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Trastornos neurológicos adquiridos Los trastornos neurológicos adquiridos son enfermedades o lesiones que afectan al sistema nervioso después del nacimiento. Algunos ejemplos incluyen el ictus, la lesión medular y el traumatismo craneoencefálico. El ictus, también conocido como accidente cerebrovascular, ocurre cuando el flujo sanguíneo al cerebro se interrumpe, lo que puede provocar daño cerebral y déficits neurológicos. La rehabilitación después de un ictus puede ayudar a recuperar funciones perdidas a través de la neuroplasticidad. La lesión medular es el daño a la médula espinal que puede provocar parálisis, pérdida sensorial y otros problemas neurológicos. La rehabilitación después de una lesión medular se centra en mejorar la función motora y sensorial, así como en prevenir complicaciones como úlceras por presión y problemas respiratorios. El traumatismo craneoencefálico es una lesión en el cerebro causada por un golpe en la cabeza. Puede provocar una amplia gama de síntomas, desde dolores de cabeza y mareos hasta problemas de memoria y cambios en la personalidad. La rehabilitación después de un traumatismo craneoencefálico se centra en mejorar la función cognitiva, emocional y física.
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