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Gilligan • Ulfohn La extracción dentaria Técnicas y aplicaciones clínicas CADUR La extracción dentaria BUENOS AIRES - BOGOTÁ - CARACAS - MADRID - MÉXICO - PORTO ALEGRE e-mail: info@medicapanamericana.com www.medicapanamericana.com La extracción dentaria Técnicas y aplicaciones clínicas JORGE MARCELO GILLIGAN Doctor en Odontología Profesor Titular de la Cátedra de Cirugía II-B, Facultad de Odontología, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina ADRIÁN GUSTAVO ULFOHN Doctor en Odontología Profesor Adjunto de la Cátedra de Cirugía II-B, Facultad de Odontología, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina ARGENTINA Marcelo T. de Alvear 2145 (C1122AAG) Buenos Aires, Argentina Tel.: (54-11) 4821-5520 / 2066 / Fax (54-11) 4821-1214 e-mail: info@medicapanamericana.com COLOMBIA Carrera 7a A Nº 69-19 - Bogotá D.C., Colombia Tel.: (57-1) 345-4508 / 314-5014 / Fax: (57-1) 314-5015 / 345-0019 e-mail: infomp@medicapanamericana.com.co ESPAÑA Quintanapalla Nº 8, Planta 4a (28050) - Madrid, España Tel.: (34-91) 1317800 / Fax: (34-91) 4570919 e-mail: info@medicapanamericana.es MÉXICO Hegel Nº 141, 2° piso- Colonia Chapultepec Morales Delegación Miguel Hidalgo - C.P. 11570 - México D.F. Tel.: (52-55) 5262-9470 / Fax: (52-55) 2624-2827 e-mail: infomp@medicapanamericana.com.mx VENEZUELA Edificio Polar, Torre Oeste, Piso 6, Of. 6 C Plaza Venezuela, Urbanización Los Caobos, Parroquia El Recreo, Municipio Libertador, Caracas, Depto. Capital, Venezuela Tel.: (58-212) 793-2857/6906/5985/1666 Fax: (58-212) 793-5885 e-mail: info@medicapanamericana.com.ve Hecho el depósito que dispone la ley 11.723. Todos los derechos reservados. Este libro o cualquiera de sus partes no podrán ser reproducidos ni archivados en sistemas recuperables, ni transmitidos en ninguna forma o por ningún medio, ya sean mecánicos o electrónicos, fotocopiadoras, grabaciones o cualquier otro, sin el permiso previo de Editorial Médica Panamericana S.A.C.F. © 2014. EDITORIAL MÉDICA PANAMERICANA S.A.C.F. Marcelo T. de Alvear 2145 - Buenos Aires - Argentina La versión electrónica de esta edición se publicó en el mes de febrero de 2014 ISBN: 978-950-06-0314-0 - Versión impresa ISBN: 978-950-06-0650-9 - Versión electrónica Gilligan, Jorge Marcelo La extracción dentaria : Técnicas y aplicaciones clínicas / Jorge Marcelo Gilligan y Adrián Gustavo Ulfohn ; ilustrado por Walter García. - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires. : Médica Panamericana, 2014. E-Book. ISBN 978-950-06-0650-9 1. Odontología. I. Ulfohn, Adrián Gustavo II. García, Walter , ilus. III. Título CDD 617.6 Los editores han hecho todos los esfuerzos para localizar a los poseedores del copyright del material fuente utilizado. Si inadvertidamente hubieran omitido alguno, con gusto harán los arreglos necesarios en la primera oportunidad que se les presente para tal fin. Gracias por comprar el original. Este libro es producto del esfuer- zo de profesionales como usted, o de sus profesores, si usted es estudiante. Tenga en cuenta que fotocopiarlo es una falta de res- peto hacia ellos y un robo de sus derechos intelectuales. Las ciencias de la salud están en permanente cambio. A medida que las nuevas investigaciones y la experiencia clínica amplían nuestro conoci- miento, se requieren modificaciones en las modalidades terapéuticas y en los tratamientos farmacológicos. Los autores de esta obra han verificado toda la información con fuentes confiables para asegurarse de que ésta sea completa y acorde con los estándares aceptados en el momento de la publicación. Sin embargo, en vista de la posibilidad de un error humano o de cambios en las ciencias de la salud, ni los autores, ni la editorial o cual- quier otra persona implicada en la preparación o la publicación de este tra- bajo, garantizan que la totalidad de la información aquí contenida sea exac- ta o completa y no se responsabilizan por errores u omisiones o por los re- sultados obtenidos del uso de esta información. Se aconseja a los lectores confirmarla con otras fuentes. Por ejemplo, y en particular, se recomienda a los lectores revisar el prospecto de cada fármaco que planean administrar para cerciorarse de que la información contenida en este libro sea correcta y que no se hayan producido cambios en las dosis sugeridas o en las con- traindicaciones para su administración. Esta recomendación cobra especial importancia con relación a fármacos nuevos o de uso infrecuente. Visite nuestra página web: http://www.medicapanamericana.com 1a edición en formato digital Buenos Aires, febrero de 2014 VIVIANA ALCAZAR Odontóloga Profesora Asistente, Cátedra de Cirugía II-B, Facultad de Odontología, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina LAURA ALICIA ELIZABETH ASTORGA Odontóloga Profesora Asistente, Cátedra de Cirugía II-B, Facultad de Odontología, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina LUCAS ANDRÉS BONINI Odontólogo Profesor Asistente, Cátedra de Cirugía II-B, Facultad de Odontología, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina CYNTHIA EVELIN CUNNINGHAM Odontóloga Profesora Asistente, Cátedra de Cirugía II-B, Facultad de Odontología, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina FERNANDO DANIEL GARCÍA Doctor en Odontología Profesor Asistente, Cátedra de Cirugía II-B, Facultad de Odontología, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina JORGE MARCELO GILLIGAN Doctor en Odontología Profesor Titular, Cátedra de Cirugía II-B, Facultad de Odontología, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina MAURICIO ANDRÉS GRECO Odontólogo Profesor Asistente, Cátedra de Cirugía II-B, Facultad de Odontología, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina CRISTINA ANDREA LEDESMA Odontóloga Profesora Asistente, Cátedra de Cirugía II-B, Facultad de Odontología, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina ENRIQUE JORGE LEHNER ROSALES Doctor en Odontología Profesor Titular de Cirugía Buco-Maxilo-Facial, Universidad Católica de Córdoba, Argentina CÉSAR LUIS MALATESTA Odontólogo Profesor Asistente, Cátedra de Cirugía II-B, Facultad de Odontología, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina ANA PATRICIA MORALES Odontóloga Profesora Asistente, Cátedra de Cirugía II-B, Facultad de Odontología, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina GRACIELA SUSANA MUSSO Odontóloga Profesora Asistente, Cátedra de Cirugía II-B, Facultad de Odontología, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina JOSÉ GABRIEL SANTOLINO Odontólogo Profesor Asistente, Cátedra de Cirugía II-B, Facultad de Odontología, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina ADRIÁN GUSTAVO ULFOHN Doctor en Odontología Profesor Adjunto, Cátedra de Cirugía II-B, Facultad de Odontología, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina Colaboradores Es para mí una gran satisfacción haber sido designado para escribir el pró- logo de esta obra, realizada por los profesores Dr. Jorge M. Gilligan y Dr. Adrián G. Ulfohn. A ambos los conozco desde su época juvenil, como alumnos, y vi su constancia, dedicación, esfuerzo y progreso en el desempeño de su profesión. Pude observar la evolución y el crecimiento científico que tuvieron en la Cátedra de Cirugía II-B de la Facultad de Odontología de la Universidad Nacional de Córdoba. Esta obra, que trata los aspectos más relevantes de la extracción dentaria y sus diferentes técnicas, no es “un libro más” sobre el tema, sino que el lector va a encontrar en él una descripción amena, detallada y fácilmente entendible de la problemática que plantea esta disciplina dentro del ámbito de la Odontología. He sido testigo del trabajo realizado por estos profesionales en su labor coti- diana en la docencia e investigación, como también en la obtención de la documentación con la que ilustran el texto, en el que ponen de manifiestola solidez de los conocimientos adquiridos y el interés que poseen para valorar- los en los diferentes capítulos. Los autores exponen con amplitud la necesidad de realizar una correcta historia clínica, acompañada de una buena inspección y estudio radiográfico, hasta llegar al diagnóstico de la afección que sufre el paciente y, a partir de allí, proponer el tratamiento adecuado para cada caso. El lector encontrará una minuciosa descripción de las principales técnicas anestésicas aplicadas con mayor frecuencia. Se encaran los distintos procedi- mientos utilizados en la avulsión de piezas dentarias normalmente erupcio- nadas, ya sea por vía alveolar, o por la técnica del colgajo o de odontosección. Se indica y se describe el instrumental que debe emplearse en cada caso, y se enseñan con precisión las maniobras utilizadas para obtener el objetivo bus- cado. Se dispone, asimismo, de un capítulo especial dedicado a la extracción de restos radiculares, y de otro que describe uso de los elevadores en exodon- cia, sus fundamentos técnicos y su aplicación clínica. En el gran capítulo de “Dientes retenidos”, se presentan, con solvencia, las distintas conductas por adoptar, las variantes de ubicación y posición que tienen estos elementos en los maxilares, la frecuencia con que se encuentran en esa condición y el diag- nóstico por imágenes que se realiza para el estudio de su problemática. Se brinda una acabada descripción del instrumental que se utiliza según los casos y se indican las técnicas quirúrgicas destinadas a obtener la resolución de situaciones clínicas relacionadas con los riesgos naturales (accidentes y com- plicaciones) que se pueden presentar. Todos los capítulos