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Primera Guerra Mundial, Lettieri
Durante el siglo XIX, puede hablarse de un periodo histórico donde la paz fue el objetivo más deseado por las
principales potencias europeas. No obstante se presentaron algunas batallas que fueron inevitables, pero éstas
estaban dadas en zonas consideradas fuera del epicentro.
Hacia inicios del siglo XX, los países más desarrollados de Europa ya se habían conformado como Estados.
El Estado constituía el armazón político fundamental tanto para el desarrollo del capitalismo como para mediatizar
las disputas entre los países.
Sin embargo, esta última función se resquebrajó a partir del año 1873, con el inicio del imperialismo, que terminaría
finalmente con la Primera Guerra Mundial.
Triple Alianza (1882): Alemania, Italia y Austria-Hungría, conformado para evitar futuros avances imperiales de
Francia o Inglaterra.
Triple Entente (1909): Inglaterra, Francia y Rusia.
Causas
La Primera Guerra Mundial fue originado por un conglomerado de variables que confluyeron negativamente hasta
colapsar.
-Económica e industrial: La competencia entre los viejos países industrializados y los nuevos propulsores del mundo
industrial no podía terminar de definirse en el comercio mundial, y por ello la competencia debió tomar el camino de
las armas.
Sin embargo, pese a que los primeros países industriales estaban siendo superados por nuevas naciones, las
competencias se encontraban reñidas.
-Imperialista: los resultados de la guerra franco-prusiana habían significado:
Por un lado, una grave pérdida de territorios y deuda externa.
Por el otro, la inconformidad con Alemania del reparto colonial obtenido de su triunfo.
-Nacionalismo: refiere al fortalecimiento de los valores éticos, morales, y finalmente nacionalistas, que constituían el
universo simbólico de los individuos.
El mayor ejemplo de este fenómeno lo fue Alemania, cuya estructura social se caracterizó por la preeminencia de
una gran aristocracia militar, combinada por el auge del arte y del romanticismo, lo que brindaba un fuerte nexo
entre los alemanes.
La zona de los Balcanes representó la zona más traumática del nacionalismo, dado que fue donde efectivamente
explotó la guerra.
Tres imperios se enfrentaron por la disputa de la dominación de los territorios Balcanes: el Imperio turco,
austro-húngaro y ruso.
Este enfrentamiento terminó por acabar con el asesinato del heredero del imperio austro-húngaro Francisco
Fernando, realizado por un agente bosnio. Esto se trató de la muestra de lo que estaban dispuestas las naciones
eslavas para resistirse a las anexiones de sus territorios al imperio austro húngaro.
A partir de esto, en cuestión de un mes, los acontecimientos se precipitaron de modo que no hubo posibilidad de
retorno, sino que la guerra, en 1913, ya estaba iniciada.
Esto llevó a que la Triple Entente tuviera que comprar la participación de Italia en su bloque, al cual después se
sumaría Bélgica, Rumania, Grecia y Portugal.
La Triple Alianza por su parte se ampliaría con la ayuda de Turquía y Bulgaria.
Justificación
Tanto militares como los gobiernos, justificaron su acción bélica argumentando haber actuado primero en miras de
un peligro inminente de que el país enemigo los atacara.
Así también, es de destacar que ambas partes consideraron que la guerra se desarrollaría en un tiempo breve.
Características de la guerra:
-se trató de una guerra de con reducidos logros, ya que de tanto en tanto las tropas de un bando lograban avanzar
unos metros, para luego tener que volver a retroceder.
-La estrategia utilizada fue de trincheras, lo que hacía que los soldados quedaran atrapados en sus lugares de
combate, llevando a que en un momento (1916) la guerra quedara empantanada, ya que ninguno de los dos bandos
podía seguir modificado las fronteras.
Sin embargo, el número de muertos fue muy alto.
Para poder salir de esta situación de estancamiento, se necesitaron de tres puntos de inflexión: (1917)
-desintegración del imperio austro-húngaro provocado por el ataque de las tropas de la triple Entente.
-revolución bolchevique.
-inserción de Estados Unidos en la guerra.
Existen varias posiciones que justifican su inserción:
-ocupar un lugar de líder y encausar una lucha civilizatoria que defienda una lucha democrática y moralista.
-asegurarse el cobro de las deudas de los países aliados, de quienes se había convertido en su principal acreedor.
-esperar a que ambos bandos se debilitaran para ingresar en un momento estratégico y salir así victorioso de la
guerra y lograr un lugar privilegiado en la configuración del orden mundial.
Finalización de la guerra (1918)
Con el ingreso de los Estados Unidos, los aliados de la Triple Entente comenzaron a avanzar rápidamente sobre los
territorios enemigos a partir del año 1918, hasta destruir a Alemania y llevarla a declararse vencida.
