Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
2 3 4 5 Foodie Love con... Chococake vegano (receta) Burrata (receta) Ficha técnica Sinopsis general Sinopsis capítulos 1 y 2 Expresso con cítricos (receta) Breakfast in Kentucky (receta) Sinopsis capítulos 3 y 4 La gyoza de Proust (receta) Tortilla de patatas babosa (receta) Porchetta (receta) Sinopsis capítulos 5 y 6 Avocado toast El croissant perfecto Sinopsis capítulos 7 y 8 Ramen casero para principiantes (receta) Isabel Coixet Laia Costa Guillermo Pfening Calamar curado, consomé de ave y caviar (receta) Espárrago de Tudela con holandesa de foie y lima (receta) Chaulafán (receta) Cheesecake (receta) Huevos revueltos con yuzu (receta) ÍNDICE 6 8 12 16 18 21 22 26 28 30 34 38 43 44 50 54 56 66 68 70 72 75 78 82 Recetario: Montse Palacín Fotografías de la serie: Zoe Sala Coixet 6 7 Laia Costa, Guillermo Pfening y la colaboración especial de Agnès Jaoui, Yolanda Ramos, Tony Thornburg, Natalia de Molina, Greta Fernández, Luciana Littizzetto, Eloi Costa, Malcolm McCarthy, Nausicca Bonnin, Ferrán Adrià… Creada, escrita y dirigida por: Isabel Coixet CON 8 9 Si hablamos de tendencias gastronómicas, esta receta estaría en el top ten, ya que lo tiene todo para llegar al gastroestrellato: es apta para veganos, chocoadictos, healthyfoodies, coffeeholics..., algunas de las corrientes que lideran el universo foodie en este momento. Esta exquisita tarta vegana con chocolate, café, pistachos y pétalos de rosa no sólo está de muerte, sino que responde a una necesidad creciente del público: comer dulces más sanos y que no contengan productos derivados de la explotación animal. Además, aparte de su aspecto final, sencillo pero espectacular, la receta tiene otra particularidad que la hace más apetecible si cabe (al menos para una servidora), y es que se trata de una adaptación muy lograda del “Chocolate Vegan Cake” de la chef londinense Nigella Lawson. Y, como ya veo que ardes en deseos de comprobar todo esto por ti mism@, ponte ipsofactamente el delantal porque te aseguro que este plato no sólo te garantizará el éxito entre aquellos amigos o familiares veganos, sino un ascenso de nivel en el mundo foodie: ser de l@s poc@s “elegid@s” que saben hacer repostería vegana (es decir, sin huevos, sin mantequilla, sin leche, sin yogur, sin nata…) que es, simplemente ¡Todo un reto! Así que: ¿Dispuest@ a ser catapultad@ al estrellato foodie? Chococake Vegano 1 Hierve el agua, ya mezclada con el café, en una olla mediana. ELABORACIÓN: • 1l de cafe espresso • 375 ml de agua (sin contar la del café) • 225 g de harina de trigo (preferiblemente bio e integral) • 75 g de cacao • 1 pizca de sal • ½ cucharada de postre de bicarbonato • 300 g de azúcar moscovado • Aceite de coco (75 g sólido o 90 ml líquido) • 1 cucharada de postre de extracto de vainilla • ½ cucharada de postre de vinagre de manzana • 200 g de azúcar mascabado glas (si no lo encuentras, pásalo por un molinillo de café limpio) 190 gr para la mezcla y 10 para espolvorear sobre el pastel • 1 cucharada sopera de cacao • 30ml de agua caliente • 30gr de pistacho molido (esta vez con un mortero o picadora) • 15 gr pétalos de rosa aptos para la alimentación (los más seguros son los que venden en las tiendas gourmet especializadas o proveniente de una plantación eco de confianza3…) INGREDIENTES2: 2 Tamiza la harina, el cacao, el bicarbonato y la sal en un bol grande. 3 Enciende el horno para que se vaya calentando. 4 Cuando el agua con café esté hirviendo, echa el azúcar y el aceite de coco. 5 Remuévelo bien hasta conseguir una mezcla homogénea y retíralo del fuego, añadiéndole entonces la vainilla y el vinagre y removiendo de nuevo. 6 Ahora es el momento de verter este líquido resultante en el bol con la harina y los otros ingredientes, mezclarlo todo muy bien y verter el resultado en el molde, previamente untado con aceite y una pizca de harina, y … ¡al horno! 7 Cuando el pastel esté cocido déjalo enfriar bien antes de decorarlo. Receta por gentileza de Hayden Colledg e 1 Para la decoración: 10 11 1 Hayden Collegde de “The Cake Man Bakery” de Barcelona, y es el proveedor de repostería de ESPAI JOLIU, donde se rodaron algunas de las secuencias más destacadas de la serie y también se tomaron estas fotos. 2 Medidas para un molde redondo de 23cm de diámetro, o equivalentes. Tiempo de coccion -40 min, temperatura del horno –175ºC. 3 …cómo la maceta de tu vecino ecologista y vegano, al que puedes obsequiar después con un pedazo de tarta como agradecimiento y ¡ya lo tienes de aliado fiel en las próximas reuniones de la Comunidad! NOTAS 1 Pon el azúcar glas y el cacao en un bol y luego le echas el agua caliente y lo remueves hasta que tenga una consistencia como de miel. DECORACIÓN PASO A PASO: 2 Tira la mezcla por encima del pastel y, con una lengua pastelera o de cocina, la vas extendiendo suavemente por la superficie hasta cubrir toda la tarta. 3 ¡Echa los pistachos por encima el resto del azúcar glas y, por último, los pétalos de rosa …et voilà! 12 13 1 La burrata es un afamado y reconocido queso fresco italiano, procedente de la región de la Puglia que, aunque a primera vista se parezca mucho a la mozzarella (también se puede hacer con leche de búfala como ésta) no lo es. Una de las diferencias principales entre las dos elaboraciones reside en que sólo la burrata tiene ese interior cremoso tan peculiar y distintivo! Otra diferencia está en la forma de elaborar ambos porque, en el caso de esta, el procedimiento es, después de cuajar la leche, sumergir el resultado en suero lácteo caliente. Esto produce el característico aspecto y textura de la burrata, ya que se forman unos filamentos muy mantecosos. En Foodie Love, como no podía ser de otra forma, también aparece la burrata… Bueno, las burratas. Una es la "Burrata con tartar de tomate y fresas, fresitas maceradas al jerez con tocino ibérico soasado y polvo de jamón ibérico" del restaurante La Pepita de Barcelona es la que comparten juntos. Y la otra la "Burrata con piñones y emulsión de tomate y albahaca" también de la misma procedencia, es la que devora él cuando la está echando de menos. Así que, ¿os parece si hacemos una fusión de ambas, un poco más sencillita para ir entrando en materia? ¡Ahí vamos! Pon a calentar una sartén antiadherente, sin añadir nada de aceite, mantén el fuego a temperatura media y tuesta los piñones moviéndolos continuamente. En cuanto empiecen a tomar color, retíralos para que no se quemen y resérvalos. ELABORACIÓN: • 1 burrata grande • 250g de tomates cherry (mejor si son de colores variados) confitados • Un puñadito de piñones pelados • Brotes de espinacas, lechuga, rúcula… • Unas hojas frescas de albahaca • 1 cda de aceite aromatizado (procedente de los tomates confitados) • Una pizca de sal Maldon y de pimienta negra recién molida INGREDIENTES: Burrata 2 Dispón la lechuga y los brotes verdes en un plato grande, después de lavarla y cortarla, o no, a tu gusto. 3 Escurre la burrata del suero y sécala un poco con papel de cocina absorbente. 4 Colócala en el centro del plato, sobre la ensalada y reparte los tomates cherry confitados, que previamente habrás escurrido (reserva ese aceite porque luego lo utilizaremos para aliñarla) alrededor de la burrata. 5 Ponle por encima los piñones tostados, añade las hojas de albahaca, enteras o troceadas y salpimienta con unas escamas de sal y pimienta recién molida, y añade el aceite aromatizado de los tomates confitados. 6 Cuando la sirvas, ten a mano un cuchillo afilado para abrir el centro de la burrata y que irrumpa de su interior la llamada ‘stracciatella’, la parte más espectacular y preciada del plato y que permite que todos los comensales puedan disfrutar de ella. 14 15 1 Lavarlo y secarlo todo (tomates, hierbas etc.) ELABORACIÓN: • Medio kgde tomates cherry (mejor si son de varios colores) • Un cuarto de litro de aceite de oliva virgen extra • Unas ramitas de hierbas (albahaca, orégano, salvia, romero y tomillo son una buena opción, y puedes utilizar varios juntos o uno sóla) • Un par de ajos, sal, azúcar y bolitas de pimienta INGREDIENTES: 2 Ponerlo en una cazo amplio para que los tomates no estén apretujados. 3 Añadir los tomates, los ajos pelados y cortados en 2, las hierbas, una cucharadita de café de sal y otra de azúcar y los granos de pimienta. 4 Cubrirlo todo con el aceite y ponerlo a fuego medio. 5 Cuando veas que ya empieza a subir la temperatura, bájalo al mínimo, tápalo y déjalo confitando durante 1 hora. 6 En los 10 minutos finales, saca la tapa y sube un poquito la temperatura. ¿Qué cómo hacer los tomates confitados? Muy fácil sólo tienes que tener: 7 Apaga el fuego y déjalos enfriar. Con ellos tendrás guarnición asegurada para unos días si los guardas en un bote con el aceite. 