza suprarrenal (zona fasciculada y reticular) y mantener los niveles del
glucocorticoide y los andrógenos. La ACTH se fija a la superficie de las células
de la corteza suprarrenal mediante receptores específicos, la afinidad de fijación
es alta, lo que permite concentrar la ACTH del plasma.
La regulación de la secreción de ACTH se encuentra bajo un control doble:
a) Inhibición feed-back de asa larga de la ACTH por el cortisol circulante (el
cortisol causa feedback en la hipófisis y en el hipotálamo).
b) El hipotálamo secreta CRF, este mecanismo participa en una serie de
estímulos neurógenos por la liberación de ACTH (por ej.: ritmo
circadiano, secreción pulsátil, reacción al dolor, ansiedad, pirógenos,
hipoglucemia y vasopresina). La secreción de ACTH aumenta en
adenomas o hiperplasia hipofisarias (se denomina enfermedad de Cushing,
el resultado es un aumento de cortisol y andrógenos adrenales), tumores
hipofisarios o ectópicos productores de ACTH, insuficiencia adrenal
primaria, stress crónico. Disminuye en síndrome de Cushing de origen
adrenal o iatrogénico, insuficiencia hipofisaria.
Prueba de ACTH
Muestra: plasma con EDTA.: Se obtiene la muestra en un tubo de EDTA
disódico y para evitar que las proteasas séricas entren en acción se coloca en un
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baño de hielo, después se procede a centrifugar y se preserva a una temperatura
de -20°C hasta su procesamiento.
Método:
Se recolecta la muestra de sangre, después, rápidamente se administra el ACTH
en el músculo del hombro, esta hormona puede ser sintética. Después de
transcurrir de 30-60 min se procede a extraer una segunda muestra de sangre
donde se verificará los niveles de cortisol.
Se pueden realizar otros tipos exámenes, como parte del primer examen. Se puede
realizar un examen de cortisol en orina los cuales implica recoger la orina de 24
horas
Tirotropina (TSH).
La TRH es una hormona hipotalámica que controla activamente la TSH en la
glándula pituitaria,pero también es un neurotransmisor que existe en muchas
áreas del sistema nervioso central; también regula la secreción de PRL junto con
otras PRF y tiene efectos extracerebrales. La TRH se encuentra en el hipotálamo
y otras estructuras cerebrales, células C de la tiroides, células β del páncreas,
músculo cardíaco, próstata, testículos y placenta. Sin embargo, las neuronas del
núcleo paraventricular hipotalámico (VPN) son las células que sintetizan la
mayor cantidad de TRH. Solo las neuronas hipotalámicas que producen TRH
regulan el eje. TRH es un tripéptido derivado de la escisión postraduccional de la
molécula de proteína grande pre-pro-TRH (ppTRH) TRH (a través de tres
enzimas convertidoras de prohormonas PC1, PC2 y PC3), que estimula la
formación de ARNm de TSH y PRL. Posee acción estimulante de la secreción,
tropismo y mitogénesis de las células tirotropas. Para su acción, la TRH se une a
receptores específicos de membrana (TRHR), se hidroliza el fosfatidilinositol,
con fosforilización de proteína quinasa C y aumento del Ca+2 intracelular, efectos
modulados por el AMPc y el factor de transcripción Pit-1. Mutaciones del TRHR
pueden inducir resistencia a las hormonas tiroideas. La TRH es un
neurotransmisor en muchas áreas del SNC, localizable en muchas terminaciones
nerviosas y por sus receptores específicos. Posee acciones estimulantes e
interviene en la termorregulación. Además, está presente en el tracto
gastrointestinal y el páncreas, donde actúa como neurotransmisor o
neuromodulador. En su regulación interviene el hipotálamo, el SNC, la TSH y las
hormonas tiroideas. Los impulsos hipotalámicos y neuronales provienen de
sensaciones relacionadas con la temperatura corporal y el metabolismo
energético. La exposición al frío aumenta la secreción de TRH y el aumento de
temperatura la disminuye, así se interpreta la elevación de la TSH en el recién
nacido. Las hormonas tiroideas realizan un servomecanismo negativo a nivel
hipofisario (TSH) e hipotalámico (TRH). La T4 llega fácilmente al SNC y es
captada por las células epiteliales de los plexos coroideos, donde se une a la
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transtiretina, atraviesa la barrera hematoencefálica y ya en el cerebro,
transformada en T3, se une a receptores específicos (TR-α-1 y β-1 y 2) e inhibe la
TRH. La T3 llega con más dificultad al cerebro y necesita concentraciones
mayores en plasma para ejercer su efecto inhibidor. El estrés inhibe la TRH y la
TSH mediante el aumento de corticoides. Pero en la inhibición que acompaña a la
infección y a la inflamación el mecanismo parece actuar a través del factor de
necrosis tumoral α (TNF-α), IL-1 e IL-6 vía directa sobre la TSH. También se
inhibe la desnutrición para ahorrar energía. Esta acción parece mediada por la
leptina que actúa directamente sobre receptores de las propias neuronas secretoras
de la TRH e indirectamente a través de otras neuronas del hipotálamo. La función
de la TRH entonces consistiría en fijar el punto de ajuste del servomecanismo
negativo hipófisis-tiroides, actuando como una especie de termostato. Las
neuronas secretoras de TRH integrarían la información sobre el entorno y los
niveles circulantes de TSH, modificando en última instancia diversos procesos
metabólicos en respuesta a cambios fisiológicos.
Hormona folículo estimulante (FSH). – Hormona luteinizante (LH).
Son hormonas estimulantes de la secreción y el trofismo de las gónadas
femeninas y masculinas, tanto en el aspecto hormonal como en la formación de
las células germinales, óvulos o espermatozoides. Las gónadas tienen doble
función: exocrina y endocrina. La exocrina es importante en la medida que
contribuye al mantenimiento de la especie y culmina en la producción de los
gametos sexuales. La función endocrina conlleva a una serie de pasos de
esteroidogénesis que conduce a la síntesis del principal andrógeno, la
testosterona. Aunque tienen su base en compartimientos anatómica y
funcionalmente distintos, ambas funciones son interdependientes. Su biosíntesis
se realiza en las células gonadotropas de la adenohipófisis. Producen FSH, LH,
activina y folistatina. La FSH y la LH constan de dos subunidades α y β, siendo la
primera de 92 aa, común a ambas y a la TSH y a la gonadotrofina coriónica
humana (hGC), mientras que la cadena β es específica para cada hormona, con
117 aa en la FSH, 121 en la LH y 145 en la hGC, todas ellas son hormonas
glucoproteicas con contenido variable en los residuos de carbohidratos. El gen de
la subunidad alfa se ubica en el cromosoma 6, el de la β-FSH en el 11 y el de la
β-LH en el 19, el mismo que la hGC. La vida media es de 3-4 horas para la FSH y
sólo 20 minutos para la LH en relación inversa al contenido en ácido siálico. En
la mujer, la LH estimula sinérgicamente con la FSH el desarrollo de los folículos
y parece ser responsable de la secreción estrogénica en dichas células en la fase
folicular. Su incremento brusco en sangre es responsable de la ruptura folicular y
la ovulación. Además, induce la formación del cuerpo amarillo y su
mantenimiento, y es responsable de la secreción de estrógenos y progesterona por
el mismo. La acción biológica de la FSH consiste en estimular el crecimiento del
folículo ovárico conduciendo hasta diversos grados de maduración y la formación
de nuevos receptores a la propia FSH y para la LH a nivel del ovario, y favorecer
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las mitosis de las células de la granulosa y la formación de la teca. En el hombre,
la LH se une a receptores de membrana en las células de Leydig testiculares,
activando el sistema AMPc-PK A. Dicha activación estimula la liberación de
colesterol a la membrana mitocondrial interna, una vez dentro de la organela, este
se transforma a testosterona por el sistema de la proteína reguladora de la
esteroidogénesis aguda. Además, la LH ejerce un efecto trófico capaz de
estimular el crecimiento y la diferenciación de las células de Leydig. La FSH no
tiene un papel directo importante en la esteroidogénesis del adulto, aunque sí
indirecto, en la medida en que interviene en el desarrollo de las células de Leydig.
La FSH se une a receptores situados en la membrana basal de las células de
Sertoli, y a través del AMPc estimula a la PK A. La FSH estimula junto con la
LH y la testosterona la espermatogénesis. Además, estimula la secreción de
inhibina B, activina y proteína transportadora de andrógenos, esta última
magnifica la concentración de testosterona en los túbulos seminíferos, necesaria
para la espermatogénesis. En la regulación de la esteroidogénesis no sólo
intervienen las gonadotrofinas sino también numerosos factores intratesticulares
tales como diversas interleuquinas (IL-1, IL-6), el factor de necrosis tumoral α
(TNF-α), el factor de crecimiento transformador β-1 (TGF β-1), y el interferón
gamma (INF-γ), que desempeñan un papel en la regulación paracrina de la
función esteroidogénica de las células de Leydig. Su mecanismo de acción se
efectúa a través de receptores de membrana con proteína G y el AMPc como
segundo mensajero. Su regulación se efectúa dentro del eje
SNC-hipotálamo-hipófisis-gónadas a través de una sola hormona hipotalámica
estimuladora de gonadotrofinas conocida como GnRH que controla a ambas
hormonas, FSH y LH. Diversos neurotransmisores como la noradrenalina, el
GABA, la dopamina y las endorfinas modulan circuitos neuronales hipotalámicos
generadores de secreción pulsátil de la GnRH. La frecuencia y amplitud de los
pulsos de FSH y LH son paralelas a las previas de GnRH. El estradiol y la
testosterona actúan de servomecanismo, así como las inhibinas, A y B, ováricas y
testiculares. En las propias células gonadotropas, la activina y la folistatina
modulan la secreción de FSH. La activina estimula la secreción de FSH mientras
que la folistatina se une a la activina anulando su efecto.
