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Evidências de Meteorito em Gorgonilla

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N.º 197 / marzo 2016
ISSN 1657-0987 
www.unperiodico.unal.edu.co 
unperiodico_bog@unal.edu.co
Bogotá, Colombia
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Continúa en la página 12
Hallan en Gorgonilla evidencias de 
meteorito que extinguió a los dinosaurios
han transcurrido 66 millones 
de años, desde que aquel meteorito 
de diez kilómetros de diámetro se 
dirigió a la Tierra a una velocidad de 
30.000 km por hora. Al impactar con 
la superficie del planeta originó un 
cráter de 200 kilómetros de diáme-
tro, el Chicxulub, en la península de 
Yucatán, al sur de México. El choque 
causó megatsunamis, algunos con 
olas de hasta cien metros de altura 
y una severa catástrofe ambiental, 
que produjo la extinción masiva 
de especies y el fin de la era de los 
dinosaurios.
El meteorito, del tamaño del 
monte Everest, cavó ocho kilóme-
tros dentro de la corteza terrestre, 
la roca se evaporizó, se fundió, gran 
parte salió disparada de la atmósfe-
ra y luego cayó de nuevo a la Tierra 
en forma de esferas minúsculas.
En la isla, ubicada a 35 
kilómetros de la costa 
del Pacífico colombiano, 
geólogos de la un en-
contraron los primeros 
registros reportados en 
Suramérica del meteo-
rito de Chicxulub, que 
acabó con tres cuartas 
partes de las especies 
de la Tierra y marcó una 
nueva era geológica.
CIENCIA & TECNOLOGÍA
ciencia & tecnología
Producción de biodiésel 
en menor tiempo
Un equipo desarrollado por in-
vestigadores de la un reduce las 
etapas de elaboración del bio-
combustible, así se logra una 
gestión más eficiente para su 
obtención.
Página 14
medioambiente
El soporte científico de la 
reserva van der Hammen 
que ignora el alcalde
Los estudios sobre esta zona de 
Bogotá ratifican la importancia 
como área de conexión ecoló-
gica de gran valor ambiental y 
biológico.
Página 10
desarrollo rural
Ley de pesca quedó corta
Colombia debe aprovechar el 
proyecto de Ley 117 de 2015, que 
cursa en el Congreso, para com-
batir la ilegalidad e impulsar el 
crecimiento del sector pesquero. 
Página 8
en esta zona de la isla se encontraron restos del meteorito (esferulitas).
marzo 2016 | 2 Periódico – N.º 197 – Universidad Nacional de Colombia
palabras clave: economía, crisis económica, 
China. Consúltelas en www.unperiodico.unal.
edu.co
China crece a pesar 
de los augurios mustios
CArLOs GArCÍA TObóN, internacionalista especializado en China. Arquitecto y urbanista
Universidad Nacional de Colombia
Política 
& Sociedad
Ante los signos de agotamiento 
de su economía, el Gobierno chi-
no impulsa un cambio de modelo 
económico basado en el consumo 
interno y el sector servicios, espe-
cialmente en nuevas tecnologías. 
El reto, mantener un nivel de creci-
miento del 6,5 % durante los próxi-
mos cinco años. El XIII Plan Quinquenal 
(2016-2020), que se apro-
bará este mes, pretende 
hacer más eficientes 
las empresas públicas, 
estimular la innovación y 
crear start ups (empresas 
emergentes).
Según datos de la onu, 
el número de centros 
urbanos con poblaciones 
de más de un millón de 
personas en China pasó 
de 16, en 1970, a 106, en 
2015. En comparación, hay 
45 en Estados Unidos y 55 
en Europa aproximada-
mente.
Gran parte de los especialistas de los medios 
occidentales y asistentes al Foro de Davos 2016 
alertaron sobre el desplome inminente de la eco-
nomía china, a partir de la baja tasa de crecimiento 
desde 2010, que pasó del 10,6 % al 7,3 % en 2014 y 
6,9 % en 2015. 
Sin embargo, el crecimiento anual del 
6,9 %, cifra nada despreciable, es envidiado por cien-
tos de países. Pero para China, que vio aumentar su 
Producto Interno Bruto (pib) en dos dígitos y pasó 
de ser una economía poco desarrollada a conver-
tirse en la segunda potencia mundial, representa 
la mayor reducción en un cuarto de siglo. 
Precisamente, las exportaciones de 1979 a 
2013 tuvieron una tasa media anual de un 16,8 %. 
No obstante, por la lenta recuperación de la crisis 
financiera global de 2008 y el débil crecimien-
to de la demanda en Estados 
Unidos, Europa y otros países, 
el índice de las exportaciones 
llegó un 6,1 % en 2014 y cayó en 
un -1,8 % en 2015. Esto debido 
a que la economía no ha vuelto 
a la normalidad y la demanda 
externa sigue débil. 
Por eso, el caos en las bolsas 
de Shanghai y Shenzhen, en julio 
pasado, disparó los pronósticos 
apocalípticos. 
Los expertos señalan como 
responsables de la situación de 
su economía a un modelo de cre-
cimiento insostenible promovido por la inversión 
(especialmente en infraestructura, desarrollo del 
sector manufacturero e inmobiliario), la creciente 
deuda interna, una propiedad estatal ineficaz y el 
envejecimiento de la población. 
Sin embargo, es plausible plantear que esta 
desaceleración obedece más a factores externos y 
cíclicos, que se inscriben en un contexto mundial. 
Por ejemplo, basta con comparar el comporta-
miento de la economía china con la de Corea del 
Sur y Singapur, países de rendimiento y renta alta, 
los cuales crecieron en 2010 un 
6,1 % y 15,2 % respectivamente, 
y en 2014 descendieron brus-
camente hasta un 3,3 % y 2,9 %. 
Si las exportaciones y la inver-
sión son débiles, el consumo se 
convierte en el principal factor 
del crecimiento económico, el 
cual se mantiene estable en un 
8 %, debido a la permanencia del 
empleo. El crecimiento de esta 
y otras economías emergentes 
dependerá principalmente de su 
demanda nacional.
De ahí que frente a los evi-
dentes signos de agotamiento, 
el Gobierno impulse un cambio 
basado en el consumo interno y 
el sector servicios, especialmente 
en nuevas tecnologías. 
consumo e innovación
El XIII Plan Quinquenal (2016-2020), 
que se aprobará este mes, pretende 
hacer más eficientes las empresas 
públicas, estimular la innovación 
y crear start ups (China registró 3,9 
millones de nuevas empresas).
De igual manera, el Gobierno 
chino ha reducido los objetivos 
de crecimiento, denominados 
como la “nueva normalidad”. 
Así, mientras para 2015 la meta 
se encontraba en torno al 7 %, el 
Plan Quinquenal prevé no menos 
de un 6,5 %.
La “nueva normalidad” enseña 
que en términos reales un creci-
miento del 6.5 % supone mucho 
más que el 10 % de la década an-
terior, porque el tamaño de la 
economía es muy superior.
De hecho, la transformación 
que busca está surgiendo. El 
sector servicios por primera vez 
representa más del 50 % de la eco-
nomía, la renta disponible de los 
ciudadanos está en aumento, los 
puestos de trabajo se generan al 
ritmo deseado y el nivel de em-
pleo es estable. Este resultado se 
explica por la mayor eficiencia del 
nuevo modelo y el crecimiento 
del sector terciario, que absorbe 
mayor fuerza laboral.
Según el presidente Xi Jinping, 
con el nuevo modelo en China: “se 
dejará de primar el crecimiento 
por el crecimiento, limitará el ex-
ceso de capacidad y pasará de un 
modelo intensivo en capital a otro intensivo 
en empleo”.
Desde el inicio de la política de Reforma 
y Apertura, China ha pretendido mantener 
niveles de crecimiento superiores al 8 %. El 
Gobierno considera que solo un pib de tal 
magnitud permitiría crear los puestos de 
trabajo necesarios para ocupar a casi 7 mi-
llones de estudiantes, que se gradúan cada 
año en las universidades, y a los emigrantes 
rurales (276 millones de habitantes), quienes 
se desplazan a las ciudades en 
busca de un mejor sustento. 
Con la meta de doblar el 
ingreso anual por hogar para 
2020, en relación con los ni-
veles de 2010 y teniendo en 
cuenta que la demanda exter-
na no es la de hace unos años, 
el reto es alcanzar su objetivo 
de crecimiento apoyado en la 
demanda interna. Según datos 
de la onu, el número de cen-
tros urbanos con poblaciones 
de más de un millón de personas pasó de 
16, en 1970, a 106, en 2015. En comparación, 
existen 45 en Estados Unidos y 55 en Europa, 
aproximadamente.
recursos para invertir
Además de las oportunidades para invertir 
en el cambio del modelo industrial por uno 
de nivel medio–alto basado en la innova-
ción, la proteccióndel medioambiente y las 
infraestructuras nacionales y urbanas (solo 
el 55 % de su población vive actualmente 
en ciudades), el país cuenta con recursos 
para apoyar las inversiones. Por ejemplo, 
dispone de más de 4 billones de dólares en 
reservas de divisas.
Asimismo, el total de deuda pública acu-
mulado por el gobierno central y local es 
inferior al 60 % del pib (en los países de-
sarrollados y en vías de desarrollo supera 
el 100 %, a saber, en Estados Unidos es del 
103 %) y el ahorro generado por las economías 
familiares es alrededor del 50 % del pib, uno 
de los más altos del mundo. 
