Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
Aportes de la psicología al análisis institucional de las escuelas. En la unidad y tramo anterior abordamos la psicología social, ahora, en esta nueva unidad, veremos la psicología institucional. Vamos a trabajar un material del libro: “Un recorrido por el Nivel Inicial desde la Psicología Educacional”. Comencemos… 1-Origen de las instituciones. Si revisan el módulo del campo de las prácticas docentes, podrán observar que en esto de “Re-leer la escuela para re-escribirla”, es necesario considerar el concepto de institución. Es importante considerar este concepto, ya que son las formas sociales visibles y se encuentran atravesadas por las regulaciones sociales, comunitarias y a su vez, cada una tiene sus particularidades. En el mismo módulo de prácticas se realiza una referencia al psicoanálisis. Antes de avanzar, voy a hacer una aclaración. La psicología institucional, tiene su especificidad, pero toma prestados conceptos de otras psicologías, como en este caso, del psicoanálisis. La referencia al psicoanálisis es de un texto de Freud, denominado “Tótem y tabú”, en ese escrito Freud elabora una hipótesis sobre el origen de las sociedades, los grupos humanos, las relaciones humanas y las instituciones. Como todo mito, el mito de la “horda primitiva”, lo mítico tiene una eficacia más allá de la razón y es parte del imaginario social compartido. Les dejo dos links: Estos elementos, basados en el origen de las sociedades, van a aparecer en modalidades de intercambio en todas las sociedades y verán cómo aparecen en numerosos recorridos que haremos del análisis institucional. 2-Concepto de Institución. Podemos precisar que el concepto de Institución tiene tres acepciones: 1-Alude a normas, formalizadas en leyes (Valor). 2-Remite a estructura u organización social, con una organización y normas tendientes a lograr objetivos prefijados. (Organización). 3-Es un lugar de producción de relaciones y bienes culturalmente necesarios. Es importante destacar, que tendremos en cuenta estas tres acepciones. Veamos algunos ejemplos. 1-La Declaración de los Derechos del niño, es un valor social que ampara a las infancias. 1-La normativa institucional que regula la labor en las entidades educativas, es un valor social que regula los intercambios, otorgando deberes y derechos a sus integrantes. 2-Las organizaciones sociales como las escuelas son establecimientos que materializan en valor de la transmisión de saberes. 2-Los clubes llevan a cabo una tarea de concreción del valor cultural de integración social y de esparcimiento. 3-Los establecimientos educativos producen como bien el conocimiento. 3-Las empresas automovilísticas proveen de vehículos a la sociedad, ese es su producto. Es interesante destacar, que las instituciones nos preceden, lo que significa que nacemos en un mundo donde ya está instaurada la ley, las leyes que regulan nuestra subjetividad. La interiorización de la normativa se lleva a cabo a través del proceso de socialización, interiorizamos las normas y regulan nuestro pensar y accionar en el mundo. El primer espacio de socialización es la familia, es allí donde se produce la interiorización normativa más importante. El padre aparece como la primera figura de autoridad, es agente de ley o semblante de ley, la transmite y la lleva a cabo protegiendo y prohibiendo. Y siendo los primeros 5 años el inicio de nuestra vida institucional, la institución educativa cumple un papel fundamental en la interiorización de las normas y valores sociales. 3-Primera dualidad: instituido-instituyente. Lo instituido remite a lo establecido, lo tradicional, lo que no cambia. Lo instituyente es la fuerza que cuestiona el orden establecido y promueve el cambio. Esta es la primera dualidad que veremos para analizar lo institucional: instituido-instituyente. Veamos ejemplos. El código civil es una normativa instituida. Antes de la incorporación de la ley de matrimonio igualitario, las minorías no contempladas en la ley se manifestaban para que les sean reconocidos sus derechos a una unión legal legítima. Se puede pensar que esas manifestaciones y esas voces de reclamos eran movimientos instituyentes. Hoy en día los movimientos instituyentes más nombrados son los movimientos ecologistas y feministas. Greta Thunberg puede ser considerada una activista de lo instituyente en materia