Vista previa del material en texto
302 ATLAS DE ANATOMÍA PATOLÓGICA FIGURA 13-33 Carcinoma de células escamosas, tomografía computarizada Esta TC de la pelvis pone de manifiesto una gran masa (�), con atenuación heterogénea por la necrosis y espacios llenos de aire. La masa se origina en el cérvix y se extiende anteriormente a la vejiga (�) y posteriormente al recto (�). Este carcinoma de células escamosas del cérvix ha invadido el recto y la vejiga y, por tanto, está en estadio IV. FIGURA 13-34 Carcinoma de células escamosas, vista microscópica Hay nidos de carcinoma de células escamosas que invaden en profundidad y socavan la mucosa. A la izquierda se aprecia pérdida de la superficie epitelial por ulceración. La mayor parte de los carcinomas cervicales se componen de grandes células escamosas queratinizantes o no queratinizantes. Menos del 5% se componen de células pequeñas indiferenciadas o neuroendocrinas. Los adenocarcinomas del cérvix son poco frecuentes. Los carcinomas de células claras son raros, excepto en el contexto de exposición materna al DES. * FIGURA 13-35 Carcinoma de células escamosas, vista microscópica A gran aumento se observan nidos de células escamosas neoplásicas que invaden la estroma con inflamación crónica. Este cáncer está bien diferenciado, como puede comprobarse por la presencia de perlas de queratina (*) en los nidos de células tumorales. Sin embargo, la mayoría de las células escamosas cervicales son no queratinizantes.