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Preparacion Parcial Parte 1

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Preparación para el parcial - primera parte
Los desafíos de la inclusión masiva – Ines Dussel y Myriam Southwell
La educación primaria fue pensada para toda la población, tanto con sus problemas, contradicciones, con una organización institucional que posibilitaría su alcance masivo y daría una forma específica la pretensión de igualdad. En cambio, la educación secundaria o media se pensó como una educación para pocos, que solo estaba destinada a aquellos sujeto s pertenecientes ciertos sectores sociales y con una formación que la conectara con la educación universitaria. Cabe mencionar que hubo aquellos que buscaron superar esta limitación y quisieron conectar la escuela con otros sectores, otros saberes, otras prácticas sociales.
Hablar de educación secundaria es hablar también de las históricas reformas pensadas para este nivel que se han realizado durante los últimos 15 años. Pensar el para quien era la escuela, a quien incluir y para qué lugar social.
Estos interrogantes llevaron al plante de un modelo de educación secundaria mucho mas autónomo, que se alejara del modelo europeo, que trabajara con los jóvenes no en una relación de subordinación, que incluyera ciertas adaptaciones al espacio local.
En ese sentido, la escuela media hoy se ha diversificado en instituciones con cierta especialidad. Se han desarrollado escuelas comerciales, agro técnicas, de artes, escuelas industriales integrantes de empresas públicas y privadas. A esto habría que sumarle las diferentes variantes que abrió la implementación de polimodales, la peculiaridad de los énfasis de cada jurisdicción y la característica distintiva generada en un mismo lugar donde se da dicta enseñanza primaria y secundaria.
Esto se hizo evidente en el continuo crecimiento que tuvo este nivel en cuanto a cantidad de establecimientos y al número de alumnas y alumnos que se van sumando. Todo esto a la par de la presencia de numerosos problemas tales como la dificultad de permanencia, problemas de convivencia, que terminan en el abandono educativo. Se podría decir que en la medida en que el sistema creció más, también expulso más.
Las continuidades en la escuela secundaria, pareciera que se relacionan con algunas opciones de vida de los jóvenes, coartando sus lugares como destinatario de este nivel de enseñanza. 
Incluir lo de trayectorias
Frente a este desafío, la propuesta es desarrollar una escuela más inclusora, sustentada en el autoexamen que permita volver a pensar que es lo que se espera de los alumnos/as y como poder albergarlos con respeto y que no subestimen su acceso a los saberes. No se trata de proponer un retorno a un modelo de escuela que ya ha mostrado sus límites. Sino más bien, se trata de propiciar un vínculo renovado con la sociedad y la cultura. En la escuela que conocemos ninguno de los saberes, contenidos y actividades han sido emancipadores, inclusores o igualitarios. Por lo que el desafío se enmarca más que anda en una construcción de la escuela media que no reactive las viejas formas de homogenización, sino que apunte al desarrollo de un continente plural. 
Preguntas sobre el secundario para todas y todos. Emilio Tenti Fanfani
La argentina decidió la obligatoriedad de la enseñanza media. Durante las ultimas décadas, la cobertura del nivel medio tendió a crecer, independientemente de su obligatoriedad legal. Todo indica que, la mayoría de las sociedades de mediano desarrollo, los adolescentes están cada vez mas escolarizados. Sin embargo, escolarizar a los que todavía están afuera del colegio no va a ser fácil. Por algo no están escolarizados o les cuesta terminar la enseñanza media. Sabemos que para tener éxito en la escolarización se requiere determinadas condiciones sociales pedagógicas.
Para estar en condiciones de satisfacer necesidades de aprendizaje hay que tener en cuenta otras necesidades. Esto es una cuestión de sentido común. Todavía no tenemos una oferta diferenciada como para atender la diversidad de condiciones de vida, de cultura, de expectativas, de intereses y demandas de las nuevas generaciones. Pero la obligatoriedad que ordena la ley cambia el sentido mismo del secundario. Ya no podrá ser el mismo que antes: seleccionar a los mejores. Hoy todos deben entrar y terminar el colegio. Por lo tanto, necesitamos darle otro sentido, otra finalidad social.
