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1 UNIVERSIDAD DE CÁDIZ FACULTAD DE CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN Departamento de Psicología Tesis Doctoral INTERACCIÓN DE EQUIPOS MIXTOS HUMANO ROBOT: ASPECTOS PSICOLÓGICOS Y FACTOR HUMANO EN EL MANEJO DE VEHÍCULOS AÉREOS NO TRIPULADOS PRESENTADA POR Miguel Ángel Ramallo Luna Director de Tesis: Gabriel González de la Torre Benítez Cádiz, 2022 2 3 CONTRIBUCIÓN DE LA TESIS DOCTORAL Publicación científica en revista con índice de impacto (JCR) Gabriel G. De la Torre, Miguel A. Ramallo, Elizabeth Cervantes, Workload perception in Drone flight training simulators, Computers in Human Behavior, Volume 64, 2016, Pages 449-454, ISSN 0747-5632. Disponible en: https://doi.org/10.1016/j.chb.2016.07.040. 4 5 DECLARACIÓN DE AUTORÍA Y ORIGINALIDAD DE LA TESIS PRESENTADA PARA OBTENER EL TÍTULO DE DOCTOR D. Miguel Angel Ramallo Luna con DNI:75815366Y, Estudiante del programa de doctorado de la Universidad de Cádiz, autor/a de la tesis, presentada para la obtención del título de doctor, titulada: Interacción de equipos mixtos humano robot: Aspectos psicológicos y factor humano en el manejo de vehículos aéreos no tripulados Realizada bajo la dirección de Dr. Gabriel González de la Torre Benítez. DECLARO QUE: La tesis presentada es una obra original que no infringe los derechos de propiedad intelectual ni los derechos de propiedad industrial u otros, conforme al ordenamiento jurídico vigente (Real Decreto Legislativo 1/1996, de 12 de abril, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley de Propiedad Intelectual, regularizando, aclarando y armonizando las disposiciones legales vigentes sobre la materia), modificado por la Ley 2/2019, de 1 de marzo. Igualmente asumo, ante a la Universidad de Cádiz y ante cualquier otra instancia, la responsabilidad que pudiera derivarse en caso de plagio de contenidos en la tesis presentada, conforme al ordenamiento jurídico vigente. En Puerto Real, a 8 de mayo de 2022 Fdo: 6 7 CONFORMIDAD DE LOS DIRECTORES Dr. D. Gabriel González. de la Torre Benítez, director de la tesis doctoral de D. Miguel Angel Ramallo Luna, alumno del programa de Doctorado en Ciencias de la Salud (8203) regulado por el Real Decreto 99/2011, de 28 de enero, por el que se regulan las enseñanzas oficiales de doctorado, informa favorablemente la solicitud de autorización para el depósito de la tesis doctoral de D. Miguel Angel Ramallo Luna, titulada " Interacción de equipos mixtos humano robot: aspectos psicológicos y factor humano en el manejo de vehículos aéreos no tripulados" y desarrollada de acuerdo con los requisitos de control de calidad para las tesis doctorales recogidos en la memoria del programa de doctorado de referencia. Para que así conste, lo firmo en Cádiz, a 8 de mayo de 2022 8 AGRADECIMIENTOS Muchas han sido las personas que de un modo u otro han hecho posible este trabajo. En primer lugar, me gustaría nombrar a aquellas personas que de una manera directa han participado de este estudio como son Luis y Jordi del Servicio de Drones de la UCA quienes en todo momento se han mostrado cercanos para resolver nuestras dudas y participar en las pruebas de vuelo real. Alfonso y Pablo de la empresa Orbistat que colaboraron en el análisis de datos. También a So Yoon quien tuvo la amabilidad de cedernos para nuestra investigación el PSVT-R, a Silvia y Mónica que colaboraron en la recolección de datos. Pero, además de los que han estado implicados de una manera directa, esto no hubiera sido posible si otras personas no hubieran estado presentes. Jero, mi presi, gracias por siempre animarme a mejorar y no ponerme trabas para llegar a donde estoy ahora. A ti Gabriel, quien llevas formando parte de mi vida muchos años, primero como jefe y ahora, además de compañero y amigo, director de esta tesis, tu sí que me has insistido y animado para estar hoy aquí, muchas gracias por no rendirte conmigo, y por todos los “desayunos” que me dieron energía para avanzar. A mis hijos Ainara y Adrián, los motores de mi vida que me impulsan a mejorar cada día más, aunque se quejen de que “trabajo mucho” todo lo hago por ellos, espero que lo entiendan algún día. Y en último lugar a mi mujer, que me la traje engañada de Almería (menos mal) porque sin ella sí que no hubiera podido llegar a este día. Gracias por su apoyo incondicional en todas mis aventuras, por confiar en mí y por estar siempre a mi lado, a pesar de los agobios, las irritaciones, la falta de sueño y, sobre todo, la falta de mi tiempo. 9 10 RESUMEN En el presente estudio se analizan variables psicológicas, cognitivas y emocionales con el fin de saber el modo en que pueden afectar a una tarea de vuelo con Drones. También se aborda la influencia de la autonomía a la hora de llevar a cabo una misión de vuelo real mediante la colaboración entre piloto y copiloto. Para ello, se contó con dos grupos de estudios, uno inicial de 32 sujetos que llevaron a cabo pruebas en un simulador y otro compuesto por 20 sujetos (5 profesionales y 15 procedentes de la fase de simulación) que llevaron a cabo una prueba de vuelo real. Los resultados muestran como una componente formada por variables cognitivas y de personalidad es capaz de explicar el 52% de los resultados en la prueba de simulador. ABSTRACT In the present study, psychological, cognitive and emotional variables are analyzed in order to know how they can affect a Drone flight task and scenarios. The influence of autonomy when carrying out a real flight mission through collaboration between pilot and co-pilot is also addressed. This research consisted of two study groups, an initial one of 32 subjects who carried out tests in a virtual Drone flight simulator and another composed of 20 subjects (5 professionals and 15 from the previous simulation phase) who carried out real flight tasks and testing. The results showed how a component made up of cognitive and personality variables is capable of explaining 52% of the results in the simulator test. 11 12 ÍNDICE DE CONTENIDO 1. INTRODUCCIÓN…………………………………………………………………. 19 1.1. HISTORIA DE LA PSICOLOGÍA DE LOS FACTORES HUMANOS……….. 20 1.2 VEHÍCULOS NO TRIPULADOS…………………….…………………………. 29 1.2.1 Historia vehículos aéreos no tripulados………….......................... 29 1.2.2 Drones en la actualidad……..………………………………………. 33 2. LA IMPORTANCIA DE LOS FACTORES HUMANOS EN EL MANEJO DE DRONES…………………………………………………………………………….. 39 2.1 INTRODUCCIÓN………………………………………………………………… 39 2.2 INTERACCIÓN HUMANO/ROBOT………………………………………….... 41 2.3 RENDIMIENTO HUMANO……………………………………………………… 44 2.3.1 Carga de trabajo……………………………………………………… 47 2.3.2 Conciencia situacional……………………………………………….. 53 2.3.3 Vigilancia, tiempos de reacción y fatiga……………………………. 58 2.3.4 Cognición……………………………………………………………… 62 2.3.5 Personalidad…………………………………………………………... 65 2.3.6 Estado de ánimo………………………………………………………. 68 2.3.7 Nivel de Autonomía…………………………………………………… 69 2.4 EXPERIENCIA EN VIDEOJUEGOS………………………………………….. 72 3. OBJETIVOS E HIPÓTESIS……………………………………………………… 77 3.1 OBJETIVO GENERAL…………………………………………………………... 77 3.2 OBJETIVOS ESPECÍFICOS……………………………………………..…..… 77 3.3 HIPÓTESIS………………………………………………………………………. 79 4. METODOLOGÍA Y PROCEDIMIENTO…………………………………….….. 81 4.1 METODOLOGÍA…………………………………...……………..……………… 81 4.2 PROCEDIMIENTO………………………….……………………....……………82 4.2.1 Participantes………………………………………………………….. 82 4.2.2 Materiales……………………………………………………………… 85 4.2.3 Fase de laboratorio……………………………………..……….…… 103 4.2.4 Fase experimental-vuelo real………………..……….……………… 105 5. RESULTADOS……………………………………………………………………. 111 5.1 FASE DE LABORATORIO…………………………..…………………………. 111 5.2 FASE VUELO REAL………………………………....…………………………. 144 6. DISCUSIÓN………………………………………………………………………. 161 7. CONCLUSIONES Y LÍNEAS DE TRABAJO FUTURAS…………………….. 169 7.1 CUMPLIMIENTO DE OBJETIVOS…………………………………………….. 169 13 7.2 COMPROBACIÓN DE HIPÓTESIS……………………………………………. 171 7.3 CONCLUSIONES………………………………………………………………... 172 7.4 APORTACIONES REALIZADAS EN LA INVESTIGACIÓN EFECTUADA EN LA TESIS DOCTORAL………………………………………………………….. 173 7.5 LÍNEAS DE INVESTIGACIÓN FUTURAS…………………………………….. 175 7.6 REFERENCIAS………………………………………………………………….. 176 8 ANEXOS……………………………………………………………………………. 206 14 ÍNDICE DE FIGURAS FIGURA 1: ASPECTOS QUE AFECTAN EN EL DESEMPEÑO DE UNA TAREA…………………………………………………………………………….. 45 FIGURA 2: ESQUEMA DE LOS ANÁLISIS REALIZADOS ENTRE VARIABLES EN LA FASE DE VUELO SIMULADO………………………….. 111 FIGURA 3: ESQUEMA DE LOS ANÁLISIS REALIZADOS ENTRE VARIABLES EN LA FASE DE VUELO REAL…………………………………. 144 ÍNDICE GRÁFICOS GRÁFICO 1: RELACIÓN ENTRE EL TIEMPO EMPLEADO EN EL SIMULADOR Y EL PSVT-R……………………………………………………… 134 GRÁFICO 2: REPRESENTACIÓN DE RESIDUOS DE PREDICCIÓN DE CADA PARTICIPANTE…………………………………………………………... 140 GRÁFICO 3: VALORES OBSERVADOS VERSUS PREDICHOS ………….. 143 ÍNDICE DE TABLAS TABLA 1: RESUMEN PRIMEROS ESTUDIOS RELACIONADOS CON LOS FACTORES HUMANOS EN LA AVIACIÓN LLEVADOS A CABO EN EUROPA……………………………………………………………………………… 25 TABLA 2: CONTROLADORES DE LA CARGA DE TRABAJO DEL OPERADOR………………………………………………………………………….. 50 TABLA 3: CATEGORIZACIÓN DE INDICADORES SALIANT……………....... 57 TABLA 4: DIAGRAMA ORGANIZACIÓN DE LAS FASES EXPERIMENTALES…………………………………………………………………. 82 TABLA 5: PRUEBAS QUE COMPONEN EL TUTORIAL DE AEROSIM…….. 96 TABLA 6: DESCRIPCIÓN DE LAS ESCALAS USADAS EN EL AWT………. 99 TABLA 7: ORDEN DE LAS PRUEBAS ADMINISTRADAS……………………. 103 TABLA 8: DATOS DESCRIPTIVOS DE LA MUESTRA DE ESTUDIO………. 112 TABLA 9: DESCRIPTIVOS PUNTUACIONES PANAS Y POMS…………….. 112 TABLA 10: DATOS DESCRIPTIVOS PRUEBA PSQI………………………………………………………………………………….. 113 TABLA 11: PUNTUACIONES SEGÚN SEXOS PRUEBAS NEUROCOGNITIVAS………………………………………………………………. 