En caso de que Dios exista, ¿creen que exista la posibilidad de que me esté castigando por ser ateo y promover el ateísmo?

Si un niño pequeño tiene una condición patológica un buen padre lo llevará con el medico este hará un diagnostico y determinara que lo mejor para el niño es administrar un medicamente que incidentalmente es muy amargo.

El niño podrá pensar que es un castigo injusto, pero solo es algo que se hace por su bien.

Un niño pequeño quizá odie ir a la escuela, pero su padre responsable y bueno, igual lo lleva, nuevamente el niño podrá pensar que su padre es injusto malo perverso insensible a su dolor pero también es algo que el padre hace por el bien del niño.

Los hijos llegan a la mayoría de edad y toman decisiones por su propia cuenta, cuando un hijo decide alejarse de su padre, dejar de hablarle, dejar de visitarlo, ignorarlo etc.

El padre sabio sabe que no tiene sentido intentar obligar a su hijo a estar con él, y esperara que el hijo cambie de opinión para que estén juntos de nuevo simplemente por que ama al hijo.

El padre bueno también posee riquezas eternas sin limite (son espirituales) y como ama a su hijo quiere que este herede para que tenga una vida plena, pero si su hijo ha sido engañado y no puede ver el valor de lo que esta perdiendo, pues rechazara su herencia, nuevamente el padre respetara las decisiones de su hijo aun si estas le causan dolor.

Hay leyes espirituales que se cumplan si eres creyente o no, por ejemplo la ley de la "Siembra y la cosecha" lo que siembres cosecharas si no amas a las personas que te rodean terminaras solo y sin amor y el que no tiene amor es como una planta marchita.

Si no perdonas llevaras una carga pesada que aplastara tu alma, estarás encerrado en una cárcel que te evitará progresar.

Eres un ser espiritual lo creas o no y tu alma y tu espíritu estan sujetas a leyes espirituales que se cumplirán las creas o no.

Todos tenemos una hambre de amor y el único amor que puede satisfacer por completo esa hambre es el amor de Dios si no lo recibes, si no te alimentas de el intentaras satisfacer tu hambre con dinero, poder, sexo, placeres y cuando descubras que nada de eso te llena, desarrollaras adicciones y serás esclavo de ellas. Hasta que le permitas al Dios vivo que te haga libre nuevamente.