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366 ATLAS DE ANATOMÍA PATOLÓGICA FIGURA 15-50 Feocromocitoma suprarrenal, resonancia magnética Esta resonancia axial abdominal posgadolinio en T1 pone de manifiesto captación difusa de contraste (por la vascularización de la neoplasia) en un feocromocitoma (�) que reemplaza a la glándula suprarrenal izquierda. Este paciente tenía hipertensión, taquicardia, palpitaciones, cefalea, temblor y diaforesis, junto con elevación de la concentración plasmática de noradrenalina. La hipertensión es con frecuencia mantenida y, más raramente, de tipo episódico, aunque esta última hace pensar más en el feocromocitoma. El paciente también tenía aumento de catecolaminas libres en la orina, ácido vanililmandélico y metanefrinas. Las disritmias cardíacas pueden causar muerte súbita. El anestesiólogo puede registrar una elevación de la presión arterial cuando el cirujano manipula el tumor al resecarlo. FIGURA 15-51 Feocromocitoma suprarrenal con reacción cromafín, vista macroscópica Un «truco mágico» tradicional de la patología es la demostración de la reacción cromafín, según la cual el tejido pardo del feocromocitoma se convierte en marrón al ser colocado en una solución reciente de dicromato potásico. La base de esta reacción es la oxidación de las abundantes aminas biógenas (catecolaminas) presentes en el citoplasma de las células neoplásicas. Además de las catecolaminas, estas neoplasias pueden también segregar ACTH (ocasionando el síndrome de Cushing) o somatostatina. FIGURA 15-52 Feocromocitoma, vista microscópica Este feocromocitoma se compone de grandes células cromafines (principales) que son entre poligonales y fusiformes y tienen un citoplasma rosado-amarillento. Las células se disponen en nidos (Zellballen) rodeados de células sustentaculares, de más pequeño tamaño, y de abundantes capilares. El aspecto microscópico no proporciona una información definitiva sobre el comportamiento biológico, de modo que la determinación de malignidad se basa en la presencia de invasión o metástasis. Los hallazgos de laboratorio son aumento de catecolaminas, ácido vanililmandélico y metanefrinas en la orina. Los síntomas pueden tratarse mediante bloqueantes adrenérgicos antes de la extirpación quirúrgica.