cuentan con un profuso soporte de ilustraciones, gráfi- cos y bibliografía actualizada, que proveen al lector una fuente clara y amena de nuevos y destacados conocimientos. Prólogo PROF. DR. RICARDO A. CASTRO Ex Profesor Titular de la Cátedra de Cirugía II-B Facultad de Odontología Universidad Nacional de Córdoba, Argentina — En cumplimiento de múltiples promesas efectuadas a estudiantes, ex alumnos y colegas, referidas a satisfacer sus consultas e inquietudes en lo que atañe a la problemática de una práctica cotidiana, como la extracción dentaria, surgió el interés por concebir esta obra. En ella pretendimos condensar el resultado del esfuerzo y la experiencia acumulados a lo largo de nuestra trayectoria en el ejer- cicio de esta disciplina, con el convencimiento de poder materializar en estas páginas un aporte digno a la enseñanza y la práctica de las diferentes técnicas de anestesia local y extracción de elementos dentarios normalmente implantados, ectópicos, supernumerarios y retenidos. El objetivo propuesto ha sido exponer acabadamente estos temas dentro de los límites más sintéticos posibles, sin per- juicio de ofrecer una clara explicación de los contenidos específicos de cada uno. La Exodoncia, como rama de la Cirugía Dentomaxilar, no tiene en realidad fronteras definidas, ya que requiere, para su puesta en práctica, el estudio de otras disciplinas odontológicas, como Anatomía Patológica, Fisiología, Farmacología, Semiología o Radiología, que conforman un bagaje de conoci- mientos básicos, necesarios para encarar el acto operatorio con solvencia y capa- cidad, enfatizando la correlación entre una valoración diagnóstica clínicamente completa y el diagnóstico por imágenes, como fundamentos ineludibles para una correcta elección de la técnica quirúrgica por aplicar en cada caso. La distribución de los temas tratados en capítulos estructurados sobre la base de un estudio pormenorizado de las distintas técnicas anestésicas locales, pasan- do luego por la extracción de dientes normalmente implantados por vía alveolar, colgajo u odontosección, extracción de raíces, uso de elevadores y finalmente toda la problemática de la retención dentaria, facilitará el uso de este libro por parte de estudiantes y profesionales jóvenes, quienes podrán acceder a su conte- nido interrelacionando temas afines, asimilándolos coherentemente desde lo más simple hasta lo más complejo. Se ha dedicado en esta obra un importante carácter ilustrativo al desarrollo de cada procedimiento quirúrgico, en la esperanza de que el lector pueda recono- cer y valorar sus fundamentos científicos de manera clara y precisa, combinan- do la exposición conceptual y técnica vertida con su aplicación clínica, guiándo- lo para alcanzar resultados satisfactorios y exitosos en su práctica quirúrgica. Las ilustraciones fueron realizadas especialmente para este texto, apelando a una constante originalidad y didáctica. Las secuencias clínicas expuestas forman parte de una importante casuística elaborada tras muchos años de labor docen- te y asistencial en los claustros universitarios, como también en la práctica pro- fesional cotidiana. En nuestro más ferviente deseo que el presente libro resulte de utilidad en la difícil tarea de formación del futuro profesional, y que constituya una apoyatura constante y fructífera para el odontólogo generalista, así como para quienes se encuentren familiarizados con la temática de esta disciplina, o se dediquen a ella diariamente en su ejercicio profesional. Prefacio X PREFACIO Vaya en estas líneas un sincero y respetuoso homenaje a nuestros maestros de la odontología en general y de la cirugía en particular, quienes guiaron nuestras primeras experiencias en las prácticas relacionadas con esta especialidad. Nos sentimos obligados a expresar un profundo sentimiento de gratitud a cada uno de los colaboradores de esta obra, por su cordial cooperación en su prepa- ración y la constancia en su desinteresada labor. Un sincero agradecimiento a Editorial Médica Panamericana, que nos posibi- litó la concreción de este anhelo. Un reconocimiento especial a la Universidad Nacional de Córdoba y a la Facultad de Odontología en especial, donde desarrollamos nuestra labor docen- te, que nos honraron con los títulos académicos que hoy poseemos y que nos enorgullecen. Los autores [Prefacio] COLABORADORES — V PRÓLOGO — VII PREFACIO — IX 1 Anestesia local — 1 Diferentes métodos anestésicos — 2 Métodos físicos — 2 Métodos mecánicos — 2 Métodos químicos — 2 Drogas anestésicas — 2 Mecanismo de acción de los anestésicos locales — 3 Técnicas anestésicas — 3 Riesgos naturales de la anestesia local — 34 Síntesis conceptual — 38 2 Exodoncia — 41 Indicaciones y contraindicaciones de la extracción dentaria — 42 Instrumental específico para realizar extracciones dentarias — 46 Preoperatorio — 51 Posición paciente-operador —54 Tiempos quirúrgicos de la extracción dentaria por vía alveolar — 57 Diéresis — 57 Exéresis — 57 Prehensión — 57 Luxación — 58 Tracción — 59 Síntesis — 60 Posoperatorio — 61 Extracción de elementos permanentes normalmente implantados — 62 Extracción de elementos dentarios del maxilar superior — 62 Extracción de elementos dentarios del maxilar inferior — 72 Proceso de cicatrización alveolar posextracción dentaria — 78 Riesgos naturales de la extracción dentaria — 81 Síntesis conceptual — 91 3 Extracción por colgajo con alveolectomía — 93 Indicaciones de la extracción por colgajo con alveolectomía — 94 Indicaciones clínicas — 94 Indicaciones radiográficas — 95 Contraindicaciones — 95 Ventajas que ofrece la técnica — 96 Instrumental — 97 Tiempos quirúrgicos — 100 Diéresis de tejidos blandos — 100 Incisión — 100 Decolado y preparación del colgajo — 103 Diéresis de tejidos duros. Osteotomía — 104 Exéresis — 105 Extracción propiamente dicha — 105 Tratamiento de la cavidad alveolar — 105 Síntesis — 106 Síntesis conceptual— 111 4 Extracción por odontosección — 113 Indicaciones de la extracción por odontosección — 114 Ventajas que ofrece la técnica — 115 Instrumental — 116 Técnica quirúrgica — 117 Odontosección en molares inferiores — 118 Odontosección en molares superiores — 125 Síntesis conceptual — 132 5 Extracción de raíces — 133 Clasificación — 133 Generalidades sobre la técnica quirúrgica — 133 Medidas previas — 134 Anestesia — 134 Índice CADUR XII ÍNDICE Extracción de raíces por vía alveolar — 134 Dientes unirradiculares — 135 Raíces que emergen del reborde alveolar, manteniendo su integridad, sin estar cubiertas por encía — 135 Raíces profundamente cariadas por debajo del margen gingival o del reborde alveolar, con remanente dentario socavado o con diversas anomalías — 135 Dientes multirradiculares — 136 Raíces que emergen del reborde alveolar, separadas entre sí por el proceso de caries o por fracturas de antigua data — 137 Raíces unidas por un margen de tejido dentario — 137 Técnica del alvéolo libre — 138 Extracción de fragmentos apicales — 142 Extracción de ápices por vía alveolar — 142 Extracción de ápices por técnica de colgajo — 143 Síntesis conceptual — 146 6 Aplicación de elevadores en exodoncia — 149 Indicaciones para la aplicación de elevadores — 150 Contraindicaciones para la aplicación de elevadores — 151 Reglas para el uso de elevadores — 152 Partes constitutivas de un elevador — 152 Diferentes elevadores — 152 Aplicación de distintos tipos de elevadores según su diseño original — 153 Elevadores Clev Dent — 153 Elevadores de Winter — 155 Elevadores de Barry — 156 Elevadores de Vilma Aimar — 157 Tiempos quirúrgicos — 158 Principios físicos en los que se basa la aplicación de elevadores en exodoncia — 159 Principio de cuña — 159 Principio de palanca — 161 Principio de rueda y eje — 163 Elevadores indispensables en la práctica diaria — 166 Síntesis conceptual — 166 7 Dientes retenidos — 169 Generalidades — 169 Frecuencia — 171 Patogenia de la retención dentaria — 172 Razones embriológicas — 172 Obstáculos mecánicos — 172 Causas generales — 175 Accidentes originados por los elementos retenidos — 176 Accidentes mecánicos — 177 Accidentes mucosos — 179 Accidentes celulares — 179 Accidentes infecciosos — 180 Accidentes nerviosos y neurotróficos — 180 Accidentes tumorales — 180 Predisposición a las fracturas mandibulares — 183 Actitud frente a la retención dentaria — 183 Conducta expectante — 183 Conducta profiláctica — 184 Conducta terapéutica — 184 Síntesis conceptual — 186 8 Terceros molares inferiores retenidos — 188 Topografía de la región — 188 Etiopatogenia — 188 Condiciones embriológicas — 188 Condiciones anatómicas — 189 Accidentes provocados por la retención del tercer molar inferior — 191 Accidentes infecciosos. Pericoronaritis — 191 Accidentes tumorales — 194 Accidentes mecánicos — 194 Examen clínico-radiológico del tercer molar inferior retenido — 195 Examen clínico — 196 Examen radiográfico — 196 Clasificaciones de los terceros molares inferiores retenidos — 201 Clasificación de Winter — 201 Clasificación de Pellg y Gregory — 202 Clasificación de Ries Centeno — 203 Tratamiento quirúrgico del tercer molar inferior retenido — 203 XIIIÍNDICE Preoperatorio — 203 Anestesia — 203 Diéresis de tejidos blandos; incisión y despegamiento del colgajo — 204 Diéresis de tejidos duros. Osteotomía — 205 Exéresis. Luxación y extracción propiamente dicha — 206 Tratamiento de la cavidad — 210 Reposición del colgajo y sutura — 212 Posoperatorio — 212 Germectomía — 213 Síntesis conceptual — 218 9 Terceros molares superiores retenidos — 221 Introducción — 221 Patogenia — 222 Anatomía quirúrgica — 222 Examen clínico — 223 Examen radiográfico — 223 Técnicas