16 17 FICHA TÉCNICA Dirección de fotografía: Natasha Braier, ASC (capítulos 1 y 2), Jean Claude Larrieu (capítulos 3, 4, 6 y 7), Nils Dalmases (capítulo 5), Jennifer Cox (capítulo 8) Ayudante de dirección: Luca Vacchi Dirección de arte: Sylvia Steinbrecht Diseñadora de vestuario: Suevia Sampelayo Maquillaje y peluquería: Carmina Camps y Benjamín Pérez Sonido: Albert Gay y Enrique G. Bermejo Cásting: Anna González Pascual Montador: Jordi Azategui, AMMAC Directora de producción España: Elisa Sirvent Directora de producción Francia: Isabelle Steinl-Sthal Director de producción Italia: Walter Fiordelmondo Director de producción Japón: Suguru Mateo Producción ejecutiva Miss Wasabi: Ingrid Fernández de Castro Producción ejecutiva HBO Europe: Antony Root, Miguel Salvat, Steve Matthews Canción de créditos: “Heard somebody whistle”, de Jay Jay Johansson 18 19 El algoritmo de una aplicación para encontrar pareja entre amantes de la gastronomía conecta a los protagonistas de FOODIE LOVE, una chica y un chico que comienzan a conocerse con las dudas propias de quien conserva cicatrices de relaciones anteriores. A lo largo de varias citas tendrán que descubrir si coincidencias como su devoción por el yuzu japonés o su alergia común al postureo foodie son suficientes para construir los cimientos de una historia de amor duradera. SINOPSIS 20 21 CAPÍTULO 1 “Solo un café” Dos amantes de la gastronomía (foodies) tratan de romper el hielo en su primera cita, pero sortear la tensión, los nervios y las meteduras de pata es más difícil que hablar de platos únicos. Para su sorpresa, lo que iba a ser “solo un café”, promete algo más. CAPÍTULO 2 “Breakfast in Kentucky” El segundo encuentro tampoco resulta como se la habían imaginado. ¿Qué pasa cuando te emborrachas esperando a una cita impuntual? Que las máscaras caen. Tras sortear algunos obstáculos, nuestros foodies se encuentran entre pastrami y cócteles de whisky y bacon. O casi. 22 23 1 Algunos gastroclarividentes preconizan la irrupción, en un futuro cercano, del café molecular1, arguyendo que no habrá suficiente grano de café para todos y se tendrá que reproducir en un laboratorio donde, tras descifrar su estructura molecular, podrán sacar la receta. Antes de que lleguemos a ese porvenir distópico que se cierne sobre nuestras papilas gustativas ¿qué os parece si disfrutamos de una taza de auténtico café? La propuesta, que podría pertenecer al menú de cualquier Specialty Coffee de los que siguen proliferando en nuestro panorama cafetero y barista, tiene el plus de ser el primer café compartido por ELLA Y ÉL. Y es que el café es el producto más omnipresente de la serie Foodie Love, y sus protagonistas ¡unos auténticos coffeeholics! Si pudiéramos sumergirnos físicamente en los fotogramas de este nuevo trabajo de Coixet nadaríamos, literalmente, en café: ristrettos, espressos, foddiecoffeess preparados por baristas, café casero recién molido - ¡como mandan los cánones! - en el clásico e ignominiosamente relegado molinillo2 que ELLA prepara en su cocina3; charlas sobre cafeteras4... ¡Sí, incluso se lo llegan a comer en forma de pastel! Pero, ¡vayamos al grano! Los cítricos para hacer esta receta pueden ser los que más te gusten (mandarina, lima, pomelo, limón…), incluso la mezcla de algunos de ellos. La elección de la naranja es porque reproduce más fielmente el que se toman ellos, aunque si lo tuneas con yuzu también será muy foodielover. Si preparas este café en casa te sirve tanto una cafetera americana, como la típica italiana que todos tenemos en la cocina, e incluso una máquina de cápsulas. Y sólo necesitas: Pela el cítrico con un cuchillo que corte bien, procurando no coger la parte blanca, porque amarga. ELABORACIÓN: • Un buen café en grano molido al momento (es la mejor opción, pero también podéis utilizar el que tengas por costumbre y en el formato al que estés más familiarizad@) • 1 litro de agua mineral (2 litros si lo hacemos en cafetera americana o cápsula) • 1/2 cucharada de sirope o miel de naranja • 1 cucharada de zumo de naranja recién exprimido • Piel de naranja (se puede encontrar también deshidratada) • Canela molida y en rama • Opcional: virutas y/o canutillos de chocolate (o ralladura), cacao en polvo INGREDIENTES: Espresso con cítricos 2 Reserva los trozos más bonitos para la decoración. 3 Exprime la pulpa para obtener una cucharada sopera de zumo por taza. 4 Infusiona la piel de naranja y un trozo de canela5 en rama en el agua hasta que se evapore la mitad del líquido. 5 Déjala reposar tapada 10 minutos y, a continuación, llena el depósito de tu cafetera con ella. 6 Muele el café, llena la cafetera y ponla al fuego (o enciende la máquina correspondiente). 7 Disuelve el sirope o miel de naranja en una cucharada de zumo recién hecho y echa la mezcla a la taza. 8 Vierte encima el café, coloca las pieles y espolvoréalo con un poco de canela6 en polvo y las virutas de chocolate y ¡A disfrutar! También se puede hacer en versión cappuccino con espuma de leche o nata para los más golosos o, incluso ¡un carajillo foodie si le añades unas gotas de licor de naranja! 24 25 1 Y no es una broma, de hecho, la startup Atomo Coffee ya ha presentado Molecular Coffe – Se trata de una nueva bebida que imita perfectamente las cualidades organolépticas de un café sin utilizar ni un solo grano de éste. Un proyecto al que también se ha sumado la empresa que, en su momento, invirtió en Impossible Food, la llamada carne vegetal que ya arrasa en Burger King. 2 Un electrodoméstico antes indispensable en toda casa , y que hoy se considera demodé... ¡deberíamos reivindicarlo aprovechando esta ligera cura de la fiebre capsulera! 3 Concretamente un Jamaica Blue Mountain. 4 Desde la mítica “cafetera italiana” o “moka, hasta la sofisticada Marzocco… 5 Si te gusta un sabor más especiado, puedes añadir una estrella de anís, un par de semillas de cardamomo, jengibre fresco o en polvo… eso ya es cuestión de gustos y de si te apetece experimentar. 6 Da rienda suelta a tu creatividad con todo tipo de virguerías, como enrollar la piel de naranja en una rama de canela o en un canutillo de chocolate… Esta receta pertenece al grupo de los que podríamos denominar foodiecoffees o specialty coffees y, aunque mezclar café caliente con cítricos parezca una opción sorprendente y bastante novedosa (en los granizados y bebidas frías a base de café es más habitual) este matrimonio ya convive desde hace años en preparaciones como el Caffè Romano, que es básicamente un trago de espresso servido con una rodaja de limón o cáscara (aunque ya no es tan frecuente encontrarlo en las cafeterías italianas como antes) y que parece ser que tiene su origen en la Segunda Guerra Mundial cuando, debido a la escasez de agua, el limón se usó para desinfectar tazas y otros utensilios. Su difusión en las cafeterías y los hogares se benefició de lacreencia, no sé si confirmada científicamente, de que esta mixtura iba bien para remediar el dolor de cabeza. Y más cerca tenemos otro ejemplo, el “Cafè del temps” valenciano, que se sirve con zumo de limón recién exprimido. IN F O O D NOTAS ↓ 26 27 1Bienvenid@s a la nueva edad de oro de la coctelería. El revival de este arte es un hecho irrefutable y a los maestros cocteleros se los rifan en algunos de los place to be más cool y este es el caso de otro de los establecimientos donde se rodaron varias escenas de Foodie Love, el Paradiso, donde se sirven algunos de los mejores tragos de Barcelona, como demuestran algunos de los premios y reconocimientos que han recibido últimamente. No voy a desvelar mucho más de este espacio que se convirtió en un set de rodaje muy activo durante unos cuantos días, porque en él transcurren historias muy interesantes y prefiero conservar la magia y porque merece la pena descubrirlo en la serie. Lo que sí voy a añadir es que me encantaron los recipientes llenos de brotes vivos y todo tipo de germinado (entre miles de frasquitos y de botecitos con especies, aromas, botellas licores totalmente desconocidos para mí) que presidían la barra del local y, sobre todo, lo que eran capaces de hacer con ellos. Uno de sus cócteles más espectaculares del local, no sólo por su sabor sino también por su presentación en un humeante huevo coronado por bacon, es este Breakfast in Kentucky que, no sólo tiene un papel relevante en la serie sino que incluso da nombre a todo un episodio. Por suerte pude conseguir que Giacomo, muy amablemente, me pasara la receta, porque estos secretos suelen estar muy bien guardados. Sucinta pero, como ya comprobareis en la serie, muy efectiva. Mezclar todos los ingredientes en una coctelera y agitar. ELABORACIÓN: • 50 ml burbon whisky infusionado con bacon • 25 ml zumo de limón • 10 ml miel de arce, • 1 Barspoon de mermelada de naranja amarga • 1 clara de huevo • Angostura bitter INGREDIENTES: Breakfast in Kentucky 2 Servir, humeante, en un vaso con forma de huevo. 3 Decorar con bacon deshidratado. Receta por cortesía de Giacomo Gian noti CEO & Owner Para diso EL MOCKTAIL Yo, qué quieren que les diga, estoy en un momento de mi vida en el que me pirro por los healthytragos y, en especial, por esta tendencia tan súpercalifragilisticoexpialidosa que son los mocktails, los antiguos virgin drinks, pero en versión 2.0. Otra de las cosas que los distingue, aparte de que muchos no utilizan zumos procesados con azúcar refinado ni saborizantes artificiales y sí mucha hoja fresca, frutas naturales, especies o incluso flores, es su apetitosa y elegante presentación. Por suerte ya no se presentan, como antes, en copas o vasos desproporcionados, pretendidamente despampanantes (los viejunos parecía que eran para alguien que quería celebrar su cumpleaños, por toda la parafernalia que llevaban ¡con sombrillita de papel y bengala como mínimo! Menos calorías (¡no tienen alcohol!), más sabor, más frescura, más versatilidad, más saludable, sin efectos colaterales no deseados... ¿qué más se puede pedir? Y es que las nuevas bebidas sin alcohol ya no son ni vírgenes, ni mojigatas ni remilgadas: ¡se visten de lentejuelas antioxidantes y se van de marcha! Estos cócteles fingidos y simulados, como la noche (el significado de mocktail proviene de la palabra en inglés mock-simulación) son la última tendencia cotelera y han contagiado a otros tragos que, a pesar de llevar alcohol, se preparan ahora con zumos naturales, especias, germinados... Sea como sea, las noches locas pueden estar maridadas con tragos frescos, revitalizantes y sin gota de alcohol (ni de resaca). F O O D IE T E N D E N C IA S ↓ 28 29 CAPÍTULO 3 “La gyoza de Proust” El sabor más inesperado puede despertar fantasmas del pasado. Inseguridades, miedos, sake, gyozas... Un tira y afloja que cada vez aleja a los dos protagonistas más de esa soledad que tanto temen. Y el beso no termina de llegar. Queda muy poco y los dos desean degustarlo. CAPÍTULO 4 “Gelato di neve” Él viaja a Italia por negocios. Ella intenta sobrevivir a una gripe en su sofá. Una llamada telefónica se convertirá en una cita inesperada y en un recorrido por la Roma más sensorial. De camino también conoceremos el mejor helado del mundo. 