Si se aprovechan todas las condiciones fa-
vorables, China continuará siendo el principal 
motor de la economía internacional, a la cual 
aporta alrededor de un 30 % del crecimiento 
mundial cada año. De no lograrlo, el país y el 
planeta sufrirán las consecuencias.
política & sociedad
La irrupción de China como potencia comercial en América Latina
Para el gigante asiático, el continente americano es una región con una fuerte complementariedad, que actúa como motor de las relaciones 
comerciales. En el documento de trabajo China en América Latina: repercusiones para España del Instituto Real Elcano, se destacan los intercam-
bios comerciales entre ambas economías, los cuales avanzaron a un ritmo superior al 150 % al año, se multiplicaron 21 veces entre 2000 y 2013 
y alcanzaron los 275.000 millones de dólares anuales. Asimismo, la participación de China en las exportaciones de la región pasó del 1 % al 
10 % y en las importaciones del 2 % al 16 %, mientras las realizadas durante el mismo periodo a Europa y Estados Unidos perdieron fuerza.
marzo 2016 | 3 Periódico – N.º 197 – Universidad Nacional de Colombia
investigación & creación
30 días 
en la Universidad
Premio Nacional al Mérito Científico 2015 ACAC
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director: Jaime Franky Rodríguez
coordinación editorial: Blanca Nelly Mendivelso Rodríguez • coordinación periodística: Diana Manrique Horta
comité editorial: Astrid Ulloa, Jorge Echavarría Carvajal, Horacio Torres, Luis Carlos Colón, André-Noël Roth, Juan Álvaro Echeverri y Álvaro Zerda
corrección de estilo: Angela Bernal Larrotta • diagramación: Ricardo González Angulo • impresión: ceet, Casa Editorial El Tiempo
Las opiniones expresadas por los autores y sus fuentes no comprometen los principios de la Universidad Nacional de Colombia ni las políticas de UN Periódico
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Edificio Uriel Gutiérrez, carrera 45 N.o 26-85, piso 5.o • issn 1657-0987
bogotá. Las similitudes en la 
textura, composición mineralógica 
y química de un meteorito hallado 
en Santa Rosa de Viterbo y otros 
encontrados en Boyacá, indican 
que los fragmentos corresponde-
rían al mismo evento.
manizales. A partir de cáscaras 
de huevo se obtuvo hidroxiapa-
tita, componente principal de los 
huesos. Además de darle un nuevo 
uso a esos residuos, el hallazgo 
permitirá realizar injertos o curar 
fracturas caninas.
palmira. El estudio de siete 
especies de bacterias que detectan 
contaminación por hidrocarburos 
permitió establecer que las Pseudo-
monas fluorescens M3A y Pseudo-
monas putida TVA8 poseen mayor 
luminiscencia.
medellín. Prototipo de impresora 
braille permitiría a estudiantes en 
situación de discapacidad visual 
acceder a textos académicos y 
literarios. La propuesta costaría 10 
veces menos que las impresoras 
existentes en el mercado.
manizales. Calorías colombianas es 
una aplicación sobre la dieta criolla 
que incluye fotografías e informa-
ción relacionada con las calorías, 
carbohidratos, proteínas y grasas 
de la gastronomía. Está disponible 
para dispositivos Android.
bogotá. Construyen robot que 
realiza cortes con láser. La preci-
sión y alta velocidad con la que 
desarrolla sus funciones permite 
su aplicación industrial.
palmira. Nanopartículas de óxido 
de zinc controlarían al hongo 
Phoma sp. que amenaza los culti-
vos de café, de los cuales depen-
den cerca de 85.000 productores, 
en cinco municipios del Cauca.
medellín. La Unidad de Bioética 
de la Unesco en Colombia será 
coordinada por la un.
manizales. Con un link o enlace 
mejoran plataforma virtual para 
tramitar restitución de tierras. 
bogotá. GEONETCast es una 
antena que almacena datos sobre 
hidrología y climatología.
bogotá. Posicionador de brackets, 
patentado por la un, es más preci-
so en procesos de ortodoncia.
Bogotá. Pesca de camarón 
acidifica los océanos y deteriora la 
capa de ozono.
medellín. Diseñan plan de restau-
ración forestal para área impactada 
por hidroeléctrica Porce III.
manizales. Modelo electromag-
nético frena automáticamente los 
coches para bebés.
bogotá. La vereda Bricha, en 
Santander, es el mejor sitio para 
contemplar las estrellas.
manizales. Araña electromecá-
nica transporta cosechas de cacao 
en zonas de difícil acceso.
palmira. Temperatura, radiación 
solar y velocidad del viento influ-
yen en el estrés bovino.
palmira. A través de imágenes de alta resolución (720 píxeles) captadas 
con drones, se reducirían los tiempos de atención en accidentes viales hasta 
30 minutos.
bogotá. Seis de cada diez niños menores de cinco años, que habitan en 
sectores pobres de Bogotá, estarían en riesgo de no tener un crecimiento 
óptimo, concluyó estudio de pediatría.
medellín. Prototipo de máquina podrá seleccionar los granos de café “cere-
za” para separarlos de los verdes “pasilla” y mejorar la calidad del producto.
bogotá. Desde el pargo hasta el pez globo están incluidos en el Primer atlas 
de la biodiversidad marina del Caribe colombiano, que recopila alrededor de 627 
especies.
marzo 2016 | 4 Periódico – N.º 197 – Universidad Nacional de Colombia
palabras clave: organismos internacionales, posacuerdo, Cruz 
Roja. Consúltelas en www.unperiodico.unal.edu.co
Política 
& Sociedad
¿Tormenta en un vaso de agua?
CAmILO bOrrErO GArCÍA, Centro de Pensamiento y Seguimiento al Diálogo de Paz 
Universidad Nacional de Colombia
Superado el incidente por la presen-
cia en un acto político de miembros 
de la delegación de las farc - ep en el 
corregimiento de Conejo, La Guajira, 
conviene reflexionar sobre el papel 
que crecientemente cumplirán los or-
ganismos internacionales en la imple-
mentación de los acuerdos de paz.
como fue de público conocimiento, el Comité 
Internacional de la Cruz Roja (cicr) asumió responsa-
bilidades logísticas en el traslado de la delegación de 
las farc a la zona, conforme a una petición conjunta 
de las partes en la mesa de conversaciones. Y, según 
lo dejaron saber en sus comunicaciones oficiales, 
esta labor se desarrolló en el marco de su mandato 
de ayuda humanitaria, además de cumplir con los 
cometidos misionales de neutralidad e imparcialidad.
Igualmente, pese a los anuncios del presidente 
de la República y los miembros de la Delegación 
del Gobierno Nacional, en la línea de disponer el 
regreso inmediato de la delegación de la guerrilla 
a Cuba, el cicr se abstuvo de prestar su concurso 
para ello, hasta tanto la petición fuese hecha de 
común acuerdo por las partes. Esto motivó, a su 
vez, la intervención de los países garantes (Cuba y 
Noruega) para superar el impase.
Más allá de las valoraciones políticas sobre el 
suceso, –que en general fueron negativas hacia el 
llamado proselitismo armado de las farc, en algunos 
casos llegaron a condenar la inacción del Gobierno, 
e incluso su complicidad con lo sucedido– en secto-
res de la esfera pública y el periodismo de opinión 
quedó una insatisfacción hacia la actitud del cicr, 
bien por haber contribuido a poner en peligro a la 
población civil, o por no haber alertado oportuna-
mente al Gobierno Nacional. 
El rol de los organismos internacionales segura-
mente será creciente y muy significativo durante el 
período del posacuerdo o el posconflicto, por ello 
es necesario desde ya entender y asumir loque se 
les puede y debe exigir, así como lo que estaría por 
fuera de sus respectivos mandatos.
diálogo confidencial
Si nos atenemos a los comunicados de la mesa de 
negociaciones, el cicr realizó una labor operativa 
similar en el caso de la liberación del General Alzate, 
y se espera que colabore con medidas humanitarias 
en la búsqueda de desaparecidos. Adicionalmen-
te, el traslado de miembros de la delegación de las 
farc – ep, para al menos cuatro viajes de pedagogía para 
la paz hacia sus tropas, así como en las operaciones 
realizadas que garantizaron el cambio de delegados 
de la organización guerrillera en La Habana, tuvo gran 
trascedencia.
Para activar la acción humanitaria del cicr (sobre 
la imparcialidad del estamento, consultar en www.
icrc.org/spa/resources/documents/misc/5tdlsy.htm) 
se requieren condiciones básicas. La primera, es 
considerar ambas partes de la mesa como iguales, 
así en la realidad no lo sean. Es decir, para los efec-
tos propios de su misión, guerrilla y Gobierno son 
simplemente partes equidistantes, sin entrar en 
consideraciones políticas sobre su eventual nivel 
de legitimidad o peso institucional.
En segundo lugar, se trata de una competencia por 
mutuo acuerdo de las partes, y por ende se deshace 
de la misma manera. No hay unilateralismos, ni se 
sirve a los intereses exclusivos o coyunturales de 
alguna de las partes, por legítimos que 
parezcan. El organismo internacional 
solo se involucra en beneficio de las 
víctimas y desde una perspectiva de 
apoyo humanitario y de cumplimiento 
o desarrollo del Derecho Internacional 
Humanitario.
En tercer lugar, el cicr opera bajo 
el principio de confidencialidad. Esto 
indica que excepcionalmente publica 
sus opiniones o valoraciones. “En ese 
tipo de situaciones, cuando nuestros 
delegados observan casos de abusos, 
necesidad o descuido, comunican di-
rectamente sus observaciones a las 
autoridades o a otras partes en el 
conflicto, sobre el terreno. Nuestro 
objetivo es mantener un diálogo con-
fidencial con quienes tienen el poder 
necesario para mejorar la situación”, 
explica Dominik Stillhart, director 
adjunto de Operaciones del cicr, se-
gún está consignado en la página de 
la organización internacional.
Condiciones similares podrían es-
grimirse sobre la anunciada colabora-
ción de Naciones Unidas y la Comu-
nidad de Estados Latinoamericanos 
y Caribeños (Celac) en la verificación 
y dejación de armas. Si bien existe 
una distancia significativa entre la 
misión del cicr y la del Consejo de 
Seguridad de Naciones Unidas, so-
bre la forma como se ha construido 
esta colaboración, emergen algunos 
puntos comunes.
 En principio, se trata de una peti-
ción de ambas partes, con el respaldo 
implícito tanto de los países garantes 
como de los acompañantes. Esto, nue-
vamente, se traduce en una acción que 
considera a las dos delegaciones como 
iguales, por lo menos en torno a los 
términos de la misión encomendada, 
independientemente de la legitimidad 
o configuración institucional de cada 
una de ellas.
En segundo término, al tratarse 
de una verificación de carácter po-
lítico, no militar, se busca que las 
observaciones realizadas en torno al 
cumplimiento o incumplimiento de lo 
pactado contengan valoraciones independientes a las partes, 
producto de una presencia en terreno y una comprensión 
integral de los contextos. No en vano, el acuerdo prevé que 
los observadores de la misión política saldrán de la Celac, esto 
excluye a Europa, Norteamérica, Asia o África. 
Y aun cuando la presencia de la onu es tan solo uno de 
los tridentes del mecanismo de monitoreo y verificación (los 
otros son el Gobierno y las farc – ep), reducida al cese al fuego 
y de hostilidades bilateral y definitivo y a la dejación de las 
armas, será quien presida y coordine sus instancias, dirima 
controversias, realice recomendaciones y presente informes. 
reglas definidas para todas las partes
Una mirada a lo acontecido en el corregimiento de Conejo sirve 
para ilustrar la complejidad de las situaciones que se deben 
afrontar. ¿Se trató de una toma guerrillera, con violaciones al 
Derecho Internacional Humanitario incluida la utilización de 
la escuela? o ¿un acto de pedagogía para la paz de la tropa, con 
presencia de civiles acostumbrados a la presencia subversiva 
por ausencia del Estado, cuando no de militantes civiles de 
esa organización? 
