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DENSITOMETRÍA ÓSEA 2 índice RESUMEN .......................................................................................................................................3 INTRODUCCIÓN: CONTEXTO Y DESCRIPCIÓN DEL PROBLEMA...........................................7 OBJETIVOS.....................................................................................................................................8 DESCRIPCIÓN DE LA METODOLOGÍA EMPLEADA PARA REALIZAR LA EVALUACIÓN.......9 DESCRIPCIÓN DE LA TECNOLOGÍA A EVALUAR......................................................................9 RESULTADOS DE ESTUDIOS PRIMARIOS Y REVISIONES SISTEMÁTICAS ........................10 RESULTADOS DE EVALUACIONES, RECOMENDACIONES, GUÍAS DE USO Y POLITICAS DE COBERTURA......................................................................................................15 IMPLICANCIAS Y CONCLUSIONES............................................................................................16 CITAS BIBLIOGRÁFICAS .............................................................................................................18 3 RESUMEN DENSITOMETRÍA ÓSEA INTRODUCCIÓN: CONTEXTO Y DESCRIPCIÓN DEL PROBLEMA Cuando nos referimos a la DMO hablamos de la absorciometría de rayos X de doble energía que es el método más ampliamente empleado. La osteoporosis es el trastorno del metabolismo óseo más frecuente. Está caracterizada por una disminución en la cantidad y estructura del tejido óseo que trae como consecuencia una pérdida de la resistencia del hueso y una mayor susceptibilidad para sufrir fracturas . La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha recomendado definir operativamente la osteoporosis en las mujeres blancas a la presencia de una densidad mineral ósea menor a 2.5 desvíos estándar (DE) de la mujer joven. No se ha realizado una definición operativa para hombres ni para mujeres no blancas. La OMS ha definido un grupo de mujeres en el cuale la densidad mineral ósea es normal, pero baja (más de 1 DE por debajo de la mujer joven normal). Estas mujeres tienen lo que se denomina osteopenia. Muchas veces, las pacientes se presentan con la fractura de cadera (la cual es obvia) como consecuencia de un trauma menor. Las fracturas vertebrales pueden no ser evidentes y descubrirse incidentalmente por una placa de tórax o columna. Cuando una fractura se produce por un trauma importante como un accidente de autos, se requiere información adicional para hacer el diagnóstico de osteoporos is. Entre los factores de riesgo para osteoporosis se han encontrado: tabaquismo, sedentarismo e inactividad, pubertad retrasada, bajo peso, consumo excesivo de alcohol, raza blanca o asiática, historia familiar y bajo consumo de calcio. La osteoporosis primaria tipo I (posmenopáusica) afecta a las mujeres luego de 15 a 20 años de menopausia. Se caracteriza por fracturas vertebrales, fractura distal de radio y pérdida de piezas dentarias. Las fracturas del cuerpo vertebral y del radio se deben a que en estas regiones hay más porcentaje de hueso trabecular que presenta una mayor respuesta al déficit de estrógenos. La osteoporosis primaria tipo II (senil) ocurre principalmente en hombres y mujeres mayores de 70 años. Se caracteriza por fracturas de cadera y del borde vertebral ya que en este grupo de pacientes se observa una mayor pérdida de hueso cortical. La osteoporosis secundaria puede afectar a cualquier grupo etario. Sus causas son: exceso de corticoides, hipertiroidismo, mieloma múltiple, desnutrición, déficit de estrógenos, hiperparatiroidismo, factores genéticos y varias drogas. La prevención de la osteoporosis puede lograrse con cambios en el estilo de vida como el consumo de calcio y la realización de ejercicios. A pesar de que la prevención es preferible al tratamiento, seguimos y seguiremos viendo pacientes que se presentarán con osteoporosis. El foco de este informe es cómo identificar a los pacientes que necesitan tratamiento. Este reporte aborda el tema de la DMO en mujeres. Debido a la ausencia de información, no sería posible evaluar la seguridad y eficacia del método en hombres. En la detección de osteoporosis, la meta es predecir la probabilidad de una fractura en el futuro. Existe un debate acerca de la utilidad de determinar la densidad ósea en sitios periféricos (calcáneo o radio). La osteoporosis es una enfermedad sistémica, por lo tanto se espera que la medición periférica pueda establecer el riego de fractura vertebral o de cadera. Los sitios periféricos son más fáciles de realizar, menos sometidos a artefactos técnicos por superposición de imágenes y exponen a una menor radiación. Los sistemas suelen ser más baratos y portátiles. Sin embargo, el rol de la DMO periférica y su relación con las mediciones vertebrales y en fémur es tema de controversia. La fractura de cadera es la complicación más seria de la osteoporosis: - Genera incapacidad permanente en más del 30% de los pacientes - Entre el 12 al 21% de los pacientes con fractura de cadera mueren en el año siguiente al evento - Más del 50% son incapaces de retornar a su vida normal e independiente. Usos potenciales: Generalmente se acepta que un test de rastreo que pudiera predecir con precisión el riesgo futuro de una fractura de cadera sería de gran utilidad. Sin embargo, debido a que la densidad mineral ósea es una variable continua, no existe un verdadero “umbral de fractura” . Por lo tanto, la adopción de un umbral a partir del cual se trata es un tanto arbitrario resultando, en ocasiones, en una clasificación errónea del riesgo del paciente. Se ha 4 sugerido que hasta no disponer de resultados de un protocolo de rastreo masivo con DMO, la realización del mismo no está justificado. La DMO debería realizarse en aquellas personas con mayor riesgo de osteoporosis y que estarían dispuestas a realizar tratamiento. La determinación de los factores de riesgo debe realizarse sobre la base de la historia