30 31 En general, y aunque se pueden hacer también al vapor, hervidas, fritas o incluso algunas en el micro, su preparación sigue una pautas muy concretas que sirven tanto para las que apuntábamos anteriormente como con las frescas o las haces tú en plan casero, así que vale la pena sistematizarlo un poco más. El método genuino, cuando se elige prepararlas en una sartén o wok, se hace siguiendo estos tres fáciles pasos: 1. Pinta la sartén con aceite de sésamo (o de oliva virgen) y colócalas por la parte plana (si lo haces de forma circular, uniéndolas por el vértice interno, de manera que formen una flor ¡entonces alcanzas la categoría foodie chef premium!) y deja que se haga la base de la gyoza hasta que esté tostada y crujiente. 2. Añade agua para que se cocine el relleno (3/4 d vaso aprox.) y la parte superior al vapor, tapando inmediatamente la sartén cuando el agua empiece a hervir. 3. Mantén el fuego vivo hasta que se evapore el agua, moviéndolas con cuidado (agitando la sartén) para que no se peguen. Se sirven con una salsa muy sencilla a base de soja, vinagre de arroz y aceite de sésamo, a la que se le pueden añadir unas semillas también de sésamo, un punto de picante, con pimienta o chile y unos trocitos de cebollino. Pero también se puede encontrar una salsas preparadas y, aún mejor, hay una a base de yuzu, que tiene la misma proporción umami (un elemento tostado, uno ácido, uno picante, otro que le da intensidad y profundidad , etc.) Si le quieres dar ese toque de yuzu extra que "necesitas", lo ideal seria tener el cítrico fresco (el yuzu es como un limón aplastado y duro, mucho más afrutado y aromático, que puede sustituir bien al vinagre) y echárselo, no solo al relleno de la gyoza, sino directamente a la salsa de soja con sésamo y chile. Una salsa ponzu también funciona. Por lo que se refiere a la empanadilla en sí, se pueden encontrar las obleas de gyoza, completamente redondas y más gruesas que las de aquí, envasadas o congeladas, y no son difíciles de hacer, pero no son iguales que las que se preparan en casa, y ese es un punto importante en la serie. Como la gyoza es una receta de aprovechamiento, como para nosotros las croquetas, y la gracia es saber hacer la masa desde cero para que se convierta en un recurso más de tu sapiencia de cocinillas y las puedas hacer habitualmente en casa sin tener que peregrinar a un supermercado asiático. Para poder hacerla al momento un día que te ha sobrado un poco de pollo al curri o que tienes cuatro setas, que puedes saltear con cebollino, ajo, jengibre y cilantro, o tunear unas gambas congeladas con verduras verdes y algas... El abanico es interminable y ahí es donde pondrás directamente tu sello. Así que el otro reto de esta receta es transmitir estas cuatro ideas básicas para hacer este receptáculo comestible que puede contener cualquier relleno. La receta no es demasiado complicado ¡pero tiene su “miga”! La gyoza de Prous t: Instrucciones para hacer una gyoza ca sera Me atrevería a decir que, las gyozas (en particular las aderezadas con yuzu y sisho) y el ramen, son 2 de los platos insignia de la serie, junto con un helado "filosófico" muy particular que es todo un homenaje en sí mismo. Alrededor de estas preparaciones gastronómicas pasan algunos de los momentos más intensos de nuestros protas, a pesar de que también les traen recuerdos... Lo que es una realidad incontestable es que el dumpling en pareja ¡une mucho! y por este motivo ¡no podía faltar esta receta en esta selección! Estas empanadillas asiáticas también son uno de aquellos platos que enganchany al que algunos no nos podemos resistir. Sucumbir a sus encantos es muy fácil y, a la que te quieres dar cuenta, ya te has enganchado sin remedio. Algunos compran su dosis semanal congelada, en plan croquetas o crestas con atún, para llenar ese vacío interior en forma de gyoza. Son resultonas y fáciles, no lo voy a discutir pero, incluso si las consumes así, el proceso de cocción no es simplemente echarlas a la sartén o al wok y ya está, sino que tiene su intríngulis: -Primero se hacen a la plancha, con una gotas de aceite de sésamo, dejando la parte de la base bien tostada y crujiente. Luego se añade agua para que se cocine la parte superior y el relleno, a la que se le puede añadir el sisho para aromatizar y se acaban con un toque extra de aceite de sésamo que aromatiza y da su sabor característico. 32 33 • 200 g. harina de trigo • 80 ml. agua caliente • 10 g. sal • 50 g. harina de maíz o maicena (para enharinar) INGREDIENTES: 1 Pon la harina en un bol, añade sal y mézclala bien. ELABORACIÓN: 2 Vierte el agua poco a poco mientras remueves. 4 Pásala a una superficie lisa, mejor espolvoreada con un poco de harina, y trabájala unos 10 minutos más. 5 Cuando veas que la masa te está ya quedando homogénea y suave, envuélvela con papel film y déjala reposar 2 h. Si no vas a hacerlas al momento se pueden dejar en la nevera para el día siguiente. 6 Pasadas las 2 horas, vuelve a trabajar la masa ahora dándole forma de cilindro grande y después divídela en 2. El relleno es fácil y lo puedes hacer tanto de aprovechamiento, con lo que tengas por la nevera, así que, siguiendo este espíritu foodie creativo, puedes hacer virguerías. Uno de mis rellenos favoritos, sencillo y muy yummymyummy es el pollo sisho para gyozas... ¡Pero eso lo dejo abierto confiando en vuestra creatividad y vuestro espíritu foodie love! Masa para gyoza: 3 Trabaja la masa con la mano hasta conseguir una bola (tiene que quedar y el bol esté limpio). 7 Guarda una parte en un film o una bolsa de plástico para la que no se seque y con la otra, forma un cilindro más pequeño. 8 Corta en 12 piezas iguales cada cilindro, en total 24 piezas. 9 Pon un poco de maicena por encima y con la mano aplasta un poco cada pieza. 10 Ve cogiéndolas de una en una, y deja el resto cubierto con un paño o una servilleta húmeda. 11 Con un rodillo forma un disco fino, intentando que la parte interior esté un poco más gruesa que la exterior, un recurso para que cuando pongamos el relleno la base no se rompa. Y la masa ¡ya está lista! 34 35 1 ¿Cómo nos gusta la tortilla de patata? ¡Qué gran pregunta! (y qué poco original). Pues, aparte de cómo la hace nuestra madre, tío o abuela y, si prescindimos del debate sobre la cebolla (para mí no hay duda ¡con cebolla!), otro de los más recurrentes se refiere a la cocción del huevo ¿te gusta muy hecha, cruda, poco hecha pero cuajada? A mí, si me permitís el pareado cutre, me gusta esponjosa pero sin llegar a ser babosa. Si rezuma huevo crudo, no sólo es poco estética y ligeramente desagradable, sino que puede ser incluso peligrosa porque nos pone a merced de la implacable salmonella. Así que, me habéis pillado ¡el título es falso! Bueno en realidad, no, porque la tortilla que hice para el rodaje tenía que ser babosa ¡y lo fue! Pero la receta que vais a leer a continuación es, la misma, pero con el huevo un poco más hecho (¡o como lo quiera cada usuario!). Lo demás ¡truquillos de home economist! Las fobias y filias gastronómicas son un hilo muy interesante del que, si empiezas a tirar, ¡sale de todo! Los recuerdos de infancia siempre van acompañados de gustos , olores y sabores de las comidas familiares, de la vida cotidiana, de las vacaciones y celebraciones, y han modelado nuestro apetencias y desapetencias, aunque no simpre los recordamos con nostalgia. Aquello que comimos tiene tanto poder de evocación que, con un sólo aroma o una imagen, somos capaces de revivirlo. Pero ahora, de lo que se trata, es de hacer una tortilla y, para ello, primero hay que romper los huevos. Y con esta simpática a la par que inédita frase, empiezan las instrucciones para hacer una tortilla de patata sencilla, pensada para principiantes, pero digna del foodie más tiquismiquis y que te permite puedes controlar lo suficiente el proceso para decidir un nivel de cuajado del huevo a gusto del consumidor. Dicho esto, la elaboración es muy sencilla, mi truqui es pelar las patatas muy finas -suelo hacerlo con un pelador de verduras para ir más rápido- y ponerlas primero en aceite bien caliente pero que no haya empezado a sacar humo. La cebolla, cortada finita, la pongo un poco después de dar la primera removida a las patatas con una espátula de madera y, a los pocos minutos, bajar un poco el fuego. ELABORACIÓN: • 4 o 5 patatas medianas • 1 cebolla grande o 2 pequeñas • 4 huevos frescos • ½ litro de aceite de oliva • Sal INGREDIENTES: Tortilla de patatas babosa 2 Cuando están ya doraditas, un poquito más de lumbre, fugazmente, y apaga. Inmediatamente, y para que no absorban más aceite de la cuenta, las vas sacando con una espumadera y depositando en un colador grande de malla fina metálica dispuesto sobre un cazo que recoja el excedente. 3 Mientras se acaba de colar, bate los huevos con una pizca de sal (yo le añado un chorrito de leche porque es una tradición familiar y la hace más jugosa). No hace falta que los batas a punto de nieve, mientras estén bien mezclada la clara con la yema y no queden trozos grandes de la primera, es más que suficiente. Ya tan sólo nos queda el cuajado, que ¡no es tan fácil si eres primeriz@! Los cocineros siempre repiten el mantra de la importancia de la calidad del producto, pero en el caso de la tortilla de patata es más cierto de lo que pudiera parecer, por ejemplo: se nota muchísimo si la patata es la adecuada (lo mejor es priorizar siempre las variedades para freír y las de temporada) y si el aceite es de baja calidad o se ha reutilizado muchas veces, también. Lo mejor es hacerla con aceite nuevo y guardarlo bien colado sólo para volver a hacer tortilla, y no utilizarlo más de 3 veces, sobre todo si se nos quema un poco. ↓ 4 Mezcla la patata y la cebolla coladas en el huevo (mejor en un bol grande, un plato se puede desbordar) y mezcla bien para que la patata quede más jugosa. Pon un chorrito de aceite en la sartén y procura que se extienda por toda su base, pero sin que sobre. 