Resolver estos casos requiere, en parte, una actitud inde-
pendiente y contextual de los organismos internacionales. 
Como sostienen los mismos directivos del cicr: “Quienes creen 
que tienen buenas razones para hacer una guerra tienden a 
no comprender los motivos de quienes, por su neutralidad, 
no los apoyan. Son pocos los beligerantes que no consideran 
que su guerra es justa, pero esto no la vuelve justa para sus 
adversarios. El cicr no puede tomar posición sobre las razones 
de un conflicto o sobre la licitud de una guerra con arreglo 
a la Carta de las Naciones Unidas. Por ejemplo, solo puede 
determinar lo que es correcto o incorrecto en relación con el 
comportamiento de los beligerantes durante las hostilidades, 
sobre la base del derecho humanitario y de consideraciones 
de humanidad”, enfatiza Harroff – Tavel, Marrion, directora 
adjunta del Departamento de Derecho Internacional y Coo-
peración en el Movimiento del cicr, según está consignado 
en la página de la organización internacional.
Pero, sobre todo, lo que se requiere es que los mandatos y 
protocolos, bajo los cuales actuarán los organismos internacio-
nales, sean lo suficientemente explícitos y detallados para que 
las reglas de juego sean precisas para todas las partes. Asimismo, 
se deben divulgar, ya que la transparencia posibilita el debate 
ciudadano. Una tarea en la que deberán emplearse a fondo las 
delegaciones en La Habana y la diplomacia colombiana ante 
Naciones Unidas.
el rol de los organismos internacionales será creciente y significativo durante el posacuerdo.
foto: El Tiempo
marzo 2016 | 5 Periódico – N.º 197 – Universidad Nacional de Colombia
palabras clave: neuroeducación, posconflicto, 
inteligencia colectiva. Consúltelas en www.unperiodico.
unal.edu.co
foto: archivo Unimedios
Política 
& Sociedad
Neuroeducación para la paz
mIGuEL EduArdO mArTÍNEz sáNChEz, profesor asociado, Facultad de Medicina y coordinador académico de la Maestría en Fisiología
Universidad Nacional de Colombia
Para desaprender el fanatismo, la 
obcecación, el prejuicio o la into-
lerancia, Colombia necesita una 
educación para la paz apoyada en 
los principios de la neurociencia de 
la cognición social y los procesos 
de paz realizados en otras latitudes, 
referentes del aprendizaje efectivo 
de la inteligencia colectiva, la cual se 
modifica desde la experiencia de la 
inteligencia individual.
A través del ensayo La inteligencia fracasada. Teo-
ría y práctica de la estupidez, el filósofo español José 
Antonio Marina se ocupa de realizar una disección 
minuciosa de ese fenómeno común a todos los huma-
nos, a través de cuatro tipos de fracasos: cognitivos, 
afectivos, del lenguaje y voluntad.
El resultado de su ejercicio es un inventario 
casi exhaustivo de aquellos atributos encarnados 
en los más reconocidos personajes que, como 
agentes del fracaso, habitan en las narrativas 
literarias y cinematográficas, desde Sísifo hasta 
Ulises Lima (heterónimo del poeta mexicano 
Mario Santiago Papasquiaro), y desde Eurídice 
hasta la Maga (uno de los personajes de Rayuela 
de Julio Cortázar). 
Marina, uno de los filósofos que ha encontrado 
resonancia en el gran público y por tanto despierta 
cierto desdén en el mundo académico universitario, 
convoca a un estudio más serio y científico sobre 
la estupidez humana, para ello utiliza el mismo es-
fuerzo que se hace por caracterizar su contraparte, 
la inteligencia, y a partir de este llamamiento abroga 
también por su enseñanza.
Según el ensayista y pedagogo, la inteligencia 
es “la capacidad de un sujeto para dirigir su com-
portamiento, utilizandola información captada, 
aprendida, elaborada y producida por él mismo.”
La lectura de este libro alimentó mis crecientes 
sospechas sobre lo que en ocasiones considero una 
cierta “ingenuidad” por parte de las neurociencias 
contemporáneas. Ellas se ocupan de la emoción, 
la memoria, la musicalidad, el aprendizaje, la pla-
neación, la anticipación y un largo etcétera de 
dominios “positivos” de la condición humana, 
pero prácticamente separan el “lado oscuro”: la 
maldad, la violencia, la corrupción, el engaño y 
la brutalidad.
Al despuntar el siglo XXI, las agencias del gobier-
no estadounidense centraron buena parte de los 
objetivos de financiación en develar en una década 
(2000-2010) de investigación científica las bases de 
las enfermedades cerebrales degenerativas. Durante 
este tiempo, los estudiosos del cerebro se dieron a 
la tarea de entender, entre otros aspectos, las bases 
neurales de la cognición (si se quiere léase con una 
enorme licencia, la inteligencia) humana, hoy conocida 
como neurociencias.
no se estudia la estupidez
De la gran cantidad de áreas del conocimiento que 
se desprendieron a partir de esa empresa inicial, 
en la actualidad existe un acervo inabarcable que 
incluye a la neuroética, neuroeducación, neuro-
economía, neuromarketing y otra docena más de 
“neurodisciplinas”, interesadas en precisar cómo 
funcionan los sustratos cerebrales que dan lugar 
a los cientos de rasgos que caracterizan la cogni- El proceso de paz colombiano se puede analizar desde la inteligencia colectiva.
ción y, por qué no, la condición 
humana.
No se requiere mayor esfuerzo 
de indagación bibliográfica para 
darse cuenta de que estas discipli-
nas se ocupan muy tangencialmen-
te de los atributos de la estupidez 
que señala Marina. 
En ese sentido, no hay una neu-
rociencia del prejuicio, del dog-
matismo, del automatismo del 
discurso, del malentendido, de la 
impulsividad, de la indecisión, de 
la inconstancia y de la obcecación, 
por señalar solo esos fracasos de 
la inteligencia, reconocidos con 
facilidad como rasgos caracterís-
ticos de la sociedad. 
Por el contrario, existe una 
creciente y desbordante biblio-
grafía que se ocupa de indagar las 
estructuras cerebrales encargadas 
de vincular a los seres humanos, 
entender la mente de los demás 
y ponerse en el lugar del otro.
Se trata de comprender cómo 
funcionan juntas las estructuras 
que constituyen el “cerebro so-
cial”, denominado así por la mayo-
ría de los autores. Estos estudios 
agregados y sistematizados reci-
ben el nombre de cognición social 
o, más específicamente, neuro-
ciencia de la cognición social.
inteligencia y estupidez, 
en los mismos módulos 
del cerebro
Dejando de lado el tema de las 
“neuronas en espejo”, que atrae 
la imaginación del público con 
inmensa facilidad, es importante 
realizar algunas referencias a au-
tores, cuyas obras de divulgación 
pueden ser esenciales, cuando 
se intenta elaborar una reflexión 
sobre la utilidad de la neurocien-
cia de la cognición social, para el 
proceso de paz que afronta el país.
En 1997, Andrew Meltzoff de 
la Universidad del Estado de 
Washington sorprendió con su 
explicación sobre el papel de la 
imitación gestual de los bebés, 
a partir de allí emprendió un ca-
mino hasta postular su hipótesis 
del Like me (Como yo) en 2005. En 
síntesis, esta teoría postula que 
desde la imitación gestual infantil 
se construye la comprensión del 
otro como uno igual a mí. 
Por otra parte, Michael Toma-
sello, del Instituto Max Planck, 
ha elaborado un camino similar 
con sus estudios sobre la cogni-
ción en primates, cuyo resultado 
fue publicado en el libro ¿Por qué 
cooperamos? En su texto, el psico-
biólogo estadounidense, describe 
a la especie humana como la única 
con capacidad para meterse en 
problemas.
Otra referencia es Ralph Adol-
phs, del Instituto de Tecnología 
de California (Caltech, por sus 
siglas en inglés), quien consolida 
una propuesta sobre la estructu-
ra del cerebro social, en la cual 
recoge atributos ya descritos 
destinados al funcionamiento 
cerebral, como la jerarquiza-
ción, la estructura modular y la 
interconexión espacio temporal 
de estos módulos para la ejecu-
ción de diversas tareas. Para ello 
articula sobre este cerebro social 
tareas aparentemente diversas, 
como el procesamiento sensorial, 
la evaluación de las recompensas, 
motivación, emoción, empatía y 
emoción moral. 
De acuerdo con Adolphs, profe-
sor de psicología y neurociencias, 
el funcionamiento del cerebro 
social fundamenta la cognición 
social, y esta a su vez el compor-
tamiento y funcionamiento social. 
El recorrido intelectual en este 
mismo campo de uno de los pa-
dres de la neurociencia cognitiva 
y de la noción de organización 
modular del cerebro, Michael 
Gazzaniga, también exhibe ras-
gos similares; si intuitivamente 
se consideran dos de los títulos 
de su extensa bibliografía personal, El cerebro social 
(1993) y El cerebro ético (2005).
Según Gazzaniga, algunos módulos cerebrales 
sirven para todo, desde la socialización y la emo-
ción, hasta la toma de decisiones y planeación. La 
neurociencia contemporánea estudia solamente los 
aspectos positivos y no aspectos negativos como 
la estupidez. Incluso si se estudiara, es improbable 
que se encuentren el núcleo de la estupidez o las 
neuronas de la estupidez, simplemente lo que se 
hallará es que tanto en una como en otra (inteligen-
cia y estupidez) participan los mismos módulos. 
modificar la inteligencia colectiva
¿Qué se puede aportar al articular las reflexiones 
filosóficas de José Antonio Marina sobre la estupi-
dez con algunos de los muchos autores que hoy se 
refieren a una neurociencia de la cognición social? 
La respuesta es contundente: una aproximación en 
clave de esperanza.
Uno de los ámbitos que plantea Marina es la inteli-
gencia colectiva, desde la cual se puede analizar, por 
ejemplo, el actual proceso de paz. En tal sentido, los 
circuitos cerebrales tienen capacidad de entender lo 
que le sucede al otro y se pueden modificar a través 
de la experiencia. De esta manera, las neurociencias 
proveen un marco tranquilizador, porque es posible 
que la inteligencia colectiva sea modificable.