clínica. Los factores de riesgo mayores para osteoporosis en mujeres son: (de Riggs & Melton, 1986) Veinte años de posmenopausia Raza blanca o asiática Menopausia prematura Historia familiar de osteoporosis Baja contextura física Dieta pobre en calcio Inactividad Nuliparidad Resección intestinal o gástrica Terapia con corticoides prolongada Terapia prolongada con antiepilépticos Hiperparatiroidism o Hipertiroidismo Tabaquismo Alto consumo de alcohol Además de existir factores de riesgo para osteoporosis, existen factores de riesgo para sufrir fracturas que es el evento que se quiere prevenir. Cualquier intervención en osteoporosis debe contemplar el riesgo absoluto de una paciente para sufrir una fractura por fragilidad. Los dos factores más importantes para el riesgo de fracturas son la baja densidad ósea y el antecedente personal de fractura por fragilidad. Ninguna intervención en el manejo de la osteoporosis puede considerarse suficiente si no se atiende el riesgo de caídas. La prevención de caídas en pacientes con ostoporosis reduce las fracturas y mejora la calidad de vida. Un 30% de los adultos mayores se cae por año y entre un 5 a 10% de estas caídas resulta en una fractura. Los factores de riesgo incluyen: edad avanzada, enfermedades neurológicas (accidente cerebrovascular, Pakinson), deterioro cognitivo, trastornos en el equilibrio, agudeza visual disminuida, problemas de los pies y calzado inapropiado y el empleo de sedantes y antidepresivos. Existen factores ambientales que predisponen a las caídas como los desniveles en las casas, alfombras, iluminación pobre. Estos factores deben ser evaluados y corregidos. OBJETIVOS La presente evaluación de densitometríaósea (DMO) tiene como objetivos: - Evaluar su empleo en el diagnóstico de osteoporosis en pacientes asintomáticos - Evaluar su empleo en el seguimiento de tratamiento de pacientes con osteoporosis IMPLICANCIAS Y CONCLUSIONES La osteoporosis en un problema de salud importante. Las fracturas osteoporóticas resultan en una reducción de la calidad de vida y en enormes costos por su tratamiento. El valor de intervenciones preventivas como consumo adecuado de vitamina D y calcio y la activi dad física ha sido demostrado. Existe una amplia gama de intervenciones que pueden ser implementadas sin tener que medir la densidad ósea. Estas opciones deben ser explicadas a las pacientes. Debemos remarcar el valor de las medidas preventivas ya que el 50% de las fracturas ocurrirán en personas con DMO normal. 5 - Hasta el momento no existe evidencia suficiente para recomendar el rastreo masivo de la densidad mineral ósea. - La necesidad de determinar la densidad mineral debe basarse en el paciente individual. La política para solicitar densitometría (DMO) se inscribe en la búsqueda de casos y no en el rastreo masivo. Existen varias reglas de predicción clínica de baja densidad ósea las cuales deberían emplearse para tomar la decisión de solicitar o no DMO. Dos de estas reglas son las que han mostrado mayor precisión en un estudio de validación de las mismas. Regla Punto de corte Score SCORE (Simple Calculated Osteoporosis Risk Estimation) Mayor o igual a 6 puntos Raza: 5 puntos si la raza no es negra Artritis reumatoidea: 4 puntos si está presente Historia de fractura con un trauma menor luego de los 45 años: 4 puntos por cada fractura de muñeca o costilla hasta un máximo de 12 puntos Edad: 3 veces el primer dígito en años Terapia con estrógenos: 1 punto si nunca usó Peso: - 1 vez el peso en lb/10 ORAI: Osteoporosis Risk Assesment instrument Mayor o igual a 9 puntos 15 puntos para mayores de 75 años 9 puntos entre 65 y 74 5 puntos entre 55 y 64 años 9 si el peso es menor 60 kg, 3 puntos entre 60 y 69.9 kg 2 puntos si no usa actualmente estrógenos La regla de predicción ORAI parece más fácil de implementar en nuestro medio ya que el peso se mide en kg y no en libras. - Sólo estaría indicado solicitar DMO en las mujeres con puntaje ORAI mayor o igual a 9 puntos que estén dispuestas a realizar el tratamiento. - La DMO no debe solicitarse si no cambiará la conducta posterior (ejemplo mujeres no dispuestas a realizar tratamiento) El SCORE y el ORAI seleccionan al 96% de las mujeres con osteoporosis. Sin embargo, la especificidad del ORAI es significativamente mejor. Un estudio sueco ha demostrado que puede reducirse en un 20% la utilización de la DMO si se emplea una regla de predicción antes de realizar el procedimiento a las mujeres derivadas para la realización de la prueba. El valor de repetir la DMO para monitoreo de tratamiento o para tomar decisiones en mujeres mayores no está suficientemente aclarado. Dado el error en la precisión de la tecnología actual, la medición anual no está indicada. Se necesitan al menos 2 años para valorar cambios n la masa ósea. - En mujeres bajo tratamiento de osteoporosis no debe solicitarse una DMO de seguimiento antes de los dos años. Este lapso evitaría estudios en los cuales aparecería una “no respuesta” al tratamiento que no es real. No es necesario solicitar dos sitios diferentes para el diagnóstico de osteoporosis - En las mujeres jóvenes se puede solicitar DMO columna lumbar y en las mayores de 65 puede solicitarse solamente DMO de cadera. - En las pacientes con DMO normales (T score mayor a –1) el seguimiento no debe realizarse en un intervalo menor de 3 a 5 años. 6 - Las mujeres con DMO por encima de lo normal no requieren seguimiento. - Las mujeres en programa de prevención deben ser seguidas cada 2 años hasta la estabilización de la medición. Luego debe realizarse cada 3 años. 7 1.INTRODUCCIÓN: CONTEXTO Y DESCRIPCIÓN DEL PROBLEMA Cuando nos referimos a la DMO hablamos de la absorciometría de rayos X de doble energía que es el método más ampliamente empleado. La osteoporosis es el trastorno del metabolismo óseo más frecuente. Está caracterizada por una disminución en la cantidad y estructura del tejido óseo que trae como consecuencia una pérdida de la resistencia del hueso y una mayor susceptibilidad