Logo Studenta

anestesia-general-en-grandes-animales

¡Este material tiene más páginas!

Vista previa del material en texto

Anestesia General en Grandes Animales.
Cátedra de Cirugía y Anestesiología.
Facultad de Ciencias Veterinarias UNNE.
2016.
Anestesia en Grandes Animales.
Anestesia en Equinos (parenteral).
Podemos clasificar a la anestesia para su estudio de la siguiente manera.
 General Parenteral.
 Inhalatoria.
Anestesia Local o infiltrativa: Es la inyección del anestésico local en el lugar
quirúrgico. 
 Regional: Es la desensibilización de una determinada región, por el 
bloqueo de una rama o de un tronco nervioso que inerva dicha región.
Mediante la anestesia parenteral se puede lograr una “Anestesia General Ideal” (es aquella
que cumple con la triada de Cecil Gray. Fig.1), o estados intermedios de anestesia
(tranquilización, sedación y neuroleptoanalgesia).
 Hipnosis.
 
 Relajación Muscular. Analgesia.
 Protección del Sistema Neurovegetativo. 
No existe el anestésico parenteral ideal. La triada se logra con la combinación de fármacos,
que aportan sus propiedades particulares (hipnosis, analgesia, relajación muscular, etc.).
Además, el estado anestésico debe ser totalmente reversible, sin dejar ningún tipo de secuela
neurológica.
Algunos de los objetivos que busca la anestesia general son:
 Proveer suficiente hipnosis, analgesia y relajación muscular, para poder realizar un
procedimiento quirúrgico o diagnóstico. 
 Interferir poco con las funciones cardiovascular y respiratoria.
 Permitir la recuperación posanestésica sin efectos indeseables.
Para asegurar y mantener la normalidad fisiológica, los agentes inductores deben ser
confiables y predecibles. La excitación y el forcejeo que ocurren bajo planos superficiales de
anestesia pueden conducir a consecuencias desastrosas, tanto para el caballo como para el
personal, dado el tamaño, el peso y la fuerza de estos animales. En forma similar durante el
período de recuperación el animal debe quedarse quieto, hasta que presente la suficiente
capacidad de coordinación como para levantarse sin lesionarse. Debido a que los caballos no
toleran bien el decúbito prolongado, es necesario planificar con cuidado la premedicación, la
posición del caballo, el monitoreo intraquirúrgico y la recuperación anestésica.
Los problemas anestésicos más corrientes en el equino incluyen: hipoventilación, hipoxemia,
hipotensión y daño neuromuscular posquirúrgico. 
Se debe prestar especial atención a los efectos depresores cardiopulmonares producidos por
los agentes anestésicos y mantener o mejorar la perfusión periférica.
Los anestésicos generales producen una depresión del S.N.C., reversible y dependiente de la
dosis. Primero se deprime la corteza y después la médula, que controla funciones vitales.
La depresión cardiovascular es una característica bien conocida de la anestesia general. En la
medida que ésta se profundiza, se produce la depresión progresiva del centro vasomotor,
acompañada por una depresión directa del miocardio. En la mayoría de los casos se produce
Fig. 1 Triada de Cecil 
Gray.
una caída de la presión arterial, del volumen minuto y una reducción del flujo sanguíneo a
diversos órganos, especialmente al hígado y riñones. La anestesia general también provoca
depresión respiratoria, a medida que se profundiza el plano anestésico se desarrolla una
depresión progresiva de los centros respiratorios, reduciéndose la sensibilidad al CO2, con lo
que la tensión arterial de CO2 se eleva. Los niveles de O2 arterial se reducen como
consecuencia de las modificaciones funcionales que se producen en el pulmón durante la
anestesia general. Estas modificaciones son producidas fundamentalmente por los efectos
mecánicos de la relajación y del decúbito siendo muy significativos en el caballo.
La anestesia general puede alterar el balance del agua y de los electrolitos en el paciente.
Durante la anestesia se deprime la función renal, como consecuencia de la vasoconstricción
renal, a causa de la hipotensión.
Efectos del decúbito en el caballo: El caballo sufre efectos negativos adicionales
(comparado con otras especies) cuando se encuentra en decúbito, fundamentalmente como
resultado de su gran peso y tamaño y que se acrecientan cuanto más grande y pesado sea.
Los caballos que permanecen en decúbito lateral sufren una reducción considerable en la
tensión arterial de O2 (PaO2), comparada con los valores registrados durante la estación. La
tensión cae todavía más cuando el animal es mantenido en decúbito dorsal. La declinación de
la PaO2 se debe a la posición del caballo y no a la anestesia.
Un caballo en decúbito dorsal o lateral presenta una gran diferencia entre la PaO2 y la
alveolar. Bajo condiciones normales en un caballo en estación y sin patología pulmonar, ésta
diferencia es casi imperceptible. Cuando está en decúbito, una gran porción del pulmón (que
se encuentra abajo) es comprimida por el peso de las vísceras abdominales que presionan a
través de un diafragma muy convexo, esto resulta en una obstrucción mecánica a la
ventilación, reduciéndose la ventilación en el pulmón comprimido sin una correspondiente
caída de la perfusión. Ello resulta en un efectivo “shunt” de sangre venosa a través del
pulmón, impidiendo que ésta se oxigene.
El incremento de la ventilación, con ventilación intermitente a presión positiva (VIPP) tiene
poco efecto beneficioso sobre la diferencia entre la PaO2 y la alveolar. Parece que sólo
incrementa la ventilación del pulmón más alto, con escaso efecto sobre el pulmón más bajo,
donde en realidad se requiere un aumento de ventilación. En el pulmón o porción de los
pulmones (dependiendo del decúbito) que está comprimido se desarrolla colapso alveolar,
edema pulmonar intersticial y congestión pulmonar local.
Riesgo anestésico. La anestesia general se relaciona con riesgo de muerte o contratiempos
graves en todas las especies, pero el riesgo de mortalidad o de morbilidad grave es
especialmente elevado en los caballos (caballos 1 %; humanos 0,001%; pequeños animales
0,1 %). Si bien no se han clarificado las causas de esta susceptibilidad, parecen relacionarse
al menos en parte con los efectos de la depresión cardiorrespiratoria marcada que induce la
anestesia en esta especie.
Evaluación prequirúrgica del paciente. Previo al acto quirúrgico, está indicado un
examen clínico completo, tanto para las cirugías programadas, como para las de urgencia si
fuera posible. Como rutina debe realizarse la determinación del hematocrito y de las
proteínas séricas totales, junto al recuento de glóbulos rojos, blancos y formula leucocitaria
relativa. Obviamente teniendo en cuenta el tipo de cirugía a realizar. Si es necesario debe
realizarse el reemplazo de fluidos. En caso de cirugías programadas, la intervención deberá
posponerse si el estado físico del paciente o sus parámetros de laboratorio son anormales.
