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CAPÍTULO 28 Concentración y dilución de orina; regulación de la osmolaridad del líquido extracelular y de la concentración de sodio Para el correcto funcionamiento de las células del organismo, estas deben estar bañadas en líquido extracelular con una concentración relativamente constante de electrólitos y otros solutos. La concentración total de solutos en el líquido extra- celular (osmolaridad) está determinada por la cantidad de soluto dividida por el volumen de líquido extracelular. Los so- lutos más abundantes en el líquido extracelular son el sodio y el cloruro. En su mayor parte, la osmolaridad del líquido extracelular está determinada por las cantidades extracelula- res de cloruro de sodio y agua, que, a su vez, dependen del equilibrio entre la ingestión y la excreción de esas sustancias. En este capítulo abordaremos los mecanismos que permi- ten al riñón eliminar una orina diluida o concentrada y, por tanto, regular la concentración de sodio y la osmolaridad del líquido extracelular. Asimismo, se analizarán los mecanismos que rigen la ingestión de líquidos. Los riñones excretan un exceso de agua mediante la formación de una orina diluida (p. 345) Cuando existe un exceso de agua en el organismo, el riñón puede excretar orina con una osmolaridad de tan solo 50 mOsm/l. Por el contrario, cuando existe una deficiencia de agua, el riñón puede excretar orina con una concentración de entre 1.200 y 1.400 mOsm/l. Tiene la misma importancia el hecho de que el riñón pueda excretar un gran volumen de orina diluida o un pequeño volumen de orina concentrada sin cambios importantes en la excreción de solutos. La hormona antidiurética controla la concentración de la orina. Cuando la osmolaridad de los líquidos corporales aumenta por encima de lo normal, el lóbulo posterior de la hipófisis secreta más hormona antidiurética (ADH), que aumenta la permeabilidad de los túbulos distales y conductos colectores al agua. Esto permite que se reabsorban grandes cantidades de agua y que disminuya el volumen urinario, pero no altera notablemente la excreción renal de los solutos. Cuando hay un exceso de agua en el organismo y la osmo- laridad del líquido extracelular se reduce, desciende la se- creción de ADH, lo que disminuye la permeabilidad al agua del túbulo distal y los conductos colectores, y conduce a la excreción de grandes cantidades de orina diluida. 214 © 2012. Elsevier España, S.L. Reservados todos los derechos 214.pdf
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