114 TABLA 12: RESULTADOS DE LA PRUEBA AWT POR SEXOS…………….. 114 TABLA 13: RESULTADOS DEL PVT-TOUCH SEGÚN SEXOS……………... 115 TABLA 14: PUNTUACIONES OBTENIDAS EN EL TEST DE PERSONALIDAD……………………………………………………………………. 115 15 TABLA 15: MEDIA DE ERRORES EN CADA UNA DE LAS PRUEBAS DEL AEROSIM……………………………………………………………………………… 117 TABLA 16: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LOS RESULTADOS DE CADA PRUEBA DEL SIMULADOR Y LOS COMPONENTES DEL PSQI…………….. 119 TABLA 17: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LOS COMPONENTES DEL PSQI Y LOS RESULTADOS DEL PVT-TOUCH………………………………….. 120 TABLA 18: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LAS PUNTUACIONES DEL PVT-TOUCH Y LAS PRUEBAS DEL SIMULADOR……………………………… 122 TABLA 19: COMPARATIVA ENTRE SEXOS EN FUNCIÓN DE LOS DATOS OBTENIDOS EN LAS PRUEBAS DEL SIMULADOR……………………………. 123 TABLA 20: COMPARATIVA EN LOS RESULTADOS DE LAS PRUEBAS DEL SIMULADOR ENTRE UN GRUPO CON EXPERIENCIA EN VIDEOJUEGOS Y OTRO GRUPO SIN ELLA………………………………….. 124 TABLA 21: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LAS PUNTACIONES DEL PANAS, POMS Y RESULTADOS PRUEBA SIMULADOR……………………. 125 TABLA 22: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LOS RESULTADOS DEL SIMULADOR EL FACTOR NEUROTICISMO (N) Y SUS RASGOS COMPONENTES………………………………………………………………… 127 TABLA 23: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LOS RESULTADOS DEL SIMULADOR EL FACTOR EXTRAVERSION (E) Y SUS RASGOS COMPONENTES………………………………………………………………… 128 TABLA 24: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LOS RESULTADOS DEL SIMULADOR EL FACTOR AMABILIDAD (A) Y SUS RASGOS COMPONENTES………………………………………………………………… 129 TABLA 25: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LOS RESULTADOS DEL SIMULADOR EL FACTOR APERTURA (O) Y SUS RASGOS COMPONENTES………………………………………………………………… 131 TABLA 26: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LOS RESULTADOS DEL SIMULADOR EL FACTOR RESPONSABILIDAD (C) Y SUS RASGOS COMPONENTES………………………………………………………………… 132 TABLA 27: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LAS PRUEBAS DEL SIMULADOR Y LAS PUNTUACIONES DEL SDMT, WAIS III (DÍGITOS) Y EL WINSCAT ……………………………………………………………………. 133 TABLA 28: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LAS PRUEBAS DEL SIMULADOR Y LAS PUNTUACIONES DEL AWT…………………………… 136 TABLA 29: COMPARACIÓN DE MEDIAS ENTRE LOS RESULTADOS DEL AWT Y EL SEXO…………………………………………………………… 137 TABLA 30: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LOS RESULTADOS DEL AWT, LOS RESULTADOS DEL PANAS Y LAS PUNTUACIONES DEL POMS……………………………………………………………………………… 138 TABLA 31: COEFICIENTES DE REGRESIÓN PLS ENTRE 8 VARIABLES EXPLICATIVAS………………………………………………………………….. 140 TABLA 32: PREDICCIÓN DEL MODELO…………………………………….. 141 TABLA 33: RESUMEN DE LA CAPACIDAD DE PREDICCIÓN CON UNA SOLA COMPONENTE ………………………………………………………….. 142 16 TABLA 34: COEFICIENTE DE REGRESIÓN ESTANDARIZADO ENTRE CADA UNA DE LAS VARIABLES OBSERVADAS Y EXPLICATIVAS………. 142 TABLA 35: MATRIZ DE CARGAS DE FACTOR………………………………. 143 TABLA 36: RESULTADOS DE LAS PRUEBAS DE VUELO EN FUNCIÓN DEL SEXO…………………………………………………………………………… 145 TABLA 37: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE RESULTADOS DEL PVT Y PUNTUACIONES DE LOS VUELOS REALES…………………………………. 146 TABLA 38: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE EL ESTADO DE ÁNIMO Y LOS RESULTADOS DE LA PRUEBA DE VUELO REAL………………………. 148 TABLA 39: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LAS PRUEBAS NEUROCOGNITIVAS Y LAS PRUEBAS DE VUELO…………………………… 149 TABLA 40: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LOS RESULTADOS DE LAS PRUEBAS DE VUELO, EL FACTOR NEUROTICISMO (N) Y SUS RASGOS COMPONENTES…………………………………………………………………….. 150 TABLA 41: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LOS RESULTADOS DE LAS PRUEBAS DE VUELO, EL FACTOR EXTRAVERSIÓN (E) Y SUS RASGOS COMPONENTES………………………………………………………………….. 151 TABLA 42: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LOS RESULTADOS DE LAS PRUEBAS DE VUELO, EL FACTOR APERTURA (O) Y SUS RASGOS COMPONENTES…………………………………………………………………….. 151 TABLA 43: MATRIZ DE CORRELACIÓN ENTRE LOS RESULTADOS DE LAS PRUEBAS DE VUELO, EL FACTOR AMABILIDAD (A) Y SUS RASGOS COMPONENTES…………………………………………………………………….. 152 TABLA 44: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LOS RESULTADOS DE LAS PRUEBAS DE VUELO, EL FACTOR RESPONSABILIDAD (C) Y SUS RASGOS COMPONENTES………………………………………………………… 153 TABLA 45: MATRIZ CORRELACIÓN ENTRE LOS RESULTADOS DEL PRIMER VUELO, Y LOS RESULTADOS DEL AWT…………………………….. 154 TABLA 46: MATRIZ DE CORRELACIÓN ENTRE LOS RESULTADOS DEL SEGUNDO VUELO, Y LOS RESULTADOS DEL AWT………………................ 154 TABLA 47: MATRIZ DE CORRELACIÓN ENTRE LAS PULSACIONES MOSTRADAS DURANTE EL PRIMER VUELO, LOS RESULTADOS DEL PRIMER VUELO Y LAS PUNTUACIONES DEL AWT…………………………. 155 TABLA 48: MATRIZ DE CORRELACIÓN ENTRE LAS PULSACIONES MOSTRADAS DURANTE EL SEGUNDO VUELO, LOS RESULTADOS DEL PRIMER VUELO Y LAS PUNTUACIONES DEL AWT…………………………. 156 TABLA 49: COMPARATIVA DE LAS MEDIAS OBTENIDAS EN CADA UNA DE LAS PRUEBAS DEL AWT, LOS RESULTADOS DE CADA VUELO Y LAS PULSACIONES EN EL PRIMER Y SEGUNDO VUELO…................................. 157 TABLA 50: COMPARATIVA RESULTADOS DEL GRUPO DE AVANZADOS FRENTE AL PROFESIONAL……………………………………………………….. 158 TABLA 51: COMPARATIVA RESULTADOS RASGOS DE PERSONALIDAD GRUPOS VUELO REAL…………………………………...................................... 159 17 ÍNDICE DE IMÁGENES IMAGEN 1: EVOLUCIÓN DE LOS FACTORES HUMANOS Y FUTURA HOJA DE RUTA…………………………………………………………………… 28 IMAGEN 2: FOTOS DEL RP4 Y EL QUEEN BEE…………………………….. 30 IMAGEN 3: FOTO DEL QH-50D DASH DRONE HELICOPTER…………….. 31 IMAGEN 4: FOTO DE MINI-SNIFFER…………………………………………. 32 IMAGEN 5: CONFIGURACIONES MÁS HABITUALES EN LOS MULTIRROTORES………………………………………………………………… 34 IMAGEN 6: DRONES ACTUALES DE LA MARCA DJI Y PARROT………… 35 IMAGEN 7: PILOTOS DE DRONE……………………………………………… 36IMAGEN 8: LOS DRONES EN DIFERENTES CAMPOS PROFESIONALES 37 IMAGEN 9: NASA TLX …………………………………………………………… 52 IMAGEN 10: NIVELES CONCIENCIA SITUACIONAL Y HABILIDADES NECESARIAS……………………………………………………………………….. 54 IMAGEN 11. PSYCHOMOTOR VIGILANCE TASK (PVT)……………….......... 61 IMAGEN 12: COMPARATIVA VUELO REAL VS VIDEOJUEGO……………. 74 IMAGEN 13: EMISORA RC VS GAMEPAD……………………………………. 75 IMAGEN 14: FOTOS DE LOS DOS AMBIENTES EXPERIMENTALES…….. 81 IMAGEN 15: CUESTIONARIO POMS ADMINISTRADO A LOS PARTICIPANTES…………………………………………………………………….. 86 IMAGEN 16: CUESTIONARIO PANAS ADMINISTRADO A LOS PARTICIPANTES…………………………………………………………………….. 87 IMAGEN 17: TEST PSQI ADMINISTRADO A LOS PARTICIPANTES………… 88 IMAGEN 18: TEST DE SÍMBOLOS Y DÍGITOS ADMINISTRADO A LOS PARTICIPANTES……………………………………………………………………. 89 IMAGEN 19: ITEM DE EJEMPLO DEL PSVT-R……………………………….. 90 IMAGEN 20: PRUEBA CODE SUBSTITUTION………………………………… 92 IMAGEN 21: EXPLICACIÓN DE LA PRUEBA CPT Y VISUALIZACIÓN DE LA TAREA…………………………………………………………………………… 92 IMAGEN 22: EXPLICACIÓN DE LA PRUEBA MTH Y VISUALIZACIÓN DE LA TAREA…………………………………………………………………………… 93 IMAGEN 23: EJEMPLO DE LA PRUEBA MTS…………………………………. 94 IMAGEN 24: AEROSIM RC……………………………………………………….. 95 IMAGEN 25: REALIZACIÓN DEL PVT-TOUCH………………………………… 97 IMAGEN 26: AXON WORKLOAD TEST………………………………………… 98 IMAGEN 27: FOTO DEL PHANTOM 3 STANDARD Y CARACTERÍSTICAS 100 IMAGEN 28: FOTO DEL SMARTWACH FITBIT SENSE……………………… 101 IMAGEN 29: EMISORA SPEKTRUM DX5E……………………………………. 102 18 IMAGEN 30: IMAGEN DURANTE LAS PRUEBAS…………………………….. 104 IMAGEN 31: IMAGEN DEL EXPERIMENTO……………………………………. 105 IMAGEN 32: PARTICIPANTES LLEVANDO A CABO EXPERIMENTO…….. 106 IMAGEN 33: DISPOSICIÓN DE LAS MARCAS EN EL PABELLÓN………… 107 IMAGEN 34: EXPLICACIÓN PRIMERA PARTE DE LA TAREA……………… 107 IMAGEN 35: MARCAS DE VUELO……………………………………………… 108 IMAGEN 36: EXPLICACIÓN SEGUNDA PARTE DE LA TAREA…………….. 108 IMAGEN 37: PRUEBA DE VUELO REAL……………………………………….. 109 19 1. INTRODUCCIÓN En la última década la tecnología se ha ido desarrollando a gran velocidad, prueba de ello puede ser la evolución del Smartphone, la realidad virtual, incluso el coche eléctrico o, en el caso que aquí nos ocupa, el desarrollo de unos pequeños vehículos aéreos pilotados a control remoto a los que ya todos conocemos como Drones. Si hace varios años alguien hubiera dicho que en el 2021 se estarían usando Drones para fertilizar plantas o para llevar paquetería a zonas remotas, y no solo en el ámbito militar, nadie nos hubiera creído. Sin embargo, el mundo de los vehículos no tripulados ha evolucionado de una manera significativa en los últimos años, hasta tal punto que las palabras Dron, UAV o RPA resultan hoy en día algo habitual para todos nosotros, ya que cada vez se van dando más usos a estos pequeños ayudantes aéreos. Ya sea mediante su uso diario en ambientes como la seguridad civil, o bien en el ámbito comercial o el científico (hemos visto como este año han llevado un Dron a Marte) no resulta extraño que se cuente con estos vehículos para ayudarnos a desempeñar diferentes trabajos. Mediante su uso se puede ahorrar tiempo y dinero, pero además nos permite poder acceder a lugares que, de otro modo, podrían resultar de muy difícil acceso o incluso imposible. Su fácil manejo, así como su bajo coste en comparación con otros recursos de similares características, permite que gran parte de la población tenga acceso a ellos, incluso existen competiciones de carreras de Drones profesionales y se están desarrollando Drones taxis para usar en las grandes ciudades como métodos alternativos de transporte. Son numerosas las investigaciones enfocadas al desarrollo de nuevos algoritmos que pueda hacer de estos Drones vehículos más autónomos, este aspecto puede hacer pensar que no es necesaria la intervención humana y que se puede sacar al ser humano del sistema, pero nada más lejos de la realidad. El humano, de una manera o de otra sigue siendo una pieza fundamental en esos equipos mixtos y sus habilidades y capacidades serán de gran importancia para que los trabajos llevados a cabo con estos vehículos se realicen de la mejor manera posible. De hecho, existen diversas variables que pueden afectar al rendimiento humano, como el sueño, la carga de trabajo o las capacidades cognitivas. Por 20 tanto, sería lógico pensar que si este tipo de variables pueden afectar a las relaciones entre humanos también podrían afectar a las relaciones que se establecen entre equipos mixtos formados por humano y robots. Es por ello que, en la presente tesis doctoral, se pretende estudiar el modo en el que diversas variables psicológicas inciden a la hora de operar un Dron, por un lado, con el fin de conocer cuáles ponen en riesgo la calidad del pilotaje y reducir así los posibles riesgos. Por otro lado, conocer las características que hacen que una persona sea más eficiente en el pilotaje. 