radiográficas intraorales — 224 Técnicas radiográficas extraorales — 225 Clasificacion de los terceros molares superiores retenidos — 226 Técnica quirúrgica para la extracción del tercer molar superior retenido — 227 Anestesia — 227 Incisión — 228 Decolado — 229 Osteotomía — 229 Luxación y extracción — 229 Tratamiento de la cavidad — 230 Sutura — 230 Medidas posoperatorias — 230 Síntesis conceptual — 235 10 Caninos superiores retenidos — 237 Clínica de la retención del canino superior — 237 Patogenia — 238 Causas locales — 238 Causas generales — 239 Accidentes provocados por la retención del canino superior — 239 Estudio clínico-radiográfico — 241 Inspección — 241 Palpación — 242 Examen radiográfico — 242 Clasificacion de los caninos superiores retenidos — 250 Técnica quirúrgica para la extracción de los caninos superiores retenidos — 250 Caninos retenidos por palatino — 253 Caninos retenidos por vestibular — 259 Caninos en retención transalveolar — 264 Caninos retenidos en maxilares desdentados — 268 Posoperatorio — 269 Síntesis conceptual — 269 11 Caninos inferiores retenidos y otras retenciones dentarias — 271 Patogenia — 272 Accidentes — 272 Diagnóstico de la retención del canino inferior — 272 Examen clínico — 272 Examen radiográfico — 273 Clasificacion de los caninos inferiores retenidos — 274 Técnica quirúrgica para la extracción de los caninos inferiores retenidos — 275 Caninos retenidos por vestibular — 277 Caninos retenidos por lingual — 282 Otras retenciones dentarias — 285 Síntesis conceptual — 291 12 Dientes supernumerarios — 293 Generalidades — 293 Estudio clínico — 296 Estudio radiográfico — 297 Tratamiento quirúrgico de los dientes supernumerarios — 299 Tratamiento quirúrgico de los dientes suplementarios — 302 Síntesis conceptual — 303 Índice analítico — 305 INTRODUCCIÓN La palabra anestesia proviene etimológicamente del idioma griego, donde significa sin, y a estesis significa sensibilidad. Es la supresión reversible de la sensibilidad dolorosa, táctil y propioceptiva en un área circunscrita del organismo, sin pérdida de la conciencia. Si bien este vocablo es empleado mediante el uso corriente para aludir al procedi- miento que se utiliza para suprimir el dolor, en la práctica significa suprimir la sensibilidad en sus diferentes formas. Muchos años de experiencias clínicas han demostrado el valor y la eficacia de la anestesia local en la práctica odontológica, acen- ANESTESIA LOCAL 1 INTRODUCCIÓN DIFERENTES MÉTODOS ANESTÉSICOS DROGAS ANESTÉSICAS CONTENIDO MECANISMO DE ACCIÓN DE LOS ANESTÉSICOS LOCALES TÉCNICAS ANESTÉSICAS RIESGOS NATURALES DE LA ANESTESIA LOCAL Las distintas técnicas que se emplean para realizar extracciones dentarias demandan la insensibilización del sector donde éstas se efectúan, con el objetivo primordial de anular la presencia del dolor durante su puesta en práctica. La supresión del dolor fue considerada como “una de las más grandes conquistas de la humanidad”, lo que fue posible con el advenimiento de la anestesia. Para aprovechar al máximo todos los beneficios que ésta ofrece, es necesario estar familiarizado con los efectos farmacológicos de los anestésicos locales, con las diferentes técnicas anestésicas y con las medidas de seguridad por adoptar en cada caso. Asimismo, deben tenerse en cuenta las condiciones anatómicas y fisiológicas, así como los factores psicosomáticos propios del paciente, que determinan las variables clínicas de cada método anestésico en particular. PRESENTACIÓN CADUR tuando aún más su trascendencia en la cirugía den- toalveolar, donde juega un papel preponderante. Por lo tanto, tratándose de un procedimiento habi- tual en la práctica quirúrgica, deben considerarse las crecientes exigencias de los pacientes, así como los avances técnicos y los progresos farmacológicos logrados en la actualidad, quepermiten seleccionar adecuadamente estos fármacos, aprovechando al máximo sus beneficios y limitando sus riesgos. DIFERENTES MÉTODOS ANESTÉSICOS Para lograr el efecto anestésico se pueden em- plear diversos métodos, aunque en la práctica qui- rúrgica cotidiana se recurre casi con exclusividad a la inyección de compuestos químicos que, al entrar en contacto con las terminaciones nerviosas perifé- ricas, anulan la transmisión del impulso nervioso sensitivo hacia los centros nerviosos superiores. Sin embargo, existen otros procedimientos a través de los cuales se logra obtener un efecto similar, aunque fugaz y de escasa efectividad. En consecuencia, los diferentes métodos para obtener anestesia local pue- den clasificarse en físicos, mecánicos y químicos. Métodos físicos El efecto anestésico se logra mediante la aplica- ción de frío a nivel de la zona a insensibilizar, como por ejemplo con la utilización de un chorro de clo- ruro de etilo. No es un método válido para realizar extracciones dentarias, pero puede resultar de uti- lidad para efectuar la punción y el drenaje de un absceso. Métodos mecánicos La compresión prolongada del sito a insensibili- zar provoca una isquemia transitoria. En conse- cuencia, la reducción brusca de flujo sanguíneo en el sector causa una pérdida localizada de la sensibi- lidad. Ésta, a su vez, es de corta duración, pero puede ser suficiente como para permitir posterior- mente una punción indolora con una aguja para inyección. Métodos químicos Es el método de elección en exodoncia y en la mayoría de los procedimientos odontológicos. Corresponde a la insensibilización que se logra a partir de la aplicación de drogas anestésicas. DROGAS ANESTÉSICAS Las soluciones anestésicas inyectables se encuentran constituidas químicamente por una base acuosa del clorhidrato del anestésico corres- pondiente, con el agregado de otros componen- tes destinados a optimizar la eficacia de su efecto y a contrarrestar efectos indeseados. El más importante de estos elementos lo constituye el vasoconstrictor, que prolonga la permanencia del anestésico en el sitio donde éste fue depositado, disminuyendo su velocidad de absorción, prolon- gando el efecto anestésico y disminuyendo al mismo tiempo su toxicidad, ya que al reducir la luz de los vasos impiden su penetración en forma directa al torrente sanguíneo. Desde el punto de vista quirúrgico, los vasoconstrictores aportan ventajas incuestionables, ya que al producir isquemia provocan la formación de un campo blanco con un importante efecto hemostático local. Poseen además un efecto sistémico desfa- vorable, ya que pueden provocar excitación car- díaca de variada consideración. Entre estas sus- tancias, se asocian por lo general a los anestésicos locales drogas como la adrenalina (epinefrina), la noradrenalina o la felipresina. Las soluciones así constituidas se presentan comercialmente en forma de cartuchos o anestubos conteniendo 1,8 cc de solución anestésica (fig. 1-1). 2 LA EXTRACCIÓN DENTARIA. TÉCNICA Y CLÍNICA El efecto benéfico del vasoconstrictor radi- ca fundamentalmente en el hecho de que, al reducir la velocidad de absorción de la sustancia anestésica, aumentando su con- centración en el sitio deseado y su período de utilidad, impide su difusión al torrente sanguíneo, evitando así la posibilidad de que produzca efectos locales y sistémicos indeseados. A la composición de las soluciones anestésicas se agregan también agentes conservantes antimicrobia- nos y soluciones isotónicas como el cloruro de sodio. Desde el punto de vista farmacológico, la molécula de los anestésicos locales está constituida por dos componentes diferentes, uno hidrosoluble y otro liposoluble, unidos entre sí por un enlace químico cuya naturaleza permite clasificar a estas drogas en dos grandes grupos, según se trate de una unión del grupo éster o del grupo amida ( ).cuadro 1-1 MECANISMO DE ACCIÓN DE LOS ANESTÉSICOS LOCALES La acción farmacológica esencial de estas drogas es, como ya fue expresado, el bloqueo temporal de la conducción nerviosa sensitiva, acción que se extien- de a la totalidad del territorio inervado por estas fibras. Sin embargo, el mecanismo íntimo por el cual ésta se produce responde a diversas teorías, entre las cuales se destacan la de la precipitación y coagula- ción ultramicroscópica de Bernard, la teoría de Traube, referida a la disminución de la tensión superficial, la de Meyer-Overton, relacionada con la solubilidad de los lipoides, la de Warburg, que hace referencia a la absorción ionizada del anestésico a partir del líquido extracelular, o la teoría de la per- meabilidad celular alterada por factores fisicoquími- cos. Siguiendo la concepción más aceptada, las solu- ciones anestésicas locales previenen el pasaje nor- mal de iones a través de la membrana de las células que componen la fibra nerviosa, bloqueando la con- ducción de los impulsos. Este mecanismo se produ- ce cuando el anestésico impide el pasaje de sodio a través de la membrana celular, deprimiendo de ese modo la excitabilidad, la velocidad de despolariza- ción y la amplitud del potencial de acción hasta niveles donde ya no es capaz de excitar la membra- na en reposo colindante y de generar un nuevo potencial de acción. TÉCNICAS ANESTÉSICAS En la actualidad, la aplicación de un anestésico local debe encaminarse hacia la mayor simplifica- ción en beneficio del paciente. Por lo tanto, el éxito de realizar una anestesia local satisfactoria va a depender, en gran medida, del conocimiento y la destreza para aplicar diferentes técnicas para insen- sibilizar los tejidos que luego serán abordados qui- rúrgicamente. Como fue explicado anteriormente, dichas técnicas difieren no sólo por la esencia misma de sus aspectos técnicos sino fundamental- mente