para sufrir fracturas . La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha recomendado definir operativamente la osteoporosis en las mujeres blancas a la presencia de una densidad mineral ósea menor a 2.5 desvíos estándar (DE) de la mujer joven. No se ha realizado una definición operativa para hombres ni para mujeres no blancas. La OMS ha definido un grupo de mujeres en el cuale la densidad mineral ósea es normal, pero baja (más de 1 DE por debajo de la mujer joven normal). Estas mujeres tienen lo que se denomina osteopenia. Muchas veces, las pacientes se presentan con la fractura de cadera (la cual es obvia) como consecuencia de un trauma menor. Las fracturas vertebrales pueden no ser evidentes y descubrirse incidentalmente por una placa de tórax o columna. Cuando una fractura se produce por un trauma importante como un accidente de autos, se requiere información adicional para hacer el diagnóstico de osteoporosis. Entre los factores de riesgo para osteoporosis se han encontrado: tabaquismo, sedentarismo e inactividad, pubertad retrasada, bajo peso, consumo excesivo de alcohol, raza blanca o asiática, historia familiar y bajo consumo de calcio. La osteoporosis primaria tipo I (posmenopáusica) afecta a las mujeres luego de 15 a 20 años de menopausia. Se caracteriza por fracturas vertebrales, fractura distal de radio y pérdida de piezas dentarias. Las fracturas del cuerpo vertebral y del radio se deben a que en estas regiones hay más porcentaje de hueso trabecular que presenta una mayor respuesta al déficit de estrógenos. La osteoporosis primaria tipo II (senil) ocurre principalmente en hombres y mujeres mayores de 70 años. Se caracteriza por fracturas de cadera y del borde vertebral ya que en este grupo de pacientes se observa una mayor pérdida de hueso cortical. La osteoporosis secundaria puede afectar a cualquier grupo etario. Sus causas son: exceso de corticoides, hipertiroidismo, mieloma múltiple, desnutrición, déficit de estrógenos, hiperparatiroidismo, factores genéticos y varias drogas. La prevención de la osteoporosis puede lograrse con cambios en el estilo de vida como el consumo de calcio y la realización de ejercicios. A pesar de que la prevención es preferible al tratamiento, seguimos y seguiremos viendo pacientes que se presentarán con osteoporosis. El foco de este informe es cómo identificar a los pacientes que necesitan tratamiento. Este reporte aborda el tema de la DMO en mujeres. Debido a la ausencia de información, no sería posible evaluar la seguridad y eficacia del método en hombres. En la detección de osteoporosis, la meta es predecir la probabilidad de una fractura en el futuro. Existe un debate acerca de la utilidad de determinar la densidad ósea en sitios periféricos (calcáneo o radio). La osteoporosis es una enfermedad sistémica, por lo tanto se espera que la medición periférica pueda establecer el riego de fractura vertebral o de cadera. Los sitios periféricos son más fáciles de realizar, menos sometidos a artefactos técnicos por superposición de imágenes y exponen a una menor radiación. Los sistemas suelen ser más baratos y portátiles. Sin embargo, el rol de la DMO periférica y su relación con las mediciones vertebrales y en fémur es tema de controversia. La fractura de cadera es la complicación más seria de la osteoporosis: - Genera incapacidad permanente en más del 30% de los pacientes - Entre el 12 al 21% de los pacientes con fractura de cadera mueren en el año siguiente al evento - Más del 50% son incapaces de retornar a su vida normal e independiente.Usos potenciales: 8 Generalmente se acepta que un test de rastreo que pudiera predecir con precisión el riesgo futuro de una fractura de cadera sería de gran utilidad. Sin embargo, debido a que la densidad mineral ósea es una variable continua, no existe un verdadero “umbral de fractura” . Por lo tanto, la adopción de un umbral a partir del cual se trata es un tanto arbitrario resultando, en ocasiones, en una clasificación errónea del riesgo del paciente. Se ha sugerido que hasta no disponer de resultados de un protocolo de rastreo masivo con DMO, la realización del mismo no está justificado. La DMO debería realizarse en aquellas personas con mayor riesgo de osteoporosis y que estarían dispuestas a realizar tratamiento. La determinación de los factores de riesgo debe realizarse sobre la base de la historia clínica. Los factores de riesgo mayores para osteoporosis en mujeres son: (de Riggs & Melton, 1986) Veinte años de posmenopausia Raza blanca o asiática Menopausia prematura Historia familiar de osteoporosis Baja contextura física Dieta pobre en calcio Inactividad Nuliparidad Resección intestinal o gástrica Terapia con corticoides prolongada Terapia prolongada con antiepilépticos Hiperparatiroidismo Hipertiroidismo Tabaquismo Alto consumo de alcohol Además de existir factores de riesgo para osteoporosis, existen factores de riesgo para sufrir fracturas que es el evento que se quiere prevenir. Cualquier intervención en osteoporosis debe contemplar el riesgo absoluto de una paciente para sufrir una fractura por fragilidad. Los dos factores más importantes para el riesgo de fracturas son la baja densidad ósea y el antecedente personal de fractura por fragilidad. Ninguna intervención en el manejo de la osteoporosis puede considerarse suficiente si no se atiende el riesgo de caídas. La prevención de caídas en pacientes con ostoporosis reduce las fracturas y mejora la calidad de vida. Un 30% de los adultos mayores se cae por año y entre un 5 a 10% de estas caídas resulta en una fractura. Los factores de riesgo incluyen: edad avanzada, enfermedades neurológicas (accidente cerebrovascular, Pakinson), deterioro cognitivo, trastornos en el equilibrio, agudeza visual disminuida, problemas de los pies y calzado inapropiado y el empleo de sedantes y antidepresivos. Existen factores ambientales que predisponen a las caídas como los desniveles en las casas, alfombras, iluminación pobre. Estos factores deben ser evaluados y corregidos. 