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República bolivariana de Venezuela Universidad del Zulia Facultad de Medicina Escuela de Medicina Hospital Pedro García Clara Br. Ángel Castellano CI: 25.817.567 Octubre-2023 CELULITIS PRESEPTAL Y CELULITIS ORBITARIA 1 CONSIDERACIONES ANATÓMICAS Kanski Oftalmología Clínica. Un enfoque sistemático 8va edición. Celulitis preseptal y orbitaria. Anales de pediatría. Hospital Universitario 12 de Octubre. Madrid 2014 Órbita: Estructura cónica que guarda estrecha relación con los senos paranasales. Seno etmoidal separados por la lámina papirácea. Tabique orbitario: extensión del tejido conectivo del periostio. Orbita: estructura cónica cuyas paredes guardan estrecha relación con los senos paranasales. El techo de la órbita está formado por el suelo del seno frontal, la pared medial está formada por el seno etmoidal y el suelo de la órbita está formado por el seno maxilar. El seno etmoidal y la órbita están separados por la lámina papirácea que presenta múltiples orificios para el paso de vasos y nervios. Esta relación especialmente estrecha explica que la forma más frecuente a afectación de la órbita secundaria a la afectación de senos paranasales sea a través de los senos etmoidales. El septum orbitario: extensión de tejido conectivo del periostio de la órbita que llega en el párpado superior hasta la aponeurosis del músculo elevador del párpado superior y en el párpado inferior hasta el tarso. El septum orbitario supone una barrera anatómica eficaz para limitar que las infecciones de los párpados se diseminen hacia la órbita. El drenaje venoso de la órbita, el seno etmoidal, el seno maxilar, la piel del párpado y el tejido periorbitario confluye en el seno cavernoso. Parte de este sistema venoso no tiene válvulas y presenta anastomosis entre las venas oftálmicas superior e inferior. Esto explica que las infecciones de los senos puedan progresar con cierta facilidad hacia la órbita y de la órbita hacia las estructuras intracraneales 2 Kanski Oftalmología Clínica. Un enfoque sistemático 8va edición. Celulitis preseptal y orbitaria. Anales de pediatría. Hospital Universitario 12 de Octubre. Madrid 2014 DEFINICIÓN Infección de los tejidos blandos de los párpados que no sobrepasa el septum orbitario CELULITIS PRESEPTAL CELULITIS ORBITARIA Infección que afecta al contenido de la órbita que comprende la grasa periorbitaria y la musculatura extraocular Celulitis preseptal: Extensión de una infección de los anejos oculares o de la piel de los párpados: orzuelo, dacrioadenitis, dacriocistitis, celulitis de la piel del párpado a través una puerta de entrada como puede ser picadura de insecto, dermatitis, traumatismo o cirugía periocular Celulitis Orbitaria: Extensión de una sinusitis. La sinusitis es la causa más frecuente de celulitis orbitaria. Dentro de las sinusitis, la que con más frecuencia produce extensión a la órbita es la sinusitis etmoidal. De manera excepcional, podría deberse por extensión por contigüidad de infección odontogénica u otitis media aguda. Esta es mas complicada ya que amenaza la visión e incluso la vida del paciente 3 Kanski Oftalmología Clínica. Un enfoque sistemático 8va edición. Celulitis preseptal y orbitaria. Anales de pediatría. Hospital Universitario 12 de Octubre. Madrid 2014 ETIOLOGÍA CELULITIS PRESEPTAL CELULITIS ORBITARIA Puerta de entrada Bacteriemia S.Aureus S.Pneumoniae S. Pyogenes H.Influenzae S. Aureus M.R Secundaria a Sinusitis Otros S. pneumoniae, S. aureus, S. pyogenes Mucorales, Aspergillus spp., Mycobacterium tuberculosis M. Catharralis EPIDEMIOLOGÍA Ambas infecciones tienden a ser mucho más frecuente en la población pediátrica. CELULITIS PRESEPTAL: < 5 AÑOS CELULITIS ORBITARIA: NIÑOS DE MAYOR EDAD