1.1. HISTORIA DE LA PSICOLOGÍA DE LOS FACTORES HUMANOS La posibilidad de volar ha sido el sueño del ser humano desde tiempo inmemorial, podemos verlo en la mitología griega cuando Dédalo construyó unas alas para él y su hijo Ícaro con el fin de escapar volando de la isla de Creta o en otras leyendas que incluían el carro volador indio Vimana, el carruaje de Ezekie o las historias de las alfombras voladoras. Lo que sí es más real son las historias de diversas personas que, mediante dispositivos de vuelo trataron de volar saltando de zonas elevadas, encontrando en Europa el salto más antiguo registrado en el año 852 por Abbas Ibn Firmas, quien saltó desde la torre Arruzafa en Córdoba (Sanz, 2019) o el salto de Eilmer de Malmesbury en el 1010 (López, 2011). Sin embargo, estos hechos no quedaron marcados como grandes hitos, comenzando realmente la historia de la aviación a partir del globo de los hermanos Montgolfier en 1783 y tras el cual surgieron otros inventos hasta que en 1903 apareció el primer aeromotor controlado y con él, el deseo del hombre de conocer cuáles serían las características que tendrían que mostrar estos pilotos para poder desempeñar de la mejor manera posible ese nuevo oficio ya que, como muchas décadas después indicaría la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI, 1998) el ser humano es la parte más valiosa del sistema aeronáutico pero, al mismo tiempo, es el que está más expuesto a diversos factores que pueden influir en el desempeño de su trabajo. Valorándose, por tanto, la importancia de que se evalúen, se midan y controlen las variables que afectan al humano en su desempeño con el fin no solo de evitar accidentes, sino también de seleccionar a las personas más adecuadas para llevar a cabo la labor de pilotar una aeronave. 21 Pero antes de centrarnos en esta faceta de la psicología en la actualidad, sería necesario hacer un pequeño recorrido por los inicios de la psicología y como su evolución llegó hasta lo que actualmente conocemos como factores humanos. Desde que en 1879 Wilhelm Wundt fundara la psicología científica tras la constitución del primer laboratorio creado para llevar a cabo investigación en psicología apartándose así de la filosofía, a la que por aquel entonces estaba adscrita, esta nueva disciplina ha evolucionado de manera significativa englobando diferentes temas de interés como podrían ser el estudio de las funciones básicas, (el aprendizaje, la memoria, emociones…) el desarrollo durante la vida, la salud mental e incluso en el diseño de máquinas que interactúan con personas. Sin ir más lejos, fueron los psicólogos quienes diseñaron la cabina del caza F-18 y ayudaron a eliminar una serie de ilusiones visuales que provocaban errores en los pilotos de los primeros Boing 727 (Davidoff et al.,1989) La psicología, como vemos, es una disciplina que presenta una gran amplitud ensus diferentes campos de interés. Gracias a la labor realizada por la psicología básica a la hora de recopilar conocimiento en relación a los procesos mentales se han podido ir dando respuesta a problemas de la vida cotidiana a través de la psicología aplicada. Como indican Sáiz y Roca (2012) la psicología aplicada nace como una respuesta ante los cambios sociales y tecnológicos que se producen a finales del siglo XIX y principios del XX. Y fue especialmente la revolución relativa a la tecnología, con el desarrollo de nuevas máquinas y vehículos, lo que llevó consigo la necesidad de personal especializado para su manejo. En ese contexto fue lógico pensar que los psicólogos, por su formación y conocimiento, serían los profesionales más adecuados para poder llevar a cabo los procesos necesarios para llegar a establecer el perfil que debería presentar un candidato para ser considerado apto para pilotar una aeronave. En los inicios de estos procesos la valentía se valoraba como la única característica que debía presentar un buen aviador (Escorsell, 1992). Pero afortunadamente esta concepción fue evolucionando, y los profesionales de la época comenzaron a preguntarse si esa sería la única habilidad que habría que 22 tener en cuenta para poder pilotar, siendo a partir de ese momento cuando comienza la preocupación por la selección de buenos pilotos. Existe controversia respecto al lugar donde se inician por primera vez los estudios relacionados con la selección de pilotos. Algunos autores concedían este privilegio a los italianos (Dockerey & Isaacs, 1921) mientras que otros se decantaban más por los franceses (Baumgarten, 1933) o los alemanes (Koonce 1984). Sin embargo, tras el análisis más exhaustivo de la documentación Sáiz y Roca (2012) pudieron otorgar este inicio a los franceses como aquellos que llevaron a cabo las primeras pruebas de selección de pilotos en Europa entre los años 1914 y1918. Dichos estudios analizaban los tiempos de reacción, así como la emotividad y, aunque pudieran ser considerados como simples dieron un gran paso al abandonar la valentía como único concepto que definía a un buen piloto. Siendo también muy original el tratar de relacionar las puntuaciones en los tiempos de reacción con los resultados en emocionalidad. El estudio de estas características llevó a Camus y Nepper, (1917) a establecer diferentes categorías, siendo los pilotos más aptos aquellos que presentaban un tiempo de reacción normal y no mostraban excitabilidad. En Italia el estudio de las aptitudes para volar se llevó a cabo desde los laboratorios psicofisiológicos de Turín, Nápoles y Roma donde en sus estudios previos indicaron como las cualidades de un buen piloto iban desde poseer una velocidad de percepción suficiente, buenas capacidad para distribuir la atención, constancia, precisión, buena coordinación psicomotriz hasta la capacidad de inhibir las reacciones emotivas, de modo que los estímulos emocionales no le afectaran en el resto funciones anteriores. (Tipografia Nazionales Bertero, citado en Dockerey & Isaacs, 1921, p. 116). Sin embargo, solo se centraron en analizar los tiempos de reacción, usando en algunas de sus investigaciones el cronoscopio D'Arsonval con el que delimitaron el tiempo medio de reacción en 0.500 segundos y aquellos tiempos que implicaban el rechazo del candidato los que se situaban entre 0.682 y 0.700 segundos. Otras pruebas para el estudio de la atención fueron el test de cancelación ideado por Saffiotti donde se tenía en cuenta el tiempo requerido y el número de errores, fijándose los límites en cinco minutos y cinco errores. (Gemelli, citado en Dockerey & Isaacs, 1921, p. 122) 23 El interés del estudio de las características que debían presentar los pilotos se fue extendiendo por el resto de países. En Inglaterra se encargaron de llevar a cabo esta labor desde la Comisión de Estudios Médicos del Departamento del aire (Baumgarten, 1933), quienes se encargaron del estudio de los pilotos prestando poca atención a los tiempos de reacción y centrándose en aspectos fisiológicos, como la cantidad de oxígeno en sangre, o la presión sanguínea entre muchos otros (Bazet, 1918; Birley et al., 1918; Flack & Bowdler, 1918; Kellaway & Scott, 1919a y 1919b; Medical Research Council, 1918). Si bien no se centraron en el estudio de los aspectos psicológicos, no los dejaron de lado completamente. De hecho, llevaron a cabo estudios mediante el uso del test de McDougall1 y la evaluación del temperamento (aspecto añadido por Birley,1918) que mostraron como la fatiga incidía de manera diferente en función del temperamento del piloto provocando que éste no fuera apto para pilotar. Desde la Comisión de Estudios Médicos también se mostraron interesados en conocer los efectos de la altitud, siendo capaces de detectar mediante el uso del test de McDougall conjuntamente usado con la evaluación de otras medidas (el pulso, la presión arterial o el tiempo que se podía contener la respiración) cuando los pilotos habían sufrido falta de oxígeno. (Flack & Bowdler, 1918). Por su parte en Alemania fue William Stern en 1914 quien llevó a cabo investigaciones relativas a la psicología aeronáutica (Baumgarten, 1933) poniendo su centro en la atención del piloto, para lo cual diseñó una prueba en la que el piloto durante 12 minutos tenía que estar concentrado atendiendo a diferentes estímulos que se le iban presentando consistentes en luces de diferentes colores y debía reaccionar según se le indicase. Sin embargo, a pesar de que esta prueba se puedo administrar a muchos sujetos no se conocen los resultados de esas evaluaciones (Baumgarten, 1933). Unos años después sería W. Benary en 1919 quien indicaría las características que debían tener los pilotos de observación, entre las que destacaría la habilidad para hacer simultáneamente varias cosas, ser capaz de tomar decisiones rápidas o mostrar resistencia a la fatiga. (Baumgarten,1933; Erismann & Moers, 1926). 