En consecuencia, es importante aludir los casos 
exitosos de procesos de paz en otros países, los 
cuales podrían ser referentes del aprendizaje efec-
tivo de la inteligencia colectiva, aunque para ello 
se requiere que la inteligencia individual también 
se modifique.
Si bien los fracasos ya señalados como rasgos 
compartidos por los colombianos parecen fijos e 
inmutables, la neurociencia contemporánea muestra 
un cerebro con capacidad de desaprender y aprender 
a lo largo de toda la vida.
De esta manera, surgen más inquietudes, ¿se 
pueden desaprender el fanatismo, la obcecación, la 
intolerancia, la manipulación del malentendido, el 
prejuicio…? ¡Por supuesto que sí!, sólo se requiere 
de una educación para la paz basada en principios 
pedagógicos, articulados sobre la neurociencia de 
la cognición social, en otras palabras, Colombia 
necesita de neuroeducación moral para la paz.
marzo 2016 | 6 Periódico – N.º 197 – Universidad Nacional de Colombia
Salud
tlc aumenta malnutrición 
en los colombianos
JhON JAIrO bEJArANO rONCANCIO, profesor titular, Departamento de Nutrición Humana de la Facultad de Medicina
Universidad Nacional de Colombia
Cuatro años después de entrar en 
vigor el acuerdo comercial con Esta-
dos Unidos, urge implementar po-
líticas de salud pública e informa-
ción que protejan al consumidor y 
garanticen la seguridad alimentaria 
y nutricional, o reevaluar las exis-
tentes, para cumplir con el derecho 
a una alimentación saludable. 
Colombia enfrenta un reto de transición 
nutricional, debido a la importación de cientos 
de productos ultraprocesados, formulaciones listas 
para consumir, basadas en sustancias refinadas, con 
una cuidadosa combinación de azúcar, sal, grasa y 
varios aditivos, entre los que se encuentran bebidas 
azucaradas, snacks y comidasrápidas.
Productos de este tipo han ingresado al país des-
de hace varios años. En 2010, la Encuesta Nacional 
de Situación Nutricional en Colombia evidenció 
que el 15,2 % de los colombianos, entre 5 y 64 años, 
consume diariamente alimentos de paquete, un 
22,1 % gaseosas o refrescos y un 36,6 % golosinas 
o dulces.
Un año antes, según la Encuesta Nacional de 
Ingresos y Gastos enig (2009), casi la mitad de las 
calorías compradas en los hogares colombianos 
se derivó de ingredientes culinarios elaborados 
(28,4 %) y de alimentos y bebidas ultraproce-
sados (16,8 %). Una realidad que contrasta con 
otra no menos preocupante, apenas el 22 % de 
los colombianos consume frutas enteras diaria-
mente, según el Perfil Nacional de Consumo de 
Frutas y Verduras, publicado por el Ministerio 
de Salud y Protección Social, y la Organización 
de las Naciones Unidas para la Alimentación y 
la Agricultura (fao).
Esta situación influyó en el tipo y calidad de la 
dieta y por consiguiente en la composición corporal 
de los individuos (transición nutricional), y podría 
agudizarse con la entrada en vigor, hace cuatro 
años, del Tratado de Libre Comercio firmado con 
Estados Unidos.
Las estadísticas empiezan a comprobarlo. En el 
primer semestre de 2013, el dane registró compras 
nacionales por valor de 238 millones de dólares en 
alimentos y bebidas, destinados al consumo de los 
hogares, y 874,8 millones de dólares en alimentos 
procesados. 
De igual manera, un informe de la Organización 
Mundial de la Salud (oms), dado a conocer en 2015, 
reveló que las compras de comida rápida per cápi-
ta aumentaron casi un 40 % entre 2000 y 2013 en 
América Latina. Con base en datos de los 13 países 
estudiados, estas se incrementaron en un 100 %, o 
más, en Bolivia, Chile Costa Rica, República Domi-
nicana, Perú y Colombia.
económicos pero nocivos
Los productos ultraprocesados se caracterizan 
por poseer un alto contenido de calorías, algu-
nos, colesterol y grasas trans (cuando se agrega 
hidrógeno al aceite vegetal), que afectan la salud 
cardiovascular. Este último y otros ingredientes 
como aditivos químicos permitidos se añaden para 
potenciar el sabor y conservar el producto. Además 
proporcionan color, sabor artificial y textura; de esta 
manera se favorecen propiedades especiales para el 
consumo. Así pues, son muy pocos los que aportan 
grasas de buena calidad, fibra (de origen vegetal) o 
palabras clave: alimentos 
ultraprocesados, nutrición, tlc, 
Estados Unidos. Consúltelas en 
www.unperiodico.unal.edu.co
En Colombia está aumentado el ambiente obesogénico, aquel relacionado con el 
sedentarismo y el consumo excesivo de calorías.
sustancias aprovechables para el 
ser humano. 
Sumado a la modificación en 
los hábitos nutricionales, facto-
res como el sedentarismo han 
provocado además una transición 
epidemiológica, con alta preva-
lencia de enfermedades crónicas 
y degenerativas, como obesidad, 
diabetes, hipertensión arterial, 
algunos tipos de cáncer y enfer-
medad cardiocerebrovascular, 
todas asociadas con estilos de 
vida no saludables. Estudios cien-
tíficos han demostrado la fuerte 
asociación entre el consumo de 
productos ultraprocesados y es-
tas afecciones que perjudican de 
forma prematura a los adultos 
jóvenes, entre los 18 y 25 años.
Con respecto a los precios, 
los productos ultraprocesados 
importados y los que ingresan 
por el tlc son más económicos 
que los regionales, lo cual genera 
una competencia inestable en el 
mercado interno. El problema 
principal radica en que pueden 
ser menos costosos que algunos 
alimentos saludables, como las 
frutas. Además, son comerciali-
zados en supermercados, tien-
das y espacios públicos, cuentan 
con grandes tamaños de porción, 
largos períodos de conservación, 
fácil transporte y manipulación. 
el caso mexicano
La etapa de transición nutricio-
nal por la que atraviesa Latinoa-
mérica ha sido más acelerada 
en México, en particular desde 
1994 con la entrada en vigor 
del tlc con América del Norte 
(tlcan).
Durante las últimas dos dé-
cadas, la obesidad en mujeres 
mexicanas pasó de 34 % a 73 %, 
mientras que la desnutrición cró-
nica en menores de cinco años es 
de 13,6 %, cuando debería encon-
trarse por debajo de 2,5 %. 
Uno de los fenómenos más 
significativos fue la industriali-
zación de la lactancia materna, 
pues de un 22 % de mujeres que 
amamantaban, ahora solo el 
14 % alimentan de esta forma a 
sus hijos. Igualmente, el consu-
mo de refrescos, endulzados con 
jarabe de maíz de alta fructuosa, 
aumentó un 37 % durante este 
periodo. 
Otra preocupante consecuen-
cia de estos cambios es el sobre-
peso y la obesidad en niños, que 
aumentó el 40 %; igualmente 
padecen hipertensión o tienen 
alteraciones en el metabolismo 
por los carbohidratos e hipertri-
gliceridemia (trastorno heredado 
que aumenta el nivel de triglicéri-
dos). Según la oms, el año pasado 
este país ocupó el primer lugar 
en obesidad infantil y segundo, 
después de Estados Unidos, en 
adultos.
Ante esta situación, el país di-
señó el Reglamento de Control Sa-
nitario de Productos y Servicios. 
Además, se fundamentó en el Plan 
Nacional de Desarrollo 2013-2018, 
que alerta sobre los niveles muy 
elevados de sobrepeso, obesidad, 
diabetes e hipertensión en todos 
los grupos de la población, y en la 
urgencia de proteger a los niños 
mexicanos, particularmente en 
edad escolar, en riesgo de desa-
rrollar enfermedades crónicas no 
transmisibles. 
Por tanto, el objetivo del re-
glamento es reducir la exposi-
ción a productos con muy alta 
densidad calórica, las bebidas 
azucaradas, ya que México es el 
primer consumidor mundial de 
estos productos.
lecciones para colombia
Teniendo como ejemplo la expe-
riencia mexicana, se debe prestar 
atención a lo que podría suceder 
con la salud futura y el estado nu-
tricional de los colombianos, pues 
existe el riesgo de que se agrave 
la situación. Especialmente, si se 
tiene en cuenta que la regulación 
sobre rotulado e información 
del contenido nutricional de los 
productos no es pedagógica para 
la lectura y el conocimiento del 
consumidor.
Por otra parte, en el marco 
de los sistemas alimentarios de 
abastecimiento se encuentran los 
productos tradicionales–cultura-
les (frescos en plazas de mercado) 
y los modernos que coexisten y 
evolucionan con la urbanización 
y la globalización. Aunque estos 
sistemas mixtos ofrecen variedad 
de alimentos, también favorecen 
la venta masiva y modificación en 
el comportamiento de compra 
de ultraprocesados, (que contri-
buyen al exceso de peso, si se 
consumen en abundancia) de la 
canasta familiar.
Ante este desfavorable pa-
norama, se necesita claridad 
del costo–beneficio, además de 
herramientas para identificar y 
entender el tipo de ingredientes y 
su contenido nutricional, fijados 
en la etiqueta. De esta manera, 
el consumidor podrá tomar la 
decisión de compra–consumo y 
aprovechamiento biológico de 
los ultraprocesados, así como el 
fortalecimiento del marco regu-
latorio comercial de protección al 
consumidor basado en evidencia 
científica.
Las manifestaciones del tlc 
son reales, plantean un problema 
obesogénico (relacionado con am-
bientes sedentarios y el consumo 
de alimentos muy energéticos) 
que debe enfrentarse con inter-
venciones sanitarias colectivas de 
la autoridad competente.
foto: Nicolás Bojacá/Unimedios
marzo 2016 | 7 Periódico – N.º 197 – Universidad Nacional de Colombia
palabras clave: salud, eps, Plan 
Obligatorio de Salud. Consúltelas 
en www.unperiodico.unal.edu.co
Salud
Persiste crisis en sistema de salud
mArIO hErNáNdEz áLvArEz, profesor asociado, coordinador del Doctorado Interfacultades en Salud Pública
Universidad Nacional de Colombia
El comportamiento de los agentes 
del sistema y la lógica del lucro pro-
fundizan el problema de salud en el 
país. Por ello, se propone impulsar 
un nuevo pacto social y político, que 
recupere la gestión pública y territo-
rial de los recursos, con transparen-
cia, control social y participaciónde 
las comunidades.