2.OBJETIVOS La presente evaluación de densitometría ósea (DMO) tiene como objetivos: - Evaluar su empleo en el diagnóstico de osteoporosis en pacientes asintomáticos - Evaluar su empleo en el seguimiento de tratamiento de pacientes con osteoporosis 9 3. METODOLOGÍA EMPLEADA PARA REALIZAR LA EVALUACIÓN Se realizó una búsqueda de las Guías publicadas para diagnóstico de osteoporosis a través de sitios de Internet de diferentes organizaciones empleando buscadores genèricos y como palabras clave “Clinical” OR “Practice Guidelines” AND “Osteoporosis” OR “bone density” . Se realizó una búsqueda a través de TRIP database con los términos “osteoporosis”, “densitometry” y “bone density”. Se realizó búsqueda en MEDLINE, DARE, HTA empleando los mismos términos. En MEDLINE se emplearon los filtros metodológicos para estudios sobre pronóstico , tratamiento y diagnóstico. Además, sin emplear filtros, se limitó la búsqueda a evaluaciones económicas. En MEDLINE se colocó límite de fechas (artículos publicados en los últimos 5 años) . Para los estudios de cohortes y ensayos clínicos controlados y aleatorizados (ECCA) se consideraron los criterios de validez de la Fuerza de Tareas Americana de Prácticas Preventivas (USPTF). 4. DESCRIPCIÓN DE LA TECNOLOGÍA A EVALUAR La presente evaluación se refiere a la absorciometría de rayos X de doble energía. Esta técnica, a diferencia de otras, sirve tanto para el diagóstico como para el seguimiento de la osteoporosis. Puede emplearse para medición en columna, fémur, esqueleto cmpleto, antebrazo, falanges. La densidad mineral se informa como gramos/cm2. Los reportes también indican el T score que representa los desvíos estándar con relación al valor medio de densidad ósea de la mujer joven normal El equipo cuesta aproximadamente entre $30.000 y $50.000 y cada estudio alrededor de $30 (un sitio) y $60 (dos sitios). El error en la precisión es entre un 0.5 y 3% y en la exactitud entre un 3 a un 10%. Es el método que permite mayor reproducibilidad. El empleo de la DMO sola para valora riesgo de fracturas tiene alta especificidad y baja sensibilidad (aproximadamente 50%). Es decir que la mitad de fracturas osteoporóticas ocurrirán en personas con DMO normales. Existen diferentes métodos para medir la densidad mineral ósea. La absorciometría de rayos X de doble energía es el método más comúnmente empleado ya que permite la medición en varios sitios, una baja exposición a radiación y su precis ión es mayor. Es la única técnica apropiada para la repetición de la medición si se está monitoreando un tratamiento. Las mediciones en el sitio específico es mejor predictor de fracturas que la evaluación en otros sitios. Las mediciones en diferentes sitios o en el mismo sitio con diferente tecnología no correlacionan bien. De manera que los pacientes pueden clasificarse de manera diferente si se emplea como norma universal el T score <2.5. Con el propósito de evitar estas variaciones en la clasificación de los pacientes, se ha sugerido adoptar una regla de oro (gold standard) para el diagnóstico. El candidato más apropiado parece ser la densidad ósea en la cadera medida por absorciometría de rayos X de doble energía ya que esta medición predice fracturas de cuello de fémur y trocantéreas que son las responsables de la mayor morbilidad, mortalidad y costos de todas las fracturas osteoporóticas. La valoración del riesgo en un individuo debería expresarse, idealmente, como riesgo absoluto más que como riesgo relativo y ser relacionado a un intervalo de tiempo, por ejemplo 10 años. Esta aproximación es probable que deba emplearse en el futuro para determinar intervenciones en osteoporosis (tratamiento, por ejemplo) 5. RESULTADOS DE ESTUDIOS PRIMARIOS Y REVISIONES SISTEMÁTICAS 10 Eficacia/efectividad: Entre los beneficios atribuibles a la DMO deberían considerarse su capacidad de predecir fracturas y si su implementación reduce la incidencia de las mismas. No nos detendremos específicamente en la capacidad de la DMO para “detectar” baja densidad mineral ósea, sino en su capacidad de reducir los eventos clínicamente importantes y relevantes desde un punto de vista sanitario. El beneficio potencial de la DMO es el de proveer información para identificar individuos en riesgo de fracturas, especialmente fractura de cadera. Está bien establecido que existen otros factores además de la densidad mineral ósea que determinan el riesgo de una fractura de cadera en el futuro: la agudeza visual, la predisposición a caídas, la capacidad de protegerse a sí mismo ante una caída, la estructura geométrica de los huesos y la calidad ósea (Cummings & Black, 1986; Cummings y col., 1990; Melton y col., 1990; Kaltenborn, 1992). El ensayo que respondería la pregunta acerca de si el rastreo masivo con DMO reduce el riesgo de fracturas es poco probable que se realice debido al enorme período de latencia entre el comienzo de la pérdida de masa ósea y la ocurrencia de la fractura (entre 20 y 30 años) (Melton y col., 1990) Una revisión de es tudios retrospectivos en los cuales se comparó la densidad mineral ósea al momento de la fractura y se la comparó con controles apareados por edad, encontró una considerable superposición de valores densitométricos entre quienes se habían fracturado y quienes no (Law, Wald, & Meade, 1991). Sobre estas bases, los autores concluyeron que el rastreo carecía de base científica. Sin embargo, hayquienes consideran que es inapropiado usar la DMO como un test diagnóstico para fracturas (Davis, Vogel, Rosss, & Wasnich, 1989). La densidad mineral ósea es un factor de riesgo con una distribución continua por lo que deberían emplearse técnicas de análisis que permitan determinar la distribución de riesgos en la población, calcular el riesgo relativo y determinar la tasa de fracturas atribuible a bajos valores de densidad mineral. De manera que la información más útil proviene de estudios prospectivos en los cuales se midió la densidad mineral y los sujetos fueron seguidos y sus