Las características económicas de la Guerra
El periodo previo al comienzo de la Guerra se caracterizó por la previsión económica de las potencias con el objetivo
de abastecerse de las divisas necesarias para afrontar el enfrentamiento mundial.
Sin embargo, una vez ésta iniciada, y a medida que se fueron agregando mayor cantidad de soldados, pudo
observarse que los cálculos previos sobre la cantidad de materiales requeridos fueron insuficiente para los
acontecimientos.
Con el agregado de los soldados a los ejércitos, se requirió de mayor cantidad de equipos, vestimentas, armamentos
y municiones. Es por ello que en forma creciente, cada vez más sectores de la industria de cada país debieron
desplazarse desde la producción de bienes de consumo hacia la producción bélica.
Los ingresos de los Estados fueron destinados en su totalidad a la construcción de equipamiento armamentístico, y
por lo tanto, la población europea se vio golpeada por una grave escasez de alimentos y de bienes finales de la
economía.
El bloque de los aliados, conformado por Inglaterra, Francia y Rusia, apelaron en una primera instancia a préstamos
otorgados por el primero de estos países, que recurrió a la emisión monetaria, al ser por entonces el principal
tenedor de oro del mundo.
Seguidamente recurrieron a otro mecanismo, la venta de activos fijos que Inglaterra tenía en el exterior. Casi la
totalidad de sus ventas fueron compradas por Estados Unidos.
Esta no se trató de la primera incursión económica de EEUU en la guerra, dado que, si bien no participó en la
producción de armamentos, financió dicha producción a los países de la Triple Entente.
Sin embargo, aún con la venta de gran parte de sus inversiones, Inglaterra no pudo disponer de capital suficiente
como para mantener su propio financiamiento y el de sus países aliados.
Es por ello que en última instancia Inglaterra debió recurrir a préstamos provenientes de Norteamérica, los cuales
fueron otorgados con la condición de ser devueltos una vez acabada la guerra.
Por otra parte, los países de la Triple Alianza, no se encontraban en las mismas condiciones que los anteriores, dado
que no contaban con posibilidades de financiamiento.
Por ende, los Estados recurrieron a la emisión monetaria, lo que, si bien a corto plazo hizo evolucionar su economía,
terminó conllevando a una alta inflación y déficit fiscal, principalmente en Alemania.
Consecuencias económicas de la Guerra
La guerra produjo que los gobiernos europeos se vean obligados a prestar una mayor intervención en las cuestiones
del mercado.
En primer lugar, intervino en el mercado de trabajo, bajo la amenaza de que por el reclutamiento masivo de
hombres y jóvenes esto significara un alza de salarios. Sin embargo, la intervención tuvo que ser mínima ya que la
mano de obra fue cubierta por el trabajo femenino.
Fijó cupos máximos de alimentos para las familias debido a la escasa disponibilidad de recursos.
Se desarrolló un constante patrullaje de los caminos para evitar los bloqueos de transporte terrestre.
Aplicación de severos controles y prohibiciones en el comercio exterior.
Por otra parte,debido a la reducción casi total de la exportación europea de bienes industriales, junto con la
desaparición del comercio marítimo mundial a causa de la guerra submarina característica de ese momento, muchos
países que no se encontraban participando de la guerra dejaron de recibir bienes industrializados, por lo que les
resultaba casi imposible seguir desarrollando sus economías.
Una vez finalizada la guerra, el mundo había cambiado notablemente. Inglaterra había dejado de ser la portadora de
oro número uno del mundo, y con ello la acreedora principal.
Ahora, Estados Unidos era la acreedora de Inglaterra, cuando las cosas anteriormente se habían dado exactamente
en sentido contrario.
Este desplazamiento del epicentro financiero del mundo produjo dos consecuencias fundamentales:
-la desvalorización de la libra y el ascenso del dólar estadounidense.
-el nacimiento de una nueva división internacional del trabajo: ésta se dejo de tratar de un esquema en el que se
exportaban capitales y bienes industriales y se importaban materias primas, para convertirse en una nueva situación
donde el flujo de los intercambios se desplazarían hacia el norte y entre economías industriales.
Tratados de Paz
Desde el primer momento, los países vencedores buscaron cargar las culpas sobre los vencidos, principalmente sobre
el único enemigo que quedaba más o menos íntegro, Alemania.
Estos plantearon una serie de propuestas que sostenían que la reconstrucción era posible en la medida en que
Alemania se hiciera cargo de los gastos de la guerra y sus costos y sufrimiento.
