¿Cómo te has adaptado para ayudar a tu gato con necesidades especiales?

Winnie tuvo un comienzo difícil en la vida. La encontré en mi patio delantero, maullando lastimosamente hacia mí. Cuando levanté a este pequeño gatito de cinco libras, ella siseó y escupió como un alma en pena.

Tenía una costra en la nariz desde la punta hasta entre los ojos. Me pareció que había sido arrojada y aterrizo de cara en el pavimento.

Imagen ampliada de la costra de su nariz.

La recogí y pronto se curó por completo, pero obviamente tenía algún tipo de problema porque se volcaría mientras estaba parada.

El veterinario no pudo encontrar ningún problema que pudiera solucionarse, por lo que ella y mis otros gatos se acomodaron y se llevaron bien.

Pero después de unos dos años, de repente comenzó a tener convulsiones. Una vez más, no había nada que mi veterinario pudiera hacer para detenerlos.

Hace unos cinco años, tuvo una convulsión tan violenta que sus pupilas se dilataron permanentemente.

Ahora tiene algunas dificultades para ver a veces.

Cuando me doy cuenta de que está desorientada y gira hacia la pared, salto y la guió en la dirección en que sé que se dirige.

Por lo general, puede ir a donde planeaba ir.

Y cuando le doy yogur natural, siempre la pongo frente a su tazón y le doy golpecitos hasta que comienza a comer.

Ella se ha adaptado muy bien a sus discapacidades. Ella es dulce y le encanta lamerme la cara, lo que le dejo hacer hasta que comienza a sentirse en carne viva.

Entonces ella está feliz, satisfecha y sonriente, y lista para conciliar el sueño.

Maravillosa actualización. Los ojos de Winnie han estado menos dilatados recientemente, por períodos más largos de tiempo. ¡Estoy indescriptiblemente feliz!