1 Test usado para estudiar el temblor y el vértigo 24 Es en este momento cuando aparece un nuevo concepto presentado por Otto Selz quien en lugar de realizar evaluaciones previas a los pilotos comenzó a estudiarlos mediante el análisis de los accidentes aéreos, con el fin de determinar las características que presentaban estos pilotos que parecían ser menos capaces y junto a Benary, Stearn y Kronfeld publicaron un libro “Estudios sobre la aptitud psicológica para la actividad de vuelo” (Citado en Sáiz y Roca, 2012, p. 22) donde se observa una visión más psicológica que la mostrada en otros de los países comentados que se enfocaron más en aspectos psicofisiológicos o médicos. En España no será hasta los años 30 cuando aparecen los primeros protocolos para la evaluación de pilotos (Sáiz et al., 2002). Al otro lado del Océano, en EEUU, la psicología había llegado al departamento de defensa con la propuesta de medir la inteligencia a sus soldados y servir como medio para la selección de reclutas. Al mismo tiempo, el presidente de la APA crearía diferentes comités conformados por psicólogos de prestigio los cuales participarían con sus aportaciones en la selección de soldados para el ejército, estando dos de esos comités centrados en el estudio de las características de los aviadores (Sáiz & Roca, 2012). Uno de esos comités se dedicó a realizar una revisión de los test utilizados hasta el momento para los pilotos contabilizando un total de 40 test válidos, así como diversos aparatos para medir diferentes habilidades. Sin embargo, detectaron que el 6% de los seleccionados como pilotos mediante esos test resultaron no ser aptos para tal tarea (Henmon, 1919), por ese motivo se propusieron probar esos 40 test que se habían considerado válidos con la idea de crear un protocolooficial de selección de pilotos. Para ello hicieron un estudio donde evaluaron hasta diez aspectos diferentes: estabilidad emocional, la percepción de la inclinación o la reacción visual, entre otros, mediante el uso de diez pruebas diferentes (Henmon, 1919; Stratton, 1918). El resultado se mostró adecuado para poder discriminar entre candidatos (Stratton et al., 1920). 25 Tabla 1. Resumen primeros estudios relacionados con los factores humanos en la aviación llevados a cabo en Europa País Variable estudiada Autores Tipos experimentos Resultados investigación ITALIA Tiempos de reacción simples Gradenigo Saffiotti Azzi Gemelli Romagna-Manoia Tiempos de reacción ante estímulos visuales y auditivos El límite de aptitud se colocó en 0,200 segundos para los estímulos visuales y en 0,170 segundos para los auditivos. Describen dos tipos de participantes, los que muestran agotamiento y debilidad (más tiempos de reacción con estímulos visuales) y aquellos que presentan excitabilidad e inestabilidad (tiempos de reacción menores pero mayor variabilidad) Las reacciones con la mano izquierda, son más rápidos que las reacciones con la mano derecha Reacciones emocionales Grandenigo Gemelli Aggazzotti Camis Cambios en la circulación, respiración y temblor de la mano, producidos por estímulos diseñados para crear una emoción. Aquellos candidatos que mostraban reacciones excesivas eran declarados no elegibles. Las reacciones se producían de una manera más rápida con los candidatos que inicialmente mostraban pulsos más rápidos. Un estado emocional moderado puede aumentar frecuentemente la velocidad con que se desarrolla el proceso psíquico Atención y percepción Saffiotti Gemelli Galeotti Cacciapuoti Herlitzka Uso de pruebas para para determinar la extensión, distribución, concentración, fluctuación e intensidad de la atención, y la velocidad de percepción. Se delimitó el número de errores que permitían a los candidatos tener en función de la prueba administrada, pruebas de cancelación, selección de imágenes determinadas…) Percepción del esfuerzo muscular Galeotti Sostener una palanca que variaba de peso, mover un mango contra una resistencia Equilibrio Malan Bilancioni Romagna- Manoia En una cabina que podía inclinarse hacia adelante, hacia atrás o lateralmente. El sujeto, con los ojos vendados, debía informar su posición y al mismo tiempo colocar en posición vertical una varilla frente a él sujeta a un goniómetro. una inclinación en la dirección lateral se reconoce más fácilmente que en las direcciones hacia adelante o hacia atrás FRANCIA Tiempos de reacción y Estabilidad Emocional Camus Nepper Tipos aceptables: - tiempos de reacción normales y no muestren excitabilidad. - tiempos de reacción normales, pero muestran una leve reacción emocional. - tiempos de reacción levemente irregulares y manifiestan una leve reacción emocional No adecuados para aviación: - Tiempos de reacción presentan grandes desviaciones y las reacciones emocionales son muy exageradas - tiempos de reacción son muy irregulares, aunque no muestran reacciones emocionales excesivas INGLATERRA Efectos del vuelo en altitud Flack datos fisiológicos, pulso, presión sanguínea, capacidad vital… La administración de oxígeno a sujetos estancados o mentalmente fatigados aumentó su rendimiento entre un 30 y un 40 por ciento. Coordinación Motora simple Heald caminar en línea de talón a punta y girar sobre un pie, pararse sobre un pie durante quince segundos con los ojos abiertos o cerrados, equilibrar una barra en una tabla plana con los ojos abiertos o cerrados, y en indicaciones de temblor El temblor está ausente o es leve en el buen piloto (el temblor no es tanto una indicación de un temperamento neuropático como de una clara perturbación de la función) Temperamento Iaeut Birley Presión arterial, Pulso, fuerza de aspiración "la ineptitud temperamental y física no son cosas separadas sino estrechamente relacionadas", y que "el temperamentalmente inadaptado es físicamente inestable. Nota: Tabla con los autores más relevantes, así como el campo de interés y los resultados de las primeras investigaciones relacionadas con los Factores Humanos en la aviación. Fuente: Dockerey y Isaacs, (1921); Sáiz & Roca, 2012 26 En Estados Unidos también se desarrollaron otras investigaciones enfocadas a la evaluación de pilotos, encontrando entre ellas la velocidad de ajuste del ojo a diferentes distancias (Ferree & Rand, 1919, 1920), o la adaptación visual en el vuelo nocturno (Cobb, 1919). Posteriormente entre los años 1918 y 1939 la aviación vive una de sus mejores épocas ya que comienzan a crearse las primeras compañías aéreas que van absorbiendo tanto a pilotos como a mecánicos entrenados pertenecientes a los ejércitos que habían luchado en la I Guerra Mundial. También se produce una evolución en los aviones, se desarrollan mejores motores y se implementan nuevas tecnologías como el piloto automático. En esta época donde la guerra perdió importancia disminuye también la investigación de la psicología de la aviación (Brammer,1925) Pero es al mismo tiempo en esta época cuando se asume la importancia de las pruebas psicológicas para la evaluación de pilotos, dando más importancia al examen psicológico que al físico (de Foney, 1931; Dunlap, 1926; Sutton, 1930) y de nuevo a partir de la década de los 30 vuelven a incrementarse los estudios sobre la psicología de la aviación siendo los ámbitos más tratados los relativos a Factores humanos, la selección y la creación de test y el desarrollo de aparatos para la medida de aptitudes que conllevaron el desarrollo de instrumentos más sofisticados (Sáiz & Roca, 2012). Como hemos podido ver, si bien es cierto que la guerra propició el desarrollo de esta rama de la psicología, centrándose en aspectos como la selección de los candidatos más aptos para el puesto de piloto, continuó su evolución mostrando nuevos centros de interés como los factores humanos o el estudio de accidentes aéreos. Debido a la evolución de la tecnología, el estudio de los factores humanos es una rama que no deja de evolucionar, ya que al mismo tiempo que se desarrollan nuevos métodos de vuelo es necesario estudiar de qué manera se integran con el piloto con el fin de hacer el pilotaje más seguro, no solo por la seguridad del piloto y los pasajeros sino también por los grandes costes que tendría la pérdida de uno de los actuales aviones. Los factores humanos son un componente crítico del éxito futuro de la aviación en los sistemas de aviación civil y militar, especialmente cuando se trata de seguridad. 