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Ficha_ Interaccion entre los mercados en condiciones de precios y salarios escasamente flexibles, segun el modelo IS LM - Szychowski

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Interaccio n entre los mercados en 
condiciones de precios y salarios 
escasamente flexibles, segu n el modelo 
IS-LM 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Mario L. Szychowski 
 
Abril 2016 
 
1 
 
Interacción entre los mercados en condiciones de 
precios y salarios escasamente flexibles, según el 
modelo IS-LM* 
 
1.- Introducción 
La explicación de la interacción entre los mercados de bienes, del dinero y del trabajo, según 
el modelo IS-LM, se encuentra expuesta en la gran mayoría de los manuales de 
Macroeconomía, cuando se trata de las siguientes hipótesis: precios y salarios constantes 
(caso keynesiano extremo) y precios y salarios totalmente flexibles (caso clásico). 
En cambio, cuando se trata de la hipótesis que combina precios y salarios escasamente 
flexibles (de gran relevancia para el análisis macroeconómico moderno) no se halla expuesta 
en los manuales en términos del modelo IS-LM; aunque sí en términos del modelo oferta – 
demanda. Esta es la razón por la que se realiza esta nota. 
2.- El Modelo 
2.1 SUPUESTOS SIMPLIFICADORES 
1) Excepto por razones comerciales, la movilidad externa de capitales es nula. 
2) El desgaste de los bienes de capital de la economía es nulo, por lo que la amortización será 
cero. 
3) No existen remuneraciones netas de factores del exterior. 
4) No existen transferencias corrientes netas del exterior. 
5) No existen transferencias del gobierno al sector privado; ni a los hogares ni a las empresas. 
6) No existen ahorros de las empresas.
1
 
 
*
 El autor agradece a los integrantes de la Cátedra de Macroeconomía I que han realizado comentarios 
al trabajo, especialmente al Profesor Raúl Dente; lo cual ha permitido hacer algunas aclaraciones 
marginales. También agradece al JAD, Lic. Guillermo Bellingi, por la paciente tarea de pasar el 
manuscrito a la computadora. 
1
 Los supuestos 2, 3, 4, 5 y 6 responden al deseo de aminorar la diferencia entre el ingreso real de la 
economía y el ingreso personal disponible y, así, reducir el tamaño del modelo, sin restarle relevancia 
para el caso bajo consideración. 
2 
 
2.2 LAS ECUACIONES DEL MODELO 
I) y = c + z + g + x - n 
donde: 
y = ingreso interno real, a precios de mercado ex ante 
c = consumo privado 
z = inversión privada real 
g = gasto del gobierno 
x = exportaciones 
n = importaciones 
II) c = a + β(y – t0 - t1y) 
donde: 
t0 = impuestos autónomos respecto al ingreso 
t1 = tasa impositiva 
III) z = z0 – g1i + g2Ʈ
e
 
donde: 
z0 = inversión autónoma respecto a la tasa de interés real 
I = tasa de interés nominal 
Ʈ
e
 = tasa de inflación esperada 
IV) g = g0 
donde: 
g0 = gasto del gobierno autónomo respecto al ingreso 
V) x = x0 
donde: 
x0 = exportaciones autónomas respecto al ingreso 
VI) n = n0 + n1y 
donde: 
3 
 
n0 = importaciones autónomas respecto al ingreso 
n1 = propensión marginal a importar 
VII) m0 = M/P 
donde: 
m0 = oferta monetaria real 
M = oferta monetaria nominal, constante 
P = nivel general de precios 
VIII) md = ky – hi 
donde: 
md = demanda monetaria real 
k, h = coeficientes que denotan la sensibilidad de la demanda de dinero respecto al ingreso y a 
la tasa de interés nominal, respectivamente. 
IX) m0 = md 
X) y = A f(N,K) 
 
 
 
 
donde: 
A = productividad total de los factores, constante 
N = cantidad de mano de obra 
K = stock de capital, constante 
1/d = productividad de la mano de obra
2
 
XI) N0 = f(W/P); f´W/P > 0 
donde: 
W/P = salario real; W = salario nominal 
XII) Nd = g(W/P); f´W/P < 0 
donde: 
 