fracturas registradas (Johnston & Melton, 1995). Se han publicado varios estudios prospectivos que muestran consistemente que la densitometría puede predecir el riesgo de fracturas. Resumiremos varios de los estudios más importantes: - Hui, Slemenda & Johnston (1989) siguieron a 521 mujeres blancas durante 15 años. Se incluyeron 356 mujeres que vivían en sus casas y 135 institucionalizadas. Las edades iban desde los 40 hasta los 80 años. Todas las mujeres estaban libres de enfermedad y no recibían medicación que afectara el metabolismo óseo. En la visita inicial se les medía la densidad ósea en el radio. El seguimiento promedio fue de 6.7 años para las mujeres que vivían en sus casas y 5.5 años para las institucionalizadas. Durante el seguimiento, 89 sujetos tuvieron un total de 138 fracturas. Por cada 0.1 g/cm de disminución en la densidad mineral (aproximadamente 1 DE), el riesgo de fractura en cualquier sitio fue de 2.2 en las mujeres que vivían en sus casas y 1.5 para las institucionalizadas. - Un grupo de 9703 mujeres no negras de 65 años o más fueron estudiadas por Cummings y col. (1990). Se midió la densidad ósea en el radio y el calcáneo. Las pacientes fueron seguidas por 1.6 años promedio. Durante ese tiempo, 53 personas experimentaron una primera factura de fémur (48 por caídas y 5 espontáneas). El riesgo relativo ajustado por edad de fractura de cadera por cada DE de disminución en la densidad ósea fue 1.66 para el calcáneo, 1.55 para el radio proximal y 1.41 para el radio distal. La edad seguía siendo un importante predictor de fractura aun ajustando por densidad mineral. El riesgo se duplica cada 10 años de aumento en la edad. Se concluyó que la densidad ósea es sólo un factor en el aumento de riesgo por edad para sufrir una fractura. - La densidad ósea fue medida en 8134 de estas pacientes a los dos años de la primera medición (Cummings y col., 1993). El seguimiento promedio luego de la segunda medición fue de 1.8 años. En ese período hubo 65 fracturas de cadera. La densidad ósea de la cadera estuvo fuertemente relacionada con el riesgo de fractura. Luego de ajustar por edad, por cada DE de disminución en la densidad ósea, se asoció con un riesgo entre 2.5 y 2.8 veces superior 11 de fracturarse. Los autores concluyeron que la medición de la densidad ósea en la cadera predice mejor el riesgo que la medición en otros lugares del esqueleto. - Gardsell, Johnell y Nilsson (1991) evaluaron si para predecir el riesgo de fractura era mejor la densidad mineral inicial o la pérdida subsecuente de masa ósea. Se determinó la densidad mineral del radio en 1076 mujeres. Luego de un seguimiento promedio de 14.6 años, 366 de estas pacientes aceptaron volver a medirse la densidad mineral empleando la misma técnica y los mismos sitios. La densidad inicial fue menor en las mujeres que se fracturaron. La pérdida de masa ósea se correlacionó de manera positiva con la densidad mineral. Es decir que a mayor densidad mineral, mayor pérdida. Sin embargo la pérdida de masa ósea no mostró asociación con las fracturas. De manera que la medición inicial fue el mejor predictor. En estos sujetos, el pico de masa ósea se midió antes de los 40 años. - Datos de seguimiento de este grupo de pacientes fueron presentados por Duppe, Gardsell, Nilsson, y Johnell (1997). Se registraron todas las fracturas (vertebrales, húmero proximal, radio y fémur proximal verificadas por radiografía) en las 410 mujeres que vivían en 1994. Hubo un total de 213 fracturas (63 vetebrales, 30 de húmero, 43 de fémur y 77 de radio distal). Se dividió a las mujeres en 3 grupos “superpuestos” de acuerdo con la edad al momento de la medición de la densidad ósea: mayores o iguales de 40 años, pero menores de 70 ; mayores o iguales a 30 años, pero menores de 50 y mayores o iguales a 50 años. El riesgo relativo (RR) (ajustado por edad) para fracturas por cada DE de reducción en la densidad ósea fue determinado a los 5, 10, 15, 20 y 25 años de la medición. En el primer grupo el RR de fractura de cadera fue 1.66 (95% IC 1.13-2.46) a los 25 años. Para el grupo de mayores o iguales de 50 años, el RR fue 1.52 (95% IC 1.02-2.28). Para fracturas vertebrales los RR fueron 1.79 (IC 95% 1.22-2.62) y 1.59 (IC 95% 1.10-2.30) respectivamente. Los resultados muestran que una medición única tiene la habilidad de predecir fracturas por fragilidad por 25 años. - Wasnich (1993) presentó el resumen de varios estudios prospectivos del Centro de Osteoporosis de Hawai. Los sujetos eran mujeres posmenopáusicas . En un estudio la tasa de fracturas vertebrales aumentó entre 2 y 2.4 veces por cada DE de disminución en la densidad ósea. En otro estudio, 423 mujeres posmenopáusicas con fracturas vertebrales fueron evaluadas durante un período de 2.9 años en promedio. Se midió la densidad ósea en cadera y columna. El aumento en la tasa de nuevas fracturas vertebrales por cada DE de disminución de densidad ósea fue idéntica a la del primer estudio. En ambos estudios, la medición en sitios periféricos predijo fracturas tan bien como la medición de la columna. - Para determinar la habilidad de la medición de la densidad ósea en diferentes sitios para predecir fracturas, se evaluaron 304 sujetos (entre 30 y 94 años) y se siguieron hasta por 10 años (mediana 8.3) (Melton y col., 1993). Se eligieron diferentes sitios para representar hueso esponjoso y trabecular. Se registraron las fracturas durante el seguimiento. 