27 En la aviación encontramos el medio de transporte más seguro del momento, pero este hecho no es algo que se haya producido por casualidad, como hemos podido ir viendo a lo largo de estas líneas esto se debe al esfuerzo y las mejoras, no solo tecnológicas, que se han ido desarrollando en este ámbito, sino también a la buena implementación que se ha llevado a cabo entre el ser humano y los métodos tecnológicos, a pesar del gran aumento en la cantidad de información que los pilotos reciben desde su cabina debido al desarrollo de nuevos sensores o a la implementación de nuevos sistemas autónomos ( CIEHF, 2020). Los usos de estas nuevas tecnologías obligan a capacitar al piloto en estos nuevos entornos midiendo sus capacidades físicas y cognitivas con el fin de conocer cuáles son las debilidades o habilidades que se necesitan mejorar en el piloto para poder, de ese modo, crear programas de entrenamiento más eficaces que ayuden a los pilotos a rendir más y mejor disminuyendo aún más los posibles errores humanos. Los factores humanos son definidos como el estudio de cómo los humanos llevan a cabo tareas relacionadas con el trabajo, en particular en relación con máquinas y equipamiento. Las áreas deinvestigación de los factores humanos se han centrado en los problemas del mantenimiento efectivo del rendimiento bajo condiciones adversas de trabajo (Sauer et al., 1997): Excesiva carga de trabajo y toma de decisiones múltiples, alta demanda de la tarea. Efectos de los estados subóptimos del operador, estrés y fatiga, pérdida de sueño, reducción de la motivación o inadecuada habilidad o entrenamiento. Pero, podemos ver cómo estas áreas han ido evolucionando y hacia donde se dirigen las investigaciones en los próximos 25 años. (imagen 1) 28 Imagen 1: Evolución de los factores humanos y futura hoja de ruta Fuente: Traducido de: ergonomics.org.uk 29 1.2 VEHÍCULOS NO TRIPULADOS Desde los nómadas del paleolítico, pasando por el descubrimiento de América en el año 1492 hasta llegar al lanzamiento del Ingenuity en el año 2020, la movilidad ha resultado ser un aspecto esencial para la exploración, ya sea en tierra, mar o aire, convirtiéndose para los científicos en un punto fundamental en la exploración de lugares remotos como bien podría ser otro planeta. Afortunadamente, la evolución tecnológica ha dotado de vehículos no tripulados a los exploradores y/o científicos, los cuales resultan en determinados casos muy beneficiosos al no poner en riesgo al personal y posibilitando el acceso a zonas remotas y peligrosas, como podría ser por ejemplo el acceso a una zona afectada por una erupción volcánica. Los sistemas no tripulados los podemos encontrar enfocados tanto a vehículos aéreos, terrestres o marítimos, aunque son los aéreos los que poseen más popularidad en la actualidad. Básicamente, consisten en vehículos que no llevan pilotos dentro y se pueden controlar bien de manera remota o, en algunos casos, llegan a tener un alto grado de autonomía y funcionan de manera autónoma con muy poca intervención por parte de un ser humano. 1.2.1 Historia vehículos aéreos no tripulados Según la Organización Internacional de Aviación Civil (OACI, 2011) un Dron es una aeronave que es operada sin un piloto humano a bordo. Existen diversas denominaciones de este tipo de aeronave (UAV, UMA, RPV, UAS, RPAS...) pero todas se refieren a un mismo concepto haciendo referencia a un vehículo que se controla de forma remota por un operador que está en tierra o bien están preprogramados para volar rutas específicas (Nelson & Gorichanaz, 2019). Por ejemplo UAV (unmanned aerial vehicle) es usado por el Departamento de Defensa de EE.UU (2010) mientras que UAS (Unmanned Aircraft Systems) y RPAS (Remotely Piloted Aircraft) lo son por el Ministerio de Defensa del Reino Unido (2015). Aunque ha sido en los últimos años cuando los términos UAV o DRON se están popularizando, esta tecnología lleva desarrollándose desde antes de la I Guerra Mundial donde encontramos a Nikkola Tesla (1898) como el creador del primer dispositivo de control remoto de cualquier tipo de vehículo. Tesla presentó 30 el 1 de julio de 1898 en la Oficina de Patentes y Marcas de Estados Unidos su “Method of and Apparatus for Controlling Mechanism of Moving Vessels or Vehicles” (“Método y Aparato para Controlar el Mecanismo de Movimiento de Buques o Vehículos”). No es de extrañar, por tanto, que los UAV pudieran volar muchos años antes de que los hermanos Wright realizaran su primer vuelo tripulado en el año 1903. De hecho, la historia de estos vehículos puede remontarse al año 1818 cuando el francés Charles Rozieer fabricó un globo del que se podían tirar cohetes (Nisser & Westin, 2006). A la hora de desarrollar estos vehículos los ingenieros se enfrentaron a determinados problemas relacionados con la estabilización automática, el control remoto o la navegación autónoma que fueron superados por Elmer Sperry y Glenn Hammond Curtiss en 1911 (Newcome, 2004). En 1916 se llevó a cabo la primera demostración para guiar un avión automático, recibiendo la idea el apoyo de la armada de EE.UU quien en 1917 financió el proyecto y en marzo de 1918 se llevó a cabo el primer vuelo controlado con éxito de un avión no tripulado. Durante la Segunda Guerra Mundial se desarrollaron diversos modelos para ser usados como blancos móviles y que sirvieran de entrenamiento, entre ellos podemos mencionar el “Queen Bee” inglés o “RP14” de EE.UU que cumplieron una función como banco de pruebas para el desarrollo de la tecnología del control remoto. Imagen 2: Fotos del RP4 y el Queen Bee Nota: Lado izquierdo foto del RP14 y a la derecha el Queen bee. Fuente: Righter Family Archives y British Museum, London. Licencia: CC BY 3.0. © IWM H 10307 https://creativecommons.org/licenses/by/3.0/ 31 Tras la Segunda Guerra Mundial se continuaron desarrollando estos “blancos” aéreos donde sus versiones fueron evolucionando ofreciendo mejoras en sus motores e incluso algunos se modificaron para portar armas (Austin, 2010) o cámaras para reconocimiento como ocurrió con el “Firebee”. Este vehículo además podía ser controlado desde tierra o bien desde otros aviones tripulados. En esta época también se desarrolló el primer UAV de ala rotatoria el DASH (Anti-Submarine Helicopter Drone) que fue creado no como un blanco de prácticas si no para atacar. (Austin, 2010). Imagen 3. Foto del QH-50D DASH Drone Helicopter Fuente: Publicado el 12 de enero de 2014 por Aviationintel.com A partir de los años 70 estos vehículos fueron desarrollándose cada vez más, mejorando tanto sus sistemas de comunicación como de seguridad ya que se dio prioridad a las misiones de reconocimiento sin piloto. De hecho, en los años 60-70 durante la guerra de Vietnam el objetivo de estos vehículos era llevar a cabo un tipo de vigilancia sigilosa en misiones de reconocimiento (Nisser & Westin, 2006). Podemos destacar el “L-450F” o el “XQM-93” como aeronaves destinadas a vuelos de alta altitud y larga resistencia. Por otro lado, también se llevaron a cabo proyectos para desarrollar aeronaves que volaran a media altitud y también a larga distancia que pudieran ser usadas como arma o como sistema de 32 reconocimiento, pero a un bajo coste, en este punto encontramos el “mosquito- 750” que sería el antepasado del actual Predator. Por otro lado, en el ámbito no militar y tras las sondas espaciales Viking I y Viking II (1976) llegar a Marte dejó de ser un problema, pero surgió un nuevo reto: la movilidad. Se trabajó en varios modelos basados en el “mini Sniffer”2, el proyecto “Dédalo”3 o el “MAGE”4 sin embargo, estas propuestas fueron rechazadas por la NASA en pos del uso de Rovers. Imagen 4. Foto de mini-sniffer Fuente: NASA (captura de pantalla) La exploración de los planetas y lunas del Sistema Solar se ha basado, hasta ahora, en la teledetección desde la Tierra a través de sondas, orbitadores, Landers y Rovers. El inconveniente fundamental de los sistemas basados en su uso desde la Tierra es que poseen una cobertura limitada: los Rovers han estado limitados en distancia y en velocidad (3,8 cm/seg) mientras que un vehículo aéreo autónomo podría rápidamente explorar un área mucho mayor (3km/25 min) con un sistema de imagen de gran resolución o mediante el uso de otros instrumentos de telemedida que no son posibles para el Rover (Young & Pisanich, 2004). Desde que en la década de los 90 la NASA rechazara los proyectos que defendían el uso de aviones no tripulados en la atmósfera marciana, debido a la falta de estudios al respecto, el desarrollo de tecnologías basadas en pequeños 2 Aeronave no tripulada diseñada para subir a 70.000 pies y estudiar el impacto medioambiental de los aviones supersónicos 3 Planeador con más de 400 kilómetros de alcance 4 Explorador geofísico aerotransportado de Marte 33 vehículos aéreos autónomos que extendíanel rango de exploración de los actuales Rovers se convirtió en un objetivo. 1.2.2 Drones en la actualidad Los Drones han alcanzado en los últimos años gran popularidad siendo varios los factores que han contribuido a ello. Por un lado, encontramos las mejoras tecnológicas, como la miniaturización de los componentes electromecánicos (Mazur et al., 2016) y por otro el descenso en su precio, debido en parte, al abaratamiento de las baterías. Esto está permitiendo que personas del ámbito civil también puedan acceder al uso de estos sistemas hasta hace poco limitados al ámbito militar (Hobbs & Herwitz,2005). Si bien se ha prestado mucha atención al desarrollo del hardware del sistema y la operatividad tecnológica, se ha prestado menos atención a la creación de la interfaz del sistema humano y los requisitos de capacitación del operador, descuidando por tanto la parte humana de este equipo mixto formado por un humano (el piloto) y un robot (el Dron). Este aspecto es tan importante que se ve reflejado en el número de accidentes, siendo mayor los producidos para UAVs que los sucedidos en vuelos convencionales. No deja de ser interesante que, como informan Asim et al. (2005), los errores humanos son responsables del 67,57% de los accidentes en cien años de historia de la aviación (1905-2005) y que, si bien la tecnología de los UAVs se desarrolló para eliminar ciertas limitaciones humanas y reducir así estos accidentes, las estadísticas muestran un mayor número de accidentes debido al error humano en sistemas no tripulados que en los vuelos convencionales. Concretamente la mayoría de los accidentes de vehículos aéreos no tripulados ocurrieron durante las fases de despegue y aterrizaje de los vuelos, que involucran la intervención humana en el sistema no tripulado, aspecto este que va en la misma línea de los hallazgos encontrados en un estudio elaborado por G. de la Torre et al. (2016). Por tanto, no deja de ser importante