La otra vertiente sería la de poder observar-interpretar, a qué y cómo juega el niño. El niño elije juguetes y realiza acciones con los mismos, al ...
La otra vertiente sería la de poder observar-interpretar, a qué y cómo juega el niño. El niño elije juguetes y realiza acciones con los mismos, al mismo tiempo que se observa esto se tiene en cuenta lo motor, verbal y cognitivo. Dependiendo del niño a veces un juego se conecta con otro, otras veces se producen cambios bruscos, o se termina uno y se comienza con otro, o se cansa, o se interesa por otros materiales y sigue con otra configuración. Se observa también el contenido simbólico que se expresa en el juego. Es en el ámbito de movimiento, gesticulación, habla y juego donde se organiza el conflicto, se expresan y actualizan vivencias y se articulan sentidos a los que hay que prestar atención.
Compartir