Hormona del crecimiento (GH).
Es una hormona proteica segregada por la glándula pituitaria anterior. En los
niños, la GH promueve el crecimiento, estimulando la secreción de hormonas
(somatomedinas) en el hígado. Las somatomedinas pertenecen a la familia de
hormonasdel factor de crecimiento parecidas a la insulina (IGF). Éstas, junto con
la GH y la hormona tiroidea, estimulan el crecimiento lineal del esqueleto en los
niños.
En los adultos, la GH estimula la síntesis de proteínas en el músculo y la
secreción de ácidos grasos del tejido adiposo (efectos anabólicos). Inhibe la
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captación de glucosa por el músculo, mientras que estimula la captación de
aminoácidos. Los aminoácidos se usan en la síntesis de proteínas y el músculo
pasa a utilizar ácidos grasos como fuente de energía. La secreción de la GH
ocurre en distintos impulsos (secreciones concentradas y cortas) y de manera
esporádica. Por esta razón, generalmente se realiza más de una prueba para medir
la GH. La hormona de crecimiento (GH, growth hormone) es la hormona
adenohipofisaria más abundante. En condiciones normales, la hipófisis humana
contiene entre 5 y 10 mg de GH, En la hipófisis, la GH es sintetizada por las
somatotropas llamadas células acidófilas que se localizan en las zonas laterales de
la glándula. La GH hipofisaria es, en realidad, un conjunto de hormonas en la que
la forma mayoritaria (alrededor de 75% de la hormona en condiciones normales)
es una proteína de 191 aminoácidos y 22 kDa, que se denomina GH22K.
Aproximadamente el 10% de la GH hipofisaria se compone de variantes
derivadas del procesamiento alternativo del ARNm, en el que se eliminan los
primeros 45 nucleótidos del exón 3, lo que da como resultado una proteína de 176
aminoácidos y 20 kDa, como la GH20K.
El control de la hormona del crecimiento adenohipofisaria (HG) reside
principalmente en una hormona hipotalámica estimuladora (hormona liberadora
de la hormona del crecimiento [GHRH]) y otra inhibidora o somatostatina (SST).
La GHRH estimula la secreción, el tropismo y la división de las células
somatotropas adeno-hipofisarias. El gen que codifica la prohormona de la GHRH
actúa a través de su tercer exón para formar dos GHRH de 40 y 44 aa y también
un tercer péptido activo de 29 aa, mientras que el fragmento 1- 27 carece de
actividad. La síntesis de GHRH se localiza en las neuronas que rodean el núcleo
infundibular. Su receptor en las células somatotropas pertenece al grupo de la
proteína G y actúa posteriormente a través del AMPc y del Ca2 + para estimular
la síntesis y la liberación de GH. Un segundo tipo de receptor es el receptor
secretagogo de la GH (GHSR). Este receptor se corresponde con el de la ghrelina
que estimula también la secreción de ACTH y PRL. La ghrelina es un
estimulador más potente que la GHRH. La regulación de la secreción de GHRH
se realiza por impulsos positivos e inhibidores desde diversas áreas del SNC junto
con la inhibición por SST y el servomecanismo corto de la GH.
Déficit de GH
Esto ocurre cuando la glándula pituitaria no logra secretar la cantidad adecuada
de la hormona del crecimiento, a esta es llamada una deficiencia de la hormona de
crecimiento. La causa es por una secreción inadecuada que puede ser tanto
Congénita como Adquirida, por lo general estas no se pueden determinar y se
denominan deficiencia de hormonas de crecimiento idiopática.
Dentro de las causas adquiridas, estas pueden ser autoinmunes como también
tumorales del sistema nervioso central. La deficiencia de la hormona de
6
crecimiento se suele diagnosticar durante la infancia, donde se evidencia que el
niño no tiene la estatura adecuada para su edad.
Prolactina (Prl).
La prolactina (PRL) mantiene una importante interacción bidireccional con el
sistema inmunológico: estimula la proliferación de linfocitos, estimulando así la
respuesta inmunitaria, y sus propios efectos biológicos son controlados por
citocinas que pueden cambiar la concentración plasmática de PRL. Estas
interacciones implican la presencia de receptores específicos de PRL, que están
presentes en las membranas celulares de muchos linfocitos y células auxiliares.
La unión de PRL a estos receptores estimula la síntesis y secreción de citocinas
de linfocitos y es un factor de crecimiento esencial para al menos un linaje de
linfocitos y células auxiliares. También se ha demostrado la presencia de un
mensajero correspondiente a PRL en el citoplasma de linfocitos estimulados por
mitógenos, y se ha demostrado que los linfocitos secretan PRL de forma eficaz.
La PRL actúa sobre las células NK induciéndolas a diferenciarse en células
asesinas activadas por PRL (células PAK) de una manera dependiente de la dosis
(activación a una concentración fisiológica e inhibición de la citotoxicidad a una
concentración 10 veces mayor). Además de ser un factor de diferenciación de
células PAK, la PRL parece regular también el efecto de promoción celular LAK
de IL-2 y es un inductor eficaz de la síntesis de interferón γ e IL-2, lo que indica
que participa en la aparición de la respuesta Th1. Esta característica inmunológica
significa que la PRL se considera actualmente como una citocina, que participa en
las respuestas inmunitarias normales y en muchos procesos patológicos, creando
una importante gama de posibles aplicaciones terapéuticas en los linfocitos.
Regulación de la secreción: La PRL es la única hormona pituitaria controlada
negativamente por el hipotálamo a través de aminas y dopamina. La dopamina
inhibe la liberación de PRL. La inyección intravenosa de TRH libera PRL y la
hipoglucemia insulínica estimula su secreción mediante estimulación
hipotalámica. Como todas las hormonas hipofisarias, la secreción de PRL ocurre
en ráfagas o pulsos a lo largo del día, y es más pronunciada por la noche, pero a
diferencia de la GH, la hipersecreción nocturna ocurre al comienzo de la noche y
no tiene nada que ver con etapas específicas del sueño. Otro factor que estimula la
secreción de PRL es el estrés no específico, los estrógenos y la lactancia.
Acción: El papel fisiológico de la PRL solo se considera importante para las
mujeres embarazadas o en período de lactancia. PRL prepara para la lactancia
materna durante el embarazo y, después del parto, estimula la síntesis de proteínas
específicas de la leche en los senos preparados con dosis suficientes de estrógeno
y progesterona. Después del parto y durante la lactancia, la estimulación de la
succión del pezón genera señales neurales que se transmiten al hipotálamo a
través de la médula espinal, donde inhibe la secreción de dopamina y luego libera
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PRL para estimular la síntesis de proteínas de la leche. Esta estimulación también
conduce a la liberación de oxitocina, reduciendo así los folículos mamarios para
descargarlos. Cuando la madre deja de amamantar, la falta de estimulación de los
pezones provocará una disminución en la secreción de PRL después de
aproximadamente una semana, después de lo cual todo el sistema regresa al
estado anterior al parto. PRL se une a receptores de membrana específicos
(PRLR) para ejercer diversos efectos sobre los tejidos diana. PRLR pertenece a la
superfamilia de receptores de citocinas de tipo I, que también incluye receptores
de GH y varias interleucinas. PRLR consiste en un dominio extracelular
responsable de unir ligandos, una parte transmembrana y un dominio intracelular
responsable de la traducción de la señal; la transducción de la señal de este
receptor depende del reclutamiento de la quinasa Janus (JAK 2), que habilita
sitios específicos en la parte intracelular de Fosforilación del PRLR; esto conduce
a la fosforilación de STAT 5 (transductor de señal y activador de la transcripción,
o transductor de señal y activador de la transcripción), que generalmente conduce
a la regulación de la expresión de varios genes.
La PRL es fundamental para la proliferación del tejido epitelial mamario, efecto
que se consigue indirectamente al inducir la expresión del ligando RANK
(activador del receptor kappa del factor nuclear o activador del receptor kappa del
factor nuclear). RANK induce la proliferación y diferenciación de las células
alveolares mamarias responsables de la secreción de leche. Durante la lactancia,
la prolactina regula la secreción de proteínas de la leche (incluidas caseína,lactoglobulina y proteína de suero) y enzimas (como lactosa sintasa, lipoproteína
lipasa y ácido graso sintasa). Estas enfermedades generalmente no causan el
síndrome de hiper hormonas; en cambio, generalmente son causadas por una
deficiencia hormonal. En este caso, la hiperprolactinemia se debe a la infiltración
del tallo hipofisario que conduce a la interrupción de la tensión dopaminérgica
hipotalámica. Enfermedades como la hipofisitis linfocítica, la sarcoidosis, la
poliangeítis granulomatosa y la histiocitosis de células de Langerhans pueden
manifestarse como hiperprolactinemia, por lo general menos de 100 ng / ml, que
representa del 20 al 50%. Una razón para el mismo mecanismo, pero más
raramente, a veces encontramos hiperprolactinemia en abscesos hipofisarios,
infecciones fúngicas y metástasis hipofisarias. Aunque se produce
mayoritariamente en la hipófisis, se ha comprobado producción en placenta y
otros órganos, como distintas áreas del cerebro, el útero, las glándulas
suprarrenales, los islotes pancreáticos y el intestino. Como el resto de hormonas
hipofisarias, la PRL se libera en forma de pulsos, con un intervalo entre ellos de
aproximadamente 90 minutos; la secreción sigue un ritmo circadiano con mayor
secreción nocturna por aumento de la amplitud de los picos y no de la frecuencia.