el estudio de estos equipos mixtos formados por humanos y vehículos no tripulados con el fin de seguir investigando en este aspecto. Murphy (2014) informa que todos los robots móviles desplegados en 34 desastres conocidos e incidentes extremos entre 2001 y 2013 fueron teleoperados. De todos el 50% de los fallos se debieron a errores humanos en 34 las interacciones humano/robot, sin embargo, comenta que existen pocos estudios centrados en comprender los atributos únicos asociados a las interacciones humano-robot, concretamente en la robótica de desastres. Esta es otra prueba de cómo se está dejando a un lado la importancia del operador humano en este tipo de trabajos. En la actualidad, los vehículos aéreos que han ganado más popularidad son los de ala rotatoria5, que varían en función del número de rotores que poseen pudiendo ir desde un solo rotor (helicóptero), 3 rotores (tricópteros), 4 rotores (cuadricóptero), 6 rotores (hexacóptero), 8 rotores (octocóptero), o en otras configuraciones menos comunes como 12 o hasta 16 rotores. Imagen 5. Configuraciones más habituales en los multirrotores Fuente: miprimerDrone.com. https://bit.ly/3gYdxFX 5 Este tipo de vehículos aéreos, consiguen la sustentación gracias a la rotación de su ala o hélice (cada una teniendo de 2 a 4 palas por lo general). En el caso de un solo motor estaríamos hablando de helicópteros, y en el caso de más motores/hélices, estaríamos hablando de multirrotores, estos son las aeronaves más comunes por su versatilidad y sencillez en el manejo https://bit.ly/3gYdxFX 35 Estos vehículos tienen un peso que puede rondar entre los 2kg y los 25 kg y son manejados mediante una emisora similar a las usadas en vehículos a radio control. Estos vehículos ofrecen, a un coste mucho menor, las mismas ventajas que un helicóptero convencional tales como la capacidad de vuelo a baja altitud, despegue y aterrizaje vertical, así como acceso a áreas remotas. Entre los dispositivos más famosos se encuentran los de la serie Phantom, producidos por la compañía china DJI o los producidos por la compañía francesa Parrort, aunque cada vez son más las empresas que se dedican a fabricar sus propios modelos. Imagen 6. Drones actuales de la marca DJI y Parrot Nota: DJI Air 2S a la izquierda y Parrot Anafi USA a la derecha. Fuente: Imágenes obtenidas en las páginas oficiales de la marca Estos vehículos son una buena solución ya que pueden cruzar un área amplia sin tener que tocar el suelo y, por lo tanto, pueden ser utilizados para explorar, por ejemplo, los restos tras una catástrofe (Re´my et al., 2014). La alta movilidad de estos vehículos aéreos, la posibilidad de usarlos en entornos que resultan peligrosos para un ser humano (Kontitsis et al., 2003), su capacidad para reducir el tiempo de intervención, mejorar la identificación de las causas y efectos de las crisis, los convierten en una herramienta de gran utilidad para diversos tipos de tareas: misiones de búsqueda y rescate de cuerpos usando imagen termal (Rathinam et al., 2007), el análisis de la composición del gas dentro de los volcanes (Astuti et al., 2008), las operaciones de vigilancia incluyendo la inspección y monitorización de los límites de los ríos, puentes y líneas de costa (Rathinam et al., 2007), la monitorización de incendios forestales (Casbeer et al., 2005), la búsqueda de objetivos terrestres en regiones desconocidas (Xie et al., 2012) o la creación de mapas (Templeton et al.,2007), 36 entre otras utilidades. Pero no solo se han enfocado en labores profesionales, desde hace unos años se han empezado a popularizar las carreras de Drones, donde varios pilotos compiten para ser el más rápido a la hora de dar varias vueltas a un circuito. En este tipo de vuelo es usual que los pilotos utilicen gafas FPV (First Person View) con las que los pilotos obtienen una visión en primera persona y en tiempo real desde las cámaras instaladas en los propios Drones. Imagen 7. Pilotos de Drones Fuente: Captura de pantalla de la web https://cursodeDrones.es La posibilidad de recabar información desde el aire, y en tiempo real, de lo que está sucediendo a varios kilómetros de distancia de una manera rápida y sin poner en riesgo la vida de personas, ni afectar al ecosistema, en el caso de la observación de vida salvaje, supone una gran ventaja y si además sumamos a esto el uso de diferentes tipos de cámaras, podemos obtener información muy valiosa del terreno en misiones de exploración. Su uso, por tanto, está abierto a diferentes campos como la agricultura, (Meneses et al.,2015; Barreiro & Valero 2014), arquitectura (Pacheco, 2017), seguridad (Balestreri, & Falck, 2015) topografía (Ferreira, & Aira, 2017) o geología (Fernández-Lozano & Gutiérrez-Alonso, 2016), entre muchos otros. Una aplicación alternativa para estos pequeños vehículos aéreos sería su uso como asistentes de apoyo en investigaciones científicas en entornos 37 extremos. (Aiken et al., 2000; Corfeld et al., 2002) La movilidad proporcionada por los robots aéreos puede potencialmente proporcionar acceso seguro a sitios que de otra manera implicarían un esfuerzo considerable a los científicos de campo. Además, el potencial de la capacidad de los asistentes de campo robóticos para llevar pequeñas cargas útiles científicas y/o adquirir y transportar pequeñas muestras de sitios remotos, también resulta fundamental en su utilidad potencial en la ciencia de campo (Young et al., 2004). Imagen 8. Los Drones en diferentes campos profesionales Nota: Imagen 1 Dron usándose para tareas de fumigación; 2: Dron usado en control de incendios forestales; 3: Dron para vigilancia y seguridad; 4: Topografía y mapeo de terrenos. Fuentes: www.bwxtrade.com; www.Xataka.com; www.uab.cat; www.cifptecin.comExisten diversos estudios que se están llevando a cabo por la NASA donde los asistentes de campo robóticos podrían ofrecer un gran servicio en campos como: la biología del impacto de cráteres, la actividad hidrotermal, la densidad sedimentaria de rocas, el geomagnetismo o la erosión fluvial en Marte (Cockell, & Lee, 2002; Osinski, et al., 2001; Osinski, & Spray 2001; Lee, 2000). De hecho, los vehículos aéreos podrían usar diferentes instrumentos como http://www.bwxtrade.com/ http://www.uab.cat/ 38 cámaras con ópticas de gran alcance para la guía/navegación y reconocimiento aéreo, sensores de temperatura y de presión atmosférica para la preparación del vuelo, la documentación de la climatología a distancia del sitio o la identificación de la muestra de roca del suelo (Kontitsis et al., 2003), lo que sin duda convierte a estos pequeños robots en unos grandes asistentes de campo. Respecto a la exploración planetaria no son muchos los trabajos que se han realizado en vuelos de baja altitud en lugares análogos a Marte (Pisanich et al., 2004; Miller, 2002; Miller et al.,1999; Miller & Amidi, 1998), pero a pesar de lo limitada de las investigaciones, este tipo de reconocimiento aéreo se muestra prometedor para futuras investigaciones. Los drones de ala rotatoria ofrecen las mismas ventajas que un helicóptero convencional tales como la capacidad de vuelo a baja altitud, despegue y aterrizaje vertical, así como acceso a áreas remotas. La flexibilidad que presentan ofrece la posibilidad de hacer uso de múltiples configuraciones de acuerdo a las necesidades específicas del científico/profesional que los use, pudiendo añadir diferentes dispositivos al Dron (cámaras, sensores…), o incluso utilizar múltiples drones, controlándolo todo fácilmente desde una tablet diseñada para tal efecto. El gran abanico de posibilidades que ofrecen estos robots aéreos los definen como el compañero ideal en un gran número de profesiones, no siendo extraño encontrar en el maletero del coche de un fotógrafo, un arquitecto o un policía uno de estos vehículos. Sin embargo, como hemos podido ir viendo a lo largo de este trabajo, estos vehículos necesitan de la interacción con el ser humano, quienes pueden verse afectados en su día a día por multitud de variables como son las psicológicas, sociales, cognitivas o fisiológicas. El modo en el que estas variables inciden en el rendimiento humano cuando se maneja un dron es un aspecto que necesita ser evaluado y analizado ya que afectará al desempeño de la tarea. 