93 sujetos experimentaron 163 fracturas nuevas, la mitad en el fémur proximal, columna o antebrazo distal. En estas fracturas hubo 34 por trauma severo y 4 por condiciones patológicas. Por cada DE de disminución en la densidad ósea de la columna hubo un RR de 1.9 de fractura vertebral. Para la medición en otros lugares, los RR fueron desde 1.3(medición en el radio distal) a 2.6 (medición en el medio del radio). El riesgo ajustado por edad para fractura de cadera fue de 1.3 (medición en el medio del radio) a 2.6 (radio distal). El riesgo de fractura de cadera por cada DE de disminución en la densidad ósea medida en el cuello femoral y en el trocánter aumentó 2.4 y 2.3 veces respectivamente. Los autores concluyen que la medición de la densidad ósea en diferentes sitios provee información capaz de predecir fracturas por los menos durante 8 a 10 años. La medición de la densidad mineral ósea en cualquier lugar de los que se usan clásicamente puede emplearse en grupos de pacientes para estimar el riesgo global de fracturas. - Hans y colaboradores (1996) realizaron mediciones basales en el calcáneo y cuello femoral a 5662 mujeres de 75 años o mayores. Las mujeres fueron contactadas cada 4 meses para recabar información acerca de la ocurrencia de fracturas. Las fracturas reportadas se corroboraron por la historia clínica. La adherencia con el seguimiento fue del 97.7%; 2.2% se 12 negó al seguimiento y un 0.1% se perdió. En un seguimiento promedio de 2 años, hubo 248 muertes (no relacionadas con fractura de cadera) y 115 fracturas de cadera nuevas como resultado de traumatismo menor. Valores bajos de densidad ósea se asociaron con un aumento del riesgo de fractura de cadera ajustado por edad. Por cada DE de disminución en la densidad ósea, el riesgo se duplicó. - Un subgrupo de 560 mujeres posmenopáusicas del Hawai Osteoporosis Study fueron sujeto de estudio por Huang y col (1998).Las mujeres recibieron determinaciones basales de densidad ósea y radiografías de columna al inicio del estudio y en el seguimiento (promedio 2.7 años). Se evaluó la aparición de fracturas no vertebrales entre los dos momentos de la evaluación. La edad promedio al inicio del estudio fue de 74 años (rango 55 a 92). La densidad ósea se asoció positivamente con el riesgo de fracturas. Por cada DE de disminución en la densidad ósea, el odds ratio (OR) y su IC 95% (ajustado por edad) para fracturas vertebrales, fracturas no vertebrales o cualquier fractura fue 1.5 (IC 95% 1.05-2.16), 1.89 (1.27-2.88) y 1.72 (1.30-2.31) respectivamente. - Thomson, Taylor, Oliver y Fisher (1998) reportaron la relación entre la medición de densidad ósea basal en el calcáneo y una fractura subsecuente durante un seguimiento de 31 meses. Se evaluaron 3143 mujeres. Hubo 150 fracturas. Hubo diferencias significativas en la medición basal de quienes se fracturaron comparadas con las que nos e fracturaron. Por cada DE de disminución en la densidad ósea el OR fue de 1.4 (1.1-1.6) para cualquier fractura. - La densidad ósea es sólo uno de los determinantes del riesgo de fracturas. Sin embargo, usada individualmente es el mayor predictor para identificar población en riesgo y ha sido empleada como criterio de inclusión en los ensayos clínicos de drogas para el tratamiento de la osteoporosis. La presencia de una fractura por fragilidad ósea es suficiente para realizar el diagnóstico de osteoporosis independientemente del resultado de la DMO. - Evidencia de la eficacia del monitoreo: en general se realiza monitoreo del tratamiento de la osteoporosis con el fin de aumentar la adherencia y objetivar la respuesta al tratamiento. Muchas personas no siguen los tratamientos prescriptos aun en los ensayos clínicos. El monitoreo no ha demostrado aumentar la adherencia. En el trabajo Fractura Intervention Trial (FIT) se evidenció otro fenómeno que es el de resgresión a la media. En el FIT, a mayor pérdida de masa ósea en el primer año, mayor la recuperación en el segundo tanto en el grupo intervención como en el placebo. De manera que los médicos no deben interrumpir un tratamiento probadamente eficaz sólo por pérdidas modestas en la densidad ósea. - A pesar de la eficacia para predecir riesgo de fracturas, debemos tener en cuenta que se deberían realizar DMO a 750 mujeres blancas entre 50-59 años para prevenir una fractura vertebral o de cadera durante 5 años. Tampoco queda claro el valor de realizar intervenciones en la perimenopausia para eventos que ocurrirán mucho más tarde. - El diagnóstico de osteoporosis puede hacerse sin necesidad de DMO en presencia de fracturas por fragilidad. Sin embargo, se recomienda una medición basal y establecer la respuesta al tratamiento. Debemos recordar que existen otros factores para predecir riesgo de fracturas además de la densidad ósea. La reducción del riego del 50% que se observa en los ensayos clínicos no se justifica por la modesta ganancia observada en la DMO en los estudios de investigación. Estudios de rastreo (screening) Cuando se propone una tecnología para realizar rastreo, se deben cumplir los siguientes requisitos: 1. El diagnóstico temprano debe llevar a mejores resultados clínicos. 2. Existen los recursos disponibles para el manejo de los “positivos”. 3. Los pacientes a quienes se les ofrece el rastreo deben acordar que seguirán el tratamiento subsecuente. 4. La enfermedad debe tener alto impacto en términos de morbilidad y/o mortalidad. 13 5. La efectividad del test de rastreo ha sido demostrada. 6. Los costos, la precisión y la aceptabilidad del test de rastreo son adecuados para la población a quien se aplicará. Estos crierios han sido aplicados al discutir el rastreo de la osteoporosis (Cummings & Black, 1986; Alexeeva y col, 1994). Alexeeva y col. Agruparon los criterios en cuatro encabezamientos: La enfermedad, el test, la intervención y el programa La enfermedad: La enfermedad que se propone rastrear debe ser un problema de jerarquía en la Salud Pública y su historia natural debe estar claramente estudiada. Los datos sobre el número de fracturas, mortalidad, cambio en la calidad de vida luego de una fractura, sostienen que la osteoporosis es un problema de Salud Pública relevante. La historia natural se conoce y comprende. La relación entre densidad ósea y fracturas ha sido largamente demostrada. La prueba Debe ser simple, segura, aceptable para la población, efectiva, sensible y específica. Las técnicas utilizadas para medición de densidad ósea son relativamente simples y seguras con mínima exposición a la radiación. La aceptación de los pacientes es buena si bien no