por las características de la estructura ner- 3 CAPÍTULO 1 | ANESTESIA LOCAL 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 Fig. 1-1. Cartuchos predosificados de solución anestésica local (anes- tubos), para ser utilizados con jeringas tipo Carpule. CUADRO 1-1. CLASIFICACIÓN DE LOS ANESTÉSICOS LOCALES Derivados del grupo éster Procaína Tetracaína Propoxicaína Butetamina Derivados del grupo amida Lidocaína Prilocaína Mepivacaína Carticaína viosa sobre la cual la sustancia anestésica es deposi- tada. A los fines de lograr un entendimiento acabado de cada uno de estos procedimientos, se describirán las diferentes anestesias infiltrativas terminales y posteriormente las técnicas regionales a las princi- pales ramas del V par craneal. Anestesia infiltrativa Las diferentes técnicas anestésicas por infiltración, pueden clasificarse teniendo en cuenta el tipo de estructura nerviosa sobre la cual será depositada la solución anestésica para provocar su efecto insensi- bilizante ( ). cuadro 1-2 Anestesia infiltrativa troncular Es aquel procedimiento en el cual se deposita la solución anestésica directamente en contacto con un tronco nervioso. En la práctica quirúrgica, las ramas nerviosas más importantes cuya anestesia bloquea la sensibilidad de amplios territorios de la cavidad bucal, especialmente de la región dento alveolar, corresponden al V par craneal o nervio trigémino, como los nervios maxilar superior e inferior. Anestesia infiltrativa regional Esta técnica se realiza poniendo en contacto la solución anestésica con una rama importante, ya sea colateral o terminal, de un tronco nervioso. Es un procedimiento ampliamente difundido en exodon- cia, ya que se emplea cotidianamente para la extrac- ción de piezas dentarias cuando es necesario el blo- queo de la conducción nerviosa de amplios sectores inervados por esos nervios, o cuando las condicionesanatómicas o patológicas del caso por tratar deman- dan la realización de deposiciones anestésicas aleja- das del sitio de trabajo. Se emplean estos procedi- mientos para las anestesias regionales a las ramas ter- minales de los nervios maxilar superior e inferior, como las que se efectúan para insensibilizar los ner- vios dentarios posteriores, dentario anterior, esfeno- palatino, palatino anterior, dentario inferior, lingual y bucal. Anestesia infiltrativa terminal Con excepción de la insensibilización tópica de las terminaciones nerviosas más superficiales, las técni- cas infiltrativas se realizan inyectando la solución insensibilizante en un sitio determinado, mediante el empleo de cartuchos predosificados aplicados con jeringas tipo Carpule y agujas descartables de dife- rente longitud ( ). Cualquiera de las técnicasfig. 1-2 comprendidas en este grupo demanda de una serie de medidas previas que deben considerarse muy especialmente para evitar el arrastre de material contaminado hacia el interior de los tejidos infiltra- dos. Por lo tanto, se deben volver asépticos los labios y tegumentos que los rodean pincelando estas zonas con tinturas antisépticas. Seguidamente, se aísla el campo quirúrgico con gasas estériles ubicadas a nivel del surco mucoyugal, tanto por la zona mesial como distal del sector donde se efectuará la pun- ción. La mucosa correspondiente debe ser cuidado- samente secada con un trozo de gasa, luego se le debe aplicar el tópico con un apósito o hisopo embe- bido en solución antiséptica y finalmente debe secarse con gasas absorbentes ( ).fig. 1-3 4 LA EXTRACCIÓN DENTARIA. TÉCNICA Y CLÍNICA CUADRO 1-2. CLASIFICACIÓN DE LAS ANESTESIAS INFILTRATIVAS • Anestesia infiltrativa troncular • Anestesia infiltrativa regional • Anestesia infiltrativa terminal – Anestesia submucosa superficial – Anestesia supraperióstica o submucosa profunda – Anestesia subperióstica – Anestesia intraperiodontal – Anestesia intraseptal – Anestesia intrapulpar – Anestesia intraósea Anestesia tópica, de superficie o de contacto Se emplea generalmente como paso previo a las restantes técnicas anestésicas por inyección, para evitar la sensación dolorosa provocada por la pun- ción. Para ello es necesario secar la mucosa cuida- dosamente con gasas estériles. El anestésico que se aplica a continuación, se presenta comercialmente en forma de pomada, gel o aerosol. Anestesia submucosa superficial Consiste en la aplicación del anestésico local inmediatamente por debajo de la mucosa. Su utili- zación se restringe fundamentalmente al drenaje de abscesos, ya que su efecto es prácticamente con- finado a la mucosa donde se efectúa la punción, sin abarcar los planos tisulares más profundos. Con este propósito se utiliza la misma jeringa Carpule que se emplea en todas estas técnicas, con una aguja corta y delgada cuyo bisel se dirige en senti- do contrario a la tabla alveolar, es decir, hacia la mucosa ( ), puncionándose en forma de ani-fig. 1-4 llo en torno a la colección purulenta, ya que la enorme cantidad de bacterias patógenas presente en los tejidos infectados promueve el riesgo de extender el cuadro séptico hacia los tejidos adya- centes. Anestesia submucosa profunda o supraperióstica Es la técnica anestésica utilizada con mayor fre- cuencia en la práctica odontológica. Su objetivo primordial consiste en la insensibilización de la pulpa dentaria, el ligamento periodontal, el hueso alveolar que contiene al elemento dentario y los tejidos blandos adyacentes. Se indica para la extracción de la totalidad de las piezas dentarias superiores y las del sector anterior del maxilar infe- rior. El método se realiza llevando la solución anes- tésica inmediatamente por debajo de la mucosa para ser depositada sobre el periostio, a través del cual se difunde a expensas de la mayor o menor permeabilidad del hueso, hasta alcanzar las termi- naciones nerviosas periféricas que brindan inerva- ción a las estructuras mencionadas ( ). Sefig. 1-5 utiliza una jeringa Carpule con aguja corta, con su bisel dirigido hacia el hueso, con la cual se puncio- na a nivel del fondo de surco vestibular correspon- diente a la pieza a insensibilizar, preferentemente desde mesial, lo cual reditúa accesibilidad, facili- tando la visualización de las maniobras que se efec- túan. En cambio, a la altura de los incisivos centra- les superiores, la presencia de la espina nasal ante- rior determina que el eje jeringa-aguja deba dirigir- se ligeramente desde distal para salvar este reparo óseo. La aguja debe penetrar entre la mucosa y el 5 CAPÍTULO 1 | ANESTESIA LOCAL 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 Fig. 1-2. Jeringas metálicas tipo Carpule ( ) y agujas descartables de diferente longitud ( ).A B A B periostio en dirección paralela a la tabla vestibular hasta llegar a las proximidades del ápice radicular, donde se depositan lentamente las tres cuartas par- tes de la solución anestésica contenida en el cartu- cho predosificado. Para realizar extracciones den- tarias, es necesario efectuar el cierre del circuito anestésico mediante la insensibilización de la encía palatina o lingual correspondiente. Ello demanda de una nueva punción, que en el maxilar superior se efectúa sobre la fibromucosa palatina aproxima- damente a 1,5 cm del margen gingival, en un punto casi equidistante entre ésta y el rafe medio del pala- 6 LA EXTRACCIÓN DENTARIA. TÉCNICA Y CLÍNICA Fig. 1-3. Medidas preanestésicas. Aseptización peribucal ( ), aisla-A miento relativo del campo quirúrgico ( ), secado de la mucosa ( ),B C topicación de la zona de punción con tintura antiséptica ( ) y secadoD con gasas absorbentes ( ).E A B C D E dar, donde el tejido es más laxo y menos adheren- te. En ese sitio, se deposita el cuarto restante de líquido anestésico ( ). En el maxilarcaso clínico 1-1 inferior, su aplicación se limita al sector anterior. Al igual que en la arcada superior, la punción se realiza a nivel del fondo de surco vestibular corres- pondiente al elemento a extraer, mientras que por lingual se punciona aproximadamente a 5 mm del 7 CAPÍTULO 1 | ANESTESIA LOCAL 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 Fig. 1-4. Anestesia infiltrativa terminal submucosa superficial. Fig. 1-5. Anestesia infiltrativa terminal supraperióstica (submucosa profunda). CASO CLÍNICO Caso clínico 1-1. Anestesia infiltrativa terminal supraperióstica (submucosa profunda). Punción a nivel del fondo del surco vestibular ( ) y punción del lado palatino (A B). dar, donde el tejido es más laxo y menos adheren- te. En ese sitio, se deposita el cuarto restante de líquido anestésico ( ). En el maxilarcaso clínico 1-1 inferior, su aplicación se limita al sector anterior. Al igual que en la arcada superior, la punción se realiza a nivel del fondo de surco vestibular corres- pondiente al elemento a extraer, mientras que por lingual se punciona aproximadamente a 5 mm del 7 CAPÍTULO 1 | ANESTESIA LOCAL 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 Fig. 1-4. Anestesia infiltrativa terminal submucosa superficial. Fig. 1-5. Anestesia infiltrativa terminal supraperióstica (submucosa profunda). CASO CLÍNICO Caso clínico 1-1. Anestesia infiltrativa terminal supraperióstica (submucosa profunda). Punción a nivel del fondo del surco vestibular ( ) y punción del lado palatino (A B). borde libre de la encía, donde la descarga de algu- nas gotas de anestésico resulta suficiente para lograr su insensibilización ( ).caso clínico 1-2 La laxitud del fondo de surco facilita el pro- greso de la aguja y la difusión del líquido inyectado sin resistencia alguna, lo que per- mite un procedimiento simple y casi indo- loro. La fibromucosa palatina, en cambio, ofreceuna resistencia a la infiltración