de cuestiones medioambientales. Estos conceptos son de Cornelius Castoriadis. Filósofo y psicoanalista greco-francés, fue quien conceptualizó los imaginarios sociales, con la publicación de su libro “La institución imaginaria de la sociedad” (1975). El filósofo vincula el término “imaginarios sociales” a lo sociohistórico, a los procesos de creación por medio de los cuales los sujetos se inventan sus propios mundos. Para Castoriadis, un imaginario social es entonces una construcción sociohistórica que abarca el conjunto de instituciones, normas y símbolos que comparte un determinado grupo social y, que, pese a su carácter imaginado, opera en la realidad ofreciendo tanto oportunidades como restricciones para el accionar de los sujetos. De tal manera, un imaginario instaura por sí mismo una realidad que tiene consecuencias prácticas para la vida cotidiana de las personas. Según el autor, existen dos tipos de imaginarios sociales: por un lado, está el imaginario social efectivo o instituido, al que pertenecen los conjuntos de significaciones que consolidan lo establecido, por ejemplo las tradiciones y costumbres de una sociedad; por otro lado, el imaginario social radical o instituyente, el cual se manifiesta en el hecho histórico y en la constitución de sus universos de significación, como pueden ser las nuevas formas de ver y pensar la realidad, las modas, los cambios, etcétera. El primero está ya dado de antemano, producido a lo largo de la historia; el segundo es lo nuevo posible. Lo instituido opera desde las significaciones sobre los actos humanos, estableciendo lo permitido y lo prohibido, lo lícito y lo ilícito. Ordena y regula las relaciones y acciones dentro de una sociedad, la mantiene unida y cohesionada. 4-Segunda dualidad: modalidad progresiva o regresiva. Si pensamos en los movimientos que analizamos anteriormente, es evidente que las instituciones no son estáticas. Tanto lo instituido, como lo instituyente, coexiste en todas las instituciones de manera dialéctica y esto genera conflictos y tensiones. Podemos pensar que hay tres tipos de tensión: a-Entre impulsos y necesidades individuales y sociales. Por ejemplo, actualmente entre la necesidad de salir y el ASPO. b-Entre la necesidad de actuar con el pensamiento o conductas impulsivas. Por ejemplo, salir sin tapabocas o detenerse a pensar en su necesidad de uso. c-Reparto asimétrico del poder en la división del trabajo. Por ejemplo, la tensión que le produce a un sujeto las exigencias desmedidas de un jefe. Es importante destacar que podemos pensar en una ambivalencia de los sujetos respecto de las instituciones. Por un lado, la sociedad nos impone restricciones dolorosas que generan sufrimiento (por ejemplo, el ASPO, es una normativa obligatoria), por el otro, las instituciones nos brindan seguridad y lugar de pertenencia (por ejemplo, el ASPO, es una normativa para proteger nuestra vida). Ambas consideraciones coexisten, las instituciones como: -lugares de enajenación, exclusión y sufrimiento. -lugares de seguridad, amparo y pertenencia. Freud, en el Malestar en la Cultura dice: “Hemos cambiado un trozo de posibilidad de dicha, por un trozo de seguridad” … La tensión y el sufrimiento institucional, es lo que impulsa a sus miembros a modificarlas. Cuando generan mecanismos para reconocer esas tensiones, como, por ejemplo, espacios de reflexión institucional, reuniones de equipos, etc., se plantean problemas y se buscan soluciones. Decimos que la institución fomenta una modalidad progresiva. Por el contrario, cuando esto no se fomenta se establecen modalidades regresivas de funcionamiento institucional. Ningunainstitución permanece siempre en una misma modalidad y en gran medida esa variabilidad depende del contexto social. Esta es la segunda dualidad: modalidad progresiva- Modalidad regresiva. Por ejemplo, si una institución educativa solamente establece un intercambio con sus docentes a través de la solicitud de informes de sus alumnos y no les preguntan sobre sus apreciaciones o sugerencias, podemos pensar que en esa situación se fomenta más una modalidad regresiva. 