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XLI occidental la obra de éste, no comenzaron sino tarde a ocu parse de la Retórica. Estéfano de Alejandría (hacia 610) es el comentarista más antiguo. Los otros materiales que han llegado a nosotros son heterogéneos: el llamado «Comenta rista anónimo» es del siglo xn, pero junto con sus notas han llegado a nosotros otros posteriores. También hay otro fragmento de comentario que publicó Spengel, y una pa ráfrasis parcial. La tradición manuscrita de la Retórica. Nada definitivo hay que añadir a la recensio hecha por A. Roemer aT'frente de su segunda edición teubneriana en 1898. En ella se fundan, con confianza excesiva, posterio res ediciones críticas. Dos, o mejor dicho, tres, son las familias de códices de la Retórica de Aristóteles. Testimonio de la primera es A (Ac en Bekker y Roemer), es decir, el manuscrito 1741 de la Biblioteca Nacional de París, cuya fecha, según H. Omont, es el siglo x u xi. Este es el códice más acreditado. En segundo lugar hemos de referirnos a otro frag mento en el códice Marciano 214, el cual es del siglo xm , según K. Horna (1), y contiene el comienzo de la Reí. has ta 1355 b 37, y luego unas líneas más que terminan con las palabras αί Sé έν τω 1356 a 3. De la colación de éste ma nuscrito por Horna, que incorporamos a nuestro aparato crítico con la sigla H (Ha es la que le'asignó Bekker, quien lo utilizó para otras obras, mas no para la Retórica), se de duce que la escritura del códice es descuidada, pero consti tuye un resto precioso de una familia distinta de A, de la cual son también testimonio las citas en Dionisio de Hali carnaso, algunas variantes en los deteriores y las variantes marginales de A (2). Asimismo, en las traducciones lati- (1) Wiener Studien L I, p. 31 ss. (2) Las estudió VaJilen Rkein. Mus. X X II 1867, p. 102 s., cf. K. Horna Wiener St. LI, p. 43. XLII nas (1) y en las árabes (2), podrán hallarse, se cree, elemen tos de esta rama. Una tercera familia está formada por los códices dete riores, estudiados principalmente sobre las colaciones que de ellos se tuvieron en cuenta en las ediciones de Gaisford (Oxford 1820) y Bekker (1.a ed., Berlín, 1831; 3.a, 1859), y que se agrupan en relación con la una y la otra de estas ediciones bajo las dos siglas n y e. Son el grupo n, o sea los estudiados para la edición de Gaisford, los siguientes manuscritos: B: Parisino 1869, del s. xiv. G: Idem 1818, del s. xvx. (1) En plural por la distinción de S o m a de W como manuscrito más antiguo que la traducción de Moerbeke v. infra, p. XLIV, η. 1 . Por otra parte el Brother Giles, de la Universidad Católica de Washington, señaló (Transactions and Pro ceedings of the American Philological Association LXV 1934, p. XXXVII s.) la po sibilidad de que otro códice latino de la Universidad de Illinois represente una traducción distinta. (2) Terreno desconocido. Iaroslaus Tkatsch (v. Horna Wiener St. LI, p. 42, n., 44 s.) dejó a su muerte a la Academia de Viena un manuscrito muy avanzado de versión de la traducción árabe. Las glosas a la Ret. por Alfarabi fueron trasmiti das a la edad media europea desde Toledo por Herman el Alemán (Sandys A His- toiy of class. Scholarshijh 1» Ρ· 569). Mi colega don Miguel Cruz Hernández me co munica los siguientes datos sobre el tema: «La Retórica de Aristóteles debió ser traducida del siríaco al árabe. Un manuscrito árabe de la Biblioteca Nacional de París (núm. 882, signatura antigua), de comienzos del siglo xi, contiene Órganon, Reí. y Poli, con la indicación de haberlas traducido del siríaco al árabe. El Órga non, con la Isagoge de Porfirio y la Reí. y Poét., constituían la Lógica de los ára bes. La Retórica debió ser traducida por Hunayn bn Isháq o por su hijo Isháq bnH unayn (f 911 d. de J . C.); la comentaron al-Kindi y'al-Fâràbï (f 950), cuyos trabajos se han perdido. Avicena comentó varias veces la Ret. en sus comentarios a l órganon árabe. Así en el Kitüb al-Insáf (perdido desde tiempos de su autor). Conservamos en cambio el comentario a la Ret. incluido en su libro al-Falsafa al- arüdiyya (Ms. 364, 3 de la Biblioteca de Upsala). Y también el más importante de la obra maestra de Avicena, el ti if a’, en la octava sección de la primera parte (Lógica), titulada al-Yatdba (Retórica). Este comentario, mejoT exposición libre que comentario literal, se encuentra inédito en diversos manuscritos del Sifa , con cretamente en los folios 161-180 del de la Universidad de al-Azhar de El Cairo. Averroes comentó la Retórica al menos tres veces. En latín tenemos el comentario menor, que puede verse en la edición aristotélica de Jun ta 1574 vol. II: Paraphra sis in libros tres Rhetoricorum, Abramo de Raimes interprete. De Rhetorica persua siva tractatus. De Rhetorica demonstratiua tractatus.—Bibliografía: Anawati, O. P. «La tradition manuscrite orientale de l’oeuvre d5 Avicenne»), Revue Thomiste L I 1951, pp. 405-440, idem M u '‘ allafât Ibn Sïnâ El Cairo 1950; 'Abd al-Rahman Ba- dawï Aristü ind al-1 Arab El Cairo 1947.»