2
 Nótese que 1/d decrece cuando aumenta (coeficiente técnico de la mano de obra), lo 
 
cual sucede cuando aumenta N, dado que K es constante 
𝑑 
𝑁
𝑦
 
4 
 
Nd = cantidad demandada de mano de obra. 
A su vez, tal como se adelantara, la hipótesis del modelo cabe explicitarla de la siguiente 
manera: 
W = W (salario escasamente flexible) 
3
 
P = P (precio escasamente flexible)
 3
 
Lo cual implica que ni W ni P son determinados por las respectivas oferta y demanda en el 
mercado de trabajo y en el mercado de bienes, aunque ambos precios no son ajenos a los 
desequilibrios que pudieran existir en ambos mercados. 
Consiguientemente, a fin de brindarle operatividad al modelo de referencia, siguiendo las 
pautas que se ofrecen al analizar esta hipótesis en términos del modelo oferta – demanda, se 
supondrá que los niveles de W y de P se determinan de acuerdo a las fórmulas siguientes. 
XIII) Wt = Wt-1 – Ɛ (u – u)Wt-1 + Ʈ
e
 Wt-1 + ODw 
donde: 
u = tasa de desocupación efectiva 
 u = tasa natural de desempleo 
Ɛ = coeficiente de sensibilidad de W respecto al diferencial u-u. Dicho coeficiente se supone 
nulo para el caso del modelo keynesiano extremo, igual a uno para el caso clásico y entre cero 
y uno para el caso que nos ocupa. 
Ʈ
e
 = inflación esperada 
ODw = otros determinantes del salario 
XIV) P = dW(1+ρ) + ODp 
donde: 
d = coeficiente técnico de la mano de obra (=N/y) 
ρ = mark-up 
ODp = Otros determinantes del precio 
 
3
 En los libros básicos de Macroeconomía puede verse las razones por las que esta hipótesis puede 
resultar plausible, aun en el caso en que rigieran expectativas racionales. 
5 
 
2.3 LA SÍNTESIS DEL MODELO 
Reemplazando en la ecuación I los componentes del gasto ex ante “c”, “z”, “g”, “x” y “n” por 
sus equivalentes de las ecuaciones II, III, IV, V y VI, y despejando luego la variable “y”, se 
obtiene la ecuación de la función IS, a la cual llamaremos función zs, a los efectos de no 
confundir la inversión real “z” con la tasa de interés nominal “i”, que podría producirse al 
deflactar la inversión nominal “I”: 
 
Luego, reemplazando en la ecuación IX la oferta y la demanda monetarias por sus 
equivalentes de las ecuaciones VII y VIII, y despejando la tasa de interés, se obtiene la 
ecuación de la función lm: 
XVI) 
En cuanto al mercado de trabajo, cabe señalar que así como en el caso del modelo keynesiano 
extremo el nivel de la ocupación en el corto plazo es determinado por el nivel de producción, 
que a su vez es determinado por la demanda agregada, y en el caso clásico es determinado por 
el salario real de pleno empleo, que a su vez determina la producción de pleno empleo, en el 
caso que nos ocupa N es determinada por la demanda de trabajo, que a su vez depende del 
salario real; el cual, a diferencia del caso clásico, sólo a mediano plazo tendería a resultar de 
pleno empleo. 
A propósito, la ecuación XIII implica que mientras haya un diferencial entre las tasas de 
desocupación, efectiva y natural, el W variará de un periodo a otro, con mayor o menor 
intensidad, dependiendo de las condiciones reales de la economía. 
A su vez, la ecuación XIV implica que P varía en el mismo sentido que W, pero, a valores 
razonables de “d” y “ρ”, más lentamente, tanto cuando el ingreso real se encuentra por debajo 
del nivel de pleno empleo como cuando se encuentra por encima de dicho nivel. 
2.4 EL AJUSTE DE LA ECONOMÍA 
Por “ajuste” se entiende, en esta nota, como el proceso por el cual la economía tendería a una 
situación de pleno empleo. 
En el contexto del modelo keynesiano extremo, el ajuste se lo concibe exclusivamente como 
impulsado por la demanda agregada, básicamente a través de una política económica 
𝑖 
 