El control de la secreción se ejerce desde el hipotálamo pero, a diferencia del
resto de hormonas, este control se realiza por factores inhibitorios, el principal de
los cuales es la dopamina a través de receptores D2 de la membrana de las células
lactotropas. Entre los factores estimulantes se han descrito la TRH y el VIP. Los
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estrógenos aumentan la síntesis de PRL, así sus niveles plasmáticos elevados en
mujeres que en varones, y más en edad fértil que prepúberes o menopáusicas.
Neurohipófisis (posterior)
La neurohipófisis es erróneamente considerada como una glándula productora de
hormonas, cuya función principal no es sintetizar estas sustancias, sino almacenar
y liberar dos hormonas clásicamente relacionadas con este órgano: la oxitocina y
la vasopresina. Estas hormonas se sintetizan inicialmente en el hipotálamo y se
transportan y liberan en la glándula pituitaria posterior. Después del parto, se
almacenan en vesículas neurosecretoras reorganizadas y luego se secretan en la
neurohipófisis a través del torrente sanguíneo.
Una de las principales diferencias entre la neurohipófisis y el resto de la glándula
pituitaria es que debido a su diferente origen embrionario, su estructura no es
glandular como la pituitaria anterior. Además, su crecimiento apunta al
hipotálamo, por lo que su función también es diferente a la de otras estructuras.
Oxitocina
La oxitocina es una hormona neuropéptida, que se caracteriza por jugar un papel
importante en el vínculo social y la reproducción sexual de ambos sexos, y es
esencial durante y después del parto.
Vasopresina
También se llama hormona antidiurética (ADH), arginina vasopresina (AVP) o
arginina vasopresina. Las principales funciones de esta hormona peptídica
incluyen aumentar la cantidad de agua libre de solutos que se reabsorbe en la
circulación y contraer las arterias pequeñas, lo que aumenta la resistencia vascular
periférica y aumenta la presión arterial. Además, también puede tener una tercera
función relacionada con la liberación de vasopresina en ciertas áreas del cerebro.
Esta liberación puede jugar un papel importante en el comportamiento social, la
motivación sexual, las conexiones interpersonales y la respuesta de la madre al
estrés.
Patología
El daño, la degeneración o el cambio de la función neuro pituitaria pueden
conducir al desequilibrio de la secreción de las dos hormonas oxitocina y
vasopresina. La secreción insuficiente de vasopresina puede provocar diabetes
insípida, una enfermedad en la que el organismo pierde su capacidad para
almacenar y concentrar la orina, provocando que el paciente excrete hasta 20
litros de orina diluida todos los días. Por otro lado, el aumento de la cantidad de
vasopresina liberada a la sangre es la principal causa del síndrome de secreción
inadecuada de hormona antidiurética (SIADH), que es una enfermedad neuro
9
pituitaria causada principalmente por fármacos, que puede provocar diversos
síntomas gastrointestinales y neuromusculares, respiratorios y neurológicos.
3. TRASTORNOS SUPRARRENALES
Las glándulas suprarrenales son responsables de la síntesis de varias hormonas.
En la zona cortical se sintetizan las siguientes hormonas:
● El mineral corticoide, cuya producción se relaciona con la zona
glomerular.
● Los glucocorticoides, cuya secreción se atribuye a la zona fasciculada y
la de andrógenos con la zona reticular. Si bien está claro que en la zona
glomerular se produce únicamente la síntesis de aldosterona, por carecer
de 17-a-hidroxilasa que la incapacita para segregar cortisol y andrógenos,
no está tan clara la diferenciación funcional en cuanto a las dos capas
restantes:
➔ Fasciculada
➔ Reticular
Ya que aunque segregan particularmente glucocorticoides y andrógenos
respectivamente ambas son capaces de segregar cortisol y andrógenos.
3.1. Patología Suprarrenal que cursa con hiperfunción:
Se entiende por hiperfunción en la corteza suprarrenal el conjunto de alteraciones
funcionales de la glándula como consecuencia de las cuales se produce un exceso de
secreción de corticoides, global o parcial, en relación con las necesidades del organismo.
Según sea el tipo o predominio de los corticoides segregados en exceso, la hiperfunción
de la corteza suprarrenal puede clasificarse como sigue:
3.1.1. Hiperfunción de mineralocorticoides:
Se entiende por hiperfunción mineralocorticoide la alteración consistente en la
hipersecreción de aldosterona u otro mineralocorticoide, en relación con las necesidades
del organismo.
3.1.2. Hiperaldosteronismo primario:
Entendemos como hiperaldosteronismo primario o aldosteronismo primario el proceso
que se caracteriza por una excesiva secreción de aldosterona por la corteza suprarrenal,
debida a una alteración primaria de la glándula; cursa con cifras bajas de renina a
diferencia del aldosteronismo secundario. Su expresión clínica principal es la
hipertensión volumen-dependiente. Un 1% de los hipertensos tienen esta alteración.
Su etiología es diversa así como sus manifestaciones:
❖ Adenoma solitario:
Es la forma más frecuente de presentación del hiperaldosteronismo primario
(60-70%), conocida con el nombre de síndrome de Conn.
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❖ Hiperplasia micro o macronodular bilateral:
Se manifiesta con la aparición de micro y macronódulos; su expresión clínica, con
un incremento de aldosterona, es menos acusada que en el caso anterior; se
presenta en un 15-30% de los casos y se ha denominado también
hiperaldosteronismo idiopático.
❖ Hiperaldosteronismo sensible a glucocorticoides:
Es una forma de aparición infrecuente que cursa con incremento de ACTH que
hace que exista aumento de aldosterona sin incrementar los niveles de cortisol.
Pueden existir también casos de hiperaldosteronismo por causas neoplásicas o
hereditarias. Es necesario hacer un buen diagnóstico de la enfermedad
diferenciándose de enfermedades de otra etiología que producen hipertensión.
Conviene hacer controles de aldosterona en orina y plasma. La tomografía axial
computerizada y la resonancia magnética, que tienen alto poder de resolución, son
de primera importancia en el diagnóstico por imagen de las secreciones
autónomas de aldosterona.
3.1.3. Hiperaldosteronismo secundario:
En este caso el aumento de producción de aldosterona no se debe a una afectación
primitiva de las suprarrenales sino que se atribuye a una estimulación excesiva
suprarrenal por la angiotensina II. En los pacientes afectos de esta disfunción se detectó
un incremento de la actividad de la renina plasmática así como de la angiotensina II y de
la aldosterona; pueden aparecer edemas, hipertensión arterial renina dependiente o
pueden estar ausentes ambas, como en el caso del síndrome de Bartter en el que existe
eliminación de prostaglandinas.3.1.4. Hipercorticismo mineralocorticoide no aldosterónico:
Aunque en la mayoría de los casos de hipercortisolismo mineralocorticoide existe un
incremento de secreción de aldosterona dando lugar a hiperaldosteronismo, en algunas
ocasiones ocurre que cursa dicha hiperfunción mineralocorticoide sin incremento de las
cifras de aldosterona. Puede aparecer hipertensión arterial volumen-dependiente con
cifras de renina baja.
Existen varios tipos diferenciados, citamos dos:
1. Déficit de 17-a-hidroxilasa. Su déficit origina en el organismo falta de secreción
de cortisol, con lo cual existe insuficiencia suprarrenal y, como consecuencia,
existe una hipersecreción reactiva de ACTH. No se segrega aldosterona, pero sí
está aumentada la secreción de desoxicorticosterona (DOCA), en ocasiones en 50
11
veces su valor normal; aparecen como síntomas hipertensión, alcalosis
hipopotasémica y supresión de la actividad de la renina plasmática.
2. Déficit de 11-b-hidroxilasa: cursa con aumento de la secreción de DOCA y las
mismas consecuencias que en el caso anterior.
3.1.5. Hiperfunción glucocorticoidea o síndrome de Cushing:
Se define como síndrome de Cushing al cuadro clínico producido por una excesiva
producción de cortisol por la corteza suprarrenal. Aunque en general es el cortisol la
hormona cuya secreción está aumentada, en algunas ocasiones, los menos, se acompaña
también de aumentos de secreción de mineralocorticoides y andrógenos.
El síndrome de Cushing endógeno comprende varias patologías diferentes:
● La enfermedad de Cushing: o Cushing hipofisario, ya descrito, secundaria a la
hipersecreción de ACTH hipofisario.
● Cushing suprarrenal: debido a una hipoplasia o displasia suprarrenal o bien a
procesos neoplásicos suprarrenales (adenomas o carcinomas).
● Cushing secundario a la producción ectópica de ACTH por tumores no
endocrinos: surge como consecuencia de enfermedades malignas extra
hipofisarias con niveles plasmáticos de ACTH muy elevados.
● Formas iatrogénicas: debidas a la administración excesiva de corticoides o
ACTH y, en ocasiones, producidas por alcoholismo si bien en este caso, aunque
se encuentra incrementado el cortisol, existe otro factor que es el descenso del
metabolismo hepático del mismo por la afectación de dicho órgano.