5-Tercera dualidad: manifiesto- latente. Podemos pensar a las escuelas como instituciones que llevan a cabo de manera concreta y singular los valores y necesidades sociales, sobre todo, con proyección a futuro, mirando a las nuevas generaciones. Lo que distingue a una institución de otra es el estilo institucional, son aspectos, cualidades, acciones, decisiones, que se reiteran y caracterizan las maneras de producir y provocar juicios e imágenes, resolver problemas, establecer relaciones materiales, interpersonales, simbólicas… Si bien el estilo es lo que marca las singularidades y diferencias entre las instituciones, hay componentes comunes entre ellas: espacio material, conjunto de personas, proyectos, tareas, sistemas de organización de los integrantes y componentes materiales. El estilo de cada institución comprende la interacción de productos materiales y simbólicos (interpretaciones, conceptos, representaciones, etc.) Ambos constituyen la cultura institucional. Dicha cultura remite a una identidad de la institución. Es importante destacar que el devenir del tiempo, la historia, va a permitir la construcción de la cultura y la identidad institucional. Los elementos que percibimos, lo observable, constituyen el plano manifiesto. Lo oculto, lo que no puede observarse, pero es deducible, constituye el plano latente. Esta es la tercera dualidad de análisis institucional: manifiesto- latente. Recuerden que es similar al análisis realizado por el psicoanálisis entre lo consciente e inconsciente. En general, lo manifiesto y latente son dos planos de análisis de cuestiones relacionadas a sistemas de poder (político) y aspectos vinculados al mundo interno del sujeto que se activan en la institución, como deseos y frustraciones. Es probable que el ASPO haya reactivado cuestiones personales que se encuentran latentes y que es necesario tratar de deducir, para entender lo que nos sucede. Por ejemplo, no siempre los enojos o angustias pueden ser adjudicados al encierro actual. En enojo y angustia manifiesto/a puede haber despertado otros enojos y angustias (o pueden ser otras emociones, como odio), que pertenecen a la historia. A veces lo actual, sobre todo cuando viene con una intensidad desmedida, está “alimentado” por las emociones pasadas latentes. CONSIGNAS En este espacio, vamos a compartir ejemplos sobre las tres dualidades de análisis institucional: ● Instituido- instituyente: lo instituido remite a lo establecido, lo tradicional, lo que no cambia. Lo instituyente es la fuerza que cuestiona el orden establecido y promueve el cambio. ● Modalidad progresiva- modalidad regresiva: la tensión y el sufrimiento institucional, es lo que impulsa a sus miembros a modificarlas. Cuando generan mecanismos para reconocer esas tensiones, como, por ejemplo, espacios de reflexión institucional, reuniones de equipos, etc., se plantean problemas y se buscan soluciones. Decimos que la institución fomenta una modalidad progresiva. Por el contrario, cuando esto no se fomenta se establecen modalidades regresivas de funcionamiento institucional. ● Manifiesto- latente: los elementos que percibimos, lo observable, constituyen el plano manifiesto. lo oculto, lo que no puede observarse, pero es deducible, constituye el plano latente. La idea es que piensen ejemplos de la escolaridad inicial donde hayan notado que se presentan para ustedes situaciones que pueden ser analizadas con estos conceptos. ● Instituido-instituyente: durante mi educación inicial los materiales didácticos solían ser entregados en papel o en forma de juegos tradicionales, hoy en día aparece la tecnología como elemento instituyente que viene a cuestionar el orden establecido y a modificar ciertas actividades y relaciones con el docente. ● Modalidad progresiva- modalidad regresiva: una modalidad progresiva de la educación inicial es como se fue adaptando ante la problemática de la pandemia mundial, pudiendo acercar a los niños materiales didácticos a través de las tecnologías de la comunicación. Mientras que otras instituciones no pudieron tener esta iniciativa y se fueron fomentando modalidades regresivas de funcionamiento institucional al no poder adaptarse a los cambios presentados por las circunstancias. ● Manifiesto- latente: la parte manifiesta de la educación inicial puede verse en los programas educativos establecidos por las autoridades competentes (directivos de escuela, ministros, funcionarios públicos, etc.), mientras que la parte latente puede encontrarse en las negociaciones (política) que se llevan a cabo para llegar a esa confección y cuando los docentes imparten el contenido imprimiéndole su subjetividad.
Compartir