¿Alguna vez su mascota ha salvado a otro animal?

Después de mudarse de la ciudad al campo, nuestro perro Clarence, un tipo negro de pastor, ahora tenía la libertad de deambular y disfrutar del sol de campos y bosques interminables. Ocasionalmente, cuando llegamos a casa, veíamos un perro negro en las profundidades del bosque y asumíamos que era él hasta que doblamos la curva y lo veíamos tirado en el porche. Este frecuente avistamiento de un perro negro por el rabillo del ojo, se hizo conocido como ver "perro fantasma" en nuestra familia. Estaba demasiado lejos para saber realmente si viste un perro.

Un día miramos por la ventana y vimos que Clarence había sacado su ropa de cama y su plato de comida del porche al borde del bosque. Se sentó pacientemente mientras el "perro fantasma" comía su comida de una manera tímida e insegura. Salimos y el perro salió corriendo. Esto sucedió con más frecuencia y, finalmente, el perro comenzó a quedarse al borde del bosque cuando salimos. Esto lo llevó a quedarse acostado en el patio con Clarence, pero aún corriendo hacia la línea de árboles cuando salimos.

Decidí probar un nuevo enfoque. Agarré unas galletas para perros, le di una a Clarence y tiré la otra por los árboles. Al principio, el perro fantasma creía moverse, pero poco a poco, Clarence lo convenció para que comiera las golosinas. El tímido perro, que ahora podía ver era una mezcla de pit bull y chow, se acercó con la cola entre las piernas y la cabeza baja. ¿Pude alcanzar lentamente y acariciar su cabeza cuando se comió una galleta del suelo?

Se derritió! Se inclinó y se sentó tan quieto que tembló. ¡Toda su personalidad cambió! Él me siguió a mis talones desde entonces. Se pegó a Clarence como pegamento cuando yo estaba cerca. ¡También descubrimos que él "sonrió" cuando era feliz!

Una vez que estuvo con nosotros el tiempo suficiente para sentirse realmente cómodo y decidimos llevarlo al veterinario para un chequeo. También trajimos a Clarence ya que los dos eran inseparables. Ghost Dog había sido renombrado como "Snarky" debido a los resoplidos y estornudos que hacía cuando estaba feliz. Snarky nunca había estado en un automóvil o al veterinario. ¡Intentó tanto ser obediente pero estaba extremadamente nervioso! Desafortunadamente, el veterinario confirmó que tenía gusanos cardíacos graves y que necesitaría ser tratado y puesto en cuarentena durante muchas semanas. Hemos tenido el dinero para hacer esto y temíamos que la cuarentena rompiera su espíritu por completo. Tomamos la difícil decisión de llevarlo a casa y darle la mejor vida que pudimos mientras pudimos.

¡Snarky vivió 12 años más! Su veterinario dijo que si ella creía ver los resultados de la prueba, nunca habría creído que él tenía gusanos del corazón. Él y Clarence vivieron sus mejores vidas amados y seguros hasta el final.

Clarence, el adoptante, también amaba a nuestros gatos, conejitos y bebés. Tenía el corazón más grande que cualquier perro que haya tenido. Nuestro patio siempre estaba lleno de perros al azar de propiedades a través del bosque. ¡Les daría la bienvenida a todos! Esta foto es de Snarky y Clarence, de 12 y 13 años, justo antes de que ambos nos dejaran. ❤️