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introducción y conclusión proyecto 11

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INTRODUCCIÓN
El teatro es para las sociedades un medio de expresión artística de distracción, de reflexión de gozo. Esta expresión ha ido cambiando a través del tiempo, respecto a usos, modas y necesidades de cada época.
Se ha representado en todo tipo de lugares como plazas, castillos, escenarios modernos y exóticos, al igual, se han creado y se han representado tragedias dolorosas, divertidos absurdos, profundos monólogos.
Esto ha sido de utilidad para provocar polémicas sobre temas filosóficos o políticos y para criticar diversas situaciones de la vida cotidiana. Además, el teatro es una de las expresiones artísticas más empáticas, ya que ayuda a conocer y “ponerse” en el lugar de otro; con ello logramos vernos a nosotros mismos, pero de una manera diferente, más ricas.
En este caso, la lectura dramatizada en atril es un tipo de lectura en voz alta que, en ocasiones, mezcla algunos elementos de una representación de teatro (dramatización). La lectura dramatizada consiste en la recreación de un texto dramático por medio de la voz de los actores, que mientras leen el libreto, dan vida a la narración y a los diálogos de los personajes, utilizando algunos recursos expresivos como: los ademanes, los gestos, los cambios y las modulaciones de la voz, entre otros. Este tipo de lectura se le conoce lectura expresiva.
La lectura en atril se lleva a cabo sólo con algunos elementos y sin toda la escenografía o vestuario que se utilizarían en una puesta en escena. Un ejemplo de esto podría ser que los actores pueden usar únicamente algunos elementos de vestuario como: sombreros, pañuelos, o un poco de maquillaje, otro ejemplo es que la escenografía puede consistir en una mesa y varias sillas en donde estén los lectores, sentados.
Los diálogos del pasaje de la obra elegida no son memorizados, sino que son leídas por los actores, por ello todas las imágenes, sentimientos y características de los personajes recaen en la voz y expresión sonora, y un texto gestual, de la persona que lee.
Para que lo anterior se pueda realizar, es importante que la voz que representa a cada personaje exprese, con tonos y matices diversos, toda la intención dramática que requiere el texto.
CONCLUSIÓN
Cuando se selecciona una obra de teatro, después se hace la lectura de la misma y por último se identifican las características de la obra escogida que podrían ser el contexto, los valores, los personajes, el ambiente y las palabras desconocidas, ya se están reconociendo algunos de los valores de la época en que fue escrita la obra leída.
También, al conocer algunos de los elementos que se necesitan para poder llevar a cabo la lectura dramatizada de una obra de teatro, se llega a comprender la importancia de la entonación y dramatización para darle sentido al lenguaje escrito en obras dramáticas.

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