El objetivo del examen es asegurar que el animal está sano o detectar anomalías que
requieren tratamiento especial. La anamnesis es la fuente de información más útil. ¿Tiene
inapetencia, tos, secreción nasal, respiración ruidosa o baja tolerancia al esfuerzo?, y todo
otro dato que pueda indicar alguna patología que deba tenerse en cuenta para escoger el
protocolo anestésico más adecuado para ése individuo en particular. El examen físico debe
prestar atención especial al estado general y al comportamiento, a la coloración de las
membranas mucosas, tiempo de llenado capilar, al patrón respiratorio y al llenado venoso
yugular. Se debe palpar el pulso y registrar su frecuencia. La auscultación puede detectar
signosde enfermedad cardíaca o pulmonar (si fuese necesario se debe comenzar con el
tratamiento adecuado, antes de proceder a la anestesia electiva). En las emergencias, la
anestesia se debe iniciar más allá de la presencia de alguna otra anomalía, pero el
anestesista debe ordenar disposiciones especiales necesarias para el tratamiento de todo
problema adicional. Las anomalías detectadas siempre se deben comunicar al propietario, de
manera que conozca el riesgo adicional y pueda decidir si desea continuar con la
investigación o el tratamiento antes de anestesiar al caballo. Siempre existen riesgos que
deben explicarse al propietario aun en el paciente normal sometido a una cirugía
programada.
Enfermedad respiratoria: Un caballo con enfermedad obstructiva recurrente de las vías aéreas
(RAO) se debe mantener en ambientes libres de polvo y recibir el tratamiento médico
adecuado antes de proceder a la anestesia electiva. Empero si el animal tiene un cólico que
requiere cirugía de emergencia, el suministro de O2 debe comenzar lo antes posible durante
las etapas de inducción y recuperación.
Enfermedad cardíaca: Los soplos cardíacos no siempre contraindican la anestesia. Por
ejemplo si el animal no tiene signos de insuficiencia cardíaca.
Con respecto al temperamento y al estado de salud del paciente influyen en la elección y la
dosis de los agentes preanestésicos y anestésicos a utilizar. La clasificación del estado físico
del paciente ayuda en la preparación del equipo quirúrgico para enfrentarse a los problemas
que puedan originarse durante la cirugía.
Estado prequirúrgico de los equinos: 
 Grado 1: Buen estado de salud y cirugías menores programadas.
 Grado 2: Deterioros menores, como caballos con disturbios sistémicos leves a
moderados, que pueden asociarse con la patología quirúrgica. Por ej. una fractura
simple.
 Grado 3: Deterioro moderado, caballos con disturbios sistémicos leves a moderados,
que pueden asociarse con la patología quirúrgica, pero que pueden interferir con las
actividades normales. Por ej. retención de meconio.
 Grado 4: Deterioro mayor, caballos con disturbios sistémicos (relacionado o no con la
patología quirúrgica), que interfieren seriamente con las actividades normales del
paciente y pone en peligro su vida. Por ej. ruptura de vejiga y obstrucción intestinal.
 Grado 5: Moribundo.
Para cada grado, el anestesista puede adoptar un abordaje diferente y requerir un apoyo
adicional. Los pacientes que se encuentran en un grado 4 y 5 requieren monitoreo completo,
importante fluidoterapia y medicación auxiliar. Al clasificar a cada paciente antes de la
cirugía, nos ayuda a determinar el personal necesario y la disponibilidad de equipamientos
auxiliares y drogas para poder manejar las posibles complicaciones. 
Otro factor importante a tener en cuenta antes de comenzar con la administración de las
drogas, es conocer el peso del paciente, para proceder a calcular las dosis de los agentes a
emplear.
a) Lo mejor y más exacto sería contar con una báscula para equinos, que nos indicará
el peso exacto del paciente. 
b) Cintas: Por lo general suministradas con los antihelmínticos o disponibles en
talabarterías. Marcadas con el peso en lugar de la longitud, puede lograr una
estimación bastante aproximada. Éstas se colocan alrededor de la cincha. Esta
medición no es exacta en ponies pequeños, asnos y potrillos.
c) Fórmula: Peso (kg)= cincha (pulgadas)2 x longitud (pulgadas)
 660 
-La cincha: mide perímetro torácico.
-La longitud: desde el encuentro, hasta la punta del isquion. 
Este método es más exacto que el de la cinta.
Una variante de la fórmula para calcular el peso es la siguiente: 
Peso (kg)= P x L2 
 8700
P: perímetro torácico (en cm.). 
L: longitud desde el encuentro a la punta
 del isquion (en cm).
 
En base a todo lo ya mencionado anteriormente podemos comenzar a describir brevemente
algunas de las drogas más utilizadas en nuestro medio, en la premedicación, inducción,
mantenimiento intraquirúrgico y recuperación posanestésica.
Algunas drogas utilizadas en la anestesia parenteral: (durante la premedicación,
inducción mantenimiento y posquirúrgico).
 Sulfato de Atropina.
Anticolinérgicos. Glicopirrolato.
 Mayor Maleato de Acepromacina. 
(Fenotiazina). Tranquilizantes. 
Diazepam (Benzodiacepinas). 
 Menores. Midazolam.
 Xilacina
Sedantes. Detomidina.
 Opiáceos: Morfina, metadona, petidina, butorfanol, buprenorfina,
nalbufina.
Analgésicos. AINES: Meglumina, Fenilbutazona, ketoprofeno. 
Miorrelajantes. Éter Gliceril Guayacolato, Guaifenesina.
 Succinilcolina.
 Tiopental sódico.
Inductores. Ketamina.
 Propofol.
Algunos otros conceptos que debemos tener en claro son:
 Hipnosis: (sueño). Es el estado provocado artificialmente que semeja al sueño. El sujeto
pierde sugestividad y reactividad a los estímulos. Los hipnóticos más utilizados en
veterinaria son el tiopental sódico y el hidrato de cloral.
 Analgesia: Significa alivio del dolor.
 Relajación muscular: permite un mejor manejo del animal a intervenir, además de
disminuir considerablemente la dosis de hipnóticos, potenciando su acción. El más
usado en equinos es la guaifenesina y las benzodiacepinas.
 Tranquilización: Lo consideramos un estado intermedio de anestesia, ya que produce
depresión del S.N.C. pero no cumple con todos los requisitos de la misma. Lo que se
logra es tener al animal sosegado, pero su conciencia no está afectada (no hay
embotamiento).
 Sedación: También es una depresión del S.N.C. El animal no está en trance, pero si se
produce un embotamiento de la conciencia. Denota un enlentecimiento de las
reacciones defensivas a estímulos.