propia de los tejidos densos y adheridos, tornando dolorosa la punción y la inyección del anes- tésico. En el sector anterior debe evitarse la punción de las rugas palatinas, ya que la distensión del entramado fibroso que las compone genera intenso dolor. A la simplicidad de la técnica se suman otras ventajas no menos importantes. Se trata de un pro- cedimiento casi indoloro y de gran efectividad. La deposición del anestésico en las proximidades del ápice radicular permite una anestesia pulpar rápida y segura, ya que el bloqueo del filete nervioso que brinda su inervación sensitiva se produce antes de que el filete penetre el foramen apical. La laxitud de los planos mucosos demanda escasa presión sobre el émbolo de la jeringa para que el líquido anestési- co sea inyectado. La escasa densidad tisular permi- te cambios en la trayectoria de la aguja sin que su bisel sea retirado de los tejidos, posibilitando la insensibilización de diferentes sectores con una sola punción. Puede considerarse como una des- ventaja el hecho de que el sitio de punción no resulta lo suficientemente preciso. No obstante, las variaciones que puede llegar a sufrir el posiciona- miento de la aguja debido a esa circunstancia, son compensadas por las excelentes propiedades de difusión de las soluciones anestésicas que se emplean en la actualidad, así como por la gran efectividad de sus agentes vasoconstrictores. Anestesia subperióstica A diferencia del procedimiento anterior, este método consiste en depositar la solución anestési- ca por debajo del periostio, confinándolo entre éste y la cortical externa del maxilar. Para ello se utiliza 8 LA EXTRACCIÓN DENTARIA. TÉCNICA Y CLÍNICA CASO CLÍNICO Caso clínico 1-2. Anestesia infiltrativa terminal supraperióstica en el sector anteroinferior. Punción a nivel del fondo del surco vestibular ( ) y a 5 mm del margen gingival por el lado lingual ( ).A B también una jeringa Carpule con aguja corta, con la cual se punciona en un sitio preciso ubicado sobre la mucosa que tapiza la cortical ósea vestibular, en un punto equidistante entre el fondo de surco y el borde libre de la encía. Se recomienda realizar previamente una pequeña dosis de anestesia submucosa, con el fin de efectuar de manera indolora las maniobras poste- riores. Llevada la aguja de manera perpendicular a la tabla vestibular o ligeramente oblicua, dependiendo de la accesibilidad que brinde el sector, se atraviesa la mucosa y el periostio hasta contactar con la cortical alveolar. Se cambia entonces el ángulo del eje jerin- ga-aguja para adoptar una dirección paralela a la tabla ósea vestibular. Depositando algunas gotas de anestésico en su recorrido, se transcurre entre el periostio y el hueso hasta llegar con el bisel de la aguja a las proximidades del ápice radicular, donde se descarga 1,5 cc de solución anestésica ( ). Lafig. 1-6 técnica cuenta con la gran ventaja de tener un sitio de punción preciso e invariable y un efecto anestési- co profundo y perdurable, producto del confina- miento de la solución entre el periostio y la compac- ta ósea. Su mayor desventaja radica en el intenso dolor que ocasiona la distensión del periostio por parte de la solución infiltrada, sumada a la presión con que ésta debe ser inyectada. Al mismo tiempo, la posibilidad de fractura de la aguja representa un ries- go latente, sobre todo durante los cambios de direc- ción propios de la técnica. En consecuencia, su apli- cación clínica resulta limitada si se comparan sus ventajas y desventajas con las de la anestesia submu- cosa profunda ( ).cuadro 1-3 Anestesia intraperiodontal (pericementaria o transligamentosa) Consiste en depositar el líquido anestésico en el interior del ligamento periodontal para anestesiar sus terminaciones nerviosas sensitivas ( ).fig. 1-7 Previo a realizar la punción y con el fin de evitar la diseminación de material séptico hacia las profun- didades del alvéolo, debe eliminarse todo resto de tártaro supragingival o placa bacteriana del sector correspondiente. Se utiliza una jeringa Carpule con una aguja corta y delgada que se introduce no más de 5 mm entre el cemento radicular y la compacta alveolar, tanto por vestibular como por palatino, aunque cabe también la posibilidad de efectuar esta misma maniobra por mesial y distal indistintamen- 9 CAPÍTULO 1 | ANESTESIA LOCAL 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 Fig. 1-6. Anestesia infiltrativa terminal subperióstica. Punción entre el fondo de surco y el margen gingival hasta contactar con la tabla alveolar ( )A y profundización por debajo del periostio hasta las proximidades del ápice radicular ( ).B A B te. Una vez introducida la aguja, se deposita 0,5 cc de solución anestésica. Si bien representa una alternativa más para lograr la insensibilización de las fibras nerviosas periféricas, la técnica cuenta con escasas ventajas y, por el contrario, no ofrece beneficios apreciables que alienten la posibilidad de seleccionarla como método de elección. La inyección es dolorosa debido a la distensión que sufren las fibras periodontales, y se requiere ejercer una fuerte presión sobre el émbolo de la jeringa para que el anestésico al penetrar logre vencer la resistencia que opone el entramado fibroso perio- dontal. La inflamación aguda y la edematización concomitante (periodontitis), comprime las termi- naciones nerviosas de la zona entre dos paredes inextensibles, como la compacta alveolar y el cemento radicular, provocando dolor intenso y escasamente tolerado por el paciente. En conse- cuencia, el método es aplicable sólo para la extrac- ción dentaria, contraindicándose en cualquier pro- cedimiento odontológico conservador. Por sus dificultades técnicas y desventajas es considerado un procedimiento cuestionable y de escasa aplica- ción, la cual se restringe al refuerzo anestésico del efecto logrado con otras técnicas. Anestesia intrapulpar Es un recurso anestésico empleado en la práctica endodóntica como complemento de las técnicas convencionales, cuando por medio de éstas no se logra la insensibilización total de la pulpa dental. Se deposita el anestésico local directamente en el inte- rior de la pulpa expuesta a través de la apertura cameral correspondiente. Su aplicación es dolorosa y posibilita un efecto anestésico fugaz pero suficiente como para extirpar el filete pulpar de forma indolo- ra. Para ello se emplea una jeringa Carpule y una aguja corta y delgada con el agregado de un tope de goma destinado a obliterar la cavidad de acceso, impidiendo de ese modo el reflujo de la solución inyectada ( ). Para la extracción den-Caso clínico 1-3 taria, su empleo de limita a la anestesia del tejido pul- par durante la odontosección, cuando la insensibili- zación lograda con otras técnicas no resulta suficien- 10 LA EXTRACCIÓN DENTARIA. TÉCNICA Y CLÍNICA Dolor intraoperatorio Cantidad de anestesia a emplear Posibilidad de infección Posibilidad de fractura de la aguja Presión a ejercer sobre la jeringa Dolor pospunción Posibilidad de lesión del periostio Profundidad y duración del efecto anestésico Anestesia Supraperióstica − + − − − − − − Anestesia Subperióstica + − + + + + + + CUADRO 1-3. ESQUEMA COMPARATIVO ENTRE LAS TÉCNICAS ANESTÉSICAS SUPRAPERIÓSTICA Y SUBPERIÓSTICA Fig. 1-7. Anestesia infiltrativa terminal intraperiodontal. te como para anular el estímulo doloroso en el momento en que la fresa atraviesa la cámara pulpar. Anestesia intraósea Se trata de un procedimiento caído en desuso en virtud del empleo masivo de las técnicas regiona- les, que permiten lograr efectos anestésicos efica- ces y de larga duración, sin contar con las múltiples dificultades queacarrea este método. Consiste, como su nombre lo indica, en depositar el anesté- sico local en el interior del tejido óseo esponjoso que circunda el ápice radicular, hacia el cual éste se difunde para insensibilizar los tejidos dentarios y sus estructuras adyacentes. Para ello, es necesario efectuar en primer término una punción anestési- ca supraperióstica a nivel del fondo de surco vesti- bular, con lo cual se logra la insensibilización nece- saria para realizar las maniobras posteriores. Por lo general, se escoge un sitio de punción localizado a nivel del espacio interdentario distal de la pieza por anestesiar, a la altura del ápice radicular. Sobre la base de esta referencia, se procede a realizar sobre la mucosa vestibular una pequeña incisión hori- zontal de aproximadamente 1 cm de longitud con un bisturí convencional tipo Bard Parker, con una hoja número 15. De ese modo, se inciden mucosa y periostio hasta abordar la lámina ósea vestibu- lar. A continuación se separan los tejidos incidi- dos con un instrumento romo y se perfora la tabla vestibular con una fresa esférica de tamaño pro- porcional al diámetro de la aguja que será utiliza- da luego. La maniobra debe llevarse a cabo con profusa refrigeración hasta penetrar en el hueso esponjoso, lo cual se percibe clínicamente como una clara sensación de “caída al vacío”. A través de la vía creada, se introduce una aguja corta y de grosor suficiente hasta las proximidades del ápice radicular, donde se descarga 1 cc de solución anestésica. Una vez efectuada la maniobra, se reti- ra cuidadosamente la aguja y se afrontan los labios de la herida con un punto de sutura. Si bien la técnica cuenta con el indiscutible atributo de lograr un efecto anestésico profundo y perdura- ble, sus numerosas desventajas desvirtúan la posi- bilidad de que dicha técnica pueda llegar a ser un procedimiento de elección. Anestesia intraseptal o transeptal Es una técnica en la cual el anestésico debe infiltrarse en el