Para poder reflexionar sobre esto, podemos partir de preguntas útiles. En efecto, ¿Qué finalidad debe cumplir un secundario que es para todos?, ¿la nueva secundaria es el ultimo piso de la educación básica y obligatoria?, si es así ¿Cómo debería articularse con la primaria y la inicial? Ahora bien, si después de la secundaria viene la universidad y los estudios superiores en general ¿Cómo se articula también ellos? Podríamos decir entonces, ¿Cómo se articula la cultura común con la atención a la diversidad de preferencia de los jóvenes y sus familias?, ¿Qué es lo que hay que aprender en la escuela secundaria obligatoria?, ¿Qué es mejor, continuar con la lógica de materias/disciplinas o las áreas temáticas, o como encontrar un equilibrio entre ambos enfoques?
Estas y otras preguntas deben ser necesariamente planteadas para enfrentar un éxito la escolarización masiva de los adolescentes en la argentina. Sabemos que existe una distancia creciente entre la cultura de los adolescentes y la cultura escolar, que muchas veces se manifiesta en los síntomas de “desinterés” y “apatía” por los temas del programa escolar.
Los docentes se quejan además de una débil disposición al esfuerzo y al estudio por parte de muchos alumnos, independientemente de sui procedencia social. Por lo tanto, mas allá de la obligatoriedad, es preciso preguntarse ¿Cómo hacer atractiva o interesante la oferta escolar para adolescentes, sin caer en una inútil demagogia o facilismo juvenilista?
1. La Práctica Docente
Para Elena Achilli la formación docente puede comprenderse como un proceso en el que se articulan prácticas de enseñanza y de aprendizaje orientadas a la configuración de sujetos docentes/enseñantes. La práctica docente se concibe en un doble sentido: como práctica de enseñanza, propia de cualquier proceso formativo y como apropiación del oficio de docente, cómo iniciarse, perfeccionarse y/o actualizarse en la práctica de enseñar.
Como en toda acción práctica situada, este campo curricular es responsable por el desarrollo de la acción a través del análisis, la reflexión y la experimentación práctica contextualizada. Al hacerlo, la formación en la práctica resignifica los conocimientos de los otros campos curriculares, a través de la participación e incorporación progresiva de los estudiantes en distintos contextos socioeducativos. La formación de formadores debe procurar la formación de sujetos competentes, contribuyendo a la construcción de la mirada del sujeto enseñante, como concepto fundante en la constitución del oficio de docente. El punto de vista desde el cual el docente entiende la educación y su entorno problemático, es determinante de prácticas docentes.
En este marco, la práctica debería constituirse en un espacio que permita a los estudiantes, al mismo tiempo que dar sus primeros pasos en la tarea docente, comprender a la institución escolar como un escenario complejo, atravesado por múltiples dimensiones de la vida social (CONTEXTO). Este aprendizaje será posible a través de una inmersión graduada en la práctica;.
Denominamos CONTEXTO al conjunto de factores tanto externos, como el medio físico y social donde se inserta la escuela, las características y demandas del ambiente socio-económico de los educandos y sus familias, su radio de influencia y relación con otras instituciones, etc.; las cuales impactan en la escuela y condicionan de alguna manera su gestión y el accionar del plantel docente. Así como variables internas, tales como los recursos, infraestructura edilicia, actores escolares, etc. Las personas realizamos lecturas del contexto que permiten una comprensión de lo que sucede y una reconstrucción histórica destinada a arrojar claridad sobre ese presente(Prieto Castillo). Dichas lecturas están cribadas (filtradas) por la percepción; la cual refiere a una serie de operaciones que implican interpretar aquello que miramos a través de las representaciones que se generan al interior de la propia cultura 
La práctica docente, por lo tanto, está influenciada por múltiples factores: desde la propia formación académica del docente hasta las singularidades de la escuela en la que trabaja, pasando por la necesidad de respetar un programa obligatorio que es regulado por el Estado y las diversas respuestas y reacciones de sus alumnos.
Puede decirse que la práctica docente está determinada por el contexto social, histórico e institucional. Su desarrollo y su evolución son cotidianos, ya que la práctica docente se renueva y se reproduce con cada día de clase.
Esto que hace un docente deba desarrollar diferentes actividades simultáneas como parte de su práctica profesional y que tenga que brindar soluciones espontáneas ante problemas impredecibles. En otro sentido, es posible afirmar que la práctica docente consiste en la función pedagógica (enseñar) y en la apropiación que cada maestro hace de su oficio (formarse de manera continua, actualizar sus conocimientos, asumir ciertos compromisos éticos, etc.). Ambas cuestiones, a su vez, reciben la influencia del escenario social (la escuela, la ciudad, el país).