 Neuroleptoanalgesia: efecto que se produce al combinar un tranquilizante o sedante
con un analgésico opioide. Se produce una sedación psicomotora y analgesia.
Anticolinérgicos muscarínicos: Sulfato de atropina: Bloquea los efectos de la
acetilcolina en los receptores muscarínicos, que se encuentran presentes primariamente en el
sistema nervioso parasimpático. Consecuentemente, produce un aumento en la FC, depresión
de las funciones intestinales y de la vejiga, midriasis (dilata la pupila e inhibe su
acomodación) y reducción del flujo de saliva. En algunas especies se utiliza en la
premedicación como un antisialogogo y por sus efectos vagolíticos. En el caballo durante la
anestesia la salivación es mínima (salvo durante la administración de éter) y raramente
constituye un problema, aun durante la cirugía de la boca. Además el efecto midriático de la
atropina puede producir pánico en el caballo consciente, por la visión borrosa que esto le
provoca. Por estas razones raramente se emplea como rutina en la premedicación. Sin
embargo se debe disponer de la misma para poder utilizarla durante la anestesia, en caso de
que se desarrolle una bradicardia severa, en éste caso se utilizarán 5-10 mg. EV. También se
puede administrar después de la inducción, cuando se va a realizar alguna cirugía
oftalmológica con el objetode prevenir el desarrollo de la bradicardia producida por el reflejo
“oculocardíaco”, mediado por el nervio vago. En forma similar puede protegerse el corazón
cuando se realiza cirugía de cuello, donde puede estimularse el nervio vago. 
Se metaboliza en hígado y excreta por orina. Atraviesa la membrana hematoencefálica,
placentaria y a la glándula mamaria. Debe emplearse con cautela en forma sistémica, en
caballos ya que puede disminuir la motilidad intestinal y provocar cólico en animales
susceptibles. 
Dosis: Para tratamiento de bradiarritmias secundarias a hipertonía parasimpática 0,01-0,02
mg/kg. EV. Como broncodilatador 5 mg. EV para un animal de 400-500 kg. Para intoxicación
con organofosforados 1mg/kg. EV.
Glicopirrolato: Acción similar a la atropina. Es un compuesto de amonio cuaternario y a
diferencia de la atropina no ingresa de un modo apreciable al SNC. En consecuencia no
debería exhibir la misma extensión de efectos adversos nerviosos centrales. Parece tener
menor probabilidad de causar cólico.
Dosis: 5-10 µg/kg. EV.
Fenotiazinas: Maleato de Acepromacina. Es el tranquilizante mayor más utilizado
actualmente en el caballo. Produce tranquilización leve cuando se emplea sola. El incremento
de la dosis no aumenta en gran medida la profundidad de la tranquilización. Es muy eficaz
para tranquilizar a un caballo nervioso sin causar somnolencia o ataxia, no obstante un
caballo que parece tranquilizado puede reaccionar a los estímulos. 
La acepromacina bloquea la transmisión α 1-adrenergica, que es la responsable de mantener
el tono vascular, y causa reducción de la tensión arterial, lo que puede ser muy grave en
caballos hipovolémicos. En los pacientes normovolémicos el efecto es menor. Este agente
siempre causa prolapso peneano (protrusión del pene) durante algunas horas. En muy
contadas ocasiones causa priapismo. En cualquiera de los dos casos es muy importante
proteger al pene de traumatismos, para prevenir la parafimosis y lesiones irreparables. Otra
de las manifestaciones observables en el animal es la ptosis labial (en el labio inferior),
posición baja de la cabeza, extensión del cuello y ligero prolapso del 3º párpado. 
Es uno de los depresores del S.N.C más seguros e induce cambios en la conducta, que hacen
que el animal esté quieto, calmado y relativamente indiferente a su entorno. “No provee
analgesia”. El mecanismo de acción es por interferencia o bloqueo de la dopamina a nivel
de sus receptores.
Su efecto dura varias horas (4-6) y el inicio de su acción es lento 15-20 minutos, aun después
de la inyección E.V. si se aplica por vía I.M (menos frecuente) se deberá esperar 1 hora para
los efectos.
Para lograr una restricción química más intensa, se puede combinar con otros agentes.
La acepromacina es un agente muy valioso para la premedicación antes de la anestesia
general, si bien no reduce en gran medida la dosis necesaria de agentes de inducción I.V,
suaviza el proceso completo de inducción y de recuperación.
Produce depresión respiratoria escasa, produce vasodilatación periférica, por lo que está
contraindicada en animales deshidratados y shockeados. El efecto antiadrenérgico protege,
en algún grado, al corazón de las arritmias inducidas por estimulación simpática.
Los efectos producidos sobre el tracto gastrointestinal son insignificantes. Se metaboliza en
gran parte en el hígado, y los metabolitos se eliminan por orina hasta por 3-4 días después de
la administración de una dosis. Produce cambios en el hematocrito después de su aplicación
ya que causa secuestro esplénico.
Solo se contraindica como premedicación en pacientes hipovolémicos, porque puede
precipitar hipotensión grave. Nunca usar en pacientes con cólico.
Dosis: 0,03-0,06 mg/kg. Su presentación es en solución al 1%.
Agonistas del adrenorreceptor α2: Clorhidrato de Xilacina, Detomidina y
Romifidina . Son potentes sedantes, pero también tienen muy buena acción analgésica de
tipo visceral y algo de relajación muscular.
El caballo adopta una postura en estación de base amplia, con la cabeza baja y parece
indiferente a los estímulos externos. Se emplean para diversos procedimientos diagnósticos
clínicos, como radiografías, endoscopías y cirugía menor, bajo anestesia local. Si bien parecen
producir una sedación profunda, el caballo puede patear con gran precisión, si recibe el
estímulo apropiado (ej. doloroso). El incremento de la dosis no suele mejorar este efecto y es
preferible recurrir a la suplementación con opiáceos. 
Producen ataxia en todas las dosis, pero mucho menor con Romifidina. Otros de los efectos
que producen es un bloqueo de 2º grado del nodo auriculoventricular y bradicardia por un
aumento de la actividad vagal. Producen una FC inferior a la normal durante media hora,
disminución del volumen minuto y depresión respiratoria leve. La presión arterial aumenta en
un principio, pero luego disminuye por el efecto depresor de la contractilidad cardíaca. La
motilidad gastrointestinal también disminuye y la micción suele ser copiosa, como resultado
de la menor producción de vasopresina (HAD). La duración de la sedación y de los efectos
adversos depende de la dosis; la xilacina es la de acción más breve (45-60 minutos) y la
Romifidina es la de acción más prolongada (90-120 minutos). Mientras que su acción
analgésica es de unos 15 minutos.