36 37 5 Echa la tortilla con ayuda de una lengua para así poder aprovechar todo el huevo y la patata que quede en el fondo y las paredes del cuenco. 6 Ve aplastando suavemente la mezcla para distribuirla uniformemente por toda la superficie de la sartén, mientras vas agitándola, ligera pero firmemente, para que no se pegue. 7 Si ves que hay mucho huevo y no se va a cuajar lo suficiente como para darle la vuelta, ve haciendo huecos entre la patata y deja que los cubra el huevo inclinando un poco la sartén. 8 Cuando calcules que ya está dorada, prepárate para darle la vuelta, otro de los pasos clave para salir airoso del reto de hacer una tortilla. Una recomendación: es mejor que esté un poco cruda porque luego siempre puedes volver a voltearla para que se acabe de dorar, que esté demasiado hecha, porque entonces ¡tiene ya muy mal arreglo! 9 La elección del plato o la tapa que utilices para darle la vuelta también es muy importante: si es demasiado pequeñ@ te puede chorrear aceite por manos o brazos (¡y quemarte!) y si es muy grande la sartén te puede resbalar e incluso caerte un trozo de tortilla a medio hacer. Las tapas especiales para girar tortillas de la misma medida de la sartén (o tapas no específicas para ello pero que sean muy planas) son la mejor elección. 10 Cuando la tengas ya girada en la tapa o plato, repite el proceso de antes (cubre la superficie de la sartén con un poco de aceite) y haz deslizar la tortilla hasta la sartén, teniendo en cuenta que no está cuajada por la parte deabajo y no va a resbalar bien si no la ayudas un poco. Una vez depositada ya sólo la tiene que ir agitando para que no se pegue, ayudándote también con la espátula de madera, y despega los bordes que puedan estar en “peligro”. 11 Ahora ¡ya todo es cuesta abajo! Cuando calcules que está doradita las sacas del fuego y, si alguna de las caras te hubiera quedado demasiado cruda para el gusto de los presentes, la puedes volver a hacer hasta lograr el punto perfecto. Ahora mi último consejo: dejarla reposar un ratito y cuando esté templada ¡hincarle el diente! 38 39 Tras este nombre tan cuqui se esconde una de las preparaciones italianas a base de cerdo más irresistibles e internacional del momento y que ya está empezando a hacer furor en nuestro país. Y no puede ser de otra forma, porque aquí se siente auténtica devoción por este animalico. Bueno, devoción por "devorarlo" por completo, más bien... Crujiente, tierna y untuosa a la vez, la porchetta parece estar destinada a alimentar las calles más cosmopolitas y, quizás, a disputarse el pódium de los platos favoritos del streetfood, puede que rivalizando con el shawarma por el estrellato, No desplazándolo del todo, sino contribuyendo a que la oferta sea más diversificada. Pero alejémonos ahora del panorama de la comida callejera nacional, porque además la porchetta de la serie no aparece en ese contexto sino en el de los locales nocturnos, es decir, los que van de la calle hacía dentro y no al revés. Y como aquí hemos venido a hablar de la Porchetta (¡y si no, me voy!) vayamos a ello, sin perder ni un segundo. Como en este caso yo también soy una neófita en la materia, he optado por adjuntar una receta certificada que me ha pasado un amigo italiano que, como es romano, asegura que esta es la mejor: la "porchetta di Roma". ¿Lo comprobamos? Bueno, de hecho yo ya la he catado dos veces, una en la terraza de un restaurante italiano y la otra poniendo en práctica esta receta, así que os puedo garantizar que funciona porque me quedó de rechupete. Porchetta ELABORACIÓN: • 600 gramos de panceta fresca de cerdo con su piel • 25 gramos de pimienta verde en granos • 40 gramos de hojas de hinojo fresco • 2 dientes de ajo troceados • 5 vasos de vino blanco • 10 gramos de romero • Sal • Un poco de cuerda de cocina (para cerrar la carne) • Un poco de pimienta molida INGREDIENTES: 1 Rellena la panceta de cerdo con: un poco de sal a gusto, la pimienta verde, las hojas de hinojo (cortadas gruesas), el ajo troceado y el romero. 2 Cierra muy bien y con fuerza la panceta. Haciendo como una gran salchicha. 3 Utiliza igualmente la cuerda de cocina. Salpimiéntalo todo. 4 Calienta el horno (mejor si es de leña) unos 180ºC. 5 Ponlo en un recipiente adecuado para el horno y empieza a asar el cerdo. 6 Mantente 15 minutos sin añadirle nada, sólo removiendo de vez en cuando el cerdo, y después vierte el vino blanco y moja el asado cada 5 minutos. 7 Estará listo cuando su exterior esté intensamente dorado y parezca crujiente. 8 Sácalo del horno y espera hasta el día siguiente, porque es mejor comerlo frío, y se corta también mejor. Se suele presentar con una buena ensalada y con pan caliente recién hecho. El cerdo se corta en lonchas de 5 cm de grueso quitando, claro está, la cuerda. Disfruta de este plato que también es servido en la serie. 40 41 42 43 CAPÍTULO 5 “La última cena” La quinta cita de la pareja es un auténtico viaje del paladar a través de la cocina moderna de un exquisito restaurante. Los sabores y emociones que despiertan su menú dejarán a flor de piel las verdaderas pulsiones de los protagonistas. CAPÍTULO 6 “El croissant perfecto no existe” Después de una noche perfecta juntos, en nuestros foodies afloran de nuevo las dudas sobre lo que de verdad quiere cada uno. Pero, ¿qué pueden hacer en una cocina dos adultos que se atraen un domingo por la mañana? 44 45 1 Tuesta el pan. ELABORACIÓN: • 1 aguacate • 2 huevos (imprescindible que sean muy frescos) • 2 cucharadas de vinagre • Hojas verdes (rúcula, brotes de espinaca) brotes germinados • Un puñado de champiñones salteados con ajo y perejil • Un puñado de semillas (sésamo, chia, pipas de calabaza…) y frutos secos • Sal y pimienta • 2 rebanadas de pan integral biológico INGREDIENTES: 2 Mientras tanto, aplasta el aguacate sobre un plato y la ayuda de un tenedor. Sazona con sal y pimienta. 3 Unta el aguacate sobre el pan, agrega las verduras y el huevo. 1 Llena una cacerola de agua y, cuando esté a punto de ebullición, añade el vinagre. 2 Rompe los huevos cuidadosamente en moldes individuales. 3 Apaga el fuego y agrega los huevos suavemente, mientras con la cuchara vas haciendo un remolino en el agua caliente. El truco es deslizar el huevo suave y lentamente hasta que se coloque en el agua sin caer de golpe.4 Déjalos hervir unos 3 minutos para que se cocine bien. 5 Retira el huevo con una cuchara con rejilla y colócalo en un plato con papel de cocina para secarlo bien. Los huevos se pueden hacer fritos, a la plancha, duros... Pero pochados es la versión más foodie. Para ello, además de los huevos necesitarás un par de cucharadas de vinagre. Huevo pochado paso a paso: Si quieres estar a la última en lo que a desayunos foodie se refiere, la avocado toast tiene que estar, sí o sí, en tu chistera de recetas, y si la sabes hacer con un huevo poché, entonces ya eres de la liga advanced. La verdad es que esta sencilla y saludable preparación, tan deliciosa como versátil, está haciendo furor en las cartas de las cafeterías y bares donde sirven desayunos, en los brunchs y los eventos más cool y, sencillamente ¡ha incendiado las redes! Las elaboraciones son tan diversas como personas que las preparan, pero el tándem pan integral de masa madre con semillas, frutos secos, hoja verde y huevo poché, revuelto o a la plancha, es infalible. Avocado toast 46 47 Tostada de aguacate vegana • 1 aguacate un poco maduro • 1 tomate fresco • Rúcula • Un poco de zumo de limón • Sal y pimienta • 1 Rebanada de pan de masa madre • Semillas varias (calabaza, sésamo, girasol) Extras: sésamo tostado y granada INGREDIENTES: 1 Coger un aguacate un poco maduro y chafarlo hasta que quede una mezcla de trozos enteros y trozos chafados con un tenedor. 2 Añadirle un poco de limón y un poco de sal al gusto. 3 Colocar el aguacate encima del pan tostado, añadir el tomate y la rúcula. 4 Repartir generosamente las semillas y añadir un poco de aceite de oliva, sal y pimienta. 1 Founder - Owner & Creating of Espai Joliu y Orval, Barcelona NOTAS Otra opción es ser un poco más foodieloverista y hacer la que se sirve en el local en el que se rodaron algunas secuencias del primer episodio de la serie, y a la que pertenece también la receta del CHOCOCAKE VEGANO o, directamente visitarlo -¡es de los primeros sets del rodaje de Foodie Love!- y tomártela allí mismo RECETAS ESPAI JOLIU (por gentileza de Lucía López1) Tostada de aguacate y mató • 1 aguacate un poco maduro • 1 rebanada de pan de masa madre • 3 cucharaditas de mató • Cilantro • Cebollino • Un poco de zumo de limón • Sal Extras: sésamo tostado y granada INGREDIENTES: 1 Coger un aguacate un poco maduro y chafarlo hasta que quede una mezcla de trozos enteros y trozos chafados. 2 Añadirle un poco de limón y un poco de sal al gusto. 3 Colocar el aguacate encima del pan tostado, añadir el mató, el cebollino y el cilantro. 