En los pacientes afectos del síndrome de Cushing se presentan una serie de síntomas
debidos al aumento de secreción del cortisol como son:
● Alteración del metabolismo de los hidratos de carbono (tolerancia alterada a la
glucosa, incidencia mayor de diabetes mellitus, etc...);
● Alteraciones del metabolismo proteico que dan lugar a atrofia muscular,
adinamia, osteoporosis, etc...;
● Alteraciones del metabolismo graso apareciendo obesidad faciotroncular;
alteraciones hematopoyéticas (poliglobulia y descenso de la actividad bactericida
en los leucocitos);
● Alteraciones en el mesénquima con aparición de púrpura, equimosis y estrías rojo
vinosas; alteraciones nerviosas (síndrome depresivo, estados confusionales,
variación de la conducta, etc.) y circulatorias con hipertensión arterial importante
en la mayoría de los casos.
Para llegar a un buen diagnóstico es útil realizar estudios de cortisolemia que permiten
comprobar la posible pérdida del ritmo nictemeral. También pueden realizarse
determinaciones en orina al objeto de comprobar si existe un aumento de eliminación de
los 17 hidroxicorticosteroides (17-OHCS) así como pruebas de supresión con
12
dexametasona que permiten realizar diagnósticos diferenciales. La ecografía,
gammagrafía y TAC son estudios complementarios muy útiles.
4. Hiperfunción androgénica:
Se conoce con el nombre de hiperfunción corticosuprarrenal androgénica la situación
clínica producida por un exceso de secreción de andrógenos en la corteza suprarrenal.
Dicha disfunción puede clasificarse en base a los déficits enzimáticos que dan lugar a
dicha hiperfunción siendo éstos en general de naturaleza congénita.
Dichos déficits pueden ser tanto de:
● 21-a-hidroxilasa,
● Como de 11-a-hidroxilasa,
● Así como de 3-a-hidroxiesteroide-deshidrogenasa y pueden manifestarse desde la
primera infancia.
Existen también formas adquiridas debidas a procesos en los que aparecen hiperplasia de
la glándula en la zona secretora o bien procesos tumorales. Los tumores virilizantes
pueden ser benignos o malignos con tendencia de localización ovárica y producen una
sintomatología de masculinización en la mujer apareciendo cambios en la musculatura,
calvicie, etc. En el caso de presentarse en la edad prepuberal producen aumento de
crecimiento inicial, cierre precoz de las epífisis y disminución de talla.
Algunos autores estudian los trastornos congénitos de la esteroidogénesis con el nombre
de hiperplasia suprarrenal congénita. Dicha anomalía sucede en el caso de que durante el
desarrollo de las glándulas suprarrenales se produzca un defecto en la síntesis del
cortisol. Por tanto y, a través del mecanismo feedback, se produce un aumento de CRF en
el hipotálamo y en consecuencia mayor secreción de ACTH que provoca una hiperplasia
suprarrenal en un intento de corregir el trastorno. Al estar bloqueada la síntesis del
cortisol existe una desviación con síntesis aumentadas de otras sustancias por ejemplo
andrógenos. Los trastornos enzimáticos más frecuentes en la alteración mencionada son
de 21-a-hidroxilasa, 11-b-hidroxilasa y 17-a-hidroxilasa, que hemos estudiado según la
clasificación de FR. Estos trastornos fueron conocidos durante años con el nombre de
síndromes adrenogenitales ya que además de los trastornos en glándulas suprarrenales
producen trastornos en las clínicas es de naturaleza tumoral, conociéndose al tumor
medular adrenal con el nombre de feocromocitoma. Es una forma tumoral poco
frecuente, en general de localización en médula suprarrenal y excepcionalmente fuera de
ella, allí donde exista tejido cromafín, ya que es un tumor derivado de las células de
dicho tejido.
Se caracteriza por la producción excesiva e inmediata liberación al torrente circulatorio
de catecolaminas, dando lugar en el organismo a los efectos de éstas al ligarse a los
receptores adrenérgicos a y b. Si el tumor es adrenal la secreción es de adrenalina y
noradrenalina; si esta localización es extraadrenal la secreción es solamente de
13
noradrenalina, por carecer el tejido correspondiente del sistema enzimático necesario
para convertir la noradrenalina en adrenalina. La consecuencia de la elevación de
catecolaminas en sangre es el signo clínico por excelencia de esta patología: la
hipertensión. Dicha hipertensión puede presentarse en crisis aislada, mantenida con crisis
paroxísticas, efectos estos ligados a la unión de la noradrenalina con los receptores
adrenérgicos a1.
Los efectos metabólicos que pueden aparecer se relacionan con la acción de la adrenalina
sobre los receptores a. La aparición de crisis hipertensivas está relacionada con factores
mecánicos, digestivos, emocionales o medicamentosos: por administración de fármacos
como etionamida, corti clopramida, metildopa, guanetidina, reserpina; pruebas de
estimulación con fármacos como histamina, tiramina, glucagón, etc.
El cuadro clínico que se presenta puede no identificarse a primera vista con la verdadera
etiología, en cuyo caso la causa puede pasar inadvertida. Los síntomas que aparecen con
más frecuencia son hipertensión generalmente con crisis (90%), cefalea (80%),
sudoración profusa (71%), palpitaciones (64%). Pueden aparecer otros síntomas como
trastornos visuales, dolor torácico o abdominal, miocardiopatía, alteraciones metabólicas
con incremento del metabolismo basal, hemáticas con aparición de aumento de
hematocrito por reducción del volumen plasmático y, ocasionalmente, con policitemia
secundaria a la producción de eritropoyetina por el tumor. Actualmente el diagnóstico se
hace por detección bioquímica de catecolaminas y sus metabolitos (ácido
vanilmandélico, metanefrinas) en sangre y orina.
4.1. Patología suprarrenal que cursa con hipofunción:
La hipofunción de la corteza suprarrenal en un sentidoamplio consiste en un déficit de
funcionamiento global o parcial de la corteza suprarrenal que la incapacita para secretar
hormonas corticosuprarrenales ya sea en situación basal o de stress. La hipofunción
puede ser:
Global: de carácter primario (enfermedad de Addison) generalmente de naturaleza
tuberculosa o autoinmune o de carácter secundario dando lugar a la insuficiencia
corticosuprarrenal aguda.
Parcial: originando los hipocorticismos selectivos.
4.2. Hipofunción corticosuprarrenal primaria crónica o enfermedad de Addison:
Es éste un proceso lesional de ambas glándulas que origina un cuadro dependiente del
déficit de secreción de hoSi se presenta en el varón es en general de etiología
tuberculosa,
Mientras que en la mujer predominan ligeramente los casos autoinmunes.
14
La forma tuberculosa produce una destrucción total de las glándulas suprarrenales
mientras que en la forma autoinmune existe una destrucción cortical no afectándose la
parte medular. En el desarrollo de la enfermedad pueden aparecer:
A. Alteraciones generales (debilidad, fatiga, anorexia, astenia)
B. Alteraciones en la piel y mucosas (pigmentación parda de piel y mucosas
atribuida a la existencia de un incremento de secreción de MSH además del de
ACTH mencionado secundario a la disminución de niveles de cortisol circulante)
C. Alteraciones circulatorias (hipotensión, disminución de volumen plasmático, del
tamaño del corazón, del gasto cardiaco)
D. Alteraciones digestivas (hiperclorhidria, esteatorrea, dolor abdominal, náuseas,
vómitos, diarrea)
E. Alteraciones renales, con aumento de flujo prerrenal atribuido al déficit de
aldosterona
F. Alteraciones en la sangre (anemia, leucopenia, hipoglucemia, etc.)
G. Alteraciones del sistema endocrino, por la mencionada secreción de ACTH y
MSH
H. Alteraciones psíquicas, como disminución de la memoria y de la capacidad de
concentración.
La enfermedad de Addison está fundamentalmente vinculada a la falta de cortisol; menor
importancia tiene la falta de mineralocorticoides y muy marginal es la significación del
déficit de andrógenos. El diagnóstico se hace tras la comprobación en el laboratorio de
cifras bajas de cortisol libre y altas de:
ACTH,así como alteraciones de la eliminación urinaria de cortisol libre y 17-OHCS,
si bien esto último ya no se utiliza.
Pueden emplearse pruebas de estimulación con administración de 0,25 mg de
tetracosáctido (b 1-24 corticotropina) IV en casos de baja sospecha o bien en 1 mg de
tetracosáctido depot en casos estándar;ocasionalmente es preciso recurrir a las pruebas de
estimulación prolongada. Los anticuerpos antisuprarrenales, especialmente para la
21-hidroxilasa, son positivos en el Addison autoinmune. Es necesario hacer diagnóstico
diferencial de la insuficiencia corticosuprarrenal con la de origen hipofisario o
hipotalámico en la que existe déficit de secreción de CRF
4.3. Hipofunción corticosuprarrenal aguda:
También llamada crisis addisoniana. Se debe a un fallo súbito y global de la función
suprarrenal; es un proceso grave que, de no instaurarse el tratamiento correcto
inmediatamente, puede ser mortal. Puede producirse por un accidente vascular en
glándulas suprarrenales sanas o por otros procesos que las destruyen, por ejemplo el
proceso de Waterhouse-Friderichsen (sepsis meningocócica) u otras causas en el recién
nacido, por terapéutica anticoagulante, etc... Puede presentarse también en casos de fallo
suprarrenal primario o secundario consecutivo a una situación de estrés, tales como una
15
infección grave, un tratamiento farmacológico o una intervención quirúrgica. La
terapéutica crónica con glucocorticoides da lugar a una supresión del eje HHS. Existe
susceptibilidad individual a esta supresión en lo que respecta a la dosificación de
esteroides y duración de la terapéutica. El cuadro es alarmante. Una vez instaurado
aparecen diversos trastornos como son hipotensión importante, deshidratación grave, que
pueden conducir a estados de shock y coma; pueden ir acompañados de encefalopatía
grave en el caso del síndrome de Waterhouse-Friderichsen con aparición de petequias y
púrpura.Constituye un caso de urgencia médica y aunque se tomen muestras para
determinar cortisolemia, etc. Debe instaurarse el tratamiento lo antes posible.