ha sido evaluada en el contexto de un programa masivo de rastreo. La densidad mineral es un excelente predictor de riesgo de fractura en el futuro. Intervención: Luego del rastreo, debemos contar con intervenciones aceptables y efectivas para prevenir los eventos de interés. En el caso de la osteoporosis existen varias intervenciones que han demostrado aumentar la masa ósea, disminuir el riesgo de fracturas vertebrales y de cadera. En las tablas que mostramos a continuación, se resume la intervención, el resultado y el grado de evidencia que la sustenta . Llamaremos evidencia A a la que proviene de metaanálisis de ECCA o al menos un ECCA Llamaremos evidencia grado B a la que proviene de al menos un buen estudio cuasi experimental o de estudios descriptivos de cohortes, casos y controles o estudios de correlación. Llamaremos evidencia grado C a la que proviene de recomendaciones de comités de expertos u opiniones de autoridades. Intervenciones que previenen o reducen la pérdida de masa ósea en mujeres posmenopáusicas Intervención Grado de evidencia Alendronato A Calcitonina A Calcitriol A Calcio A Cesación de tabaquismo B Etidronato cíclico A Terapia con hormonas A Ejercicio A Raloxifeno A Reducción consumo alcohol C Risedronato A 14 Tibolona A Vitamina D+calcio A Eficacia para prevención de fracturas en mujeres posmenopáusicas con osteoporosis: Intervención Fracturas vertebrales No vertebrales Cadera Alendronato A A A Calcitonina A B B Calcitriol A A No demostrado Calcio A B B Calcio+vitamina D No demostrado A A Etidronato cíclico A B B Protectores de cadera - - A Terapia con hormonas A A B Ejercicio No demostrado B B Raloxifeno A No demostrado No demostrado Risedronato A A A Tibolona No demostrado No demostrado No demostrado Vitamina D No demostrado B B Con relación a los tratamientos quedan varias preguntas sin responder especialmente aquellas que se refieren a la duración óptima del tratamiento y el empleo de terapias combinadas. El Programa: Un programa de rastreo requiere equipamiento y personal entrenado en el diagnóstico y tratamiento y debe ser costo efectivo. Repa-Eschen(1993) encontraron que la identificación precoz de la osteoporosis en un estadio temprano resultaría en una reducción de costos asociados con el tratamiento y la morbilidad. Riesgos y limitaciones: La DMO es un procedimiento no invasivo y se lo considera seguro y aceptable. La dosis de radiación es mínima con valores por debajo de los empleados en otros estudios por imágenes. 7. RESULTADOS DE EVALUACIONES, RECOMENDACIONES, GUÍAS DE USO Y POLITICAS DE COBERTURA La Asociación Americana de Endocrinólogos Clínicos ha recomendado la realización de DMO en las siguientes condiciones: - Evaluación del riesgo en mujeres peri y posmenopáusicas que están preocupadas por la osteoporosis y que están dispuestas a aceptar tratamiento. - Un hallazgo radiológico sugestivo de osteoporosis - En mujeres que comenzarán o están recibiendo tratamiento con corticoides - En mujeres peri y posmenopáusicas con hiperparatiroidism a sintomático en las cuales el hallazgo de osteoporosis resultaría en una paratiroidectomía. - En mujeres con tratamiento paraosteoporosis para monitorear el tratamiento. 15 Las mujeres que reciben terapia de reemplazo hormonal (TRH) por otros motivos, reciben la dosis necesaria para el tratamiento de la osteoporosis por lo que generalmente no requieren realizar DMO. La National Osteoporosis Foundation desarrolló nomogramas para asistir a los médicos en tomar la decisión de cuándo solicitar una DMO y cuando el tratamiento es apropiado. Estos nomogramas toman en cuenta: la edad, factores de riesgo, fracturas previas y tratamientos previos. Han recomendado la realización de DMO en: - Toda mujer posmenopáusica menor de 65 años que tienen otro factor de riesgo para osteoporosis (además de la menopausia) - Toda mujer mayor de 65 años independientemente de otros factores de riesgo. - Mujeres posmenopáusicas que se presentan con fracturas (para confirmar el diagnóstico y establecer la severidad) - Mujeres con TRH por largos períodos. Aclaran que la decisión de realizar una DMO debe basarse en la paciente individual y nunca debería realizarse si los resultados no modificarán el curso de acción. Recomedaciones del Canadian consensus on menopause and osteoporosis Se debe realizar DMO sólo en los casos en los cuales la información alterará el manejo posterior. El test debe realizarse en las mujeres mayores de 65 años o en las mayores de 55 años con uno o más factores de riesgo para fracturas osteoporóticas además de la menopausia. Estos factores de riesgo son: Historia personal de fractura no traumática después de los 40 años, antecedentes de osteoporosis en un familiar de primer grado, contextura pequeña con un BMI de 20 o menor o peso <57.8 kg, menopausia antes de los 45 años o hipogonadismo crónico antes de la menopausia, tratamiento con corticoides (>7.5 mg de prednisona por día por más de 3 meses o síndrome de Cushing), hiperaratiroidismo primario, uso de anticonvulsivantes sin profilaxis con vitamina D, malabsorción crónica (más de 5 años), quimioterapia(si s espera larga sobrevida), pédida de estatura documentada, desarrollo de cifosis luego de la menopausia. De existir dos de los siguientes factores de riesgo, también se recomienda su realización: tabaquismo actual, historia de hipertiroidismo, ingesta baja de calcio y alcoholismo. En un 30% de los casos existe falta de correlación entre las mediciones en los diferentes sitios. Cuando esto ocurre, debe tomarse como referencia el valor más bajo. Habitualmente la medición en la columna lumbar tiene mayor precisión y los cambios posmenopáusicos tempranos se detectan mejor en este sitio. En mujeres mayores, la densidad ósea de la columna puede estar falsamente aumentada por la presencia de fenómenos degenerativos. Por lo tanto, la medición en la cadera es el sitio preferido en las mayores de 65 años. Las mediciones seriadas con DMO requieren un intervalo de al menos 2 años para detectar cambios. Un intervalo mayor (5 años) es necesario para detectar cambios en mujeres con DMO normales. Si bien el tratamiento de la osteoporosis debe estar dirigido a evita la primera fractura, el tratamiento de grandes números de mujeres menopáusicas jóvenes no es costo-efectivo debido a la baja incidencia de fracturas en esta población. Todas las mujeres se beneficiarían de un consumo adecuado de calcio y vitamina D y cambios en el estilo de vida. El Medicare cubre la realización de DMO en las siguientes circunstancias: ? Mujeres con déficit estrogénico y mayor riesgo de osteoporosis (basado en la historia clínica) ? Anomalías vertebrales en una radiografía simple sugestivas de osteoporosis. 