A pesar de la ley estatutaria 1751 sancionada 
hace un año, que buscaba garantizar el derecho fun-
damental a la salud, además de regular y establecer 
sus mecanismos de protección, continúa la crisis.
Las deudas de las Empresas Promotoras de Salud 
(eps) con las clínicas privadas y los hospitales pú-
blicos son agobiantes y parecen irrecuperables, en 
especial, aquellas grandes eps liquidadas.
Según la Defensoría del Pueblo, de las 498.200 
tutelas interpuestas durante 2014, 118.281 (alrededor 
de 324 al día) fueron reclamos, en un 70 %, respecto a 
los servicios incluidos en el Plan Obligatorio de Salud 
(pos). Se trata de la cifra más alta, desde que en 2008 
la Corte Constitucional consideró, por primera vez, 
la salud como un derecho fundamental autónomo.
A este desalentador panorama se añaden las imá-
genes constantes de servicios de urgencias atiborra-
dos, que funcionan bajo condiciones inhumanas y 
generan sufrimiento y muertes, las cuales podrían 
evitarse. Debido a esto, los niños con leucemia 
aguda tienen una sobrevida cercana al 50 %, cuando 
debería ser del 85 %, informan investigadores del 
Instituto Nacional de Cancerología, en el boletín 
Hechos y Acciones de julio de 2013.
De igual manera, resultan alarmantes las inequi-
dades entre regímenes y regiones del país. Preci-
samente, en una visita realizada a La Guajira por 
profesores de la Universidad Nacional y directivos 
de la Academia Nacional de Medicina comprobaron 
que 17 eps se lucran con los recursos disponibles 
para la atención de la población, mientras los niños 
mueren por hambre y desatención.
Además, las enfermedades transmitidas por vec-
tores, como el dengue y el zika, no tienen control 
y afectan a los más vulnerables. Esto se debe a dos 
razones fundamentales; por un lado, la suspensión 
de los programas de control de las enfermedades 
transmitidas por vectores (etv), debido a una inade-
cuada descentralización. Por otro lado, la decisión 
de separar la atención individual, asumido por las 
eps en competencia, y la salud pública, a cargo de 
los entes territoriales, como municipios y departa-
mentos, sin condiciones para asumirla.
¿Qué explica la persistencia de esta dramática 
situación? Como suele ocurrir, las disquisiciones 
tienden a hacerse desde la afectación de cada cual, 
pero si se profundiza un poco, existen dos posiciones 
en debate que conducen a soluciones muy diferen-
tes. Específicamente, centrarse en el cuestionado 
comportamiento de los agentes y la lógica del lucro 
en salud. 
desacertado comportamiento y 
alineación de incentivos
El Gobierno Nacional, la actual administración de 
Bogotá, las eps, algunos prestadores especializa-
dos y un sector de la academia consideran que la 
explicación de la crisis está en el terreno financiero, 
debido al comportamiento de los 
agentes del sistema.
Estos actores suponen la exis-
tencia de un desequilibrio entre el 
costo de los bienes y servicios de 
salud, la cronicidad y las exagera-
das expectativas de los usuarios 
del sistema y el valor de la Unidad 
de Pago por Capitación (upc), que 
el Estado entrega a las eps por 
cada afiliado. 
Como cada agente quiere ob-
tener el máximo beneficio y los 
recursos son escasos, no queda 
más que “alinear los incentivos”, 
según lo ha afirmado en varias 
ocasiones el ministro de Salud 
y Protección Social, Alejandro 
Gaviria. Esto significa, premiar 
y castigar a unos o a otros para 
equilibrar financieramente el 
sistema.
Desde esta perspectiva se pue-
den entender las medidas que ha 
adelantado el Gobierno, centradas 
en la profundización del modelo 
de “mercado con competencia 
regulada”, establecido desde la 
Ley 100 de 1993. En síntesis, las 
medidas buscan definir un con-
junto de “exclusiones” que no se 
pagarán con recursos públicos, 
según el artículo 15 de la Ley Es-
tatutaria en Salud; incrementar 
las cotizaciones y los impuestos 
para aumentar progresivamente 
el valor de la upc; disminuir el 
número de eps, para ello se li-
quidan algunas y propician su 
capitalización en siete años con 
grandes inversionistas; fusionar 
o liquidar los hospitales y facilitar 
la inversión del sector privado en 
la prestación; establecer límites 
al precio de los medicamentos 
para enfermedades de alto costo; 
y, lo más reciente, establecer una 
Política de Atención Integral en 
Salud (pais).
Por medio de esta última es-
trategia, el Ministerio pretende 
definir las funciones de cada agen-
te para responder a las demandas 
en salud, de manera completa, 
oportuna y diferencial, según tres 
tipos de territorios: urbano, rural 
y población dispersa. 
Se espera que con una resolu-
ción, un “pago por resultados”, 
guías y rutas de atención, los en-
tes territoriales, las ips públicas 
y privadas integradas en redes, 
y las eps, logren “los acuerdos 
necesarios para atender las prio-
ridades y metas definidas” en los 
planes territoriales y el plan de 
salud pública.
Esto sería viable, no obstante, 
será inasequible, debido a otro 
factor de la crisis, relacionado con 
la lógica del lucro como centro 
del sistema. 
la lógica del lucro
La búsqueda de ganancias segmenta 
a los agentes y genera posiciones 
dominantes que no cederán con 
un mandato del gobierno. ¿Cómo 
funciona? En el modelo actual los 
recursos para la atención individual, 
que son “públicos y de destinación 
específica”, como ratifica la Ley 
Estatutaria, se entregan a las eps a 
través de las upc. Estas hacen in-
versiones de todo tipo, sin separar 
el 90 % para el pago a los prestado-
res, según ordena la ley. Además, 
deberían realizar contratos con 
prestadores públicos y privados y 
pagar sus facturas oportunamente. 
Pero si el grupo económico de la 
eps tiene prestadores propios, el 
primer desembolso es para ellos y 
se aplazan los pagos a los externos. 
Así, obtienen utilidades para el gru-
po, aunque la eps esté quebrada. 
De ahí las deudas acumuladas a 
hospitales y clínicas.
Los prestadores que no perte-
necen al grupo económico de una 
eps deben competir entre ellos por 
las tarifas que estas ofrecen, lo que 
evidencia la fragmentación de la 
atención y la ausencia de redes in-
tegradas, a pesar de estar ordenado 
desde la Ley 100 y ratificado por las 
leyes 1122, 1438 y la estatutaria 1751. 
Esto explica por qué no hay una 
“puerta de entrada” organizada por 
cada eps, ni la tan anhelada Aten-
ción Primaria en Salud (aps). Por 
ello, si la gente no puede resolver 
sus problemas oportunamente, se 
dirige al servicio de urgencias.
En medio de la competencia, 
hospitales y clínicas aceptan tarifas 
que no cubren sus gastos; por ello 
la precariedad del trabajo en estas 
instituciones y la pésima calidad 
de la atención percibida por los 
pacientes. Debido a la protección 
de sus ingresos, los especialistas 
han cerrado el acceso a la formación 
especializada, mientras el médico 
general es un tramitador y conte-
nedor del gasto.
Por otra parte, la lógica del mer-
cado supone una articulación entre 
libre elección del usuario y libre 
competencia entre oferentes. Esta 
dinámica rompe la perspectiva te-
rritorial y poblacional que requiere 
la atención integral y oportuna en 
salud, que tanto se reclama. En el 
mismo territorio, incluso en la fa-
milia, puede haber afiliados de dos 
o tres eps. A saber, en La Guajira, 
como los “afiliados” viven lejos y 
no es rentable tener “puerta de 
entrada” y “red integral”, las 17 
eps reciben el monto de las upc 
por sus afiliados, por tanto gastan 
muy poco y su rentabilidad resulta 
óptima.
Los “incentivos” están alinea-
dos hacia el lucro y no hacia las 
necesidades. Sin embargo, esto se 
mantendrá porque cada agente se-
guirá buscando la forma de obtener 
mayor beneficio al menor costo. Por 
ello, desde la explicación estruc-
tural se impulsa un nuevo pacto 
social y político que desplace el 
predominio del lucro en el sistema 
de salud y recupere la gestión públi-
ca y territorial de los recursos, con 
total transparencia, participación 
de las comunidades ycontrol social. 
De esta manera, podría formarse 
una ruta para construir solidaridad, 
otro tipo de convivencia, goce efec-
tivo de derechos y paz territorial, 
como tanto se anhela en un país 
destrozado por la guerra.
en la guajira, 17 eps se lucran con los recursos de la salud, pero desatienden a la 
población infantil.
foto: archivo Unimedios
marzo 2016 | 8 Periódico – N.º 197 – Universidad Nacional de Colombia
palabras clave: pesca, ordenamiento pesquero, acui-
cultura. Consúltelas en www.unperiodico.unal.edu.co
Desarrollo
rural
Ley de pesca quedó corta
JOsé IGOr hLEAp z., profesor asociado, Facultad de Ingeniería y Administración
Universidad Nacional de Colombia Sede Palmira
Con el proyecto de Ley 117 de 2015, 
el Gobierno pretende prevenir, 
desalentar y eliminar la pesca ilegal. 
Aunque el país necesita una legisla-
ción fuerte para consolidar el desa-
rrollo de la pesca y la acuicultura, 
también debe centrar su atención 
en regular la explotación de espe-
cies tradicionales, favorecer la pesca 
artesanal y fomentar la industria.
según el artículo 2 del estatuto general 
de pesca (Ley 13 de 1990), los recursos pesqueros 
son bienes comunes y, por lo tanto, al Estado le 
corresponde su administración, fomento y control, 
en el mar territorial, la zona económica exclusiva y 
las aguas continentales (ríos, lagos, lagunas, etc.), 
toda vez que sean declarados de utilidad pública e 
interés social.
En Colombia existen serias limitantes que han 
frenado el desarrollo de la pesca marítima y conti-
nental, así como el de la acuicultura. De hecho, en el 
ámbito internacional, el país no es un gran productor 
de recursos pesqueros. Para el año 2014, según datos 
reportados por la fao, la producción nacional fue de 
apenas 167.000 toneladas (entre pesca extractiva y 
productiva), frente a las 158 millones de toneladas 
que se obtuvieron en el mundo. 
