Ensayo de la influencia de la musica

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Área: 
5to de Gestión Administrativa y Tributaria 
 
 
 
Asignatura: 
Lengua Española 
 
 
 
Presentado a: 
Elizabeth Minaya 
 
 
 
 
Presentado por: 
Luis Javier Espinal #7 
Jean Carlos Matos #13 
 
 
 
 
 
 
 
 
Santo Domingo Este, República Dominicana 
Martes 22 de junio de 2021. 
El Impacto de la Música en la Sociedad 
Dominicana: 
 
En las últimas décadas, el estrés se ha transformado en 
la mayor pesadilla de la población, posiblemente por 
el apresurado ritmo de vida, el exceso de trabajo, estudios o las 
preocupaciones. Escuchar música puede ser una buena opción para 
relajarse y para un muy buen rato acompañado de tus seres queridos. 
Pero, muchos expertos dicen que la música, inspira e incita 
dependiendo de sus liricas y contenido a toda la juventud a 
experimentar lo que en esta se cuenta. 
 
Como todos sabemos la música está arraigada con cada persona desde 
que nace, es en cierto sentido algo que heredamos de las anteriores 
generaciones. Digamos nuestros abuelos creciendo bailando balada, 
la música siguió su curso de evolución, nuestros padres crecieron con el 
merengue, la bachata, la salsa, etc. Y sé que más de uno de los lectores al 
crecer heredo el gusto, el amor por uno o más de los géneros musicales 
anteriormente mencionados. 
 
El género urbano en nuestro país ha sido muy influyente, ya que por sus 
diversos ritmos y juegos de palabras han llamado la atención del público 
tanto adulto como joven. Se han generado muchas controversias en este 
género, gracias a sus líricas obscenas y contenido vulgar, siendo este la 
temática de todas las canciones de este género musical. El público adulto 
ha criticado de una forma contaste a este tipo de música, manifestando 
el mal ejemplo que puede producirle a la juventud este tipo de 
contenido en las letras. 
 
Pero este género ha ido creciendo cada vez más hasta volverse en un 
ícono mundial. Ha sido llevado a este punto gracias a artistas como: El 
Alfa "El Jefe", Rochy RD, Chimbala, Bulin 47, etc… Estos artistas 
han brindando un gran apoyo al género urbano de nuestro país, al igual 
que internacionalmente, con ayuda de las plataformas de música online 
y radio. Aunque las personas critiquen este género, ha aportado mucho 
a nuestro país y en la música general, haciendo esto una nueva forma de 
motivación a la juventud a hacer música y dejar los malos pasos en la 
calle, ofreciéndoles una mente habilidosa y llena de proyectos para 
encaminarse en un gran futuro en la música. Cabe destacar que, aunque 
las letras no sean las más aceptables, eso arte es arte sin importar como 
se vea o se escuche, solo se siente. 
 
En términos académicos, Para muchos especialistas como el psiquiatra 
Secundino Palacios, la música siempre ha sido 
un mecanismo para empujar a los pueblos, ya sea al amor, a la paz, a la 
violencia o al odio, y dependiendo 
del contenido puede tener un impacto catastrófico para quienes la 
escuchen, sobre todo para la clase más joven que está en un proceso de 
desarrollo. 
 
Atendiendo al respectivo impacto que 
puede poseer la música sobre la juventud, el experto considera que es 
de suma importancia que en el país se vuelva 
a exigir que cada composición musical tenga mensajes y contenidos 
humanísticos que estimulen el amar y la solidaridad. 
 
Sin embargo, existen muchos otros especialistas como el sociólogo y 
folclorista Dagoberto Tejeda Ortiz, que difieren de estas declaraciones y 
consideran que la llamada “música de calle” o urbana, no es más que una 
manera de expresión, de protesta y resistencia en la que 
los jóvenes buscan su identidad. 
 
Compartimos nuestra opinión con la del especialista que explico la 
problemática comentando que dentro del pueblo dominicano existe 
“un falso puritanismo” de quienes reaccionan 
de modo negativo condenando las expresiones propias de 
la juventud que consume y vive del dembow, cuando 
la sociedad de hoy día está plagada de violencia y agresividad. Ellos 
(Refiriéndose a la juventud) simplemente están dando una especie 
de reacción ante una sociedad de inequidad, 
una sociedad de desigualdad, una sociedad de apariencia, de hipocresía, 
de impunidad. No podemos pedirles a los jóvenes lo que nosotros no 
somos capaces de ofrecerles como sociedad a nivel de comportamiento.