39 2. LA IMPORTANCIA DE LOS FACTORES HUMANOS EN EL MANEJO DE DRONES 2.1 Introducción Como hemos podido ir viendo a lo largo del presente trabajo el uso de drones a baja altitud puede proporcionarnos cobertura para investigar eventos de interés de una región, sin embargo, no podemos olvidar que será el humano quien tomará las decisiones o clasificará los objetivos. El papel de los operadores humanos será especialmente indispensable cuando la consecución del objetivo implique la toma de decisiones in situ, especialmente cuando una decisión equivocada pueda tener consecuencias negativas (Savla et al., 2008, August). De hecho, ante los grandes avances tecnológicos donde encontramos aviones que vuelan de manera autónoma y donde la Inteligencia Artificial está cada vez más desarrollada podríamos preguntarnos, como ya lo hacen en el libro blanco “The human dimensión in tomorrow’s aviation system”, (CIEHF6, 2020) ¿Hasta cuándo dependerán de los humanos?. Pues bien, estos autores concluyen que el ser humano va a continuar desempeñando un papel clave en la aviación entre ahora y un futuro previsible (año 2050) aunque por supuesto se producirán grandes cambios. Se basan en la idea de que la autonomía total es muy difícil ya que aún se necesitan muchas personas implicadas para que todo funcione correctamente. Dentro de la literatura que aborda los factores humanos en vehículos controlados de manera remota el grueso de las investigaciones existentes se han basado en UAV de uso militar así como en el desarrollo de hardware y software que hagan a estos vehículos cada vez más autónomos, dejando a un lado el estudio de las variables que pueden afectar al operador de estos vehículos y muy especialmente al piloto de un pequeño cuadricóptero, lo que deja un campo abierto a este tipo de estudios ya que, como hemos indicado 6 Chartered of Ergonomics & Human Factors 40 anteriormente, cada vez son más las empresas que usan este tipo de vehículos para la realización de diferentes trabajos. Podemos ver cómo las estadísticas del ejercito de los EEUU indican como las tasas de accidentes de los UAV son más altas que las que se observan en aviones tripulados (Williams, 2004) lo que podría indicar que existe menos investigación en relación a estos pilotos que a los convencionales que ayuden en el desarrollo y mejora de las habilidades necesarias para su puesto. Otro de los aspectos importantes a tener en cuenta es que la mejora de las baterías y motores (Annati & O'brien 2012; Harmon et al., 2006; Berradi et al., 2015) ha logrado que estos vehículos hayan pasado de vuelos de 12-30 minutos a vuelos que pueden llegar a durar varias horas (Hispaviacion, 2020). Este aspecto que puede resultar positivo en relación al tiempo y los costes (permiten ahorrar en el número de baterías necesarias así como en el tiempo al no tener que detener el trabajo para recargarlas) pasan por alto el hecho de que ante estas situaciones el piloto podrá ver mermadas sus capacidades atencionales y de rendimiento lo que quizás pueda llevar, a la larga, un sobrecoste llevando al piloto a la emisión de errores que podrían afectar no solo a la estructura del dron sino también provocar daños humanos. Por tanto, los pilotos que posean una mayor capacidad para mantener la atención y no verse afectados por la carga de trabajo que suponga la tarea a realizar podrán ser variables interesantes de estudiar, y del mismo modo, si conocemos cuales son los factores que afecten a un buen desempeño del pilotaje podremos usar esa información para paliar posibles dificultades o mejorar el entrenamiento de estos pilotos. A pesar del término “no tripulado” en la denominación de un UAV, prácticamente todos los UAV todavía están tripulados ya que en todos los casos hay humanos involucrados de alguna manera en todos los vuelos (Mouloua et al., 2003). En algunos casos, la aeronave es guiada manualmente usando controles de palanca y timón, y el operador recibe imágenes visuales de una cámara que mira hacia adelante montada en el vehículo. Incluso en UAV autónomos como el Global Hawk, con capacidades de despegue y aterrizaje automatizados, los humanos llevan a cabo la planificación de la misión, el desarrollo del software de la misión y la supervisión de la misión con la capacidad de anulación práctica. 41 Debido, por tanto, a la importancia que supone el factor humano dentro de esta actividad resulta necesario evaluar y estudiar el modo en el que se comportan los humanos a la hora de llevar a cabo vuelos con drones. Si bien es cierto que el estudio de los factores humanos en pilotos de vehículos tripulados se remonta a la Primera Guerra Mundial el estudio en pilotos de UAVs resulta ser mucho más tardío. A pesar de este aspecto, en diferentes estudios como los llevados a cabo por Carrreta (2011) o Damos (2011) se ha dejado de relieve como diferentes tipos de conocimientos, experiencias cognitivas o aspectos psicomotores identificados en investigaciones con vehículos aéreos no tripulados han resultado estar estrechamente relacionados también con los considerados como críticos para los pilotos de aeronaves tripuladas. Por ello, resulta interesante a la hora de estudiar qué aspectos pueden afectara los pilotos de vehículos no tripulados revisar la bibliografía existente de estudios que hagan referencia a cómo esos aspectos pueden influir también en pilotos de vehículos tripulados. No obstante, esto no implica que se reste valor a la necesidad de estudiar los factores humanos en áreas donde los sistemas automatizados conviven con los seres humanos. Del mismo modo, otro aspecto que incide en la necesidad de aumentar la investigación en este ámbito hace alusión a que si bien existe mucho material sobre la aviación o el tráfico aéreo, gran parte de esa información no podemos aplicarla a los drones debido a que el rápido diseño y desarrollo de estos nuevos vehículos aéreos no tripulados de última generación han dejado atrás a los científicos que investigan sobre aspectos relacionados con factores humanos en este ámbito (Nisser & Westin, 2006), por ese motivo es necesaria una mayor investigación al respecto. 2.2 Interacción humano/robot Debido a la interacción que el operador debe realizar junto con el dron no es de extrañar que se valore cual es el nivel adecuado de autonomía que deben tener estos “robots” para funcionar en unas condiciones óptimas. Las investigaciones relativas a factores humanos, revelan que las tareas complejas se realizan con más éxito cuando el sistema está diseñado para apoyar las necesidades del ser humano en lugar de eliminar al humano del sistema (Abbott 42 et al., 1996). De hecho, en muchos casos, el objetivo de eliminar al humano del sistema ha dado lugar a fallos del sistema importantes, específicamente porque el sistema no fue diseñado para apoyar la interacción con el humano (Casey, 1998). En términos generales, el campo de los factores humanos sostiene que el sistema automatizado debe diseñarse para adaptarse a las limitaciones y las fortalezas del ser humano, es decir, las capacidades de gestión de la información y procesamiento de datos de los sistemas automatizados deben diseñarse para mantener al operador involucrado. informado y activo (Nisser & Westin, 2006). La automatización a menudo se promociona como un medio para reducir los requisitos de personal y las tasas de accidentes. Sin embargo, dicha automatización no garantiza la reducción del error humano (Rash et al., 2006). De hecho, la automatización mal adaptada o mal aplicada puede inducir un error humano debido a una retroalimentación inadecuada, una dependencia insuficiente de la automatización o una dependencia excesiva de la automatización (Parasuraman & Riley, 1997; Sorkin, 1988). Wickens (1992) menciona tres aplicaciones generales de la automatización: 1) Para realizar funciones en las que los seres humanos están inherentemente limitados; 2) Para aquellas funciones que el ser humano podría realizar, pero a costa de un rendimiento degradado o una alta carga de trabajo y 3) para ayudar al desempeño en áreas donde los humanos pueden tener limitaciones. Por tanto, usar la automatización para otros usos podría no ser tan ventajosa. Según explican Nisser y Westin (2006) entre los problemas que podemos encontrar relacionados con un diseño inadecuado de la automatización podemos encontrar: Disminución de la conciencia situacional Sobrecarga cognitiva Incapacidad para volver a asumir el control manual Habilidades manuales degradadas por falta de práctica La necesidad de nuevos procedimientos de selección y formación Pérdida de motivación Mayor riesgo del error humano 43 De acuerdo con Marble et al. (2003) también pensamos que, en lugar de concebir a las máquinas como instrumentos pasivos o, a la inversa, como entidades totalmente autónomas que actúan sin intervención humana, es más efectivo considerar a la máquina como parte de un equipo dinámico humano/robot. De hecho, existen evidencias en estudios de autonomía humano/robot que indican como las interacciones mixtas ofrecen mejores rendimientos que cualquiera de autonomía total. (Marble et al., 2003; Julie et al., 2004; Wang & Lewis, 2007). En otros estudios enfocados en maximizar el rendimiento del robot mientras se minimiza la aportación del humano se observa como la combinación de los puntos fuertes de los humanos y de los robots, para lograr una tarea cooperativa, comienzan a ser paradigmas populares (Bruemmer et al., 2007; Crandall & Cummings, 2007; Fong et al., 2003). Ajustar la autonomía del robot y permitir la aportación humana es un buen camino para lograr una buena combinación. La asunción subyacente es que el rendimiento del robot aumenta con más aportación humana (Kaupp, & Makarenko, 2008). Si bien mantener el número de interacciones necesarias al mínimo por parte del operador tiene ventajas: por un lado, los humanos pueden dar así mayor calidad a sus aportaciones y por otro, el número de robots que podrán ser operados simultáneamente aumentará (Kaupp & Makarenko, 2008). También se observa cómo, a mayor nivel de autonomía, el robot tarda menos tiempo en realizar la tarea, pero el número de éxitos disminuye. Por el contrario, se ha observado como el rendimiento del robot aumenta si puede obtener las aportaciones de un experto (Kaupp, & Makarenko, 2008). Aunque es cierto que algunos estudios han demostrado una reducción de la carga de trabajo del operador al implementar la automatización en el vuelo de UAVS, (Dixon et al., 2003), como hemos podido ver a lo largo de este punto, existen diversos problemas con la automatización que pueden resultar en un riesgo para el manejo de estos vehículos como pueden ser que el operador mantenga una conciencia deficiente de la situación, que desarrolle un modelo mental deficiente del sistema o incluso puede provocar dificultades para recuperar el control del sistema si la automatización falla (Kaber & Endsley, 1997). 