Con base en las estadísticas, en los últimos años 
han permanecido estables las capturas en ambos 
océanos, mientras que la acuicultura de algunas es-
pecies ha repuntado enormemente (tilapia o mojarra 
roja), por lo que es previsible que esta actividad siga 
creciendo en algunas regiones y departamentos. Por 
tanto, el país necesitará de un ordenamiento, sobre 
todo en el manejo ambiental y aprovechamiento de 
los recursos hídricos. 
Para ello, es necesario definir y adecuar los artes 
y métodos de captura de peces, fortalecer la capa-
cidad instalada para el manejo poscaptura, regular 
la explotación de las especies tradicionales, ya so-
breexplotadas, y los precios de los combustibles. 
En relación con la acuicultura, se necesita mayor 
inversión en instalaciones, tanto de producción como 
de procesamiento, investigación en las técnicas de 
producción en especies tradicionales y nuevas, ma-
yor margen de rentabilidad en la comercialización 
de los productos finales y reducir el alto costo de 
los concentrados.
Conforme al proyecto de Ley 117 de 2015, el Go-
bierno pretende redefinir un nuevo marco normativo 
para la actividad pesquera. Dentro de los tres puntos 
principales que la propuesta contempla se encuentra 
la definición, según la doctrina internacional, sobre 
pesca ilegal; el diseño de un procedimiento especial 
para aquellos pescadores que cometen delitos; y un 
cambio en torno al término de 36 horas para poner 
a disposición de un juez de control de garantías la 
tripulación infractora. Esta nueva ley logrará que 
el plazo sea contado desde que se 
arribe a puerto.
Además de combatir este tipo 
de pesca, a través del proyecto 
de ley radicado ante la Cámara 
de Representantes, es oportuno 
establecer un ordenamiento de 
la pesca marítima y continental 
en Colombia.
otras prioridades de la ley
Es indudable que la pesca cumple 
un papel social importante para el 
país. Aproximadamente, un 1,5 mi-
llones de colombianos derivan su 
sustento de la actividad pesquera 
en forma directa o indirecta, tanto 
extractiva, artesanal e industrial. 
Sin embargo, las condiciones 
de vida y el nivel de ingresos de 
quienes viven de ella son inequita-
tivos. Por eso, la ley que se tramita 
en el Congreso debe asumir esta 
situación y contemplar alterna-
tivas que favorezcan la actividad 
pesquera (especialmente la artesa-
nal), a través de la creación de me-
canismos que permitan desarrollar 
una pesca sustentable, manejable 
en el tiempo y sostenible. 
En el caso de la acuicultura exis-
te una situación compleja, debido 
a la falta de ordenamiento y nor-
mas que regulen esta actividad. En 
efecto, se han presentado enormes 
pérdidas por sobreproducción en 
algunas represas, lo cual redunda 
en grandes problemas ambienta-
les y enormes pérdidas materia-
les. Por tanto, para evitar futuros 
problemas ambientales de gran 
envergadura, es imperioso que la 
nueva legislación considere ambos 
aspectos. 
Otro factor que resulta esen-
cial es el costo de los insumos, 
alimentos, combustibles, artes 
de pesca, embarcaciones, etc., 
que desborda la capacidad real 
de los pescadores y acuicultores 
nacionales. Por tanto, es necesario 
crear un mecanismo de carácter 
gubernamental que facilite el 
acceso en condiciones favorables.
Con respecto al manejo pos-
captura o poscosecha, hay que 
precisar que no existen estaciones 
técnicamente adecuadas y sufi-
cientes en el país para el acopio 
y almacenamiento de la pesca 
capturada. Esto ha significado 
grandes pérdidas económicas, 
especialmente para los pescado-
res artesanales.
En ese sentido, resulta priori-
taria la creación de una verdadera 
red de acopio con disponibilidad 
de frío adecuado, que garantice el 
manejo óptimo de este insumo 
alimenticio. Además, debe estar 
sustentada por las normas iso y 
haccp (Análisis de Peligros y Pun-
tos Críticos de Control, por sus 
siglas en inglés), para garantizar 
un producto de excelentes cuali-
dades nutricionales e higiénicas que posibiliten su 
exportación, lo que redundaría en beneficios para 
los pescadores y acuicultores nacionales.
más valor de los subproductos
Una nueva ley de ordenamiento pesquero también 
debe contemplar la creación de empresas de pro-
cesamiento, que ofrezcan al consumidor productos 
de valor agregado.
Se estima que entre el 40 % y el 50 % de los recur-
sos de origen hidrobiológico son desaprovechados, 
lo cual genera enormes problemas ambientales, 
como contaminación, epidemias y enfermedades 
que afectan las comunidades. 
Esta condición se mitigaría con empresas de base 
tecnológica que permitan transformar los subpro-
ductos en materias primas o productos terminados, 
como alimentos para el ser humano y animales, 
medicamentos, productos técnicos, cosméticos, 
artesanías, etc. De esta forma, se logrará una mayor 
actividad pesquera y acuícola, un mejor control 
ambiental y considerables ingresos económicos 
para las comunidades involucradas en este tipo de 
actividades.
Para que Colombia registre un crecimiento im-
portante en la actividad pesquera y logre desarrollos 
de alta incidencia en la región, como los alcanzados 
por algunos países vecinos, necesita altos niveles de 
industrialización. Por eso, el país debe aprovechar 
la oportunidad para diseñar una hoja de ruta que le 
permita alcanzar este propósito, a través de la ley 
establecida en el Congreso.
cada colombiano consume cerca de cinco kilos de pescado al año, muy por debajo del promedio mundial, de 18 kilos.
foto: archivo Unimedios
desarrollo rural 
Producción acuícola en máximos históricos
El informe del Estado Mundial de la Pesca y la Acuicultura, elaborado por la Organización de las Naciones Unidas 
para la Agricultura y la Alimentación (fao), indica que entre 2000 y 2012 la producción acuícola aumentó una tasa 
media anual de 6,2 %, esto es de 32,4 millones a 66,6 millones de toneladas. En ese período, el ritmo de crecimiento 
fue relativamente mayor en África (11,7 %) y en América Latina y el Caribe (10 %). Chile y Brasil son los países donde 
la producción ha mejorado de forma considerable en los últimos años.
marzo 2016 | 9 Periódico– N.º 197 – Universidad Nacional de Colombia
palabras clave: bosques, defo-
restación, servicios ecosistémicos. 
Consúltelas en www.unperiodico.
unal.edu.co
Medioambiente
Es imperativo parar la deforestación
GErmáN pOvEdA JArAmILLO*, profesor titular, Facultad de Minas
Universidad Nacional de Colombia Sede Medellín
El aumento de la frontera agrícola y 
ganadera, así como la minería, están 
destruyendo los bosques colombia-
nos. Su creciente pérdida tiene una 
influencia directa en variaciones 
climáticas como el actual fenómeno 
de El Niño. La regulación hídrica, la 
captura de carbono, el control de la 
erosión o el albergue de la biodiver-
sidad, son los servicios ambientales 
necesarios para formar parte del 
capital natural del país.
De acuerdo con información del Global 
Forest Watch (2014), en 13 años, Colombia per-
dió 2’822.293 hectáreas (Ha) de bosque. Particu-
larmente, las zonas del país donde ocurrió esta 
“masacre” forestal fueron Caquetá (407.556 Ha), 
Antioquia (340.222 Ha), Meta (332.109 Ha), Guaviare 
(181.518 Ha) y Santander (164.685 Ha).
Factores como la ampliación de las fronteras 
agrícola y ganadera, así como la minería, han des-
empeñado un lamentable papel protagónico en el 
proceso irracional de deforestación de los bosques 
colombianos.
Por ejemplo, comete un error monumental una 
economía que valora más un predio dedicado a 
cultivos o al ganado porque de esos usos se puede 
extraer rentabilidad financiera en el corto plazo. 
Basar el desarrollo de un país en esta apreciación 
es desconocer el verdadero valor económico de los 
ecosistemas (tal como lo definen las Metas de los 
Ecosistemas del Milenio), entre ellos, los bosques 
naturales.
Entre los servicios ecosistémicos que prestan se 
encuentran la regulación de los extremos hidrológi-
cos (que aminoran la severidad e intensidad de las 
sequías y las crecientes de los ríos), el control de la 
erosión, la protección contra el calentamiento global 
por el secuestro de carbono, la evapotranspiración 
(proceso de enfriamiento), el albergue de biodiver-
sidad, el almacenamiento y reciclaje de nutrientes. 
En 1997, según un grupo de expertos, los servicios 
ecosistémicos y el capital natural tenían un valor de 
33 trillones de dólares, por ser fundamentales para 
el funcionamiento del sistema de soporte vital de la 
2001
300000
Ár
ea
 (H
a)
2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014
250000
200000
150000
100000
50000
0
Fuente: Global Forest Watch (2014). 
Serie anual de pérdida de árboles en Colombia desde 2001 hasta 2014
231427
183017
123384
255131
189724 191043
270611
233000
239399
197958
190644
229540
140760
168325
Tierra. En la actualidad, ese valor 
debe ser mucho mayor.
 efectos ecológicos
La deforestación de bosques tro-
picales causa enormes daños a 
múltiples procesos fundamentales 
que mantienen la estabilidad del 
ciclo hidrológico (circulación del 
agua en la hidrósfera y su paso de 
un estado físico a otro, mediante 
cambios de fase) y del clima re-
gional y global. 
Como consecuencia, se agu-
dizan los periodos de sequía en 
épocas de poca lluvia o las inunda-
ciones en tiempos de altas preci-
pitaciones. Sin duda, la reducción 
de la masa forestal de Colombia 
está relacionada directamente con 
los enormes impactos (sociales, 
ambientales, económicos y ecoló-
gicos) de la variabilidad del clima, 
a escalas de tiempos anuales e 
interanuales en los años recientes, 
como ocurrió durante El Niño de 
2009–2010, La Niña 2010–2011, 
y con el actual fenómeno de El 
Niño, que inició el año pasado. 
De igual manera, la defores-
tación afecta de forma negativa 
el ciclo hidrológico en regiones 
tropicales, pues un alto porcentaje 
(20 % – 35 %) de lluvia que cae en 
las cuencas de estas zonas se ali-
menta del agua, evapotranspirada 
por la vegetación y los bosques 
de la misma.
Otra consecuencia hidroclimá-
tica de la deforestación incluye 
el colapso del efecto de la bomba 
biótica de humedad atmosférica 
(hipótesis propuesta por Anastas-
sia Makarieva y Víctor Gorshkov, 
del Instituto de Física Nuclear de 
San Petersburgo), que ejercen los 
bosques para atraer los vientos 
cargados de humedad, desde las 
regiones oceánicas hasta las re-
giones continentales.
