¿Cuál era el castigo por vestir de púrpura en la antigua Roma?

La historia del púrpura es mucho más interesante de lo que la mayoría imagina. El tinte púrpura era muy caro, valía su peso en oro y era muy raro. Esto significaba que solo los hiperricos podían permitirse mucho tinte púrpura y, por lo tanto, el púrpura se usaba para representar a la monarquía.

Durante la mayor parte de la historia romana, podías vestir de púrpura sin castigo. Sin embargo, usar mucho púrpura se consideraría llamativo, como alguien que usa un traje de oro sólido hoy.

El púrpura se incluyó en la "toga praetexta" que usaban los niños ciudadanos varones y los miembros de alto rango del Senado. Estos eran Togas blancos con una franja morada, lo que significa su santidad bajo la ley y su conexión con la monarquía.

La toga "más rica" ​​era la "toga picta" que usaban los generales romanos durante un triunfo. Estas Togas eran de color púrpura sólido con un contorno dorado, lo que las hacía valer una pequeña fortuna. Durante el gran desfile del Triunfo, el General Triunfal usaba esta toga y se pintaba la cara de rojo. El rostro representa al Dios de la Guerra y la toga representa la autoridad. El mensaje que se transmite aquí es bastante obvio.

Cuando llegamos a la Roma imperial, las cosas han cambiado. El púrpura se convirtió en el color de los emperadores y solo lo usaba el emperador o aquellos a los que les permitía usar púrpura como los funcionarios de alto rango y ciertos guardias.

Usar púrpura podría considerarse traición y conducir a la ejecución. Esto variaba según el Emperador, pero en general, no era una buena idea vestir de púrpura.

Los bizantinos también estaban obsesionados con el púrpura, continuando la tradición desde sus raíces romanas. Además, a la iglesia católica también le gustaba el morado.

Todo esto simplemente se debe a la rareza del tinte púrpura. Solo los ricos podían permitírselo y, por lo tanto, solo los ricos lo usaban.