El tratamiento adicional con anticolinérgicos vagolíticos reduce la bradicardia, pero acrecienta
la hipertensión inicial, su efecto general sobre el aparato cardiovascular es algo mejor que
cuando los agonistas α2 adrenérgicos se emplean solos.
La vía de aplicación es EV y alcanza su máxima acción a los 5 minutos de su administración.
Se pueden aplicar por vía IM, que proporciona un nivel de sedación excelente y menor
gravedad de algunos efectos adversos. Sin embargo la sedación máxima demora 30- 40
minutos y requiere dosis más elevadas que las EV (el doble para la detomidina y el triple para
la xilacina).
Dosis: 
 Xilacina: 0,5-1 mg/kg. 
 Detomidina: 10-20 µg/kg.
 Romifidina: 50-120 µg/kg.
Permiten reducir a la mitad la dosis de los agentes inductores si se administran como
premedicación.
La presentación comercial de xilacina, es en solución al 2% y al 10%.
Sus efectos pueden ser revertidos por antagonistas como la Yohimbina (0,125 mg/kg EV). o
la Tolazolina (2,5 a 5 mg/kg. EV) o el Atipamezol (50-100 µg/kg). 
En los caballos, la analgesia visceral resulta superior a la causada por meperidina, butorfanol
o pentazocina. En caballos, bovinos, ovinos y caprinos no produce emesis. La xilacina deprime
los mecanismos termorreguladores y la hipotermia o hipertermia es una posibilidad
dependiente de la temperatura ambiental. Los perros braquiocefálicos y caballos con
enfermedad respiratoria superior, pueden experimentar disnea.
Puede inducir aumento de la glucemia secundario a la disminución en los niveles séricos de
insulina.
Está contraindicado su uso en animales que reciben epinefrina o que tienen arritmias
ventriculares activas. Cautela extrema en animales con disfunción cardíaca preexistente,
hipotensión o shock, disfunción respiratoria, insuficiencia hepática o renal grave. No debe ser
empleada en el último tercio de gestación, puede producir parto prematuro. Los caballos
pueden experimentar incremento de la presión endocraneana o disminución de la depuración
mucociliar.
Se metabolizan en hígado y excretan por riñón. Atraviesan la barrera hematoencefálica y
placentaria. 
Benzodiacepinas: Diazepam, Midazolam. Las benzodiacepinas no se utilizan como
tranquilizantes en caballos adultos (causan debilidad muscular y ataxia), o con buen estado
general de salud, ya que no producen un efecto significativo con ese fin. Pero son muy
eficaces para tranquilizar o sedar potrillos jóvenes, ya que como adoptan la posición dedecúbito, la ataxia no representa un problema ni peligro para el animal. 
Sin embargo, las BZP son muy útiles como parte de las combinaciones para anestesia
general, ya que causan poca depresión cardiovascular, aunque pueden potenciar la depresión
respiratoria. Son potentes relajantes musculares de acción central y por lo general se
combinan con anestésicos disociativos porque contrarrestan el incremento del tono muscular.
También son adyuvantes de la anestesia muy útiles en animales enfermos. 
Dosis: 0,2 mg/kg. EV en potrillos. En adultos se puede utilizar 0,02 mg/kg EV como parte del
protocolo anestésico. Presentación comercial al 0,5 %.
Guaifenesina (éter): Miorrelajante adyuvante de la anestesia. Parece actuar a nivel central
deprimiendo o bloqueando la transmisión de los impulsos nerviosos en la neurona
internuncial de las áreas subcorticales del encéfalo, tronco encefálico y médula espinal. Relaja
los músculos laríngeos y faríngeos, facilitando la intubación. No es un sedante ni un
analgésico, aunque produce algunos efectos hipnóticos. Afecta más a los músculos de los
miembros que a los respiratorios y puede lograr que el caballo adopte la posición de decúbito
sin causar apnea. Ocasiona inducción y recuperación libres de excitación de la anestesia.
Tiene escaso o nulo efecto sobre la función respiratoria en las dosis usuales. Los efectos
posibles sobre el sistema cardiovascular incluyen, disminución transitoria leve de la presión
sanguínea e incremento de la FC. La motilidad gastrointestinal puede estar aumentada, pero
en general no se aprecian efectos adversos. Potencia la actividad de los agentes
preanestésicos y anestésicos.
La guaifenesina se presenta como un polvo de color blanco, soluble en agua. Generalmente
se prepara en agua o solución de dextrosa al 5 % (o solución fisiológica al 0,9 %) y se
esteriliza por calor. Para producir relajación de los miembros, sin que se afecte la respiración,
son necesarias dosis intravenosas de 50-100-150 mg/kg. Por ello para un caballo de tamaño
promedio son necesarios 500 ml. de la solución al 10 % y 1000 ml. de la solución al 5 %.
Dosis: 100-150 mg/kg EV. Preparar una solución al 5-10 % como máxima concentración, más
concentrado causa hemólisis y daña la íntima de la vena. 
La solución de Guaifenesina se infunde hasta que el caballo muestra signos de ataxia, y la
anestesia se induce con un agente IV para que se coloque en decúbito. Un ejemplo lo
constituye la ketamina en dosis de 1 mg/kg. Debe ayudarse al caballo para que se mantenga
parado durante la infusión, esto evita el tambaleo y la aparición de pánico por parte del
animal cuando comienza la ataxia. El uso del éter como inductor permite reducir la dosis de
los barbitúricos ya anestésicos inductores entre un tercio y la mitad.
El uso de Succinilcolina (agente bloqueante neuromuscular despolarizante) es una
técnica peligrosa para la inducción de la anestesia, pudiendo provocar la muerte. Carece de
efectos analgésicos o anestésicos. Es un Miorrelajante despolarizante de acción ultracorta, se
une a los receptores colinérgicos en las placas motoras produciendo despolarización
(percibida en forma de fasciculaciones) y se caracteriza por parálisis flácida. El comienzo de
acción, con miorrelajación completa, luego de la administración EV por lo usual es de 30-60
segundos, su efecto dura unos 3 minutos y luego disminuye gradualmente dentro de los 10
minutos. Está contraindicada e pacientes con enfermedad hepática grave, anemias crónicas,
desnutrición, glaucoma o lesiones oculares penetrantes, predisposición a hipertermia maligna
e incremento de los valores de CPK con la resultante miopatía. También debe ser
administrada con cuidado en pacientes que padecen disfunción pulmonar, renal,
cardiovascular, metabólica o hepática. No debe ser empleada si se aplicaron en forma
reciente organofosforados.
En los caballos, las siguientes recomendaciones adicionales han sido efectuadas por la
American Association of Equine Practitioners:
 Informar al propietario que la succinilcolina cloruro se utiliza como agente de sujeción
y no como anestésico.
