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Evaluación del desempeño y retroalimentación en el entorno laboral La evaluación del desempeño y la retroalimentación son prácticas clave en la gestión de recursos humanos que permiten medir y mejorar el rendimiento de los empleados en el entorno laboral. La evaluación del desempeño implica la medición y análisis de los resultados y comportamientos de los empleados, mientras que la retroalimentación proporciona información a los empleados sobre su desempeño y les brinda la oportunidad de mejorar. La evaluación del desempeño se lleva a cabo a través de la revisión y medición de objetivos y metas establecidas previamente. Los empleadores evalúan el rendimiento de los empleados en función de estos criterios, lo que permite identificar áreas de fortaleza y debilidad. Además, se pueden utilizar técnicas de evaluación como la autoevaluación, la evaluación por parte de supervisores y la revisión de logros y métricas. La retroalimentación es un componente esencial de la evaluación del desempeño. Proporcionar retroalimentación oportuna y constructiva a los empleados es fundamental para que comprendan sus logros y áreas de mejora. La retroalimentación positiva refuerza el comportamiento deseado, mientras que la retroalimentación constructiva ayuda a los empleados a corregir deficiencias y desarrollar habilidades. La retroalimentación debe ser bidireccional, lo que significa que los empleados también deben tener la oportunidad de expresar sus opiniones y preocupaciones sobre su desempeño. Esto fomenta la comunicación abierta y la colaboración entre empleados y empleadores. En resumen, la evaluación del desempeño y la retroalimentación son procesos clave en la gestión de recursos humanos que permiten medir y mejorar el rendimiento de los empleados en el entorno laboral. La retroalimentación constructiva y oportuna es esencial para el crecimiento y desarrollo profesional de los empleados.
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