Etiología: CELULITIS PRESEPTAL /Con puerta de entrada cutánea: Staphylococcus aureus (S. aureus) y Streptococcus pyogenes (S. pyogenes). En los últimos años, el S. aureus resistente a meticilina (SARM) adquirido en la comunidad ha aumentado su incidencia como agente causal. Por bacteriemia: Streptococcus pneumoniae (S. pneumoniae) y Haemophilus influenzae (H. influenzae). La incidencia del Haemophilus ha disminuido por la vacunación sistemática. CELULITIS ORBITARIA: ecundaria a sinusitis. Los microorganismos causales son los responsables de la sinusitis en niños. S. pneumoniae, S. aureus, S. pyogenes, H. influenzae no tipificable, Moraxella catarrhalis y gérmenes anaerobios. La infecciones polimicrobianas son frecuentes, sobre todo en niños mayores de 9 años. Existen otros microorganismos muy infrecuentes y, en general, ligados a factores de riesgo específicos responsables de celulitis preseptal u orbitaria, como son Mucorales, Aspergillus spp., Mycobacterium tuberculosis o Trichophyton spp., que escapan al objetivo de esta revisión. EpidemiologíaTanto la celulitis preseptal como la celulitis orbitaria son mucho más frecuentes en niños que en adultos. La primera entidad es mucho más frecuente que la segunda2. La celulitis preseptal se produce con más frecuencia en pacientes menores de 5 años y, por el contrario, la celulitis orbitaria afecta a niños de mayor edad. 4 Kanski Oftalmología Clínica. Un enfoque sistemático 8va edición. Celulitis preseptal y orbitaria. Anales de pediatría. Hospital Universitario 12 de Octubre. Madrid 2014 CELULITIS PRESEPTAL CELULITIS ORBITARIA MANIFESTACIONES CLÍNICAS CELULITIS PRESEPTAL: Se manifiesta con edema del párpado, hiperémico y doloroso, a veces de consistencia firme, que puede ser muy intenso; sin embargo, a diferencia de la celulitis orbitaria, no hay proptosis. ni quemosis, y no se ven afectados la AV, las reacciones pupilares ni los movimientos oculares. El paciente a menudo está febril. Celulitis ORBITARIA: Los síntomas empiezan con la instauración rápida de dolor exacerbado por los movimientos oculares, hinchazón del ojo,malestar general y a menudo pérdida de visión y visión doble. Con frecuencia hay antecedentes de síntomas nasales, de senos o respiratorios. • Signos Fiebre, a menudo alta. La AV puede estar reducida y la visión cromática afectada, lo que debe hacer sospechar compresión del nervio óptico; la presencia de defecto pupilar aferente relativo en un ojo previamente normal prácticamente lo confirma. Inflamación dolorosa, firme, eritematosa y caliente de los párpados, con edema periocular y conjuntival (quemosis),hiperemia conjuntival y a veces hemorragia subconjuntival; los signos suelen ser unilaterales, aunque el edema puede extenderse a los párpados contralaterales. La proptosis es frecuente en la infección establecida, pero a menudo está oculta por la tumefacción palpebral; puede ser no axial (distopia), sobre todo si hay un absceso. Oftalmoplejía dolorosa COMPLICACIONES: Complicaciones oculares como neuropatía óptica, queratopatía por exposición, aumento de la PIO, endoftalmitis y oclusión de la arteria o la vena central de la retina. -Absceso subperióstico, la mayoría de las veces en la pared orbitaria medial. -Complicaciones intracraneales, que son infrecuentes (3-4%) pero extremadamente graves, como meningitis, absceso cerebral y trombosis del seno cavernoso 5 Kanski Oftalmología Clínica. Un enfoque sistemático 8va edición. Celulitis preseptal y orbitaria. Anales de pediatría. Hospital Universitario 12 de Octubre. Madrid 2014 CUADRO COMPARATIVO CLÍNICO Kanski Oftalmología Clínica. Un enfoque sistemático 8va edición. Celulitis preseptal y orbitaria. Anales de pediatría. Hospital Universitario 12 de Octubre. Madrid 2014 DIAGNÓSTICO