4.4. Hipofunción corticosuprarrenal secundaria:
En este caso se produce un déficit de secreción de ACTH; en general, en casos de
panhipopituitarismo o síndrome de Simons-Sheeham es frecuente que se instauró tras un
tratamiento crónico con dosis altas de glucocorticoides. Cursa con pigmentación normal
e incluso disminuida por déficit de secreción de MSH; el déficit mineralocorticoide es
escaso y suele ir acompañado de déficit de otras hormonas.
4.5 Hipocorticismos selectivos:
El fracaso suprarrenal puede ser no global sino selectivo y producir fallo de secreción de
cortisol o aldosterona, dando lugar a los casos de hipercortisolismo o
hipoaldosteronismo. La hipofunción de la médula suprarrenal no tiene como
consecuencia ninguna patología.
5. ENDOCRINOPATÍAS DEL SISTEMA REPRODUCTOR -
5.1. Fisiología hormonal masculina
5.2. Control hormonal de la función testicular
El testículo posee dos funciones básicas: endocrina (producción de hormonas) y exocrina
(producción de espermatozoides) El 85-90% del interior del volumen testicular está
constituido por túbulos seminíferos y su epitelio germinal, lugar de producción de los
espermatozoides (de 10 a 20 millones de gametos al día), y tan sólo el 10-15% está
ocupado por el intersticio, donde se produce la testosterona.
5.2.1. Las funciones de la testosterona en el organismo masculino
● Biosíntesis de la testosterona
La testosterona se produce a partir del colesterol de las células de Leydig, bajo la
influencia de la LH. Las enzimas mitocondriales escinde la cadena lateral del
colesterol en dichas células para formar pregnenolona. Otras enzimas contribuyen
al desarrollo de una serie de pasos biosintéticos para transformar la pregnenolona
en la definitiva testosterona: pregnenolona, progesterona,
dehidroepiandrostenediona, androstenediol y, finalmente, testosterona.
El testículo del hombre adulto produce, aproximadamente, de 5 a 7 mg de
testosterona al día. La secreción de testosterona se ajusta a un ritmo circadiano,
con mínimos a última hora de la tarde y máximos al final de la noche y primeras
horas de la mañana. Las variaciones pueden llegar a tener una amplitud del 36%.
16
Esto explica la importancia de realizar la determinación analítica de esta hormona
a primera hora de la mañana.
● Metabolismo de la testosterona
La testosterona libre se difunde pasivamente sobre las células diana donde puede
ser metabolizada a otro andrógeno de mayor actividad, la 5α-dihidrotestosterona
(5αDHT) mediante la 5α-reductasa, y a 17β-estradiol por la acción de la
aromatasa. Existen dos isoenzimas de 5α-reductasa, la tipo I (se encuentra en la
piel y en el hígado) y la tipo II (se encuentra en la próstata, glándula suprarrenal,
vesícula seminal, piel genital, folículo piloso y corteza cerebral).
● Efectos biológicos de la testosterona
Como hormona del deseo, se sabe que los andrógenos actúan sobre el sistema
nervioso central (SNC), estimulando y manteniendo el deseo, la motivación
sexual. Pero para mantener el deseo erótico se precisa poca dosis de testosterona,
pues influyen muchos otros factores.
Parece que la testosterona es necesaria para el funcionamiento normal del
mecanismo de la eyaculación y el mantenimiento de las erecciones espontáneas.
También se conoce su influencia positiva sobre la respuesta eréctil. La
testosterona estimula la actividad de una enzima, la óxido nítrico sintetasa, que
contribuye a mantener los niveles adecuados de óxido nítrico (ON) en el músculo
liso de los cuerpos cavernosos del pene. Por otra parte, se ha comprobado que
favorece la actividad de la fosfodiesterasa tipo 5.
Pero la testosterona y sus metabolitos son bastante más que una hormona sexual,
y desempeñan numerosas acciones fisiológicas importantes en el organismo,
resultanimprescindibles para la salud global del varón.
Los andrógenos desempeñan un importante papel en la activación de la función
cognitiva; aumentan la masa corporal magra; mantienen la masa ósea (el
hipogonadismo es una de las principales causas de la osteoporosis en los
hombres); estimulan la eritropoyesis; poseen un claro efecto sobre los lípidos:
mejora la concentración de lipoproteínas de alta densidad (HDL) y disminuye la
concentración de los lípidos de baja densidad, el llamado «colesterol malo»
(LDL); favorece la salud cardiovascular; incluso, evidencias actuales refieren un
aumento de la esperanza de vida.
● Trastornos del sistema reproductor masculino
Los testículos cumplen dos funciones: la producción hormonal y la
espermatogénesis. Los trastornos reproductores masculinos se agrupan en
hipogonadismo, infertilidad, varicocele y ginecomastia.
En el hipogonadismo, las manifestaciones clínicas del déficit de andrógenos son
influidas por la edad del inicio del mismo. Si el comienzo es fetal, la
manifestación es el seudohermafroditismo; cuando la insuficiencia androgénica es
prepuberal existe un retraso en la pubertad. Si el déficit empieza en la edad adulta
se presenta disminución de la líbido, impotencia e infertilidad, síntomas que
pueden estar asociados a una serie de características externas, como disminución
de la fuerza muscular y testículos pequeños y blandos. La ginecomastia puede
aparecer como consecuencia de un desequilibrio entre los niveles plasmáticos de
17
testosterona y estrógenos. El hipogonadismo puede ser primario (insuficiencia
testicular primaria) que puede ser debida a varias causas y cuya manifestación, el
déficit de andrógenos, ocasiona azoospermia e infertilidad. La insuficiencia
testicular secundaria (hipogonadismo hipogonadotrópico) se caracteriza por
niveles séricos bajos de testosterona acompañada de concentraciones séricas muy
bajas de LH y FSH. Otro tipo de patología se presenta como consecuencia de la
resistencia del órgano diana que puede aparecer como resultado de un defecto de
la enzima 5a-reductasa para convertir la testosterona en dihidrotestosterona, o
puede deberse a la ausencia de receptores de testosterona. La manifestación
clínica más frecuente es el seudohermafroditismo con frecuente aparición de
ginecomastia.
La infertilidad se define como la falta de concepción tras un año de coitos no
protegidos. Se puede estimar que un 6% de los varones presentan este trastorno.
En los varones con infertilidad hay que realizar una evaluación de la muestra de
semen en cuanto a recuento, motilidad y morfología espermática y si aparecen
anormalidades realizar una valoración hormonal de FSH, LH y testosterona
sérica. Diversos fármacos como la sulfasalazina o los corticoides a dosis
suprafisiológicas pueden afectar a la espermatogénesis; los andrógenos y
estrógenos inhiben la formación de los espermatozoides, de modo que la
testosterona a dosis altas se ha utilizado como anticonceptivo; las radiaciones
penetrantes y los fármacos anticancerosos, especialmente los agentes alquilantes,
inhiben intensamente el ciclo espermatogénico.
Un varicocele es una tortuosidad y dilatación anormales de las venas del plexo
pampiniforme dentro del cordón espermático. Su papel en la etiología de la
infertilidad es controvertido, si bien es una de las causas más frecuentes de
infertilidad masculina.
La ginecomastia o aumento de tamaño de las mamas masculinas es un trastorno
común que puede presentar diferentes etiologías; el 70% de los varones puberales
desarrollan ginecomastia que desaparece en más del 90% de los casos y tiene su
origen en un desequilibrio hormonal. Puede aparecer en la edad adulta por
diferentes motivos, pero en todos los casos aparece una relación
estrógenos/testosterona elevada, bien por estar aumentados los estrógenos o
disminuida la testosterona.
5.2.3. Caso clínico
Paciente masculino de 66 años de edad, natural y procedente de Caja Seca, quien refiere
inicio de enfermedad actual desde hace 5 años caracterizado por aumento de volumen en
ambas mamas, con predominio derecho, acompañado de mastalgia bilateral, que cede
ocasionalmente a la ingesta de analgésicos, con aumento de intensidad en las últimas dos
semanas, por lo que acude a la consulta de la Unidad de Endocrinología del Instituto
Autónomo Hospital Universitario de los Andes. Presenta diagnóstico previo de Diabetes
Mellitus tipo 2 desde hace aproximadamente 10 años, mal controlada, recibiendo
glimepiride 4 mg vía oral diarios. Hepatopatía crónica de probable etiología alcohólica
diagnosticada hace 10 años complicada con várices esofágicas, en tratamiento con
propranolol 40 mg vía oral diarios hasta la actualidad; Hábito alcohólico frecuente hasta
18
la embriaguez, desde la juventud hasta hace 10 años. Al examen físico se observa un
peso: 85 kg, una talla: 164 cms, índice de masa corporal: 31,7 kg/m2 , tensión arterial:
137/72 mmHg, frecuencia cardiaca: 57 latidos por minuto; en buenas condiciones,
hidratado, buena coloración de piel y mucosas; tórax simétrico, se evidencian
telangiectasias. Cardiopulmonar sin alteraciones. En región mamaria se palpa
ginecomastia grado 3 bilateral, con mayor aumento del lado derecho, no doloroso a la
palpación y sin secreciones al momento de la valoración. Abdomen globuloso a expensa
de panículo adiposo, no se evidenció ascitis, ni red venosa colateral, hepatometría
9-10-15 cms, no impresiona esplenomegalia, manos con eritema palmar, miembros
inferiores con edema grado 1 e hipercromía distal, pulsos de buena amplitud, sensibilidad
vibratoria positiva, prueba de monofilamento negativa. Genitales: testículos de 6 mL
cada uno, ambos en bolsas escrotales bien desarrolladas de aspecto rugosos e
hipercrómicos, pene de 15 cms, vello púbico escaso, grueso con distribución masculina.