La deforestación cambia el re-
flejo de la radiación solar cuando 
cae sobre el planeta (albedo) y 
altera la formación de las nubes 
y los procesos convectivos (forma de transferencia 
de calor), los más importantes mecanismos de 
generación de la lluvia tropical. 
Asimismo, la destrucción de los bosques incide 
en la formación de núcleos de condensación de 
nubes (ncn), necesarios para transformar las 
gotículas de agua líquida en aquellas que caen 
durante la lluvia. En cuanto a la vegetación, los 
árboles producen compuestos volátiles orgánicos 
que se convierten en NCNs; es decir, los bosques 
tropicales producen el agua (vía evapotranspira-
ción) que más adelante los alimentará mediante 
la lluvia, esto hace parte de la infinita creatividad 
de la naturaleza y de la alta sofisticación biogeo-
química de las plantas.
los andes, lugar crítico para 
la biodiversidad
Los Andes y la Amazonia conforman un sistema 
acoplado que se retroalimenta mutuamente. Su 
estabilidad y funcionamiento están fuertemente 
amenazados por la deforestación y los cambios 
en los usos del suelo.
Una parte significativa de la lluvia y del agua 
que se condensa en los Andes colombianos pro-
viene del vapor de agua transportado por los 
vientos alisios desde la Amazonia y los mares 
circundantes. 
En particular, hay un alto transporte de hu-
medad desde la Amazonia, que cruza sobre los 
Andes y llega, inclusive, hasta la costa Pacífica 
colombiana. Por eso, la deforestación de la re-
gión amazónica tiene serias implicaciones en el 
suministro de agua y afecta la integridad del ciclo 
hidrológico sobre la baja Amazonia.
valorar el medioambiente
La regulación hídrica, la captura de carbono, el 
control de la erosión y el albergue de la biodiver-
sidad son algunos de los servicios ecosistémicos 
que deben incluirse en las cuentas económicas. 
Además, el hecho de preservar los bosques 
naturales no implica que nos quedemos de brazos 
cruzados frente a la exaltación de la naturaleza. 
Los páramos y bosques tropicales (lluviosos, de 
niebla, montanos, secos, etc.) están llenos de 
tesoros por descubrir, en términos de nuevos 
productos y patentes farmacéuticos, compuestos 
químicos, colorantes, odorizantes, saborizantes, 
resinas, productos genéticos, productos resultado 
de la bioingeniería, la biomimética, etc.
Para comprender el valor de toda esa riqueza 
hace falta investigación científica de punta que 
convoque a las ciencias exactas, 
físicas y naturales, además de 
la hidrología, la climatología y 
las ciencias del agua. También, 
es necesario emprender todos 
los procesos de innovación y 
desarrollo biotecnológico que 
esto demande. 
Esta es quizá la única y, tal 
vez, la última esperanza para 
que la Nación sea una potencia 
mundial económica, no obstan-
te, la deforestación está acaban-
do con ese enorme potencial del 
país; una garrafal equivocación 
y contradicción esquizofrénica 
de Colombia como sociedad. 
Por tanto, es imperativo parar 
la deforestación de los bosques 
colombianos. Para ello, es vital 
conseguir una regulación sólida 
del Estado, así como una valora-
ción de los ecosistemas y de los 
servicios ambientales, y de cómo 
estos tienen una participación 
muy importante en la economía 
tradicional. 
Es necesario cuantificar, valo-
rar y compensar a las comunida-
des en las distintas regiones del 
país por esos servicios, de mane-
ra que se mantenga la integridad 
hidroclimática y ambiental, al 
mismo tiempo que se introduzca 
la racionalidad económica de pre-
servar los bosques naturales. Así, 
esto se debe traducir en benefi-
cios económicos dignos para las 
comunidades campesinas, indí-
genas, afrocolombianas y rurales, 
partícipes de tal conservación.
* Integrante del Panel Interguberna-mental del Cambio Climático (ipcc) y 
el Comité de Dirección Científica del 
Programa Mundial de Investigación 
sobre los Ciclos Globales de Agua y 
Energía (gewex, por sus siglas en 
inglés).
marzo 2016 | 10 Periódico – N.º 197 – Universidad Nacional de Colombia
Medioambiente
El soporte científico de la reserva 
van der Hammen que ignora el alcalde
m. GONzALO ANdrAdE C., profesor asociado, Instituto de Ciencias Naturales
Universidad Nacional de Colombia
Desde el mismo día de su posesión, 
el alcalde Enrique Peñalosa ha mani-
festado que la reserva es un potrero 
lleno de vacas, con zonas de inver-
naderos, colegios, cementerios y no 
hay estudios científicos que sopor-
ten la declaratoria de la reserva. 
¿Desconocimiento u oídos sordos? 
Una breve cronología científica da 
cuenta del riesgo de edificar sobre 
este patrimonio ambiental.
la reserva thomas van der hammen fue creada 
mediante el Acuerdo 011 del 2011 y su plan de manejo 
establecido en el Acuerdo 022 de 2014, ambos, actos 
administrativos del Consejo Directivo de la Corpo-
ración Autónoma Regional de Cundinamarca, car.
Similar a las otras áreas protegidas en Colombia, 
para su declaratoria se siguió la ruta establecida 
en el Decreto 2372 de 2010, en la cual se estudian 
aspectos biológicos, sociales, económicos y cultu-
rales del territorio, que no se pueden desconocer. 
desde humboldt hasta hoy
En 1801, Alexander von Humboldt se refirió a los 
restos de canales y terrazas de los muiscas en la 
zona al norte de Bogotá, representados en grandes 
porciones de terreno descubierto. Esto permite 
suponer la presencia de extensas áreas boscosas, 
descritas luego por Manuel Ancízar en el libro 
Peregrinación de Alfa. 
Más de un siglo después, en 1962, los científicos 
Thomas van der Hammen, Roberto Jaramillo y María 
Teresa Murillo (del Instituto de Ciencias Naturales 
–icn– de la un) caracterizaron los parches del bos-
que andino en los alrededores de Suba y Usaquén; 
para ello registraron bosques naturales en Torca, la 
Hacienda Las Mercedes y el Cerro de la Conejera.
El botánico Enrique Forero realizó, en 1965, un 
estudio fitosociológico de un bosque subclimático 
en el altiplano de Bogotá, sobre 
el Bosque de las Mercedes o Ma-
lezas de Suba, único relicto de 
bosque andino bajo de planicie 
en el territorio del Distrito Capital 
y en la Sabana de Bogotá. Según 
la investigación, ocupaba un área 
cercana a las 12 hectáreas y habría 
perdido cerca de 25 hectáreas entre 
1940 y 1965. Hoy, este importante 
bosque se reduce a 6 hectáreas 
aproximadamente.
Entre 2009 y 2010 cerca de 13 
estudios sirvieron de soporte 
para la declaratoria de la reserva. 
El primero, sobre distribución 
y características de los suelos, 
realizado por Ricardo Siachoque 
del igac, encontró que en su 
mayoría son antrópicos (cons-
truidos por los muiscas), ricos en 
materia orgánica y en productos 
minerales derivados de cenizas 
volcánicas debido a los vientos 
en las erupciones pasadas de 
la Cordillera Central. Asimis-
mo, son excepcionales para la 
agricultura y se consideran los 
mejores del país. 
Las aguas freáticas, los sedi-
mentos superficiales y su inte-
racción con los suelos fueron es-
tudiados por el investigador de 
la Universidad Nacional, Sergio 
Gaviria, Luz Marina Cabrera y 
Alfonso Romero de la Universidad 
de Ciencias Aplicadas y Ambienta-
les (udca). En la zona de planicie, 
como resultado de la exploración, 
las aguas subterráneas mantienen 
niveles muy cercanos a la super-
ficie, aun en épocas de sequía, y 
aumentan la productividad de los 
suelos y la diversidad de los eco-
sistemas. Por lo tanto, la idea de 
edificar en esta zona y construir un 
circuito de parques sería calami-
toso, pues sepultaría este geoeco-
sistema extraordinario y los flujos 
de agua acumulada en el subsuelo, 
que ayudan a descontaminar el río 
Bogotá, desaparecerían.
Asimismo, son relevantes las 
investigaciones sobre clima local 
y sus interacciones regionales, del 
geógrafo de la un Daniel Pabón; 
coberturas vegetales y sus diná-
micas ecológicas, de la bióloga de 
la un Sandra Cortés, quien señala 
la presencia de bosques, pastiza-
les y humedales con una enorme 
diversidad (486 especies nativas 
con posibilidad de aumentar a 514 
si se suman líquenes, musgos y 
hepáticas); por último, la distri-
bución y carácter ecológico de los 
anfibios y reptiles, de Laurinette 
Gutiérrez del Instituto de Estu-
dios Urbanos de la un.
riqueza en fauna e historia
En este inventario se describen 
los pequeños mamíferos, estudio 
de Francisco Sánchez y Karin Os-
bhar de la udca, quienes hallaron 
seis especies en la zona oriental 
del polígono de la reserva, que 
no están reportados en otras zo-
nas al norte de Bogotá. Durante 
el estudio sobre mariposas del 
Borde Norte de Bogotá, el zoólogo 
e investigador del icn, Gonzalo 
Andrade-C. encontró 23 especies 
de mariposas que viven dentro y 
fuera del polígono de la reserva, y 
dos especies nuevas para la cien-
cia, que solo están en ese sector 
del norte de Bogotá.
Complementa la diversidad de 
especies de la reserva el estudio 
sobre la distribución, conectivi-
dad, hábitat y ecología de las aves, 
del ornitólogo de la un Frank G. 
Stiles. El científico descubrió que 
las aves, vinculadas a los ecosiste-
mas de bosque, pastizales y hume-
dales, indican una actividad muy 
importante de conexión con los 
ecosistemas de los cerros orien-
tales y los cerros de Suba, Chía y 
Cota; igualmente, la persistencia 
de especies amenazadas, muchas 
de ellas endémicas.
El componente social, econó-
mico y cultural está representado 
por los estudios sobre Historia de 
fotos: Nicolás Bojacá/Unimedios
La reserva promueve la diversidad de especies y conecta los ecosistemas comprendidos entre los cerros orientales y el río Bogotá.
marzo 2016 | 11 Periódico – N.º 197 – Universidad Nacional de Colombia
las haciendas y los predios entre los 
siglos XVI y XIX, de Henry Santiago 
de la udca; Distribución predial e 
historia de la fragmentación entre 1941 
y 2010, de los profesores Gerardo 
Ardila y Nelson Pérez, Historia y 
análisis económico y la evaluación 
económica de propuestas alternativas, 
de Jorge Iván González, e Historia y 
análisis normativo y jurídico, autoría 
de María Mercedes Maldonado. 