interior del tejido diploico corres- pondiente al tabique interproximal (septum inter- dentario), a través del cual se difunde apicalmen- te insensibilizando los filetes nerviosos de la zona. La técnica clásica demanda la penetración de la aguja en el interior del hueso esponjoso, para lo cual tradicionalmente se utilizó una aguja corta con intermediario largo, el cual disminuye su lon- gitud con el consiguiente aumento de su rigidez, con lo que se evita que la aguja se doble al pene- trar en el interior del septum. En la actualidad se utilizan agujas cortas de escaso grosor, con las que se punciona en la base de la papila interdentaria sin comprometer el hueso adyacente. Esta pun- ción intrapapilar se efectúa tanto por mesial como 11 CAPÍTULO 1 | ANESTESIA LOCAL 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 CASO CLÍNICO Caso clínico 1-3. Anestesia infiltrativa terminal intrapulpar. por distal del diente por tratar, teniendo la pre- caución de que el bisel de la aguja se dirija hacia apical, con el fin de orientar convenientemente el líquido anestésico hacia la cresta ósea interproxi- mal, a través de la cual éste se difunde hacia el interior del díploe ( ). Al mismocaso clínico 1-4 tiempo, la presión que se aplica durante la infiltra- ción permite a la solución inyectada alcanzar la mucosa del paladar logrando su insensibilización, lo que evita la punción palatina con las consi- guientes molestias que ésta provoca. El método anestésico tiene su aplicación en pacientes niños, en quienes el hueso esponjoso presenta amplios espacios medulares y la porosidad suficiente como para optimizar el procedimiento, lo que reditúa un efecto anestésico rápido y eficaz. Lo mismo sucede en pacientes de edad avanzada que generalmente sufren una marcada reabsorción ósea, fenómeno natural que afecta en mayor o menor medida a ambos maxilares, restando espe- sor al tejido óseo compacto que conforma la cres- ta interdentaria, lo cual facilita la propagación de la solución anestésica. Anestesias infiltrativas regionales. Técnicas anestésicas a las principales ramas del nervio trigémino De acuerdo con lo expresado al clasificar las anestesias infiltrativas, se entiende por anestesia regional aquel método a través del cual se produce el bloqueo de la conducción del impulso nervioso sensitivo mediante la aplicación de la solución anestésica en contacto con una rama terminal o colateral de un tronco nervioso, privando de su sensibilidad al territorio inervado por ésta. En la práctica quirúrgica, se llevan adelante diferentes bloqueos anestésicos ligados a las principales ramas del V par craneal o nervio trigémino. Esta importante estructura nerviosa, considerada por muchos como “nervio de la odontología”, debe su nombre a sus tres ramas terminales (del griego tri, que significa tres, y raíces o ramas), los ner-gemini, vios oftálmico, maxilar superior y maxilar inferior, que se desprenden del ganglio de Gasser situado en la base del cráneo, sobre la cara anterosuperior del peñasco del hueso temporal. El V par craneal es un nervio mixto, es decir, sensitivo-motor. Recoge la sensibilidad tegumentaria de la cara y la mitad anterior del cráneo, la duramadre, las mucosas orbi- taria, nasal y bucal, la cara dorsal de la len- gua por delante de la V lingual, el sistema dentario, las encías y el paladar, la parte anterior del oído medio y la membrana tim- pánica. Su parte motora inerva los múscu- los masticadores (masetero, temporal y pte- rigoideos), los músculos milohioideo, del martillo y peristafilino externo, y el vientre anterior del digástrico. Interesan desde el punto de vista anestésico las ramas maxilar superior y maxilar inferior, que serán estudiadas a continuación. El nervio maxilar superior, segunda rama del tri- gémino, se desprende del ganglio de Gasser, se diri- ge hacia adelante hasta emerger del cráneo por el 12 LA EXTRACCIÓN DENTARIA. TÉCNICA Y CLÍNICA CASO CLÍNICO Caso clínico 1-4. Anestesia infiltrativa terminal intraseptal, a través de la papila interdentaria. agujero redondo mayor y desemboca en la parte más alta de la fosa pterigomaxilar, considerada anatómicamente como la región de este nervio, donde, entre otras importantes estructuras, se encuentra su ganglio anexo, el ganglio esfenopala- tino o de Meckel. A partir de allí, el nervio emite en su recorrido una amplia red de filetes nerviosos colaterales y terminales. El nervio maxilar superior, rama media del V par craneal, de naturaleza sensitiva, inerva las fosas nasales, la bóveda palatina y el velo del paladar, el labio superior, el ala de la nariz y la totalidad de la arcada dentaria superior (dientes, hueso alveolar y muco- sas). Deben considerarse muy especialmente con fines anestésicos, aquellas ramas que brindan iner- vación sensitiva a las estructuras dentarias y peri- dentarias, como los nervios dentario anterior y dentario posterior, que inervan las piezas dentarias superiores, el hueso alveolar que las contiene y la encía vestibular correspondiente, así como los ner- vios palatino anterior y esfenopalatino interno (nasopalatino), que inervan la totalidad de la fibro- mucosa que tapiza la bóveda palatina. Los dos pri- meros entrecruzan sus fibras a la altura del primer premolar, sumándose de manera inconstante e infrecuente un haz de fibras sensitivas que confor- man los nervios dentarios medios. Ello da como resultado la formación de un importante plexo nervioso conocido como asa nerviosa externa. Del mismo modo, la anastomosis de las fibras corres- pondientes a los nervios que inervan la fibromuco- sa palatina da origen a una trama sensitiva denomi- nada asa nerviosa interna. Por su parte, el nervio maxilar inferior se originaen la porción más externa del ganglio de Gasser a través de dos raíces contiguas. La más pequeña contiene el contingente de fibras motoras, en tanto que la más voluminosa contiene a las fibras sensiti- vas. A partir de su sitio de origen se dirige hacia adelante en dirección al agujero oval, por el cual sale del cráneo hasta aparecer en la fosa cigomáti- ca, donde ambas raíces se fusionan en un tronco único. Al desembocar en esta región anatómica, comienza inmediatamente a emitir sus ramas cola- terales y, luego de un breve trayecto, se divide en sus ramas terminales. El nervio maxilar inferior es la rama más voluminosa del trigémino y, a diferencia de las otras dos, es de naturaleza mixta (sensi- tivo-motora). Sus fibras sensitivas brindan inervación a la duramadre, el oído externo y parte de la membrana timpánica, las regio- nes mentoniana, labial inferior, geniana, maseterina, parotídea y temporal, la muco- sa del piso de boca, la región gingivodenta- ria inferior y la mucosa de la lengua por delante de la V lingual. Su territorio de iner- vación motriz corresponde a los músculos temporal, masetero, pterigoideos externo e interno, peristafilino externo, milohioideo, del martillo y vientre anterior del digástrico. Con fines anestésicos, interesan fundamental- mente sus dos ramas terminales, es decir, el nervio dentario inferior y el nervio lingual, así como el nervio bucal, rama terminal del nervio temporobu- cal. El conocimiento del origen, el recorrido, la dis- tribución y el territorio de inervación de cada uno de estos nervios resulta de gran importancia desde el punto de vista anestésico, ya que son responsa- bles de la inervación sensitiva de la totalidad de la hemiarcada mandibular correspondiente. Anestesia regional al nervio dentario anterior El nervio dentario anterior se desprende del ner- vio infraorbitario 3 a 5 mm antes de su emergencia por el agujero homónimo. Desde este punto trans- curre en un trayecto intraóseo labrado sobre la pared anterior del seno maxilar, para formar en su trayecto un plexo nervioso que brinda inervación a 13 CAPÍTULO 1 | ANESTESIA LOCAL 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 los elementos dentarios del sector anterior. En éste pueden diferenciarse ramos pulpares, periodontales, óseos y gingivales, destinados a la pulpa dental, el ligamento periodontal, el hueso alveolar y la encía vestibular, respectivamente. Luego de separarse del nervio dentario anterior, el nervio infraorbitario con- tinúa su recorrido por el interior del conducto hasta emerger por el agujero homónimo, abriéndose en un penacho de fibras que inervan el párpado inferior, el ala de la nariz y el labio superior. Reparos anatómicos La anestesia regional de este nervio demanda de suma precisión. Es necesario abordar el agujero infraorbitario con el fin de depositar en ese sitio la solución anestésica, la cual debe alcanzar las proximi- dades del nervio dentario anterior por difusión, blo- queando la sensibilidad correspondiente a su territo- rio de inervación. En consecuencia, resulta funda- mental determinar con exactitud la localización de este orificio sobre la base de referencias anatómicas. Finochietto y Durante Avellanal, establecieron un método consistente en trazar una línea imaginaria horizontal uniendo los dos rebordes orbitarios infe- riores, a la cual se corta con una vertical que, partien- do del centro de la pupila, coincida con el eje del segundo premolar. Sobre este trazado se encuentran de manera coincidente los agujeros supraorbitario, mentoniano e infraorbitario, este último, localizado a 6 mm por debajo del reborde orbitario ( ). Alfig. 1-8 mismo tiempo, si se dividiera la órbita en tercios, se determinaría fehacientemente que el agujero infraor- 14 LA EXTRACCIÓN DENTARIA. TÉCNICA Y CLÍNICA 6 mm. Fig. 1-9. Localización del agujero infraorbitario en la unión de los ter- cios medio e interno de la órbita. 