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37 • Presencia de cristales en el sedimento: aunque no determinante, puede reforzar el diagnóstico. • Bioquímica sanguínea: • La Asociación Europea de Urología (EAU) recomienda (GR A), la solicitud de urea, creatinina, sodio, potasio, calcio y acido úrico en sangre, en todos los pacientes con LR, si bien se puede posponer en los que no debutan de forma aguda15. • Aunque se puede encontrar algún dato sugerente de la etiología del cálculo (hiperuricemia, hipercalcemia, etc.), en la mayoría de las situaciones estas determinaciones serán normales. En cuadros agudos de cólico nefrítico es frecuente encontrar una elevación mínima transitoria de la creatinina por la repercusión funcional derivada de la obstrucción de la vía urinaria, sin suponer signo de alarma16. • Urocultivo: si existe sospecha de ITU concomitante (el hallazgo más frecuente es E. coli)6. Si el paciente debuta con un episodio agudo de “cólico nefrítico”, las pruebas de laboratorio deben repetirse al menos 3 meses después, ya que algunas anormalidades pueden ser inducidas por la obstrucción aguda6. ESTUDIO METABÓLICO: En determinadas situaciones y pacientes, puede ser necesario realizar un estudio analítico más amplio, metabólico-mineral exhaustivo, que incluye lo reseñado en la tabla 317. -. Análisis mineralógico y cristalográfico del cálculo. -. Cultivo de orina para detectar piuria o bacteriuria. -. Concentracion plasmática de fosfato, cloro, magnesio, fosfatasa alcalina, tiroxina y parathormona. -. Volumen urinario de 24 horas con excreción de calcio, acido úrico, oxalato, citrato, fosfato, urea, creatinina, potasio, sodio y magnesio. -. pH urinario de diferentes muestras de orina de diferentes días -. Prueba de acidificación urinaria o de carga de cloruro amónico (importante para el diagnóstico de la acidosis tubular renal). -. Cuantificación de la calciuria tras una semana de dieta pobre en calcio y sal con una posterior prueba de carga oral de calcio para diferenciar las distintas hipercalciurias. TABLA 3. Determinaciones analíticas que debe incluir un estudio metabólico. PRUEBAS DE IMAGEN: Las pruebas de imagen sirven para la confirmación diagnostica en casos de duda y sobre todo para la elección adecuada del tratamiento. Los factores más importantes de los que depende el tratamiento y que sólo las imágenes nos ofrecen serán el número de cálculos, su localización, tamaño y, en menor grado, la repercusión funcional que produzcan. La elección de la prueba dependerá del contexto clínico en que nos encontremos, de la disponibilidad de la misma y de los condicionantes propios del paciente. • Radiografía simple de abdomen: Detecta sólo el 54% de los cálculos, siempre que sean mayores de 2 mm de diámetro y contengan calcio (el 90% de los cálculos son radiopacos). De mayor a menor radio-opacidad estarían los cálculos de fosfato cálcico, oxalato cálcico, estruvita y cistina. Los de ácido úrico son radiolúcidos. La nefrocalcinosis da un aspecto de “estrellas en un cielo oscuro”. Cuando se visualiza la litiasis, suele ser suficiente con esta exploración para evaluar tanto el tamaño y la forma, como la posición del cálculo14.