Dentro de los paraclínicos: Hematología completa: Cuenta blancas: 2680 mm3 , seg:
41,3%, linf: 45,3%, Hb: 15,3 g/dl, plaquetas: 150.000 mm3 . TPp: 14,6 seg TPc: 11seg,
TPTp: 35,2 seg TPTc: 28 seg, Glicemia: 386 mg/dl, colesterol: 180mg/dl, cHDL:
38,3mg/dl, VLDL: 103,5 mg/dl, TG: 250 mg/dl, creatinina: 0,7 mg/dl, urea: 46,4 mg/dl,
proteína total: 6,5g/dl , albumina: 3,6 g/dl, globulina: 2,8 g/d, TGO: 19 UI/ml TGP: 26
Ul/ml, FSH: 33,75 mIU/ml (1,7-12), LH: 14,05 mIU/ml (1,1-7), Estradiol: 38,37 ng/ml
(≤ 62), Prolactina: 8,7 ng/ml (3-25), testosterona: 2,09 ng/dl (3-10,6), T4l: 1,18 ng/dl
TSH: 1,02 uUI/ mL, CA15-3: 32,1 UI/ mL CA 19-9: 13,8 UI/ mL, alfafetoproteina: 2,92
UI/ ml (hasta 6) antígeno carcino-embrionario: 3,34 UI/ mL (≤ 2,3) B-HCG: 1,7 mIU/l
(hasta 3). Ultrasonido de mamas reporta tejido glandular bilateral predominio derecho.
Ultrasonido testicular reporta testículo derecho de 2,55x1,03x2,20 cms, con un volumen
total de 3,02ml, testículo izquierdo de 2,62x1,35x2,48 cm con un volumen total de 4,6ml,
con dilatación del plexo pampiniforme de forma bilateral.
5.3. HORMONAS EN EL CICLO SEXUAL FEMENINO.
En el ciclo sexual femenino intervienen hormonas secretadas por el hipotálamo, por la
hipófisis y por los ovarios.
La hipófisis anterior o adenohipófisis secreta unas hormonas proteicas, las
gonadotropinas, que son de importancia fundamental para la función reproductora y,
como indica su nombre, actúan sobre las gónadas o glándulas sexuales: testículos en el
hombre y ovarios en la mujer. Son la hormona folículo-estimulante (FSH) y la hormona
luteinizante (LH). La FSH llega por la sangre hasta los ovarios y provoca el crecimiento
de los folículos ováricos antes de la ovulación mensual y la secreción de estrógenos por
el folículo que se está desarrollando. La LH provoca la ruptura del folículo De Graaf o
folículo maduro y la ovulación, así como la secreción de estrógenos y progesterona por el
cuerpo lúteo o estructura en que se ha transformado el folículo una vez ha expulsado el
ovocito en la ovulación.
La secreción de las gonadotropinas depende a su vez, del hipotálamo que es una
estructura que se encuentra en el sistema nervioso central, lo que explica el que los ciclos
y la fertilidad de la mujerpueden ser profundamente afectados por las emociones. El
hipotálamo sintetiza y secreta la hormona liberadora de gonadotropinas (GnRH) que es
19
liberada en forma de pulsos cada 90 minutos aproximadamente y es la responsable de la
secreción de FSH y LH por la adenohipófisis.
Por su parte, los ovarios producen dos tipos de hormonas, los estrógenos y la
progesterona.
Los efectos de los estrógenos son:
● Modulan la descarga de GnRH por el hipotálamo y varían la sensibilidad de la
células de la adenohipófisis a dicha hormona hipotalámica
● Desarrollan los órganos genitales femeninos
● Son los responsables de la morfología femenina
● Desarrollan las glándulas mamarias
● Reducen los niveles de colesterol en plasma, lo que explica los menores riesgos
de infarto de miocardio en la mujer premenopáusica con respecto al hombre de la
misma edad y a la mujer menopáusica
● Reducen la fragilidad capilar
● Tienen efectos estimulantes sobre el estado de ánimo
● Tienen efectos protectores sobre el tejido óseo
● Producen retención de agua y sodio por el organismo
Los efectos de la progesterona son:
● Estimula el crecimiento de las glándulas mamarias
● Estimula las secreciones del endometrio
● Tiene efecto calmante sobre el estado de ánimo
● Sube la temperatura corporal
● Facilita el metabolismo de los estrógenos
Los estrógenos y la progesterona se metabolizan en el hígado y los productos resultantes
de su degradación son expulsados por la orina.
5.3.1. Endocrinopatías del sistema reproductor femenino
● Hiperfunción ovárica
La hiperfunción ovárica se refiere a la producción excesiva de andrógenos o
estrógenos por el ovario, posiblemente debido a un tumor primario del ovario o a
una hipoplasia ovárica gonadotropo dependiente.
El hiperandrogenismo puede presentarse como seborrea, acné, infertilidad,
hirsutismo o virilización. Dentro del hiperandrogenismo ovárico funcional se
incluye el denominado síndrome de ovarios poliquísticos, que supone la causa
más frecuente de hiperandrogenismo de comienzo peripuberal y afecta
aproximadamente al 6% de la población femenina.
Las causas pueden ser tumores secretores de andrógenos, hiperprolactinemia, o
bien ovarios androgénicos LH-dependientes. Puede haber un hiperandrogenismo
ACTH-dependiente. La causa más frecuente de hiperestrogenismo es una
conversión aumentada de andrógenos en los tejidos periféricos tales como el
hígado, la piel y la grasa. La otra causa es una hipersecreción ovárica, bien por
una enfermedad primaria como quistes foliculares funcionantes o tumores, o bien
por una hiperestimulación secundaria debida a una HCG aumentada.
20
● Hipofunción ovárica
La hipofunción ovárica puede ser primaria o secundaria, según sea debida a
trastornos en el propio ovario o sea resultado de trastornos extragonadales. Los
trastornos más comunes en la hipofunción primaria son el infantilismo sexual y la
estatura corta, acompañados de una serie de manifestaciones como orejas de
implantación baja, cuello corto, tórax en coraza, acortamiento del 4° y 5°
metacarpiano o metatarsiano.
Otra situación de falta de producción de hormonas por el ovario es la menopausia,
aunque no se trate de una patología propiamente dicha en la mayor parte de los
casos. El término menopausia se refiere al momento en que cesa la menstruación,
mientras que el climaterio define un periodo de tiempo más amplio que comienza
con el cese de la producción de estrógenos por el ovario durante la quinta década
de la vida. Si la menstruación cesa antes de los 40 años, debido a insuficiencia
ovárica, se denomina menopausia prematura. En ambas situaciones pueden
aparecer una serie de trastornos que incluyen sofocaciones, atrofia mucosa del
tracto genitourinario, osteoporosis y estados depresivos, que varían en intensidad
de unas mujeres a otras.
Otra patología endocrinológica ovárica es la insuficiencia lútea, que se define
como una producción inadecuada de progesterona por el cuerpo lúteo para
permitir el desarrollo del endometrio receptivo para la impresión yel
mantenimiento de un embarazo inicial. Las causas específicas incluyen un nivel
inadecuado de FSH al comienzo del ciclo, un nivel de LH deficiente y un déficit
de los receptores de LH en las células del cuerpo lúteo. Es causa frecuente de
abortos precoces.
Podemos clasificar el resto de hipogonadismos ováricos en dos grandes grupos:
congénitos y adquiridos. Entre los congénitos destacan los síndromes de Turner,
Werner y Noonan, la distrofia miotónica de Steiner y los síndromes de resistencia
a FSH y LH. Entre los adquiridos se encuentran la ooforitis intensa, la atrofia
autoinmune aislada o asociada al SPA y los hipogonadismos iatrogénicos
causados por ovariectomía bilateral, radioterapia y quimioterapia.
La hipofunción ovárica secundaria puede producirse por hipogonadotropismo con
dos tipos de pacientes, unos con producción de estrógenos insuficientes y otros
con producción normal o excesiva. El primer caso se presenta como consecuencia
de un fallo en el eje hipotálamo-hipofisario, mientras que la segunda situación
puede ser debida a una secreción aumentada de estrógenos, a partir de un tumor
ovárico, que suprime la secreción de LH y FSH causando anovulación e
hipogonadotropismo.
5.3.2. Caso clínico
Mujer con falla ovárica prematura a los 15 años de edad
Mujer de 22 años que consultó al centro de fertilidad PROCREAR por deseos
reproductivos, conviviente con varón de 29 años de edad desde hacía 3 años. Con
ocupación ama de casa, tenía como antecedentes menarquía a los 15 años, solo 2
menstruaciones, seguida de amenorrea secundaria por 3 años. A los 18 años de edad
21
recibió valerato de estradiol en forma intermitente, que ocasionó sangrado uterino,
abandonando el tratamiento 5 meses antes de su ingreso al servicio. Acudió con una
amenorrea de 5 meses. No tenía antecedentes familiares y patológicos de importancia.