6 mm. Fig. 1-8. Reparos anatómicos para la anestesia regional al nervio den- tario anterior. Una línea imaginaria que une los agujeros supraorbitario y mentoniano, pasando por el centro de la pupila y por el eje del segundo premnolar, atraviesa el agujero infraorbitario a 6 mm del reborde inferior de la órbita. bitario se encuentra localizado en la unión del tercio medio con el tercio interno de ésta ( ). Sinfig. 1-9 embargo, se prefiere el abordaje del nervio dentario anterior con fines anestésicos con la técnica propues- ta por Rahaussen, que ofrece mayor precisión y sim- plicidad. Para su puesta en práctica se toman como referencias la sutura frontomalar, relieve óseo fácil- mente palpable, y el espacio interdentario entre los incisivos central y lateral. Trazando una línea imagi- naria que una estos reparos anatómicos, podrá locali- zarse el agujero infraorbitario en una hendidura ubi- cada equidistantemente entre ambos ). (fig. 1-10 Posición paciente-operador Para realizar esta técnica el paciente debe estar cómodamente sentado, con su cabeza situada de manera tal que el plano oclusal superior quede paralelo al piso y a la altura del hombro del opera- dor, que se sitúa por delante y a su derecha. Como primera medida, se ubica el dedo mayor de la mano izquierda por debajo del reborde orbitario, palpan- do una depresión localizada a este nivel, fácilmen- te identificable basándose en las referencias anató- micas mencionadas anteriormente, donde además, el paciente suele experimentar una ligera sensación dolorosa. Manteniendo el pulpejo del dedo mayor en esa situación, se separa el labio superior con los dedos pulgar e índice para descubrir de ese modo el fondo de surco vestibular. Técnica anestésica Se emplea una jeringa Lüer cargada con 2 cc de 15 CAPÍTULO 1 | ANESTESIA LOCAL 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 2 1 3 1 2 Fig. 1-11. Dirección del eje jeringa-aguja para realizar la técnica de Rahaussen. 2 1 3 Fig. 1-10. Reparos anatómicos para anestesiar el nervio dentario ante- rior por la técnica de Rahaussen. Agujero infraorbitario (1), sutura fron- tomalar (2) y espacio interdentario entre incisivos central y lateral (3). solución anestésica y una aguja 40/7. La punción se efectúa a la altura del ápice del canino superior, 5 mm por fuera del fondo de surco, es decir, sobre la mucosa labial, salvando de ese modo la presencia de la eminencia canina, cuya situación anatómica puede llegar a interponerse al paso de la aguja. Ésta debe dirigirse siguiendo el trayecto comprendido entre el espacio interdentario entre los incisivos central y lateral y la sutura frontomalar, siguiendo una dirección oblicua hacia arriba, afuera y ligera- mente hacia atrás, buscando la localización de la sutura frontomalar como referencia ( ). Sefig. 1-11 profundizan aproximadamente 2 cm desde el sitio donde se efectuó la punción, hasta que el dedo medio ubicado sobre el agujero infraorbitario reco- noce mediante el tacto la llegada del bisel de la aguja. Previa aspiración con el émbolo de la jerin- ga, para descartar la posible penetración en la luz de un vaso, se descargan lentamente 2 cc de solu- ción anestésica (caso clínico 1-5). Si bien la dirección del conducto infraorbi- tario en su desembocadura resulta coinci- dente con la trayectoria de la aguja, a punto tal de que el orificio pareciera “llamar a ésta”, la penetración del bisel de la aguja en su interior debe ser mínima, con el fin de evitar lesionar los trayectos vasculares que emergen con el nervio en forma conjunta. La deposición del anestésico en las proximi- dades del agujero infraorbitario permite su difusión hacia el interior del conducto con la aplicación de masajes circulares suaves sobre la piel de la zona. Estructuras anestesiadasLa anestesia conseguida abarca a los incisivos cen- tral y lateral y al canino superior, y alcanza la pulpa dental, el periodonto, el hueso alveolar, el periostio y la encía vestibular. La insensibilidad de estas estruc- turas constituye el síntoma más relevante desde el punto de vista quirúrgico. En forma conjunta se 16 LA EXTRACCIÓN DENTARIA. TÉCNICA Y CLÍNICA CASO CLÍNICO Caso clínico 1-5. Técnica anestésica de Rahausen para anestesiar el nervio dentario anterior. Se ubica el dedo medio sobre la posición del agujero infraorbitario, separando el labio superior con los dedos pulgar e índice ( ). Se puncio-A na a 5 mm del fondo del surco a la altura de la papila interdentaria entre incisivos central y lateral, en dirección a la sutura frontomalar (B). manifiesta precozmente la insensibilidad del labio superior, el ala de la nariz y el párpado inferior del lado anestesiado, debido a que el efecto anestésico compromete también a los filetes labiales, parpebra- les y nasales del nervio infraorbitario. La presencia de estos síntomas no garantiza la plena efectividad de la anestesia buscada En la práctica, la anastomosis del nervio dentario anterior con los nervios dentarios medios y con su homólogo del lado opuesto, llega a provocar persistencia de la sensibilidad a nivel del canino y del incisivo central, respectivamente. Ello demanda la necesidad de efectuar una punción anes- tésica complementaria a nivel del fondo de surco vestibular, a la altura del primer premolar contiguo o del incisivo central opuesto, según el caso, depositan- do en el sitio 0,5 cc de solución anestésica. Aplicaciones del método anestésico El método ofrece excelentes resultados, teniendo en cuenta que con una sola punción se consigue el bloqueo sensitivo del sector anterior de una hemiar- cada del maxilar. Desde el punto de vista quirúrgico, la amplitud del terreno anestesiado reserva su aplica- ción para intervenciones de cierta envergadura, como la enucleación de quistes voluminosos que involucren la premaxila, el abordaje anterior del seno maxilar o las apicectomías de incisivos o caninos. En exodoncia, su aplicación se remite a la realización de extracciones múltiples en el sector anterosuperior y para la cirugía de dientes retenidos, como en el caso del canino superior, de manera excluyente. Complicaciones propias de la técnica Las complicaciones más importantes que pueden presentarse, son la formación de equimosis doloro- sas resultantes de la punción accidental del músculo canino y hematomas subpalpebrales de gran ampli- tud, provocados por la lesión de los vasos infraorbi- tarios. Con menos frecuencia pueden presentarse trastornos neurológicos producidos por laceraciones del tronco nervioso, consistentes en parestesia o disestesia en sectores correspondientes a su territo- rio de inervación, o trastornos oculares como diplo- pía o estrabismo, por la anestesia transitoria del ner- vio motor ocular externo. Anestesia regional a los nervios dentarios posteriores Estas ramas se desprenden del nervio maxilar superior en la fosa pterigomaxilar antes que éste alcance el conducto infraorbitario. Dos, tres o más filetes penetran por pequeños orificios labrados en la tuberosidad del maxilar, que adoptan la denomi- nación de agujeros dentarios posteriores. Estos se encuentran aproximadamente a 2 o 3 cm de la superficie oclusal del tercer molar. Luego de reco- rrer un corto trayecto se anastomosan con los ner- vios dentarios medios, de presencia inconstante y con fibras del nervio dentario anterior, formando el asa nerviosa externa descrita anteriormente, con lo cual brinda en su itinerario inervación a los tres molares superiores (pulpa y periodonto), al hueso y a la gíngiva vestibular correspondiente, emitiendo también ramos antrales destinados a la mucosa que tapiza el piso sinusal. Los ramos anastomóticos dentarios forman un plexo que inerva de manera similar a los premolares. Como fue expresado ante- riormente, la presencia de los nervios dentarios medios es irregular, pero su existencia conlleva el aporte sensitivo a ambos premolares, la encía ves- tibular, el hueso alveolar y el periostio en torno a estos elementos, alcanzando también a menudo la raíz mesiobucal del primer molar. Reparos anatómicos Desde el punto de vista anestésico, debe conside- rarse como sitio de abordaje de los nervios denta- rios posteriores a la tuberosidad del maxilar supe- rior. Es decir, el bloqueo regional de estos tiene como fundamento depositar el líquido insensibili- zante en contacto con sus fibras, una vez que éstas penetran el maxilar a través de los orificios corres- pondientes. 