Frotemos una barra de vidrio con una hoja de papel y luego acerquémosla a trocitos de papel, notaremos que se da un fenómeno de atracción; este hec...
Frotemos una barra de vidrio con una hoja de papel y luego acerquémosla a trocitos de papel, notaremos que se da un fenómeno de atracción; este hecho permite afirmar que el vidrio al ser frotado adquiere la capacidad de atraer cuerpos ligeros. Fenómenos similares fueron descubiertos en la antigüedad (aproximadamente 600 años antes de nuestra era) por los griegos, cuando frotaban el ámbar con lana y luego podía atraer pedacitos de tela o paja. Ámbar en griego se traduce como electrón de donde se origina la denominación “electricidad” y “cuerpos electrizados”.
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