La práctica docente, en definitiva, se compone de la formación académica, la bibliografía adoptada, la capacidad de socialización, el talento pedagógico, la experiencia y el medio externo. Todos estos factores se combinan de diferente manera para configurar distintos tipos de prácticas docentes según el maestro, que además provocarán diversos resultados. A lo largo de muchas décadas se sostuvo la idea de que para aprender una práctica bastaba con imitar a aquéllos que tenían experiencia en la misma; sin embargo, gracias a un mayor entendimiento de los inconvenientes que pueden tener lugar durante el ejercicio de una práctica y a los avances en el campo teórico, surgió una estructura de formación más amplia y flexible.
Observando la historia de la docencia, podemos distinguir los siguientes tres enfoques de la práctica docente:
* tradicional: el enfoque tradicional defiende un sistema en el cual los futuros docentes se formen a nivel teórico durante unos años y que, finalmente, se aventuren a poner en práctica sus conocimientos frente a una clase real, bajo la supervisión de un experto. En otras palabras, considera que existe una sola manera de llevar a cabo el trabajo de un maestro, que no debe verse afectada por su instinto o por decisiones espontáneas;
* constructivista: ante ciertas situaciones inesperadas, los docentes deben poder actuar según su propio criterio, utilizando sus conocimientos para tomar las decisiones más beneficiosas para sus alumnos, pero sin olvidar que se trata de personas, de seres con necesidades y trasfondos individuales, y no de variables en un ejercicio cuya solución ya ha sido hallada por un supervisor. Este enfoque incorpora la racionalidad práctica para abrir las puertas a una visión más abierta y flexible de la realidad;
* constructivista-crítico: desde finales del siglo XX, una serie de investigaciones en el campo de la enseñanza se centraron en la importancia de aplicar el criterio antes de actuar. Este enfoque representa un verdadero quiebre con el tradicional, ya que invita a los docentes no sólo a pensar antes de pasar a la práctica, sino a reflexionar luego de haberlo hecho para evaluarse a sí mismos y darse la posibilidad de mejorar, de elaborar nuevas y más adecuadas técnicas de trabajo. Un pedagogo británico llamado Lawrence Stenhouse aseguró que los docentes deben convertirse en auténticos investigadores dentro del aula, para construir y moldear a cada paso su propio conocimiento.
La práctica docente y sus dimensiones Resumen: Yohana Contreras
La práctica docente supone una diversa y compleja trama de relaciones entre personas: “La relación educativa con los alumnos es el vínculo fundamental alrededor del cual se establecen otros vínculos con otras personas: los padres de familia, los demás maestros, las autoridades escolares, la DOCENTES comunidad.
La práctica docente es de carácter social, objetivo e intencional. En ella intervienen los significados, percepciones y acciones de las personas involucradas en el proceso educativo (alumnos, docentes, padres, autoridades, etc.). También intervienen los aspectos político-institucionales, administrativos y normativos, que en virtud del proyecto educativo de cada país, delimitan el rol del maestro. Maestros y estudiantes se constituyen en sujetos que participan en el proceso (no son objetos ni meros productos). De este modo, los docentes son los encargados de llevar a cabo y también de articular los procesos de aprendizaje y generación de conocimientos, de recrearlos, a través de la comunicación directa, cercana y profunda con los alumnos y las alumnas que se encuentran en el aula.
Dimensiones de la práctica docente
• Dimensión Personal: El profesor ante todo es un ser humano, por tanto, la práctica docente es una práctica humana. El docente debe ser entendido como un individuo con cualidades, características y dificultades; con ideales, proyectos, motivaciones, imperfecciones.
• Dimensión institucional: La escuela constituye una organización donde se despliegan las prácticas docentes. Constituye el escenario más importante de socialización profesional, pues es allí donde se aprenden los saberes, normas, tradiciones y costumbres del oficio.
• Dimensión interpersonal: La práctica docente se fundamenta en las relaciones de los actores que intervienen en el quehacer educativo: alumnos, docentes, directores, madres y padres de familia. Estas relaciones son complejas, pues los distintos actores educativos poseen una gran diversidad de características, metas, intereses, concepciones, creencias, etc.
• Dimensión social: La dimensión social de la práctica docente refiere a “el conjunto de relaciones que se refieren a la forma en que cada docente percibe y expresa su tarea como agente educativo cuyos destinatarios son diversos sectores sociales”
• Dimensión Didáctica: Esta dimensión se refiere “al papel del docente como agente que, a través de los procesos de enseñanza, orienta, dirige, facilita y guía la interacción de los alumnos con el saber colectivo culturalmente organizado para que ellos, los alumnos, construyan su propio conocimiento”.