4 Si se quiere se puede añadir una fruta de temporada como es la granada, huevo o salmón y sésamo. ELABORACIÓN: ELABORACIÓN: 48 49 AVOCADOTOAST y AVOLATTE La combinación de café goumet de barista y avocado toast es casi una declaración de principios, porque es el healthydesayuno foodiehipster por excelencia. Pero si crees que con esto ya estás en la cima de las últimas tendencias foodie ¡te equivocas! Hace pocos meses aterrizó en gastrolandía lo que de entrada parecía una majadería, peroque ya se ha hecho viral, supongo que gracias al mérito de conjugar 3 palabras- hashtag mágicas en internet: aguacate, café y zerowaste… ¿Habrán usado también #crueltyfree? No te extrañe, estos del Truman Café de Melbourne parece que se lo tenían todo muy calculado. Y vaya por delante que comprendo y comparto la preocupación de los propietarios de cafeterías hípster o comida climatarian (es decir, que no afecte al ecosistema del planeta) que se precien de buscar sin descanso recipientes biodegradables -más aún si son vegetales y ¡ofrecidos directamente por la naturaleza! - donde servir comidas y bebidas sin generar residuos. Pero el caso es que estos tipos de nuestras antípodas se han sacado de la manga, con gran repercusión mediática, el Avolatte, un café con leche tipo barista, que se hace y se sirve dentro de la mitad de una cáscara de aguacate. Me imagino que tenían un problema con tanta avocadotoast y la gran cantidad de piel de aguacate que se les acumulaba en la trastienda para llevar por la noche al contenedor orgánico… Así que estos australianos, tan concienciados y tan hípsters ellos, decidieron darles salida. En cualquier caso, no se trata de algo ni muy cómodo (es muy fácil que se te caiga el líquido por encima) ni muy apetecible. Ya veremos cómo continúa la historia. Pobre aguacate, además de ser ya el diamante de sangre de la gastronomía, ahora también se han convertido en el nuevo cerdo, al que sustituye en el desayuno y del que ya le quieren aprovechar ¡hasta los andares! IN F O O D ↓ 50 51 • 2 láminas hojaldre fresco (mejor de forma rectangular) • 10 g de té matcha (en un bol) • 2 cucharadas de aceite de oliva virgen y un pincel de cocina INGREDIENTES: 1 Precalienta el horno unos 10 minutos antes a 180ºC. 2 Mientras se va calentando, estira las láminas de hojaldre encima de una superficie seca y lisa que habrás espolvoreado previamente con la mitad del contenido del primer bol y tamiza sobre la masa la otra mitad del té matcha en polvo. 3 Pásale muy suavemente el rodillo para que penetre un poco. Para la masa: 4 Corta la masa en triángulos (te pueden salir unos 8 de cada lámina) con 2 pequeños cortecitos laterales en la base (la parte más ancha del triángulo) si los quieres hacer con cuernos. 5 Enrolla los triángulos desde la base formando los croissants y, con el pincel de cocina píntalos con un poco de aceite de oliva (así evitamos la mantequilla y compensamos el mascarpone). 6 Colócalos con cuidado en una bandeja de horno utilizando el papel con el que van envueltas las bases de hojaldre. • 120 gr de mascarpone • 1 cucharada de sirope (arce, agave…) • 10 g de té matcha (en otro bol) Para el relleno: ELABORACIÓN: El croissant perfecto ... ¡es de matcha! Los croissants, y especialmente los perfectos, tienen también un papel notable en la trama de la serie, y me aventuraría a afirmar que son uno de los productos gastronómicos que más representa la tentación (¡pero si hasta tienen cuernecillos!) ¿Quién se puede resistir a una bandeja llena de croissants recién horneados? ¿Cómo te sientes si un día te apetece comerte uno y en la pastelería se han terminado? Así que, juntándolo con otro caballo ganador, como es el té macha, parece que el éxito está asegurado. ¡Pero si hasta los cheesecakes más buscados ahora son los de matcha! Y al hablar de croissants perfectos el primero que me viene a la cabeza es el de matcha porque, además del bonito color que le queda a la miga, que lo hace muy apetecible, es más sabroso y le da a este dulce eso que a los empresarios les gusta tanto: “valor añadido”. De hecho, considero que son la evolución perfecta del croissant francés hacia un producto más saludable y refinado gracias a la sabiduría nipona. Como nos explicó el maestro pastelero Takashi Ochiai durante el rodaje, la repostería japonesa no utiliza grasas animales en sus elaboraciones. De hecho, en la pastelería nipona los productos utilizados para hacer repostería son, básicamente, harina de arroz, té matcha, agar-agar, soja, anko (pasta de azuki o alubia roja), yuzu, hoja de bambú, hojas y flores de sakura (cerezo), castañas en almíbar… Todos ellos productos de origen vegetal que comulgan con la religión budista que no permite el consumo de grasa animal. Al principio estos productos no se encontraban aquí, por eso el señor Ochiai nos confesaba que antes viajaba a Japón con una maleta vacía de 30 kilos que regresaba siempre llena de productos. Ahora muchos de ellos, como el té matcha, ya son un poco más corrientes. Aunque esta es una versión casera facilonga y exprés (si tienes que hacer tú el hojaldre, la verdad es que la cosa se complica bastante), y no como la que debe seguir él para conseguir los que se degustan en su pastelería, siempre recién salidos del obrador, porque en su caso no hay recetas mágicas, sino mucho oficio. Para llevarla a cabo, y aunque así estemos traicionando un poco ese espíritu healthy nipón, utilizaremos una base de hojaldre preparada y un fácil relleno a base de mascarpone y polvo de té matcha. 52 53 7 Hornea los croissantsç hasta que estén dorados (unos 12-15 min serán suficientes). 8 Mientras tanto, mezcla en un bol el mascarpone, el sirope y el polvo de matcha tamizado para evitar los grumos hasta conseguir una mezcla cremosa y uniforme de color verde. Si ves que vas a tardar mucho en poner el relleno, cúbrelo con papel film para que no se reseque. 9 Una vez dorados, saca los croissants del horno y ponlos a enfriar a temperatura ambiente antes de rellenarlos con la crema de matcha. 10 Haz una X en la base del croissant y rellénalos con una manga pastelera. ¡Ya sólo te queda devorarlos con la satisfacción de haberlos hecho con tus propias manos! Ah, y como arma foodie love está garantizada: sorprender a tu pareja con un desayuno recién hecho y tan sofisticado una mañana de domingo ¡No tiene precio! SABORES EMERGENTES: MATCHA Aunque al principio al polvo matcha le costó cuajar en nuestro país y sólo lo apreciaban como se merecía los restaurantes de cocina vanguardista o los establecimientos de productos naturales, poco a poco, y gracias al impacto del movimiento foodie, que ha revalorizado y dado a conocer aspectos gastronómicos y productos que antes sólo se destinaban a un selecto y reducido grupúsculo gourmet, se fue abriendo un camino lento, pero seguro. Y, a pesar de su precio, irrumpió en el panorama gastronómico de todo el mundo hace ya más de una década y sigue en gráfica ascendente. Selecto, atractivo, con un alto valor nutritivo, un color muy especial, un sabor suave y delicado, pero muy particular y reconocible, y muy apreciado por sus propiedades, el té matcha ha llegado para establecerse aquí definitivamente. Lo que algunos interpretaban hace unos años como una expresión de feminismo poligonero (¡jo, matcha!) descubrieron al fin que era el nombre de una auténtica delicatesen, refinada, saludable y exquisita. IN F O O D ↓ 54 55 CAPÍTULO 7 “Esto es Francia” En su primer viaje como pareja por Francia, las cosas no ocurren como él tenía previsto. Su verdadero carácter sale a la luz y la relación se enfrenta a su primera prueba. La vida es demasiado corta como para lamentarse por un menú degustación. CAPÍTULO 8 “Una ofrenda de tabaco, cerveza y chocolate” Una cita sorpresa remueve de nuevo el pasado. Tras una agria despedida, con la promesa de verse al día siguiente, ella desaparece y él se hunde en la desesperación. Ella viaja a Japón para reconciliarse con sus fantasmas y cerrar así una puerta que aún permanecía entreabierta. 56 57 Antes de empezar, permíteme un guiño cinéfilo que creo que nos va a ayudar a sumergirnos mejor en el universo del ramen. Se trata de 2 recomendaciones cinematográficas, de imprescindible visionado para cualquier foodie que quiera profundizar en el tema: 1. A mediados de los 80 se estrenó una película japonesa, “Tampopo”, definidapor algunos críticos como un “ramen westen”, que acabaría convirtiéndose en un film de culto, uno de los pioneros del género gastronómico y uno de los responsables de lo que, bastantes años después sería la fiebre de los foodtrucks en Europa. Vale mucho más la pena todavía ver este trabajo, escrito y dirigido por Jûzô Itami, si no has estado nunca en Japón y quieres hacer un ramen auténtico, porque te traslada directamente a la cocina de un foodtruck que recorre la geografía japonesa ofreciendo este plato a sus clientes. Y una de las primeras películas que cualquier videoteca gastronómica que se precie debería tener, compartiendo estantería con films de la misma época como “el festín de Babette” o como las míticas “El olor de la papaya verde” o “Comer, beber y amar”, de principios de los 90. 