CELULITIS PRESEPTAL CELULITIS ORBITARIA Celulitis preseptal. Celulitis preseptal izquierda por una abrasión palpebral infectada; la TC axial muestra opacificación por delante del tabique orbitario. Celulitis Orbitaria: Celulitis orbitaria derecha con oftalmoplejía; la TC axial muestra opacificacióntanto preseptal como orbitaria. En la exploración física, es imprescindible evaluar la motilidad ocular extrínseca, la presencia de reflejo pupilar y de signos meníngeos. En la anamnesis es importante prestar atención a datos como el antecedente de traumatismo ocular o patología dental, y preguntar por la vacunación frente a S. pneumoniae y H. influenzae tipo B. El diagnóstico de la celulitis preseptal es fundamentalmente clínico. Por el contrario, siempre que se sospeche una celulitis orbitaria es necesario completar el diagnóstico con una prueba de imagen para buscar el origen de la misma (habitualmente una sinusitis), para descartar la presencia de absceso subperióstico o complicaciones intracraneales y para guiar en el manejo terapéutico 1. Sospecha de celulitis orbitaria 2. Sospecha de complicación intracraneal (meningismo o signos de focalidad neurológica) 3. Afectación de la agudeza visual 4. Mala evolución clínica a pesar de haberse instaurado tratamiento antibiótico correcto durante 24–48h 5. Imposibilidad para la exploración del globo ocular por edema palpebral importante 7 Kanski Oftalmología Clínica. Un enfoque sistemático 8va edición. Celulitis preseptal y orbitaria. Anales de pediatría. Hospital Universitario 12 de Octubre. Madrid 2014 TRATAMIENTO CELULITIS PRESEPTAL CELULITIS ORBITARIA 1ERA ELECCIÓN ALERGIA A BETALACTAMICOS Amox + Ac Clavulanico 250-500 mg/125 mg dos o tres veces al día o 875/125 mg dos veces al día Ciprofloxacino ± trimetoprim-sulfametoxazol HOSPITALIZACIÓN ATB IV: Ceftazidima + metronidazol Cefotaxima + clindamicina Vancomicina + Clindamicina Monitorización del nervio óptico Cirugía CELULITIS PRESEPTAL Celulitis preseptal. El tratamiento de la celulitis preseptal casi siempre es exclusivamente médico. En general, se administra el antibiótico por vía oral, aunque existe la tendencia a elegir la vía intravenosa en pacientes menores de un año o con afectación del estado general, o cuando se sospeche que se trata de un origen hematógeno. Es recomendable un seguimiento clínico estrecho en las primeras 48 h tras el diagnóstico. La duración del tratamiento suele ser de 7-10 días, aunque es preciso individualizar en función de la evolución clínica. CELULITIS ORBITARIA: Es obligatorio el ingreso hospitalario, con interconsulta urgente a otorrinolaringología y revisiones oftalmológicas frecuentes. Debe pedirse el asesoramiento de un especialista pediátrico si el paciente es un niño y estar preparados para consultar sin tardanza al especialista en enfermedadesinfecciosas. • Antibióticos intravenosos, eligiendo el fármaco concreto según las sensibilidades de la región; es típico optar por la ceftacidima, complementada con metronidazol oral, para cubrir los anaerobios. Los antibióticos intravenosos se mantendrán hasta que el paciente esté apirético durante 4 días, e irán seguidos de 1-3 semanas de antibioterapia oral. • Hay que monitorizar la función del nervio óptico, al menos cada 4 h desde el comienzo, explorando la AV, la visión cromática, la apreciación de la intensidad luminosa y las reacciones pupilares. Si se observa deterioro, hay que plantearse intervenir quirúrgicamente. • Cirugía. Debe valorarse el drenaje de un absceso orbitario de modo precoz; también se planteará drenar los senos paranasales infectados si no hay respuesta a los antibióticos o si la sinusitis es muy acusada 8 GRACIAS POR SU ATENCIÓN
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