 Obtener la anamnesis antes del empleo; no utilizar en caballos si dentro de los 30 días
recibió algún antibiótico que finalice en “micina”, insecticidas o antihelmínticos
organofosforados, cualquier otro inhibidor de colinesterasa o procaína.
 No utilizar en caballos debilitados, excitados o agotados.
 Si es posible retirar el alimento 4-6 hs. antes del empleo.
 La dosis de 0,088 mg/kg EV puede ser utilizada para paralizar los músculos
esqueléticos sin ocasionar depresión respiratoria. La dosis más alta puede causar
apnea y muerte sin soporte respiratorio.
 Después de la administración, contar con personal que conozca las acciones de la
droga de manera que el animal no caiga sobre la nariz. Estar preparado para
administrar O2 y respiración artificial.
 Si se produce la muerte, llevar a cabo la necropsia.
La succinilcolina puede causar dolor muscular, liberación de histamina, hipertermia maligna,
excesiva salivación, hiperpotasemia, erupciones y mioglobinemia/mioglobinuria. Los efectos
cardiovasculares pueden incluir, bradicardia, taquicardia, hipertensión, hipotensión o
arritmias.
Dosis: 0,088 mg/kg EV. Presentación al 2-5 %. 
Tiopental Sódico (Barbitúrico). De acción ultracorta, utilizado para la inducción o la
anestesia durante procedimientos breves. Se administra por vía EV., produciendo
inconsciencia en 30-90 segundos, la cual dura entre 5 y 10 minutos. No produce analgesia. Se
observa depresión respiratoria, que es más severa inmediatamente después de la inducción,
no siendo raro el desarrollo de apneas de 1-2 minutos de duración. Ésta se resuelve, aunque
la respiración permanece levemente deprimida por un lapso considerablemente largo.
Después de la inducción se observa algo de depresión miocárdica, acompañada de una caída
transitoria de la presión sanguínea arterial. También puede haber desarrollo de arritmias,
especialmente cuando hay hipercapnias o hipoxia. No se debe utilizar en caballos con
leucopenia preexistente.
En condiciones normales, el retorno al estado de conciencia luego de la administración de
tiopental sódico, es atribuida, a la reducción de la concentración de la droga en el cerebro por
redistribución en otros tejidos del cuerpo (inicialmente músculo y luego grasa). Cuando se
han administrado grandes dosis (ej. dosis sucesivas de tiopental sódico para mantener la
anestesia), los depósitos grasos se saturan, lo que da como resultado concentraciones
plasmáticas y cerebrales altas, dado que no puede darse una redistribución. El tiopental se
metaboliza en el hígado y se excreta por orina. Las proteínas que transportan a los
tiobarbitúricos disminuyen en la acidosis, la uremia y la hipoalbuminemia. Esto aumenta la
biodisponibilidad de la droga, favorece la depresión del SNC y prolonga la recuperación. 
Se debe utilizar la dosis calculada, no existe la oportunidad de dar “hasta efecto”, salvo que
el caballo se encuentre ya en decúbito lateral. En vista de los efectos de redistribución del
tiopental para lograr la inconciencia, la droga debe inyectarse lo suficientemente rápido como
para lograr una concentración alta en el cerebro antes que ocurra la redistribución. Ello se
logra por la inyección en forma de bolo que requieren dosis de 10 mg/kg. EV siempre a través
de un catéter y no de una aguja directamente (en la vena), siendo 50-60 ml. el mayor
volumen que puede inyectarse con facilidad en forma de bolo, lo que se logra con
concentraciones de alrededor del 10 %. Son extremadamente irritantes, por lo que no se
debe inyectar perivascularmente. La recuperación de la anestesia con tiopental (sólo o
combinado) se acompañafrecuentemente con ataxia e incoordinación. No es raro que el
caballo tarde 1 hs. para incorporarse y es evidente la presencia de mareo hasta unas horas
después de la incorporación. La recuperación puede mejorarse con el uso adecuado de la
premedicación.
Dosis: 10-15 mg/kg. EV.
Clorhidrato de Ketamina: (Anestésico disociativo). La anestesia se produce por un
mecanismo totalmente diferente al de los anestésicos convencionales. Deprime el sistema
talamoneocortical y activa el sistema límbico. En consecuencia la anestesia se caracteriza por
intranquilidad o disforia, alucinaciones, delirio o excitación. Se cree que induce anestesia y
amnesia por disrupción funcional del SNC mediante su estimulación o promoción de un estado
cataléptico. El paciente se presenta “disociado” más que inconsciente. Los ojos permanecen
abiertos (reflejo palpebral y corneal), y se conserva cierto grado de reflejo deglutorio
durante algunos minutos luego de la administración EV, mientas que se desarrolla una
analgesia somática intensa. La permanencia de estos reflejos dificulta la evaluación de la
profundidad de su efecto. A pesar de no desparecer el reflejo deglutorio es factible pasar un
tubo endotraqueal. El globo ocular rota hacia ventral y a menudo presenta un nistagmo
rápido. La relajación muscular es mala, por eso se la combina con otras drogas. Las funciones
cardíaca y respiratoria, se mantienen dentro de los niveles normales, la presión sanguínea y
la frecuencia respiratoria pueden llegar a aumentar. La ketamina administrada sola, aumenta
la FC, la presión sanguínea pulmonar y sistémica, la resistencia vascular periférica, el
volumen minuto, la contractilidad cardíaca y el consumo de O2 del miocardio. Aunque tiene
efectos mínimos sobre las respuestas ventilatorias hipóxicas e hipercárbicas, induce un
patrón apnéustico de respiración, acompañado por una hipoventilación leve e hipercapnia
cuando el caballo respira aire (producto del decúbito prolongado).
La redistribución de ketamina hacia el tejido muscular es el principal determinante de la
duración de su acción. Cerca del 60 % de la dosis se metaboliza en el hígado, el 40 % restante
se elimina sin cambios con la orina.
En el caballo las dosis anestésicas son convulsivantes y por ello no debe utilizarse la ketamina
sin la administración previa de un sedante potente. Por lo general se emplea después de la
premedicación con agonistas α2 adrenérgicos, Guaifenesina, una benzodiacepina o una
combinación de éstos. La dosis de ketamina es crítica. Una subdosificación resulta en una
anestesia inadecuada, mientras que la sobredosis lleva a una depresión marcada y decúbito
prolongado. Entonces resulta importante realizar una correcta evaluación del peso corporal.
En menos del 0,1 % de los caballos no se puede inducir la anestesia. Al parecer, la respuesta
en mulas y burros no es predecible. La inyección de 3 veces la dosis correspondiente al
equino resulta en la estimulación o la falta de respuesta. 
La duración de la anestesia es corta (15-30 minutos), pero satisfactoria para cortos
procedimientos y como inducción anestésica.