𝑙
 (ky – M/P) 
6 
 
expansiva. En el caso clásico se lo concibe como impulsado exclusivamente por el mercado 
con variaciones inmediatas de los precios o salarios ante cualquier desequilibrio que pudiera 
presentarse en los mercados de bienes o del trabajo. 
En el modelo que nos ocupa, en cambio, el ajuste puede ser impulsado tanto por el mercado 
como por la política económica. Veamos primero el ajuste impulsado por el mercado y luego 
el impulsado porla política económica; sin que ello signifique que en un contexto real la 
intervención de los impulsores de ambos ajustes sean excluyentes. 
2.4.1 EL AJUSTE IMPULSADO POR EL MERCADO 
Ante todo, debe señalarse que en este caso, a diferencia del modelo clásico, al mercado se lo 
considera como imperfecto, y por consiguiente el ajuste que cabe esperar será tanto más lento 
cuanto más imperfectos sean los mercados. 
Suponiendo que las expectativas inflacionarias (Ʈ
e
) y otros determinantes (OD) de cambios en 
los precios y salarios son nulos y que la economía se encuentra en equilibrio en E1, en el 
periodo 1 (véase Fig. 3), y dado que el ingreso correspondiente, y1, se encuentra por debajo 
del ingreso de pleno empleo, yp, ello implica que la tasa de desocupación efectiva, u, es mayor 
que la tasa natural de desocupación, u , por lo que, de acuerdo a la ecuación XIII, el salario 
nominal tenderá a disminuir, pasando finalmente del nivel W1 al nivel W5, en el periodo 5. A 
su vez, el nivel de precios seguirá la misma tendencia, pasando de P1 a P5. 
Como, de acuerdo a la ecuación XIV, el nivel de precios disminuiría a una velocidad menor 
que el nivel del salario nominal, tal como se explicitara en la subsección 2.3, el salario real 
correspondiente al periodo 5, W5/P5, sería menor que el correspondiente al periodo 1, por lo 
cual el nivel de ocupación de la mano de obra aumentaría de N1 a N5 (véase Fig. 1), lo cual, a 
su vez, vía la función de producción de la Fig. 2, implicaría que el ingreso real aumentaría de 
y1 a y5. 
7 
 
Gráfico 1
4
 
 
 
4
 Aclaraciones respecto de los gráficos: a) La escala de la ordenada de la Fig. 2 es diferente a la de la 
abscisa de la Fig. 3; b) Los subíndices numéricos de las variables indican el período al que se 
corresponden sus valores; c) Dado que en el trabajo se supone competencia imperfecta, la curva Nd de 
la Fig. 1 no representa la productividad de la mano de obra, 1/d, como sería el caso si la competencia 
fuera perfecta. De la ecuación XIV, suponiendo que ODp = 0, se deduce que la referida curva 
representa a la expresión 1/d (1+ ρ), la cual, obviamente, se ubica a la izquierda de la que sería la 
curva 1/d, implicando que a igualdad del salario real, W/P, la cantidad demandada de mano de obra 
sería menor en competencia imperfecta de la que sería en competencia perfecta. 
8 
 