• Dimensión Valoral (valórica): La práctica docente no es neutra, inevitablemente conlleva un conjunto de valores. Cada profesor, en su práctica educativa, manifiesta (de modo implícito o explícito) sus valores personales, creencias, actitudes y juicios. En definitiva, el maestro va mostrando sus visiones de mundo, sus modos de valorar las relaciones humanas y el conocimiento y sus maneras de guiar las situaciones de enseñanza, lo que constituye una experiencia formativa.
Las ideas básicas extraídas del texto “Compromiso y esperanza en educación: Los ejes transversales para la práctica docente según Paulo Freire”
a- El docente tiene que aprender a reflexionar sobres los saberes requeridos por la practica educativa, pero al mismo tiempo comprender el papel como agente social, y que mas allá de su posición política, debe procurar que sus estudiantes alcancen la autonomía del aprendizaje.
b- La investigación tiene que ser parte inherente al acto educativo, cuyo objetivo es lograr que el personal docente no se convierte en un instrumento para la transmisión de una visión fosilizada e ideologizada del mundo, aspecto propio de la globalización.
c- Una practica educativa de manera horizontal, donde el docente y el estudiante participen en igualdad de condiciones, pero con roles diferentes, por cuanto quien se forma y re forma y quien es formado se forma y forma al ser formado.
d- El aprendizaje constituye un constructo individual producto de una interacción social, afectado por las apreciaciones y valores, que individual y socialmente se le atribuyen,de manera tal que no hay aprendizaje fuera del espacio emocional al punto que las emociones son determinantes para facilitar u obstaculizar dichos aprendizajes.
e- La educación y la política permiten a las personas insertarse en el mundo para su transformación o mantenimiento, en razón de procurar mejorar la calidad de sus vidas.
f- El personal docente debe aceptar con humildad, que no tiene todo el conocimiento completo, que debe indagar por ellos todos los días, en como adquirirlo, reflexionar sobre ese conocimiento para enriquecerlo, contextualizarlo siempre para lograr darle sentido personal y compartir ese sentido con sus estudiantes.
g- Desde la ética nadie es poseedor de la verdad porque esta es una construcción colectiva que demanda respeto de los criterios que son diferentes a los que la persona posee.
4c- Frases extraídas del texto de Freire.
· “Durante el proceso de búsqueda hay momentos en que uno se detiene y se dice a si mismo: no hay nada que hacer. Esto es comprensible, comprendo que se caiga en esa posición. Lo que no comparto es que se permanezca en esa posición” (Freire, P. Pp 23)
· “Todo educando, todo educador se descubre como ser curioso, como buscador, indagador inconcluso, capaz sin embargo de captar y transmitir el sentido de la realidad” (Freire, P. Pp. 25)
· “El mundo se salva si todos, en términos políticos, peleamos para salvarlo” (Freire, P. Pp. 28)
· “¡Los niños están echando su alma afuera en el recreo y las profesoras en la sala, ajenas a esta experiencia humana esencial! (Freire, P. Pp. 36)
· “El profesor atento, el profesor despierto, no aprende solamente en los libros, aprende en la clase, aprende leyendo en las como si fueran un texto”. (Freire, P. Pp. 40)
4d- Reflexión
El Grito Manso, motiva de primeras a ser esperanzados en la búsqueda, en mantener la curiosidad a pensar de las desventuras de la vida, de las desventuras de la tarea educativa. Porque eso mantiene la convicción del docente, sobre su labor y su papel, importantísimo para sus estudiantes y para sí mismo. Enseñarlas a los jóvenes a abrir sus alas para poder volar pero al mismo tiempo, estos jóvenes recuerdan y reavivan las viejas pasiones y objetivos que el docente haya olvidado “Que tus alas aun te pueden llevar muy lejos”. No con intencionalidad, sino más bien por agotamiento, un agotamiento producto de la vida misma. Que tampoco esta mal, porque hay que saber aprender a mantener la chispa encendida a pesar de los años. 
Para ello la introducción del pensamiento horizontal en el proceso educativo permite este tipo de interacción, porque nadie conoce y es más que el otro. Cada uno desde su lugar, tiene para aportar y para aprender, educador y educando en una relación dialéctica con el saber, se van construyendo y re construyendo al mismo tiempo. Cabe señalar que la integración de estos elementos construye una trayectoria diferencial de vida que provee a cada estudiante de una visión particular del mundo, una visión construidas por su propia interpretación.

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