Se contraindica en pacientes con hipertensión sustancial, insuficiencia cardíaca y aneurismas
arteriales, ya que podría ser peligroso. También en insuficiencia hepática o renal. Puede
incrementar la presión del LCR y no debería ser utilizada en casos de presiones elevadas o
cuando hay traumatismo craneano. Se considera relativamente contraindicada cuando hay
incremento de la presión intraocular o lesiones oculares abiertas, y para los procedimientos a
nivel de la faringe, laringe o tráquea.
Los bloqueantes neuromusculares (ej: succinilcolina o tubocurarina) pueden acrecentar o
prolongar la depresión respiratoria.
Dosis: Con premedicación= 2-3 mg/kg. EV. Para potrillos y ponies agregar 500 mg. de
ketamina y 250 mg. de xilacina a 500 ml. de solución de guaifenesina al 5 %. Para inducción
administrar 1,1 mg/kg EV con rapidez. La anestesia puede ser mantenida mediante infusión
EV constante de 2-3 ml/kg/hora. Dosis más bajas para potrillo, dosis más altas para ponies.
Presentación al 5 y 10 %.
Se debe supervisar los ojos para evitar la desecación o daño (colocar algún colirio y
masajear), y la temperatura corporal.
Propofol. Agente hipnótico de acción corta. Debido a su costo se la puede utilizar solo en
potrillos y ponies. Su administración EV en bolo, o infusión rápida diluida en solución salina
isotónica, produce un decúbito rápido. Las dosis anestésicas producen falta de conciencia y
buena miorrelajación. Los efectos cardiovasculares incluyen hipotensión arterial, bradicardia
(especialmente en combinaciones preanestésicas con opioides) e inotropismo negativo.
Causa depresión respiratoria significativa, en particular con la administración rápida o dosis
muy altas. Asimismo disminuye la presión intraocular. No produce analgesia. La
premedicación con xilacina (0,5 mg/kg) o detomidina (20 µg/kg), produce una inducción
regular y libre de excitación, es de esperar una tranquila recuperación en 20 a 30 minutos. 
Si es necesario, la anestesia puede mantenerse con una infusión IV de propofol a razón de 0,2
mg/kg/min. Hay un gran interés en ésta droga porque el tiempo anestésico puede prolongarse
por medio de la administración de dosis incrementadas sin alterar el tiempo de recuperación.
El propofol puede ser empleado con seguridad en pacientes con enfermedad renal o hepática
y en casos de enfermedad cardíaca de leve a moderada.
Después de la administración EV, atraviesa con rapidez la barrera hematoencefálica, con un
comienzo de acción dentro del minuto. La duración de acción después de un solo bolo es de
2-5 minutos. La corta duración de acción, se debe principalmente a su rápida redistribución
desde el SNC hasta otros tejidos. Se biotransforma con rapidez en el hígado mediante
conjugación con glucurónido hasta metabolitos inactivos, que luego son excretados
primariamente por los riñones. La afinidad proteica es elevada (95-99%), atraviesa la
placenta, es muy lipofílica e ingresa en la leche. Dada su elevada afinidad por las proteínas,
los pacientes hipoproteinémicos pueden ser susceptibles a sus efectos perjudiciales. Si se
administra con rapidez se incrementa la incidencia de apnea con la resultante cianosis, se la
debe administrar con lentitud. Manejar con ventilación asistida hasta que reaparezca la
ventilación espontánea. 
 Dosis: Potrillos 2 mg/kg EV (con premedicación). Se puede realizar una infusión para
mantenimiento de 0,25-0,45 mg/kg/minuto. Presentación al 1 %.
Opiáceos. Son analgésicos potentes. Actúan a nivel de numerosos receptores, entre los
cuales el µ es responsable de los efectos analgésicos más potentes, pero también de efectos
adversos como depresión respiratoria y reacciones de excitación “eufóricas”. Otros
receptores (en especial κ y δ) contribuyen en parte a una analgesia menos intensa. La
morfina, la metadona y la petidina actúan como agonistas (puros) del receptor µ. Los
nuevos agentes sintéticos (agonistas parciales) producen una variedad de acciones agonistas-
antagonistas a nivel de diferentes receptores, que dependen en parte de la dosificación, entre
estos el butorfanol es indicado en el caballo.
En general producen poca sedación en los equinos cuando se emplean solos, pero sus
resultados son excelentes cuando se los combina con dosis bajas de sedante. Los opiáceos
causan depresión respiratoria y reducen la motilidad intestinal, pero estos efectos rara vez
representan un problema en los caballos, en especial cuando se han administrado dosis bajas
para la restricción química. La excitación es un efecto adverso, en particular de la morfina,
que puede representar un problema importante. Se puede manifestar de diferentes maneras:
como contracciones musculares,en especial alrededor del hocico, como acatisia o como una
reacción violenta. La excitación depende de la dosis; las reacciones violentas son más
frecuentes luego de la inyección EV que de la IM. Por fortuna este problema es muy poco
común cuando se emplean dosis bajas de opiáceos combinados con sedantes y anestésicos.
El efecto de los opiáceos µ agonistas se puede revertir mediante antagonistas opiáceos como
naloxona. Estos antagonistas rara vez son necesarios cuando se emplean dosis terapéuticas
normales para restricción química o como premedicación, pero son muy valiosos para
emergencias.
Los agonistas-antagonistas (pentazocina, nalbufina) producen aumento significativo de la FC
y del volumen minuto cardíaco, permaneciendo así por 15-30 minutos para luego volver a los
valores normales. La presión arterial media y la resistencia vascular periférica aumentan y
permanecen así durante 60 minutos, aprox. La FR se ve también aumentada poco después de
la administración de agentes agonistas, retornando a valores normales dentro de los 15
minutos. En contraste con estos hallazgos, el butorfanol no afecta significativamente la
frecuencia ni el volumen cardíaco minuto, presiones arteriales, etc. El butorfanol y los otros
opiáceos agonistas-antagonistas provocan un aumento en el tono del músculo liso
gastrointestinal y de los esfínteres, aceleran las contracciones rítmicas no propulsivas y
disminuyen las propulsivas, efecto más significativo en el intestino delgado proximal. Luego
de éste período de hipermotilidad continúa un período de relativa atonía del músculo
intestinal, aumento del tono de la válvula íleocecal y disminución o abolición de las ondas
propulsivas peristálticas. También existe un incremento del tono del esfínter anal y
disminución en la respuesta de los estímulos que inician el reflejo de la defecación. Todo esto
da como resultado un aumento en la absorción de agua a nivel colónico y producción de
heces más secas y duras.
La petidina (1-2 mg/kg) por vía IM provee una buena analgesia con cierto grado de sedación
durante 1-2 hs. tiene acción espasmolítica intestinal, por lo que es un analgésico excelente
para los cólicos espasmódicos. Se puede usar la dosis de 0,3 mg/kg EV si se la combina con
acepromacina y xilacina.
