Si nos referimos a los alienígenas de obras de ficción no es siempre es así. Por ejemplo, este es un alienígena de la película Starship Troopers:
Hay muchos otros ejemplos en cine, cómics o novelas.
Cuando sí tienen aspecto humanoide se puede deber a varias causas:
En la vida real… falta de imaginación de los “contactados”. Es más fácil inventarse o copiar de otros la idea de un extraterrestre humanoide que sí tuviera cualquier otra forma. Y, sobre todo, es más fácil explicarlo a otros y que el relato siga siendo creíble.
Además, en la mayoría de las religiones los dioses son antropomorfos, y tenemos interiorizado que si los seres supremos tienen forma más o menos humana (salvo que algunos tengan cabeza de chacal o trompa de elefante), los extraterrestres también. Porque… ¿como va a ser inteligente un extraterrestre con forma de hormiga o gusano? El antropocentrismo se contagia en todo.
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