Desarrollo de caracteres sexuales secundarios normales. La ecografía transvaginal de
ingreso mostró útero de 42 x 20 x 33 mm, endometrio 2,2 mm, ovario derecho 17,8 x 9,4
mm e izquierdo 17 x 10,4 mm. Estradiol 5,7 pg/dL, FSH 69 mUI/mL, LH 21,5 mUI/ mL,
prolactina 0,218 ng/mL, testosterona 0,04 ng/mL, insulina 23,3 uU/mL, glicemia 87 mg/
dL, TSH 2,9 uUI/mL, T3L 3,91 uUI/mL, T4L 1,11 uUI/mL. La resonancia magnética fue
referida como normal. En otro control hormonal, estradiol 5,74 pg/dL, FSH 36,38
mUI/mL, LH 17,8 mUI/mL. El cariotipo fue 46, XX. La histerosonografía demostró la
cavidad endouterina libre, el canal cervical permeable.
Se le indicó valerato de estradiol/dienogest, con ecografía de control del útero 69 x 22 x
33 mm al mes y 72 x 24 x 30 mm al año. El espermograma del esposo mostró 55,6
millones de espermatozoides/ mL, motilidad progresiva 24%, morfología normal 4%,
fragmentación de ADN 14,2%.
Se realizó ovodonación-ICSI-columna de anexina, obteniéndose 15 ovocitos; fecundaron
12, llegaron a blastocisto 4 embriones, se transfirió 2 embriones y se congeló 2. Logró
embarazo único, actualmente en curso; el último control a las 15 semanas
6. PATOLOGÍAS TIROIDEAS
TIROIDES
Es una glándula pequeña en forma de mariposa, localizada justo por debajo de la nuez.
Esta glándula tiene un papel muy importante en el control del metabolismo del
organismo, es decir, la velocidad a la que el organismo utiliza la energía. Esto lo realiza a
través de la síntesis de hormonas tiroideas (principalmente tiroxina o T4, y
triyodotironina o T3), que viajan a través del torrente sanguíneo a todas las partes del
organismo. Estas hormonas tiroideas ordenan a las células del organismo la velocidad a
la que deben utilizar la energía y sintetizar proteínas. Además, la glándula tiroides
también sintetiza calcitonina, una hormona que contribuye a la regulación de los niveles
de calcio en sangre inhibiendo la resorción ósea (destrucción) y aumentando la excreción
de calcio a través de los riñones.
❖ Hipotiroidismo - Existe poca cantidad de hormonas tiroideas. Se caracteriza por
un enlentecimiento del metabolismo, de las funciones del organismo. Entre los
síntomasy signos se incluyen: aumento de peso, sequedad de la piel,
estreñimiento, intolerancia al frío, piel engrosada o hinchada, pérdida de cabello,
fatiga y en mujeres irregularidades menstruales. Una forma grave de
hipotiroidismo conocida como mixedema puede provocar una insuficiencia
cardíaca, convulsiones y coma. En los niños, un hipotiroidismo puede impedir el
crecimiento y retrasar el desarrollo sexual. En bebés el hipotiroidismo puede
ocasionar retraso mental. Por este motivo, en nuestro país se realiza un cribado
neonatal del hipotiroidismo ya que su detección permite instaurar el tratamiento
pertinente.
22
❖ Hipertiroidismo - Existe mucha cantidad de hormonas tiroideas. A veces se
conoce también como hiperactividad tiroidea. Se caracteriza por una aceleración
del metabolismo y las funciones del organismo. Entre los síntomas y signos se
incluyen: aumento de la frecuencia cardíaca, ansiedad, pérdida de peso,
dificultades para dormir, temblores en las manos, debilidad y a veces diarrea.
❖ Enfermedad de Graves – Es la causa más frecuente de hipertiroidismo. Se trata
de un trastorno crónico autoinmune en el que el sistema inmunitario de la persona
afectada sintetiza anticuerpos contra el tiroides, causando inflamación, lesión y un
aumento en la producción de hormonas tiroideas.
❖ Tiroiditis de Hashimoto – Es la causa más frecuente de hipotiroidismo. Al igual
que la enfermedad de Graves se trata de una alteración autoinmune crónica en la
que se producen anticuerpos contra el tiroides, causando inflamación y lesiones
en la glándula. Sin embargo, en la tiroiditis de Hashimoto se produce una
disminución en la síntesis de hormonas tiroideas.
❖ Tiroiditis - La tiroiditis es una inflamación del tiroides que puede ir asociada
tanto a hipotiroidismo como a hipertiroidismo. Aunque no siempre, puede
producir dolor en la garganta similar al de unas anginas. La tiroiditis puede
deberse a actividad autoinmune, infecciones, exposición a productos químicos
tóxicos para el tiroides, o a otros motivos desconocidos. En función de la causa,
será aguda, transitoria o crónica.
❖ Nódulos Tiroideos - Un nódulo tiroideo es un pequeño bulto en la glándula
tiroidea que puede ser sólido, o bien un quiste lleno de líquido. Estos nódulos no
son raros y suelen ser benignos. Sin embargo, en algunas ocasiones, los nódulos
tiroideos pueden ser cancerosos y requieren tratamiento.
❖ Cáncer de Tiroides - El cáncer de tiroides es bastante infrecuente. Básicamente
existen cuatro tipos de cáncer de tiroides: papilar, folicular, anaplásico y medular.
Aproximadamente el 80% de los cánceres de tiroides son del tipo papilar. Este
tipo de cáncer afecta más a mujeres que a varones, y es más frecuente en personas
jóvenes. Cerca de un 15% de los cánceres son de tipo folicular, que son más
agresivos que los papilares y suelen afectar a mujeres mayores. El cáncer
anaplásico, también más frecuente en mujeres mayores, representa
aproximadamente un 2% del total de los cánceres tiroideos, y es agresivo y difícil
de tratar. El cáncer medular de tiroides (CMT) produce calcitonina y puede
encontrarse junto a otros cánceres de tipo endocrino en un síndrome denominado
neoplasia múltiple endocrina (MEN). El CMT representa cerca del 3% de los
cánceres de tiroides y en caso de que se haya extendido más allá de la glándula
tiroides puede ser difícil de tratar.
❖ Bocio - Se trata de un agrandamiento visible del tiroides. Hace unos años, era una
situación relativamente frecuente debido a la falta de yodo en la dieta. El yodo es
un componente esencial para la síntesis de las hormonas tiroideas. Actualmente,
gracias a la adición de yodo en la sal común (sal yodada) de forma rutinaria, la
incidencia de bocio por déficit dietético ha disminuido significativamente. Sin
embargo, en otras partes del mundo el bocio por déficit de yodo es bastante
frecuente, llegando a ser la forma más común de hipotiroidismo en algunas áreas
23
geográficas. Cualquiera de los trastornos tiroideos antes comentados puede ser
causa de bocio. Los bocios pueden comprimir estructuras vitales del cuello,
incluyendo la tráquea y el esófago, y esto puede representar una dificultad para
respirar y deglutir.
6.1. La prueba de la tirotropina
La prueba de la tirotropina (TSH, por sus siglas en inglés, y también conocida como
hormona estimulante de la glándula tiroidea), es una prueba habitual en los análisis de
sangre que se utiliza para evaluar lo bien que está funcionando la glándula tiroidea. Esta
glándula está ubicada en la parte inferior y anterior del cuello. La TSH se fabrica en la
hipófisis, una glándula del tamaño de un guisante localizada en la base del cerebro.
Cuando la glándula tiroidea está fabricando una cantidad insuficiente de hormonas
tiroideas (una afección denominada "hipotiroidismo"), la hipófisis fabrica una mayor
cantidad de TSH a fin de estimular a la glándula tiroidea y aumentar la producción de
dichas hormonas. Pero si la hipófisis no funciona bien, es posible que fabrique una
cantidad insuficiente de TSH, lo que también podría provocar un hipotiroidismo.
Si la glándula tiroidea está fabricando una cantidad excesiva de hormonas tiroideas (una
afección que recibe el nombre de "hipertiroidismo"), la hipófisis fabricará menos TSH a
fin de reducir la producción de dichas hormonas por parte de la glándula tiroidea.
Los síntomas del hipotiroidismo en los niños incluyen cansancio, piel seca,
estreñimiento, enlentecimiento del crecimiento y retraso del desarrollo durante la
pubertad. El hipertiroidismo puede provocar una pérdida inesperada de peso, frecuencia
cardíaca rápida o irregular, sudoración, nerviosismo e irritabilidad.
Tanto si un niño padece hipotiroidismo como si padece hipertiroidismo, puede desarrollar
bocio, un bulto en el cuello que resulta del agrandamiento de la glándula tiroidea. Ambas
afecciones tienen tratamiento.
La TSH es muy sensible a las variaciones de los niveles circulantes de hormonas T4 y
T3. Un pequeño aumento de la concentración de T4 libre produce una gran disminución
de la concentración de TSH, y viceversa.
Las pruebas de función tiroidea son unos análisis sanguíneos para analizar el
funcionamiento de la glándula tiroides. Se analiza el TSH en plasma, y la T4 libre y T3
total.
Los niveles normales de la TSH se sitúan entre 0,37 y 4,7 mUI/L, variando éstos según
los laboratorios. Los niveles de T4 en plasma se sitúan entre 60 y 150 nmol/L y los de T3
se sitúan entre 1,2 y 2,7 nmol/L.
Algunas alteraciones de la glándula tiroidea tienen su origen en una enfermedad
autoinmune. En estos casos tiene interés medir los niveles de algunos autoanticuerpos,
como son los anticuerpos antitiroglobulinas, anti-peroxidasa tiroidea o anti-receptor de
TSH.