Los agonistas del receptor µ como la morfina (0,1 mg/kg) y la metadona (0,1 mg/kg), se
emplean menos como analgésico debido al riesgo de excitación, pero si se administran con
sedantes o por vía IM proporcionan una analgesia posoperatoria adecuada durante alrededor
de 4 hs. 
El butorfanol (un opiáceo sintético agonista-antagonista) Es un analgésico eficaz en equinos.
Su efecto comienza a los 3 minutos de su aplicación y tiene una duración máxima de 4 hs. En
algunas ocasiones causa un grado de excitación que rara vez constituye un problema clínico.
El butorfanol, administrado 2 a 3 veces por día, logra analgesia durante varios días. Puede
reducir la motilidad intestinal, pero no suele causar impacción. También se emplea en el
tratamiento de los cólicos y para la analgesia posoperatoria. Las dosis de butorfanol son de
0,05-0,1 mg/kg EV o IM.
Presentación: solución inyectable al 1 % (para equinos).
La Buprenorfina es un nuevo opiáceo sintético (agonista parcial). Se puede lograr una
sedación leve con la aplicación de 0.05 mg/kg de acepromacina y 0,01 mg/kg de buprenorfina
EV para una mayor sedación utilizar 0,5-1 mg/kg de xilacina y 0,01 mg/kg de buprenorfina
también vía EV en ninguna de estas combinaciones se observan efectos cardiovasculares y
pulmonares significativos.
Nalbufina (Agonista-antagonista). Agonista sobre los receptores κ y antagonista sobre los
receptores µ. Se utiliza como analgésico narcótico para el manejo del dolor de origen
somático y/o visceral. Es equipotente con la morfina. Está indicado para el control del dolor
leve a moderado.
Dosis: 0,05-0,2 mg/kg EV como parte de protocolo preanestésico. Presentación al 1 %.
Antes de proceder a la cirugía de una afección dolorosa se debe administrar un analgésico
junto con la premedicación, con el objetivo de potenciar los efectos de los sedantes y
tranquilizar al caballo. Antes de una cirugía ortopédica es más apropiado utilizar la
premedicación con un opiáceo, en lugar de otro tipo de analgésico.
Naloxona (Antagonista opioide). Antagonista competitivo que se une a los receptores µ, κ
y δ.
Dosis: para revertir efectos de los opioides 0,01-0,02 mg/kg EV. 
AINES. Agentes antinflamatorios no esteroides. Proveen una analgesia posoperatoria
excelente, gracias a una acción directa y a la reducción del edema inflamatorio.se puede
administrar antes o durante la anestesia, para producir efecto durante el período de
recuperación. Algunas preparaciones pueden afectar el aparato cardiovascular, de modo que
la administración EV debe ser lenta, durante no menos de 1 minuto en el caballo anestesiado.
La mayor parte de los AINES inhibe la síntesis de prostaglandina. A pesar de que los caballos
suelen desarrollar hipotensión marcada durante la anestesia por inhalación, no se
describieron problemas asociados a daño renal por la utilización de estos agentes.
Meglumina de Flunixin: Tiene un potente efecto analgésico y antipirético. Es muy usado en
el síndrome de abdomen agudo del equino, tanto como analgésico como en el pre y
posquirúrgico, siendo muy indicado en estos casos por no actuar sobre los marcapasos del
intestino, por lo tanto no produciendo íleo paralítico. Además tiene un efecto muy importante
como antiendotoxémico. Se presenta en solución al 1 %. Dosis: 1 mg/kg EV. Como
antiendotóxico= 0,25 mg/kg EV. c/8 hs.
Fenilbutazona. Tiene propiedades analgésicas, antiinflamtorias, antipiréticas y uricosúricas
leves. El mecanismo de acción es la inhibición de la ciclooxigenasa, reduciendo la síntesis de
prostaglandinas. Otras acciones farmacológicas pueden incluir disminución del flujo
sanguíneo renal, volumen de filtración glomerular y agregación plaquetaria, y daño de la
mucosa gástrica. La afinidad por las proteínas plasmáticas supera el 99 % en los caballos. La
eficacia terapéutica puede durar más de 24 hs., probablemente debido a la unión irreversible
de la Fenilbutazona a la ciclooxigenasa. Está contraindicada en pacientes con antecedentes o
presencia de anormalidades hematológicas o medulares y ulceraciones digestivas. El empleo
cuidadoso en potrillos y ponies se recomienda debido a la mayor incidencia de
hipoproteinemia y ulceración gastrointestinal. Los potrillos con cargas parasitarias masivas o
que están subnutridos pueden ser más susceptibles al desarrollo de efectos adversos.
No administrar por vía SC ni IM, porque es muy irritante (de tumefacción a necrosis y
esfacelamiento). Las inyecciones intracarotídeas pueden causar estimulación nerviosa
central y convulsiones.
La Fenilbutazona puede antagonizar el incremento del flujo sanguíneo renal causado por la
furosemida. El empleo concurrente con otros AINES puede incrementar la posibilidad de
reacciones adversa, sin embargo, muchos clínicos utilizan como rutina en los caballos
Fenilbutazona junto a la meglumina de flunixin.
Dosis: 4,4-8,8 mg/kg/24 hs. bucal o 3-6 mg/kg/12 hs EV (no superar los 8,8 mg/kg/día).
Presentación al 20 %.
Ketoprofeno. Actividad similar a la de otros AINES. En equinos se utiliza para el manejo de la
inflamación y el dolor resultante de los procesos musculoesqueléticos. Similar a la flunixina.
Tiene elevada afinidad por las proteínas plasmáticas (93 %). El comienzo de actividad, es
dentro de las 2 hs. y los efectos máximos a las 12 hs. posdosis. Los estudios e informes
preliminares indicaron que el ketoprofeno parece ser relativamente seguro en caballos y que
pueden tener menor incidencia de efectos adversos que con la Fenilbutazona o la flunixina.
Potencialmentepodrían ocurrir daño de la mucosa gástrica, ulceración gastrointestinal,
necrosis de cresta renal y hepatitis leve.
Dosis: 2,2 mg/kg EV c/24 hs hasta por 5 días. 
Presentación al 10 %.
Cateterización. De más está decir que es absolutamente necesario, antes de la inducción
anestésica, colocar un catéter IV para tener una vía permeable y poder administrar los
fármacos y fluidos que sean necesarios durante la anestesia, aun cuando se trate de
procedimientos menores. Para colocar un catéter se prefiere la vena yugular, salvo que por
alguna razón se deba utilizar otra vena superficial como las safenas o cefálica antibraquial. Se
debe rasurar la zona donde se colocará el catéter, para la yugular generalmente un abbocath
Nº 14 el lugar indicado es la intersección entre el tercio medio y anterior. Luego de colocado
se lo fija mediante un punto de sutura a la piel, para evitar que se salga con los movimientos
del cuello del caballo, los tirones, etc., y se conecta al tubo de perfusión conectado en su otro
extremo al sachet con líquido IV (perfus), al que también se fija con un punto.
