Comunicación como una Construcción de Realidad

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La Comunicación como Construcción de Realidad
La comunicación es un proceso complejo que trasciende la simple transmisión de información. Más allá de ser un vehículo para compartir hechos y datos, la comunicación es una herramienta poderosa para construir, moldear y redefinir la realidad. La Teoría de la Comunicación de Construcción Social nos insta a considerar cómo nuestras interacciones verbales y no verbales, nuestras narrativas compartidas y los símbolos que empleamos, contribuyen en gran medida a la forma en que percibimos y entendemos el mundo que nos rodea.
Las redes sociales y los medios de comunicación modernos ejemplifican la influencia de la comunicación en la construcción de la realidad. A través de plataformas como Twitter, Facebook e Instagram, las personas participan activamente en la creación y difusión de narrativas que pueden afectar la opinión pública y dar forma a las percepciones colectivas. Los algoritmos de estas plataformas también juegan un papel clave al determinar qué contenido se muestra a los usuarios, lo que puede generar burbujas de información y limitar la exposición a perspectivas divergentes.
En este sentido, las redes sociales pueden ser tanto una herramienta de empoderamiento como una fuente de manipulación. Los movimientos sociales han utilizado las redes para dar visibilidad a problemas marginados y crear conciencia sobre cuestiones importantes. Sin embargo, también han sido utilizadas para difundir desinformación y distorsionar la verdad. Esto pone de relieve la importancia de la educación mediática y la alfabetización digital para que las personas puedan discernir entre información veraz y engañosa.
La noción de "realidad compartida" se vuelve aún más intrigante en el contexto de la realidad virtual y la realidad aumentada. Estas tecnologías emergentes permiten a las personas experimentar y coexistir en realidades construidas digitalmente. Esto plantea preguntas filosóficas sobre la naturaleza de la realidad y cómo la comunicación en estos entornos puede moldear nuestra percepción y comprensión del mundo que nos rodea. ¿Hasta qué punto estas nuevas realidades pueden influir en nuestras experiencias y cómo interactuamos con otros?
En última instancia, la comunicación como construcción de realidad nos desafía a considerar cómo nuestras palabras, imágenes y acciones colectivas dan forma a la manera en que experimentamos y entendemos el mundo. A medida que continuamos navegando por las aguas de la comunicación digital y la tecnología emergente, es imperativo reflexionar sobre cómo queremos que se construya 
nuestra realidad compartida y cómo podemos fomentar un diálogo constructivo y significativo.