Nutrigenómica y nutrigenética la influencia de la genética en la respuesta a la dieta

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Nutrigenómica y nutrigenética la influencia de la 
genética en la respuesta a la dieta 
La nutrigenómica y la nutrigenética son dos campos de 
estudio que exploran cómo la genética de una persona 
puede influir en su respuesta a la dieta y en su 
susceptibilidad a enfermedades relacionadas con la 
alimentación. Estas disciplinas buscan comprender cómo 
los genes interactúan con los nutrientes y cómo esta 
interacción puede afectar la salud. 
La nutrigenómica se centra en cómo los nutrientes y 
compuestos bioactivos en los alimentos pueden influir en 
la expresión de los genes. Los alimentos contienen 
sustancias químicas que pueden interactuar con el ADN y 
regular la expresión génica. Estas interacciones pueden 
tener efectos tanto positivos como negativos en la salud. 
Por ejemplo, algunos fitoquímicos presentes en frutas y 
verduras, como los flavonoides, se han asociado con la 
regulación de genes relacionados con la inflamación y la 
protección contra enfermedades crónicas. Por otro lado, 
 
 
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los ácidos grasos trans, que se encuentran en alimentos 
procesados, pueden afectar la expresión de genes 
relacionados con la inflamación y el riesgo de 
enfermedades cardiovasculares. 
La nutrigenética, por su parte, se enfoca en cómo las 
variantes genéticas individuales pueden influir en la 
respuesta de una persona a la dieta. Cada individuo tiene 
un conjunto único de variantes genéticas que pueden 
afectar cómo su cuerpo metaboliza y utiliza los nutrientes. 
Por ejemplo, algunas personas tienen una variante 
genética que las hace más propensas a metabolizar la 
cafeína de manera lenta, lo que puede llevar a una mayor 
sensibilidad a los efectos estimulantes de la cafeína. Otras 
personas pueden tener variantes genéticas que influyen en 
la respuesta a las grasas saturadas, lo que las hace más 
susceptibles al aumento del colesterol en sangre. 
La nutrigenética también puede influir en la predisposición 
a enfermedades relacionadas con la alimentación, como la 
diabetes tipo 2. Algunas variantes genéticas pueden 
 
 
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aumentar el riesgo de desarrollar la enfermedad en 
respuesta a una dieta rica en azúcares y grasas. 
El conocimiento de la nutrigenómica y la nutrigenética 
puede tener aplicaciones prácticas en la atención médica y 
en la promoción de la salud. Los profesionales de la salud 
pueden utilizar la información genética para personalizar 
las recomendaciones dietéticas y proporcionar una 
atención más precisa. 
Sin embargo, es importante tener en cuenta que la 
genética no es el único factor que influye en la salud y la 
respuesta a la dieta. La dieta, el estilo de vida y otros 
factores ambientales también juegan un papel importante. 
Por lo tanto, la nutrición personalizada debe considerar 
una amplia gama de factores.