¿En teoría es posible comunicar dos computadoras cuánticas con el entrelazamiento cuántico para transmitir información más rápido que la velocidad...

No se puede transmitir información a velocidad mayor que la de la luz con el entrelazamiento cuántico ni con ningún otro procedimiento. Para utilizar el entrelazamiento cuántico para enviar información se debe utilizar, además del entrelazamiento, lo que se conoce como un canal clásico. O sea, el remitente tiene que enviar un mensaje clásico (por email, o teléfono, o cualquier vía clásica) para poder complementar la información que envía al destinatario. Es lo que se conoce como teletransportación cuántica. Por otra parte, por el momento, el entrelazamiento cuántico tiene utilidad solo cuando se produce entre dos o unas pocas partículas. No parece que se pueda usar ventajosamente el entrelazamiento entre cuerpos macroscópicos.

Aquí te mando un fragmento de mi libro “A ciencia cierta” en el que explico con un poco más de detalle:

“Un resultado como este (entrelazamiento cuántico) no tiene símil en la física clásica (ni en nuestro mundo cotidiano) en la que si queremos obtener algún efecto en un objeto a partir de algo que le ocurra a otro distante, es necesario esperar a que lo creado, hecho o modificado en uno, se propague de alguna manera hacia el otro. Lo más rápido que puede propagarse alguna información es a 300 mil kilómetros por segundo, o sea a la velocidad de la luz, pero no instantáneamente. … Einstein llamó a este efecto “acción fantasmal a distancia”. Sin embargo, debe notarse que el entrelazamiento no implica transferencia instantánea de información pues al medir una de las partículas entrelazadas no se puede saber qué valor de la propiedad medida se va a imponer (es aleatorio), ni, por tanto, qué valor se va a transferir a la pareja entrelazada…

Si lo que queremos es transmitir información hay que usar la teletransportación. El procedimiento (obviando los complicados detalles técnicos) es más o menos así. Supongamos que cada uno de nuestros personajes, Alicia y Basilio, tiene uno de los fotones de una pareja de fotones entrelazados a los cuales podemos llamar A y B, respectivamente. A está en poder de Alicia y B en poder de Basilio. Están entrelazados de forma tal que si un fotón tiene polarización vertical el otro debe tener polarización horizontal, por ejemplo. Hay un tercer fotón que es el que Alicia quiere teletransportar a Basilio al que llamaremos X. Lo primero que debe hacer Alicia es entrelazar el fotón A (que es el que está a su vez entrelazado con el de Basilio) con el fotón X. Luego debe hacer una medición sobre sus fotones (A y X) y mandarle a decir a Basilio el resultado, o sea, los tipos de polarización (vertical u horizontal) que obtuvo para sus dos fotones. Esta información la manda clásicamente, no puede ser instantánea, pues ninguna información se puede enviar a mayor velocidad que la luz. Con esta información Basilio sabrá cómo tiene que poner su analizador de polarización para que su fotón B se convierta en una copia idéntica de X. Luego de estas operaciones el fotón X ya no está en su estado inicial; ese estado lo tiene ahora el fotón de Basilio. Por eso se dice que se ha teletransportado el fotón X que estaba inicialmente en manos de Alicia hacia Basilio, que ahora no tiene exactamente el mismo fotón X, pero tiene uno exactamente igual. Es interesante en este proceso, que ni Alicia ni Basilio, saben cuál es el estado del fotón objeto de la teletransportación. También hay que notar que el estado del fotón X no se ha clonado, cosa que no permite hacer la física cuántica. El fotón de Basilio es, luego de la teletransportación, una copia exacta del fotón X que tenía Alicia, pero el fotón X ya no tiene las propiedades que tenía antes.”