La pregunta es si ese mayor nivel de “y” constituiría un nuevo nivel de equilibrio transitorio. 
La respuesta es positiva, por cuanto al disminuir el nivel general de precios, de P1 a P5, la 
oferta monetaria real aumentaría (teniendo en cuenta que la oferta monetaria nominal 
permanece constante, M), por lo que la función lm1 se desplazaría hacia la derecha, hasta 
alcanzar la posición lm5 en la Fig. 3, cruzándose con la función zs en el punto E5, 
determinando así que la cantidad demandada de bienes fuera igual a la cantidad ofrecida de 
bienes, y5. 
El proceso descripto en los párrafos anteriores proseguiría mientras la economía se encuentre 
por debajo del nivel de pleno empleo, hasta alcanzar ese nivel. Eventualmente, la economía 
podría encontrarse en un nivel transitorio superior al de pleno empleo, como en E14. De 
nuevo, la tendencia sería que la economía se dirija al nivel de pleno empleo. La explicación 
del proceso de ajuste sería similar al descripto, sólo que en este caso el “y” iría disminuyendo 
porque el salario real iría aumentando, debido a que el nivel de precios iría aumentando a 
menor velocidad que el salario nominal, tal como se indicara en la sección 2.3. 
2.4.2 EL AJUSTE IMPULSADO POR LA POLÍTICA ECONÓMICA 
Se supone ahora que los otros determinantes (OD), de cambios en los precios y salarios, 
también pueden variar y que la economía se encuentra en equilibrio “transitorio” en el punto 
E1 de la Fig. 3, que corresponde al periodo 1. 
Si, a juicio del gobierno, E1 incluyera una tasa inaceptable de desempleo, podría decidir 
implementar medidas expansivas de política económica. Por ejemplo, si realizara una política 
monetaria expansiva la función lm se iría desplazando a la derecha, hasta llegar a ubicarse, 
eventualmente, en lm5, en el periodo 5, produciendo un cruce con la función zs en E5. 
A diferencia de lo que ocurría con el ajuste impulsado por el mercado, donde el nivel de 
precios P5 resultaba menor que P1, debido al exceso de la oferta agregada de bienes (OA) en 
el intervalo E1-E5, ahora P5 resulta mayor que P1. En efecto, como cada situación de equilibrio 
simultáneo en el mercado de bienes y el mercado de dinero (cruce entre las curvas de las 
funciones zs y lm) implica un punto sobre la curva de la demanda agregada de bienes (DA), el 
punto E5 representa una cantidad demandada mayor que en E1, debido ahora al exceso de la 
DA con respecto a la OA en el intervalo E1-E5. 
9 
 
De nuevo, la pregunta relevante es si también en este tipo de ajuste E5 representa un equilibrio 
“transitorio” de la economía. La respuesta es, igualmente, positiva. En efecto, dado el 
aumento de precios de P1 a P5 el salario real se reduciría de W1/P1 a W5/P5,
5
 lo cual implicaría 
que la cantidad demandada de trabajo aumente a N5 (Fig. 1) y así, vía la función de 
producción el ingreso real aumentaría de y1 a y5 (Fig. 2); por lo que se registraría una igualdad 
entre la cantidad ofrecida y la cantidad demandada de bienes. 
Si las autoridades de la política económica evaluaran que la situación denotada por el punto 
E5 resulta insuficiente para despejar el problema que originó su intervención inicial, la 
expansión monetaria, por caso, podría proseguir hasta lograr que la función lm alcance la 
posición lm10, lo cual, a través de un mecanismo similar al explicado en el párrafo anterior, 
haría que el ingreso real alcance el nivel de pleno empleo, yp. 
Si a partir de dicho nivel de “y” prosiguiera activa la política monetaria expansiva, el ingreso 
real podría alcanzar un nivel con sobreempleo, por ejemplo “y14”. Pero entonces, 
automáticamente, comenzaría a actuar con fuerza el mecanismo de ajuste impulsando por el 
mercado. 
En ese caso, el salario nominal cobraría un impulso especial, básicamente porque en la 
ecuación XIII el diferencial (u-u ) se tornaría negativo, porque aumentarían los “OD” debido 
al aumento del poder de negociación de los sindicatos y también porque, probablemente, 
aumentarían las expectativas inflacionarias (Ʈ
e
). A su vez, ese crecimiento en los salarios hace 
que el nivel general de precios aumente, aunque a menor velocidad que W, por lo que tendería 
a aumentar el salario real, a disminuir la ocupación de mano de obra y a retornar la cantidad 
ofrecida de bienes al nivel del “yp”. 
A su vez, como el aumento de P cobra intensidad, no así la oferta monetaria nominal, la oferta 
real de dinero disminuiría haciendo que la función lm14 tienda a desplazarse hasta la posición 
lm10, pero ahora en un periodo posterior al 14, digamos 18, con un nivel de precios mayor que 
P14, digamos P18, por lo que la función equivalente a la lm10 sería la lm18. Lo relevante de la 
 