2. La segunda es un trabajo más pequeño y modesto, y más fácil de encontrar. Me refiero a “Ramen dream” (cortometraje ganador del 1º premio en el Food Film Festival de Nueva York en 2012) de Keizo Shimamoto, en el que narra su propia historia como propietario y chef de un pequeño local en Tokyo y donde explica cómo marcó su vida el hecho de probar el ramen por primera vez siendo un niño, hasta llegar a convertirse en su obsesión (¡todos los días toma, como mínimo, un cuenco de ramen!). Pronto empieza a dejar constancia de su personal periplo gastronómico a través del blog Go ramen!, donde ha reseñado alrededor de un millar de preparaciones diferentes. Lo más curioso es que él nació y se crió en Los Ángeles, pero decidió convertir su pasión en el centro de su vida abriendo su propio local de ramen en la capital nipona, mientras continúa disfrutando de cada nuevo sorbo que prueba. ¡Un inspirador documento cinematográfico que, además, te da unas tremendas ganas de salir pitando a degustar un cuenco de ramen1! Advierto que esta receta tiene un texto más extenso dado al peso de este sujeto gastronómico tiene en la serie y a la magnitud y categoría del plato que, según algunos, tiene cualidades tan sobrenaturales como la de reconfortar el alma. Así que para entrar rápidamente en materia hagamos un breve recorrido por los 3 elementos principales que componen el ramen y que son la santísima trinidad2 de esta sabrosa elaboración: Ramen casero para principiantes 58 59 Ya tenemos la base, pero ¿dónde reside su magia? ¿cuál es su secreto? Pues yo diría que, de esta tríada mágica, el elemento principal es, sin duda, el caldo. Y eso, que es común en muchos otros platos del mundo (como refiere una de las gastromáximas más unánime: “la base es el fondo y… viceversa”) en su caso es su verdadera seña de identidad. El caldo es lo que le confiere sabor y profundidad al plato y, por lo que al ramen se refiere, es su auténtica alma. Y tiene su miga (metafórica, of course), porque no sólo existe un tipo de preparación estándar, si no muuuuuchas más. Así que, antes de ponerse el delantal y salir escopetead@ a una tienda de productos orientales, es mejor elegir ver por donde decantarse para poder hacer una mínima lista de la compra. Y es que ¡existen tantos tipos de caldo para ramen en Japón!3 Quizás este es otro aspecto que incrementa el misterio y el atractivo a este “cocido japonés” porque, al no existir una fórmula única o canónica, cada hogar, cada comensal o cada cocinero tienen su propia receta preferida y, además, da mucho margen para innovar, jugar y ajustar los ingredientes según los productos de temporada, las tendencias o los gustos de cada uno. Las especialidades son tan numerosas que este texto se acabaría convirtiendo en un tratado de ramen, demasiado apabullante para este documento. Para no agobiarse, creo que lo mejor es empezar con una receta sencilla y fácil, con ingredientes que se puedan encontrar sin mucha dificultad y no ser muy ortodoxo, mezclando lo que más nos guste de cada una. Para los más expertos, recomiendo ir practicando con algunas de las variedades que he apuntado, fácilmente localizables en internet o libros de cocina especializados, para encontrar el santo Grial o, lo que es lo mismo gastronómicamente hablando ¡TU RAMEN DEFINITIVO! EL CALDO: Vendría a ser como el cuerpo o esencia de la sopa, y se puede preparar de muchas maneras e incluso potenciar o arreglar uno mediocre con un maravilloso invento que es el “tare", una especie de salsa muy concentrada a base de salsa de soja, miso, sake o mirin y de sabor muy potente que se pone en el fondo del cuenco antes de añadir el caldo. Huesos de todo tipo (cerdo, ternera, pollo...) verduras, setas, algas, pescado seco... Todo un mundo de opciones pero que se puede simplificar con el dashi, el caldo base por antonomasia de la cocina japonesa, sin el que no se pueden entender algunos de sus mejores platos. Esta es la preparación es en la que me voy a centrar más adelante para simplificar al máximo el plato y no fracasar en tu 1ª vez. LOS FIDEOS: Son también otro elemento característico (de hecho, el men de ramen significa fideo) e indispensable. Y, dado que en las tiendas de productos asiáticos hay mucha variedad, para no perderse conviene saber que siempre deben ser de harina de trigo. También es preferible saber el tipo de fideo que es más adecuado para cada tipo de preparación (más o menos curvados, gruesos o finos e incluso de distintas tonalidades) porque eso redondea la receta, pero la experiencia y los consejos de los expertos en la materia te irán dirigiendo en el buen camino. Los más típicos son de color amarillento elaborados con huevo y kansui, un agua carbonatada que le confiere elasticidad una vez cocinado. LOS TOPPINGS: Finalmente, y no por ello menos importante, está el topping o aderezo final, consistente en verduras frescas o cocidas, huevo duro, carne deshilachada o proteínas vegetales como el shitake (la seta que tiene más umami, sobretodo si está deshidratada), cebollino fresco, el típico naruto y así at infinitum. 60 61 2 Una vez resuelto el tema del caldo, ya sólo te queda cocer unos huevos duros por comensal, añadir los fideos al caldo, dejarlos cocer el tiempo recomendado y colarlos. 3 Para el topping, además del huevo duro, que ya habrás pelado y cortado por la mitad, y también puedes poner: panceta crujiente, setas, hebras de carne, ajo negro, daikon (nabo blanco) rallado, semillas de sésamo, cebollino crudo cortado fino, el huevo duro, unos brotes de verduras de hoja verde en crudo o unas hojas hervidas de pak choi, la llamada acelga japonesa, o verduras autóctonas más fáciles de encontrar. Si te gusta el cilantro fresco también puedes tirarlo al final recién cortadito, pero lo que sin duda le dará el toque definitivamente umami y japonés a tu ramen es echarle unos trocitos de alga kombu, previamente hidratada y el katsuobushi que, además, al añadirlo a un plato caliente se mueve durante unos instantes como si estuviera vivo y eso siempre despierta interés y puede distraer a los invitados si no te ha salido muy allá. Una alga nori tostada puesta al final, también es muy resultona y, si eres capaz de encontrar unas masas redondas y planas, en forma de florecilla blanca, con una especie de arroba o espiral rosa oscuro en el centro y que se llama naruto, tan típicos del ramen, entonces ya seguro que te quedas con el personal al que hayas decidido invitar a tu particular festival de sopa nipona… 4 Ahora sólo tienes que emplatar, lo mejor es colocar los fideos, verter encima el caldo bien caliente y disponer el topping de la manera que más te guste. Si eres primerizo total, lo mejor, antes de ponerse manos a la masa, es iniciarte en un buen restaurante especializado, donde además descubrirás que no se trata de una tendencia pasajera, sino que ha llegado para quedarse. ¿Por qué? ¡Pues porque un buen ramen te atrapa y ya no te vuelve a soltar porque, además de nutritivo y lleno de sabores, aromas y matices, es muy, pero que muy reconfortante. Puedo dar fe de ello porque,aunque ya lo conocía, durante el rodaje de Foodie Love no fueron pocos los días que terminamos ante un plato de ramen para reconfortarnos el espíritu. Y también tuvimos la oportunidad de ver en directo una parte de la preparación de este plato de cuchara imprescindible, junto con la sopa Thai, la bullabesa, la escudella catalana, el pote gallego o el cocido madrileño. Ramen casero expr és con caldo dashi La forma ideal, si no tienes ganas de complicarte demasiado la vida en la cocina y prefieres aventurarte en la búsqueda de productos japoneses, es hacer un caldo dashi (tienes un cuadro a continuación con las instrucciones) que además de ser el caldo base de la cocina japonesa, sin el que no se podrían realizar algunos de sus platos más emblemáticos (o sea, que si te sobra te puede servir para otras preparaciones) es mucho más rápido que cualquier otro caldo. Lo básico es generar una gran cantidad de umami. Incluso lo puedes encontrar en formato instantáneo, como el de sopa de miso, una versión para vagos muy útil para salir del paso con el mínimo esfuerzo en una cena imprevista, marcándote una receta vacianeveras porque lo puedes tunear con cualquier cosa. Es como una dosis de sabor mágica que da brillo y esplendor a cualquier alimento, ideal también para cuando llegas a casa y lo último que te apetece es cocinar. (y su “tare” y su canesú) Ti en es es ta o pc ió n ↓ Y luego hay la opción un poco “falsarius style” porque se trata, directamente, de falsear un caldo dashi. Se trata de hacerla con el caldo típico al que estés acostumbrado (tanto si lo tienes hecho como si lo tienes que hacer o es preparado) y, unos 20 minutos antes de terminar, añadirle un puñado de algas deshidratadas variadas como kombu, wakame, nori… Para acabar de dar el pego incorpora unos ajos negros laminados previamente tostados en aceite de sésamo (o aceite de ajo negro -fermentado-, ya preparado). Después de colarlo y cocer en él los fideos, pon una cucharadita de café de pasta de miso en la base del bol y disuélvela con un par de cucharadas. Esta permite hacer también una versión vegana, añadiéndole unas setas shitake en sustitución del katsuobushi (bonito cocido, seco, fermentado y ahumado) que tiene un pronunciado aroma a pescado, toques ahumados y la inconfundible sensación del umami. Existen muchas variedades, así que elige la que sea más fácil de encontrar, siempre que proceda de un establecimiento de confianza. Si no lo encuentras, un buen truco es añadir una anchoa o una cucharadita de garum a un caldito que te ha quedado aguachirris, también es una opción ingeniosa para un umami ilustrado, pero más de alpargata, como el instatáneo. Ti en es es ta o pc ió n ↓ 1 62 63 ¿SABIAS QUÉ …? • En Estados Unidos es tan popular que se celebra un National Ramen Day el 4 de abril. • Si viajas a Japón puedes visitar el Museo del ramen de Shin-Yokohama, con parque temático incluido y toda clase de objetos y productos relacionados con este plato tradicional. • El ramen es un plato japonés de origen chino que empezó llamándose Shina-soba o Chuka-soba, (“sopa de fideos chinos”) • Aunque la teoría más extendida es que fue un erudito de la época de la dinastía Ming, Zhu Shun Shui, el que introdujo este fideo en la gastronomía japonesa del s. XVII (de ser así, él sería el padre del “paleoramen”), otra hipótesis apunta a la influencia de los nuevos hábitos alimenticios norteamericanos. Ambas cosas podrían ser compatibles, ¿no? • Los nipones adoptaron los fideos chinos de trigo y crearon esta maravillosa receta tradicional, paradigma por excelencia del confortfood y las recetas de fusión. • Desde entonces se extendió por todo el país, naciendo distintas variedades y especialidades según la región, y se multiplicaron las tabernas o puestos callejeros donde se podía degustar, siendo así también un plato pionero del fenómeno streetfood y foodtruck actual. • La característica