24
6.2. MÉTODOS PARA LA DETERMINACIÓN DE LA HORMONA
TIROESTIMULANTE (TSH)
Se utilizaba el método de radioinmunoanalisis (RIA) , que ha sido suplantado por
ensayos inmunometricos (IMA) por ser más sensible y específica, permite medir
concentraciones muy bajas de TSH en suero.
6.2.1 TÉCNICA
Este ensayo emplea dos anticuerpos y por lo menos uno de ellos se dirige contra la
subunidad beta de la TSH. Se agrega la muestra de TSH seguida por un segundo
anticuerpo para formar un “emparedado”, el segundo anticuerpo se marca con un
radioisótopo, una enzima o un marcador fluorescente o quimioluminiscente que permite
medir la TSH.
- Ensayo Inmunométrico (IMA) o Metodología tipo sandwich
El advenimiento de la tecnología que emplea anticuerpos monoclonales (MAb),
ha sido lo que fortaleció el desarrollo del IMA, ya que estos métodos trabajan con
exceso de anticuerpo . Requieren un exceso del anticuerpo único o mezcla de
anticuerpos MAB unidos a un soporte sólido. Este anticuerpo monoclonal
asociado a la fase sólida "capta" el analito de la muestra de suero mientras un
anticuerpo monoclonal o policlonal (Pab) diferente, marcado con una señal
(isótopo, enzima, fluoróforo, molécula quimioluminiscente o bioluminiscente), se
une a un epitope (s) diferente del analito. Durante un período de incubación de
0,5 -24 horas (dependiendo del tipo de ensayo) las moléculas del analito en el
suero se unen tanto al anticuerpo de captura como al asociado a la señal para
formar un sándwich (Anticuerpo de captura-Analito-Anticuerpo señal). Después
de lavar el soporte sólido, existe una relación lineal entre la señal unida al soporte
sólido y la concentración sérica del analito. Una relación lineal entre las
concentraciones de analito en los standards y la señal unida al soporte sólido
forma la curva de calibración, base contra las cuales se cuantifican las muestras
de concentración desconocida.
- Medición de TSH Sérica - Especificidad
La especificidad del anticuerpo de captura seleccionado para un método de TSH
determina qué isoformas de TSH son detectadas por el ensayo. Es bien conocido
que la glicosilación (especialmente el grado de sialización) de la molécula de
TSH determina su clearance así como también su actividad biológica. También
está bien establecido que situaciones fisiopatológicas influyen en la glicosilación
molecular. Las mediciones de TSH séricas hechas en el Hipotiroidismo central
(disfunción hipofisaria o hipotalámica) provee un claro ejemplo de discordancia
entre bioactividad e imunoactividad. Específicamente, tales pacientes tienen
hipotiroidismo clínico y pese a eso tienen TSH sérica en el rango normal o aún
ligeramente elevada. Las moléculas de TSH aisladas del suero de tales pacientes
muestran claramente glicosilación anormal y disminuida potencia biológica. En
contraste, los pacientes con tumores hipofisarios pueden exhibir TSH con
glicosilación anormal que aumenta la actividad biológica.
25
Todos los métodos de TSH están estandarizados contra la misma preparación de
referencia internacional (MRC 80/558) pero están construidos usando diferentes
anticuerpos monoclonales. Ya que diferentes anticuerpos monoclonales sobre el
soporte sólido capturan diferentes isoformas de TSH de la muestra, existen
diferencias entre métodos que usan anticuerpos monoclonales de captura
diferentes. Como se muestra en la Fig. 5, esto afecta principalmente el límite de
referencia superior y así el valor de corte que se debería usar para definir el
hipotiroidismo leve (subclínico).
Fig.5 Rangos de referencia para 12 ensayos inmunométricos de TSH
6.3. MÉTODOS PARA LA DETERMINACIÓN DE LA HORMONA T3
Total
Método de RIA en fase sólida. La T3 está marcada y compite con la T3 del paciente por
el anticuerpo inmovilizado en la pared de un tubo de polipropileno. Se utilizan agentes
bloqueadores para liberar la T3 enlazada. Tras la radiactividad, la decantación es
inversamente proporcional a la concentración de la T3 de la muestra , los recuentos xmin
se comparan con los de la una curva estándar.
6.3.1. RADIOINMUNOENSAYO (RIA)
Esta técnica fue desarrollada por Solomon A. Berson y Rosalyn Yalow en 1960 para
determinar la concentración de insulina en el plasma sanguíneo. Por ese motivo, R.
Yalow recibió el Nobel de Medicina en 1977 (Berson murió en 1972). Hoy en día, esta
técnica se utiliza para detectar y cuantificar sustancias que se encuentran en cantidades
muy pequeñas y mezcladas con muchas otras. Es por tanto una técnica muy sensible y
muy específica. Utilizando anticuerpos de gran afinidad se pueden detectar hasta
picogramos de antígeno. (1 pg = 10-12 g).
El fundamento es muy sencillo:
❖ Se mezcla una cantidad constante de antígeno marcado radiactivamente y
una cantidad constante de un anticuerpo para ese antígeno
❖ Se produce la reacción entre antígeno (Ag) y anticuerpo (Ac)
26
❖ Se separa la fracción de antígeno que se ha unido de la que permanece
libre (hay varias formas de hacerlo. En la figura inferior se utiliza un 2º
anticuerpo dirigido contra el primero)
❖ Se determina la radiactividad
❖ Si la muestra contiene además antígeno frío (no marcado), éste competirá
con el marcado para unirse al anticuerpo, y se observará un descenso en la
medida de la radioactividad
❖ Este descenso es proporcional a la concentración de antígeno frío en la
muestra.
Niveles elevados de TSH pueden estar causados por:
❖ Hipotiroidismo. La tiroiditis crónica (Enfermedad de Hashimoto)
❖ De manera muy poco habitual pueden estar relacionados con disfunciones en la
glándula pituitaria (como un tumor) que aumenta la producción de TSH
❖ Un control inadecuado en la medicación para personas en tratamiento de una
condición de tiroides
Valores bajos de TSH pueden estar causados por:
❖ Hipertiroidismo
❖ De manera menos habitual pueden estar relacionados con disfunciones en la
glándula pituitaria que previenen la producción de TSH
❖ Un control inadecuado o desajuste en la medicación para personas en tratamiento
de una condición de tiroides
❖ Algunas fases del embarazo
7. PÁNCREAS ENDOCRINO
Las células endocrinas del páncreas se localizan en los islotes de Langerhans que
constituyen tan sólo el 2% de la masa pancreática, las hormonas mantienen la
homeostasis de la glucosa. Existen dentro del islote cuatro tipos de células que dan lugar
a las siguientes hormonas:
❖ Células (α) de los islotes pancreáticos secretan glucagón 
 en respuesta a niveles
bajos de glucemia
❖ Células (β) secretan insulina en respuesta a niveles elevados de glucemia
❖ Células D : Producen somatostatina
❖ + células F: Produce polipéptido pancreático
Además de estas cuatro hormonas mencionadas, los islotes de Langerhans también
secretan otros péptidos con función endocrina como la amilina, la adrenomedulina, el
péptido relacionado con el gen de la calcitonina, el péptido C, la pancreostatina, la
secretoneurina, la ghrelina, la resistina, la urocortina y el factor relacionado con la
corticotropina , cada una de las hormonas es capaz de influir en la secreción de las
27
demás. La somatostatina (SST) suprime la secreción de las otras tres. La insulina suprime
la secreción de glucagón. El glucagón estimula la secreción de insulina y somatostatina
puede suprimir su propia secreción
7.1. INSULINA
La insulina es una proteína formada por dos cadenas peptídicas A y B de 21 y 30
aminoácidos unidas, mediante enlaces covalentes, por dos puentes disulfuro, y un puente
intracatenario, y es segregada por las células β del islote pancreático.La importancia de
la insulina es por el papel determinante de esta hormona en la homeostasis de la glucemia
y su relación con la diabetes mellitus (DM). La insulina permite que la glucosa penetre
en las células para ser utilizada como fuente de energía. Si la insulina no hace bien esta
función, la glucosa se acumula en sangre produciendo hiperglucemia. , la deficiencia de
insulina es una de la causa de la diabetes que se conoce como dos tipos : la diabetes
insulinodependiente o DiabetesM. tipo 1 y la diabetes no insulinodependiente o Diabetes
M.tipo 2 . 
La carencia de insulina produce un incremento de glucosa y cuerpos cetónicos
en plasma, y la pérdida de estos solutos a través de la orina arrastra agua produciendo un
aumento del volumen de orina (poliuria) y de la sed (polidipsia). La pérdida de volumen
plasmático da lugar a una hipotensión que puede llevar aparejado una disminución de
flujo sanguíneo cerebral que lleva al coma y a la muerte. La DM tipo 1 y la tipo 2
comparten como característica común la hiperglucemia, ya sea debido a una disminución
y deterioro progresivo de la masa de células β en los islotes pancreáticos o a una
disminución en la eficacia de los mecanismos de señalización
➔ Diabetes M. tipo 1: Se caracteriza por la destrucción de los islotes pancreáticos
de células beta e insulinopenia total; por lo que los individuos presentan la
tendencia hacia la cetosis en condiciones basales. Es una de las enfermedades
crónicas más frecuentes de la infancia, cuya incidencia está aumentando,
especialmente en niños menores de 5 años; afecta de manera importante la salud
de la población, sobre todo a través de sus complicaciones crónicas o a largo
plazo, que provocan una morbilidad frecuente y disminuyen de forma
significativa las expectativas de vida. Esta se ha clasificado en dos tipos:

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