5 Cabe aclarar que debido a que con motivo de esta subsección se eliminó la nulidad de la 
incidencia en el nivel de precios de otros determinantes, “ODp” en la ecuación XIV, el 
descripto exceso de la DA con respecto a la OA da lugar a que P aumente independientemente 
del nivel de W1, el cual, a su vez, eventualmente, podría aumentar inducidamente por los 
“ODw” de la ecuación XIII si es que el poder de negociación de los sindicatos en las paritarias 
se viera fortalecido con motivo de la disminución del diferencial (u - u), debido al aumento 
del ingreso real. 
10 
 
cuestión es que el referido desplazamiento de la lm provoca una disminución de la cantidad de 
la DA haciendo que se iguale con la cantidad OA, al nivel de pleno empleo, en el período 18.
6
 
Obviamente,la política monetaria no es la única factible de provocar cambios expansivos, o 
contractivos llegado el caso. A diferencia de la política monetaria, otras políticas como la 
fiscal o la cambiaria, además de la distinta eficacia que pudieran tener, según las 
circunstancias, impactarían sobre la función zs y no sobre la lm, con resultados inversos en la 
tasa de interés nominal. Por ejemplo, si se partiera del punto E1, en la Fig. 3, una política 
fiscal expansiva haría desplazar la función zs a la derecha y se cruzaría con la función lm1 a la 
derecha de E1, implicando un aumento de la cantidad de la DA; la cual, ceteris paribus, 
resultaría mayor si dicha política fuera acompañada por una política monetaria expansiva. Lo 
importante para nuestro tema es saber que el proceso de ajuste de la economía tiene la misma 
explicación que la expuesta, cualquiera fuera la política, o combinación de políticas, que se 
practicase. 
2.4.3 EL IMPACTO DE AMBOS TIPOS DE AJUSTE SOBRE LAS CURVAS DE LA OFERTA Y DE LA 
DEMANDA AGREGADAS 
Los dos mecanismos de ajuste, expuestos en las subsecciones 2.4.1 y 2.4.2, tienen su correlato 
en el modelo oferta – demanda, a través de desplazamientos de la oferta o de la demanda 
agregadas, según el caso, lo cual se ha estimado útil mostrarlo, dado que en el punto 4 del 
capítulo VII del Programa se solicita exponer la operatividad de dicho modelo bajo la misma 
hipótesis, de precios y salarios escasamente flexibles, que la considerada en la exposición 
realizada con el modelo IS-LM. 
Tratándose del ajuste impulsado básicamente por el mercado, puede verse en la Fig. 4 que el 
impacto será a través de la oferta agregada, haciendo que la misma se desplace 
paulatinamente desde la posición E1, en el periodo 1, a la posición E5, en el periodo 5 y así, 
sucesivamente, hasta alcanzar la posición E10. Si luego la economía se encontrara en la 
posición E14, en el periodo 14, arrastrada quizá por medidas de políticas desequilibrantes, el 
mecanismo de mercado haría que la oferta agregada se desplace lentamente a la posición E18, 
correspondiendo al mismo nivel de “y” que la posición E10, con la diferencia que el nivel de 
precios sería mayor, P18, y, consiguientemente, la oferta monetaria real sería menor, 
 
6
 Cabe advertir que, con el propósito de facilitar el análisis del impacto de la política monetaria 
expansiva se supuso, implícitamente, que la inversión no era afectada por el ingreso real (i. e., que z0 
en la ecuación III no era afectada por cambios de “y”); con lo cual se evitaba que la función zs se 
desplazara cuando se produjeran variaciones en el “y”, como consecuencia de aumentos en la oferta 
monetaria real. 
11 
 
implicando que la cantidad demandada de bienes y servicios habría disminuido hasta igualar 
el ingreso real de pleno empleo, yp. 
Tratándose, en cambio, del mecanismo impulsado básicamente por la política económica, el 
efecto será a través de la demanda, salvo que produjera una situación de sobreempleo. Así, 
según la Fig. 5, a partir de la posición E1, una política económica expansiva haría desplazar a 
la derecha la línea de la demanda agregada, hasta pasar por el punto de equilibrio E10, en 
correspondencia con el nivel del ingreso real de pleno empleo. 
Si, a partir de allí, el gobierno persistiera con una política económica expansiva, la misma 
podría resultar excesiva en el corto plazo, llegándose, eventualmente, a una posición como la 
E14, dando lugar automáticamente, a que el mecanismo de mercado provoque un proceso de 
ajuste similar al descripto a partir del punto E14 de la Fig. 4. 
12 
 
Gráfico 2

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