principal del ramen japonés es el caldo, base y alma del palto y lo que define su calidad. • Su salto a la popularidad internacional se produjo a finales de los años 50, cuando un empresario taiwanés creó y comercializó los chicken ramen, la 1ª sopa instantánea de fideos. Barata, fácil, rápida y, definitivamente, un auténtico gastrobombazo. IN F O O D ↓ Caldo dashi A diferencia de los fondos de la cocina europea, que requieren mucho tiempo de cocción, se elabora de forma mucho más rápida y existen distintas técnicas para su preparación. Lo más importante no es su sabor en sí, sino el hecho de que, gracias a la gran cantidad de umami que contiene, potencia el sabor del resto de los ingredientes con los que se mezcla. El ingrediente fundamental para prepararlo es el alga kombu que, si es de buena calidad, prácticamente solo aporta umami (contiene la mayor cantidad de glutamato monosódico que podemos extraer de forma natural de un alimento) y un mínimo sabor marino. Se puede hacer sólo con Kombu (Kombu dashi) o añadiendo otros ingredientes, como el katsoubushi, aunque también se usan otros pescados secos (niboshi) y setas shitake (dashi vegetariano). El kombu dashi se puede hacer de 2 maneras, una de sabor más suave que se obtiene poniendo el alga Kombu en remojo durante 10 horas (la proporción seria 10 gr. de kombu por 1 litro de agua) en la nevera. Este kombu se puede reutilizar hasta tres veces siguiendo este mismo proceso. Y otra más intensa que se hace calentando el agua con el kombu hasta que empiezan a salir pequeñas burbujitas en el fondo del agua. Retirar inmediatamente si no nos interesa que quede una textura gelatinosa. También se puede reutilizar el alga, en este caso sólo una 2ª vez, siguiendo los mismos pasos. R ec et a ↓ 64 65 1 Las imágenes que recogen la preparación de unas inmensas ollas de caldo son épicas porque ponen de manifiesto la importancia del caldo en este plato, lo que lo define y le da o le quita calidad al plato. Aunque estos fragmentos pueden herir la sensibilidad de algunos animalistas a los que recomiendo, encarecidamente, que sustituyan este visionado por el de una visita a la muy recomendable página "cilantro & citronella" donde pueden encontrar las recetas más sabrosas y delicadas de ramen vegano que conozco. 2 Citando a elcomidista, que fue quien se refirió al caldo, los fideos y el topping como la "santísima trinidad del ramen". 3 Las principales variables son: TONKOTSU con huesos de cerdo, elaboración originaria y una de las más populares. Caldo blanco muy intenso y sabroso, espeso y de consistencia gelatinosa que requiere de una preparación minuciosa y concienzuda. SHIO más ligero y casi transparente, hecho a base de huesos de pollo, y quizá la elaboración más fácil y una buena manera para introducirse en el universo ramen para los cocineros más novatos. SHOYU más aromático y ligero que el 1º, normalmente con huesos de ave y verduras. Su característica común es la adición de salsa de soja, por lo que es más oscuro. MISO a este caldo de verduras o de pollo se le incorpora pasta de miso, un fermentado que, además de ser muy digestivo y saludable, le dispensa ese sabor umami tan apreciado. De entre las variedades típicas según la región, el Sapporo Ramen, de la isla de Hokkaidō -¡casi un peregrinaje obligado para los amantes del ramen!- que se caracteriza por la variedad de miso que se utiliza en su preparación, generalmente el akamiso, de un reconocible color rojizo; otro es el Tokyo Ramen al que se le añade el toque dashi gracias al alga kombu y el bonito seco. Existen muchos otros, como el Kumamoto Ramen, con un caldo algo más ligero y fideos lisos y gruesos, y que tiene 2 características más que lo convierten en uno de los “imprescindibles”: la utilización de las setas kikurage como uno de los toppings habituales y el mayu, una especie de salsa espesa negra hecha de ajo negro tostado con aceite de sésamo. NOTAS 66 67 Isabel Coixet (Barcelona, 1960) es guionista y directoraespañola ganadora de ocho Goyas por sus películas, así como por su trabajo como directora y guionista. Licenciada en Historia por la Universidad de Barcelona, ha trabajado también en publicidad. En 2000 funda su propia empresa productora Miss Wasabi Films. FOODIE LOVE (serie) – 2019 Elisa y Marcela - 2019 La librería – 2017 Spain in a day – 2016 Nadie quiere la noche – 2015 Aprendiendo a conducir – 2014 Mi otro yo – 2013 Ayer no termina nunca – 2013 Escuchando al juez Garzón – 2011 Mapa de los sonidos de Tokio – 2009 Elegy – 2008 Paris, je t’aime (segmento) – 2006 La vida secreta de las palabras – 2005 Mi vida sin mí – 2003 A los que aman – 1998 Cosas que nunca te dije – 1996 Demasiado viejo para morir joven - 1989 FILMOGRAFÍA SELECCIONADA 68 69 Laia Costa (Barcelona, 1985) es una actriz española que ha participado en producciones por todo el mundo: España, Alemania, Rusia, Argentina, Reino Unido o Estados Unidos. Ha estado nominada al premio BAFTA EE Rising Star por Victoria, trabajo que también le brindó una nominación a los premios EFA y que la convirtió la primera actriz extranjera en ganar un premio Lola, máximo galardón del cine alemán. FOODIE LOVE (serie) – 2019 Only You – 2018 Como la vida misma – 2018 Maine – 2018 Duck Butter – 2018 Piercing – 2018 Nieve negra – 2017 Cites (serie) – 2016 Carlos, Rey Emperador – 2016 Palmeras en la nieve – 2015 Victoria – 2015 El tiempo entre costuras (serie) – 2014 Pulseras rojas (serie) – 2013 Tengo ganas de ti - 2012 FILMOGRAFÍA SELECCIONADA Laia Costa 70 71 Guillermo Pfening (Córdoba (Argentina), 1978) es un actor argentino que ha participado en múltiples producciones en su país natal. Se matriculó en la Universidad de Buenos Aires mientras paralelamente estudiaba teatro. Ha ganado el premio al mejor actor del Festival de Tribeca en 2017 por su trabajo en Nadie nos mira. FOODIE LOVE (serie) – 2019 El bosque de los perros – 2019 El otro verano – 2018 Eterno paraíso – 2018 Mi mejor amigo – 2018 Supermax (serie) – 2017 Nadie nos mira – 2017 Tiempo muerto – 2016 Cromo – 2015 La parte ausente – 2014 Atlántida – 2014 Wakolda (El médico alemán) – 2013 Las mujeres llegan tarde - 2012 El último verano de la Boyita - 2009 Vidas robadas (serie) - 2008 FILMOGRAFÍA SELECCIONADA uillermo Pfening 72 73 Cuántas cosas pueden suceder entre dos personas que están empezando a conocerse y comparten algo tan íntimo como una cena. Y más cuando esa cena no es un simple trámite nutricional, sino toda una experiencia sensorial, organoléptica, donde se juega con muchos registros emocionales, como es un menú de autor, concretamente el que presentan cada día los hermanos Torres en su restaurante del barrio de Les Corts de Barcelona, Cocina Hermanos Torres, llamado MENÚ BOSQUE y compuesto por 21 platos estratosféricos, todo un recital para los sentidos, y que empieza con propuestas como las MARIPOSAS DE ROMERO (foto 2) o el ERIZO DE MAR (foto 3), CONSOMÉ DE GALERAS Y ALGAS que provocan de entrada una mezcla de estupefacción y voluptuosidad que no se puede describir….¡Ni contener!. A partir de ahí: ¡el éxtasis! Y todo en un escenario espectacular donde ves a los cocineros ante ti preparando los platos, como auténticos prestidigitadores. ¡Y eso no podría haber sido posible sin la magia y el saber hacer de esta pareja de alquimistas! Y, por si fuera poco, el rodaje en el restaurante, fue una experiencia increíble. Un espacio muy especial, una gente maravillosa y unos platos sublimes, inenarrables, impactantes y totalmente perturbadores (¡en el buen sentido del término!), tanto por su aspecto, textura y emplatado como por su espectacular ejecución. En fin, toda una experiencia que no olvidaremos tod@s los que estuvimos allí. Y los hermanos Torres, qué voy a decir de ellos ¡si son para comérselos!: unos anfitriones deliciosos para unas jornadas exquisitas. Sus platos no sólo son sus credenciales, que nos trasmiten su concepto de cocina y de placer, sino un regalo para los sentidos y hablan por sí mismos con mucha más rotundidad que cualquier escrito. Que nos concedan dos de sus preciadas recetas para compartirlas con el público es un gran regalo que os ofrecemos a continuación. Así que nuestro mejor homenaje será intentar ponerlos en práctica contigo con los consejos e instrucciones que ellos mismos nos han facilitado. Este plato ha ido mutando con el tiempo, o mejor dicho, ha tenido varias versiones y esta es, sencillamente espectacular… ¡Aunque las otras también! Los clientes habituales lo piden como TARTAR DE CALAMAR (foto 1), porque el otro también se va transformando con las diversas actualizaciones y, además, ¡es más largo de pedir! 1 2 3 Calamar curado, consomé de ave y caviar Receta por cortesía de los hermanos To rres 74 75 Hasta ahora hemos visto elaboraciones típicas del streetfood, repostería, bebidas, recetas italianas, asiáticas… Pero esta es nuestra primera receta de autor, bueno “autores”, porque es, nada más y nada menos, que de los archiconocidos y súper encantadores Hermanos Torres, o sea ¡todo un lujazo! Además de tener como protagonista un producto nacional excelente y con D.O. ¿Qué más se puede pedir? Pues hay más: tiene el plus de haber sido servida en su propio restaurante de Barcelona, Cocina Hermanos Torres, dónde se realizó el rodaje de una buena parte del episodio 5. Más concretamente, y para los que estáis muy al loro de la serie, se trata de la receta del plato sobre el que uno de los comensales toma nota con mucho interés. Por lo que se refiere a su elaboración, no os asustéis, se puede hacer en casa sin demasiada dificultad, pero que os hará quedar como unos auténticos foodies ante vuestros invitados. ¿Os atrevéis a hacerla como entrante estas Fiestas de Navidad? Espárrago de Tudela con holandesa de foie y lima Receta por cortesía de los hermanos To rres 1 Para el caldo, triturar las pechugas de pollo limpias de piel con una parte del agua hasta conseguir una crema fina. ELABORACIÓN: • 2 unidades de calamar de potera (350gr en sucio) • 10gr. caviar 000 • Pimienta blanca • 1 cucharadita de Saku • 1 huevo • 200ml. aceite de semilla INGREDIENTES: 2 Hacer hervir el resto del agua con las verduras limpias y troceadas a modo de bresa. 