La Conferencia de Paz, realizada por los países vencedores, retomando la idea del presidente norteamericano
Wilson, expuso el modo en que debía configurarse el mapa europeo y de Oriente Medio.
Los principios de esta Conferencia fueron los siguientes:
-dotar de autonomía a los países que reclamaban su independencia (los Estados bálticos).
-resquebrajar a Alemania para evitar su supremacía futura.
-crear un Cordón Sanitario que protegiera a Occidente de los avances comunistas rusos.
La Conferencia de Paz sirvió como prólogo de los tratados de paz que se firmaron en forma individual con cada país
vencidos, los cuales llevaron el nombre de castillos o parques de los alrededores de París, lugar donde estos fueron
firmados. Entre ellos encontramos:
Tratado de Saint-Germain: firmado con Austria.
Separación de Austria y Hungría. El tratado tuvo como uno de sus principales objetivos fortalecer los territorios de
Polonia, para así bloquear la entrada de Rusia.
Tratado de Trianon: firmado con Hungría.
Gran pérdida de territorios de parte de Hungría, lo que provocó el surgimiento de un fuerte nacionalismo y con ello
una crisis revolucionara de clara ideología comunista.
Tratado de Sevres: firmado con Turquía.
Perdió todas las zonas asiáticas y árabes.
Si bien estaba resignada a su reducción territorial, no lo estaba a la eliminación de su identidad y autonomía
soberana. Como consecuencia de ello, se dio la aparición de movimientos de resistencia nacionalista.
Tratado de Versalles: firmado con Alemania.
Tenia un doble objetivo:
-detener cualquier posibilidad de expansión futura de Alemania
-construir un cordón sanitario para evitar el avance de la Revolución bolchevique.
Así también, buscó satisfacer los reclamos de Francia, quien exigía los viejos territorios perdidos durante la guerra
franco-prusiana. Estos fueron concedidos sin mayor discusión.
Otras medidas tomadas en este tratado fueron:
-se le impidió a Alemania tener una flota mercante propia, se eliminó su fuerza aérea y se redujeron sus ejércitos.
-se le impusieron graves resarcimientos de guerra, que debía pagar en cuarenta años.
Como consecuencia de los reembolsos que tuvo que realizar Alemania a los países vencedores, el país se inició en un
proceso hiperinflacionario.
Este ahogo económico constituyó una de las claves para que surja un movimiento antiliberal totalitario: el nazismo.
La Sociedad de las Naciones
Se trató de una entidad supranacional creada por la impronta del presidente norteamericano Wilson, quien en 1917
elaboró un proyecto que se plasmó al año siguiente con su propuesta de catorce puntos.
La idea original preveía una igualdad entre países centrales y periféricos, y la aceptación de los países de un
engranaje jurídico internacional para la solución de diferencias.
Sin embargo, esta entidad carecía de real autoridad, y nunca contó con las competencias para resolver los conflictos
importantes. Entre los motivos de esta carencia, se plantean:
-el no haberse dotado de una fuerza armada supranacional que obligue a los miembros a obedecer las decisiones
adoptadas en la misma.
-el hecho de que Estados Unidos, el país más importante en materia industrial y financiera, haya decidido quedar al
margen de esta entidad.
No obstante, se trató de los primeros pasos para la conformación de premisas de derecho internacional.
La descolonización
Una vez finalizada la guerra, se realizó un reparto de los territorios obtenidos entre los países vencedores.
La Sociedad de las Naciones refrendó este nuevo contrato imperialista, bajo el nombre de “mandato”, según el cual
los países fueron clasificados de acuerdo con el grado de autonomía que se les otorgó, o estableciendo “mandatos
transitorios”, donde la metrópoli se comprometía a generar las condiciones para su independencia a corto plazo.
LA ERA DEL IMPERIO, “DE LA PAZ A LA GUERRA”, HOBSBAWN
Permite comprender el modo en que la era de paz de civilización burguesa, de riqueza creciente y de formación de
imperios occidentales llevaba inherente la explosión posterior de una guerra, revolución, y crisis mundial.
Apoyo de la Guerra por parte del pueblo
Lo que los Gobiernos de cada Estado participante de la guerra no esperaron nunca, fue el entusiasmo y el patriotismo
con el que sus pueblos alzaron sus banderas y avanzaron hacia la guerra.
Fueron muy pocos los que manifestaron una oposición hacia ella, por lo menos públicamente.
En cierta forma, la llegada de la guerra fue considerada como una liberación y un alivio, especialmente por los
jóvenes de las clases medias, los trabajadores y los campesinos. Significó el final de la superficialidad de la sociedad
burguesa, del aburrido perfeccionismo del siglo XIX.