17 CAPÍTULO 1 | ANESTESIA LOCAL 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 Posición paciente-operador El paciente, cómodamente sentado, debe mante- ner su cabeza casi vertical, de manera que el plano oclusal superior quede paralelo al piso y a la altura del hombro del operador. Éste debe situarse al frente y ligeramente a la derecha del paciente, tanto para el lado derecho como para el izquierdo. Técnica anestésica Teniendo en cuenta la escasa accesibilidad que brinda el sitio de abordaje, es necesario trabajar a boca entreabierta, con el fin de evitar la interferen- cia de la apófisis coronoides de la mandíbula, que en apertura bucal máxima se desplaza hacia abajo cubriendo parcialmente el punto de inyección. Por medio de un separador o simplemente con el espe- jo bucal, se separa la comisura del lado correspon- diente tanto como fuere posible, separando el carrillo lo suficiente como para descubrir la región del tercer molar superior. Se toma una jeringa Lüer con aguja 40/7, cargada con 2 cc de solución anes- tésica y se punciona a la altura de la raíz distobucal del segundo molar, 5 mm por fuera del fondo de surco sobre la mucosa del carrillo, con el fin de evi- tar el choque del bisel de la aguja con la cresta cigo- matoalveolar o apófisis piramidal del maxilar, importante contrafuerte óseo palpable en las pro- ximidades del primer molar. Al penetrar la aguja en los tejidos blandos, ésta se dirige inmediatamente hacia arriba, atrás y adentro atravesando los planos mucosos y las fibras de músculo buccinador, donde se descargan algunas gotas de anestésico para efec- tuar de manera indolora las siguientes maniobras. A medida que la aguja entra en contacto con el hueso, se desliza sin perder contacto con éste en un ángulo de 45° con respecto al plano oclusal de los molares, lo que se consigue llevando la jeringa fir- memente en dirección a la comisura labial. Desde el punto en que se efectuó la punción se profundi- zan no más de 2 cm ( ). De esecaso clínico 1-6 modo, el bisel de la aguja se encamina hacia los ori- 18 LA EXTRACCIÓN DENTARIA. TÉCNICA Y CLÍNICA CASO CLÍNICO Caso clínico 1-6. Anestesia regional a los nervios dentarios posteriores. Punción por fuera del surco mucoyugal, dirigiendo la aguja de afuera hacia adentro, de abajo hacia arriba y de adelante atrás hacia, hasta contactar con la tabla bucal ( ). Siguiendo el relieve óseo se profundiza de 0,5 a 1 cm ( ).A B ficios dentarios posteriores, donde, previa aspira- ción, se deposita la totalidad del contenido de la jeringa. La tabla ósea vestibular representa una valiosa guía para la profundización de la aguja en busca del sitio de abordaje desea- do. El contacto permanente de su bisel con la tabla ósea evita lesionar accidentalmente estructuras anatómicas importantes, como el músculo pterigoideo externo, la arteria maxilar interna, el plexo venoso pterigoideo o la bola adiposa de Bichat. Estructuras anestesiadas Una vez depositada la solución en contacto con estos nervios, se consigue la anestesia pulpar y periodontal de los tres molares y,en algunos casos, de los premolares, alcanzando también al hueso alveolar, el periostio, la encía bucal y parte de la mucosa lateroposterior del seno maxilar. En un elevado porcentaje de casos persiste la sensibi- lidad a nivel del primer molar, debido a la inerva- ción de su raíz mesiovestibular por parte del ner- vio dentario medio, lo que impone la necesidad de efectuar un bloqueo anestésico terminal por mesial de este elemento a nivel del fondo de surco vestibular. Aplicaciones del método anestésico La amplitud del territorio anestesiado propor- ciona condiciones inmejorables para realizar inter- venciones quirúrgicas diversas sobre ese sector del maxilar superior, como cirugía periapical, abordaje del seno maxilar, tratamiento de quistes o cirugía implantológica. Fue un método empleado durante mucho tiempo para realizar extracciones dentarias en el sector medio y posterior, especialmente para la cirugía de los terceros molares retenidos. En la actua- lidad es considerada una técnica de escasa aplicación merced al advenimiento de nuevas drogas anestési- cas de gran poder de difusión y efectividad, que al aprovechar las condiciones anatómicas favorables propias de la zona (porosidad del hueso alveolar y delgadez de las compactas óseas), permiten efectuar infiltraciones anestésicas a nivel de las terminaciones nerviosas periféricas con resultados equivalentes al bloqueo regional. Complicaciones propias de la técnica El abordaje de los nervios dentarios posteriores con fines anestésicos acarrea una serie de dificulta- des técnicas que, a menudo, se traducen en compli- caciones de variada consideración. La presencia de importantes trayectos vasculares colindantes, como la arteria maxilar interna o el plexo venoso pterigoideo, constituye un riesgo latente, ya que cabe la posibilidad de herir accidentalmente estas estructuras con el bisel de la aguja, sobre todo si ésta se profundiza en demasía. La lesión de alguno de estos vasos puede generar hemorragias de varia- da intensidad o hematomas, debido a la difusión de sangre extravasada entre los diferentes planos tisu- lares. También existe la posibilidad de puncionar accidentalmente el músculo pterigoideo externo, lo que provoca dolor posoperatorio y trismo, difi- cultando la laterodesviación mandibular hacia el lado afectado. Por último, cabe mencionar que si la punción se exterioriza demasiado en relación con el fondo de surco, el líquido anestésico puede depositarse en la bola adiposa de Bichat, formada por tejido celular laxo que no opone resistencia alguna a la difusión de la anestesia, lo que provoca un proceso edematoso a nivel de la mejilla que alcanza en forma súbita dimensiones considera- bles, hasta ocasionar una marcada asimetría facial que distiende los tejidos involucrados, generando dolor, que puede persistir por el término de varios días. Anestesia regional al nervio palatino anterior Los nervios palatinos anterior, medio y poste- rior, ramas eferentes del ganglio esfeopalatino o de 19 CAPÍTULO 1 | ANESTESIA LOCAL 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 Meckel, transcurren desde la fosa pterigomaxilar hacia la bóveda palatina, en forma conjunta con trayectos vasculares comprometidos en la irriga- ción de la zona. El nervio palatino anterior, respon- sable de la inervación de parte del paladar duro, lo hace a través de un estrecho conducto formando un paquete vasculonervioso con la arteria palatina descendente y venas satélites, para desembocar en el paladar duro a través del agujero palatino poste- rior. Los nervios palatinos medios y posteriores lo hacen por conductos accesorios, e inervan el velo del paladar y la úvula. Luego de su emergencia, el nervio palatino anterior se dirige hacia adelante, inervando la fibromucosa palatina correspondiente a molares y premolares, anastomosando sus fibras a la altura del canino con el nervio esfenopalatino. Reparos anatómicos El bloqueo regional de este nervio se realiza mediante su abordaje a nivel del conducto palatino posterior a través del agujero homónimo, ubicado en la unión de la apófisis horizontal del hueso pala- tino con la apófisis alveolar del maxilar. Este con- ducto tiene la forma de un “reloj de arena”, forma- do por dos pirámides truncadas unidas por sus vér- tices. Su pared externa es laminar y de mayor espe- sor, a diferencia de la interna que es delgada y papi- rácea, y forma además la pared externa de las fosas nasales. Esta conformación adquiere gran impor- tancia desde el punto de vista anestésico, como se verá más adelante. Para realizar el procedimiento anestésico, el paciente debe inclinar la cabeza hacia atrás en máxima apertura bucal, para facilitar la visualiza- ción del sitio donde se debe efectuar la punción. Éste se localiza en una zona de la fibromucosa pala- tina, identificable al tacto como una pequeña depresión que recubre el agujero palatino poste- rior. Dicha depresión está situada en un punto equidistante entre el borde libre de la encía y el rafe medio del paladar, a la altura de la raíz palatina del segundo molar ( ). En algunas oportunida-fig. 1-12 des, la situación se corresponde con la raíz palatina del tercer molar, aunque en un porcentaje de casos significativamente menor. En ausencia de los molares del sector, el orificio puede localizarse de 1 a 1,5 cm por delante del borde posterior del pala- dar duro y a 1,5 cm del rafe medio. Técnica anestésica Se emplea una jeringa Carpule con aguja corta y delgada, con la cual se punciona la fibromucosa palatina hasta el agujero palatino posterior, a tra- vés del cual se penetra lentamente en el conduc- to siguiendo su dirección hacia arriba, atrás y ligeramente hacia afuera. Para facilitar esta maniobra, el cuerpo de la jeringa debe dirigirse desde la comisura labial opuesta (caso clínico 1-7). Es importante destacar que el bisel de la aguja debe orientarse hacia afuera durante todo el procedimiento. De otro modo, la porosidad propia de la pared interna del conducto señalada anteriormente, permitiría la propagación del líquido inyectado hacia las fosas nasales. Una profundización de aproximadamente 10 mm 20 LA EXTRACCIÓN DENTARIA. TÉCNICA Y CLÍNICA Fig. 1-12. Sitio de punción para el bloqueo regional del nervio palati- no anterior. resulta suficiente para alcanzar al nervio antes de su emergencia en la bóveda palatina, donde se deposita 1 cc de solución anestésica. El conducto palatino posterior, que comu- nica la fosa pterigomaxilar con la bóveda palatina, tiene una longitud aproximada de 20 a 25 mm. La profundización de la aguja en su interior no debiera exceder los 15 mm, ya que podría penetrar en la fosa pterigo- maxilar con lo que el anestésico alcanzaría el nervio maxilar superior, provocando una anestesia troncular de esta rama. Estructuras anestesiadas Los síntomas anestésicos de esta técnica com- prenden la insensibilización de la fibromucosa palatina y el periostio correspondientes al área inervada por este nervio, es decir, el sector de molares y premolares del lado anestesiado. El paciente manifiesta la sensación de entumecimien- to del paladar, que objetivamente puede corrobo- rarse con la palpación con un instrumento romo, como el extremo del mango de un espejo bucal. Aplicaciones del método anestésico Al no brindar anestesia pulpar ni periodontal, es considerado un método anestésico complementa- rio o de “cierre de circuito”, cuya aplicación se limi- ta a intervenciones quirúrgicas importantes que involucren la mucosa del paladar, como extraccio- nes dentarias múltiples con regularización de rebordes, extracción de elementos retenidos por palatino o retenciones vestibulares cuyo abordaje comprometa también la cortical palatina. Complicaciones
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