Ahora bien, se puede percibir que, en términos generales, los informantes claves cuentan con competencias emocionales básicas y fundamentales para el ejercicio de su componente pedagógico como docente de pedagogía infantil. Realizan un recorrido crítico por su experiencia de vida, en el que relatan cómo vivieron y superaron las circunstancias a la que se vieron obligadas por cuenta de una condición que paralizo al mundo entero. En sus relatos, consideran la relevancia de las emociones como eje del desarrollo como ser humano, como persona, como ciudadano del mundo y como gestores de cambio de una generación expuesta a circunstancias cambiantes a un ritmo acelerado en un mundo cada vez más exigente frente a las responsabilidades que como individuos se asumen en corresponsabilidad con el planeta.