3 Transcurridos unos 10-15 minutos, verter la crema de pechugas de pollo y dejar que hierva a fuego suave otros 40 minutos para que cocine y reduzca, transcurrido el tiempo, colar por estameña. 4 Poner el caldo a punto de sal y añadir un poco de salsa de soja blanca, sal y pimienta. Texturizar con la goma xantana, quitar el aire y reservar en la nevera. 5 Para la mayonesa de saku, preparar una mayonesa común, con un poco de saku en la mezcla, además de unas gotas de zumo de lima y un poco de sal. 6 Para el aceite madurado, envasar un poco de grasa de lomo de rubia gallega con el aceite de oliva suave y cocinar a 65 grados 1 hora, transcurrido el tiempo, colar por estameña y reservar. 7 Limpiar el calamar de vísceras y pieles, quedándonos únicamente con la parte del cuerpo. Picar a cuchillo en daditos muy pequeños haciendo un tartar. 8 Aliñar el tartar con un poco de la mayonesa de saku, un poco del aceite madurado, sal y pimienta blanca. Hacer una quenelle y colocar en el centro de un plato sopero para a continuación colocar otra quenelle de caviar encima de la de calamar. Finalmente regar con un poco del caldo de pollo, frio, que hemos preparado anteriormente. Para la mayonesa: • 100ml. aceite de oliva 0,4º • 50gr. grasa de lomo de rubia gallega madurada • 3u. pechuga de pollo • Un poco de bresa blanca (cebolla, puerro, ajo, chirivía, celery, hinojo) • 2l. agua mineral • Goma xantana (0.5gr x cada 100ml. Caldo) • Una cda de salsa de soja blanca Para el consomé de pollo: Para el aceite curado: 76 77 • 1 espárrago blanco • 1 lata de esparrago blanco en conserva • 5g xantana • 300gr. mantequilla • 300gr.foie • Sal/pimienta INGREDIENTES: 1 Fundir la mantequilla al baño maría para separar la parte grasa del suero de la misma. ELABORACIÓN: 2 Separar y decantar la parte grasa que es la que vamos a usar para montar la holandesa. 3 Ponemos el foie en una bolsa al vacío y la introducimos en un baño maría durante unos 30 minutos. Retirar de la bolsa, colar y reservar. 1 Pelar el esparrago con cuidado de no llevarnos mucha carne, cocerlo en agua hirviendo durante 4 minutos (dependiendo del grosor del espárrago). 2 Empezamos a preparar la crema de espárrago cogiendo una lata de esparrago blanco en conserva pasándola por el túrmix y agregaremos 5gr de xantana para darle consistencia. 4 Agregar la mantequilla clarificada a hilo sin dejar de batir para ligarla como si de una mayonesa se tratara y luego agregar el foie de la misma manera. 5 Una vez bien montada estará lista para usar, si la queremos mantener en caliente la mantendremos en el baño maría o al lado de una fuente de calor bien filmada y protegida con el plástico film a contacto para que no nos haga piel. Elaboración del plato: Salsa holandesa paso a paso: Os recomiendo que conservéis la receta de esta deliciosa y aterciopelada salsa para poder utilizar en otras preparaciones, como acompañando a un pescado (con lo que conseguirías un exquisito plato de mar y montaña), una carne o incluso una pasta… También puedes utilizar un buen fuagrás para simplificarla y reducir el coste del plato… Y, aunque no será lo mismo ¡te quedará también muy resultona! 78 79 • 1 pollo entero • 5 l de agua • 1 cebolla blanca picada • 2 zanahorias • 2 tallos de apio picados INGREDIENTES: Otro plus es que todos lo reconocen y eso reconforta cuando estás fuera de casa, pero lo curioso es que conecta también con los que ni siquiera conocen el país, como tantos otros platos que forman parte de nuestro menú diario y ni siquiera sabemos ni de dónde proceden. Lo que hemos averiguado hasta ahora es que procede de Ecuador y que se trata de una elaboración tan presente en todas las casas que muchos omiten la palabra chaulafán para llamarlo, directamente, arroz con pollo, porque es el ingrediente más habitual, junto al tocino, la cebolla, el ajo, los pimientos, los guisantes o arvejas, zanahorias, huevos revueltos, pasas, especias, hierbas… Y también hay muchas variaciones: se puede hacer vegetariano, de marisco (especialmente de gambas), carne de cerdo, de ternera o una mezcla de todo, conocida como un mixto. Para esta receta se ha optado por el de pollo porque es el más popular. ¿Dispuest@ a viajar a los fogones callejeros latinos más inexplorados? Para el caldo de pollo: • 1 cda de aceite o mantequilla • 2 cdas de cebolla picada • 3 ¼ tazas del caldo de pollo • 3 tazas de arroz sin cocer Para el arroz: • 2-3 cdas de aceite • 3 cdas de mantequila • 1 taza de cebolla tierna picadita • 6 dientes de ajo machacados • 100gr de tocino o panceta en taquitos • 3 cdas de cilantro picado • 2 cdas de chile molido • 1 cdta de comino molido • ½ cdta de colorante natural o hebras de azafrán (*) • 1 pimiento rojo y 1 verde, picados • 5 ramitas de cilantro fresco y sal • 1 taza de guisantes (arvejas) cocid@s • 2 zanahorias cocidas picadas en cubitos, aprox 1 taza Para el chaulafán: • ½ taza de pasas • 6 huevos revueltos y cocidos • 7 cdas de salsa de soja • 2 cdas de salsa inglesa • 3 cdas de cilantro o perejil picado • 2 manojos de cebolletas picadas • Sal al gusto • Aguacate cortado • Cebolletas encurtidas • Ají o salsa picante ecuatoriana • Guindillas o chiles picantes • Cilantro y limón • Salsa de tomate o cátsup Esta selección estaría huérfana si no diéramos una vuelta por el universo de la comida a domicilio y los mensajeros que la entregan. Algunos de los nuevos chiringuitos take away más concurridos se sitúan en barrios obreros con economías precarias, por eso es muy interesante observar qué se está gestando en esos fogones y que es lo que más se demanda. El potencial creativo y la fuerza por seguir adelante muchas veces los convierte en pioneros y marcadores de tendencias. En ese escenario descubrimos lugares sorprendentes y nuevas recetas streetfood, algunas de ellas más singulares que muchas de las que se encuentran en pleno centro. Y desde esa ventana, pudimos asomarnos y observar, descubriendo el streetfood latino. De entre todos ellos, el chaulafán, un plato ecuatoriano reconfortante y con tradición, que se ha hecho nómada como sus creadores, nos ha cautivado, porque han sabido convertir un plato bastante elaborado como este, en un producto más informal y callejero, pero sin perder su alma ni renunciar a sus raíces. Ideal tanto para ser servido en un foodtruck como en una rostisseria que sirve platos preparados. Chaulafan 80 81 Tan sólo te queda servirlo acompañado del aguacate, la salsita picante y salsa de tomate (o cátsup). 13 Agrega el arroz cocido, el pollo desmenuzado y los pimientos picados. 14 Mezcla bien y cocina a fuego medio-alto unos 5m, removiendo de vez en cuando. 15 Añade el resto de la salsa de soja, de la salsa inglesa, los huevos revueltos, los guisantes, las zanahorias y las pasas. Mézclalo todo bien. 16 Retira del fuego y espolvorea con el cilantro (perejil picado para cilatrófobos) y el tallo de la cebolleta picadito. Como curiosidad, los ecuatorianos dicen que los mejores se comen en las Chifas, que es el nombre que reciben los restaurantes chinos, ya que el chauflán parece que es una versión del arroz tres delicias que trajeron los primeros chinos que llegaron a sus tierras. Y ahora, poco a poco, se está introduciendo en nuestro panorama gastronómico, así que ya es hora, no sólo de conocerlo, sino también de saber cocinarlo. IN F O O D ↓ 1 Pon el agua a hervir y añádele la cebolla, la zanahoria, el apio y el cilantro. ELABORACIÓN: 2 Añade el pollo entero y deja cocer, por lo menos una hora, a fuego medio. 3 Antes de apagar el fuego comprueba que esté bien cocido. 4 Retira el pollo, déjalo enfriar un poco y quítale la piel y los huesos. 5 Desmenuza toda la carne, reservándola para más adelante. 6 El caldo también lo debes reservar para cocer el arroz en él. 7 Calienta el aceite o la mantequilla en una olla a fuego medio/bajo para que no se queme, y agrégale la cebolla picada, removiéndola continuamente. 8 Añade enseguida el arroz, sin dejar que se poche la cebolla. 9 Sube el fuego, sigue removiendo bien y, a continuación, échale por encima el caldo de pollo y deja hervir hasta que se haya reducido el líquido. 10 Baja la temperatura y cocina el arroz tapado a fuego lento durante unos 20 minutos o hasta que esté, no al dente, pero firme y sin pasarse de cocción. 11 En un wok calienta y a fuego medio pon 3 cucharadas de aceite. 12 El sofrito lo vamos a hacer con la cebolla picada, el ajo machacado, el tocino o la panceta troceados en daditos, 1 cucharada de salsa inglesa, 1 cucharada de salsa de soja, el comino, el cilantro, el chile o guindilla finamente picado y el colorante o azafrán que cocinaremos durante unos pocos minutos, hasta que la cebolla esté tierna. Para acompañar: 82 83 • 150 g de tus galletas habituales • 50 gr de frutos secos (en esta, concretamente, han sido avellanas crudas sin piel, pero también podrían ser tostadas…) • 150 g mantequilla de buena calidad • 15 g azúcar INGREDIENTES: Para la base: • 500 g queso crema (yo hoy me he decido por el mascarpone o los untables habituales, pero que tengan cierta espesura y consistencia) • 50 g azúcar mascabado • 5 huevos frescos • 350 ml nata líquida para montar (con un mínimo de 35% de materia grasa) • Una pizca de sal Para el relleno: 1 Pon la nata para montar en un bol junto al zumo de limón. Remueve y déjalo reposar, como mínimo 1 hora, tapado con papel film para que no se oxide con el aire. ELABORACIÓN: 2 Pasado ese tiempo ponlo en la nevera
Compartir