Química de los medicamentos ansiolíticos

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Química de los medicamentos ansiolíticos 
Los medicamentos ansiolíticos y antidepresivos son fármacos utilizados para tratar 
trastornos de ansiedad y depresión, respectivamente. Ambos tipos de 
medicamentos actúan sobre el sistema nervioso central para regular el equilibrio de 
ciertos neurotransmisores, las sustancias químicas que transmiten señales entre las 
neuronas en el cerebro. Aquí te explico la química de cada grupo: 
Medicamentos Ansiolíticos: Los ansiolíticos son medicamentos que se prescriben 
para tratar trastornos de ansiedad, como el trastorno de ansiedad generalizada 
(TAG), el trastorno de pánico y la ansiedad social. El principal tipo de ansiolíticos 
son las benzodiazepinas, que ejercen su acción potenciando la acción del 
neurotransmisor inhibidor GABA (ácido gamma-aminobutírico). El GABA actúa en el 
cerebro disminuyendo la excitación neuronal y reduciendo así la ansiedad y la 
actividad nerviosa excesiva. 
Las benzodiazepinas se unen a receptores específicos en las neuronas llamados 
receptores GABA-A, lo que aumenta la afinidad del GABA por estos receptores. 
Esto lleva a una mayor inhibición neuronal y una reducción en la actividad del 
sistema nervioso central, lo que produce efectos ansiolíticos, sedantes, relajantes 
musculares e hipnóticos (para inducir el sueño). Algunas benzodiazepinas comunes 
incluyen el alprazolam, diazepam, lorazepam y clonazepam. 
Medicamentos Antidepresivos: Los antidepresivos son medicamentos utilizados 
para tratar la depresión y otros trastornos del estado de ánimo, como el trastorno de 
ansiedad social y el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC). Existen varios tipos de 
antidepresivos, y cada grupo actúa de manera diferente sobre los 
neurotransmisores involucrados en la regulación del estado de ánimo. 
Inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS): Estos fármacos, como 
la fluoxetina, sertralina y paroxetina, bloquean la recaptación de serotonina, lo que 
aumenta la disponibilidad de este neurotransmisor en las sinapsis neuronales. La 
serotonina está involucrada en la regulación del estado de ánimo y se cree que su 
aumento contribuye a aliviar los síntomas de la depresión. 
Inhibidores de la recaptación de serotonina y noradrenalina (IRSN): Los 
medicamentos como la venlafaxina y la duloxetina bloquean la recaptación tanto de 
serotonina como de noradrenalina, lo que también aumenta la disponibilidad de 
estos neurotransmisores en el cerebro. 
Inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAO): Los IMAO, como la fenelzina y la 
tranilcipromina, inhiben la actividad de la monoaminooxidasa, una enzima que 
degrada neurotransmisores como la serotonina, noradrenalina y dopamina. Al 
bloquear esta enzima, se incrementan los niveles de estos neurotransmisores y se 
alivia la depresión. 
Otros antidepresivos: También existen otros tipos de antidepresivos como los 
tricíclicos y los atípicos, que actúan sobre diferentes vías y sistemas de 
neurotransmisores. 
Cabe mencionar que el uso de medicamentos ansiolíticos y antidepresivos debe ser 
supervisado y prescrito por un profesional de la salud, ya que pueden tener efectos 
secundarios y requerir ajustes en la dosificación según las necesidades individuales 
del paciente. Además, en el tratamiento de trastornos de ansiedad y depresión, es 
común combinar la farmacoterapia con psicoterapia para lograr un enfoque integral 
en la atención del paciente.