A continuación se describirán los pasos a seguir durante el procedimiento anestésico y
algunos protocolos a modo de ejemplo, ya que estos pueden variar según cada caso en
particular y las preferencias del anestesista.
 Premedicación : En esta etapa se procederá a administrar las drogas que mejor se
adapten al tipo de paciente a intervenir, al tipo de cirugía, a la duración de ésta, etc.
(luego de haber realizado un examen clínico, de laboratorio y complementarios si fuera
necesario). 
Aquí podemos utilizar según el caso anticolinérgicos, tranquilizantes mayores y menores,
sedantes y analgésicos. 
1. Ej: Acepromacina 0,03 mg/kg EV, luego de 15-20 minutos xilacina 0,5 mg/kg EV (o
detomidina 20 µg/kg EV)
2. Acepromacina 0,03 mg/kg EV, 15 minutos después nalbufina 0,05 mg/kg EV. 
3. Detomidina 10 µg/kg EV, 5 minutos después butorfanol 0,01 mg/kg EV.
4. Glicopirrolato 5 µg/kg EV, romifidina 50 µg/kg EV.
5. Diazepam 0,2 mg/kg EV. (potrillo)
 Inducción: En ésta etapa se administran las drogas inductoras y/o coadyuvantes que
provocarán el decúbito del animal y la transición al estado de inconciencia.
Aquí podemos emplear según el caso los barbitúricos, anestésicos disociativos, propofol y
miorrelajantes. A las combinaciones preanestésicas antes mencionadas les podemos
agregar, siguiendo ese orden:
1. Ketamina 2 mg/kg EV.
2. Tiopental sódico 10 mg/kg EV.
3. Ketamina 2mg/kg más Diazepam 0,02 mg/kg EV.
4. Guaifenesina 25-50 mg/kg EV más tiopental sódico 10 mg/kg EV.
5. Propofol 2 mg/kg EV.
 Luego viene la etapa de intubación endotraqueal, que será desarrollada en el tema
correspondiente a anestesia inhalatoria. 
 El mantenimiento de la anestesia general lo podemos realizar por medio de la técnica
TIVA (anestesia IV total), esta técnica del “triple goteo” consiste en una combinación de
un agonista α2 adrenérgico (xilacina o detomidina), más guaifenesina y ketamina.
Aunque los 3 fármacos tienen efectos relativamente acumulativos (en especial la
guaifenesina), la técnica ha demostrado ser muy útil para el mantenimiento, para
lograr la prolongación controlada de la anestesia de campo, pero también se emplea
para procedimientos de cirugía mayor. Es conveniente en procedimientos que duran
menos de 3 hs, ya que en casos más prolongados la guaifenesina se acumula y
conduce a recuperación atáxica.
Guaifenesina 100 mg/ml, detomidina 0,02 mg/ml (o xilacina 1 mg/ml) y ketamina 2 mg/ml.
esta solución se prepara agregado 1 gr. de ketamina y 10 mg. de detomidina (o 500 mg. de
xilacina) a 500 ml de guaifenesina al 10 %. La anestesia se mantiene con una infusión de
alrededor de 1 ml/kg/h de solución, al cabo de 60 minutos se debe reducir a la mitad.
Otra opción para mantenimiento sería ketamina 0,75-1 mg/kg EV cada 20 minutos si fuera
necesario.
 Recuperación debe ser lo más tranquila posible, minimizar los estímulos extraños. Es
otro período crítico de la anestesia, debido a su naturaleza algunos caballos sienten
pánico durante la salida anestésica y tratan de pararse en forma prematura. Si se
cuenta con un box de recuperación, este debe ser acolchado en toda su superficie. Si
no se cuenta con esto y la recuperación es a campo, una vez que el anestesista decide
que ha transcurrido el tiempo suficiente como para que el caballo esté capacitado para
coordinar movimientos, es estimulado para que pase a un decúbito esternal y luego a
la estación. 
Bibliografía.
-Alexander, Alfonso. “Técnica Quirúrgica en Animales y Temas de Terapéutica Quirúrgica”. 4º 
Edición. Ed. Interamericana. 1981.
-Colahan, Patrick, T. “Medicina y Cirugía Equina”. Vol. 1. Ed. Intermédica. 1988.
-Facultad de Ciencias Veterinarias UBA, guía de estudio “Anestesiología en el Equino”.
-Hickman, John. “Cirugía y Medicina Equinas”. Vol. 1. Ed. Hemisferio Sur. 1998.
-Hinchcliff, Kenneth, W. “Medicina y Cirugía en los Equinos de Deporte”. Vol. 1. Ed. 
Intermédica. 2007.
-Plumb, Donald, C. “Manual de Farmacología Veterinaria”. 5a ed. Ed. Intermédica. 2006.
-Taylor, P, M. “Manual de Anestesia en Equinos”. Ed. Intermédica. 2001.
-Turner, Simon, A. “Técnicas Quirúrgicas en Animales Grandes”. Ed. Hemisferio Sur.1988. 
http://www.fcv.unl.edu.ar/archivos/posgrado/especializaciones/espsaludanimal/informacion/
material/250411/FARMACOLOGIA%20CLINICA%202011/Curso%20Otero%202008/Anestesia
%20general%20(TIVA).pdf
http://www.agrovetmarket.com/investigacion-salud-animal/pdf-download/manejo-anestesico-
del-equino-anestesia-intravenosa
http://www.agrovetmarket.com/investigacion-salud-animal/pdf-download/manejo-anestesico-del-equino-anestesia-intravenosa
http://www.agrovetmarket.com/investigacion-salud-animal/pdf-download/manejo-anestesico-del-equino-anestesia-intravenosa
http://www.fcv.unl.edu.ar/archivos/posgrado/especializaciones/espsaludanimal/informacion/material/250411/FARMACOLOGIA%20CLINICA%202011/Curso%20Otero%202008/Anestesia%20general%20(TIVA).pdf
http://www.fcv.unl.edu.ar/archivos/posgrado/especializaciones/espsaludanimal/informacion/material/250411/FARMACOLOGIA%20CLINICA%202011/Curso%20Otero%202008/Anestesia%20general%20(TIVA).pdf
http://www.fcv.unl.edu.ar/archivos/posgrado/especializaciones/espsaludanimal/informacion/material/250411/FARMACOLOGIA%20CLINICA%202011/Curso%20Otero%202008/Anestesia%20general%20(TIVA).pdf

Otros materiales