16 ? Individuos bajo tratamiento con corticoides (equivalente a 7.5 mg o más de prednisona por día por más de tres meses o si se espera una duración de tratamiento de tres meses o más) ? Personas con hipeparatiroidismo primario ? Individuos bajo tratamiento para monitorear respuesta y eficacia de una droga aprobada. La cobertura para DMO de seguimiento se ha fijado en una cada dos años. Para el Royal College of Physicians, debe solicitarse DMO en los siguientes casos (siempre que el resultado altere el manejo posterior): ? Evidencia radiológica de osteopenia o deformidades vertebrales ? Pérdida de altura, cifosis ? Fractura por fragilidad previa ? Terapia con corticoides prolongada ? Menopausia antes de los 45 años ? Amenorrea secundaria prolongada ? Hipogonadismo primario ? Enfermedades crónicas asociadas con osteoporosis ? Historia materna de fractura de cadera ? BMI<19 kg/m2 Para la Asociación Americana de Endocrinología, debe solicitarse DMO en las siguientes circunstancias: ? Mujeres de 65 años o más ? Mujeres adultas con historia de fracturas por fragilidad ? Mujeres post menopáusicas más jóvenes con factores de riesgo para fracturas (bajo peso menor de 57.6 kg) o historia familiar de fractura de cadera o columna 7. IMPLICANCIAS Y CONCLUSIONES La osteoporosis en un problema de salud importante. Las fracturas osteoporóticas resultan en una reducción de la calidad de vida y en enormes costos por su tratamiento. El valor de intervenciones preventivas como consumo adecuado de vitamina D y calcio y la actividad física ha sido demostrado. Existe una amplia gama de intervenciones que pueden ser implementadas sin tener que medir la densidad ósea. Estas opciones deben ser explicadas a las pacientes. Debemos remarcar el valor de las medidas preventivas ya que el 50% de las fracturas ocurrirán en personas con DMO normal. - Hasta el momento no existe evidencia suficiente para recomendar el rastreo masivo de la densidad mineral ósea. - La necesidad de determinar la densidad mineral debe basarse en el paciente individual. La política para solicitar densitometría (DMO) se inscribe en la búsqueda de casos y no en el rastreo masivo. Existen varias reglas de predicción clínica de baja densidad ósea las cuales deberían emplearse para tomar la decisión de solicitar o no DMO. Dos de estas reglas son las que han mostrado mayor precisión en un estudio de validación de las mismas. 17 Regla Punto de corte Score SCORE (Simple Calculated Osteoporosis Risk Estimation) Mayor o igual a 6 puntos Raza: 5 puntos si la raza no es negra Artritis reumatoidea: 4 puntos si está presente Historia de fractura con un trauma menor luego de los 45 años: 4 puntos por cada fractura de muñeca o costilla hasta un máximo de 12 puntos Edad: 3 veces el primer dígito en años Terapia con estrógenos: 1 punto si nunca usó Peso: - 1 vez el peso en lb/10 ORAI: Osteoporosis Risk Assesment instrument Mayor o igual a 9 puntos 15 puntos para mayores de 75 años 9 puntos entre 65 y 74 5 puntos entre 55 y 64 años 9 si el peso es menor 60 kg, 3 puntos entre 60 y 69.9 kg 2 puntos si no usa actualmente estrógenos La regla de predicción ORAI parece más fácil de implementar en nuestro medio ya que el peso se mide en kg y no en libras. - Sólo estaría indicado solicitar DMO en las mujeres con puntaje ORAI mayor o igual a 9 puntos que estén dispuestas a realizar el tratamiento. - La DMO no debe solicitarse si no cambiará la conducta posterior (ejemplo mujeres no dispuestas a realizar tratamiento) El SCORE y el ORAI seleccionan al 96% de las mujeres con osteoporosis. Sin embargo, la especificidad del ORAI es significativamente mejor. Un estudio sueco ha demostrado que puede reducirse en un 20% la utilización de la DMO si se emplea una regla de predicción antes de realizar el procedimiento a las mujeres derivadas para la realización de la prueba. El valor de repetir la DMO para monitoreo de tratamiento o para tomar decisiones en mujeres mayores no está suficientemente aclarado. Dado el error en la precisión de la tecnología actual, la medición anual no está indicada. Se necesitan al menos 2 años para valorar cambios n la masa ósea. - En mujeres bajo tratamiento de osteoporosis no debe solicitarse una DMO de seguimiento antes de los dos anos. Estelapso evitaría estudios en los cuales aparecería una “no respuesta” al tratamiento que no es real. - No es necesario solicitar dos sitios diferentes para el diagnóstico de osteoporosis - En las mujeres jóvenes se puede solicitar DMO columna lumbar y en las mayores de 65 puede solicitarse solamente DMO de cadera. - En las pacientes con DMO normales (T score mayor a –1) el seguimiento no debe realizarse en un intervalo menor de 3 a 5 años. - Las mujeres con DMO por encima de lo normal no requieren seguimiento. 18 - Las mujeres en programa de prevención deben ser seguidas cada 2 años hasta la estabilización de la medición. Luego debe realizarse cada 3 años. 8. CITAS BIBLIOGRÁFICAS Cummings SR, Black DM, Thompson DE, Applegate WB, et al (1998). Effect of alendronate on risk of fracture in women with low bone density but without vertebral fractures - Results from the Fracture Intervention Trial. JAMA 280: 2077-82. Cummings SR, Eckert S, Krueger KA, Grady D, et al (1999). 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