44 La automatización, por tanto, si bien ha demostrado determinados beneficios en aspectos como la seguridad o la carga de trabajo, también ofrece mayores exigencias a las habilidades cognitivas del humano, como pueden ser el seguimiento, la planificación o la toma de decisiones (Nisser & Westin, 2006) pero, además, la automatización puede introducir nuevas e imprevistas formas de error (Reason, 1988). 2.3 Rendimiento humano El vínculo entre la interacción de automatización humana y la vigilancia ha sido bien documentado (por ejemplo, Molloy & Parasuraman, 1996; Warm et al., 2008). A pesar de que la automatización se usa para relevar a un operador humano de tareas, la verdad es que el operador no es relevado del trabajo, más bien lo que cambia es la naturaleza del trabajo. Esta interacción entre equipos formados por un humano (operador) y un robot (automatización) requiere que el humano esté atento y alerta para poder monitorear uno o más sistemas automatizados y esté preparado para intervenir en caso de que esta automatización falle (Sheridan, 2002). Este tipo de trabajo de supervisión resulta muy monótono y requiere que el operador esté listo para responder a los fallos de automatización que suceden de manera aleatoria y en extrañas ocasiones. Por tanto, será necesario que estos sujetos cuenten con ciertas capacidades que les ayuden a rendir de una manera satisfactoria. El rendimiento humano se ve afectado por una variedad de influencias y tareas tanto internas como ambientales. Las funciones que moderan el rendimiento humano son ecuaciones derivadas de datos empíricos que son usados para determinar cómo el rendimiento humano se ve afectado por la combinación e influencia de factores encontrados en condiciones específicas. Ejemplos de estas funciones moderadoras pueden ser las horas de sueño, la temperatura ambiental, el estrés o la carga de trabajo. (Aasman et al., 1987). Estudiando el rendimiento de equipos humano/humano y humano/robots en función de la carga de trabajo y el tiempo empleado en la tarea se encontraronevidencias de que la carga de trabajo es más baja en la condición humano/robot que en el humano/humano (Adams et al., 2012). A continuación, se indican algunas de las funciones clave en el presente trabajo y que se desarrollarán a lo largo del presente capítulo (Figura 1). 45 Figura 1: Aspectos que afectan en el desempeño de una tarea Fuente: Elaboración propia En los modernos sistemas altamente automatizados, el operador es principalmente un monitor de supervisión de la actividad del sistema de control automático (Sheridan, 1987). Su tarea principal es monitorizar el sistema y tomar las acciones correctivas solo cuando éstas sean requeridas. Este papel ha sido asociado con numerosos problemas pudiendo resultar en monotonía y aburrimiento (con consecuencias de pérdida de participación en la tarea) y una dificultad de desarrollo en un modo mental preciso del estado del sistema actual (Wickens, 1992; Wiener, 1987), siendo importante, como ya se ha mencionado, valorar el nivel de implicación de los operadores para que su operatividad alcance el nivel óptimo en la cooperación humano/Robot. En relación a los factores humanos en UAVs de uso militar en un estudio llevado a cabo por Parush (2006) observan como el error humano se producía en mayores ocasiones que el error técnico durante las fases de entrenamiento, mientras que en las fases operativas (misiones de reconocimiento y vigilancia reales) y de pruebas (vuelos probando nuevas especificaciones) los fallos técnicos aumentaban. Del mismo modo, cuando el operador era el encargado de Conciencia Situacional Carga de Trabajo Tiempos de reacción Estado de Ánimo AutonomíaPersonalidad Cognición 46 realizar los despegues y aterrizajes de manera manual los errores humanos también aumentaban frente a los técnicos. Este aspecto también se observó en el trabajo llevado a cabo por De la Torre et al. (2016) usando un simulador de entrenamiento de UAVs de uso civil donde el mayor número de errores se encontraron en las tareas de aterrizaje. En un análisis posterior de los resultados Parush (2006) abordó el tipo de error humano que se había producido en las tareas de despegue y aterrizaje, encontrando que la mayoría de los errores eran producto de errores de percepción7 (no detectar un cambio en la situación de la aeronave o no comprender su situación) o errores de acción 8(realizar la acción incorrecta). En concreto, si hablamos de vehículos aéreos no tripulados de ala rotatoria, más concretamente los usados en ámbito civil debemos de sumar una característica que no encontramos en los UAV de uso militar y es que en estos últimos los mandos del UAV se encuentran en un lugar aislado, donde se puede controlar tanto la iluminación, como el ruido o la temperatura, mientras que cuando se pilota un pequeño dron el piloto está expuesto a todos estos factores sin poder modificarlos lo cual aumenta el riesgo de cometer determinados errores. Es de gran importancia que se investigue la relación entre el desempeño de la tarea, como es pilotar un dron y los límites fisiológicos de adaptabilidad máxima de los pilotos. Investigar en esta área es algo fundamental para comprender y evaluar las capacidades cognitivas y físicas de los pilotos, de modo que cualquier función comprometida pueda ser mitigada por el diseño o respaldada externamente a través de apoyos cognitivos tradicionales o tecnológicos. La lista de potenciales estresores es larga, y cada uno de ellos puede representar un serio problema para el buen término de una misión (Sauer et al., 1997). Tenemos por tanto que tener en cuenta que, si el rendimiento humano individual puede impactar en el rendimiento de equipos de humanos (Katzenbach, & Smith, 2005), el rendimiento humano también impactará en el rendimiento de una tarea de equipos mixtos humano/robot (Harriott et al., 2011). 7 Detección sensorial, el reconocimiento y la identificación de estímulos y situaciones 8 Respuestas reales, y las acciones que realiza el operador humano, definidas como deslices y lapsus 47 Podemos ver, por tanto, como existen un gran número situaciones y características personales que pueden incidir en el rendimiento humano y afectar al resultado de una tarea o misión. Como ya se ha indicado si este tipo de situaciones afectan a quipos de trabajo humano/humano, es de suponer que también afecten a las relaciones de equipo entre un humano y un robot, motivo por el que se hace necesario investigar en este aspecto. Es por ello que, a continuación, nos centraremos en algunos de los aspectos que afectan al rendimiento humano y podrían interferir en el buen desempeño en una tarea de vuelo. 2.3.1 Carga de trabajo La carga de trabajo es definida como la combinación de la demanda de trabajo y la respuesta humana a esta demanda (Mouloua et al., 2001). Factores como la experiencia, la presión del tiempo, el ruido, el estrés o la distracción podrían influir en los "costos humanos" a la hora de realizar una tarea determinada. Incluso una misma tarea podría representar una cantidad razonable de carga de trabajo para un operador experimentado, pero sobrecargar a un novato. Por tanto, la evaluación de la carga de trabajo es un punto clave en la investigación y desarrollo de los sistemas de comunicación humano-máquina con el fin de garantizar la seguridad, la salud, la comodidad, y la eficiencia productiva del operador a largo plazo. (Rubio et al., 2004). Los niveles de carga de trabajo pueden variar considerablemente entre períodos extensos de bajo nivel de carga de trabajo e intensos períodos de trabajo. Un diseño de trabajo efectivo por lo general tiene como objetivo evitar los extremos de la demanda alta o baja, los cuales pueden ser una amenaza para el mantenimiento de habilidades (Sauer et al., 1997). De hecho, los estudios indican como prolongados períodos de alta carga de trabajo pueden provocar la reducción de la atención, el incremento de la tensión y fatiga y la reducción de la flexibilidad y exhaustividad del procesamiento de información. (Connors et al., 1985; Hockey, 1993). Continuos periodos de carga de trabajo aumentan la fatiga, especialmente después de múltiples periodos de pérdida total de sueño o largos periodos de 48 reducción o fragmentación del sueño. Esto degrada el rendimiento, la productividad, la seguridad y la efectividad de la misión. Además, esta pérdida de sueño combinada con carga de trabajo reduce el tiempo de reacción y disminuye la vigilancia. (Kmeger, 1999), observándose como las altas demandas físicas y mentales pueden provocar más errores debido al aumento de la fatiga y la pérdida de concentración (Weinger et al., 1997; Schuetz et al., 2008). La investigación ha mostrado que mientras el porcentaje de accidentes de aviación atribuibles a fallos mecánicos ha decrecido notablemente en los últimos 40 años, el porcentaje atribuible, al menos en parte, al error humano ha descendido en un porcentaje más bajo (Shappell & Wiegmann. 2000). Esta situación demuestra cómo es necesario centrarse más en el trabajo con humanos, ya que estos siguen siendo indispensables en el uso de UAV como pieza fundamental en la toma de decisiones. El “error del piloto” es a menudo la razón dada para un accidente. Sin embargo, el error humano casi siempre tiene causas subyacentes, las cuales son a menudo la razón real para un accidente. Estas causas pueden incluir alta (o baja) carga de trabajo, fatiga, pobre conocimiento de la situación o inadecuado entrenamiento entre otras causas, pudiendo una o todas estas causas disminuir el rendimiento y conducir a un accidente (Manning et al., 2004) o fracaso de la misión. Mouloua et al. (2001) afirman que debido a que es probable que el control del UAV sea altamente automatizado
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