Estos últimos, investigadores del 
Instituto de Estudios Urbanos 
de la un.
soportes de peso
Economistas, abogados, antropó-
logos, biólogos y demás científicos 
del proyecto, consideramos que 
la declaratoria de la reserva era 
posible y recomendable para que 
esta zona de la Sabana de Bogotá 
fuera un modelo de protección 
del ambiente, capaz de contribuir 
a la preservación de la vida y el 
bienestar humano. Asimismo, a la 
disminución de emisiones de ga-
ses de efecto invernadero; captura 
y almacenamiento de carbono; 
conectividad y mantenimiento 
de los ecosistemas regionales; 
construcción de una sociedad 
más igualitaria y democrática; y 
a la creación de un laboratorio 
para hacer más investigaciones 
sobre su naturaleza y dinámicas.
El Componente de Ordena-
miento Ambiental Reserva, dado 
en el Plan de Manejo Ambiental 
(pma) del Acuerdo 022 de 2014 de 
la car, señala este territorio como 
un modelo de trabajo colectivo 
para su ocupación y uso sosteni-
ble, con énfasis en la conservación 
y reconversión de los sistemas 
productivos hacia prácticas ami-
gables con el ambiente. 
Dentro de las estrategias desa-
rrolladas hacia la conservación, se 
define la adquisición de áreas de 
interés público para la recupera-
ción de ecosistemas deteriorados, 
la conectividad y tránsito de es-
pecies entre los cerros orientales, 
el río Bogotá y los demás ecosis-
temas de importancia regional, 
como el bosque de las Lechuzas, 
el humedal Torca Guaymaral, el 
bosque de Las Mercedes, cerro 
Majuy en los municipios de Cota 
y Chía.
De esta manera, la reserva se 
constituye en un espacio estraté-
gico para los habitantes de Bogotá 
y la región, ya que provee bienes 
y servicios ambientales, y un área 
de amortiguacióny regulación 
para los fenómenos de cambio y 
variabilidad climática, como las 
inundaciones que han afectado 
históricamente a los pobladores 
de la zona. 
La producción agropecuaria 
de la reserva está fundamentada 
en sistemas de producción con 
enfoque ambiental que permiten 
aumentar la densidad y diversidad 
florística del polígono y favorece 
la conectividad ecológica. La pro-
ducción ganadera se desarrolla a 
partir de modelos silvopastoriles.
zonas de manejo ambiental
El plan de manejo aprobado por 
la car para la reserva contempla 
una zona de preservación que, por 
procesos de sucesión natural y/o 
restauración ecológica, favorece 
el desarrollo de las coberturas En la reserva se encuentran presentes más de 400 especies de líquenes, musgos y hepáticas.
palabras clave: biodiversidad, 
reserva, ecología, Bogotá. Consúl-
telas en www.unperiodico.unal.
edu.co
nativas y otros tipos de ecosiste-
mas regionales. De esta manera, 
se busca mantener las cualidades 
naturales y la diversidad bioló-
gica en su desarrollo evolutivo; 
además de evitar la intervención 
humana.
Para la preservación se cuenta 
con los sistemas hídricos (hume-
dales naturales y la quebrada La 
Salitrosa), la vegetación natural 
y seminatural representada en 
bosque secundario, matorral y ve-
getación de ronda y los canales o 
cauces artificiales, probablemen-
te revestidos, construidos para 
conducir las aguas lluvias al río 
Bogotá o al humedal Guaymaral. 
La zona de restauración del 
plan corresponde a la franja de 30 
metros, localizada cerca al cerro 
La Conejera y el costado oriental 
del polígono, en la localidad de 
Usaquén contra la Reserva Fo-
restal Protectora Bosque Oriental 
de Bogotá. Allí existen unidades 
de manejo que corresponden al 
corredor ecológico sobre el área 
del nacimiento de la quebrada 
La Salitrosa; también, cobertu-
ras exóticas e invasoras como 
plantaciones forestales y cercas 
vivas con especies exóticas, como 
pinos, cipreses, eucaliptus, aca-
cias y zonas invadidas por retamo 
espinoso y liso.
El suelo de protección por 
riesgo corresponde a terrenos en 
condición de riesgo alto y medio 
asociado a la degradación, de-
bido a fenómenos de remoción 
de suelo en masa o condiciones 
de amenaza alta por inundación. 
Entre tanto, con los conectores 
ecológicos, se busca articular 
funcionalmente la reserva y la 
estructura ecológica regional, para 
contribuir al equilibrio ambiental 
de la ciudad y la región. 
conectividad ecológica 
Para el manejo de la reserva, se 
considera igualmente una zona 
de uso sostenible que incluye 
los espacios para adelantar acti-
vidades productivas y extractivas, 
compatibles con los objetivos de 
conservación. Por ello, en las áreas 
es importante utilizar los compo-
nentes de la biodiversidad de un 
modo y a un ritmo, para evitar 
su disminución o degradación a 
largo plazo. 
Finalmente, el Acuerdo car 
16 de 1998 establece una zona 
de protección de paisaje o área 
de manejo especial, declarada 
como monumento digno de con-
servación por albergar un valor 
histórico, cultural y paisajístico. 
En la reserva concierne a la Casa 
Hacienda La Conejera y su inme-
diato terreno perimetral, ubicados 
en el lote Barajas Norte de la loca-
lidad de Suba, declarados por el 
Ministerio de Cultura como Bien 
de Interés Cultural del Ámbito 
Nacional (Resolución 1640 del 24 
de noviembre de 2004).
Si se desarrolla el proyecto 
Ciudad Norte, propuesto por el 
alcalde Enrique Peñalosa, que 
implica construir 494.000 vi-
viendas en 5.924 hectáreas, que 
corresponden a las 1.395 de la 
reserva, afectará el objetivo de la 
estructura ecológica principal, el 
cual busca sostener y conducir los 
procesos ecológicos esenciales, 
que garanticen la conectividad 
ecológica y la disponibilidad de 
servicios ambientales en todo 
el territorio, así como elevar la 
calidad ambiental.
en esta zona se han realizado 51 estudios, 35 entre 2009 y 2016 por parte de la udca, y 13 para la declaratoria de la reserva.
marzo 2016 | 12 Periódico – N.º 197 – Universidad Nacional de Colombia
Ciencia
& Tecnología
Hallan en Gorgonilla evidencias de 
meteorito que extinguió a los dinosaurios
vANEssA CArdONA, Unimedios Bogotá
Viene de la página 1
Aunque se han encontrado rastros de estas par-
tículas en todo México y el sur de Estados Unidos, 
66 millones de años después, se registraron frag-
mentos en Suramérica y el Pacífico Oriental, en la 
isla de Gorgonilla. 
El principal artífice de este hallazgo es Hermann Da-
río Bermúdez, aspirante a doctor del Departamento de 
Geociencias de la Universidad Nacional de Colombia e 
investigador de la empresa colombiana Paleoexplorer, 
que financió todo el trabajo. Las partículas halladas 
son de dos milímetros, tienen forma de una gota, al 
verlas con microscopio parecen canicas miniatura 
y, lo más sorprendente para los investigadores, se 
preservan los materiales originales.
“Estas esferulitas estaban originalmente forma-
das de vidrio, pero en la mayoría de sitios donde 
han aparecido, los minerales se han transformado 
y convertido en arcilla, por ello no quedó rastro 
del material original del impacto. En Colombia, en 
cambio, conservan la forma y composición inicial, 
están perfectamente preservadas y el 90 % todavía 
contienen vidrio”, anotó el investigador.
Se sabe que el meteorito cayó en forma diagonal 
y chocó de sur a norte, por ello han encontrado 
depósitos de los restos muy cerca del norte de Amé-
rica, pero nunca hacia la parte sur del continente. 
foto: costesía Hermann Darío Bermúdez
para encontrar las esferulitas, se hicieron observaciones en un afloramiento de más de 100 metros de altura.
El estudio de estas pequeñas esferas permitirá 
conocer cómo era el comportamiento geológico de 
la región de Suramérica, ubicada en la parte baja de 
Chicxulub, el punto de la colisión.
La energía del impacto fue 10.000 veces todo el 
arsenal atómico del mundo que estalla en un solo 
punto. Las investigaciones adelantadas demues-
tran que dio lugar a un terremoto de magnitud 13; 
sin duda, uno de los más fuertes que existió en la 
historia.
Según el geólogo Bermúdez, para la época del 
impacto se cree que Gorgonilla estaba a más de 
3.000 kilómetros de distancia del epicentro. Así 
que, el terremoto provocó que todas las capas 
de roca se mezclaran de una forma tan fuerte 
que el registro geológico quedó 
alterado.
“En las investigaciones se afir-
ma que el piso se movió cerca 
al punto de impacto más de 10 
metros en la vertical; por ello, 
en Gorgonilla se ven las capas 
deformadas debido al terremoto. 
Si hasta allí se sintió, significa que 
la tierra tembló como nunca antes 
se había registrado”, agrega.
descubrimiento mundial
El hallazgo de estas partículas sur-
gió de la curiosidad del geólogo 
por encontrar rastros de este me-
teorito en Colombia. Desde 2004, 
cuando estudiaba en la Universi-
dad Autónoma de México, revisó 
toda la literatura publicada sobre 
el tema y vio varias muestras de 
las esferulitas encontradas por 
todo el territorio mexicano.
En el 2013, su colega Jenny Gar-
cía, geóloga de la Universidad de 
Caldas, le comentó que varios 
estudiantes visitaron la Isla de 
Gorgonilla y captaron pequeñas 
muestras de un material desco-
nocido. Hermann D. Bermúdez 
intuyó que estas eran las primeras 
pistas de un descubrimiento que 
podía cambiar la historia de la 
formación de la Tierra conocida 
hasta el momento. De manera que 
conformó un equipo para iniciar 
la investigación.
Para ello solicitaron los permi-
sos respectivos en Parques Natu-
rales, proceso que tardó nueve 
meses en ser aceptado debido 
a que la isla casi siempre es visitada por biólogos, 
las autoridades no entendían lo que los geólogos 
estaban buscando.
“Tuvimos que contar varias veces cuál era el 
trabajo que íbamos a desarrollar. Explicamos que 
las muestras se sacarían con un martillo, pero 
nos dijeron que eso podría espantar a las aves 
y afectar los nidos. Al final aceptaron porque 
nuestras observaciones serían en la

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